Saikyou Mahoushi (NL)

Volumen 6

Capitulo 36: Los Dos Encuentros

Parte 1

Alus y los demás abandonaron el cuartel general de Balmes con las primeras luces del día siguiente. Fueron Alus, Lettie, Rinne y otros doce del equipo de Lettie, para un total de quince.

Pero Alus tenía una expresión dudosa justo antes de irse. “No necesitamos que nadie nos despida, pero de todas las personas, ¿por qué está aquí el Gobernador General?”

“Esa es mi línea. ¿Por qué no te has ido todavía?” Berwick respondió.

Alus lo fulminó con la mirada, como diciendo: ¿De quién crees que es la culpa? Pero Berwick no reaccionó en absoluto, fingiendo ignorancia. “Solo significa que la existencia de Kurama será una molestia.”

“Déjamelo a mí. Parece que aún no han hecho ningún movimiento… no, supongo que no podemos descartar esa posibilidad.”

“Eso significa que tendríamos que encargarnos de todo. Así que una vez que lleguen los otros Únicos, manténgalos en alerta máxima.”

“Tengo la intención de eso.” Dijo Berwick.

Alus dejó escapar un suspiro y Berwick sonrió. “Eso me recuerda, Alus, tus alumnas estaban en el torneo principal, ¿no? ¿Sabes cómo les fue?”

“¿Vas a mencionar eso? Bueno, no estoy preocupado por los resultados, así que les pediré que me lo digan cuando regrese.”

“Hmm, creo que sería lo mejor.”

“¿Y? Imagino que querías ver el enfrentamiento de Alice.”

El rostro arrugado de Berwick sonrió. “No hay nada de qué preocuparse allí. También he grabado todos los enfrentamientos del Segundo Instituto Mágico, con la más alta calidad. Di órdenes estrictas a mis subordinados, por lo que tendré puntos de vista desde todos los ángulos. He reunido lo último en tecnología para esta ocasión. Puse un esfuerzo adicional en sus enfrentamientos, por lo que será de una calidad mucho mayor que la que tienen los directores de torneo. Ja, ja, ja.”

Alus también quería ver los resultados de su entrenamiento, así que decidió fingir que no se dio cuenta del abuso de autoridad de Berwick. “Será mejor que me dejes echar un vistazo. Creo que eres demasiado mayor para ser inmaduro.”

“No soy irrazonable. Así que puedo convencerme de mostrártelo.”

Este viejo chiflado, pensó Alus. Berwick no tenía hijos propios, por lo que podría estar viendo a Alice como una nieta. Incluso si no lo hacía, siempre estaba pendiente de ella.

Alus se enteró de esto después del hecho, pero Berwick había participado en la admisión de Alice en el Instituto. La forma en que pareció cobrar vida fue como cualquier persona mayor que presencia el gran momento de su nieto. Sin embargo, sus métodos eran un poco extremos.

“Bueno, solo piénsalo.” Respondió Alus casualmente.

Pero la expresión de Berwick se puso seria. “Cuando regreses de una pieza, lo consideraré.”

Alus parecía molesto por el hecho de que Berwick simplemente lo “consideraría”. Francamente, estaba demasiado exasperado para replicar. “Bien, deberíamos irnos.”

“Te dejo esto a ti.”

“Manejaremos este lado de las cosas, pero…”

“Lo sé.” Dijo Berwick. “Me aseguraré de que las otras naciones no intervengan.”

“Bueno, tendremos las cosas hechas antes de eso.” Dijo Alus, y se separaron.

Después de eso, el grupo cortó el viento mientras se dirigían a su destino, más allá de la barrera de Babel, y finalmente llegaron al Mundo Exterior.

Al ver el paisaje pintoresco frente a él, Alus dejó escapar un suspiro. Supongo que no estaría aquí viendo esto si no fuera por esta misión…

A diferencia del clima dentro de la barrera que se ajustaba a la conveniencia de la humanidad, este era un clima cambiante real.

Hoy era claro y refrescante. Más allá de la barrera había otro mundo, el real. Había pasado un tiempo desde la última vez que sintió esta sensación, y Alus respiró hondo cuando su intuición de Maestro Mágico regresó a él.

“Bien, vamos. Es hora de eliminar este monstruo.”

“No hay garantía de que sea un Monstruo.” Dijo Alus con seriedad. Había dicho esto en el sentido de que el Devorador no podía ser clasificado estrictamente como tal. Por lo general, a los Fiends que se parecían más a los humanos y caminaban sobre dos piernas se les llamaba Ogros, o a veces Monstruos.”

Por supuesto, Lettie no había querido referirse a esos ogros. Era solo una expresión, pero parecía que Alus no se había dado cuenta de eso.

Lettie, confundida, miró la expresión de Alus por un momento, antes de darse cuenta de que la había entendido mal. Ella se echó a reír. “Allie, deberías salir más… Es solo una forma de hablar.”

“… Solo espero que no te pongas las mesas en tu contra.”

“¡Oh! Pero si tal cosa llegase a ocurrir, te tenemos a ti como capitán.”

“Me sobre estimas.”

“No creo…”

Rinne se encogió de hombros mientras los miraba. “Ustedes dos parecen bastante serenos.”

“Por supuesto.” Dijo Alus. “Hasta ahora nunca me ha costado eliminar un Fiend.”

“… Así es como es. Allie, una vez hecho esto, Vanalis es el siguiente.”

“Lo sé… oh, había algo que debería haber dicho antes de irnos. Todos, paren un momento.”

Los rostros de los miembros del escuadrón se tensaron mientras lo miraban.

“Al completar esta eliminación, todos pueden dividir mi parte de la recompensa.”

“¡¡…!! ¿En serio? La recompensa por eliminar algo que se estima sea al menos un Clase SS no es algo para estornudar, ya sabes.” Le dijo Lettie. “Es aún más con otras naciones involucradas…”

“Apuesto por eso. Pero no planeo trabajar gratis. Conseguiré algo mejor que el dinero.” Alus tenía una sonrisa significativa, pero los miembros del escuadrón no le prestaron atención mientras vitoreaban. Como el capitán se llevó la mayor parte de la recompensa en una eliminación, el haber renunciado a su parte significaba que las recompensas de los miembros del escuadrón se dispararían.

Ellos, por supuesto, se enorgullecían de servir a su nación como Maestros Mágicos. Pero todavía necesitaban dinero para su equipo y para vivir. Era de la naturaleza humana ser feliz por lo que podía obtener.

Al final, muy pocos mostraron interés en lo que Alus quería decir con “algo mejor”. Sajik estaba babeando mientras se imaginaba en qué usar el dinero.

“Muy bien, vamos. Es hora de cazar.”

Los miembros del escuadrón lucieron feroces sonrisas ante las palabras de Alus.

La moral del grupo vestido de negro estaba alta mientras se dirigían hacia la abundante vegetación, corriendo en una formación de diamante con Alus al frente. En el centro del diamante estaba Rinne, con Lettie a su lado como la vice-capitana y guardaespaldas.

“Como era de esperar, Balmes hizo una limpieza.” Señaló Alus.

Ya habían viajado bastante distancia, pero no se habían encontrado con un solo Fiend. Prácticamente tampoco había señales de ninguno. Al ver que Rinne no reaccionaba, Alus sabía que no había ningún Fiend cerca de ellos.

“Aun así…” Dijo Alus.

“Es extraño que no haya ningún avistamiento.”

Alus asintió con la cabeza ante la voz de Lettie que provenía del auricular en su oído. “Es probable que los Fiends se mantengan a distancia por instinto. Tal vez tienen miedo de que se los coman, o tal vez realmente se los comieron. De cualquier manera, no es normal que un Clase A gobierne este tipo de área.”

Los Fiends de clase alta tendían a gobernar áreas con Fiends de clase baja que los obedecían. Y a diferencia de los animales salvajes, los Fiends no necesitaban comer para vivir. Entonces, incluso si los Fiends de clase baja temían a los Fiends de Clase A o superiores, normalmente no se distanciaban tanto.

Pero los Fiends se mantenían a distancia del objetivo. Alus sospechaba que eso significaba que su objetivo ni siquiera se molestaba en intentar gobernar, sino que simplemente devoraba a los de su propia especie.

Si sus sospechas eran correctas, entonces era anormalmente agresivo y codicioso. En otras palabras…

Cuando llegaron a la mitad del camino, Rinne mostró una ligera reacción.

Alus inmediatamente se dio cuenta de esto, y le dio órdenes al escuadrón de detenerse antes de que ella pudiera avisarle. El escuadrón mantuvo la formación y vigilaba sus alrededores mientras Alus se acercaba a Rinne, impresionado por sus habilidades.

“Hay cuatro personas a 500 metros al norte de aquí, y una más bastante lejos de ellos, para un total de cinco. ¿Son quizás los supervivientes de Balmes?” Rinne informó sus hallazgos e hizo la pregunta que el escuadrón comenzó a reflexionar.

Alus no pudo decirlo de inmediato, pero de repente sintió una extraña sensación… ¿Nos vigilan? Pensó que podía sentir ojos sobre él desde algún lugar.

“Em. Rinne, ¿cuántos detalles puedes distinguir?” Alus le preguntó a Rinne sobre las figuras del norte.

Lettie le dio a Alus una mirada significativa. Lo más probable es que ella sintiera la misma sensación que él. Él le dijo que se mantuviera alejado de eso con sus ojos, y esperó la respuesta de Rinne.

“Llevan capas bastante toscas. Pero según su apariencia, definitivamente son Maestros Mágicos.”

“Bastante antinatural para los supervivientes.” Señaló Alus.

Rinne asintió y se concentró un poco más. Todas las figuras vestían capas que les llegaban hasta los pies y capuchas que les cubrían la cara, lo que hacía imposible saber siquiera sus géneros.

Dos de ellos estaban parados en las ramas de un gran árbol, vigilando.

Una persona se movía hacia los dos en las ramas.

Rinne concluyó que deben estar agrupados. Luego cerró un ojo para reducir a propósito el número de vistas que controlaba. Su visión se amplió, dándole una mirada más cercana a la persona solitaria.

Cuando hizo esto, pudo ver una especie de AAR colgando de la cadera de la persona.

Al escuchar esto, Alus comenzó a pensar. Si realmente eran supervivientes, no podía entender por qué todavía estarían aquí en el Mundo Exterior. Si solo hubiera uno de ellos, eso sería una cosa; pero con cinco deberían poder moverse.

Una razón para no moverse… tal vez algunos estén heridos, o tal vez estén atados con algún tipo de hechizo.

Al darse cuenta de la vacilación de Alus, Sajik y Mujir le dieron sus sugerencias.

“Si son sobrevivientes, ¿deberíamos ir a rescatarlos?” Preguntó Sajik.

“No, ¿no sería más inteligente esperar y ver qué pasa?” Intervino Mujir.

En el momento siguiente, la fórmula mágica en el globo ocular de Rinne se reorganizó a velocidades vertiginosas, y dejó escapar un grito ahogado. “¡¿…?! Algo es extraño. Los dos en la parte superior de las ramas no parecen haber peleado. Uno lleva una bata roja y es bastante pequeño… y el otro probablemente sea un hombre según su físico.”

Si fueran supervivientes, habrían estado en estos bosques durante dos semanas. ¿Por qué no habían respondido?

En cambio, le llego a la mente el peor escenario que habían mencionado Vizaist y Berwick.

“¿Qué piensas, Allie? ¿Podrían ser de otras naciones?” Lettie le preguntó.

“Probablemente no, serían demasiado rápidos. Sin mencionar que habríamos escuchado algo al respecto a través de Berwick.”

Alpha comenzaría solo. Eso era lo que Cicelnia y Berwick habían preparado, y se habrían asegurado de que los demás gobernantes lo siguieran.

“Entonces…” Lettie finalmente aceptó la realidad y pronunció el nombre que hizo que todos los miembros del escuadrón fruncieran el ceño. “¿Crees que son Kurama?”

“Es muy probable… pero no quiero dividir el equipo para ver qué harán.”

Justo después de que Alus dijera eso… “¡¡De ninguna manera!!” Rinne gritó, y cuando todos se volvieron para mirarla, se escuchó el sonido de algo rompiéndose.

Cayó sobre una rodilla y se tapó el ojo para aliviar el dolor. Las lágrimas brotaron de entre sus dedos.

Lettie la apoyó desde un lado, pero antes de que pudiera preguntar qué sucedió…

“Parece que fue justo en la marca.” Murmuró Alus. Había visto la fórmula mágica del globo ocular de Rinne dispersarse como si estuviera hecha añicos.

Rinne había estado observando a la figura de la túnica roja desde atrás. Sin embargo, la figura se dio la vuelta en un instante y miró su ojo mágico con hostilidad. En otras palabras, el objetivo había notado el Ojo de la Providencia.

Y debido a eso, el efecto se rompió como Rinne había dicho antes, y el resultado fue que perdió temporalmente la vista.

“Em. Rinne, ¿estás bien?”

“¡¡La persona de la túnica roja me vio por completo…!! Lo siento, Sir Alus, mi vista no se recuperará por un tiempo.”

“¿Cuánto tiempo?”

“De treinta minutos a una hora. Afortunadamente, solo estaba mirando con un ojo.”

“Solo para preguntar… ¿puedes decir qué tan fuerte es alguien a través de ese ojo tuyo?”

“No tiene ese tipo de habilidad. Sin embargo… esta es la primera vez que me han notado tan claramente. Había una clara intención asesina en su mirada.”

“… Ya veo, intención asesina, ¿verdad?”

Se necesitó alguien al nivel de Alus y Lettie para notar un ojo mágico. Entonces, el oponente probablemente era igual a un Único.

Por el momento, estaban al norte de Balmes y relativamente cerca de Hydrange. Su Único era un joven llamado Kurokel Ifertas. Había estado en la conferencia de gobernantes, por lo que Alus sabía cómo se veía: era delgado, llevaba un libro y parecía más en el lado académico de las cosas. Basado en su altura, no era lo suficientemente bajo para ser llamado pequeño. Así que probablemente no era él el de la túnica roja.

Es posible que Hydrange todavía esté escondiendo a alguien en un nivel equivalente a un Único, pero no era probable. Tampoco era probable que fueran las otras naciones por la misma razón y su ubicación actual.

La información que Alus recibió de su sexto sentido respaldaba sus sospechas. Sus capacidades de detección no eran tan avanzadas como el ojo mágico de Rinne, pero por su experiencia, estaba entendiendo que había uno más en el mismo nivel que un Único aparte de la figura vestida de rojo.

Dos personas poderosas no conectadas con ninguna nación se habían reunido en una región problemática en el Mundo Exterior.

Tenían que ser Kurama, la organización a la que Gagareed había hecho una solicitud.

“Así que todo se reduce a esto.” Escupió Alus. El gobernador general y Vizaist habían llegado demasiado tarde.

“Capitán Alus, ¿deberíamos evitar el combate y mantenerlos bajo control como estaba planeado?” Preguntó Mujir, manteniendo la calma, pero también había que pensar en Rinne.

“Sir Alus, estaré bien. Sigo siendo un observador. Incluso si pierdo la visión, todavía puedo ver. No es que solo confíe en el Ojo de la Providencia.”

Ella no estaba mintiendo. Era la simple verdad. A Alus le había preocupado que ni siquiera pudiera caminar sola, pero eso había sido una preocupación innecesaria.

Alus tomó una decisión rápida y con una sonrisa casi malvada, dio sus órdenes. “Haremos el primer golpe… ataquen dispuestos a matar. Alguien en el nivel de un Único no morirá por eso. Sin embargo, no puedo decir nada sobre los debiluchos.”

Como se esperaba de una fuerza de élite, el equipo no mostró signos de perder los nervios. En todo caso, estaban animados, algunos incluso dejaron escapar su maná.

¿Qué buscan? ¿Están viendo lo que pasa? ¿No les llegó la cancelación de la solicitud? ¿O simplemente lo están ignorando por completo? Bueno, no hay necesidad de tener piedad contra los criminales que solo buscan hacerse un nombre y extorsionar a su solicitante para obtener una recompensa.

Alus pensó que no tendrían que luchar contra las dos personas fuertes de Kurama. Si se hubieran propuesto lidiar con los Fiends, también querrían evitar batallas inútiles. Desde que notaron el ojo mágico, sabían que Alus y los demás estaban aquí. Si hubieran querido pelear, habrían entrado balanceándose de inmediato, pero no lo habían hecho y tampoco mostraban signos de moverse.

Podrían terminar provocando problemas para ellos mismos, pero Alus podría manejarlos.

Consideró que el Fiend notaría la anomalía, pero de todos modos no habrían podido lanzar un ataque sorpresa contra un Clase S. Solo quería evitar un ataque sorpresa del Fiend. Y el ojo mágico de Rinne era esencial para eso.

Y para que pudieran pasar los treinta minutos necesarios para que ella se recuperara frenarían a Kurama.

“Si vamos a atacarlos, si o si tenemos que utilizar eso.” Dijo Lettie con una sonrisa traviesa.

Alus tuvo un mal presentimiento sobre esto y frunció el ceño a Lettie, pero los miembros del escuadrón que los escucharon levantaron sus oídos. “Solo quieres lucirte, ¿no?”

“¿Por qué no? Realmente levantará la moral, ya sabes.”

Alus cedió, mientras Lettie sonreía.

Si dos usaban el mismo hechizo se sinergizarían entre sí, ya que el uso descuidado de hechizos de diferentes atributos podría hacer que chocaran entre sí. El hechizo al que se refería Lettie era un hechizo de nivel experto refinado a partir de los principios básicos, lo que lo hacía fácil de usar, y Alus también le había hecho ajustes adicionales.

En Alpha, eran los únicos dos que podían usarlo correctamente. Era uno de los favoritos de Lettie y le gustaba usarlo siempre que podía. Sin embargo, debido a que abarcaba un área tan amplia y tendía a, bueno… remodelar el terreno, el Gobernador General generalmente terminaba con la cabeza entre las manos.

“Seguro que te encanta ser llamativa.”

Al escuchar la aprobación de Alus, los otros miembros del escuadrón comenzaron a marearse de emoción.

“¡Ustedes preparen la segunda ola!” Alus sacó el AAR de su cadera, vertiendo maná en uno de los anillos de la cadena, haciendo que su fórmula mágica se iluminara.

Mientras tanto, Lettie levantó su mano derecha, con el dorso hacia ella y curvó cuatro de sus dedos.

Su AAR eran anillos, y para esta misión había usado uno en la mano derecha y dos en la izquierda. Los anillos algo sin refinar tenían su totalidad grabada con fórmulas mágicas. Los de su mano izquierda estaban destinados a ayudarla a escribir los hechizos, mientras que el de su derecha los activaba. Esta vez también llevaba un brazalete en la muñeca derecha.

“No tenemos que ser específicos con las coordenadas, ¿verdad? Simplemente destruiremos toda el área… ¿Estás listo?” Preguntó Lettie.

“Cuando quieras.”

Alus usó su sexto sentido para reconfirmar dónde estaba el grupo, dándose cuenta de que no había necesidad de contenerse. Había cinco de ellos, pero decidió apuntar a dos de ellos.

No se molestó en especificar las coordenadas con más detalle. O más bien, considerando la naturaleza de la magia, no había necesidad de hacerlo.

Los dos vertieron grandes cantidades de maná en sus AAR y sus respectivas fórmulas mágicas se iluminaron.

“<<Detonation>>”

Las llamas crecientes tiñeron el área de rojo.