Haken no Kouki Altina (NL)

Volumen 9

Capitulo 3: Café Nocturno

Parte 1

Las ventanas temblaban en el viento esta noche.

En las colinas a 5 Li (22 km) de la Ciudad Grebauvar, la vegetación de principios del verano dentro del bosque era una visión densa y obstructiva. Daba la sensación de que los residentes míticos del bosque podían aparecer en cualquier momento. Se comunicaban con hadas de la tierra, fuego, viento y agua, y vivían con los elfos.

En el bosque donde la luz de la luna no podía brillar, comenzaron a surgir pensamientos sobre la existencia de tales seres.

Había una carretera bien pavimentada que conectaba la Capital Imperial con la Ciudad Grebauvar.

Es por eso que si el Primer Ejército establecía su formación a lo largo de este camino y colocaba su cuartel general en la zona despejada, los exploradores enemigos podrían verlo fácilmente.

Si el enemigo descubriera la ubicación de la base, habría riesgo de un ataque sorpresa, por lo que establecerían su cuartel general en el bosque.

A pesar de que el enemigo estaba librando una batalla, lanzaron un ataque exitoso contra la base del Primer Ejército antes, por lo que no podían bajar la guardia.

Y por supuesto, Regis estaba usando una tienda de un oficial superior normal. Se colocaron baldosas sobre el barro húmedo, y se colocó una mesa plegable, una silla y una cama antes de rodearla con lienzo.

La mayoría de los soldados simplemente dejaban un trozo de tela en el suelo y dormían sobre él. Sería genial si tuvieran una sábana para cubrirse también.

Si el número de oficiales con el privilegio de una carpa personal aumentara en uno, necesitarían agregar un centenar de hombres en transporte y administración, ya que los hombres que transportan los artículos también necesitan suministros de alimentos.

Por cierto, no había techo para tales lonas, por lo que uno estaría empapado si llovía.

Rara vez llueve en el norte de Belgaria, y la lluvia podría disminuir bastante rápido, incluso si lo hiciera. El aire estaba seco e incluso si los hombres estaban empapados, se secaban en poco tiempo. Por lo tanto, el ejército no se tomó la molestia de protegerse de la lluvia, y solo lo hacía por la tienda de campaña del comandante Latreille.

Si establecían un campamento en un amplio espacio como las llanuras, prepararían tiendas de campaña tan grandes como una casa, tal como lo hizo el Cuarto Ejército. Sería más cómodo, pero no podría usarse en el bosque.

El campamento fue decidido por el comandante de antemano, por lo que solo trajeron las necesidades al campo de batalla.

La cortina que cubría la entrada a la tienda se sacudió en silencio. Regis levantó la cabeza de su libro.

“¿Quién es?”

“Sir Regis, soy yo”.

“Ahhh, por favor entra”.

“Perdón por entrometerme a esta hora”.

El que abrió la cortina y entró fue Fanrine Veronica de Tiraso Laverde.

Su largo cabello negro llegaba hasta la faja que rodeaba la cintura de su vestido negro de una sola pieza.

Ella era una dama aristocrática que no se adecuaba al campo de batalla, pero fue enviada para seguir esta expedición por el Ministerio de Asuntos Militares con el pretexto de ‘Oficial de Escolta de Regis’.

Originalmente, ella solo debería vigilarlo durante su tiempo en la Capital Imperial, pero por alguna razón, ella se ofreció para viajar con el ejército.

Ella trajo una bandeja con pan recién horneado y café.

“… Sir Regis, también se queda despierto hasta tarde esta noche. Esto puede ser curioso de mí, pero traje algo de cena”.

“No, huele fragante, estoy agradecido”.

“De nada.”

Regis colocó el documento sobre la mesa de nuevo en la caja. La caja tenía dos capas, un artilugio para evitar que los documentos se mojaran bajo la lluvia.

Fanrine colocó la bandeja sobre la mesa.

No solo pan, sino mandarinas, melocotones y café oscuro en una taza de madera.

Regis tomó el café y bebió un sorbo. El líquido caliente calentó su cuerpo y alejó su cansancio.

“Es delicioso.”

“Fufu… Eso es genial”.

“Fanrine, ¿preparas tu propia cena por la noche?”

“Normalmente no hago eso… ¿Pero no que todas las mujeres quieren preparar la cena para su esposo personalmente?”

“Es raro ver a una dama aristocrática haciendo eso. Trabajar seriamente en todo lo que haces es una idea maravillosa”.

“… Gracias. Sir Regis está leyendo hoy también”.

“Sí, después de convertirme en un oficial del Estado Mayor del Primer Ejército, ahora tengo derecho a leer documentos que no pude leer en el pasado. Tengo que aprovechar esta oportunidad para revisarlos”.

Regis tomó el pan. A pesar de que el pan horneado en el campo de batalla era muy duro, había mantequilla, así que estaba delicioso. Qué lujo comer mantequilla en el campo de batalla.

“Aunque Miss Fanrine no me dirá que duerma temprano. Todos me piden que haga eso cuando me ven leyendo toda la noche”.

Fanrine sonrió bajo la tenue luz de la lámpara.

Las sombras vacilantes enfatizaban los contornos de su cuerpo, lo que la hacía más encantadora que en el día.

“Porque a todos les preocupa la salud de Sir Regis”.

“Sí, lo entiendo. Gracias.”

“Espero que sir Regis también pueda gozar de buena salud, pero hay algunas cosas que hay que hacer y que no puedo hacer en su lugar. No quiero entrometerme en su camino”.

“… Ya veo.”

Esa es una forma diferente de pensar sobre esto, pensó Regis.

Ella no era solo una mujer amable, Fanrine lo había pensado mucho. La mandarina era deliciosamente dulce y agria.

“¿No estás comiendo, Miss Fanrine?”

“Me iré a acostar pronto. Sir Regis, ¿se ha familiarizado con todos los del Primer Ejército?

“Bueno, creo que mi relación con ellos no es mala… En la superficie”.

“Eso es lo suficientemente bueno. Estuve preocupada durante la conversación anterior”.

“… Los hombres de los Caballeros Lobos Blancos probablemente no estén muy felices”.

“Esa escaramuza cerca de la Capital Imperial es bastante conocida, hay hijos de Casas nobles entre los caballeros del Primer Ejército”.

El comandante y su delegado murieron durante ese incidente.

Regis no quería que muriera nadie, pero los quinientos Caballeros Negros de Jerome se enfrentaban a los mil Caballeros Lobos Blancos, cualquier movimiento equivocado y hubieran sido aniquilados. Entonces Regis no pudo contenerse.

En este momento, el Caballero Comandante de los Lobos Blancos había sido recientemente ascendido, y no guardaba ningún rencor contra Regis.

Pero definitivamente había gente que todavía lo tenía debido a esa batalla, por lo que Regis no podía bajar la guardia.

“Por ahora, estoy aquí como oficial de estado mayor por invitación del Príncipe Latreille… En comparación con su odio hacia mí, su lealtad es probablemente más fuerte”.

Regis no conocía a ningún comandante que fuera tenido en mayor consideración por sus subordinados que Latreille.

“El príncipe Latreille va a ser el emperador ¿verdad?”

“Probablemente. Cuando termine la guerra con High Britannia… Bueno, creo que esta batalla pondrá fin a esta guerra. Es por eso que vamos sitiar la ciudad fortificada”.

“… ¿Por qué está haciendo eso?”

Fanrine era capaz y excelente en la política, pero carecía en los asuntos militares. Regis explicó mientras masticaba su pan.

“Al atacar un fuerte, la batalla terminará cuando nuestros soldados irrumpan en su fuerte. No habrá muchos soldados escapando desde adentro. Sin suficientes números, serían como bandidos, sin importar quién estuviera al mando. No habría problema en declarar que la guerra terminó entonces”.

“Ya veo, ¿así que definitivamente ganaremos?”

“Bueno… Para los defensores de un fuerte, ganarían cuando redujeran drásticamente los números del atacante y los persiguieran durante su retirada”.

O aguantar hasta que lleguen los refuerzos.

No habrá refuerzos por parte de High Britannia, pero si la guerra se convierte en un punto muerto, las naciones vecinas atacarán el Imperio de Belgaria.

“Escuché que la ciudad fortificada está realmente bien construida”.

“Sí, la ciudad de Grebauvar tiene una fortaleza excelente. Es difícil imaginar cómo cayó en manos del enemigo”.

“Así que aún no se han enterado”.

“No… Ya han aprendido la situación de aquellos que escaparon… Pero me tratan como un extraño y no me han contado los detalles”.

“Eso es rudo.”

“No tengo más remedio que preguntar sobre eso durante la reunión de guerra de mañana. Esta es la primera vez que estoy en la posición de recibir un informe que ya se ha organizado, pero como recién llegado, tengo que estar acostumbrado a la nueva forma de hacer las cosas”.

Regis no quería que lo acomodaran tanto que se metieran en conflictos. Él solo se sentía incómodo.

Fanrine preguntó otras cosas.

“… Sir Regis apoya a la Princesa Argentina para ser la Emperatriz ¿verdad? ¿Está bien ayudar al Príncipe Latreille así?”

“Bueno, salvar a los ciudadanos de la ciudad de Grebauvar es la prioridad, y tenemos que terminar la guerra con High Britannia lo antes posible. Si nos quedamos de brazos cruzados, nuestras naciones vecinas invadirían. Estos hechos deben considerarse por separado de la política”.

“Es verdad.”

“Y me pregunto si la política del Príncipe Latreille y la Princesa Argentina es realmente demasiado irreconciliable, necesito saber la respuesta a esto. El objetivo no es obtener autoridad, sino cambiar las políticas de gobierno del Imperio de Belgaria. Sería genial si podemos pasar del hegemonismo al pacifismo”.

“¿No es obvio que el Príncipe Latreille es hegemónico?”

“Él lo era en el pasado. Pero con el Imperio sufriendo grandes pérdidas en la guerra con High Britannia, y la guerra cambiando con el debut de los rifles, sería una era diferente. El pensamiento del Príncipe podría haber cambiado. Tengo alguna esperanza para eso…”

“Si nada cambia, ¿qué harías?”

“Hmm… Esa es una pregunta difícil. Si el Príncipe Latreille insiste en el hegemonismo para expandir su territorio, necesitaría tomar contramedidas. Sin embargo, él sería el Emperador entonces”.

Si la campaña para recuperar la ciudad de Grebauvar tiene éxito, el Príncipe Latreille probablemente se convertiría en Emperador.

Regis suspiró.

“Si él toma el trono, será difícil sin importar lo que haga…” Fanrine inclinó su cabeza con sorpresa.

“Hablando de eso, la Princesa Argentina perdería sus derechos de sucesión si el Príncipe Latreille toma el trono ¿verdad?”

“Así es, no hay ninguna ley con respecto a la sucesión del trono, pero siempre ha seguido la tradición. La persona más influyente con respecto a esto es el chambelán. Él es de cuna noble, y es era Ministro de Asuntos Militares, así como el del Ministerio Ceremonial en el pasado. Parece tener fuertes lazos con los ministros actuales. Si el chambelán no lo reconoce, los poderosos nobles tampoco lo harían. Esto significa que hay una forma de senado en el Imperio, a pesar de que no está reconocido por la ley”.

“Se siente extraño que la sucesión del Emperador, el que tiene autoridad absoluta en el Imperio, sea decidida por el Chambelán”.

Fanrine bajó la voz. Ella ya hablaba en voz baja, y ahora estaba aún más resguardada.

Ella estaba desconcertada por eso, y Regis sentía lo mismo.

“Es porque el Emperador anterior le otorgó mucha autoridad, pero el problema es el empoderamiento repentino. Bueno, no importa qué… Si el segundo hijo tiene éxito en el trono, la cuarta hija que pierde su derecho de sucesión es la tradición…

“Así es.”

“El Imperio de Belgaria es especial, pero en naciones como High Britannia, Hispania y Germania, los hermanos tendrían derechos de sucesión si el Emperador no tiene un hijo, algo como esto–”

Regis escribió en un trozo de papel.

Los descendientes del emperador ⇒ El hermano menor del emperador ⇒ El descendiente del hermano ⇒ El otro hermano menor ⇒ Sus descendientes…

“Sin embargo, el Imperio de Belgaria no reconoce los derechos de sucesión de los hermanos del Emperador”.

Los descendientes del emperador ⇒ Los descendientes del hermano menor del emperador ⇒ Los descendientes de otros hermanos menores

“La razón de esto es probablemente un complot de asesinato que casi destruyó el Imperio. En resumen, resuelve el problema del fratricidio real”.

“¿Es este problema debido a la personalidad de la realeza…?”

“Sí. No todos son así, pero la realeza tiene la destreza de luchar contra mil hombres y una formidable fortaleza mental. Pero esto podría llevar a que los eventos se desarrollen de una manera terrible”.

Regis contó una historia que sucedió no hace mucho tiempo.

***

Los registros eran vagos, y los historiadores tenían opiniones diferentes sobre esta historia:

Hace unos 500 años, cuando el Imperio todavía estaba en el oeste, la tierra al centro, sur y este todavía pertenecía a otras naciones.

Había tres príncipes de la misma edad.

Todos tenían ojos carmesí, pelo bermellón y un cuerpo bien formado, y se decía que los tres eran “como el Emperador fundador”.

Era difícil determinar quién se desempeñó mejor en el campo de batalla, ya que todos se desempeñaron de manera sobresaliente, contribuyendo en gran medida a la expansión del territorio del Imperio.

Ellos fueron los que persiguieron a la gente de una tribu diferente que estaba cerca de la actual Capital Imperial hacia el este. Todos pensaban que no importaba quién se convirtiera en Emperador, el Imperio de Belgaria sería tan sólido como la roca base.

Cuando el Emperador en ese momento falleció debido a una enfermedad, el hermano mayor legítimamente tomó el trono, y estaba en posición de ordenar a sus hermanos.

Sin embargo, cuando había problemas, habría diferentes opiniones.

En cuanto al contraataque de la tribu extranjera que persiguieron y el hambre provocada por un desastre natural, el Emperador tuvo un choque de puntos de vista con sus hermanos.

Y luego, el asesinato sucedió.

El Segundo Príncipe asesinó al Emperador… ese era uno de los rumores, pero no había ninguna evidencia. A pesar de las dudas que rodearon su muerte, el Segundo Príncipe tomó el trono de acuerdo con la línea de sucesión. Había pasado medio año desde que su hermano ascendió al trono.

Y, por supuesto, el Imperio se mantuvo estable desde que el Segundo Príncipe fue un talento ejemplar.

Medio año después–

El tercer príncipe dio a conocer el complot traidor del Segundo Príncipe.

Los detalles no estaban claros. La creencia común era que alguien relacionado con el asesinato fue capturado.

No había ninguna ley para incriminar a un realeza.

El tribunal de justicia podría intervenir, pero en este punto, era “demasiado tarde para que alguien lo detuviera”. Y así, el Tercer Príncipe ejecutó al Segundo Príncipe.

No sería tan malo si la historia terminara aquí.

Sin embargo, algunos de los nobles señalaron que, en lugar del Tercer Príncipe, los hijos del Segundo Príncipe eran más aptos para el trono.