Haken no Kouki Altina (NL)

Volumen 9

Capitulo 4: La Batalla para Liberar a los Ciudadanos de la Ciudad Grebauvar

Parte 3

Un anciano caballero lo amonestó:

“Refresca tu cabeza. Estás en la presencia de Su Alteza”.

Lo que significaba que si Latreille no estuviera allí, el anciano caballero también tendría algo que decir.

Eso era natural.

Perdieron a muchos de sus subordinados.

Después de que el personal se calmó, Latreille preguntó:

“Sir Regis, ¿tiene algo que decir sobre nuestras pérdidas innegables?”

“B-bueno… Tener menos pérdidas sería mejor…”

“Hmm. Mi enfoque no es correcto. ¿Las pérdidas están fuera de tus expectativas?” Regis se puso pálido.

Esta pregunta era difícil de responder. Pero él no podía mentir.

“… Está dentro de mis expectativas”.

¿¡Qué!? Un caballero gritó y se puso de pie, pero la gente que lo rodeaba lo agarró por los hombros y lo sentó.

Estaba a punto de sacar su espada desde la ira. Germain tosió dos veces.

“Puedo entender tu sed de sangre de perder a tus hombres. Pero lo que tenemos que hacer ahora es asegurarnos de que sus sacrificios no sean en vano, y ganemos esta guerra. Espero que puedan calmarse y participar en esta reunión”.

El joven caballero respiró profundamente.

“Hmmp! ¡Lo entiendo! ¡Pero no puedo fingir que no escuché eso! Ese tipo dijo que esperaba pérdidas. Lo que significa decir que ya predijo que los fusileros serían desplegados en la calle de producción de acero ¿verdad?”

Regis se bañó una vez más con la mirada de los oficiales del Estado Mayor. Él no pudo responder.

No quería encontrar excusas, pero decir “lo predije” agitaría a la otra parte. Lo que Regis quería era una discusión racional.

Latreille se encogió de hombros.

“No creo que Regis proponga un plan incluso después de predecir que las vidas de los soldados se perderían sin sentido… Pero tal malentendido podría surgir sin una explicación adecuada. Como comandante, me gustaría disipar la sensación de desconfianza entre mis oficiales de estado mayor”.

Su opinión era apropiada.

Regis debería compartir sus pensamientos.

Sin embargo, Regis se sintió incómodo. Era inseguro, como siempre, y le resultaba difícil articular sus palabras.

Si dejara sus pensamientos al descubierto, ¿solo ganaría más ira de los demás?

¿Qué pasa si ellos no podían entender a pesar de su explicación?

Cuando él era el estratega de Altina, las personas a su alrededor rara vez pedían explicaciones.

Incluso si él le ordenó a los cañones disparar a la fortaleza a pesar de estar fuera de alcance, el comandante de artillería no cuestionó sus órdenes. Como la vez que pidió derramar petróleo cerca de la Capital Imperial, y cuando hizo que la unidad pasara toda la noche derramando agua del lago…

Altina, Jerome y los comandantes de las unidades llevaron a cabo fielmente el plan de Regis.

– No, si él explicara, definitivamente lo entenderían. Tal vez era problemático escuchar los detalles.

Tal vez Regis todavía no se había ganado la confianza del Primer Ejército Imperial, por lo que se le pidió que explicase, así de simple.

Él respiró profundamente.

Los que se reunieron aquí eran las élites del Ejército Imperial.

Si fuera el Regis de hace un año, probablemente no se le daría la oportunidad de hablar. Se puso nervioso al pensar en eso, pero dado que ese era el caso, definitivamente entenderían si él explicaba — Se dijo a sí mismo.

“… Mi predicción… es que el enemigo desplegaría sus fuerzas principales en el lado de la fortaleza. Adiviné bien, ya que eso es natural. El problema es… Cuán grande fuerza desplegarían en la calle de producción de acero. Y cómo están posicionados. Si el enemigo está en las paredes, podremos captar sus números. Pero no estaban allí, los fusileros estaban formados detrás de eso. Como si el enemigo conociera nuestros planes”.

La expresión de Latreille se volvió sombría. Germaine inclinó la cabeza.

“… Sir Regis, ¿sospecha que tenemos un espía entre nosotros?” Tch, los oficiales del estado mayor se miraron el uno al otro.

Un caballero de mediana edad gritó esta vez. “¿¡Estás cuestionando nuestra lealtad!?” Regis dio un paso atrás y negó con la cabeza.

“No no… no del todo. Establecer a la calle de producción de acero como el objetivo se hizo esta mañana. Aunque pensé en hacer de ese lugar la principal prioridad después de enterarme de que los ciudadanos estaban detenidos allí… Pero lo propuse y las órdenes se emitieron esta mañana”.

Todos recordaron la reunión de guerra. Latreille permaneció en silencio.

Germain asintió como si representara a los oficiales de estado mayor.

“Es como dijo Sir Regis. Partimos justo después de que los planes fueron establecidos”.

“Sí. Comenzamos a preparar las tropas y todo el ejército partió justo después de la reunión de guerra… En tan poco tiempo, sería imposible transmitir la información al enemigo que se encerró en la fortaleza. Además, se necesitaría una carta para transmitir los detalles sobre nosotros utilizando una catapulta modificada. No hay otra manera más que enviar un mensajero para hacer un viaje”.

“Si esa persona apareciera en ese campo de batalla, sería muy prominente”.

“Imposible. Preocuparse por cosas imposibles es simplemente retrasado.

Deberíamos centrarnos en los peligros claros y presentes… por ejemplo, algo más horrible que esto”.

“¿Más horrible?”

“… Nuestros esquemas son vistos, eso es lo que creo. Probablemente sea el comandante Oswald Coulthard quien lo haya visto. Probablemente predijo que propondría la estrategia de usar armas de asedio para construir un puente de obenques”.

“Entonces, la razón por la cual el plan falló es porque Sir Regis fue visto por el enemigo… ¿Eso es todo?”

Vas a asumir la responsabilidad por el fracaso del plan, le preguntaba a Regis. Sería así.

Regis no tenía la ambición de hacerlo grande o un gran ego, pero tenía miedo al castigo. Esto probablemente no sería resuelto solo por ser exiliado.

Pero él tenía que aceptar los hechos.

“… No hay duda de que el plan fracasó porque el enemigo vio nuestra estrategia… Los High Britannians pensaron en una táctica que contrarrestaba perfectamente mi estrategia. Normalmente, los defensores se alinearían a lo largo de las paredes y dispararían al suelo. Sin embargo, los fusileros estaban posicionados detrás de la pared, en grandes cantidades”.

No había forma de refutarlo.

La intención estratégica de los Imperiales y los resultados fueron claros para todos. Latreille cambió el tema.

“No hay dudas sobre la situación actual. Sir Regis mencionó que esperabas esas pérdidas ¿no? ¿Predijiste que tu estrategia sería vista?”

“… Creo que hay una posibilidad de eso. El enemigo sabría que habríamos preparado catapultas siendo escoltadas por nosotros.

“Ocultamos las catapultas cuidadosamente…”

“Podrían haberlo adivinado pensando desde nuestra perspectiva”.

La estrategia de Regis eran solo cosas escritas en libros generalizados. No era algo nuevo. Como el comandante enemigo estaba bien informado, podría ser capaz de darse cuenta.

“Hmm… Parece que nuestro adversario es realmente fuerte”. Inesperadamente, nadie estaba culpando a Regis.

La ansiedad y la inquietud se estaban extendiendo entre los oficiales de estado mayor.

Germain gimió.

“… ¿Quién es este personaje Oswald?”

Hablando de eso, el Primer Ejército también sufrió grandes pérdidas en el Fuerte Bonaire porque cayeron en su truco.

El miedo al enemigo surgió de nuevo. En lugar de los rifles y cañones nuevos, su astucia era lo que asustaba– así es como cambió la atmósfera.

El joven caballero golpeó la mesa con enojo.

“¡Nosotros! ¿¡No somos el Ejército Imperial de Belgaria el más fuerte!? ¿¡Por qué no podemos ganar!? ¡Fallando en defender el fuerte, ahora fallamos en atacar una fortaleza! ¿¡No solo rifles, estamos perdiendo en juicios también!?”

“Tranquilízate, estás en la presencia de Su Alteza”.

“Ughh… ¡Por eso! ¡No te sientas triste!”

“Uuu, eso es verdad…”

El caballero de mediana edad que lo amonestaba no podía decir nada. Los otros caballeros también preguntaron:

“¡Sir Estratega! ¿Puedes pensar en un plan? ¿O no hay otra manera?”

“Bueno… Esa es toda la estrategia que puedo usar…”

Sacó un reloj de bolsillo desde su uniforme.

— Debería ser hora. “¡Informe! ¡Un informe!”

Un soldado afuera de la tienda gritó.

Regis, quien estaba al final de la mesa, miró a Latreille. Latreille no reaccionó, pero Germain respondió “Entra”.

El mensajero abrió la cortina a la entrada de la tienda y entró. Arrodillándose sobre una rodilla, ofreció una espada de madera. “¡Esto!”

Regis quien estaba al final de la mesa la tomó. “¿De dónde es esto?”

“¡Según lo instruido por el estratega, los pioneros abrieron una red corriente abajo del río, y pescaron esto!”

“Es así… Eso es genial…”

Los oficiales de personal a su alrededor miraron el objeto en la mano de Regis. “¿Solo una espada de madera?”

El joven caballero preguntó desconcertadamente.

A simple vista, era solo una simple espada de madera.

Regis señaló la palabra tallada en la empuñadura de la espada. ‘Succès’ (Éxito)

Se ha completado el objetivo– Tiene tal significado.

Es una espada de madera, así como un juguete dado a un niño por sus padres, las palabras auspiciosas estaban talladas en él, lo cual era una explicación aceptable.

“Incluso si esto está flotando en el río, nadie trataría esto como un medio de transmisión de información ¿no?”

“¿Hmm? ¿Es esto algún tipo de mensaje?”

“Sí. El oficial que envié a la calle de producción de acero arrojaría esto al río si su infiltración era un éxito”.

Germain agregó.

“Todos deberían conocerlo… Es un soldado que sobresale incluso en el Primer Ejército, y fue nombrado Caballero, Oficial de Combate de Tercer Grado, Jean Ulysse de Vallis”.

“¡Ohh, ese tipo!”

El joven caballero asintió.

Al preguntar por candidatos adecuados, aparte de los oficiales de estado mayor, el que tenía los mejores resultados en carreras, esgrima y académico era Vallis.

Era un brillante joven de solo 17 años.

El caballero de mediana edad se frotó la barbilla.

“Ku, lo que quiere decir… ¿Que Vallis se infiltró en una parte de la calle de producción de acero?”

Regis asintió.

“Este fue un plan que preparé en caso de que fallara el puente de obenques”.

“Esto es… impactante. ¿Cuándo entró furtivamente…?”

“Cuando la atención del enemigo estaba enfocada en los soldados imperiales que intentaban escalar las paredes. El mejor resultado sería la estrategia de las cuerdas funcionando y la puerta siendo asegurada. Sin embargo, considerando la posibilidad de fracaso, envié a un soldado para que entrara de antemano. Como el viento aquí es fuerte, pensé en pasar el mensaje desde el cielo… Pero sería demasiado vistoso, y existía la posibilidad de que el plan se filtrara al enemigo…”

Había otros planes, como entrometerse con los cañones, usar pájaros, utilizar instrumentos musicales… Había muchas formas en el mundo de historias sobre métodos para transmitir información a sus aliados.

Sin embargo, no había nada más confiable que entregarlo en persona. Y el plan tuvo éxito, por lo que Regis se sintió aliviado.

La expresión en el rostro del joven caballero se suavizó.

“Entonces la batalla de hoy no tuvo sentido… No pudimos aprovechar las puertas… Pero aun así realizamos un buen ataque de finta. ¿No es así?”

“Sí.”

“Fuu… ¿Es así? Nuestros camaradas muertos pueden descansar en paz. Pero Sir Estratega y Sir Germain son muy desagradables. Si van a ejecutar un plan de este tipo, solo deben informarnos”.

Germain bajó la cabeza.

“Mis disculpas. Usar este plan significaría que la estrategia del puente de obenques fallaría, por eso…”

El joven caballero entendió.

“¡En efecto! En una batalla en la que están apostando su vida, si les decimos ‘preparamos otra estrategia en caso de que fracase este plan’, nuestros hombres se preguntarán por qué están arriesgando sus vidas. Una actitud tan poco entusiasta les haría fracasar en un plan que generalmente lograrían y no obtendría el efecto de una finta”.

“Eso es así.”

“… Me alegra que puedan entender”. Regis asintió también.

Había otra razón por la que no podía decirlo. El plan de infiltración podría no funcionar.

Había una posibilidad de que la batalla de hoy fuera en vano.

Y aún no había terminado. Había una misión aún más difícil esperando al Oficial de Combate de Tercer Grado, Vallis, quien se había infiltrado.

El caballero de mediana edad preguntó:

“Las armas de los ciudadanos de Grebauvar deben haber sido confiscadas, y probablemente estén encerradas en una de las zonas. ¿Vallis puede salvarlos solo?”

“Por supuesto, porque los ciudadanos no pueden escapar por su propio poder…” Regis explicó los puntos cruciales cuando trató de ocultar la información.

Para este plan, incluso si hubiera espías, no podía permitir que los espías actuaran.

Sin embargo, no podía descartar que no hubiera ningún espía. Era prudente tener cuidado.

Para no dejarles saber a los oficiales que él era cauteloso con ellos, era importante elegir sus palabras sabiamente.