Sekai Saikou no Ansatsusha (NL)

Volumen 3

Capitulo 4: El Asesino Diseña Un Método Para Matar Demonios

En un torbellino de acontecimientos inesperados, se me había impuesto el deber de matar demonios y una posición más alta en la jerarquía aristocrática.

Si iba a llegar a la ceremonia de premiación, tenía que dejar Tuatha Dé en dos días. Eso significaba que hoy y mañana serían los únicos momentos en que tendría que agacharme y concentrarme en mi investigación.

Mientras bebía té en mi habitación, alguien llamó a la puerta. “Lord Lugh, estoy aquí”.

“¿Por qué nos llamaste tan de repente? ¿Paso algo?”

“Los he estado esperando a las dos”.

Entraron Dia y Tarte. Quería hablar con ellas sobre lo que había dicho mi papá. Las dos eran mis asistentes. Si me enfrento a un demonio, estarán allí conmigo. Necesitaban estar informadas de la situación.

“Tengo algo que necesito decirles a ustedes dos. El país me ha confiado una gran responsabilidad”.

Lo conté todo y ambas chicas reaccionaron con sorpresa.

“Nunca dejas de asombrar, Lord Lugh. ¡Esto suena como una gran promoción! ¿Cuál es ese rango especial?”

“Algo anda mal con la gente de este país. No puedo creer que forzarían un trabajo como matar demonios a un solo noble”.

Ambos parecían sorprendidos, aunque por diferentes motivos. Tarte estaba encantada con el reconocimiento de mi fuerza, mientras que Dia miraba las cosas con un poco más de cinismo. Pensé que esta última era la respuesta correcta.

“En primer lugar, ¿es posible matar a un demonio? Todas las investigaciones sugieren que solo el héroe puede hacerlo”, dijo Dia.

“No creo que lo sea. Luché contra el demonio durante la batalla en la academia. Pude matarlo, pero no pude mantenerlo muerto. Su poder eclipsó al mío en dos o tres veces. Corté esa cosa once veces y volvió a subir en cada instancia sin falta. Solo el héroe puede matar a un demonio”, respondí.

Esa batalla había sido aterradora. No importa lo que hiciera, esa criatura no se quedaría abajo. Sin embargo, cambiar los métodos por los que lo maté reveló algunas cosas. Pero no había podido hacer mucho uso de mis hallazgos en el meollo de la pelea.

“Entonces no puede hacerlo, mi señor. Parece que no tienes ninguna posibilidad. Los demonios parecen realmente difíciles de eliminar”, comentó Tarte.

“Eso es cierto. Por ahora”, dije.

“Entonces, ¿conoces una forma de derrotarlos después de todo?” cuestionó Dia.

“Eso es correcto. Cada vez que mataba al demonio, lo analizaba con mis ojos Tuatha Dé desde el momento de la muerte hasta el momento en que revivía. Hice lo mismo cuando Epona lo mató. Al hacerlo, pude construir una hipótesis sobre por qué la tarea es algo que solo el héroe puede hacer”.

“Lugh, eso es increíble. Todas las naciones del mundo han estado buscando incansablemente una forma de matar demonios durante años”, comentó Dia.

Tratar con esas criaturas había sido un problema que asolaba al mundo entero durante siglos. Solo aparecían una vez cada doscientos años, pero siempre traían muerte y destrucción con ellos.

El país de origen del héroe sobreviviría, pero todos los demás sufrieron un destino trágico. El héroe solo fue enviado para ayudar a otras naciones después de que pagaron un precio escandalosamente alto.

Era un tema tan grave que algunas tierras aliadas tenían acuerdos que estipulaban el uso compartido del héroe en caso de que naciera allí.

“Debo mi realización a los ojos de Tuatha Dé. Fue solo porque podía ver el maná que lo descubrí. Ningún otro investigador del mundo ha tenido esa oportunidad”.

Sin la visión que poseía, era imposible encontrar la solución. Incluso el acto de acompañar al héroe al campo de batalla y observar a un demonio de cerca no habría sido suficiente. Si solo uno de esos muchos investigadores pudiera ver maná, podría haber encontrado las respuestas que buscaban tan desesperadamente.

“¡Eso sigue siendo increíble! Si su teoría resulta cierta, podría cambiar el mundo”, dijo Dia.

Monopolizar el método de matar demonios no parecía que valiera la pena. Estaba seguro de que el gobierno no querría que se divulgara esa información para poder usar al héroe como moneda de cambio con otros países. Sin embargo, como alguien a la fuerza con la tarea de matar demonios, cuantas más personas pudieran hacerlo por sí mismas, mejor.

“Es exactamente por eso que necesito concentrarme en hacer esto lo más rápido posible. Una vez que lo haga, les enseñaré a ambas”, dije.

“¡Okay! ¡Con usted enseñándome, estoy seguro de que podré hacerlo!” Tarte declaró.

“Te ayudaré a desarrollarlo. Estoy segura de que este método usa magia”, agregó Dia.

“Que así sea. Cuento con ustedes dos”.

Sería una carga pesada para mí llevarla sola. Pero con Dia y Tarte a mi lado, sentí que podía lograrlo.

“También tengo un regalo para las dos. Tarte, remodelé tu arma. Ahora tiene cámaras reemplazables que deberían facilitar la carga. Y Dia, te hice un modelo personalizado”.

“¡¿Realmente?! ¡El que me diste antes ya era increíble!”

“Es tan lindo y pequeño. Podré mantener esto conmigo en todo momento”.

Les pasé a las chicas sus revólveres. El de Dia era más compacto que de Tarte.

Incluso si Dia se fortaleciera con maná, no podría manejar el retroceso del arma de Tarte. Por esa razón, la convertí en un modelo menos poderoso.

“Tiene aproximadamente el tamaño de una mano, así que la he llamado pistola”. El cañón es corto, lo que facilita su manejo y ocultación. Desafortunadamente, la compensación es que es menos precisa. Tarte tiene la opción de acoplar un cañón largo. Pero Dia, si sientes que tienes tiempo para apuntar a larga distancia, usa Gun Strike”.

“Practicaré duro, mi señor.”

“El mecanismo de disparo rápido parece complejo. Producir esto con un solo hechizo parece casi imposible. Tu regalo es una bendición fantástica”.

Existía la posibilidad de que las chicas se convirtieran en objetivos en el futuro. Pensé que era mejor para ellos tener algún tipo de autodefensa disponible en cualquier lugar.

“Eso es todo lo que tengo que decir. Tarte, vuelve a tu entrenamiento. Dia y yo vamos a investigar cómo matar demonios”, instruí.

“Comprendido.”

“Estoy ansiosa por conocer tu hipótesis”.

No había tiempo que perder. Tuvimos que encontrar una manera de matar demonios antes de que aparecieran más.

***

“Lo primero que hay que tener en cuenta es la razón por la que no se puede matar a los demonios. Sus cuerpos son falsos, los demonios no están vivos en el sentido tradicional. Cada uno posee un núcleo que contiene cuál es su poder de existencia. Siempre que un demonio resulta herido, el núcleo puede desmontar la parte dañada del cuerpo y usar su poder para reconstruirlo”, expliqué.

“Tengo una pregunta. ¿Eso significa que si rompes el núcleo, el demonio morirá de inmediato?” Preguntó Dia.

“Solo si puedes conseguir que el núcleo se materialice. El núcleo es algún tipo de objeto espiritual o masa de poder. No hay nada físico que tocar allí”.

“Vaya, esto suena muy difícil”.

Me había dado cuenta de todo eso mientras mataba repetidamente al demonio que atacaba la academia. Mis ojos de Tuatha Dé pudieron captar la existencia del núcleo y el poder que se derramaba de él.

“La razón por la que el héroe puede matar demonios es que envuelven su cuerpo con una energía única. En la batalla, se extiende para crear un campo. El núcleo de un demonio se ve obligado a materializarse dentro de ese campo, perdiendo su capacidad de deconstruir y restaurar su cuerpo al mismo tiempo”.

“Entonces se vuelve incapaz de curar las heridas y el núcleo se puede romper, ¿verdad?”

“Correcto, lo que hace que matar sea simple. Solo necesitamos recrear esa fuerza que genera el héroe. Parecía formarse tomando energía y el maná natural del mundo y fusionándolos con una longitud de onda específica de maná físico. El héroe es naturalmente capaz de controlar el flujo de poder mágico que habita el mundo para obtener un equilibrio exquisito, pero tendremos que recrearlo con magia”.

Había dos tipos de maná. El primero fue el maná físico, que fluía dentro de nuestros cuerpos. También se la conocía como fuerza ódica. El maná natural fue el segundo. Esta fue la fuerza que enriqueció al mundo. Se dividió en cinco colores diferentes: uno para cada elemento básico, más una versión sin atributos.

“Es importante que hagamos la distribución correcta. El campo solo se formará cuando mezcles la proporción determinada de los cinco colores de maná natural con la longitud de onda requerida de maná físico y luego los pongas en armonía usando energía. El héroe puede hacer todo eso inconscientemente, pero será un desafío para nosotros”.

“Me duele la cabeza con solo escuchar eso. Pero creo que podemos hacerlo. Hay muchos hechizos que usan el poder del maná natural. Si puedo encontrar puntos comunes en sus fórmulas, debería poder deducir cómo recopilarlos. ¿Conoces la proporción?”

“Sí, lo vi durante la pelea. Si tenemos un hechizo que puede reunir los cinco colores del maná natural, sería posible formar la longitud de onda del maná físico que necesitamos y combinar los dos usando energía”.

“Lugh, estás haciendo que eso suene fácil, pero a menos que se pueda formar la longitud de onda del maná y controlar la energía automáticamente, nadie más que tú podrá usar este hechizo. Esas no son cosas de las que la gente normal es capaz”.

“Lo entiendo, pero una fórmula no puede controlar automáticamente el maná y la energía. Simplemente tendremos que practicar y dominar eso nosotros mismos. Tú y Tarte deberían poder hacerlo. Sin embargo, no estoy tan seguro de nadie más”.

“Esto va a ser un gran desafío, pero hagámoslo. El éxito significa poder matar demonios”.

“Eso es correcto. Confío en que esto funcionará. Desafortunadamente, incluso si terminamos el hechizo, aún tendrá un defecto importante”.

“¿Qué quieres decir?”

“Producir un campo que fuerza a los núcleos de los demonios a manifestarse exige grandes cantidades de maná. En el mejor de los casos, creo que apenas puedo manejarlo, incluso si llego al límite absoluto. Al usuario no le quedará mucho maná para el fortalecimiento físico mientras lo lanza en el campo”.

Si tomara la droga que eliminó el limitador de mi cerebro, probablemente podría seguir luchando, pero incluso entonces, estaría luchando contra una discapacidad severa.

“Una vez más, Lugh, solo tú podrás usar esto. Si incluso tú apenas puedes manejarlo con tu absurdamente alta capacidad de maná, ¿cómo se supone que alguien más podrá hacerlo?” Dia cuestionó.

Mi cantidad de poder mágico era un poco más de mil veces mayor que la de un mago promedio, y seguía creciendo. Fue la única área en la que superé al héroe. Mi tasa de descargas superó a otras diez veces. Sin embargo, a pesar de todo eso, apenas sería capaz de usar este hechizo. Un mago promedio no tendría ninguna posibilidad.

“Trabajemos para terminar esta nueva magia primero. Podemos preocuparnos por reducir la cantidad de energía que consume después. Independientemente de si soy el único que puede usarlo o no, todavía nos dará una oportunidad de luchar”.

Dejando a un lado los inconvenientes, esto nos permitiría matar demonios. Podría infligir daño letal usando un arma de bajo maná como una pistola o un explosivo. También podría liberar a Gungnir de antemano y luego producir el campo en el momento en que aterrizara. Había muchas posibilidades, incluso dejar la lucha a Tarte y Dia.

“Tienes razón, Lugh. Será muy difícil, pero estoy segura de que podemos hacerlo juntos”.

“Sí, sé que podemos hacerlo”, respondí.

“Además, tengo una solicitud”. Dia se sonrojó y juntó tímidamente las puntas de sus dedos índices. “Después de que terminemos este hechizo, llévame a una cita. No hemos podido hacer nada romántico últimamente. Sé que estás ocupado, pero no puedo evitar sentirme sola”.

Su rostro se iluminó con una sonrisa. Ella realmente era linda.

“Tan pronto como terminemos nuestro trabajo, te llevaré. Lo prometo.”

“¡Okay! No te eches para atrás, ahora”.

“Por supuesto. Yo también estoy deseando que llegue”.

Una cita con Dia sonaba preciosa. Era otra razón más para esforzarse mucho. De repente, me sentí lleno de motivación.