Nihon E Youkoso Elf-san (NL)

Volumen 6: Capítulo Del Verano I

Capitulo 8: Esparciendo Semillas en la Tierra

Parte 2

Esta noche íbamos a cocinar para cuatro y estábamos haciendo tempura, así que era una carrera contrarreloj. Preparé la masa como la última vez y luego… no la puse en el refrigerador, sino que me di la vuelta. La medusa flotaba allí y le coloqué el tazón encima. El tazón se enfriaría en poco tiempo, por lo que los espíritus eran bastante convenientes incluso cuando se trataba de cocinar.

Wridra había estado leyendo un periódico, pero tuvo que dejarlo a un lado cuando empezó a oler la tempura chisporroteante. Su nariz se movió, se levantó y se acercó a mí como lo hacía cuando era una gata.

Shirley se agarró a sus hombros y se asomaron juntas para ver lo que estaba haciendo. Pude percibir su inquietud, así que me di la vuelta mientras seguía trabajando con mis manos.

“Lo siento, tenemos que darnos prisa esta noche y hay suficiente para nosotros cuatro, así que no podrás probar nada hasta que termine.”

“¡Gah…! ¡Muy bien, entonces aceptaré solo una de esas berenjenas de ahí!”

Sí, como dije, no se puede comer hasta que termine.

Hice una “X” con mis dedos hacia ella y las cejas de la dragona se inclinaron ante mis ojos. Parecía que estaba a punto de llorar. Era tan expresiva que no pude evitar simpatizar con ella, pero mi “X” no vaciló.

De repente, Wridra se animó, su rostro se iluminó como si se le hubiera ocurrido una idea brillante.

“S-Sí, entonces considera esto. ¡A cambio de una de mis escamas…!”

“¡Shoo, shoo! Estará listo pronto, ¡así que ten paciencia y espera allí!” La intensidad de Marie sorprendió a Wridra e incluso a Shirley, por alguna razón. Pero ella solo se veía linda a mis ojos, como un gatito que se enoja.

Vi a Wridra escabullirse, abatida, y seguí friendo el resto de las verduras. Una vez que terminé, llegó el momento de sacar el plato principal: los camarones. Los había tratado previamente para que no se enroscaran y decidí freírlos delante de Marie. Para ser honesto, estaba un poco nervioso. Quería usar una técnica de fritura que hiciera que la tempura pareciera más grande llamada hana-age, pero apenas tenía experiencia con ella.

“Muy bien… Ahora solo agregamos un poco de la masa diluida así…” Usé mis palillos para agregar trozos de masa mientras los camarones se freían en el aceite. Era bastante difícil, considerando que solo tenía una cantidad limitada de tiempo para freírlos. Los ojos de Marie brillaban de asombro mientras miraba con gran interés.

“Vaya, se están haciendo más grandes. Son como flores que están floreciendo.”

“Por eso se llama hana-age o ‘freír flores’. Hacer la masa más grande no hace que sepa mejor ni nada, así que debemos tener cuidado de no exagerar. Sí, eso debería bastar.” El dulce aroma de la salsa tempura llenó la cocina junto con el olor a masa y verduras recién fritas y la paciencia de Wridra estaba llegando a su límite. Me di cuenta por la forma en que inconscientemente estaba dando golpecitos con el pie.

Saqué la tempura del aceite y me alivió ver que había salido bien, a pesar de que no se veían perfectos. El timbre sonó cuando recogí el siguiente trozo de camarón, haciéndome saber que nuestra invitada estaba aquí.

“Voy a freír el resto, ¿puedes ir a saludar a nuestra invitada?” dijo Marie. Tenía que decir que apreciaba lo confiable que era. No podría haber pedido una compañera mejor en el laberinto, pero nunca habría imaginado que sería igual de fiable a la hora de preparar la cena.

Fui a abrir la puerta de entrada justo detrás de la cocina… pero primero, me di la vuelta.

“Wridra, tu cola y tu cuerno…”

“Hmph.” A pesar de su puchero, cualquier rastro de la cola y el cuerno de Wridra ya se había desvanecido por completo. Debe haber sentido que teníamos una visita. Bueno, tan aguda como siempre.

Miré a Shirley frente al ventilador y extendí la mano hacia ella. Ella tomó mi mano, luego flotó en el aire y me poseyó. Entonces inmediatamente sentí un poco de hambre y fatiga. Pensando que debería comer lo antes posible, finalmente abrí la puerta.

Empujé la puerta para abrirla.

Allí estaba una mujer con el pelo bien peinado hasta los hombros. Ya estaba completamente oscuro afuera y ella hizo un pequeño saludo con la mano.

“Buenas noches. La comida está casi lista, así que por favor, entra.”

“Oh, huele muy bien. ¡Hola, Marie! ¿Y tú debes ser su amiga, Wridra? Te escuché por teléfono antes.” Wridra todavía estaba sentada en su silla mientras saludaba a la recién llegada. En momentos como estos, tenía la impresión de que ella era tímida con los extraños. Ella sonrió tranquilamente, su rostro era tan atractivo que incluso hacía sonrojar a otras mujeres. Kaoruko probablemente pensó que era misteriosa, pero era más o menos la personificación del apetito insaciable.

En cuanto a Shirley, parecía tener miedo de Kaoruko cuando la mujer se puso unas zapatillas y entró en la habitación. Estaba un poco preocupado, pero esperaba que se acostumbrara a ella después de vernos llevarnos bien.

Después de entrar a la habitación, Kaoruko comenzó a mirar alrededor de la habitación con curiosidad. Llevaba una blusa y pantalones, un atuendo sencillo, como el que usaba cuando trabajaba en la biblioteca. Entonces, se detuvo y se quedó mirando un punto.

“Eh. ¿Qué es esa cosa blanca que flota allí?” Señaló directamente al espíritu de hielo y se escuchó un fuerte golpe. Fue el sonido de Wridra saltando de su asiento y yo recibiendo un golpe en la cintura.

Froté mi cintura adolorida y miré a Wridra con una mirada que decía “¡¿No dijiste que no podría verlo?!” y ella me devolvió una mirada que decía “¡No debería haber podido!”. Alarmantemente, Marie estaba completamente concentrada en freír los camarones, por lo que ni siquiera se dio cuenta de lo que estaba pasando. Eso significaba que ni siquiera podíamos hacer que el espíritu se fuera. Gotas de sudor corrieron por mi cara y todo a mi alrededor parecía moverse en cámara lenta como si estuviera usando Aceleración.

Cálmate. Cálmate y piensa, Kazuhiho. ¿Qué pasaría si me riera y le dijera que es un hada de hielo?

Probablemente no era probable, pero en el peor de los casos, los medios de comunicación podrían venir a informar sobre nosotros. Si eso ocurría, tal vez ya no podría traer a Marie a este mundo…

Casi podía escuchar a mis neuronas trabajando a toda marcha. En serio, no podía pensar en la última vez que había estado tan acorralado. Incluso durante mi enfrentamiento contra el candidato a Héroe, Zarish, pude mantener la compostura lo suficiente como para disfrutar un poco.

“Bueno, estábamos haciendo un pequeño experimento científico antes de que aparecieras. Ya sabes, de esos que usan hielo seco. Aparece mucho en la televisión, por lo que es posible que lo hayas visto. Dame un momento mientras limpio.”

“¿Oh? Eh, ya veo. ¿Hielo seco?” preguntó. Sonreí agradablemente y luego, naturalmente, me moví entre ella y el espíritu de hielo.

Probablemente todavía no lo había visto bien. Si lo hubiera hecho, probablemente habría gritado. Y al usar frases como “apareció en la televisión” y “experimento”, la imagen en su mente debería haber cambiado lentamente a la del humo del hielo seco.

Sí, estoy seguro de que funcionará. Por favor, que funcione. Por favor.

Luego, manteniendo la calma y la serenidad, ignoré la frialdad en mi mano mientras agarraba al espíritu de hielo y me dirigía hacia el baño. Abrí la puerta y lo arrojé dentro del baño.

“Lo siento, volveré por ti más tarde, así que ¿puedes quedarte aquí un rato?” susurré. Procedió a flotar, como si dijera “Claro, lo que sea”. Tal vez fue porque había interrumpido su trabajo o porque lo había agarrado con tanta brusquedad, pero parecía un poco molesto. Decidí disculparme apropiadamente más tarde.

Luego, miré lentamente hacia la sala de estar.

Vi a Kaoruko sentada en la mesa charlando con Wridra. Finalmente, dejé escapar un suspiro de alivio. Pensé que iba a tener un infarto. Pero, ¿por qué pudo ver al espíritu? La pregunta apareció en mi mente mientras inhalaba y exhalaba lentamente varias veces.

Sí, volví a estar tranquilo. Decidí dar un paso al frente y actuar de la forma más natural posible. Es posible que haya vislumbrado al espíritu, pero una persona común no habría podido entender qué era. No había forma de que ella lo cuestionara. Respiré profundamente de nuevo y luego volví a la sala de estar. Cuando entré por la puerta, Kaoruko se dio la vuelta con una sonrisa en su rostro.

“Oh, bienvenido de nuevo. Me preguntaba, ¿qué es eso al lado del ventilador?” Mi corazón saltó en mi pecho, habiendo sido cuestionado inmediatamente después de caminar de regreso a la sala. No estaba preparado mentalmente y luché contra la urgencia de hacerme un ovillo.

Lentamente me volví hacia la dirección donde ella apuntaba. Mi corazón latía con fuerza y mi mirada se movió hacia el ventilador…

“¿Cómo hiciste ese bloque de hielo? Es incluso más grande que tu nevera.”

“Oh, sí, eso. De hecho, lo obtuve de un amigo mío que tiene una tienda de hielo. Escuché que mantiene fresca tu habitación. En realidad, es parte del experimento científico que mencioné”, respondí.

“Ohh”, dijo ella, impresionada, y sentí que la fuerza abandonaba mi cuerpo. En la esquina de mi visión, vi a Wridra agitando su mano y gesticulando, “¡Buena salvada!” seguido de un “Me muero de hambre”… pero la ignoré por ahora.

Vaya, eso estuvo cerca.

Pensé que tal vez Kaoruko estaba apuntando al hielo y no al espíritu en primer lugar. Pero luego lo reconsideré, pensando que habría sido extraño que ella lo llamara esa cosa blanca que flota allí. En ese momento, recordé que nació en Hokkaido. Aunque, ¿qué tenía eso que ver con todo?

Hmm, ¿podría su entorno haber estado tan plagado de naturaleza que estaba acostumbrada a los espíritus…?

Mientras consideraba esto, Marie me llamó.

“Terminé de freír el resto. ¿Me puedes ayudar a servir la comida, por favor?”

“Claro, pongamos un poco de arroz, entonces.” Todavía quedaban algunas preguntas sin respuesta, pero decidí volver a la comida por ahora.

Sin embargo, dado que la parte de freír estaba lista, no quedaba mucho trabajo por hacer. Eché un poco de arroz en tazones, coloqué la tempura encima y luego vertí la salsa para completar el plato. Eran una apetitosa variedad de rojo, verde y amarillo y el olor a tempura recién frito mezclado con la salsa de soja agridulce era simplemente celestial.

“Bien, todo listo. Ahora, vamos… Oh, no tenemos suficientes sillas.” Me di cuenta de que ya era hora de comprar sillas nuevas. Por lo general, solo estábamos Marie y yo aquí y era muy raro tener dos invitados. De hecho, hoy teníamos tres visitantes, si incluíamos a Shirley.

Fue muy descuidado por mi parte olvidar las sillas después de invitar a alguien a cenar. Mientras me preguntaba qué debería hacer, Kaoruko juntó las manos como si se le hubiera ocurrido una idea.

“¡Ya sé! Vivo directamente encima de tu casa, así que, ¿por qué no llevamos la comida allí? Mi esposo todavía está en el trabajo y tengo muchas revistas de viajes en mi casa.” Fue amable de su parte ofrecerlo, pero me sabía mal entrometernos en su casa. Sin embargo, estaba ese susto que tuvimos con el espíritu, así que lo reconsideré y pensé que tal vez sería mejor ir allí.

“Entonces me gustaría aceptar tu amable oferta. Bien, ¿pueden llevar un tazón cada una?”

Todas aplaudieron y cada una tomó un tazón. Nuestro grupo salió con tazones en la mano, lo cual fue una vista extraña. Marie, Wridra e incluso Kaoruko intercambiaron miradas, conteniendo la risa. Fue Marie la que se echó a reír primero. Ella estalló en un ataque de risa, incapaz de dar un paso por miedo a que se le cayera el tazón. Sus pies apuntaban hacia adentro y sus piernas temblaban como las de un ternero recién nacido.

Curiosamente, estos inexplicables ataques de risa tenían una tendencia a extenderse a los demás. Las demás hicieron todo lo posible por contenerse y le dieron una palmada en los hombros a Marie para instarla a avanzar.

No pude evitar preguntarme por qué teníamos tantas dificultades con la simple tarea de subir al ascensor. Llegamos a salvo al ascensor sin dejar caer un solo tazón y todos soltamos un suspiro de alivio.

Nos reímos entre nosotros y luego se abrió la puerta y entró un hombre de otro piso… Sentí que mi cara se enrojecía de vergüenza.

“Vaya, me ha sorprendido. Jaja, eso parece sabroso”, dijo en tono de broma.

“Sí, estamos a punto de comerlo juntos”, respondí. El hombre, que parecía haber pasado la edad de jubilación, nos miró con sorpresa y cerró la puerta. El olor a berenjena, calabaza y camarones llenó el pequeño ascensor y tragó audiblemente ante todos los tazones de tempura dorada que tenía delante.

“Estaba a punto de cenar, pero todo lo que puedo pensar ahora es en tazones de tempura y cerveza.” El ascensor se llenó de risas por su comentario juguetón. Nos reímos más fuerte de lo previsto de tanto aguantar y traté de disculparme, pero no pude controlarme.

Ese fue un encuentro bastante extraño e inesperado, pero hicimos una reverencia al llegar a nuestro piso y finalmente llegamos a la casa de Kaoruko.

“Ah, eso fue divertido. Ese hombre parecía realmente agradable”, dijo Marie.

“Jaja, eso fue bastante cómico. Sin embargo, mis costados no están en condiciones de soportar más.” Con eso, nos quitamos los zapatos y entramos a la casa de Kaoruko.

Solo vivían Kaoruko y su marido Tooru en la casa Ichijo y su apartamento era mucho más grande que el mío, en consideración a su futuro. El tamaño pasó de 1 LDK a 2 LDK, por lo que el tamaño del apartamento básicamente se había duplicado.

Me quedé mirando con nostalgia durante algún tiempo, pero luego sentí que Marie tiraba de mi camisa.

“¡Wow! ¡Mira, mira! ¡La televisión es tan grande!”

“Ver películas es el único pasatiempo que tenemos en común, así que terminamos comprando una grande. Marie, Wridra, no duden en venir en cualquier momento para ver algo.” Kaoruko sonrió amablemente. Teniendo en cuenta que era el tipo de persona que había querido ser amiga de Marie desde el primer día que se conocieron, estaba seguro de que haría todo lo posible para que sus invitados se sintieran bienvenidos.

Marie se volvió hacia mí, pero yo, por supuesto, no tenía motivos para objetar. Aunque por lo general tenía a la gata negra cerca como compañía, me preocupaba dejarla sola mientras estaba en el trabajo. Asentí y el rostro de Marie se iluminó de alegría.

Decidimos cenar antes de discutir sobre nuestro viaje. Cada uno de nosotros tomó asiento y luego cogimos nuestros palillos después de preparar un poco de té. Después del habitual “Itadakimasu” antes de la comida, Marie y Wridra empezaron por los camarones, que eran la estrella principal de la comida.

Sus dientes los mordieron fácilmente con un crujido satisfactorio. El aroma primero las golpeó como un pinchazo y la fragancia de los camarones se extendió por sus bocas. Los camarones tenían un sabor sabroso que era distintivo de los mariscos y el umami brotó de ellos con cada bocado. Los camarones regordetes y jugosos se volvían peligrosamente sabrosos cuando se realzaban con la salsa tempura dulce y picante. No era de extrañar que sus bocas rebosaran de saliva mientras saboreaban la textura de la comida.

Mientras comían, sus papilas gustativas buscaron el arroz blanco que se asomaba de los tazones para complementar el plato principal. Esta era probablemente una reacción instintiva para aquellos que estaban acostumbrados a la comida japonesa. Sin embargo, el arroz ya estaba delicioso por sí solo, habiendo absorbido toda esa salsa.

Se metieron vigorosamente en la boca el arroz blanco recién cocido y lo mezclaron con los camarones. Entonces, el torrente de umami y la dulzura del arroz se apoderaron de sus sentidos. Las dos dejaron escapar un suspiro y luego intercambiaron miradas mientras continuaban masticando. Dejaron escapar unas carcajadas extrañas y ahogadas y finalmente se tragaron los bocados de comida.

“¡Mmm, la tempura de camarones es taaaan buena! Tiene un sabor tan ligero y refinado, ¡pero complementa el arroz tan perfectamente!”

“¡Delicioso…! Hnng, ¡qué error fue evitarlos hasta ahora debido a su apariencia de insectos! ¡Mis disculpas, camarones!”

Bueno, las damas del mundo de fantasía ciertamente hicieron maravillosas expresiones faciales como de costumbre. Parecía que les gustaba mucho el sabor dulce y picante y continuaron devorando con entusiasmo. Estaban disfrutando tanto de la comida que era divertido verlas.

Oh, ¿yo? Todavía no puedo saborear ni oler la comida, por supuesto.

Sin embargo, podía sentir a Shirley pensando “¡Delicioso!” así que tal vez esto no era tan malo. Era mucho más satisfactorio que otras personas disfrutaran de mis comidas que comerlas yo mismo.

“¡Mmm, esta salsa debe ser lo que hace que la tempura combine tan bien con el arroz! Da miedo imaginar hasta dónde ha llegado Japón en su búsqueda de comida deliciosa.” Marie se encontró con los ojos de Kaoruko, que miraba a la elfa de la misma manera que yo. Kaoruko se puso roja por alguna razón y luego torpemente mordió su tempura. Sus dientes se hundieron en ella con un suave crujido y sus ojos se ensancharon.

“Oh, esto sabe mejor que cuando yo lo preparo. Lo fritaste muy bien.”

“Para ser honesto, Marie merece el elogio. Es una gran cocinera y más de la mitad de ellos fueron fritos por ella.” Fue una pena que Marie estuviera ocupada cogiendo un poco de tempura de verduras y no escuchara el cumplido.

La berenjena tibia y suave estaba especialmente deliciosa. Los hombros de Marie temblaron y luego pareció recordar el arroz y comenzó apresuradamente a meterse un poco en la boca.

Sin embargo, había una cosa que faltaba en esta comida. Por la expresión del rostro de Marie, me di cuenta de que le faltaba algo que solemos disfrutar con nuestra comida. Pero ella y Wridra inmediatamente se animaron con la siguiente pregunta de nuestra anfitriona.

“Oh, cierto. ¿Ustedes dos beben?”

“¡Sí!”

“¡Yo sí!”

Las dos mujeres inmediatamente levantaron la mano y los ojos de Kaoruko se abrieron de par en par. La mayoría de la gente no esperaba que Mariabelle bebiera alcohol cuando parecía que podía ser una estudiante de preparatoria. Ese “ustedes dos” en realidad había sido dirigido a Wridra y a mí.

“Marie, no puedes beber hasta los veinte, ¿verdad?”

“¡¿…?!”

Por supuesto, no habría habido ningún problema si bebiera, considerando que ella tenía más de cien años. Pero teníamos nuestras circunstancias mientras vivíamos en Japón. Al parecer, Marie finalmente recordó esto y su expresión se volvió cada vez más triste. No pude evitar sentir pena por ella, así que también me negué.

Por supuesto, a Wridra no le importó ni un poco leer la atmósfera y respondió, “¡Entonces, beberé un poco!” Fue realmente muy malo de su parte. Kaoruko sirvió un poco de sake frío para combinar con la tempura y Wridra no pudo parar de beberlo. El sake ginjo tenía un aroma afrutado que permanecía en su aliento al exhalar. Después de saborear el regusto durante un tiempo, sus papilas gustativas estuvieron listas para disfrutar de más tempura.

Marie observó la expresión de pura felicidad de la Archidragona con los hombros temblando de frustración y no pude soportar mirar. Y así, en secreto decidí comprarle a Marie un poco de sake ginjo para que lo probara más tarde.

Habiendo terminado nuestra comida, llegó el momento de discutir el tema principal: nuestro destino de viaje.

Kaoruko viajaba a menudo con su esposo Tooru y ocasionalmente nos ayudaba compartiendo sus conocimientos. El tazón de tempura que le había servido era, en parte, una muestra de agradecimiento por todo lo que había hecho por nosotros. Pero cuando le dije que queríamos ir a la playa, frunció el ceño con una expresión preocupada.

“Hmm, ¿durante el Obon, la época más ocupada del año…? Y no tenemos mucho tiempo hasta el gran día… Seguramente todos los buenos lugares ya están reservados.”

“Ah, pensé que podría ser difícil… Aun así, me gustaría evitar grandes multitudes, si es posible.” Hacer un viaje de un día a algún lugar local habría sido el método más fácil. Pero una playa así estaría llena de turistas de toda la ciudad, por lo que probablemente estaría completamente llena. No podía imaginar que las chicas se divertirían nadando en un lugar así. En ese caso, probablemente era mejor simplemente ir de viaje a algún lugar en el mundo de los sueños.

No me importaba quedarme en un lugar distante porque había obtenido mi bono, pero parecía que los hoteles más bonitos siempre solían reservarse primero, incluso si eran un poco caros. No era como si la gente se quedara en estos lugares todo el tiempo, por lo que era parte de la naturaleza humana querer quedarse en un lugar agradable. Enumeré algunos lugares de mi lista de deseos, pero Kaoruko seguía mostrando un aspecto bastante sombrío.

“Por desgracia, todos los lugares están abarrotados durante el Obon. Así que tal vez deberíamos cambiar nuestra forma de pensar.” La miré, confundido, y ella abrió una revista de viajes ante mí. En ella aparecían fuegos artificiales decorando el cielo nocturno y Marie y Wridra se inclinaron para ver mejor.

“Por ejemplo, en algunos lugares hay espectáculos de fuegos artificiales en épocas especialmente concurridas. Como estará lleno por todas partes, puede ser mejor buscar formas de divertirse porque habrá mucho movimiento.”

Ya veo, así que estos periodos de gran afluencia son en realidad cuando los eventos son más divertidos.

Así que tal vez fuera mejor dejar la playa de arena blanca para el mundo de los sueños y disfrutar de los fuegos artificiales en Japón. Pero, todavía teníamos un problema…

Si no fuera por esa restricción fronteriza… pensé para mí.