Saikyou Mahoushi (NL)

Volumen 4

Capitulo 16: Anhelo

Parte 3

Cuando finalmente se acercaron al Puerto Circular, se encontraron con un muro que era incluso más alto que los muros exteriores, con lanzas bifurcadas en la parte superior. Era una cuasi barrera, comúnmente conocida como la Segunda Babel.

La barrera de Babel fue el resultado de innumerables investigadores que se unieron. Esta fue una imitación de esa barrera.

Dicho esto, solo podía repeler a los Fiends más débiles, y su alcance era extremadamente corto. Por lo tanto, no era muy práctica a pesar de su alto costo, por lo que su producción en masa no tenía sentido.

La Torre de Babel que había protegido a la humanidad durante tanto tiempo ahora era algo que ya no podían reproducir. Hubo rumores de que solo los gobernantes de las naciones sabían sus secretos, pero algunos afirmaron que ni siquiera ellos lo sabían todo. Era claramente una construcción de algún tipo, pero las principales teorías y los mecanismos involucrados estaban envueltos en misterio.

Algunos incluso vieron a Babel como un objeto de adoración; pero, sin embargo, su construcción y funcionamiento eran más que probable que fuese tecnología perdida.

Habiendo llegado ahora a la puerta de transferencia, Tesfia y Alice miraron detrás de ellas con pesar. Para los Maestros Mágicos, esta ciudad era definitivamente un tesoro.

Alus había dicho que había mucho conocimiento que obtener aquí, pero como estudiantes, lo máximo que podrían manejar sería leer los AAR. A menos que buscaran convertirse en ingenieros, probablemente no harían ningún descubrimiento.

Pero Alus pensó que probablemente ni siquiera estaban buscando aprender nada. Por lo que había escuchado, generalmente las mujeres se sentían atraídas por las gemas y les encantaba comprar. Y probablemente esas dos no fueron excepciones a eso. Entonces, a pesar de su consideración, una vez más se dio cuenta de que había tomado una mala decisión.

Reprimió el impulso de quejarse, y asintió para que las chicas siguieran adelante. “Nos vamos.” Extendió su licencia, comenzó la transferencia y sus alrededores comenzaron a cambiar.

“¡…!”

“¡…!”

Alus estaba acostumbrado a esto, pero Alice y Tesfia no. Podía entender su reacción cuando de repente un gran edificio apareció ante ellos.

Las dos se sorprendieron y observaron en silencio los cambios a su alrededor, sin moverse al principio debido a una sensación de presión.

El edificio tenía al menos tres veces el tamaño del edificio principal del Instituto. La forma era única, un cubo curvo. Parecía que el edificio estaba inclinado. Esta vasta base digna de ser llamada cuartel militar tenía una presencia similar a una cadena montañosa.

Había varios puestos de vigilancia alrededor de la entrada, y una vez más Alus levantó su licencia en lo que parecía ser un puesto de control. “¡Las dejaré atrás!”

Las dos chicas todavía estaban asombradas cuando Alus gritó esto, pero finalmente comenzaron a seguirlo.

A pesar de las miradas burlonas que recibió, continuó caminando sin ninguna preocupación.

Por otro lado, muchos sabían quién era Alus, y algunos incluso se detuvieron para saludarlo.

Hablando estrictamente, los Maestros Mágicos en primera línea no tenían rango militar. Si uno tuviera que darles un rango, su rango como Maestros Mágicos cumplía ese propósito.

Un Maestro Mágico de Digito Único, que eran mucho más fuertes que el resto, eran conocidos como Únicos. Los rangos en las decenas se denominaron Dobles.

Aquellos en los cientos eran Triples; aquellos en los miles eran Cuádruples; los de los diez mil eran Quíntuples; y los cientos de miles eran Sextillizos. Los tres últimos se abreviaron como Cuads, Quins y Sexts.

Estas fueron todas las designaciones oficiales, pero los Quins y Sexts no fueron diferentes de los soldados de base, por lo que nadie los usó.

Si bien no había filas… Se reconocía que los Únicos estaban en el mismo nivel que los generales, los Dobles como oficiales de campo y los Triples como oficiales de compañía. Pero no tenían la autoridad para dar órdenes, por lo que realmente nadie diferenciaba entre los rangos.

Por supuesto, se estableció una cadena de comando para cada misión para que la unidad pudiera funcionar como una organización; y por esa razón, había muchos que respetaban el rango de un Maestro Mágico en el ejército.

Además, debido a su posición en las compañías, los Triples también se desempeñaron como oficiales reales de compañía, por lo que si bien hubo una diferencia entre sus filas como oficiales militares y Maestro Mágicos, fue una diferenciación basada en la ocasión.

Al ver que Alus recibía tanto respeto, Tesfia lo miró con renovado interés. “Eres bastante popular.”

“No es popularidad. Solo respetan el rango, a diferencia de ti.”

Recordando cómo había actuado en el pasado, Tesfia sintió un hormigueo en el pecho. No podía ignorar su comentario como solía hacerlo.

Es posible que estas personas mayores que bajan la cabeza hacia él no estén del todo dispuestas, pero aun así entendieron el valor del rango. Gracias a Alus, la carga que tenían que cumplir en las misiones se redujo, lo que como resultado trajo paz a Alpha.

Sin embargo, aunque conocían su rostro, muy pocas personas lo habían presenciado en batalla. Es por eso que la mayoría de las personas aquí miraron confundidas cuando un joven de aspecto algo frágil estaba recibiendo el respeto de sus mayores.

Por cierto, una vez dentro de la sede, el ambiente ostentoso presentado por su exterior se desvaneció un poco, aunque el tamaño aún era abrumador. En el interior, los Maestros Mágicos giraban dentro y fuera del modo de espera, siendo la fuerza principal de la fuerza militar de Alpha. Excluyendo a los que están en misiones en el Mundo Exterior, el setenta por ciento de los Maestros Mágicos de la nación estaban estacionados en esta sede.

“Estoy empezando a ponerme un poco nerviosa.” Dijo Alice. Cuando entraron en el edificio, la gran cantidad de Maestros Mágicos que encontraron mientras caminaban era asombrosa. Parecía un poco intimidada y enderezó la espalda.

Con tantos Maestros Mágicos, los AAR que llevaban se destacaban. Todos parecían bien usados, lo que emitía un aura impresionante e imponente.

Habiendo experimentado el Mundo Exterior en la lección extracurricular, Alice se hizo dolorosamente consciente de que este lugar era el más cercano de todos en el reino humano al Mundo Exterior.

“Después de todo La mayoría de los Maestros Mágicos aquí presentes son más capaces que ustedes.”

“¡P-Por supuesto que sí!” Tesfia replicó sin demora, pero incluso ella estaba siendo un poco reservada mientras miraba a los Maestros Mágicos a su alrededor. Si estuvieran por debajo de estudiantes como ellas, Alpha habría sido devorado por los Fiends hace mucho tiempo.

“Bueno, están en niveles completamente diferentes, así que no se preocupen demasiado por eso. Y como estoy aquí, tampoco hay mucho más de qué preocuparse.”

“Solo haces lo que quieras, ¿eh?” Tesfia respondió con exasperación. Tenía una expresión hosca, y era todo lo que podía entrever. Pero ella no pudo evitar encontrar extraño que alguien de su edad estuviera siendo tan apreciado por los adultos.

Como miembro de la familia Fable, Tesfia también había experimentado que los adultos bajaban la cabeza hacia ella. Pero eso fue porque su madre, la cabeza de la familia, caminaba detrás de ella. Ella era muy consciente de que no era realmente a quien se inclinaban.

Entonces, cuando Tesfia vio a Alus como un Maestro Mágico Único que recibía tanto respeto, comenzó a querer que su objetivo fuera alcanzar las mismas alturas.

Por otra parte… ya que sabía cómo era Alus normalmente, todavía se sentía reacia al respecto.

“Se puede considerar una ventaja el ser Único.” Con una sonrisa seca, Alus atravesó la base con pasos familiares.

Cuanto más se acercaban al centro, menos personas ignoraban quién era Alus. Muchos salieron de su camino, gracias a su título como el más fuerte de Alpha.

Sin embargo, no tenía camaradas de armas que lo llamaran; e incluso hubo algunos que se dieron vuelta y se alejaron cuando lo vieron.

A pesar de esto Alus avanzo audazmente, pero había un sentimiento extraño en el aire. Había caminado por los pasillos de esta base innumerables veces, pero en este momento pensó que podía sentir una atmósfera opresiva a su alrededor.

Hay más Maestros Mágicos aquí de lo habitual. Además…

Podía ver las caras de algunos Maestros Mágicos como si estuvieran en guardia por algo. La tensión era similar a la del Mundo Exterior. Alus podía sentirlo en su piel. La atmósfera tensa no estaba afectando a todos los militares… solo a algunos miembros.

Si estuvieran en el Mundo Exterior, no sería nada de qué preocuparse. Pero no tenía tanto sentido que ocurriese en los cuarteles ejército. Cuando lo pensó, también parecía haber más guardias.

Esta es una vista extraña. ¿Por qué están los militares en guardia en su propio cuartel general?

Alus lo consideró por un segundo, pero no parecía que estuvieran preocupados por él, por lo que por ahora decidió dejarlo en segundo plano.

“No puedo decir si eres respetado u odiado.” Completamente ajena a la tensión en el aire, Tesfia continuó con sus comentarios despreocupados de antes. Había visto personas que lo reconocían y personas que lo evitaban.

“De cualquier manera es una molestia.” Para ser más exactos, era un poco diferente del odio. Probablemente los ojos sobre él eran de personas que en misiones anteriores habían visto su fuerza de primera mano, y estaban asombrados por el poder abrumador o le tenían miedo.

De todos modos, nadie trató de formar una relación amistosa con él. Alus sospechaba que estar directamente bajo el mando del Gobernador General probablemente también jugó un papel en ello.

Pero no se sintió molesto o solo porque otros se distanciaron de él. Ese siempre había sido el caso en la primera línea. En este mundo, no había garantía de que la sonrisa de ayer estuviese mañana.

Una gran cantidad de marcadores de tumbas se ubicaron en un lote al borde de los terrenos de la sede. Solo unos pocos de los allí enterrados tenían cuerpos intactos. La mayoría de las tumbas contenían solo lo que quedaba, o las pertenencias del difunto. Era una tradición que la gente fuera allí de visita cuando se alistaba por primera vez en el ejército.

Después de llegar al centro de la planta baja, comenzaron a subir las escaleras. Una vez que llegaron al piso superior, la atmósfera se volvió muy opresiva.

El alto mando se reunió aquí, con la oficina del Gobernador General punto con las de otros miembros de alto rango del ejército. La edad promedio de las personas aquí era mayor, con Maestros Mágicos en el rango de general pasando por el área con expresiones serias en sus rostros.

Lo único que no cambió fue la actitud de Alus. Pero en la parte superior, todos sabían de Alus, y muchas personas parecían asustadas. Todos actuaron fríos y distantes, para no acercarse más.

Sin embargo…

“¡Ha pasado un tiempo, Alus! Últimamente no te he visto por aquí, ¿qué estás haciendo ahora?”

Extraños humanos existieron en todas partes. Es por eso que la paz verdadera era algo que no se obtenía tan fácilmente.

La persona que saludaba a Alus era un hombre de unos treinta años. Había subido la escalera para convertirse en un oficial al mando a una edad temprana, y estaba montando el camino de élite hacia la cima.

Carecía del característico cuerpo robusto que generalmente se ve en los soldados, por el contrario, es del lado delgado. Sin AAR en su cintura, eso era prueba de que su rango como Maestro Mágico era lo suficientemente alto como para que ya no necesitara salir al Mundo Exterior.

A pesar de estar a cierta distancia de lo que podría llamarse una conversación amistosa, su voz viajó bien.

Alus esperó hasta que estuvieron lo suficientemente cerca como para poder mantener una conversación normal. “Ha pasado un tiempo, Comandante Lindelph.”

“Oh, deja eso. Me asusta.” Lindelph no parecía apreciar la manera formal de Alus de hablar con él, mientras agitaba su mano de manera exagerada.

Alus no odiaba particularmente a este hombre demasiado amigable.

“Solo estoy en esta posición gracias a ti. No fui reconocido solo por mis propios poderes, así que todavía tengo un largo camino por recorrer.”

Lindelph fue uno de los principales estrategas al mando de la línea defensiva. Trataba principalmente con Fiends de clase baja detectados cerca de la línea, y las unidades bajo su mando a menudo trataban con ellos. Fue clasificado como coronel. Originalmente, era un oficial de personal integrado en el escuadrón en el que estaba Alus.

Sus habilidades como Maestro Mágico no podían ser especialmente elogiadas como grandiosas. Sin picar palabras, era un líder sin habilidad.

Después de que Alus terminó el programa de entrenamiento de Maestro Mágico a una edad temprana, pasaron algunos meses en el mismo equipo. Era uno de los pocos camaradas de armas que había luchado junto a Alus, y todavía estaba vivo y en servicio activo.

“No seas tan modesto. Eres el más joven en ser promovido a tal rango en la historia, ¿no? Escuché que hay muchas voces celosas en el ejército.”

“Eso golpea cerca de casa… ¿Oh?” Al ver a las dos chicas con uniformes medio escondidas detrás de Alus, Lindelph sonrió con picardía. “Una belleza a cada lado, ¿no eras alguien pasivo? Así que finalmente también tienes esa edad. Ah, la juventud.”

“Si eso es lo que piensas que es, probablemente te degradarán pronto.”

La mejilla de Lindelph se crispó ante la respuesta cínica de Alus. Su amplia sonrisa se rompió, pero solo comentó: “Bueno, solo mira, estoy planeando convertirme en una parte aún más integral de los altos mandos. Pero aparte de eso, ¿qué negocio involucra que traigas estudiantes?”

“No es nada especial…” Alus se detuvo cuando sintió a las dos chicas asomándose detrás de él. Las miradas en sus caras parecían estar pidiéndole que las presentara. Soportando el impulso de ignorar esto y seguir adelante, Alus realizo breves presentaciones.

“Comencemos con él. Este tipo franco es el comandante Lindelph, quien planea secretamente recibir una promoción póstuma. Actualmente está siendo promovido a la velocidad de un tren fuera de control.”

“¡Hey! ¡Qué pasa con esa introducción que suena peligrosa!”

“Y estas dos son mis compañeras de clase, Tesfia Fable y Alice Tilake. Solo vine aquí porque tengo algunos negocios con el Gobernador General.”

“¿Dijiste compañeras de clase? Aquí estaba pensando que no te había visto en mucho tiempo, pero ahora eres un estudiante… Vizaist puede ser bastante malo, debería haber dicho algo… pero hmm, ¿dijiste Fable?”

Por un momento Lindelph pareció absorto en sus pensamientos. Luego juntó las manos. “Hablando de los Fable, ¿podría ser la hija del ex general Frose?”

Ante sus palabras los hombros de Tesfia temblaron, antes de responder: “S-Sí…”

“Ya veo, ya veo… ¡así que tú eres la hija! Recibí un duro entrenamiento bajo el ex general. Encantado de conocerte. Soy Lindelph Maeger.” Recordando sus amargas experiencias, Lindelph extendió la mano. Era bueno al mando, pero su habilidad con la magia no mejoró, por lo que su expresión no era exactamente infundada.

Tesfia tomó su mano e intercambió un cortés apretón de manos, pero su expresión también parecía un poco amarga.

“Esta joven también es muy hermosa.”

“Muchas gracias.” Alice sonrió y le estrechó la mano.

Con las presentaciones fuera del camino, Alus instó a Lindelph a continuar. “Ahora, ¿no tenías otros asuntos que atender?” Al ver la pila de documentos en sus manos, Alus se dio cuenta de que debía haber estado camino a algún lugar.

“Bien, entonces me iré de aquí.” Lindelph se alejó rápidamente, antes de darse la vuelta como si recordara algo. Él gritó: “Alus, ¿por qué no vamos a cenar la próxima vez? ¡Encontré un buen lugar!”

Alus no estaba seguro de lo que quería decir con ‘buen lugar’. ¿Era buena comida o era el tipo de lugar donde las camareras eran hermosas mujeres? Se detuvo por un momento para considerar la personalidad de Lindelph. “Tu esposa te mataría.”

Con la distancia entre ellos, probablemente la voz de Alus no lo alcanzaría. Y considerando el contenido, dudó en gritarlo en voz alta.

Pero Lindelph parecía tener una buena comprensión de la personalidad de Alus, ni siquiera prestó atención a su respuesta, ya que nuevamente había comenzado a alejarse antes de que se diera la respuesta.

Como siempre centrado en sí mismo, pensó Alus para sí mismo, mientras veía al comandante alejarse. Dejando a un lado a Alice y a Tesfia, que tenían miradas perplejas, Alus volvió a dirigir su atención hacia donde se dirigía.

Llegaron al último piso del edificio de siete pisos.

La oficina del Gobernador General tenía una vista panorámica de la línea defensiva. En caso de emergencia, el escenario artificial que se muestra dentro de la barrera podría cortarse para mostrar el Mundo Exterior. Eso nunca había sucedido, hasta el momento. O dicho con mayor precisión, desde la construcción de la Torre de Babel, las imágenes artificiales nunca tuvieron que ser detenidas.

Había alfombras de color rojo oscuro en la oficina, y casi no había muebles. Esto era por la preferencia personal del Gobernador General. Sin embargo, tampoco estaba desolado, ya que en lugar de un lujoso interior había una montaña de documentos.

Después de permitir su entrada, Berwick miró el reloj cuando Alus entró en la habitación. “Qué inusual que llegues tarde, aunque solo sea por dos minutos.”

“Por favor, dile eso al comandante Lindelph.”

“Ya veo.” Berwick sonrió y le ofreció a Alus un asiento en el sofá.

“Hey, entren de una buena vez.” Las dos chicas estaban paralizadas y rígidas en la puerta.

Pero su parálisis fue interrumpida por la voz de Alus.

Al momento siguiente, Alice vio al dueño de la habitación y se tapó la boca con la mano mientras un sorprendido “¡Ah!” escapó de sus labios.

“Ha pasado un tiempo, Alice.” La voz del gobernador general era alegre.

“Alice, ¿conoces al Gobernador General?”

“Huh, esta persona es… ¿¡aquel soldado!? ¡De ninguna manera!”

A Alus le habían dicho que años atrás Berwick fue el comandante de cierta operación, cuando se trasladaron para arrestar a Godma por el Proyecto de Separación del Factor Elemento. Cuando Alice fue salvada de las instalaciones, parecía que se había ocupado de Alice. Quizás vio esto como una expiación por dejar escapar a Godma.

“Ya veo, así que también te inscribiste en el Instituto… Ya veo, ya veo.”

Solo Alus sintió que algo estaba mal con el tono juguetón del Gobernador General, debido a que conocía al hombre por mucho tiempo.

Pensando en sí mismo lo astuto que era el viejo, Alus comenzó con una declaración de disculpa. “Con respecto a este incidente con Godma, honestamente creo que hubo cierta ineptitud de mi parte.”

“Bueno, no te preocupes. He recibido un informe de Vizaist. No hay problema.”

Alus esperaba esa respuesta. No se había producido ningún daño real, y como el más fuerte en Alpha, tampoco se le había pedido que asumiera la responsabilidad de nada trivial en ninguna otra misión.

La razón de esto fue porque Berwick estaba principalmente al mando de esas misiones, y los detalles de ellas nunca se hicieron públicos.

Pero esta vez, a pesar de haber dicho que no había problemas, Berwick lo miró seriamente, aunque Alus sería el único en darse cuenta.

“Pero nunca habría soñado que la joven Alice fuera tu alumna.” Contrariamente a sus palabras, parecía que tal vez Berwick había anticipado todo esto. Quizás que Alus fuese forzado a ingresar al Instituto y terminase en la misma clase que esas dos excelentes estudiantes: Alice y Tesfia, todo fue de acuerdo con su plan. Este método de Berwick con dos o tres pasos por delante le era familiar a Alus. Era como una luz conveniente que aparecía para guiarlo en la oscuridad.

Mientras los dos hablaban, Tesfia y Alice se sentaron en el sofá, pero como soldado Alus permaneció de pie frente al Gobernador General. Sin embargo, sin presencia de extraños, su tono seguía siendo menos formal.

“Ha pasado un tiempo desde la última vez que te vi, Tesfia, aunque probablemente no lo recuerdes.”

“¿¡Eh…!? Lo siento.”

“Oh, no te preocupes por eso. Ha pasado mucho tiempo desde entonces.” Berwick sonrió al recordar los viejos tiempos.

La existencia de Tesfia fue la razón por la cual Frose, su madre, había elegido retirarse. Cuando Frose estuvo activa, ella sirvió como la comandante suprema de un batallón, y fue vista como una comandante incomparable de su tiempo. Ella se destacó por usar tácticas astutas para eliminar a los Fiends.

Cuando se retiró, hubo una gran fiesta, que fue donde Berwick conoció a Tesfia. Dicho esto, debido a la naturaleza ocupada de la fiesta, solo habían intercambiado saludos, por lo que no era de extrañar que no lo recordara.

“Por cierto, Alus. No viniste aquí solo por algo así, ¿verdad?” Berwick sabía mejor que nadie que Alus no era el tipo de persona que había venido hasta aquí solo para disculparse por un error.

Alus asintió, luego pasó al tema principal. “Cuando se realizaron experimentos en humanos con Alice, hubo algunos efectos secundarios inesperados. Es decir, encontré un defecto en su información de maná.”

“¡¡…!! Ya veo.”

Alice se puso rígida.