Musume Janakute Mama ga Sukinano! (NL)

Volumen 5

Capitulo 1: Cohabitación y Circunstancias

Parte 1

Yo, Ayako Katsuragi, tengo 3X años.

Han pasado diez años desde que acogí a la hija de mi hermana y su marido, quienes murieron en un accidente.

Me pasaba los días pensando lo feliz que sería si mi hija se casara con nuestro vecino Ta-kun en el futuro… cuando de repente un día, él se me declaró.

Dijo que me amaba a mí, no a mi hija.

Fue inesperado.

Me dejó totalmente sorprendida.

Vino de un sopetón.

…¿Eh? ¿Es anticuado? ¡¿Ya no se transmite esa expresión a los niños pequeños?! ¡¿Dice era Showa por todos lados?! Uwaaaa. No dije nada, ¡por favor olviden lo que dije!

Regresemos al tema principal antes de que me siga yendo por las ramas.

De todos modos, después de su confesión, nuestra relación cambió por completo.

Cambió drásticamente.

Ya no podíamos ser simples vecinos.

Después de eso, pasamos por varios eventos que me es imposible explicarlos en pocas palabras… hasta que finalmente me di cuenta de mis sentimientos.

Me gusta.

Amo a Ta-kun.

No como un hijo o hermano menor, sino como miembro del sexo opuesto.

Una vez que admití mis sentimientos, las cosas avanzaron de maravilla… es lo que me gustaría decir, pero al final las cosas siguieron complicándose, pero aun así…

Han pasado tres meses desde que Ta-kun se me declaró.

Y ahora estoy saliendo con él.

A los 3X años, es el primer novio de mi vida.

Estaba tan feliz y avergonzada que no sabía qué hacer.

No podía evitar sentirme emocionada.

Si ya era tan feliz con solo las citas, ¡¿qué iba a pasar ahora que empezaríamos a salir…?!

Estaba nerviosa y emocionada, pero de repente nuestra relación se topó con un gran obstáculo.

“A partir del próximo mes… ¿te gustaría trabajar en Tokio?”

Oinomori-san, mi jefa, me hizo esa propuesta.

Fue una propuesta para vivir en Tokio durante tres meses y participar plenamente en la adaptación a anime de una obra de la que estoy a cargo.

No era una orden empresarial, así que podría haberme negado.

Pero… acepté la propuesta.

Pensé que era una oportunidad para mejorar mis habilidades como editora y, sobre todo, quería ver la animación de la obra en la que había trabajado desde cero.

Sin embargo, irme a vivir a Tokio significaba que me separaría de Ta-kun.

Aunque solo sean tres meses, tendríamos una relación a distancia justo cuando empezamos a salir.

¡No podía creer que no pudiéramos estar juntos en el momento que se supone que es el más feliz!

Me sentía en una dolorosa encrucijada, pero Ta-kun me motivó a hacerlo.

Él apoyó sinceramente mi sueño y mi determinación.

Me dijo de buena gana que fuera.

Ayako Katsuragi.

Takumi Aterazawa.

La relación entre nosotros dos debería haber comenzado con una relación a distancia…

***

Septiembre.

Dentro de un apartamento preparado por Oinomori-san para mí en Tokio.

Este apartamento contaba con una habitación además de una sala, comedor y cocina.

Era espacio más que suficiente para una sola persona.

Sería un lujo pedir más que esto en Tokio.

Era un apartamento monótono, equipado con solo el mínimo de muebles.

Este apartamento pertenecía a Oinomori-san. Al parecer, antes se lo alquilaba a conocidos y el televisor y el refrigerador que probablemente había utilizado el anterior ocupante seguían allí. Me dijo que era libre de usarlos y que, si no los necesitaba, podía tirarlos.

En la esquina de la habitación estaba la maleta que había traído conmigo.

Como iba a vivir aquí durante tres meses, necesitaba una cierta cantidad de necesidades diarias, así que había traído muchas cosas. El resto de mis pertenencias llegarían por correo otro día.

Además, había otra maleta en la habitación.

Tenía un diseño en su mayoría negro que era probablemente muy utilizado por hombres.

Sí.

Pertenecía a Ta-kun.

Ahora mismo… él estaba en este apartamento.

Estaba sentado frente a mí al otro lado de la mesa.

Mi querido novio, con quien planeaba tener una relación a distancia, estaba justo en frente de mí por alguna razón.

Hoy.

Fue Ta-kun quien me saludó cuando llegué a este apartamento.

Es muy triste que tengamos que estar separados durante tres meses, haah, desearía que Ta-kun apareciera cuando abra esta puerta… estaba delirando con algo así, pero realmente apareció.

¡No puede ser!

¡¿Tantas ganas tengo de verlo que estoy alucinando?!

O… ¿Dios me concedió mi deseo?

Algo así.

Pensé en muchas cosas en un instante, pero probablemente todo era incorrecto.

Ta-kun, que estaba allí, no era una alucinación sino el real y no es que Dios me haya concedido mi deseo.

Mas que Dios… sentí que esto probablemente era obra del poder de una persona que era como un dios maligno.

Hace un momento, él salió y me saludó diciendo algo como esto:

 —Siento mucho no habértelo dicho hasta hoy… pero no podía decírtelo aunque quisiera. Tenía que mantenerlo en secreto de ti… Esa fue la condición que Oinomori-san me dio.

 —Este… ¿por dónde debería empezar? Bueno… en resumen…

 —Viviré aquí contigo a partir de hoy.

“¿U-Una pasantía?”

Cuando terminé de escuchar toda la historia, no pude evitar alzar la voz.

Ta-kun se veía lánguido y apologético.

“…Sí”, asintió.

“En resumen, Ta-kun… ¿vas a trabajar como pasante en Tokio?”

“…Esa es la idea.”

Me quedé desconcertada.

Pasantía.

Para decirlo de forma muy sencilla, es un sistema en el que una persona trabaja temporalmente dentro de la organización de una empresa.

La definición varía de un país a otro, pero en Japón suele referirse a una experiencia laboral de prueba para estudiantes universitarios.

Es un sistema de trabajo en una empresa durante un periodo de tiempo determinado como parte de la búsqueda laboral.

Eso es una pasantía.

Uwaa, qué nostálgico.

Cuando era universitaria, dudaba si hacerla o no. Quería hacerla, pero… acabé no haciéndola porque era demasiado complicado.

“Desde hace un tiempo he estado pensando en hacer una pasantía en mi tercer año”, Ta-kun comenzó a hablar poco a poco. “Pensé que me gustaría hacer una pasantía para conseguir algo de experiencia social antes de empezar a buscar trabajo de verdad. Trabajar como pasante es algo que solo puedes hacer mientras estás en la universidad después de todo. Así que ahora que estoy en tercer año, empecé a buscar por ahí.”

“N-No esperaba menos de ti, Ta-kun…”

Está muy bien interiorizado.

No es como si intentara aparentar ser un esforzado, sino que realmente se está preparando apropiadamente.

Es muy diferente a mí, que no hice pasantías porque me pareció muy engorroso.

“No, no es para tanto. En realidad, solo estuve buscando vagamente”, dijo Ta-kun modestamente. “Pero no pude encontrar un lugar que cumpliera con mis requisitos en el área. Por eso… consulté con Oinomori-san.”

“……”

Según lo que escuché, parece que Ta-kun y Oinomori-san han estado en contacto frecuente durante un tiempo.

Intercambiaron su información de contacto cuando Oinomori-san vino a mi casa antes de las vacaciones de verano.

Los tres comimos sushi y luego acepté su provocación y me puse el uniforme de Miu… no, no hace falta recordar eso. Enterremos ese recuerdo para siempre.

De todos modos, desde entonces, los dos han estado enviándose mensajes y llamándose con regularidad.

Al principio, solo era Oinomori-san tomándole el pelo por su relación conmigo, pero poco a poco empezó a hablar del futuro y la carrera de Ta-kun.

…Tal vez sea normal que como novia me sienta celosa por el hecho de que él se haya comunicado con una mujer en secreto, pero sinceramente, no me sentía así en absoluto.

Porque eso pasó antes de que empezáramos a salir… y sobre todo, porque la otra mujer era Oinomori-san.

Creo que fue ella quien lo obligó a ponerse en contacto… y también puedo entender por qué él consultó con ella sobre su carrera.

Es como si un universitario visitara a un egresado.

Yumemi Oinomori es la persona perfecta para pedirle esas opiniones.

Después de dejar un gran historial en una editorial importante, dejó la compañía y fundó su propia compañía. Es una mujer con personalidad que continúa activa en primera línea como una gerente talentosa.

Creo que sus experiencias y opiniones sobre el trabajo son muy instructivas. También da muchas conferencias para estudiantes universitarios.

Como miembro de la sociedad, la respeto mucho.

Como ser humano, no tanto.

“Pensé que no tenía posibilidades de encontrar algo y más que una consulta, era ella escuchando mis quejas… pero entonces Oinomori-san me encontró un lugar para hacer la pasantía en poco tiempo.”

“Oh…”

Fue un movimiento sobrehumano como de costumbre.

“La compañía es dirigida por un conocido de Oinomori-san y este año empezarían un programa de pasantías. Pero su condición era…”

“N-No me digas…” Dije mi conjetura. “¿Su condición era que vivieras conmigo…?”

“…Sí”, asintió apologéticamente. “Cuando hablamos sobre la pasantía, escuché que ella pensaba proponerte un traslado… así que me sugirió que viviéramos juntos.”

Aparentemente, Ta-kun se había enterado de mi asignación a Tokio antes que yo.

Parece que una conspiración había estado girando a mi alrededor durante bastante tiempo sin que yo lo supiera.

“¡Por supuesto que me negué al principio! En ese momento, todavía no estábamos saliendo y pensé que era absolutamente imposible decidir vivir juntos sin pedir tu opinión primero. Pero…”

Habló rápidamente, pero su voz se volvió gradualmente más tranquila.

“Después de todo, a pesar de que sean solo tres meses, me sentiría solo por estar separado de ti, Ayako-san.”

“Ta-kun…”

“Además, Oinomori-san dijo que, si me negaba, te llevaría a clubes de anfitriones y boys bars por todas partes después de que empezaras a vivir en Tokio.”

“¡¿Dijo eso?!”

¡¿Qué demonios?!

¡¿Con qué lo estás amenazando?!

“C-Cielos~~. ¡Sigue siendo tan insensata como siempre! Tú también, Ta-kun. Yo nunca iría a lugares así, ¿verdad?”

“Es verdad, pero… m-me preguntaba qué haría en el improbable caso de que ocurriera. Oinomori-san tampoco paraba de decir cosas como ‘Cuanto más ingenuas e inocentes son, más adictas se vuelven una vez que se enganchan’, lo que solo aumentó mi ansiedad.”

Parece que Ta-kun se dejó engañar por sus palabras.

La labia de Oinomori-san es asombrosa como siempre.

¿Cuántas veces no me ha hecho lo mismo?

“Estaba realmente preocupado. ¿Y si te enganchabas con un anfitrión, te endeudabas y te veías obligada a trabajar en una tienda sospechosa?”

“¡¿Qué tanto estabas delirando?!”

¡Está teniendo un delirio tres veces más profundo y peor de lo que esperaba!

¡Mira cuánta ansiedad le has provocado, Oinomori-san!

Y entonces.

Recibí una llamada durante ese momento de tanto alboroto.

Estaba en medio de una conversación importante, así que pensé en ignorar la llamada, pero cuando la persona al otro lado era la raíz de todo el mal, la historia cambiaba.

“…Discúlpame un momento.”

Después de excusarme, me levanté de mi asiento.

Entré en la habitación de estilo occidental junto a la sala y cerré bien la puerta corrediza.

Y cuando contesté el teléfono…

“Yo, Katsuragi-kun.”

Escuché la voz alegre de Oinomori-san.

Casi podía verla sonriendo de oreja a oreja.

Me había llamado brevemente antes de entrar en este apartamento, pero… parece que solo había tratado de medir el tiempo y ahora llamó de nuevo.

Justo cuando acababa de cruzarme con la sorpresa.

“Fufu. ¿Y bien? ¿Te agradó mi sorpresa?”

“…Te estoy muy agradecida.”

“Jajaja. Ni lo menciones.”

Traté de sonar sarcástica, pero ella no pareció entenderlo.

“…Has hecho algo descabellado de nuevo. No solo me has metido a mí en esto, sino que has involucrado a Ta-kun… No somos tus juguetes.”

“No me gusta cómo lo dices. No recuerdo haber hecho nada para ganarme esta hostilidad, más bien deberías estar agradecida”, dijo en un tono despreocupado. “Puedes hacer el trabajo que querías hacer en Tokio. Aterazawa-kun puede hacer la pasantía que quería hacer. Y como pareja, pueden evitar la tragedia de una relación a distancia justo cuanto acaban de empezar a salir. Estoy muy feliz de que mi plan… digo, de que mi sorpresa haya sido un éxito. Creo que es el mejor resultado en el que nadie sale perdiendo.”

“Eso es…”

Sentí como si me estuvieran mangoneando.

¡E-Eso estuvo cerca…!

¡Por un momento, pensé “Ciertamente nadie sale perdiendo”…!

“En primer lugar, el apartamento es mío. Tú y tu novio pueden disfrutar de una vida juntos en un condominio urbano sin tener que pagar ni un solo yen, ¿verdad? Creo que deberías sentirte un poco más agradecida conmigo.”

“…N-No es que no esté agradecida… pero eso no significa que puedas hacer lo que quieras sin permiso.”

“Bueno, ciertamente puede que me haya excedido un poco esta vez, pero…”

Cuando me quejé frenéticamente, Oinomori-san bajó un poco el tono de su voz.

“Pero quiero que lo entiendas. No tenía malas intenciones… bueno, no puedo decir que no las tuviera, pero al menos no al cien por ciento. Lo hice, creo, porque sentía un poco de compasión por su relación.”

“……”

“Estuve pensando desde que se decidió la adaptación a anime de KimiOsa en tenerte viviendo en Tokio durante un tiempo. Me preguntaba sobre cómo podría hacer que fuera lo más divertido… no, lo más beneficioso para ti… y entonces Aterazawa-kun me pidió consejo para su pasantía.”

“…¿Así que se te ocurrió la idea de hacernos vivir juntos?”

“¡Exactamente!” dijo Oinomori-san con una cara de suficiencia.

No podía verla porque era una llamada telefónica, pero definitivamente podía decir que estaba haciendo esa cara.

“No sabía si iba a funcionar porque había muchos factores inciertos, pero al final resultó ser un gran éxito. Además, empezaron a salir en el momento perfecto.”

“¡E-Es demasiado irresponsable…! ¡¿Qué habrías hecho si no estuviéramos saliendo?!”

El plan de convivencia comenzó considerando a Ta-kun como un pasante.