Kami Tachi ni Hirowareta (NL)

Volumen 2

Capitulo Extra: Los Que Quedan Atrás Y Los Signos De Cambio

“¡TABUCHI! ¡¿Takebayashi sigue ausente?!”

“¡S-Sí, señor!”

“¡¿Algún contacto?!”

“¡Ninguna todavía! ¡Tampoco puedo contactarlo!”

“¡Bueno, sigue intentándolo! ¡Un cliente nos contactó para que nos pusieran de pie para una reunión!”

“Cómo es ese mi problema, exactamente…”

“¡Jódete, idiota insubordinado! ¡Si tienes tanto tiempo para jugar, llámalo!

¡Si él no viene, haz su trabajo! ¡¿Estoy siendo claro como el cristal?!”

“¡S-Sí, señor!”

“¡Entonces muévete! Cristo… montón de inútiles. Las personas desesperadas como él siempre están presionando al resto de nosotros”.

“Si eso no es la verdad”.

“¿Y se supone que este es mi mayor? Tienes que estar bromeando.”

“Entonces, ¿es el jefe AWOL?”

“No sé. ¿A quién le importa ese viejo?”

“Pero como, al menos deberíamos llamarlo. Debería saber cómo actuar como un adulto a su edad”.

“Definitivamente lo despiden después de esto. ¿Crees que lo dejarán entrar mañana?”

“…”

Un jefe que gritó irracionalmente. Tabuchi, siendo gritado irracionalmente. Los jóvenes compañeros de trabajo que observaban y se reían con desprecio.

Los otros empleados que trabajaron en silencio al lado.

Contenían la lengua y dejaban que los perros dormidos mientan mientras esperaban tranquilamente el regreso de Ryoma.

Pero en este día, Ryoma no apareció en la oficina.

Por eso…

“Maldición. ¿Por qué tengo que hacer esto?”

“…”

En un tren antes de la hora punta de regreso a casa, un hombre claramente disgustado y Tabuchi se quedaron juntos.

“Iguchi, esto está dentro del carro…”

El hombre estaba acaparando un asiento superior que estaba vacío y refunfuñaba sobre su descontento con una voz alta y preciada.

Los otros pasajeros no podrían haberse sentido cómodos viajando con una persona con esa actitud.

“¿Hah? Cállate. No es que esté embalado ni nada”.

Las palabras de Tabuchi no pudieron apaciguar a Iguchi. En cambio, lo fulminaron con la mirada.

“… ¿Qué demonios estás mirando, perra?”

“¡Iguchi!”

Deben haber hecho contacto visual accidentalmente. Miró a las dos mujeres de mediana edad que claramente mostraban incomodidad, pero Tabuchi intervino antes de ponerse de pie.

“Vámonos.”

“Sí, vamos…”

“…”

Parecía que se había dado cuenta de que estaba atrayendo la atención no solo de Tabuchi y las mujeres que se trasladaban al siguiente vagón, sino también del resto de vagones. Iguchi lanzó su aguda mirada a través del vagón, luego resopló cuando vio a los pasajeros apartar la mirada.

“¿Cuánto tiempo vas a estar allí parado? ¡Muévete! Me estás asfixiando, gordo de mierda”.

“Lo siento.”

“Dime cuando lleguemos”.

Iguchi empujó a Tabuchi, que había estado parado frente a él, luego sacó un reproductor de música de su bolsillo y comenzó a escuchar música. Al verlo, Tabuchi pensó para sí mismo.

Tiene que haber algún abuso para elegirlo… ¿no?

Su jefe le había ordenado asegurarse de que Ryoma estuviera en la oficina mañana, incluso si tenía que arrastrarlo allí. Pero si todo lo que se necesitaba era una visita a la casa de Ryoma, entonces Tabuchi solo debería haber sido suficiente. Iguchi ni sabía dónde vivía Ryoma, ni tenía ningún interés. La única razón por la que estuvo aquí fue por la orden del jefe.

Sin mencionar cómo Iguchi podría resumirse en una sola palabra: un delincuente.

Después de ingresar a la compañía a través de las conexiones de sus padres, fue asignado al montón de basura que era la división tres, donde era conocido por su mal genio y su fusible corto.

En los documentos que presentó por el bien del formulario cuando ingresó a la empresa, había mostrado su personalidad como “intrépido”, pero esa era solo una buena manera de expresarlo. En realidad, simplemente no podía leer situaciones, preocuparse por sus modales, y no tenía problemas para expresar sus quejas. También había expresado quejas similares sobre visitar la casa de Ryoma esta vez, refunfuñando cuando exigió la salida anticipada como condición para que se fuera.

Naturalmente, la compañía no podía enviar a esa persona a proyectos externos, por lo que normalmente pasaba su tiempo en la oficina aflojando en sus deberes. Probablemente por eso lo habían elegido, si no importaba si estaba allí o no…

Por supuesto, tuvieron que elegir al que tenía la peor actitud y darle la aprobación para irse temprano… No importa cómo lo veas, es un abuso de poder.

“… ¿Estuviste estreñido o algo así? No me mires, joder. Tu cara me pone enfermo. Date la vuelta.”

Para el registro, Iguchi había estado en la compañía durante dos años. Tabuchi había estado trabajando por más tiempo y era mayor, pero gracias a sus conexiones, Iguchi estaba en una posición más alta.

***

“Urgh, qué mierda de mierda. ¿Ese viejo pedo vive así?”

Acompañado por Iguchi, que estaba insultando desde el momento en que llegaron, Tabuchi tocó el timbre de la habitación de la esquina en el segundo piso.

Pero la persona que buscaban ya no estaba en este mundo.

“… ¡Hey, gilipollas! ¡¿Estás sordo?! ¡No puedes saltarte el trabajo sin previo aviso!”

“Por favor espera, Iguchi. Puede que no esté en casa. Mira, el periódico de la mañana todavía está aquí…”

“¿Oh? ¿Entonces estás diciendo que se saltó el trabajo para salir y joder en alguna parte?”

“Podría estar hospitalizado o estar de compras… el jefe vive solo, por lo que debe cuidarse si se enferma. Parece que no tenemos más remedio que esperar… ”

“¡¿TU QUE?!”

Iguchi se enfureció aún más.

“Umm… se nos ordenó hablar con él directamente, y el teléfono no se conectaba, así que vinimos hasta aquí…”

“Oh, a la mierda esto… ¡Oye, gilipollas! ¡Sé que estás ahí! ¡No me jodas!”

“¡H-Hey, cálmate un poco…!”

Iguchi levantó la voz y golpeó la puerta con fuerza.

Como estaba vestido con un traje adecuado, lo hacía parecer un prestamista aquí para las colecciones.

Sintiendo que algo andaba mal, la voz de un anciano subió desde el pie de las escaleras.

“Disculpe. ¿Ustedes tienen negocios aquí?”

“¿Ah? ¿Quién demonios eres tú?”

“¡Perdón por hacer tanto ruido! Somos compañeros de trabajo de la persona que vive aquí. No hemos podido contactarlo desde esta mañana”.

“¿Los compañeros de trabajo de Takebayashi?”

“Sí, ¿lo conoces?”

“Déjame pensar… no parecía particularmente diferente cuando lo vi anoche”.

“Oye. No me ignores, viejo jodido. Pregunté, ¿quién demonios eres?”

“El Dueño.”

“¿Dueño? Perfecto. Abre esta puerta.”

“No seas ridículo. Puedo tener una llave, pero no estoy dispuesto a abrir la puerta de un inquilino sin previo aviso. ¿Son ustedes realmente compañeros de trabajo de Takebayashi?”

“Pido disculpas por la presentación tardía. Toda mi información está aquí”.

Tabuchi hizo una profunda reverencia mientras sacaba su tarjeta de presentación de su bolsillo y se la ofreció.

“Hmm… ¿Te gustan los robots?”

“¿Huh? S-Sí, los amo”.

“Anteriormente mencionó a un subordinado con este apellido que le gustaban los robots…”

“Ese es el. Trabajamos en la misma división que ese viejo, y este es un nerd con pasatiempos infantiles para su edad. Ahora abre la puerta ya.”

“… Dejando a un lado a Tabuchi, este de aquí no conoce muy bien sus modales. Es difícil imaginar que eres un adulto que trabaja”.

“¿Quieres pelear, gilipollas?” “Iguchi, cálmate”.

Mientras un ambiente hostil se asentaba en el aire…

“¡¿Podrías bajar la voz?!”

La puerta a su lado se abrió a otra persona que gritaba fuerte.

“¡Todo lo que he podido escuchar en los últimos minutos es a ustedes gritando a todo pulmón! ¡Es una maldita molestia! ”

Un hombre de mediana edad sin afeitar apareció desde la puerta de al lado.

Tenía círculos oscuros debajo de sus ojos soñolientos mientras los miraba a los tres.

“Me disculpo, Urami”.

“Oh, ¿ahora quieres disculparte después de pasar por aquí y hacer ese escándalo? ¡Tch!”

El hombre llamado Urami seguía infeliz, pero se calmó un poco al ver a Tabuchi.

“… Solo baja la voz. ¿Y no está la puerta de al lado lejos de casa? Las paredes aquí son delgadas, así que puedo escuchar si alguien se mueve por el otro lado”.

“Lamento mucho los problemas. ¿Sabes dónde…?”

“Ninguna pista. ¿Estás seguro de que está en casa? El tipo que vive allí no está muy a menudo”.

“Sí, debería estar… Terminó de trabajar temprano ayer y dijo que iba a leer un li- un libro”.

“Bueno, entonces no sé”.

“Todo estaría bien si este viejo abriera la puerta”.

Con una mirada a Iguchi, que mostraba una actitud indignada para que el mundo lo viera, el hombre se inclinó para susurrarle al propietario.

“Dueño, ¿le importa si le pido un pequeño favor también?”

Había determinado que no valía la pena hablar con Iguchi.

Por lo tanto, para que regresen lo más rápido posible, el vecino no relacionado también se unió para persuadir a su propietario para que abriera la puerta.

Los cuatro discutieron sobre la puerta por un rato.

“Bien…”

Finalmente, el propietario acepto.

“Ya era hora.”

“A cambio, espero que te vayas de inmediato si Takebayashi no está presente”.

“Bien, no jodas”.

“Lo siento, por favor, adelante”.

“Hmph. Debes tenerlo duro también.”

Al mirar a Tabuchi, quien continuamente inclinó la cabeza, el propietario fue a buscar la llave para abrir la puerta.

“¡Takebayashi! ¡¿Estás aquí?!”

“Gritar aquí no va a hacer mucha diferencia. Muévete.”

“?!”

“¡Whoa! ¡¿Qué?!”

Iguchi empujó al propietario gritando desde la entrada a un lado, derribándolo.

Tabuchi llegó a tiempo para apoyarlo, pero Iguchi no les pagó, ya que cargó dentro.

“¡Oye, viejo cabrón!”

Mientras Iguchi se burlaba desde el interior de la habitación, el propietario de la entrada levantó la voz de manera similar.

“¡¿Qué pasa con su actitud?!”

“¡Lo siento mucho por él! ¿Estás lastimado?”

“Estoy bien. Pero realmente, Tabuchi, ¿cuál es el problema de ese niño? Dijiste que era un compañero de trabajo, pero ¿qué tipo de empresa contrataría a un niño como él?”

“Umm… no puedo decir los detalles, pero él tenía conexiones con la empresa…”

“Incluso con las conexiones, un novato debería preocuparse más por sus modales, ¿no? ¡No hay parte de él que actúe como un adulto!”

“¡Deja de dormir y levanta el culo!”

La voz de Iguchi gritó más fuerte que antes.

Tabuchi no pudo evitar escucharlo y reaccionó en estado de shock, el propietario también olvidó su ira.

“¿Él está durmiendo…?”

“Entonces el Jefe está aquí después de todo”.

“¡Oi! ¡Levántate, pedazo de mierda! ¡¿Saltar el trabajo sin previo aviso, a tu edad?! ¡Eres un dolor en mi trasero!”

Se escuchó el sonido de pisotones y burlas.

“… Vamos a entrar también, o podría destruir la habitación”.

“Si…”

Cuando entraron, vieron…

El hombre de al lado que los había pasado sin previo aviso, de pie junto a la pared de la sala con una sonrisa amarga en su rostro.

Su mirada se dirigió a la habitación, donde un hombre grande yacía dormido.

Y…

“¡Levántate! ¡¿Me estas jodiendo conmigo?! ¡Te voy a despedir!”

Iguchi arrancó las mantas y gritó, pero cuando el hombre dormido no mostró reacción, perdió los estribos y lo pateó una y otra vez.

“¡H-Hey! ¡Estás yendo demasiado lejos, Iguchi! ” Tabuchi se movió para retenerlo en pánico.

“¡Fuera de mi camino, gordo de mierda!”

“¡Guh!”

Desafortunadamente, no tenía la fuerza para detenerlo por la fuerza, y un golpe en el cuerpo alimentado por la irritación fue lanzado hacia él.

Sin embargo…

“Por favor, cálmate, no hay necesidad de violencia…”

Tabuchi jadeó con dureza, acurrucado por el dolor mientras se deslizaba en el espacio entre Iguchi y Takebayashi.

“Muévete, gordo de mierda. Yo mismo estoy despertando a este imbécil”.

Su rostro estaba enrojecido de ira mientras lentamente hacía alarde de levantar el puño.

“Esta vez te golpearé en la boca gorda, ¿quieres eso?”

“¡Cállate, imbécil!”

Quien lo detuvo fue, en contra de las expectativas de cualquiera, el puño del arrendador.

“Oww… ¡¿Cuál es tu problema, viejo?!”

¡Podría preguntarte lo mismo! Todo lo que sale de tu boca es insultos. Has cargado directamente en la casa de otra persona sin ser invitado. Has puesto tus manos sobre la gente como si fuera tu prerrogativa. ¡¿Quién en su sano juicio te crio así, de todos modos?!

“¡¿T-Tú no…?!”

El propietario lo regañó como un niño, como un padre terco de una época pasada.

Incluso hizo que el arrogante Iguchi se encogiera sobre sí mismo y tuvo suficiente intimidación para calmar la escena actual.

“Tabuchi, ¿está bien Takebayashi?”

“¡S-Sí! En realidad, ¿todavía está durmiendo…? ¿Jefe?”

Tabuchi había estado demasiado distraído por los puños de Iguchi y el dolor persistente en su abdomen para darse cuenta de que algo estaba mal hasta ahora.

Takebayashi llevaba una camiseta y pantalones cortos para dormir. Estaba acostado boca arriba con esa ropa casual, su mano izquierda colocada sobre su estómago. La forma en que cerró los ojos le hizo parecer que estaba dormido.

Sin embargo, ¿podría alguien dormir con tanto ruido, además de ser pateado varias veces?

Tras una inspección más cercana, su piel estaba magullada.

Por su larga asociación entre ellos, Tabuchi sabía que el cuerpo de Takebayashi era mucho más duro que el promedio.

Pero no era tan tonto como para dormir con patadas.

“¿Jefe? … ¿Jefe?”

Con ese pensamiento en mente, Tabuchi aumentó gradualmente el volumen de su voz, pero Takebayashi ni siquiera se contrajo.

Entonces, finalmente lo notó.

Mientras observaba a Takebayashi por una reacción, vio que su pecho no se movía hacia arriba y hacia abajo.

“… ¡Por favor despierta!”

Al mismo tiempo que su grito suplicante. Extendió una mano para sacudir y despertar el cuerpo ante él, y…

“Esta frío…”

La sensación de un cuerpo que había perdido su calor y se puso rígido.

Sin espacio para disputas, le informó a Tabuchi que Takebayashi estaba muerto.

***

“Gracias por su asistencia.”

“Si…”

Después de que se descubrió el cuerpo de Takebayashi, el propietario llamó inmediatamente a la policía y todos los que habían estado en la habitación fueron interrogados sobre la situación.

Aunque habían sido liberados de la policía, la conmoción en el frente había atraído a espectadores.

Para evitar las miradas entrometidas de los cuerpos ocupados, Tabuchi arrastró sus pies pesadamente al jardín de apartamentos.

“Has trabajado duro hoy, Tabuchi”.

“Ah, señor propietario”.

El propietario estaba allí, evitando las multitudes como Tabuchi.

“¿Quieres una bebida?”

“Sí por favor.”

El propietario de repente le ofreció una lata de té.

Después de pasar la lata, miró hacia la habitación de Takebayashi que estaba ocupada con oficiales ocupados.

“Tabuchi, me gustaría disculparme por lo de antes”.

“¿Huh?”

“Antes de entrar en la habitación. Expresé mis quejas sobre la actitud de ese niño hacia usted”.

“Ah… No te preocupes por eso. Realmente fuimos nosotros los culpables aquí”.

“Debes tenerlo duro también. Y… lamento lo de Takebayashi”.

“… Esperaba que el Jefe viviera más que yo”.

“Como yo. Nunca imaginé que sería el primero en irse…” Un silencio cayó sobre los dos.

“Tabuchi, ¿qué harás ahora?”

“Por ahora… tengo que contactar a la empresa. Solo estoy esperando a Iguchi primero”.

“¿Ese chico todavía no ha terminado?”

“Aún no. Dijo que vendría a buscarme cuando haya terminado”.

“¡Déjame ir, maldita sea!”

“”?! “”

Hablando del diablo.

Justo cuando su conversación se volvió hacia el tema de Iguchi. Iguchi fue sacado de la habitación vacía que el propietario les había dado a los agentes de policía para que los interrogaran, con los brazos clavados a la espalda. “¡¿Iguchi?!”

“¡Alto ahí! ¡No te acerques más! ”

Un oficial diferente al que había abierto la puerta corrió hacia Tabuchi para detenerlo.

“Umm, soy su compañero de trabajo. ¿Qué pasó?”

“Se enfureció en medio del interrogatorio. Aunque todavía está furioso ahora… ”

“¡Suéltame! ¡No lo maté! ¡Ese cabrón murió mucho antes de que siquiera lo tocara!”

“Bien, bien. Escucharemos los detalles en la estación”.

“Dije- ¡¿Hey?! ¡Oi, Tabuchi! ¡Mueve el culo y ayúdame!”

“¿A-Ayudarte cómo?”

El oficial que le cerraba el paso sacudió la cabeza.

“¡Hijo de puta! ¡No olvides esto! Una vez que salga de esto, ¡estás jodidamente muerto! ”

“…Llévenselo.”

“¡Sí señor!”

Después de escupir más comentarios autoinculpatorios, Iguchi fue llevado al auto de la policía estacionado en el frente.

“Umm, ¿qué pasará con él?”

“Asalto contra un oficial de policía. Obstrucción de un servidor público de sus funciones. Será retenido por un tiempo, pero si se calma, será liberado en unos días. Hizo muchas cosas para extender su sentencia, por lo que, a menos que suceda algo más, será puesto en libertad con una multa”

“Ya veo… ¿Puedo contactar a mi empresa?”

Por lo tanto, se informó la muerte de Takebayashi.

Cada lugar relevante recibió un aviso y lo tramitó en consecuencia.

Pero al mismo tiempo…

“Ah, jefe de redacción. Gracias por contestar, es Urami. En realidad, encontré material interesante en este momento… Sí, tenía mi teléfono oculto mientras filmaba. Te he enviado el clip, así que si pudieras echarle un vistazo, sí. Solo estaba gritando sobre cómo no podía distinguirlo de los calcetines y los músculos… Te enviaré los detalles por correo electrónico. Creo que hay suciedad que desenterrar sobre el hombre del clip y sus alrededores. …Sí por favor hazlo. Gracias.”

En la conmoción que condujo a la confirmación de la muerte de Takebayashi, hubo un periodista interesado en Iguchi y su lugar de trabajo…

Takebayashi era un hombre al que se le habían dado dificultades simples a través de un acto de dios.

Su lugar de trabajo y estilo de vida era una jaula preparada para mantener una bestia, por así decirlo.

Sin embargo, sin una bestia que mantener, no había necesidad de la jaula, y no había necesidad de preparar el medio ambiente de esa manera.

Al igual que una enorme presa puede colapsar desde la grieta más pequeña.

Con la muerte de la bestia Takebayashi como catalizador, su compañía y sus empleados estaban avanzando sin saberlo por un camino de destrucción.