Jinrou E No Tensei Maou no Fukukan (NL)

Volumen 6: La Rebelión

Capitulo 6: Hombres Lobo

Parte 4

Aunque no podían escuchar los tambores o las trompetas, era obvio que sus aliados estaban en peligro, por lo que habían ido a ayudar. A pesar de que su ejército estaba en la retaguardia, el pelotón cargó valientemente hacia adelante. Desafortunadamente, simplemente empeoraron las cosas.

“Veight, ese pelotón está siendo masacrado…”

Suspiré mientras veía la escena a través de mi telescopio.

“Escogieron el peor momento para atacar.”

El ejército del príncipe Ashley estaba en tal estado de confusión que habían confundido el pelotón con una unidad enemiga y ahora los estaban atacando.

Ni siquiera miraban las banderas del pelotón ni las crestas en sus armaduras. El ejército del príncipe Ashley perdió una buena parte de sus fuerzas, principalmente a manos de sus propios aliados. Fue doloroso de ver. Peor aún, el resto del ejército del príncipe Ashley no pudo hacer nada para detenerlo. Estaban atrapados.

Fue entonces cuando las alas de caballería del príncipe Woroy convergieron en los desventurados lanceros. Solo había descubierto esto después de reencarnar, pero para un soldado de infantería, no había nada más aterrador que enfrentar que una carga de caballería.

Cuando los lanceros del príncipe Ashley vieron venir a la caballería, su moral se desplomó. Al darse cuenta de que su ejército ya no podía luchar, Toskin ordenó la retirada. Los trompetistas hicieron sonar la señal de retirada.

“En primer lugar, ¿por qué demonios puso allí su caballería? ¿No se dio cuenta de que eso los haría difíciles de maniobrar?”

Kite respondió, “Oh, ahora lo recuerdo. El tipo que está al mando del ejército del príncipe Ashley, el marqués Toskin, tiene un hijo que es capitán de la Caballería Imperial.”

“Ahh, ya veo. Probablemente puso a la caballería en un lugar seguro porque no quería que su hijo saliera lastimado.”

No había forma de saber con certeza si esa era la razón o no, pero de cualquier manera, fue el factor que más contribuyó a la pérdida de Toskin. No podía permitirse el lujo de favoritismos cuando su ejército ya estaba en desventaja numérica. Vi como el ejército del príncipe Ashley fue derrotado, luego me volví hacia Kite con una sonrisa.

“Regresemos. Las tropas del príncipe Woroy vendrán aquí tan pronto como termine la batalla. Deberíamos salir de aquí.”

“Ah, ¿qué quieres hacer con esta cabaña de nieve?”

“Dejémosla como está. Servirá como prueba de que estuve aquí.”

Conociendo al príncipe Woroy, se daría cuenta de inmediato de que el misterioso observador había sido yo. Para asegurarme doblemente de que se diera cuenta de que fui yo, saqué mi sable de duelo y lo tiré al suelo. Quería demostrar que había estado viendo la batalla, para que el príncipe Woroy supiera que no había participado en ella.

De esa forma sabría que la facción de Eleora todavía era neutral y, lo que es más importante, que estaba interesado en ver cómo progresaba el conflicto entre el príncipe Iván y el príncipe Ashley. Ahora, veamos qué términos nos ofrecen ambas partes.

“Kite, ¿hiciste un seguimiento de todo lo que sucedió?”

“Sí. He memorizado todo, incluidos los movimientos que tomaron ambos ejércitos. Cuando regresemos, lo escribiré todo en un informe para ti.”

“Perfecto. Volvamos, hagamos un poco de té y llamemos a todos para un consejo de guerra.”

“Un poco de té caliente definitivamente suena bien en este momento.”

Kite asintió, tiritando de frío.

El ejército del príncipe Ashley había sufrido graves bajas en la batalla de Nodgrad. Habían perdido alrededor de 5000 hombres. Aunque eso incluía a los desertores y soldados que habían sido capturados por el enemigo también, así que no todo fueron víctimas. Por otro lado, el príncipe Woroy apenas había perdido 1000 hombres. Como su ejército había comenzado con 40,000 hombres, una pérdida tan pequeña era como una gota en un balde.

“Pero el ejército del príncipe Ashley aún no ha sido aniquilado, ¿verdad?” preguntó Lacy, trayendo una bandeja de té fresco y caliente. Tomé un sorbo para calentarme y respondí, “Claro, pero ¿cómo serían los números si los dos ejércitos pelearan de nuevo ahora?”

Lacy hizo una rápida aritmética mental.

“Sería treinta y nueve mil contra veinticinco mil, ¿verdad? ¡Oh! Eso es malo.”

Asentí.

“Sí, habría una discrepancia aún mayor. Y si estaban perdiendo cuando la brecha era menor, no hay forma de que empiecen a ganar ahora.”

“Ya veo…”

Por supuesto, ambas partes eran capaces de reclutar más tropas y el ejército del príncipe Ashley no sería lo suficientemente estúpido como para intentar las mismas tácticas dos veces. Pero eso no cambiaba el hecho de que la situación no se veía bien para ellos.

Según los informes de ser Lekomya, el príncipe Ashley había ordenado a sus hombres que abandonaran las llanuras y comenzaran a fortificar los castillos cercanos. Quería convertir esto en una batalla defensiva. Le di un mordisco al bollo que Lacy me había traído con el té y le dije, “El ejército del príncipe Ashley está planeando esconderse en sus castillos para compensar la diferencia en los números. Normalmente, cuando quieres asediar un castillo, necesitas de tres a cinco veces más tropas que el castillo que estás asediando.”

“¡¿Se necesitan tantos?!”

“Eso es lo que he escuchado, al menos. No soy un experto en guerras de asedio de ninguna manera. El lado atacante tiene que acampar a la intemperie y deben ser constantemente cautelosos con las salidas del castillo.”

Kite me interrumpió y murmuró, “¿Pero no puede el lado atacante simplemente rodear el castillo y matar de hambre al lado defensor?”

“Sí, las tácticas de hambre pueden funcionar. Pero si el lado atacante no tiene cuidado, terminarán quedándose sin comida primero.”

Dado que el ejército del príncipe Woroy estaría entrando en territorio enemigo, no podrían obtener comida de los lugareños.

“De todos modos, podemos dejar que las partes interesadas descubran cómo lucharán. Ahora mismo es la oportunidad perfecta para vender las tropas de Eleora a un alto precio.”

Lord Kastoniev había hecho un gran trabajo reuniendo a los nobles de Rolmund Este y ahora tenía un ejército considerable a sus órdenes. Eran unos 15,000 hombres. De esos 15,000 hombres, 3000 eran tropas personales de lord Kastoniev, mientras que 4000 pertenecían a la familia Originia de la que Eleora era parte.

Si bien el ejército no era lo suficientemente grande como para declararse a sí mismo como una tercera fuerza en esta lucha de poder, era lo suficientemente grande como para inclinar la balanza a favor de con quien se aliase.

***

Un mensajero del palacio llegó mientras intentaba decidir a qué lado unirme. Parecía que el príncipe Ashley fue el primero en pedirle ayuda a Eleora. Como representante de Eleora, decidí hablar con el mensajero durante el almuerzo.

Comencemos con un recordatorio amable.

“Como estoy seguro de que ya sabes, la princesa Eleora no tiene interés en el trono. Su posición en la línea de sucesión es demasiado baja.”

“S-Sí, por supuesto que soy consciente.”

El mensajero que el príncipe Ashley había enviado, el Barón algo, se limpió el sudor de la frente. Asentí, satisfecho, y agregué, “Por esta razón, Su Alteza solo ha reunido la cantidad mínima de tropas necesarias para protegerse. Sospecho que nuestras fuerzas les serán de poca utilidad, pero…”

Me estaba haciendo el tonto a propósito, lo que implicaba que, como Eleora no tenía interés en el trono, tampoco tenía soldados. Como esperaba, el mensajero comenzó a entrar en pánico un poco.

“¡Pero la tiranía del príncipe Iván debe ser detenida! Si esto continúa, ¡la gente de Rolmund sufrirá! ¡Por el bien de la paz dentro del imperio, por favor pídale a la princesa Eleora que ayude a reprimir al ejército rebelde!”

“Me temo que me has puesto en una posición difícil.”

No estaba realmente en una posición difícil, pero de todos modos fruncí el ceño. Hasta ahora, el lado de los Doneiks no nos había enviado mensajeros. Eleora y la familia Doneiks no estaban en términos extremadamente buenos, por lo que creo que tenía sentido que no vinieran a pedir cooperación ahora.

Después de todo, el difunto lord Doneiks había tratado de asesinarla; lo que significa que terminaríamos poniéndonos del lado del príncipe Ashley sin importar qué. La pregunta era, ¿cuánto podríamos sacar de la alianza? A menos que el príncipe Ashley estuviera bien acorralado, no seríamos recompensados ​​demasiado por ayudarlo.

Pero si esperábamos demasiado y él se sentía tan presionado que no había esperanza de recuperación, nuestras tropas por sí solas no serían suficientes para salvarlo. Ahora mismo parecía el equilibrio perfecto entre esos dos puntos, pero quería estar seguro.

“¿Dónde está el príncipe Ashley en este momento?”

El mensajero inclinó la cabeza en tono de disculpa.

“Mis más humildes disculpas. El príncipe Ashley hubiera preferido venir en persona, pero actualmente está ocupado con reuniones de estrategia y ese tipo de cosas.” Bajó la voz y agregó, “El castillo que el conde Ryaag poseía, el Castillo Sveniki, acaba de caer. Públicamente estamos afirmando que el ejército del príncipe Woroy lo capturó, pero en realidad… el conde era un espía de la facción de Doneiks. En este momento, Su Alteza está comprobando que los miembros restantes de su facción son leales.”

Kite, que estaba parado detrás de mí, mencionó casualmente, “El conde Ryaag fue uno de los principales servidores del príncipe Ashley, lord Veight.”

La familia Doneiks probablemente había usado uno de sus planes habituales para que el conde desertara.

Sin embargo, valió la pena el riesgo, ya que no solo habían obtenido un castillo sin luchar, sino que también habían asestado un golpe psicológico a la facción de Ashley. Si incluso sus servidores de confianza lo abandonan, el príncipe Ashley ya está acabado. Especialmente si ese tipo que lo traicionó filtró información vital.

Lo más probable es que eso era lo que pensaban los seguidores del príncipe Ashley. Por supuesto, yo también estaba empezando a preocuparme. Fingiendo estar en conflicto, murmuré, “¿No está el Castillo Sveniki a solo medio día caminando de la capital?”

Si ahora estuviera en manos del príncipe Woroy, podría usarlo como base para atacar la capital. Incluso si lo repelemos, sus tropas solo se retirarían a poca distancia. Maldición, a este ritmo, el príncipe Ashley podría perder. Si bien ya había decidido unirme al lado del príncipe Ashley, no quería vender nuestro ejército por menos de lo que valía. Especialmente porque expondría a los aliados de Eleora al peligro. Suspirando, sacudí mi cabeza.

“Si la situación ya es tan grave, me temo que tendré que avisar a la princesa Eleora que unirse a la causa del príncipe Ashley sería demasiado peligroso.”

“¡No hablas en serio, ¿verdad?!”

El mensajero palideció. Sin demora, continué, “Sin embargo, también creo que es el príncipe Ashley quien está luchando del lado de la justicia. Como meraldiano, no deseo aliar a mi país a un imperio gobernado por alguien injusto. Nuestros aliados deben ser nobles y dignos de confianza.”

La cara del mensajero se iluminó al instante.

“E-Entonces…”

Asentí.

“Le pediré a la princesa Eleora que los ayude.”

“¡Muchas gracias!”

El mensajero inclinó la cabeza. Era hora de finiquitarlo.

“Sin embargo, si vamos a pelear, entonces debemos ganar. ¿No es así?”

“P-Pero por supuesto…”

Le sonreí al mensajero y dije, “Por eso me gustaría solicitar que luchemos no bajo el mando del príncipe Ashley, sino bajo el mando de la princesa Eleora. Nos aliaremos con ustedes, pero no seremos parte de su ejército.”

“¿P-Puedo preguntar por qué?”

Porque tu príncipe apesta en la guerra y queremos ser libres para luchar a nuestra manera. Por supuesto, no podía decir eso, así que se me ocurrió otra excusa.

“El ejército de la princesa Eleora está compuesto principalmente por cuerpos de magos. Utilizarlos de manera efectiva requiere un conocimiento especializado que solo posee la princesa Eleora.”

Honestamente, mi lógica era principalmente una mierda, pero lo importante era dar una razón. De esa manera tenía una excusa para decirle no a la alianza si el mensajero rechazaba mi demanda. La vida del príncipe Ashley estaba en juego aquí. Así que estaba bastante seguro de que el mensajero no objetaría detalles triviales como quién estaba al mando. Sin embargo, por si acaso, agregué, “Tener la princesa Eleora al mando de nuestras fuerzas es necesario para la victoria. ¿Es esta condición aceptable para ti?”

De esta manera, Eleora estaría luchando no como uno de los soldados del príncipe Ashley, sino como un miembro igualmente importante de una alianza conjunta. Mi plan era expandir enormemente la influencia de Eleora en el caos que seguiría a la supresión del ejército rebelde. El mensajero consideró mis condiciones durante unos minutos, luego se secó el sudor de la frente y respondió, “No tengo la autoridad para tomar una decisión como esta, así que, por favor, ¿puedo volver con el príncipe Ashley e informarle de sus condiciones?”

“Por supuesto.”

Sonreí de la forma más tranquilizadora que pude. Esa noche, el príncipe Ashley envió el carruaje personal de la familia real para que me llevara al castillo.

***

Impresionado por lo ostentoso que era el carruaje, me senté en silencio mientras me llevaba al palacio. El hecho de que el príncipe Ashley hubiera enviado su carruaje personal para recogerme demostraba que sabía cuán vital era la ayuda de Eleora. Sin embargo, la cosa era como una bóveda portátil de joyas y simplemente no podía calmarme dentro. Me condujeron al estudio del príncipe Ashley y él sonrió cordialmente cuando entré.

“Te he estado esperando, lord Veight.”

A primera vista, su sonrisa se veía igual que siempre, pero después de una inspección más cercana, me di cuenta de que el Príncipe de las Flores parecía bastante estresado. También había algo sombrío en su sonrisa. Cuando se dio cuenta de que había visto a través de él, su sonrisa se desvaneció y me ofreció un asiento.

“Por favor, siéntate. Me gustaría omitir las formalidades y hablar directamente sobre—”

El príncipe Ashley de repente se tambaleó y me apresuré a apoyarlo.

“¿Estás bien?”

“S-Sí. Mis disculpas. Y gracias.”

Está aún más agotado de lo que parece. Lo senté en un sofá cercano para dejarlo descansar. También llamé a una criada y le pedí que trajera algo caliente para beber.

“Su Alteza, te ves agotado. Por favor, descansa.”

“Me temo que no puedo permitirme descansar mientras el imperio está en crisis.”

El príncipe Ashley se recostó en el sofá y me sonrió con cansancio. De alguna manera, todavía se las arreglaba para verse guapo mientras hacía eso. Estaba empezando a pensar que tenía menos que ver con su aspecto y más con su educación. Tomé un sorbo del té de hierbas que la criada del príncipe Ashley nos trajo e hice un gesto para que volviera al tema principal. Él asintió y dijo, “Me gustaría formar una alianza con Eleora para superar la crisis actual.”

“¿Estás dispuesto a aceptar que ella estará en igualdad de condiciones contigo?”

Este punto era muy importante. El príncipe Ashley asintió.

“Por supuesto. Todavía no he sido coronado emperador formalmente. Como tal, no tengo derecho a dar órdenes a Eleora. Pero si no derroto a los ejércitos del príncipe Iván, tendré una bolsa en la cabeza en lugar de una corona.”

En Rolmund, a los criminales que iban a ser ejecutados se les ponían bolsas en la cabeza antes de que los mataran. Debe estar en una situación realmente apretada si habla de su propia muerte. Los rolmundianos nunca dejaban de aterrorizarme. Pero ahora no era el momento para que tuviera miedo. Necesitaba hacer de villano otra vez.

“No temas, Su Alteza. Enviaré un mensajero a la princesa Eleora de inmediato. Debería poder traer a sus ejércitos aquí de inmediato.” Manteniendo mi tono gentil, probé ligeramente al príncipe. “Como fuiste lo suficientemente amable como para aceptar mis demandas, imagino que la princesa Eleora no tendrá reparos en ayudarte. Sin embargo, ¿estás seguro de esto?”

El príncipe Ashley asintió.

“Lo estoy. Teniendo en cuenta la situación, no tengo motivos para rechazar tus condiciones. Sobre todo, cuando eso me traerá 30,000 soldados.”

¿30,000? Solo tenemos 15,000, sin embargo… Después de pensarlo dos veces, todo encajó. Si Eleora elegía unirse al príncipe Iván, el príncipe Ashley tendría 15,000 soldados adicionales con los que lidiar.

Por otro lado, si ella se unía a él, no solo no tendría que luchar contra otros 15,000 hombres, sino que también tendría 15,000 hombres nuevos. Por lo tanto, lograr una alianza con Eleora era equivalente a ganar 30,000 hombres.

Parece que entiendes cuán vital es Eleora en este conflicto. Si bien me impresionó la idea del príncipe Ashley, me reí entre dientes. Parecía que estaba dispuesto a comprar los soldados de Eleora por más de lo que valían. Si así es como lo quieres, no tengo motivos para regatear contigo.

***

Seguí discutiendo asuntos con el príncipe Ashley y parecía que la situación era peor de lo que pensaba. La mayoría de sus seguidores eran nobles que habían elegido seguirlo simplemente porque era el príncipe heredero. Habían pensado que no tendrían que hacer nada para que Ashley sucediera al trono. Pero la derrota del marqués Toskin en Nodgrad los había agitado.

Por otro lado, los partidarios del príncipe Iván habían seguido a la familia Doneiks durante mucho tiempo y su lealtad era firme. Todos gobernaban tierras en el extremo más septentrional de un imperio ya septentrional y el duro invierno los había obligado a trabajar juntos durante generaciones. Además de eso, estaban apoyando una rebelión, por lo que sabían que no había vuelta atrás para ellos.

No solo había una gran diferencia en el apoyo que tenían el príncipe Ashley y el príncipe Iván, sino que había una gran diferencia en sus ejércitos. Tomé un sorbo de mi segunda taza de té de hierbas y le sonreí al príncipe Ashley.

“No podrás resistir el ventoso frío que viene del norte confiando en tus amigos de conveniencia.”

“Oh, lo sé. Pero esta batalla es mi responsabilidad. Planeo seguir hasta el final.”

Parecía que el príncipe Ashley estaba preparado para luchar hasta la muerte, a pesar de saber que la mayoría de los nobles en su bando eran simplemente oportunistas. Si solo fuera un mejor táctico, incluso podría haber tenido una oportunidad. Solo había escuchado informes de segunda mano sobre la derrota en Nodgrad, por lo que no tenía idea de por qué realmente había perdido. Todos los generales habían falsificado sus informes para mostrarlos mejor, ya que no querían ser degradados. Deberías haber enviado un observador imparcial para observar la batalla. El príncipe Ashley me sonrió con tristeza.

“Debería haber dedicado tanto tiempo a estudiar estrategia militar como a estudiar agricultura y medicina. No sé nada de liderar ejércitos. Cuando era niño, mi tío… lord Doneiks vino al palacio y renovó ese invernadero para mí, así que terminé pasando el tiempo estudiando temas relacionados con ello.”

“Es posible que eso fuera exactamente lo que lord Doneiks había querido.”

El príncipe Ashley asintió.

“Puede que tengas razón. Pero como seguí el camino que mi tío me trazó, pude disfrutar de una vida relativamente tranquila. Evitar los asuntos militares por completo fue parte de la razón por la que pude tener éxito como príncipe.”

“Ya veo.”

Pero como resultado, ahora no había fuerza capaz de rivalizar con el ejército de los Doneiks. No tenía dudas de que ese viejo astuto nos sonreía desde la otra vida. Desafortunadamente para él, mientras la familia Doneiks estuviera planeando una posible invasión a Meraldia, estaría allí para detenerlos.

“Príncipe Ashley, déjanos la lucha a nosotros. Los hombres que traje conmigo de Meraldia son expertos en operaciones especiales y cada uno de ellos es tan fuerte como cien hombres. Sin embargo, lo más importante es que el hecho de contar con el apoyo de Meraldia es una prueba de que tu causa es justa. Los nobles que están dudando en apoyarte seguramente se comprometerán de todo corazón a tu causa ahora.”

“Es tranquilizador escuchar eso. Como recompensa por ayudarme a reprimir esta rebelión, tengo la intención de darle a Meraldia términos más favorables durante las negociaciones.”

En realidad, mi recompensa será asegurarme de que dejen de interferir con Meraldia por completo. Dicho esto, los futuros tratos con el príncipe Ashley serían mucho más fáciles si estuviera en deuda conmigo. Esta también era una buena oportunidad para mostrar el poder de las fuerzas de Meraldia.

“Su Alteza, ¿qué piensa hacer con el Castillo Sveniki?”

“Así que ya has oído hablar de eso. Ese castillo es mi mayor preocupación en este momento.”

El Castillo Sveniki custodiaba el camino que se extendía entre Schwerin y el norte. Era un pequeño castillo que yacía en una llanura abierta, pero sería difícil recuperarlo una vez que el príncipe Woroy lo convirtiera en su base.

“Con lo cerca que está el castillo de la capital, el ejército rebelde es capaz de atacar antes de que lleguen los refuerzos de Eleora. Quiero recuperarlo, pero mis generales están divididos sobre a quién enviar para hacerlo.”

Nadie quería ser el que se ofreciera a asumir una misión tan peligrosa y los generales del príncipe Ashley no sabían quién más podría ser un traidor. La solución más simple sería que el príncipe Ashley nombrara a alguien, pero no sabía nada sobre la guerra. Esta era una oportunidad perfecta para mí. Sonreí y dije, “Traje cincuenta de mis soldados conmigo a la capital. Podemos recuperar el Castillo Sveniki por ti.”

Atónito, el príncipe Ashley se levantó del sofá.

“¡Eso es demasiado imprudente! …¿De verdad puedes hacerlo?”

El príncipe Ashley estaba medio sospechoso, medio esperanzado. Con el corazón palpitante, dije con toda la confianza que pude, “Si no lo creyera posible, no te lo habría sugerido. Déjame este asunto a mí, Su Alteza, y espera las buenas noticias.”

Ah, sí, casi se me olvida mencionar lo más importante.

“Si bien mis hombres serán suficientes para recuperar el castillo, necesitaré algunas de tus tropas para resguardarlo. ¿Puedo tomar prestados algunos miembros de tus reservas?”

“Por supuesto. Llévate a tantos miembros de mi Guardia Imperial como necesites. Siéntete libre de usarlos como mejor te parezca.”

Que príncipe tan generoso. Supongo que está tratando de mostrarme lo amable que es con sus aliados. Sin embargo, era muy típico de él no discutir sobre pequeñas concesiones. Si él estaba dispuesto a ser tan generoso, bien podría aprovecharlo.

“Muchas gracias. No planeo usarlos hasta que el castillo haya caído, así que espero poder devolvértelos intactos.”

Me puse de pie y la curiosidad del príncipe Ashley finalmente lo venció.

“Lord Veight, ¿qué tipo de estrategia planeas emplear?”

Mordió el anzuelo. Me volví hacia él con una sonrisa.

“En la guerra, hay momentos en que un general no puede darse el lujo de dar respuestas a su señor. Con lo que quiero decir, es un secreto.”