Maou-sama Retry! (NL)

Volumen 7

Capitulo 9: La Capital Arde

Parte 19: Los Enfoques De Butterfly

——El Casino de Oro, Sala de Juntas.

Los asesores del Señor Demonio estaban trabajando duro, Tahara solo tenía una expresión preocupada, gimiendo y rascándose la cabeza a veces. Mientras Kondo estaba jugando videojuegos debajo de la mesa, ni Tahara ni Yu esperaban productividad de él de todos modos.

“¿Hay algo mal?” Yu preguntó.

“Es viento en popa… Pero dependiendo de las áreas que establezca el jefe, vamos a estar cortos de mano de obra calificada y no calificada”.

Las tierras baldías del este de Holylight tenían una población pequeña para empezar, y simplemente nivelar la tierra desértica deshabitada requeriría un gran número de manos en cubierta. Las horas de trabajo necesarias se vieron agravadas por las altas expectativas de calidad de Tahara y la falta de maquinaria pesada en este mundo.

“Incluso yo no puedo clonar personas o convertirlas en técnicos calificados de la noche a la mañana”.

“Lo sé.” Yu podía eliminar cualquier dolencia y curar cualquier herida, pero no se le dio la capacidad de crear seres humanos desde cero ni el poder de resucitar a los muertos, por supuesto. “Si queremos aumentar la población, necesito dar a luz a la descendencia del Secretario”

“Sí, buena suerte con eso. Realmente lo digo en serio,” Tahara despidió a Yu, habiendo esperado el comentario. Miró hacia el techo. Ni siquiera un supergenio como él podría solucionar un problema de población.

Sin embargo, mientras el Señor Demonio estaba en un sueño ebrio, Ren había enviado una Comunicación.

Hola, Tahara.

¡¿Ese es Ren?! ¡Hombre, he estado esperando a que vengas durante años!

Propongo que intercambiemos información sobre nuestra situación actual. ¡Secundo eso!

Transmitieron lo que habían experimentado en este mundo hasta ahora en unas pocas palabras, y cada uno de ellos llenó los vacíos.

En Infinity Game, a los asesores se les dio casi rienda suelta cuando se trataba de cualquier cosa relacionada con la arena. En otros asuntos, sin embargo, estaban en constantes luchas de poder con los altos mandos del Imperio y sus diversas facciones.

Por eso Ren y Tahara disfrutaron de la libertad y la emoción de diseñar estrategias y construir un arco político para el Señor Demonio. Si bien su comunicación fue principalmente una actualización bidireccional, no obstante, parecían estar disfrutando del proceso.

Hay casi dos mil residentes muriendo de hambre en los barrios bajos aquí, explicó Ren, no para volverse pícaro, sino para mantener los pequeños asuntos fuera del plato del Señor Demonio, especialmente después de que él tan sabiamente (o eso pensaba ella) la iluminó sobre la futilidad de salvar sólo un puñado de personas a corto plazo.

¡Jefe mencionó que se hace cargo de la mano de obra desde el exterior! ¡Envíalos a todas partes, como ayer! ¡Diles que tenemos comida para chuparse los dedos o algo así!

No creo que puedas decir eso.

¡Vamos!

A diferencia de Ren, Tahara no se engañaba de que el Señor Demonio estuviera haciendo algo de esto por bondad, y creía que era simplemente una táctica para resolver su escasez de mano de obra.

Una vez que Ren comenzó a volver a contar el enfrentamiento del Señor Demonio contra el Jack of All Trades, los hombros de Tahara comenzaron a temblar hasta que se echó a reír justo cuando concluía la Comunicación.

“¡Bah ha ha ha! ¡Nuestro jefe está frío como una piedra!”

“¿Qué fue tan gracioso que te hizo parecer aún más un idiota?”

“Qué despiadado es el jefe. Tan pronto como aterrizó, enfrentó a dos osos entre sí”.

Tahara transmitió la historia, lo que provocó algunas risas inusuales en Yu, ya que la historia parecía atraerla. Encontró puro placer en la idea de tener a los conejillos de indias peleando entre sí sin que su grupo moviera un dedo.

“Enfrentando la suciedad entre sí con una moneda de bronce…” Yu finalmente se rompió, tapándose la boca para contener su propia risa, sus hombros ahora temblando.

Kondo estaba temblando por otra razón completamente diferente, pero decidió no acercarse a lo que estaba pasando y volvió a mirar su videojuego.

“Todo eso a costo cero también”, agregó Tahara. “No puedo creerlo. Si no avanzamos, él terminará de limpiar el norte”.

“Estoy de acuerdo. Mientras el Secretario se haga cargo de Euritheis, me aseguraré de que se unan contra Dona”.

“Puedes apostar. Tomemos a cualquiera que podamos y terminemos con esto”.

Tanto Tahara como Yu tenían una habilidad aterradora llamada Propaganda. En el juego, la habilidad era una especie de mecanismo de defensa que ocultaba diversa información sobre el usuario, pero tenía un uso mucho más variado en este mundo, ya que también podía usarse para reforzar rumores y crear un clima social en beneficio del usuario. . Con dos usuarios de una habilidad tan siniestra, podrían hacer un daño increíble al mundo, ciertamente lo suficiente como para sumir a una nación en el caos.

“Hemos estado reprimiendo Propaganda, pero ahora no podemos hacer nada”.

“Estoy de acuerdo.”

“Oh, y la otra Butterfly está en camino”.

“Estamos llegando a los toques finales”.

Hablaban de la hermana de la Señora, la reina del mundo del arte. Una vez que la tuvieron de su lado, este Juego estaba a punto de terminar.

Harts y los nobles militares ya estaban preparando sus fuerzas con los refuerzos de la Señora, y mientras el Señor Demonio y Ren realizaban su comedia romántica en el norte, los otros asesores trabajaban incansablemente.

Tahara y Yu inundarían Holylight con los siguientes rumores:

“Harts se está preparando para acabar con Dona”.

“Los militares y los nobles centrales han unido fuerzas, reuniendo soldados para la batalla”.

“Grandes cantidades de dinero de Suneo están respaldando el esfuerzo”.

“Dona envió un asesino contra la Doncella Sagrada Luna”.

Cuando la Señora filtró estos rumores a los nobles invitados de la aldea, Tahara los compartió con los trabajadores y Yu con sus pacientes. Como los nobles eran criaturas extremadamente interesadas en la autoconservación, serían enviados a un gran nerviosismo. La estructura de poder de Holylight anterior al Señor Demonio habría dictado que cualquiera se pusiera del lado de Dona sin pensarlo dos veces, pero el respaldo financiero de Suneo complicaría la decisión. En una guerra civil a gran escala como ésta, la neutralidad no era una opción; elegir el bando equivocado, y todo el clan caería en desgracia.

“Bada bing, bada boom. Nos convertimos en un traidor a la nación”.

El proceso fue tan fácil para ellos como cocinar una receta de una sola olla, mientras que los efectos de sus intrigas resultarían catastróficos. Tan pronto como Tahara y Yu pusieron sus ojos en Dona, sus días estaban contados.

“Ahora, ¿cómo voy a jugar con esta Dona? Tal vez le dé de comer mordisco a mordisco a mis Luciérnagas Hambrientas, empezando por los dedos de los pies”.

“¿Y cuáles son esos, exactamente…? ¿Algún tipo de insecto?”

“Brillan maravillosamente cuando se les alimenta con carne humana. Incluso muestran diferentes colores según el día de la semana”.

“Olvidé tu loca colección de animales… No es que quiera una gira”, Tahara se rio entre dientes torpemente y desvió la mirada, pero no por lástima por Dona. Tahara tenía la filosofía de que todos sus némesis deberían ser asesinados, y reprimirse contra ellos de cualquier forma podría ser en su propio detrimento.

“El Secretario está con Ren, ¿verdad…?” Yu preguntó.

“¿Hm? Sí.”

“Ese santurrón está jugando a ser la mascota del maestro, sin duda”.

“No estoy tan seguro de eso…”

Tahara recordó que el Secretario solo veía a Ren como una de sus piezas, sin ninguna emoción hacia ella de una forma u otra. Siempre buscó talento, no individual. Tahara también sabía que se le aplicaba la misma política. Si bien había sentido una especie de diversión por parte de Kunai hacia Akane o la ridiculez de Kondo, parecía más una observación curiosa que cualquier forma de afecto. Tahara asumió que la actitud del Señor Demonio hacia Luna seguía el mismo principio.

“En cualquier caso, creo que el jefe tiene más posibilidades que ahora”.

“¿Qué quieres decir?”

“Sí, todavía da miedo… pero se ha relajado más, como si pudiera sentarse”.

“Estoy seguro de que ayuda quitarse el peso del Imperio de sus hombros”.

El Castillo de los Insomnes fue una vez el hogar de lo mejor de lo mejor de todos los rincones del Imperio, pero aún constituían una fuerza minúscula en comparación con el resto de la tumultuosa nación. Estaba custodiado por Hakuto Kunai y sus ocho asesores, apoyados por cinco mil autómatas y una flota decente de acorazados para intimidar a los jugadores, pero eso no se podía comparar con la totalidad del Imperio que abarcaba más del 60% del mundo.

Ahora que el resto del Imperio ya no estaba respirando en sus cuellos, los consejeros se sintieron abrumados por una sensación de libertad.

“Si no fuera por nuestro amable jefe, nos hubieran ahorcado a todos en algún momento”.

Yu estuvo de acuerdo con Tahara. Los asesores solo pudieron mantener su estatus debido a la implacable intriga de Kunai que eliminó a cualquier oponente político.

“Fue divertido verlo patear a todos nuestros adversarios de sus pedestales, incluso obligándolos a alejarse ellos mismos. ¿Recuerdas a ese Sando que seguía viniendo tras nuestros asientos? Después de su caída, se vio obligado a unirse a la refriega entre los jugadores. ¡La forma en que lloriqueaba…!”

“¡Sí, lo recuerdo! Estaba llorando, todo mocoso. ¡Tomó unos veinte tiros de los jugadores para volarlo en pedazos!”

Yu rio de nuevo. “Un final apropiado para esa inmundicia”.

Mientras tanto, Kondo, en un esfuerzo por evitar participar en cualquier parte de la conversación, se concentró en su juego de tratar de ayudar a un anciano a escapar de un jardín. El sonido de su videojuego fue silenciado, posiblemente porque otro asesor lo reprendió. “Oye, Yu… ¿Cuánto recuerdas de los viejos tiempos?”

“¿Eh? ¿No eres demasiado joven para tener demencia?”

“Eso no es lo que estoy diciendo”.

Tahara recordó haber masacrado a la interminable corriente de jugadores, compuesta por todos, desde criminales, ciudadanos de la capital e incluso voluntarios. De lo contrario, tenía algunos recuerdos poderosos de los días felices que pasó con su hermana en el pasado distante. Sin embargo, sus otros recuerdos eran borrosos a veces, como si estuvieran encerrados en una niebla blanca, donde ni siquiera podía recordar la línea de tiempo de algunos de ellos.

Le expresó esto a Yu, y ella había experimentado un fenómeno similar.

“¿Qué opinas? ¿Algún tipo de efecto secundario de venir a este mundo?”

“Teniendo en cuenta que realmente estamos en otro mundo por completo… no puedo negar la posibilidad”.

“¿Y tú, Kondo?”

“¿Eh…? Yo sólo recuerdo haber jugado videojuegos… ”

“Debería haberlo sabido mejor antes de preguntarle”.

Los consejeros hablaron de esto y aquello mientras terminaban su trabajo, pero no se enterarían hasta dentro de algún tiempo de que incluso el don de Euriteis había caído en desgracia.

***

——Un camino de viaje hacia el este de Holylight.

Mi hermana tonta. ¿Cuánto tiempo va a perseguir ese sueño imposible suyo…?

Un carruaje gigante de alta gama rodaba por la carretera rodeado por una gran cantidad de guardias, obviamente protegiendo a una persona de gran estatus. La bandera ondeando sobre el carruaje representaba una mariposa amarilla que significaba la presencia de Buttersauce Butterfly, un noble entre los nobles. Teniendo en cuenta la influencia adicional de su hermana, la cresta tenía un peso significativo en Holylight.

¿Crees que soy un caso de caridad? Ya verás… Buttersauce se rio entre dientes amenazadoramente, su robusta figura temblaba. Tenía un papel en la mano: una invitación para pasar una noche en el Complejo de Aguas Termales de Rabbi. Su hermana le había enviado esta invitación hace mucho tiempo, que Buttersauce había estado ignorando. Después de que ella y su hermana prácticamente no habían tenido contacto durante años, Buttersauce quería escupir sobre esta caridad que su hermana había decidido de repente lanzarse sobre ella.

Sin embargo, a medida que la reputación del Complejo de Aguas Termales creció con el tiempo, Buttersauce cambió de opinión. Viajar era una parte esencial de la sociedad noble, especialmente para el líder de una facción como Buttersauce.

Mi estúpida hermana que nunca aprendió a crecer… Me pregunto qué ridículo lío está causando para organizar una fiesta de lástima por sí misma.

Las hermanas se habían separado por una razón: su búsqueda de la belleza. Debido a una maldición ancestral, ambas hermanas sufrieron un aumento de peso inexplicable desde sus años de formación, que solo se agravó con la edad. Su peso se había convertido en el blanco de muchas bromas en la glamorosa alta sociedad, lo que llevó a Buttersauce a aislarse de los demás, encerrándose. Mientras tanto, Butterscotch se recuperó y siguió asistiendo a eventos de la alta sociedad a pesar de las burlas y el ridículo, vertiéndose en una cantidad casi patética de energía para perder peso.

Estúpida hermana… Tus esfuerzos finalmente no sirvieron para nada. Buttersauce se burló, casi queriendo degradar a su hermana por causar infructuosamente conmoción en eventos nobles.

Ella, por otro lado, había encontrado el mundo de las bellas artes y profundizó en su expresión de belleza. Si no podía volverse hermosa ella misma, se rodearía de belleza. Además, Buttersauce comenzó a crear su propio arte.

Butterscotch había insultado la decisión de Buttersauce como cobardía, y Buttersauce respondió que su hermana estaba desperdiciando su vida persiguiendo un sueño imposible.

Pasaron años desde su pelea, e incluso cuando asistieron a las mismas funciones, nunca se miraron a los ojos.

Al menos me he sentido un poco más ligera últimamente… El tamaño de la salsa de mantequilla usualmente desgasta mucho sus huesos y articulaciones, provocando dolores en todo el cuerpo. Combinado con la presión sobre sus hombros y espalda por estar sentada y pintar durante horas seguidas, su estilo de vida estaba causando mucho daño a su gran cuerpo.

“Estamos casi en el pueblo de Rabbi, señora”, gritó el cochero.

A través de la ventanilla del carruaje, Buttersauce vio la tierra seca del páramo del este. Era casi inconcebible que su hermana, con su afinidad por la ostentación y el glamour, eligiera recluirse aquí para su rehabilitación.

E incluso estrechó la mano de esos salvajes nobles militares… La piedad parpadeó en los ojos de Buttersauce. Ella vio esto como la última rabieta de su hermana, que involucró a toda la nación. Como si pudiera escuchar a su hermana pedir ayuda, Buttersauce frunció el ceño. Estúpida, estúpida hermana… ¿Cuándo saldrás de este engaño tuyo?

Ya exhausta, miró por la ventana del carruaje y soltó un “¡Oh!” cuando vio lo que parecía ser un bosque. Inmediatamente llamó al cochero para que se detuviera. Si bien apenas podía ver a través de la tormenta de arena, la silueta de un bosque estaba inconfundiblemente allí.

“¿Cómo hay un bosque aquí…? Espera… de alguna manera es diferente de cualquier bosque que conozco”.

Buttersauce se bajó apresuradamente del carruaje y comenzó a dibujar rápidamente en el cuaderno de bocetos que siempre llevaba consigo. Pensó que había visto un destello de algo divino en esos bosques. Algún tipo de magia pura que nunca había visto antes. Era como si Buttersauce, con su buen ojo para la belleza, estuviera contemplando una gran cascada que emanaba una especie de magnificencia que llegaba hasta el alma.

“No me digas… ¿Mi hermana construyó estos bosques solo porque no había nada por aquí?” Buttersauce se burló, imaginando el costo astronómico de lograr tal cosa. Por supuesto, ella gastaba mucho por derecho propio cuando se trataba de arte.

Cuando Buttersauce estaba terminando su boceto rápido, escuchó una voz memorable en su oído.

“Ese es el Bosque de la Sanación. Le despertó el interés, lo supongo…”

Buttersauce se preguntó cuánto tiempo había estado de pie en silencio el hombre que vestía un traje de Ciudades-Estado. Sus guardias comenzaron a reaccionar ante Tahara con su esmoquin, pero Buttersauce los detuvo levantando la mano.

“Es encantador… Casi no puedo creer que mi hermana fuera responsable de eso”.

“Ella no lo hizo, me temo. El bosque fue construido por nuestro líder, Hakuto Kunai. Dentro del pueblo, hay una fuente histórica impresionante”.

“Una fuente… ¿Es ese tu intento de humor?” Buttersauce soltó una risa seca.

Los árboles se podían plantar por la fuerza, incluso en el desierto, aunque a un costo ridículo, pero no podía existir una fuente de agua en ningún lugar del este de Holylight.

“Los deseos de nuestro líder se hacen realidad…”

Los ojos del hombre brillaron de color azul por un momento, y el corazón de Buttersauce latió con fuerza. Ella vio que él era un aturdidor cuando lo notó por primera vez, pero esa mirada despertó una bestia femenina dentro de ella que había permanecido dormida durante mucho tiempo.

“Desafortunadamente, nuestro líder está fuera en este momento, pero nos ha dado instrucciones para brindarle la bienvenida más cálida que nuestro pueblo tiene para ofrecer… Bienvenida al mundo de nuestro líder, señora…”

Buttersauce tomó la mano de Tahara y sintió un calor ardiente a través de su cuerpo: tal vez una punzada de romance.

Donde esa mano la llevaría, esperaba un mundo creado por el Señor Demonio, un mundo que nadie más podría haber concebido. La otra Butterfly ahora se acercó al precipicio de ese mundo.

Si bien los malentendidos solo se aceleraron en torno a las payasadas del Señor Demonio, otra batalla estaba a punto de comenzar en la aldea de Rabbi. Con los ambiciosos nobles reuniendo sus batallones hacia el oeste, la agitación en Holylight se acercaba a un punto de ebullición.

Un gran caos y destrucción finalmente allanarían el camino hacia un milagro.