Trash of the Count’s Family (NW)

Capítulo 444: Incluso Si Respiras Tranquilamente (4)

Choi Han miró el ceño fruncido de Cale y comenzó a pensar en Raon.

¡Si Raon estuviera aquí!

Raon podría teletransportarlo con magia o flotarlo en el aire.

”Todavía está el Sonido del Viento de Cale-nim, pero…’

Cale también podría hacer flotar a Choi Han con su Sonido del Viento. Sin embargo, la Estrella Blanca había creado una gruesa pared de viento alrededor de la sala para dificultar el escape de Cale y Choi Han.

“La gente en el pasillo se cargará contra nosotros mientras atravesamos el muro de viento de la Estrella Blanca”.

Luego, seguramente habría personas que resultaron heridas.
Ya estaban cargando imprudentemente contra él.

“Debemos, salvarlo..”

Choi Han empujó a un caballero que le quitaba la ropa. Sin embargo, solo empujó la mano del caballero, haciendo que el caballero que no estaba herido solo se tambaleara.

Boom.

El caballero cayó hacia atrás. Sin embargo, nadie le prestó atención.

“Lo… salvaré…”

De hecho, un niño pequeño que parecía ser un sirviente trató sin descanso de agarrar la ropa de Choi Han. Choi Han apartó suavemente la mano.

Estas personas definitivamente cargarían contra él mientras intentaban atravesar el muro de viento.

¡Ni siquiera pueden desmayarse!

Choi Han lentamente comenzó a fruncir el ceño. La Estrella Blanca parecía haberse dado cuenta de esto cuando Choi Han notó que la Estrella Blanca sonreía mientras lo miraba.

“¿Qué pasa? ¿No ves ninguna salida? Supongo que es difícil teletransportarse porque no hay nadie aquí que pueda usar magia. ¿Dónde podría estar el joven Dragón?”

Por eso separó a Raon de nosotros.

Choi Han se dio cuenta de que la Estrella Blanca se estaba burlando de él cuando supo la situación y se alejó. El humo rojo rodeó a la ilusionista que estaba creando símbolos con sus manos.

‘¿Por qué no veo a un médium?’

No vio un bastón como el de Gashan ni un talismán. Sus manos estaban vacías, pero estaba seguro de que debía tener la médium en algún lugar de su cuerpo.

El ilusionista notó la mirada de Choi Han y comenzó a hablar.

“¿Qué estás buscando tanto? Quédese quieto y déjenos atraparlo. Solo déjate atrapar. Esa es la pequeña consideración que te estoy dando”.

“… ¿Por qué debería quedarme quieto?”

“No puedes dejar que tu corazón se lastime. ¿No aprecian ustedes, señores, todas y cada una de las vidas? ¿Qué daño sufrirían sus familias si ese niño o alguno de esos civiles muriera?”

La voz que estaba cambiando entre respetuosa e irrespetuosa resonó en los oídos de Choi Han como un instrumento.

“El dolor en sus corazones se convertirá en tu dolor, ¿no? ¿No es así, buen señor Choi Han?”

Ooooooong-

Choi Han notó que las flechas de luz del Rey Oso Sayeru apuntaban hacia él.

“Empezaré a matar a estas personas una por una si te resistes. Estas personas no están de nuestro lado, solo son personas pobres a las que engañamos”.

Sayeru se burló de Choi Han. Su mirada estaba llena de certeza de que Choi Han no podría hacer nada.

‘Así ha actuado el grupo de Cale Henituse todo este tiempo’.

Preferían salvar a una persona más incluso si eso significaba que dejarían escapar al líder enemigo.

¿Qué tan estúpido fue eso?

clic.

Choi Han volvió a poner su espada en la vaina. Ambas manos estaban vacías.

“Como yo esperaba”.

Realmente eran este tipo de personas.

Por eso no podrían detener a Sayeru ni a la Estrella Blanca. Eran tontos y no sabían que se requerían sacrificios para un bien mayor.

Sayeru no pudo evitar reír mientras miraba a Choi Han que tenía la cabeza gacha ya Cale que tenía una expresión en blanco. Sintió como si toda la frustración de su mente se desvaneciera.
Fue en ese momento.

Un pequeño objeto flotó en el aire antes de caer al suelo.

Tang, tang!

Algo más cayó y rodó por el suelo.

Dos insignias que brillaban con luz dorada quedaron cubiertas por la suciedad del suelo.

Oooooong, oooooong.

La luz roja se movía sigilosamente alrededor de la placa.

Sayeru notó que Choi Han levantaba lentamente la cabeza. El estaba sonriendo.

“Soy buena persona-”

Choi Han volvió a mover ambas manos.

¡Riiiiiiiiiip, riiiiiiiiiip!

Extendió la mano hacia la ropa de las personas que se le pegaban.

“¡No!”

Sayeru cargó hacia Choi Han en el momento en que el Ilusionista gritó. Choi Han abrió los puños cerrados.

Tang, tang.

Las insignias de oro cayeron al suelo.

Estas eran las insignias con el escudo del territorio que estaban en los nuevos trajes o uniformes de sirvientes de todos.

Choi Han retiró violentamente esas insignias. Apartó las insignias de las personas que se le pegaban y de las que le agarraban las piernas.

Riiiiiip.

Una persona que cargaba hacia él dejó de moverse como si fuera una marioneta que perdió sus hilos.

“¿Pensaste que ni siquiera me daría cuenta de eso?”

También le quitó la insignia a la ropa del joven sirviente.

“¿Crees que soy una buena persona? Qué absurdo”.

“¡Bastardo!”

Sayeru llegó instantáneamente frente al riendo Choi Han. Las comisuras de los labios de Choi Han se torcieron mientras miraba hacia Sayeru.

“¿Por qué estás cargando personalmente contra mí en lugar de disparar la flecha de luz cuando dijiste que los ibas a matar?”

Había una insignia en la parte superior de la palma de Choi Han.

“Parece que no están escuchando sus órdenes sin estas insignias”.

“¡Cállate!”

El puño de Sayeru que estaba cubierto de luz se dirigió al corazón de Choi Han.

¡Baaaaang!

Las personas alrededor de Sayeru y Choi Han fueron empujadas hacia atrás junto con el ruido explosivo. Las personas que todavía estaban atrapadas en la ilusión continuaron cargando hacia Choi Han.

Choi Han estaba en el centro sosteniendo el puño de Sayeru con una mano.

Siiiiizle.

Su palma comenzó a arder.

“¡Y tú!”

Sayeru trató de sacar su puño, pero no fue fácil. De hecho, la mano de Choi Han atrajo el puño de Sayeru hacia él.

Luego levantó la placa que estaba liberando sigilosamente un humo rojo frente al rostro de Sayeru.

“No puedes disparar la flecha de luz porque no puedes destruir estas insignias. Los estás usando para crear la ilusión de controlar a estas personas. ¿Estoy en lo cierto?”

“¡Bastardo!”

La otra mano de Sayeru que estaba cubierta de luz apartó la palma de Choi Han.

Tang, tang.

La placa rodó de nuevo por el suelo.

“¡Uf!”

Entonces el cuerpo de Sayeru fue empujado hacia atrás. Miró hacia Choi Han que lo estaba empujando hacia atrás. Choi Han ya estaba quitando rápidamente las insignias de la ropa de otras personas.

“¡Detenlo!”

Sayeru se mordió los labios y se volvió hacia La Estrella Blanca después de escuchar el grito urgente del Ilusionista. Luego se estremeció. Cale Henituse que estaba luchando contra la Estrella Blanca .. Sayeru hizo contacto visual con Cale.

Cale lentamente comenzó a hablar.

“Pensé que habías escondido algo grande”.

“…¿Qué dijiste?”

Cale miró hacia la Estrella Blanca y el Ilusionista antes de que Sayeru pudiera responder.

“¿Es esto? ¿Hmm?”

Se acercó a la Estrella Blanca. Vio a Choi Han quitarse las insignias por un momento antes de comenzar a fruncir el ceño nuevamente y mirar hacia la Estrella Blanca.

“¿Pensaste que no me daría cuenta de que estaban bajo una ilusión? ¿Eh?”

Estaba frunciendo el ceño con incredulidad.

“… ¿Notaste la ilusión?”

El ilusionista miró a Cale en estado de shock, pero Cale solo estaba mirando a la Estrella Blanca.

“Dijiste lo siguiente cuando caí por primera vez en el salón de banquetes. —Cale Henituse, pareces un desastre. es lo que dijiste”.

Cale había notado algo en el momento en que dijo eso.

“No quiero presumir de mi propio nombre, pero… soy algo famoso”.

Es posible que los ciudadanos comunes del Reino de Caro no lo conozcan, pero incluso los caballeros, administradores, magos y el señor de un territorio de la esquina como este seguramente se enterarán de las cosas que suceden en todo el reino.

Esto fue especialmente cierto para el señor del territorio o el administrador principal que habría escuchado el nombre y visto una imagen de la persona que había jugado un papel fundamental en la salvación de su reino.

¿Pero no sabían de él?

“El hecho de que nadie aquí reconociera mi nombre significaba que no eran normales”.

Se sentía extraño decirlo él mismo, pero…

“Soy un héroe en el Reino de Caro”.

No había forma de que este bastardo de un señor del territorio que tenía un primo famoso en la política central del reino no supiera el nombre de Cale.

“Ja, y aquí estaba pensando que algo grande iba a suceder”.

En el momento en que la Estrella Blanca y Cale solo se miraron el uno al otro…

“¿Es esto?”

Cale luego desapareció frente a la Estrella Blanca.

Swoooosh-

El sonido del viento hizo eco dentro de la habitación.

“¡Uf!”

El ilusionista sintió que alguien la agarraba por la nuca. Su rostro se vio obligado a volverse. Cale, que casi se había teletransportado detrás de ella, estaba sonriendo.

“Elimina las ilusiones a menos que quieras morir. ¿Entendido?”

Los ojos del ilusionista estaban temblando.

“No soy tan buena persona como crees que soy. ¿De verdad crees que soy un santo o un héroe?”

Era mejor si podían evitar que la gente saliera herida o muriera, pero…

Cale no quería salvar la vida de otras personas sacrificando las vidas de su gente. Por eso sabía que era egoísta y cruel.

Estaba diciendo esto porque sabía que ese era el caso.

“Deshazte de las ilusiones, ahora”.

Swoooooooosh-

Una violenta ráfaga de viento se formó en la otra palma de Cale. Miró hacia Sayeru y la Estrella Blanca mientras hablaba con el Ilusionista.

“A menos que desees morir. No soy alguien que amenaza a los demás. Soy alguien que solo dice la verdad”.

Los ojos del ilusionista estaban temblando. Era más sensible a las emociones de las personas que la mayoría después de hacer que las personas vieran ilusiones durante tanto tiempo. Por eso pudo decir que Cale estaba siendo honesto.

Su boca se abrió lentamente de nuevo.

“¡T-todos ustedes, tiren sus insignias!”

La gente que corría hacia Choi Han dejó de caminar. Luego se quitaron las insignias de la ropa.

Las insignias doradas cayeron al suelo una a una.

La gente que rodeaba a Choi Han cayó lentamente al suelo y se desmayó una vez que las insignias cayeron al suelo.

Choi Han dejó escapar un suspiro de alivio.

Sin embargo, las pupilas de Choi Han pronto comenzaron a temblar.

“¡Que demonios!”

Las numerosas insignias doradas en el suelo…

Las insignias que cayeron de las personas que rodeaban a Choi Han parecían estar creando un círculo con Choi Han en el centro.

Oooooooong- ooooooong-

El humo rojo comenzó a subir instantáneamente de las insignias.
Cale movió su viento.

¡Bang!

Las manos del ilusionista que estaban creando símbolos dejaron de moverse con una pequeña explosión. El ilusionista sonrió brillantemente hacia Cale.

“¿Cuál es el punto de agarrar mi cabeza? Mis manos todavía se movían. Ya terminé el fichaje”.

‘¿Qué?’

Cale inmediatamente comenzó a hablar después de ver que el humo rojo comenzaba a subir.

“¡Choi Han, esquiva!”

Sin embargo, Choi Han no pudo moverse. No sabía por qué, pero estaba congelado y no podía moverse en absoluto. Cale escuchó la voz temblorosa de Choi Han en ese momento.

“¡Por qué, de repente, la oscuridad-!”

Se había caído un candelabro, pero el salón de banquetes seguía iluminado. Fue muy brillante. La cara de Cale se arrugó en un ceño fruncido cuando tiró del cuello del ilusionista.

“¿Qué diablos hiciste?”

Cale pudo mirar a los ojos del ilusionista por primera vez. Entonces se dio cuenta de su error.

El Ilusionista era diferente a los otros subordinados de la Estrella Blanca que Cale había conocido antes. Cale podía ver los ojos de una bestia salvaje que aún no se había rendido.

Ella le susurró tranquilamente al oído de Cale.

“Sr. Cale, debes estar en igualdad de condiciones si quieres hacer un trato conmigo. Creé ese mismo terreno para ti”.

Pudo ver a Choi Han que no sabía qué hacer mientras lentamente se veía rodeado por el humo rojo.

Swooooooosh-

Cale intentó enviar su ráfaga de viento hacia el humo rojo.

“Ah, Choi Han podría resultar gravemente herido si atacas”.

Sin embargo, no pudo actuar precipitadamente después de escuchar el comentario del ilusionista. Miró a Cale y continuó hablando alegremente.

“Está bien, te amenazaré también. Suelta mi cuello si no quieres ver a Choi Han cortarse su propio cuello. ¿Entendido?”

También escuchó la voz de la Estrella Blanca.

“¿Preguntaste si era solo esto? Por supuesto no”.

La Estrella Blanca que estaba observando lentamente la expresión rígida de Cale comenzó a hablar con una expresión más satisfecha.
Se había preparado a fondo después de haber sido derrotado varias veces.

“¿Crees que solo preparé lo falso?”

¡Boom! ¡Boom!

El suelo empezó a temblar.

Este estruendo fue similar al estruendo que sintió Cale mientras estaba en la ciudad de Young-en.

No, fue más fuerte. Se sintió como si el suelo se estuviera partiendo.

“¡Que demonios!”

“¿Por qué estoy aquí?”

“Ugh, ¿dónde está este lugar?”

El estruendo hizo que algunas personas se despertaran confundidas. La gente miró a su alrededor tratando de localizar el origen del ruido y logró encontrarlo.

Shhhhhhhhhhhhhh-

La pared de viento de la Estrella Blanca desapareció lentamente. Entonces vieron la serpiente de fuego que se dirigía sobre los muros del Castillo del Señor.

Pero la serpiente de fuego pronto dejó de moverse también.
La gente tampoco miraba a la serpiente de fuego.

“…D-Dios mío…”

¡Boom!

El suelo tembló cuando apareció una gran columna de fuego en el lado oeste del Territorio Dubori.

La columna de fuego que atravesaba el suelo no parecía un fuego normal.

“…¿M-magma?”

En el momento en que alguien dijo la palabra que mejor lo describió…

Boom-, boom, boom!

El estruendo continuó antes de que aparecieran grandes pilares de fuego en las cuatro direcciones.

Cale observó cómo la Estrella Blanca abría una ventana occidental y se dirigía hacia la terraza.

La Estrella Blanca levantó la mano con una expresión que parecía decir que no le importaban Cale o Choi Han. La mirada de Cale se centró en esas manos.

Craaaackle-

La espada de fuego ardía más brillante que nunca en la mano de la Estrella Blanca.

‘…Es diferente’.

Esto era diferente a la espada de fuego que Cale había visto en el pasado. Podía sentir que la espada frente a él en este momento era significativamente más fuerte que en el pasado.

Esta fue probablemente la verdadera espada de fuego.

“Cale Henituse, deberías saber sobre la Espada de los Desastres después de luchar contra Syrem, ¿verdad?”

La Espada de los Desastres a mitad de potencia del falso Dragon Slayer. ¿Qué tan fuerte había sido?

Cale y Raon habían luchado durante la batalla del territorio Henituse para defenderse de esa espada. El escudo de Raon se había roto y Cale tuvo que esforzarse al máximo para bloquearlo.

“Añadí fuego a esa espada. ¿No es el fuego un símbolo del desastre?”

La Estrella Blanca que fue el último Dragon Slayer había agregado su poder antiguo de atributo de fuego a la Espada de los Desastres.
El fuego que había poseído la antigua Estrella Blanca fue un desastre.

El fuego era una de las cosas más fáciles de temer para la gente.

“Traeré un verdadero desastre de fuego”.

Su espada apuntaba más allá del territorio Dubori y hacia la Tierra de la Muerte.

La Tierra de la Muerte.

El único lugar entre las Regiones Prohibidas del Continente Occidental que se dice que fue creado por manos humanas.

El desierto que se conoció como la Tierra de la Muerte después de la muerte del último Nigromante.

Y el Territorio Dubori que se encontraba junto a ese desierto.

La Estrella Blanca habló tranquilamente como si estuviera lidiando con una brisa pasajera.

“Crearé una nueva razón para que esta tierra se llame Región Prohibida”.

Traería la muerte a esta tierra a través de un desastre de fuego esta vez.

“¿Entonces que vas a hacer? Cale Henituse, tu joven Dragón no está a tu lado. No puedes escapar”.

La Estrella Blanca estaba llena de anticipación. Estaba ansioso por ver cómo reaccionaría este hombre cuando lo dejaran pelear solo, cuando estuviera en sus límites.

Observó detenidamente la expresión en blanco de Cale.

La mente de Cale estaba ruidosa en ese momento.

– ¡Ese maldito bastardo que necesitamos golpear con un palo! ¡No será suficiente con maldecir a ese bastardo hasta el momento en que se vaya de este mundo! ¡Tenemos que maldecirlo hasta la muerte! ¡Aaaaaaaaaah!

Era una voz clara que estaba jurando tan groseramente.

– Voy a matar a ese bastardo.

Era la voz del Agua Comiendo el Cielo.