Heavy Object (NL)

Volumen 12

Capitulo 2: Disparo

Parte 3

Después de llegar al lado norte, Quenser, Heivia y Catherine no derribaron la puerta frontal del puerto y entraron armando un tiroteo.

“Oye, nuestras armas no tienen algún costoso supresor instalado. Dispara una vez y será como sacudir un panal de avispas. ¿Cómo conseguimos entrar?”

“Necesitamos buscar algo más que podamos usar. Oh”

Después de subir a tierra desde la moto de agua detenida en el canal, Quenser miro alrededor.

“Aquí vamos. Hay una tonelada de cosas mezcladas entre los escombros. ¿Hm, un silbato para perros? ¿Acaso algún VIP abandono una guerra para tomar un viaje al extranjero con su perro de juguete casero? En ese caso ”

“Onii-chan, ¿qué estás haciendo? Si estas limpiando la basura, déjame hacerlo para que así pueda
conseguir un sello.”

El chico continúo hurgando y excavando a través de los escombros hasta que encontró un contenedor cilíndrico tan grueso como un brazo humano. Parecía como un estuche de diploma de la Nación Isla o como un delgado termo.

Pero no era ninguno de estos.
“Se puede realmente decir que Segunda Venecia está llena de las riquezas del mundo. Sus estuches de depósito están hechos de acero de tungsteno. Mira este logo. Es de la misma serie como esas cajas fuertes resistentes a las bombas. Podemos usar esto.”

“Oye ¿qué estas tratando de hacer con esa basura? Incluso si en las Corporaciones Capitalistas todo se trata sobre el dinero, ellos no van a ser nuestros amigos solo porque les vendamos algo de chatarra.”

“Esto no es para eso.”

Quenser saco un grueso cable de debajo del concreto y lo envolvió alrededor del contenedor cilíndrico mientras respondía.

“Heivia, ¿qué es lo que estoy llevando además de toda la lluvia?”

“¿Hm? Explosivos plásticos Hand Axe, ¿cierto? …Espera. No estas planeando usar una bomba cuando estamos tratando de ser sigilosos, ¿¡o si!?”

“Eso es exactamente lo que estoy planeando hacer”

Idiota #1 reunió unos cuantos delgados paneles de acero.

“Voy a usar explosivos para eliminarlos silenciosamente. Y te diré como.”

Con su masa de basura hecha a mano, Quenser coloco un pedazo de Hand Axe del tamaño de la punta de un dedo adentro del contenedor cilíndrico con un fusible eléctrico clavado en él. Después cerro la tapa. Él corrió a través de la torrencial lluvia mientras se agachaba y sujetaba el contenedor en sus manos.

“Cuando lo estudias a fondo, las explosiones no son más que una rápida expansión de volumen. Con este explosivo, una masa del tamaño de un puño producirá una gran cantidad de gas inflamable el cual llega a expandirse cien o mil veces. El poder de ese empuje es lo que destruye las cosas.”

“Ve al punto.”

“Las explosiones contienen dirección. Sella una en un robusto contenedor cerrado como este y la ráfaga explosiva de rápida expansión no tendrá a donde ir. Esta cosa esta hecha para soportar explosiones, por lo que no podrá atravesar los costados. Así que, ¿qué pasara si cuidadosamente abro un solo agujero con este taladro de mano?”

El oscuro patio de contenedores era extenso y tenía múltiples entradas.

Ellos se centraron en una pequeña puerta para empleados que se veía relativamente discreta. Los
tres se ocultaron detrás de un aplastado local de crepas ubicado a cincuenta metros de distancia.

“Onii-chan, hay guardias allí.”

“Sí, pero son menos que en cualquier otro lugar,” dijo Quenser con el contenedor cilíndrico
descansando sobre su hombro como una bazuca. “He sellado la explosión adentro y le he dado un solo agujero pequeño para escapar. Para el toque final, vamos a agregar este silbato para perros. Funciona en una frecuencia muy alta para el oído humano, pero incluso si no podemos escucharlo, todavía existe. Si disparamos los gases inflamables utilizando el explosivo, podemos crear una explosión silenciosa que los pulmones humanos nunca podrían esperar igualar. Estoy preocupado sobre la robustez del silbato para perros, pero si lo rodeo con paneles de acero como una
trompeta para direccionar las ondas ultrasónicas en una sola dirección, ¿qué crees que pasara?”

No hubo un efecto deslumbrante. No hubo luz ni sonido.
O al menos nada que pudiera ser detectado por los sentidos humanos de Heivia y Catherine.

“Kh.”

Pero después de que escucharon un “click” metálico seco, el soldado plantando guardia a
cincuenta metros de distancia colapso de cara en un charco. El soldado junto a él tenía que estar
desconcertado. ¿Acaso el primer soldado solo estaba jugando? ¿Acaso sufría de falta de sueño?
¿Acaso estaba enfermo? Sin luz, sonido, o lesiones perceptibles, el segundo soldado no podía
una mano sobre el hombro de su compañero caído, Quenser abrió la tapa del contenedor metálico, arranco otro pedazo de Hand Axe, y lo lanzo adentro.

Después de otro pequeño “click”, el otro guardia fue silenciado también.

“Wow, realmente puedes sentirlo vibrando en tus manos. Heivia, dime qué camino tomar. Tenemos que arreglar esto antes de que esos dos se pierdan un chequeo programado.”

“Cla-claro. Esa cosa me asusto. ¿Estarán bien nuestros oídos?”

“No son los oídos. Esto sacude sus cráneos para darles una contusión cerebral. Y siempre y cuando permanezcas detrás de mí, no te afectará. La trompeta de paneles de acero está dirigiendo las ondas ultrasónicas hacia adelante.”

El oscuro patio de contenedores era extenso y varios soldados estaban asignados como guardias aquí. Ninguna cantidad de esfuerzo les permitiría llegar a la sala de control sin toparse con alguno de ellos.
“Eso no tiene una mira, ¿así que como apuntas?” pregunto Catherine.

“No se tiene que ser muy preciso. Es como una escopeta o como golpearlos con la luz de una
linterna.”

Mientras conversaban tranquilamente, los tres pasaron por encima de los guardias colapsados y entraron al patio de contenedores.

“¿Esto cuenta como ‘ir en una prueba de coraje con amigos’?” “Catherine, nada cuenta durante una batalla de vida o muerte.”
Ellos tenían un mapa en sus dispositivos portátiles, así que conocían el diseño general del patio de contenedores. Eso les dio a conocer la distancia desde esta puerta a la sala de control.

Pero…

“Maldición. No nos dice los detalles de como están apilados los contenedores. Es como un laberinto aquí… Me recuerda a la casa asesina durante el entrenamiento.”

Heivia trato con la inesperada situación apuntando su rifle hacia todos lados.

La lluvia cayendo sobre la pila de contenedores metálicos causo que todos los sonidos hicieran eco complejamente alrededor. Incluso así, él logro localizar con precisión los pasos de alguien mas. Él levanto una mano y Quenser avanzo sigilosamente con el tubo de metal sobre su hombro. Antes de que fueran descubiertos, él se asomo desde atrás de los contenedores y apunto la silenciosa sacudidora de cráneos ultrasónica.

El habitual pequeño “click” le siguió. Pero entonces algo extraño paso.
Quenser, Heivia y Catherine sintieron algo invisible rasgando en sus cabezas.

“(…!! ¿¡Quen-…tú!?)”

“(La onda sónica golpeo la pared de un contenedor cercano y reboto hacia nosotros. Pero los guardias están neutralizados.)”

Quenser se recargo contra un contenedor cercano para al menos evitar colapsar, pero entonces su hombro se encontró con algo.

Él miro hacia arriba y vio una escalera metálica.
“…Uh, oh.”

El miro hacia arriba y vio que la escalera continuaba hasta el techo del contenedor metálico cuadrado. Pero había más que solo uno. Ellos escalaron verticalmente hasta la cima de contenedores apilados como pirámide y después pasaron horizontalmente entre los estrechos espacios de los contenedores. Era demasiado evidente que este era un camino. La ruta de patrullaje de los soldados no solo era de dos dimensiones. ¡Estaba entrecruzada en tres dimensiones!

Y entonces, el rostro de una figura oscura apareció desde el techo del contenedor de arriba.

Quenser rápidamente abrió el contenedor metálico y lanzo algo de Hand Axe en el, pero el enemigo noto algo y levanto su carabina mucho mas rápido.

Dos fuertes disparos irrumpieron a través de la cortina de lluvia torrencial. Quenser se había agachado en reflejo, pero no sintió dolor o algún impacto.
El soldado enemigo arriba de él no había sido el único en disparar. Heivia había disparado su rifle de asalto y esta vez el elimino al guardia.

“Maldición.” “Nada mal.”
Heivia maldijo sus disparos perfectamente acertados y Catherine lo elogio alegremente. Pero entonces todo cambio.

El patio de contenedores nocturno fue llenado con sonidos explosivos más intensos que un trueno. Heivia empuño su rifle de asalto, después le entrego a Catherine su gran pistola, y Quenser todavía tenía su silenciosa sacudidora de cráneos ultrasónica. Era mejor que nada y esto agregaba un arma desconocida que operaba bajo diferentes normas, así que ayudaba a confundir al enemigo. Con una desventaja numérica tan grande, ellos habrían sido superados en poco tiempo sin algo como eso.

“¡¡Estamos completamente superados en numero!!”

“Pero después de toda la sangre que perdió Myonri, no podemos retroceder e intentarlo después.
¡¡Tenemos que seguir adelante!!”

Ellos tuvieron que usar los contenedores metálicos como escudo. Los tres al menos lograron evitar ser expuestos al fuego cruzado desde múltiples ángulos y cambiaban de posición cada vez que escuchaban pasos o disparos acercarse.
Por supuesto, Heivia y Catherine utilizaban el rifle de asalto y pistola, pero cuando los contenedores solo estaban apilados de a uno o dos, Quenser enrollaba un poco de explosivo plástico Hand Axe, clavaba un fusible eléctrico en el, lo arrojaba por encima de los contenedores, y hacia volar a los soldados enemigos escondiéndose en el otro lado.
“Ugh. Yo soy quien lo esta haciendo, pero realmente no quiero asomarme a mirar el otro lado.” “Eso solo significa que eres normal. Nadie quiere revisar la suela de su zapato después de aplastar
una cucaracha.”

Los tres continuaron a través del laberinto de contenedores para llegar a la sala de control con la información que necesitaban.

O así lo intentaron.

Algo cambio repentinamente. Y no en una buena forma.

“?”

Quenser miro hacia arriba cuando escucho lo que sonaba como un gran brazo mecánico de construcción moviéndose.

Entonces sus ojos se dilataron.

“Oh, mierda.”

Una grúa pórtico tan alta como una pequeña torre de reloj se había movido directamente arriba de ellos. Algo parecido a un juego de grúa colgaba hacia abajo y sus garras mecánicas cabían perfectamente en las cavidades de un contenedor metálico.

Si.

Estaba levantando el contenedor metálico que los protegía de las balas. “¡Oh mierda! ¡Oh mierda! ¡Oh mierda! ¡¡Estamos acabados si lo levantan!!” “¡¡Por aquí, Onii-chan!!”
La pequeña mano de Catherine sujeto a Quenser por el brazo y ambos se ocultaron entre los espacios de otros contenedores. Dejado atrás, Heivia miro a su alrededor y se oculto deslizándose en la dirección opuesta.

Un momento después, el contenedor fue completamente levantado y el fuego de una ametralladora ligera arraso a través del aire.

Si los tres hubieran permanecido aquí por tan solo cinco segundos mas, ellos habrían sido convertidos en carne picada.

“Maldición. ¿Por que la grúa todavía funciona?”

“Tal vez tengan su propia planta de energía de respaldo para proteger la infraestructura de transportación durante una emergencia,” explico Catherine. “Como una turbina de gas.”

Pero era demasiado pronto para relajarse.

La gigante grúa fácilmente podía hacer más que solo levantar los pesados contenedores metálicos. Si podía hacer eso, también podía hacer lo opuesto.

En otras palabras, soltarlo.

“¿¡Heivi-…!?”

Quenser se dio cuenta de eso, pero el no tuvo tiempo de dar una advertencia. El impacto fue tan fuerte que le provoco una fría sensación en su estomago. “No podemos quedarnos aquí. Sigamos avanzando, Onii-chan.”
“…”

“¡Onii-chan!”

“¡O-okay…! Él esta bien, ¿cierto? Heivia rodo al otro lado del contenedor justo antes de que cayera, ¿cierto? Esa es la razón de que no podamos verlo, ¿¡cierto!?”

“¡No podemos saberlo de una manera u otra ahora, así que tendremos que esperar hasta después para encontrar una respuesta! ¡¡Vamos!!”

Los disparos continuaron esporádicamente, por lo que ambos no podían quedarse quietos por mucho tiempo. Y una porción de esos disparos no estaba dirigida a ellos directamente. Eso sugería que el enemigo aun no había acabado con su objetivo. Quenser quería asumir que eso significaba que Heivia todavía estaba peleando al otro lado de ese contenedor.

Fue en ese momento cuando él escucho el desconcertante silbido del brazo mecánico moviéndose.

Los cuatro gruesos cables y las garras mecánicas levantaron otro contenedor metálico. Quenser se quedó observando aturdido, por lo que Catherine lo jalo de su mano y ambos se deslizaron por
una pequeña brecha entre una pila de contenedores.

Incluso si el contenedor metálico era soltado desde arriba, la brecha era demasiado estrecha y este no podría aplastarlos.

…Excepto que la grúa pórtico ignoro eso.

Reunió impulso como un péndulo y estrello el contenedor metálico contra la pirámide de contenedores similares. La enorme pila colapso y borro su previa zona segura.

“¿¡Qué es esto, un juego de rompecabezas con bloques cayendo!?”

Ambos corrieron tan rápido como pudieron y de alguna manera lograron evitar el colapso.

“¡Onii-chan, necesitamos hacer algo sobre esa grúa encantada!”

“Los controles de la grúa pórtico están a varias decenas de metros arriba. ¡¡Y dispararle con un
rifle no va a detenerla!!”

Quenser llevaba un arma ultrasónica, pero esta sacudía directamente el cráneo del objetivo con ondas invisibles y seria inútil aquí. No podría alcanzar a la persona sentada en los controles adentro de la caja de vidrio reforzado.

Pero con su gran pistola en mano, Catherine en su Bikini Negro rechazo esa idea en un nivel más fundamental.

“No. No hay nadie en los controles. Probablemente, esta siendo controlada remotamente.”

“Entonces en verdad no hay nada que podamos hacer. ¡Ondas ultrasónicas no letales y una pistola no pueden destruir esa cosa!”

Él podría lanzarle directamente algo de Hand Axe como siempre, pero no podría lanzarlo tan lejos verticalmente como podría hacerlo horizontalmente. Incluso si enrollaba el explosivo plástico como una pelota de beisbol, su brazo no era lo suficientemente poderoso para alcanzar los controles de la grúa. También podría terminar teniendo su propia bomba cayendo justo arriba de él.

“¿Hay alguna forma de destruir la grúa con otra que no sea eliminar los controles?” pregunto Catherine.

“…”

La grúa pórtico era completamente diferente de una grúa móvil o del tipo que se coloca en el techo cuando se construye un edificio. En lugar de un solo brazo balanceándose en un punto fijo,
una torre metálica de decenas de metros de alto tenia ruedas metálicas varias veces mas grandes que las de un tren que utilizaba para moverse sobre unos rieles sujetos al suelo.

En otras palabras…

“Si destruimos las ruedas o los rieles, ¿la grúa se descarrilaría y caería?” “…”
Catherine Blueangel se asomó por detrás del contenedor y disparo su pistola varias veces hacia las gigantes ruedas de metal.

Se decía que un arma podía hacer un agujero del tamaño de un puño en un elefante, pero ahora todo lo que hacia era dispersar chispas naranjas.
“No es bueno. Esto no tiene suficiente poder de fuego. Onii-chan, ¿tus bombas funcionaran?” “Con algo tan pesado, no estoy seguro. Además, la grúa se esta moviendo de un lado al otro. No
quiero acercarme para instalar la bomba. ¡Mi mano podría quedar atrapada y ser aplastada!”

“…”

La Chica del Bikini Negro pensó por un momento.

“Entonces la única forma de protegerte es eliminar a quien sea que este controlándola remotamente.”

“¿Catherine?”

Él no tuvo tiempo de detenerla.

Escucho unos ligeros pasos y la chica de 12 años con una sola trenza desapareció. Ella no había hecho un rápido movimiento horizontal. Ella había subido al techo del contenedor metálico al instante y él no había sido capaz de seguir la inesperada acción.

Pero cuando él se dio cuenta de eso, todo había terminado.

Él no podía llamar a la pequeña chica, por lo que permaneció agachado en la lluviosa noche en el patio de contenedores e inútilmente hablo con voz baja.

“Maldición, Catherine.”