Nejimaki Seirei Senki (NL)

Volumen 7

Capitulo 4: Promesa

Parte 6

Por eso la niña de pelo bermellón creó la oscuridad con sus propias manos. Una oscuridad gris que era más oscura que la noche.

Lo que decidió la efectividad de la pantalla de humo fue la dirección del viento, la intensidad del viento y cuánto tiempo duró. Todos estos factores se dejaron en manos del destino, nadie podía predecir si ocurriera un viento del norte fuerte y persistente. Si se levanta un viento del sur, el Igsem tuvo que cambiar sus registros en una nueva ubicación, lo que tomaría mucho tiempo.

Sin embargo, antes de esperar que los caprichos del destino sonrieran a su favor, había mucha preparación por hacer. Primero fue recoger leña, que solo se podía hacer en la última parte de la batalla.

El número limitado de personas enviadas para mover la madera significaba que esto no se podía volver a hacer fácilmente. También necesitan capturar los bloques vecinos para apilar la madera sin ser hostigados. Si comienzan el fuego demasiado lejos, el humo se disiparía antes de llegar a los bloques objetivo.

No fue una coincidencia que se apoderaron de los bloques 5, 7 y 8 desde el principio. La niña de pelo color bermellón tenía este plan en mente desde el principio, y el joven de cabello oscuro hizo todo lo posible para evitar que esta situación ocurriera. Pero aún no pudo retener uno de estos tres bloques durante cuatro días.

Nadie podría acusarlo de no funcionar mejor. El joven resistió el ataque implacable de la niña de pelo bermellón durante tres días completos, y aferrarse a los bloques centrales durante tanto tiempo fue un logro encomiable. La batalla defensiva ni siquiera sería posible si un comandante mediocre estuviera a cargo.

La conclusión de su prolongada batalla tuvo que dejarse al destino. La relación entre el joven y la niña había sido pareja hasta ahora, y ahora tenían que depender del destino. De qué lado se inclinarían las escalas, dependería de los caprichos de la Diosa de la Guerra.

“Maldita sea, ¡no puedo ver! ¡No puedo ver al enemigo!”

“¡Aún no ha terminado! ¡Todavía no terminará…!”

En el infierno grisáceo, los soldados que perdieron su campo de visión gritaron en voz alta. Era como si la noche hubiera vuelto a caer, y su mente estaba lentamente cubierta por una desesperación que parecía más densa que la pantalla de humo.

“¡No dispares imprudentemente, nos quedaremos sin munición! ¡Dispara cuando el enemigo se acerque!”

Como habían perdido su ventaja de alcance, sus tácticas habían retrocedido a las de los cañones de viento clásicos. A diferencia de la noche en la que podían garantizar la visibilidad mediante el uso de luces de búsqueda, no había forma de superar la cubierta de la pantalla de humo. Pelear en tan abrumadoras probabilidades era su única opción.

“¡Mensajero, solicita refuerzos de la sede! Si las señales luminosas no funcionan, ¡ corre allí! ¡De prisa!”

Al mismo tiempo, el enemigo usó la cubierta de la pantalla de humo e inundó las áreas que hasta ahora no habían participado en combate cuerpo a cuerpo. En el Tercer Bloque, que era el más pequeño de todos, los cañones del viento se pusieron pálidos al ver al enemigo aparecer repentinamente ante ellos.

“¡Envía un mensaje al cuartel general, enemigo visto en el Tercer Bloque! ¡Se están infiltrando en la brecha entre los bloques!”

“¡No dejes que destruyan la barrera! ¡Todo terminará si rompen allí!”

“Pero es difícil apuntar en el denso humo ──”

La visibilidad era tan pobre que no podían decir si sus disparos estaban aterrizando, lo que hizo que las tropas estuvieran ansiosas. Su oficial al mando, el capitán Sezoi apretó los dientes y se dio la vuelta con determinación:

“Ya que las armas son inútiles── 3er y 4to pelotón, ¡sígueme! ¡Bajaremos la cuadra y cambiaremos a la batalla cuerpo a cuerpo!”

“¿Espera, oficial al mando señor? ¿En serio?”

“¡Acabamos de expulsar a un pequeño número de enemigos! ¡No hay excusa para no hacerlo!”

Dijo el Capitán con firmeza y avanzó a grandes zancadas. Sus hombres lo siguieron preocupados.

“── ¡Están aquí! ¡Cúbrete detrás de las rocas! ¡Apunta al enemigo y empuja 〜〜!” “¡Woaaahhh!”

Los gritos de batalla de los soldados sonaron. Los cuerpos de los dos lados opuestos se estrellaron el uno contra el otro y se empujaron entre sí y se cayeron juntos. Como sus disparos eran medio efectivos, estaban luchando en un intenso combate cuerpo a cuerpo bajo el mando del joven regordete.

“¡Shhyyaaa!”

“¡No vaciles, golpéalos!”

“¡Maldita sea, abajo!”

“¡¡Bajar!!”

Mientras dirigía a sus subordinados al borde del pánico, el joven al mando ligeramente regordete mantuvo la calma. Al ver que la vanguardia se había alejado de la ola de ataque, parpadeó e inyectó sangre en los ojos e intentó comprender la situación.

“¡Esa fue la tercera ola de ataque…! ¡Todo el pelotón, informe de bajas!”

“Primer pelotón, ¡5 heridos! ¡2 de ellos están gravemente heridos!”

“Segundo pelotón, 3 muertos, ¡maldición! 2 heridos de gravedad!”

“Tercer pelotón, ¡4 muertos! ¡6 heridos graves!”

El número de bajas reportadas por sus subordinados seguía aumentando, y estaban sangrando. En este momento, Matthew, que estaba ardiendo de ansiedad, escuchó una voz desde atrás. Eran los francotiradores errantes de la unidad de Torway.

“¡Estamos aquí para reforzarlo, Capitán Matthew! ¿Dónde debemos ir?”

“¡Bueno! Enlace primero con el Segundo Pelotón──”

Cuando estaba a punto de emitir una orden, fue ahogado por intensos gritos. Innumerables pasos vinieron de la pendiente, y Matthew abrió mucho los ojos y gritó:

“¡Están cargando de nuevo! Mantente firme──!”

Antes de que la advertencia llegara a oídos de las tropas, el enemigo venía de nuevo. “¡U-Uwahh!”

“¡Hyyaaa──!”

Se concentraron en el punto débil creado en el ataque anterior, y la unidad que sufrió

grandes pérdidas fue suprimida. Unos pocos enemigos rompieron la línea y cargaron a través del humo hacia el lado oeste del terreno rocoso, directamente hacia el comandante, Matthew.

“Capitán, ¡cuidado!”

Al darse cuenta de que su superior estaba en peligro, los soldados corrieron hacia él. El enemigo entrante hizo retroceder al joven regordete, planeando apoyarse contra la roca en el extremo occidental para estabilizarse…

“¿──Ahh?”

Matthew sintió una sensación de ingravidez y se dio cuenta de que detrás de él había un espacio vacío.

“¡El capitán Matthew está herido! ¡El primer teniente Tabruchi ha tomado el mando de las defensas del segundo bloque Block!”

Ikta sintió que un escalofrío le recorría la espalda. Poco después de recibir este informe, Matthew fue llevado a la sede en una camilla. El joven de cabello oscuro y Haro inmediatamente corrieron a su lado.

“Matthew, ¿dónde te golpearon?”

“¡No me golpearon! Me caí de una roca, es solo un rasguño… ¡Ughh!”

Matthew respondió con fuerza, pero su uniforme estaba hecho jirones y estaba sangrando de los lugares donde golpeó las rocas. Después de revisar sus heridas, Haro sacudió la cabeza con una cara seria.

“Se trata principalmente de contusiones, pero se fracturó la pierna derecha. Tendré una férula──”

“¡Solo véndalo y ayúdame aquí! ¡Tengo que volver a mi publicación…!”

Los dos detuvieron a Matthew que intentaba levantarse a pesar de sus heridas. En este momento, el joven de ojos pálidos y ojos de jade se apresuró hacia los tres desde el lado norte del bloque:

“¡Ik-kun, Haro-san! ¿Cómo están las heridas de Ma-chan?”

“Se lastimó la pierna, ¡pero nada amenaza la vida! ¿Cómo está el segundo bloque?”

“La mayoría de mi unidad fue a reforzarlos, ¡podemos aguantar un poco más! Pero esta vez, desde el frente──”

Gritos enojados vinieron de detrás del joven. Sin esperar a que él explicara, Ikta podía sentir la inminente derrota de sus voces.

“La dirección del viento es el elemento decisivo, eh──”

La unidad de reservas se había formado cuidadosamente entre el 7 ° y 5 ° bloque. El comandante Megu se paró al lado de la chica de pelo bermellón y murmuró mientras miraban la formación enemiga. El final de esta batalla estaba a la vista.

“La batalla está decidida, teniente coronel. Con esto, no pasará mucho tiempo────”

Algunos soldados cargaron antes de que el Mayor pudiera terminar. Este grupo que patrullaba hacia el extremo norte del campo de batalla tardó un momento en recuperar el aliento, luego habló rápidamente:

“¡Teniente Coronel Igsem, un informe! ¡Un ejército de la facción Remeon de 3000 se acerca desde el noroeste! ¡A su ritmo actual, se estima que llegarán en una hora!”

La cara del mayor Megu se torció. Esta noticia significaba que su victoria segura se les había escapado.

“¡Aparecer en este momento…!”

Al recibir este informe con la espalda aún vuelta, la chica Igsem dijo en voz baja. “Primera compañía de fuego arregle las bayonetas.”

Los soldados ejecutaron las órdenes de inmediato. Al darse cuenta de cuáles eran sus intenciones unos segundos después, la Mayor Megu comenzó a temblar.

“… ¿Vas a cargar personalmente?”

No había necesidad de preguntar. Incluso sin noticias de la facción Remeon acercándose, ella había planeado hacerlo desde el principio. Las defensas enemigas eran sólidas, y no se sabía cuándo el viento cambiaría de dirección. No deberían estar satisfechos con estar a un paso de la victoria e ir por el premio.

“Dirija su unidad y cubra ese bloque con fuego supresor. Luego guiaré a mis hombres y cargaré en el corazón de la formación enemiga, derribaré al comandante enemigo rápidamente y mataré a Ikta Sankrei.”

La chica declaró con un tono inquebrantable. La Mayor finalmente se dio cuenta de lo superficial y tonto que era desaconsejar su resolución.

“… no te detendré. Se puede hacer si eres tú.”

Dijo el mayor Megu con un suspiro, luego cerró ambos ojos con una expresión de dolor.

“Perdimos demasiados soldados en esta guerra… Quiero terminar esto aquí. No puedo soportar más de esto.”

El mayor miró a la niña con un gemido y saludó con la espalda enderezada: “Te dejaré todo a ti. Termina esto, joven Igsem.”

“¡El bloqueo del camino entre el primer y el segundo bloque está en llamas! ¡No podemos apagarlo, no durará mucho más!”

Cuando el mensajero irrumpió y dijo eso, los miembros del Cuerpo de Caballeros se congelaron.

Esto fue como una campana anunciando que ha llegado el momento predestinado, resonando fuertemente en el corazón de Ikta.

“…… Uf 〜 …”

El joven puso ambas manos sobre sus caderas y respiró hondo para calmarse. Levantó la vista hacia el cielo gris, imaginando la vista desde el cielo mirando hacia abajo en su posición. El cuarto día de la batalla defensiva, poco después de las 4pm. Anoche, tres bloques al norte habían caído, y los bloques centrales, incluido el cuartel general, ahora estaban abiertos a ataques directos. Dado que el primer bloque tiene pocos caminos que conducen al exterior debido a sus laderas como acantilados, el enemigo tuvo que concentrar sus ataques en el Segundo Bloque, intentando romper las barreras entre los dos bloques.

De los 2.400 soldados en el lado defensivo, solo quedaban un poco más de mil en combate. La mitad de ellos fueron asignados a la defensa del Segundo Bloque, y él estaba retirando lentamente sus fuerzas del cuarto y sexto bloque hacia el sur. El objetivo era reunir sus fuerzas restantes y fortalecer su defensa del centro.

De las tres barreras viales, las dos hacia el sur, a cada lado del tercer bloque aún estaban en pie. Incluso si el enemigo ataca en masa, podrían resistir durante bastante tiempo.

El problema era el norte. Afectado por la cortina de humo de los bloques quinto y séptimo, el enemigo había intensificado la intensidad de sus ataques. Esa barrera sería destruida por el fuego en unos diez minutos.

Se imaginó el desarrollo después de la caída de la barrera. Detrás de las barreras había tres capas de cobertura defensiva hechas de piedra. Al hacer uso de estas cubiertas, sus fuerzas podrían detener la invasión enemiga. Las fuerzas disponibles eran 300 tropas luminosas y 20 francotiradores, así como el apoyo de los dos bloques vecinos. La precisión de los disparos se vería afectada por la cortina de humo, pero el corredor de ataque del enemigo se redujo, incluso si atravesaban la barrera, y si se trata adecuadamente, resistir durante una hora era muy posible.

“Y, por supuesto, ella no me dejaba hacer lo que quisiera.”

Ikta inmediatamente desterró cualquier suposición ingenua. Suponiendo que la facción Remeon se acercara pronto, Yatori no se conformaría con una batalla prolongada y atacaría directamente al corazón. Ella traería una fuerza tan poderosa como pudiera y vendría directo a su cabeza.

Lo que significa que, para que este plan funcione, necesitaría al mejor comandante de primera línea que hubiera.

“── Ahh──”

No vacilaba ni tenía miedo, pero su cuerpo temblaba sin razón.

“── Me alegro.”

El joven que podría no sobrevivir a la hora murmuró para sí mismo. “Torway, ven aquí.”

Con el corazón puesto, Ikta saludó al joven de ojos de jade y Torway se acercó asintiendo.

Con la batalla llegando a su fin, los dos discutieron sus planes por última vez.

Sintiéndose incómoda pero incapaz de salir, la princesa Chamille paseó por la carpa en el interior de una cueva poco profunda.

“¡Ugghh…!”

Ella gimió, y el dedo índice que estaba mordiendo comenzó a sangrar.

Fue insoportable. Los miembros del cuerpo de caballeros estaban arriesgando sus vidas en la batalla, pero ella no podía hacer nada más que esperar. La ansiedad y la sensación vertiginosa de impotencia la estaban volviendo loca.

“── Princesa.”

Llegó una llamada desde fuera de la tienda. La niña corrió hacia la entrada y levantó la pantalla sin dudarlo.

“¡Solork…! ¿E-todos están a salvo? ¿Cómo va la batalla? ¿Nos hemos vinculado con la facción Remeon? ──”

Ella fue hasta Ikta que había entrado en la tienda y le hizo una serie de preguntas. El joven sacudió la cabeza con una cara estoica.

“Los miembros del cuerpo de caballeros están bien, pero las cosas no van demasiado bien… y la situación es más grave de lo que imaginaba, así que tenemos que hacer los preparativos, por si acaso.”

La forma en que lo expresó parecía ominosa. Ikta continuó claramente ante la princesa que se había puesto rígida:

“¿Conoces el procedimiento para solicitar clemencia de la muerte?”

La niña abrió mucho los ojos por la sorpresa. ¿Podría ser que ya estaban en la etapa en la que tenían que rogar clemencia al enemigo?

Al darse cuenta de que estaba equivocada, Ikta explicó:

“No es para mí o la princesa. Si todo se reduce a esto, definitivamente te ahorrarían a ti, un miembro de la realeza, y encontrarán alguna razón para ejecutarme, el rebelde. El problema son nuestros camaradas que están en la frontera, cuánto serían perseguidos por su parte como rebeldes.”

La princesa entendió lo que quería decir, y el joven continuó:

“Primero en la lista estarían Matthew, Haro y Torway. El Mayor Sazaruf, el Mayor Melza y otros oficiales de grado de campo no pudieron escapar de la responsabilidad diciendo: “Solo estoy siguiendo las órdenes”. Dependiendo de cómo vaya la corte marcial, todos podrían ser ejecutados. Para evitar eso, tenemos que depender de la Princesa para pedir clemencia de la muerte.

Estaba hablando de atar cabos sueltos después de perder la batalla. La niña se cubrió las orejas y sacudió la cabeza.

“No lo digas… ¡Deja de decirlo, Solork! ¡No quiero escucharlo, no quiero escucharlo! ¡ No quiero escuchar sobre un futuro que asume que morirás…!”

“Entiendo. Perdón por asustarte… Pero tenemos que discutir esto ahora mismo.” Ikta dijo con una cara seria, luego miró hacia atrás.

“Voy a encontrarme con Yatori.”

“────”

“Esta es la batalla final. Puedo declarar que ganaré si es cualquier otro oponente, pero

no puedo hacer eso contra ella. Incluso si es solo una garantía verbal, no puedo prometerle que ganaré. Por eso… tengo que decirte esto ahora mismo, y pensar qué hacer en caso de que pierda…”

Alcanzó sus límites después de escuchar eso. La princesa perdió toda moderación y las emociones que había estado conteniendo todo este tiempo explotaron.

“¡Entonces── entonces no te vayas!”

Cuando se dio cuenta, estaba gritando en voz alta. La princesa se abalanzó sobre él, enterrando su rostro en su estómago y suplicó:

“¡Deja de pelear! Solo ríndete ahora. ¡Manejaré la clemencia de la muerte y todo lo demás! ¡Incluso si tengo que postrarme y comer barro, no dejaré que te ejecuten…!”

Las lágrimas nublaron su visión, y sus delgados brazos dolieron por su intento de hacer que el joven se quedara.

“Si── Si te abrazo fuertemente así, entonces no pueden matarte, ¿verdad? Si me quedo contigo en todo momento, ¡nadie puede hacerte daño! ¡Haré solo eso! ¡No te dejaré ir, deja ir tu calor…!”

La princesa agarró el pecho del joven y derramó sus tripas. Se aferró tercamente, como si se cayera de un acantilado si la soltara.

Después de un momento de silencio… Ikta se arrodilló para estar a la altura de los ojos y dijo en voz baja:

“Princesa, voy a realizar mi sueño más tarde.”

“¡……! ¡…!”

“Dejarla vivir la vida que desea eso era lo que siempre quise. Así que estoy dispuesto a

arriesgar mi vida para que pueda seguir siendo Yatorishino, en lugar de convertirse en una Igsem sin nombre y genérica.”

Después de decirle a la princesa dónde radica su convicción, el joven continuó seriamente:

“No puedo prometerte que sobreviviré. Pero definitivamente regresaré y la traeré de vuelta conmigo. Porque ese también es tu deseo. Para Haro, Matthew y Torway también… Un deseo que todos tenemos en común.”

Luego empujó suavemente a la niña a un lado, y ella no se resistió. Los brazos que sujetaban al joven habían perdido su fuerza.

“… Me voy ahora.”

Después de decir lo que él también tenía, Ikta dio unas palmaditas en la cabeza de la niña, luego se volvió y se fue.

“¡Solork….. !”

Sin volverse hacia su último grito, mantuvo la vista al frente y salió de la tienda.

Sus subordinados formados en el centro de la base esperaban en silencio al joven después de que terminara su última tarea.

“Perdón por la espera, ¿se hicieron los preparativos?” Un oficial salió de las filas y respondió:

“Todas las fuerzas disponibles se habían reunido para formar una compañía de sobrecarga. La unidad del Capitán Torway también está en su lugar.”

Después de decir eso, ese oficial saludó y le ofreció una ballesta. El joven lo recibió e instaló a su compañero luminoso sobre él con movimientos practicados.

“Vamos, Kusu.”

“Sí… Lo haremos a través de esto, Ikta.”

Sonriendo en respuesta a la preocupación de Kusu, dio el primer paso hacia la batalla final. Los pelotones que tenían sus órdenes se apresuraron a sus puestos, y los jóvenes los siguieron.

“¡Sosténlo justo ahí!”

De repente, unos pasos fáciles de reconocer persiguieron detrás de él. Ikta se dio la vuelta con una sonrisa irónica y vio al joven regordete que estaba vendado de pie allí con sus garras. Como para mostrar su determinación de luchar a pesar de sus heridas, tenía una pistola de aire asegurada a los hombros.

“¡Idiota, no decidas todo por tu cuenta! ¡Dije que también quiero pelear…!”

Matthew quería discutir enojado, pero un par de brazos lo agarraron por detrás. Una médica más alta que él apareció con una cara determinada.

“¿Qué? ¿Hey?”

“¡Lo siento, Matthew-san!”

Con esa disculpa, Haro apretó sus brazos alrededor de su cuello, cortando el flujo de sangre al cerebro del joven regordete.

“── Guahh──!”

La posición y la presión que ella aplicaba eran correctas, y Matthew ni siquiera podía gritar de dolor. Quedó inconsciente sin ninguna resistencia y se derrumbó. Ikta suspiró aliviado.

“Gracias, Haro… Cuando se despierte, dile que le debo una.”

Haro se ocupó del joven regordete, luego miró al joven que se iba con ojos inquietos. “Ikta-san… ¡Ikta-san! Tú… volverás, ¿verdad?”

Se detuvo en medio de sus zancadas. Ikta se quedó callado por un momento, luego

respondió en un tono ligeramente rígido:

“Despeje el mapa sobre la mesa y prepare un poco de té. Para seis personas.”

Esta fue la mejor respuesta que pudo dar. Ikta luego se fue de verdad esta vez, y dijo a sus hombres que esperaban en el tono de un comandante:

La cuarta compañía de tropas luminosas, del primer al cuarto pelotón, se despliega en el frente de la fortaleza y ataca al enemigo entrante cuando cae el obstáculo. El quinto al octavo pelotón, formado detrás de ellos y prepararse para lo mismo.

La compañía de sobrecarga tenía 300 hombres impares. Los soldados fueron a sus puestos.

“Si no puede mantener la línea de defensa, retroceda a la siguiente posición detrás. Retírese en una formación lo más ordenada posible, y no haga nada imprudente sin mis órdenes.”

Con los preparativos hechos, Ikta dirigió su mirada hacia el norte. Miró el obstáculo que podría desmoronarse en cualquier momento y luego respiró hondo.

“Ok, es hora── todas las unidades, ¡arreglen las bayonetas!”

Todo el grupo fijó una lanza corta al final de sus ballestas con un tintineo. El sonido familiar y el peso en sus manos los transformaron a todos en soldados.

Los soldados Igsem esperaron en silencio frente al obstáculo que se estaba quemando lentamente.

La niña de pelo bermellón se encontraba en medio del grupo, con ambas manos en las empuñaduras. Sus ojos carmesíes miraban la formación enemiga a través del aire gris y brumoso.

Poco después, desde donde podía ver, el obstáculo que se había mantenido firme comenzó a desmoronarse como si su fuerza se hubiera rendido. Los pioneros que demolieron el obstáculo debajo de la cortina de humo volvieron la espalda a las ruinas ennegrecidas y gritaron la señal en voz alta.

Una ráfaga de viento soplaba desde el costado, aparentemente en señal, y podían ver claramente la formación enemiga por un momento.

Ante sus ojos había un fuerte lleno de piedras y ballesteros escondidos detrás de la cubierta. Más allá de ellos había un joven comandante parado valientemente en el fuerte.

Por ese instante, los dos miraron fijamente. “── ¡Carga!”

La chica ordenó mientras sacaba sus cuchillas. Los soldados en las primeras filas

cargaron al unísono en la dirección en que apuntaba la espada. El sonido del aire silbando estalló, y numerosos rayos salieron volando. Las desafortunadas decenas de soldados resultaron heridos, pero los otros aceleraron su ritmo y perseveraron.

“¡Wooahhh!”

Cargaron hacia el fuerte y devolvieron el fuego. Como el campo de batalla era un combate a corta distancia con poca visibilidad, ninguno de los bandos tenía muchos cañones de viento. En su lugar, las tropas luminosas y las tropas de fuego se enfrentaron de frente.

Pernos, luz, balas y aullidos. Todos estos se entrecruzaron locamente cuando ambos bandos se enfrentaron en una intensa batalla.

“Primer pelotón, ¡muévete más a la izquierda! ¡El enemigo está apuntando a ese lado!”

Observando cuidadosamente los movimientos enemigos, Ikta hizo pequeños ajustes al despliegue de tropas. Como sus fuerzas disponibles eran limitadas, la chica de pelo bermellón no lanzaría una ofensiva tan simple. Su objetivo era abrirse paso en un solo punto entre fintas y ataques reales.

Qué parte de la fortaleza fue atacada, y dónde estaba el oponente tratando de forzar una apertura: la precisión de la información y su análisis ni siquiera podían retrasarse ni un poquito. Un solo paso en falso llevaría a la derrota, así era como era luchar contra ella.

“Cuarto pelotón, ¡disminuye tu cobertura de disparo en los lados y aumenta tu intensidad de fuego! ¡Da fuego de apoyo desde tus flancos! ¡El enemigo está cargando desde el frente, no podemos resistir solo con las defensas frontales!”

Cada instrucción era como caminar sobre un alambre delgado. Sus audaces y precisas defensas móviles se construyeron sobre hielo delgado, y tanto los comandantes como los hombres llevaban una carga igualmente pesada. Podrían resistir desplegando tropas por igual en todos los frentes, lo relajante que sería si el enemigo fuera tan fácil.

“Segundo pelotón, ¡participa en el combate cuerpo a cuerpo! ¡En tus luces!”

Como el sol brillaba y la cortina de humo permanecía, usar el reflector para cegarlos fue ineficaz. No sería completamente sin sentido, pero todos los veteranos sabían que crear un momento de apertura a corta distancia podría ser la diferencia entre la vida y la muerte.

“Tercer pelotón, ¡mira a la derecha del fuerte! ¡No dejes que se infiltran bajo la cobertura del humo!”

Desde la perspectiva de Ikta, el comandante, la terrible visibilidad fue un gran dolor. Podía captar el movimiento de grupos grandes, pero era difícil rastrear equipos pequeños con sus ojos desnudos. Tenía que predecir las partes que no podía ver y dejar la decisión final a sus subordinados. La condición era la misma para la chica de pelo bermellón, ya que ambos lados llevaron su imaginación al límite para leer el movimiento hecho por el otro.

“¡Shyaa──!”

Además de la dureza de la batalla, los soldados que luchaban desesperadamente en el frente se enfrentaron a otro tipo de dolor. Después de empalar al enemigo con su lanza corta, un soldado se dio cuenta de eso.

“K-Kuft… Tú…”

Llamó al hombre que tosía sangre delante de él… eran amigos.

Los dos habían comido, bebido y confiado sus vidas en el campo de batalla, una amistad forjada a través de guerras. La herida era obviamente fatal para cualquiera, y no podía extraer la lanza descuidadamente.

“Oye, eso duele, Remarga….. ”

Con esas últimas palabras, el soldado de primera clase soldado de primera clase Kuft Hosa se cayó débilmente. Al presenciar la muerte de su amigo en sus manos, el soldado luminoso Remarga Kaitsuru, soldado de primera clase, estaba demasiado conmocionado para moverse antes de que pudiera salir de allí, otro soldado lo

apuñaló por la espalda y murió. Los dos cadáveres se acostaron uno al lado del otro en una roca manchada de sangre.

Situaciones similares estaban sucediendo en todo el lugar. Esta no fue la primera guerra civil entre las fuerzas imperiales, pero las unidades que se enfrentaron esta vez fueron las subordinadas directas del joven de cabello oscuro y la niña de pelo bermellón. Los dos se entendieron y confiaron el uno en el otro más que nadie, y esto se reflejó en la relación íntima entre sus subordinados. Lo que significa………………………………………………………………………………………………………. Apuntaban con sus espadas a sus compañeros de batalla irremplazables. “U-Uwahh──”

“Hiee… Ahh…….. !”

Los soldados gruñeron de dolor. La mitad por miedo a la muerte y la otra por miedo a

lastimar a sus camaradas. Pero tuvieron que tomar represalias cuando fueron atacados, por lo que las bajas continuaron acumulándose en ambos lados.

“¡Uwahhhh──!”

Matar era un infierno, ser asesinado también era un infierno. La guerra civil se acumula en esta batalla final, y se enfrentaron entre lágrimas.

Los hombres de Ikta estaban totalmente comprometidos con la defensa, pero incluso con sus valientes esfuerzos, su línea de defensa aún fue empujada gradualmente hacia atrás. Después de abandonar las primeras defensas, la situación se volvió más grave. La facción Igsem comenzó a usar la cubierta en su lugar, y empujó el punto de partida de su carga hacia adelante.

“……”

Mientras miraba severamente la formación enemiga que se estrechaba lentamente, Yatori sacó su reloj de bolsillo para revisar. Habían pasado casi cuarenta minutos desde que los exploradores informaron el avistamiento de la facción Remeon, solo quedaban un poco más de veinte minutos.

En ese instante, ella decidió: la batalla tenía que decidirse ahora.

“Envía todas las fuerzas ── Atravesaremos el centro de las defensas enemigas y subyugaremos su cuartel general.”

Los hombres mostraron caras determinadas. Habían estado esperando esta orden.

“Primero, Segundo y Tercer pelotón, muévete conmigo en la primera ola. Cuarto y quinto pelotón, no dejes ningún espacio y sigue de cerca.”

Aumentó el agarre de sus cuchillas, puso los ojos hacia adelante, luego se inclinó hacia el frente y se preparó para correr.

Con todos los preparativos hechos, la niña respiró hondo y … “── ¡Carga!”

Como una flecha suelta de un arco, sus hombres corrieron locamente. Incluso en estos

terrenos desiguales, sus zancadas se mantuvieron constantes. Cargaron a través de la granizada de balas y llegaron a la línea de defensa más importante del enemigo. Sin perder el ritmo, corrieron cuesta arriba y atacaron la segunda línea de defensa del enemigo que apenas comenzaba a retirarse.

“¡Waaarrrggghhhhhh!”

La carga comenzó en un momento impecable. Los soldados restantes en la línea no pudieron reunir sus fuerzas para defenderse de la carga, y los que se retiraron a la tercera línea de defensa fueron derribados sin ninguna resistencia.

“¡Detén la carga! ¡Fórmate con los camaradas a tu alrededor!”

Después de barrer el área, esperó unos segundos para vincularse con los elementos principales. Cuando sus hombres reconocieron la situación, la chica Igsem no dudó en lanzar otra carga hacia la tercera línea de defensa.

“──¡En camino!”

Debido a la cortina de humo, Ikta, que se había retirado más atrás, no podía ver lo que su oponente estaba haciendo directamente. Pero lo sintió. Por el pánico de los soldados cayendo, el intenso sonido de los combates desde la segunda línea y el silencio imponente que siguió de inmediato. Todos estos eran signos de que venía la niña de pelo bermellón.

“¡Los cuatro pelotones detrás, se extienden y se preparan para atacar con pinzas desde los lados! ¡No bloquees su carga! ¡Extiende la alfombra roja para ella!”

El joven dio sus instrucciones, luego se volvió y corrió en la dirección opuesta a la carga enemiga. Con la espalda vuelta hacia ella, huyó junto con el pelotón bajo su mando directo, y se dirigió hacia el brumoso destino.

“¡Tch──!”

El destello de sus espadas tomó otra vida. En la última línea de defensa, los tres soldados que cortó se derrumbaron en el suelo. Ella giró su cuerpo para esquivar los rayos que volaban desde un lado, y cortó al ballestero de inmediato.

“¡Deje la supresión de este lugar a nuestros camaradas! Nos dirigiremos directamente

── ──”

Ella se detuvo a mitad de la oración. Cuando pasó por encima de la roca y miró, vio una vista inesperada.

Ella esperaba un feroz contraataque del enemigo formando una línea horizontal, y estaba preparada para atacar al enemigo desde el frente. Pero la realidad era diferente. No había una línea de defensa horizontal bloqueando su avance, sino dos columnas verticales a un lado, con tropas luminosas armadas con ballestas que apuntaban a los soldados Igsem.

Estaba claro que su despliegue se hizo para rodear a los atacantes. En el extremo más profundo de la formación, solo había una unidad extendida horizontalmente frente a los Igsem. Era el pelotón bajo el mando directo del joven de cabello oscuro, y él estaba personalmente a su lado.

Era obvio. Estaba usando esta situación para enviar un mensaje claro. Si quieres mi cabeza, entonces ven aquí.

“── Encontré al comandante enemigo.”

Después de comprender la situación, la chica de pelo bermellón no dudó ni un segundo:

“¡Continúa la carga!”

“¡Warrrggghhh!”

Los soldados de élite corrieron con un aullido, corriendo directamente hacia el comandante enemigo. Su objetivo era atravesar el centro, y ni siquiera consideraron la ronda sobre la forma de atravesar los lados.

Dejando a un lado los cañones de viento en masa, las tropas luminosas armadas con ballestas tenían una tasa de disparo insignificante. Incluso si fueran atacados por ambos lados, no sufrirían bajas graves, por lo que solo tenían que cargar de inmediato.

“¡Todos los pelotones, adelante! ¡Aprieta los dientes, participa〜〜!”

Y, por supuesto, las tropas luminosas también lo sabían. No tenían expectativas de que sus rayos detuvieran el feroz ataque del enemigo, y tuvieron que lanzar todo su cuerpo para completar esta ardua tarea.

Las dos columnas se cerraron a los lados cuando comenzó la carga, como un cocodrilo que cierra las fauces, y se dedicaron al combate cuerpo a cuerpo. En el momento en que se enfrentaron, saltaron chispas cuando sus armas chocaron.

“¡Máxima velocidad adelante! ¡No te detengas!”

La chica de pelo bermellón no estaba inquieta. Era natural que el enemigo los rodeara, y ella eligió abrirse paso desde el frente a pesar de eso. El combate cuerpo a cuerpo fue el fuerte de un Igsem. Ante un enemigo que los igualaba en número, no tenían razón para detenerse.

“¡Ughhh──!”

“¡Arrgghh!”

“¡Maldita sea, piérdete!”

Sin embargo, aunque no detuvieron sus pies, la inercia de su carga aún se vio afectada. Los que tenían que enfrentarse al enemigo que atacaba desde los lados, y los que avanzaban por delante, tenían una diferencia en su velocidad. El pelotón bajo el mando directo de la niña de pelo bermellón estaba aún más aislado mientras avanzaban rápidamente. Se defendieron del acoso del enemigo de manera eficiente, y estaban muy por delante del resto.

La chica Igsem ya sabía que esta era la intención del joven. Se permitió el paso de su pelotón, y el joven les tendió una trampa una vez que estuvieron aislados… Pero a pesar de saber eso, ella no disminuyó la velocidad. Sería una pérdida de tiempo esperar a que sus camaradas lo alcanzaran, y el comandante enemigo podría huir a otro bloque. No pasó mucho tiempo antes de que la facción Remeon llegara, por lo que tuvieron que terminar esto rápidamente.

Si había una trampa, solo tenían que atravesarla. La chica de pelo bermellón corrió por los terrenos enemigos sin dudarlo.

“¡Échate para atrás! ¡Mantenerse al día conmigo!”

En el rango formado por los soldados al final, Ikta también se movía con el pelotón bajo su mando directo. Se movió hacia el sur, y se mantuvo a distancia de los elementos principales del enemigo perseguidor.

“¡Ja! ¡Ja! ¡Hah…!”

Siguió corriendo con aliento entrecortado. No corrió tan lejos, pero la fatiga acumulada y el aire lleno de humo hicieron que las extremidades del joven se sintieran realmente pesadas. Se suponía que debía llegar al pie del tercer bloque en un solo disparo, pero una fuerte sensación de vértigo lo golpeó a mitad de camino, haciéndolo tambalearse.

“¡Comandante, contáctese!”

Ikta casi se cae y un sargento lo abrazó. Al darse cuenta de que casi perdió el conocimiento, Ikta rápidamente levantó la cabeza.

“Ah, lo siento, estoy bien ahora ──”

¡Bam! En el momento en que dijo eso, sintió un impacto en la mitad inferior de su cuerpo.

“── Shyaa!”

Con ese extraño impacto, un calor abrasador comenzó a extenderse desde su pierna izquierda. Ikta silbó cuando sintió su pierna como si hubiera pisado un pozo de fuego.

“──W-Qué…… ”

El joven miró hacia abajo y entendió todo. Un rayo le había atravesado el muslo.

“¡Ikta──!”

“¿Comandante?”

Kusu giró la ballesta y el sargento que se dio cuenta de lo sucedido se puso pálido. Ikta se estabilizó agarrándose del hombro del sargento e intentó resolver la situación a través del intenso dolor. Un rayo golpeó la parte posterior de su muslo y se incrustó dentro. La sangre comenzó a manchar sus pantalones.

“── Un rayo perdido.. ”

Murmuró roncamente. Si no doliera tanto, el joven querría reír. El enemigo todavía estaba lejos detrás de ellos, por lo que definitivamente no era un tiro apuntado.

Alguien disparó el rayo en un ángulo alto, y milagrosamente lo golpeó después de dibujar un arco alto a través del cielo.

Su frente estalló en un sudor frío. Después de todo, no estoy favorecido por los cielos, pensó Ikta para sí mismo. Rechazando la ayuda del médico, comenzó a caminar de nuevo.

“¿Comandante? ¡Por favor, espera, tu herida.. !”

“No hay necesidad. Por el flujo de sangre, no golpeó la arteria. Es obvio que el perno no se puede extraer rápidamente.”

El joven respondió claramente y continuó caminando mientras se apoyaba en el hombro del sargento. Con cada paso, el rayo penetraba más profundamente en su carne, y el dolor punzante le recorría la columna.

“¡……!”

Ikta apretó los dientes y lo soportó, pero olvidó respirar… Cuando se dio cuenta, su conciencia se estaba desvaneciendo en la oscuridad.

“── Hola, Ikta. Prométele a tu madre── cuatro, cosas.”

Una voz suave entró en mis oídos. En la oscura casa de fabricación de carbón, mi madre se acostó en una cama improvisada.

Estaba demasiado débil para levantarse, y sus extremidades eran tan frágiles como ramitas… Pero, aun así, todavía me sonrió.

“Primero ── No, te unas al ejército.” Madre suplicó con voz temblorosa.

“No desperdicies tu vida… por el país, por la justicia, por esas grandes cosas que no puedes ver con tus ojos. No, seas como tu padre.”

Tomé sus manos heladas e intenté decir algo, pero solo pude gemir.

“Segundo── No, busca venganza. Nunca pienses en vengar a tu padre. Cuanto más lo pienses, más te alejarás de la felicidad.”

Sacudí mi cabeza, sin atreverme a aceptar esto. Temía que la vida se fuera de mi madre en el momento en que asentí.

“Tercero── Afloja todo lo que puedas. Dado lo duro que ha trabajado tu padre, está bien que te relajes. De ahora en adelante, tu vida debe estar llena de alegría.”

No pude aceptar esto y sellar mis pies. Entonces, ¿por qué no podía transferir la recompensa de ese arduo trabajo a la mujer que estaba delante de mí? ¿Por qué tenía que ser yo solo?

“Cuarto── Necesito preguntarte antes de eso.”

Madre me miró con sus ojos oscuros. Comprendí que esta era una pregunta importante, y enderecé mi espalda por reflejo.

“En estos pocos años, de las personas que no conociste, ¿a quién quieres conocer más?”

Aparte de tu padre, agregó la madre. No tuve que pensar en esto en absoluto. Reprimí los sollozos en mi garganta y dije un nombre.

Como esperaba … murmuró mi madre y asintió con satisfacción.

“Ve a verla entonces. Después de que abandones este lugar, no importa cuánto tiempo tarde, debes verla. Ese es el primer paso hacia tu felicidad.”

Madre dijo con una sonrisa firme. Su luz me abrumaba. Cuando la madre mostraba esa cara, lo que decía siempre era correcto.

“Sin embargo, si, si ese niño directo vagaba demasiado por un camino espinoso, y queda atrapado por los límites del destino…”

La preocupación cruzó por sus ojos por un instante. Ella fortaleció su agarre en mis dedos y dijo con sus últimos pedazos de fuerza:

“Si llega ese momento, entonces Ikta, tienes que detenerla. Toma la mano de esa chica y guíala hacia la felicidad.

Si camináis juntos de la mano, encontrarás lo más importante para ti al final──” Las palabras de su madre lo despertaron.

“── ¡Ahhh!”

Ikta ejerció fuerza sobre sus piernas. El intenso dolor de su muslo realizó la tarea de un despertador, e Ikta se alejó de su subordinado que lo estaba apuntalando.

“¡C-Comandante!”

Cuando recuperó la conciencia, Ikta miró a su espalda por reflejo. Los elementos principales encabezados por la niña de pelo bermellón todavía estaban a cierta distancia. Se desmayó por un tiempo muy corto, y sus subordinados lo habían estado arrastrando todo este tiempo.

“… Vámonos.”

El joven se dio la vuelta y salió. Había decenas de metros hasta el destino. Usó su último poco de fuerza y resistencia y empujó su cuerpo que era tan pesado como el plomo hacia adelante.

Se tambaleó hacia adelante mientras murmuraba repetidamente… Espera allí. Piensa en ella y espera.