Shin no nakama janai to Yuusha

Volumen 4

Capitulo 2: El Egoísmo De Ruti

Parte 1

Había ido a esta montaña a recolectar hierbas medicinales tantas veces desde que llegué a Zoltan que prácticamente era mi patio trasero, solo iba y venía cuando quería. Pero esta vez, me dirigí primero al asentamiento al pie de la montaña.

Allí había refugios para los aventureros, pero el lugar lo usaban principalmente los madereros que suministraban madera a Zoltan, un recurso crucial para una región en medio de los humedales. Sin tiempo que perder, entregué un cuarto de sueldo a las personas que estaban allí reunidas para obtener información: si habían visto al dragón y adónde se había ido.

“Voló por aquí”, dijo un chico que se iría a talar árboles él mismo en un año más o menos. La dirección que señaló no era hacia la montaña. En cambio, indicó que el dragón se había ido hacia el bosque al pie del pico.

“Gracias”, le respondí.

Deslicé una plata en su mano y me largué. Según Tisse, Ruti había dejado la aeronave en esos bosques.

El barco había sido bloqueado para que nadie más que Tisse pudiera pilotarlo, pero la máquina seguía siendo en gran parte un desconocido. Era posible que el dragón fuera parte de una expedición enviada por las fuerzas del señor demonio para abrir la cerradura y robar el vehículo.

“La aeronave es tecnología del continente oscuro de todos modos, por lo que tendría sentido para ellos saber más sobre ella que Tisse”.

Ahora tenía que tomar una decisión. ¿Era mejor ir a buscar a Ruti primero o dirigirse al bosque? Estaba un poco inseguro, pero rápidamente decidí que mi primera prioridad debía ser Ruti. Lidiar con su problema era más importante para mí que el destino de cualquier máquina voladora.

Partí hacia las antiguas ruinas de los elfos en la montaña donde se reunían las quimeras.

***

“¿Qué piensas, Danan? Con esta fantástica aeronave, podemos viajar al continente oscuro sin preocuparnos por el bloqueo del señor demonio. La victoria está mucho más cerca ahora”, se jactó Ares ante Danan.

“Es un hallazgo maravilloso, pero no parece que Ruti esté cerca”, respondió el hombre bien formado.

“Cierto. Aun así, la aeronave es una bendición significativa. Levantaré una barrera a la que solo nosotros podemos acercarnos. Sería un problema si este barco fuera robado. Y con esto, sabré si Ruti se acerca”.

Ares se puso inmediatamente a preparar su hechizo. A pesar de estar exhausto por el uso continuo de su magia durante días y días, había convocado a un dragón espiritual y ahora estaba construyendo una barrera lo suficientemente grande como para abarcar toda la aeronave.

Shisandan estaba realmente impresionado en ese punto. Como se esperaba del Sabio que había viajado con la Heroína, su poder mágico estaba más allá de lo que incluso los demonios de alto nivel podían reunir.

Pero las bendiciones no otorgan conocimiento ni juicio sabio. Esa es la verdadera tragedia de este hombre, reflexionó el disfrazado Shisandan.

A pesar de llegar a la montaña antes que Red, la decisión de Ares de detenerse en la aeronave significaba que llegaría a las ruinas en segundo lugar. Esa selección resultaría decisiva en lo que siguió.

***

Subiendo la cima, entré al territorio de las quimeras. Como de costumbre, los monstruos simplemente me miraban desde la distancia mientras se aseguraban de no interponerse en mi camino. No me encontré con nadie más que se hubiera mezclado con las quimeras como ese aventurero novato de la última vez, así que seguí hacia las ruinas.

La naturaleza había recuperado muchas de las estructuras medio destruidas, envolviéndolas en enredaderas, raíces y musgo. Los edificios estaban hechos de una sustancia dura y suave desconocida que no era ni de hierro ni de piedra. Solo lo había visto en ruinas antiguas de elfos. Había investigado este sitio brevemente antes. Sus defensas aún estaban activas, así que no me había adentrado demasiado en el lugar, pero algo me dijo que estaba mucho más protegido que las ruinas de Central.

Durante mis estudios, había leído una gran cantidad de literatura sobre los antiguos elfos. El consenso entre los investigadores fue que cada una de las muchas ruinas tenía sus propios propósitos distintos. En cierto sentido, era un punto obvio.

Lo había visto por mí mismo en las estructuras cercanas a la capital, donde se había sellado la prueba del Héroe. Dudo que Ares o Ruti lo hubieran notado entonces, pero eso no había sido un sello en absoluto. Las ruinas habían fabricado la prueba del Héroe. El objeto con el que Ruti había dejado esas ruinas no había sido el que utilizó el Héroe antes que ella, ni era un objeto de una era olvidada. Era un artículo completamente nuevo que había sido fabricado precisamente donde lo habíamos encontrado, al igual que el que usó el Héroe antes de que lo estuviera Ruti.

No había señales de las quimeras que normalmente deambulaban por esta área. Sin duda, Ruti había sacrificado a varios de ellos, y ahora le daban un amplio margen a este lugar. Siguiendo adelante, me encontré con una puerta con un gran agujero abierto.

“Si hubieras operado el sistema correctamente, se habría abierto…”, murmuré.

Ruti se había abierto camino a puñetazos. Desde su perspectiva, esa era probablemente la estrategia más eficaz. Aun así, no pude evitar reírme de ese tipo de método poco sutil.

Mi hermana pequeña no era estúpida en absoluto. Si hubiera examinado seriamente el mecanismo de la puerta, habría deducido cómo funciona. Lamentablemente, tenía algunos hábitos perezosos.

Más allá de la nueva entrada que había hecho el Héroe, había un eje oscuro. Un ascensor debería haber estado esperándome, pero…

“Realmente no hay nada aquí”.

Tal como había dicho Tisse, Ruti lo había destruido. No hubo más remedio que saltar.

“Muy bien… Dominio de la acrobacia: Caída Lenta”.

Me conecté con mi bendición y activé una habilidad. Con él, siempre que hubiera una pared al alcance de la extremidad, podría usarla para facilitar mi descenso y caer con seguridad desde cualquier altura. Había usado la misma habilidad para escapar de la mansión de Bighawk.

No importa cuánto entrecerré los ojos, solo vi oscuridad debajo. Saqué un palo de luz de la bolsa de mi cinturón. La herramienta era una barra de latón estrecha de unos treinta centímetros de largo. Cuando golpeé la punta contra el piso, hubo un suave zumbido y luego el metal comenzó a arder sin calor. Brillaba con tanta certeza como cualquier antorcha, iluminando los alrededores.

Los palos de luz eran un objeto mágico barato que costaba dos payril y tenían un hechizo especial sobre ellos. Eran fuentes de iluminación desechables que brillaron durante unas diez horas después de encenderse. Sin embargo, por más baratos que fueran, todavía cuestan unas cien veces más que una antorcha.

Sin embargo, el costo valió la pena, ya que eran fáciles de encender, el viento y el agua no podían extinguirlos y no se incendiaban. Los aventureros experimentados mantuvieron algunos de ellos en todo momento.

Pateé la pared una y otra vez para mantener mi descenso lento. El resplandor de mi barra de luz ni siquiera se acercó al fondo del pozo. Tiene un radio máximo de veinte metros. Más allá de eso, todo estaba oscuro.

Aunque mantuve mi caída lenta y manejable, caer en las sombras seguía siendo una maniobra estresante. Sentí que ya había descendido varios cientos de metros. Finalmente, vi los restos del ascensor. Eligiendo un lugar donde podría aterrizar, pateé la pared para maniobrar hacia mi lugar objetivo.

“Uf.”

Incluso con Caída Lenta, saltar desde tan alto resultó un poco agotador. Tenía Resistencia al Agotamiento, pero las cosas que me ponían nerviosas todavía me estaban agotando.

Sin embargo, habría tiempo para descansar más tarde.

Los artefactos de iluminación aquí y allá alrededor de la estructura subterránea todavía funcionaban, pero en su mayor parte, las cosas estaban bastante oscuras. Deslicé la barra de luz en mi cinturón y seguí adelante.

Aquí, las enredaderas y otra vegetación que cubría las paredes arriba no se encontraban por ningún lado. De vez en cuando, tropezaba con los restos dispersos de las antiguas defensas de los elfos que supuestamente Ruti había destruido.

Con solo llevarlos a la superficie, ganaría más de lo que podría ganar con mi tienda durante un par de siglos. Sin embargo, no había ningún lugar en Zoltan que pudiera permitirse comprar artículos tan valiosos.

“Por lo que dijo Tisse, estaban produciendo la Bendición del Diablo en las viviendas de la sección suroeste”.

Si Ruti estuviera aquí, ese sería el lugar. Saqué una brújula y verifiqué mi rumbo antes de adentrarme más en las ruinas.

Uno tenía que preguntarse por qué los antiguos elfos habían construido un edificio tan gigante tan profundo bajo tierra.

Mientras caminaba, noté algo que se destacaba entre las diversas antigüedades: una placa de arcilla en una pared.

“Esta no es una escritura elfa antigua. ¿Qué es? ¿Elfo del bosque?”

El anterior señor demonio había destruido a los elfos del bosque. Se decía que Gonz y otros semielfos eran sus descendientes, habiéndose criado con humanos para propagarse. Con su supervivencia vino la resistencia de su cultura. El idioma de los elfos del bosque todavía se entendía hoy.

“¿Departamento de Administración de Héroes?”

¿Qué se supone que significa eso? Que los elfos del bosque se hubieran ido a las antiguas ruinas de los elfos era un rompecabezas en sí mismo, pero que hubiera un letrero de arcilla con esas palabras en él era un verdadero misterio.

“Y esto lleva al alojamiento, ¿verdad?”

Tisse había dicho que había camas en cada habitación, lo que significaría que estaban donde los antiguos elfos habían posado sus cabezas por la noche. Eso es lo que asumí de todos modos. Debería ser solo alojamiento en esta dirección. Entonces, ¿cuál fue el punto de hacer todo lo posible para colocar ese letrero?

“…Más tarde. No va a surgir nada de pensar en eso ahora”.

Era más importante encontrarse con Ruti primero. Ignoré la sospecha y la curiosidad que brotaban en el fondo de mi mente y seguí adelante.

Todo lo que tenía para hablar sobre dónde estaba haciendo Godwin la medicina era una descripción verbal de Tisse. Encontrar el lugar entre las filas uniformes de cámaras iba a ser difícil.

“¿Es este?”

Le había costado un poco de tiempo. Probablemente Rit y Tisse ya estaban comenzando a subir la montaña. Abrí la puerta extrañamente pesada que era tan común en las antiguas ruinas de los elfos.

“¡Vaya!”

Una botella de vidrio vino volando hacia mí desde adentro. Salté hacia adelante para esquivarlo. Un segundo después, el objeto explotó con un plop. Una sustancia pegajosa verde salpicó por todas partes, pero en ese punto, ya estaba presionando mi espada contra el cuello del alquimista.

“¡E-Eres ese maldito boticario! ¡¿Viniste a arrestarme?!”

“No, no vine aquí a pelear”.

“¡Eso es generoso viniendo del tipo que sostiene una cuchilla en mi garganta!”

“Me arrojaste una bomba. Si viniera aquí buscando pelear, tu cabeza ya estaría rodando”.

Godwin estaba agarrando otra bomba pegajosa. Después de un breve encuentro de miradas, bajó lentamente las manos. Coincidiendo con sus movimientos, cuidadosamente saqué mi espada de su cuello.

“¿Dónde está la mujer que te retiene aquí?”

“¿Qué, tienes negocios con ella ahora? Déjalo así. Obviamente eres una luchadora capaz, pero no tienes ninguna posibilidad contra ella”.

“Creo que lo malinterpretas. Soy un conocido de ella”. Godwin pareció sorprendido.

“¿Conexiones con Rit y también con ella? ¿Quién diablos eres tú?”

“Solo soy un boticario. Entonces, ¿dónde está ella?”

“Como si yo supiera. Probablemente merodeando por las ruinas en algún lugar”.

Tener que buscar a Ruti en algún lugar de estas ruinas sería una tarea engorrosa por derecho propio.

“…”

Podría haber gritado su nombre, pero quería evitar eso si era posible. Indudablemente, Ruti no esperaba que apareciera aquí. Si se diera cuenta de que yo sabía de la Bendición del Diablo y de que sacó a Godwin de la prisión, probablemente se sentiría abatida. También existía la posibilidad de que ella corriera. Manejar esto cara a cara era lo mejor. De esa manera, tendría la oportunidad de explicarme y dejar en claro que no estaba enojado.

“Oye, Godwin”.

“¿Qué?”

“Llámala”.

“¿Y-Yo?”

“Si gritas, ella debería poder escucharte con las habilidades que tiene”.

“Hazlo tú mismo. Estoy seguro de que no confío en ti. Si eres un Asesino y cree que la traicioné, ¿qué crees que me pasa? ”

“Entonces solo di que te amenacé con matarte si no lo hacías”.

“No pasara. No creo que entiendas lo aterradora que es esa chica”.

Que molesto.

“¿No puedo hacer nada para convencerte?” Yo presioné. “Nada”.

Entonces, no digas que no te di una oportunidad. Agarré la mano izquierda de Godwin, la que sostenía la otra bomba. Era peligroso, así que lo arranqué y lo dejé suavemente en el suelo.

“¿Q-Qué estás haciendo…?”

Godwin parecía nervioso mientras trataba de liberar su mano, pero yo no lo soltaba.

“No te preocupes, esto no causará daños permanentes”.

“¿Q-Qué quieres decir…? ¡Oye! ¡Para!”

Al darse cuenta de mi intención, Godwin comenzó a intentar frenéticamente alejarse.

“Además, mi Rit lo pasó mal por tu culpa”.

“E-Eso ya quedo en el pasado. ¡Estamos a punto de cortarme por la mitad!”

“No, eso fue una remesa para Al”.

Rit se había metido en un lugar peligroso con un grupo de demonios acosadores debido a una de las bombas pegajosas de Godwin. Esto fue solo una pequeña recompensa por eso.

“Allí.” Cerré las articulaciones del brazo izquierdo de Godwin y luego tiré de su brazo ligeramente en una dirección en la que se suponía que no debía doblar.

“¡¡¡Gnaaaaaaaaaaaaaaaaagh!!!” Incapaz de soportar el dolor, un grito brotó de la garganta del Alquimista y resonó entre las ruinas.

***

“Maldita sea…”

Godwin estaba sentado, frotándose el brazo. Me miró con odio, pero yo no le presté atención. Afiné mi enfoque, escuchando la presencia que seguramente se acercaba.

Godwin fue crucial para producir Bendición del Diablo. Ruti lo necesitaba. Entonces, si había escuchado ese grito, entonces…

La puerta salió volando por el aire. Una chica pasó corriendo como un rayo. Su espada salió de la mancha, apuntó directamente a mi cuello. Era similar al movimiento que había hecho antes con Godwin, pero la velocidad y la nitidez eran de un nivel completamente diferente.

Afortunadamente, el arma de Ruti se detuvo antes de llegar a mi garganta. “¡¿Hermano?!”

La emoción que cruzó su rostro en ese momento fue algo que mi hermana, la Heroína, nunca debería haber podido sentir: miedo. Al menos, así me pareció.

***

Ruti y yo nos mudamos a otra habitación.

Godwin estaba boquiabierto, incapaz de dar crédito a sus propios oídos. Aun así, su miedo a Ruti seguía siendo fuerte. Hizo lo que le ordenó cuando ella dijo que podía descansar un rato.

“Hermano… ¿por qué estás aquí?”

La cámara en la que estábamos era aparentemente la que estaba usando como dormitorio. Era un espacio un poco más grande a unos dos pasillos de donde había encontrado a Godwin.

Si bien los antiguos artesanos elfos eran muy superiores a los actuales, los muebles de la habitación ya estaban terriblemente desaliñados. Ruti y Godwin habían sacado la basura de sus habitaciones y las habían llevado a otra y estaban durmiendo en simples catres plegables. Las habitaciones de Godwin también estaban provistas de herramientas alquímicas, comida y agua. Lo suficiente para poder salir adelante.

No tenía idea del principio detrás de cómo funcionaba, pero los acueductos en estas ruinas aún funcionaban. Beber agua de una fuente desconocida era motivo de dudas, pero aún podía usarse para bañarse. Fuera de cada una de sus habitaciones había una línea de lavandería. La simplicidad de tal cosa realmente contrastaba con la cultura altamente sofisticada de los antiguos elfos.

“¿Hermano?” Preguntó Ruti, inclinando la cabeza hacia un lado.

“Oh, lo siento. Ha pasado un tiempo desde la última vez que vi un lugar como este. Todavía lo estoy asimilando todo, supongo”, respondí.

“Ya veo.”

Claramente, tendría que ser yo quien abordará el tema. “Escuché la historia de Tisse,” comencé.

Los hombros de Ruti se crisparon. Ella miró hacia abajo como si estuviera tratando de averiguar cuál era la mejor manera de responder.