Yahari Ore no Seishun (NL)

Volumen 11

Capítulo 9: La Primavera, Enterrada Bajo la Nieve, Comienza a Brotar

 

 

A medida que la rueda de la fortuna descendía, la nieve continuaba en una ráfaga.

El césped del parque estaba cubierto con una delgada capa blanca, contándonos en silencio el tiempo que ha pasado. De alguna manera u otra, nos quedamos en silencio mientras caminábamos por el interior del parque. Yuigahama caminaba hacia adelante, a la cabeza, seguida por Yukinoshita y yo.

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En poco tiempo, el pequeño camino comenzó a fusionarse con la larga y amplia calle de la estación. A partir de aquí, si continúas hacia la izquierda, conducirá hacia la estación del tren. Si vas a la derecha, entonces llegarás a la playa.

«Na» Yuigahama se dio la vuelta de repente, señalando en silencio con el dedo el camino por delante, como si nos preguntará si podríamos pasar por algún lugar allí.

Era el edificio de cristal que vi anteriormente. Se llamaba Crystal View* de acuerdo con panel de exposición. Probablemente una plataforma de observación de la Bahía de Tokio, supongo. (N.T: Vista de Cristal)

 Echando un vistazo a mi reloj, me di cuenta de que todavía hay algún tiempo antes de que sea hora de volver a casa.

—Vamos.

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Me detuve y animé a Yukinoshita, y así empezamos a caminar para alcanzar a Yuigahama que esperaba delante.

Y así, las dos caminaron durante un rato.

La plataforma de observación en sí ya estaba cerrada, pero parte de la terraza estaba todavía abierta. Fuimos capaces de ver la bahía de Tokio, incluso desde allí. La nieve caía en el silencioso y balanceante mar. El sol poniente rezumaba desde las nubes.

El color rojo débil y turquesa profundo iluminó el blanco liso.

—¡O!

Yuigahama gritó en el paisaje enfrente de ella.

Yukinoshita dio unos pasos hacia atrás mientras el viento peinaba su cabello. Ella se lo ajustó mientras miraba en la distancia, aparentemente llena de emociones.

No había nadie más que nosotros. El mar se extendía todo el camino delante de nosotros. A lo lejos, las luces iluminaban la ciudad.

Tal vez, era un paisaje que solamente puede ser visto en este instante. Poco a poco, el tiempo pasaba con calma. Por eso, no puede continuar por mucho tiempo. Yuigahama se apartó de la cerca de la terraza, y se giró para mirarnos.

—¿Qué vamos a hacer a partir de ahora?

—¿Ir a casa?

—Eso no es lo que quise decir.

Como bromeé ligeramente, Yuigahama sacudió la cabeza en silencio.

Había una seria ventaja para esa voz. Ella dio un paso al frente de nosotros y nos miró directamente.

—Sobre Yukinon. Y también, sobre mí. Sobre nosotros.

Las palabras que salieron hicieron que mi corazón saltara. Esa incómoda sensación que siempre había estado abrazando comenzó a levantar la cabeza rápidamente.

—¿Qué quieres decir?

En medio de ataques de vacilación, Yukinoshita preguntó sobre el significado de esas palabras. Entonces, en lugar de darle una respuesta, Yuigahama me dio una mirada seria.

—Hikki, ten, gracias por aquella vez.

Y dicho esto, Yuigahama sacó suavemente algo de su bolso. Un hermoso envoltorio que contenía galletas estaba agarrado con respeto por ambas manos.

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Cuando vi eso, me quedé tan sorprendido que pude oírme a mí mismo recuperar el aliento. Por el rabillo de mis ojos, pude ver a Yukinoshita agarrando su bolso, mientras sacudía débilmente su cabeza. Y luego, miró hacia abajo a sus pies. Yuigahama pasó por Yukinoshita y se detuvo frente a mí.

—Mi consulta, ¿la recuerdas?

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—Ahhhh

Mi respuesta fue tan suave que apenas se oía.

¿Cómo podría olvidarlo? Era mía, la primera consulta del Club de Servicio que habíamos recibido. Al final, en ese momento, lo único que hice fue usar palabras para confundir.

La solución que di estaba muy lejos de ser una verdadera resolución. Y, sin embargo, a pesar de esto, Yuigahama había estado tratando de resolverlo adecuadamente con su propia fuerza. Esto, se demostró claramente.

Yuigahama parecía desconcertada en cuanto a por qué mis manos no se movían para tomar las galletas, pero ella apretó las galletas firmemente en mi mano. Ahora había un peso descansando firmemente en mi palma.

Las galletas que pude ver desde la bolsa de celofán eran de formas irregulares, tenían rastros de quemaduras y una tonalidad inusual en ellas. No podría decir honestamente que eran bonitas.

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Sin embargo, uno podría decir de un vistazo que estaban hechas en casa. A partir de este resultado, se podría decir el esfuerzo y la seriedad que ella le puso a pesar de ser mala en la cocina.

Yukinoshita miraba fijamente a las galletas en mi mano y dejó escapar un suspiro ambivalente.

—¿Galletas hechas a mano? ¿Esto, está hecho por ti sola?

—Pero es un tanto fallido ¿no?

Yukinoshita sacudió su pequeña cabeza, como si eso no importara en absoluto, mientras que Yuigahama apartaba a su vergüenza con una sonrisa.

—Yuigahama-san, eres… increíble.

Su voz parecía como si estuviera tratando de ser amable, o tal vez había una sensación de añoranza en ella. Yukinoshita miraba tímidamente a Yuigahama. Yuigahama respondió su mirada con una feliz sonrisa.

—Dije que lo intentaría por mi cuenta. Dije que lo haría a mi manera. Y esto es lo que ocurrió. Y así Yuigahama dio su respuesta.

—… Por eso, esto es sólo un gracias.

Dicho esto, Yuigahama hinchó el pecho, y mostró su brillante sonrisa.

Si se trataba de aquella vez, entonces el asunto ya debería haber sido resuelto. Lo pasado es pasado, ya ha terminado. No quiero a desenterrarlo ahora, después de tanto tiempo. Si esto se trataba de agradecerme, entonces ya he recibido más que suficiente.

Por eso, era ilógico de mí recibir este regalo de agradecimiento.

Es hora de poner fin a lo que ya estaba mal desde el principio. Todavía debe ser posible para nosotros comenzar de nuevo. Si ese es el caso, tal vez por los sentimientos que estaban atrapados dentro, las respuestas también cambiarán.

Suponiendo. Suponiendo si. Si esos sentimientos se convirtieron en algo especial. Aparté los ojos de Yuigahama, y mi garganta dejó escapar una voz ahogada.

—Ya me has agradecido suficiente

No quería confirmar si en realidad era sólo un regalo de agradecimiento. Aun así, si era en realidad sólo un regalo, no puedo simplemente aceptarlo sin pensarlo dos veces.

Sin embargo, estaba siendo atacado por un sentimiento de pesar el momento en que lo dije. Por lo que pude ver, la cara de Yuigahama parecía a punto de estallar en lágrimas.

—Aun así, es sólo un gracias.

Yuigahama habló con una voz que sonaba como si estuviera siendo aplastada hasta la muerte. Su expresión se retorció mientras se mordía los labios ligeramente. Para ocultar el brillo de sus ojos, rápidamente nos dio la espalda a nosotros.

—Lo quiero todo. Ahora, y de aquí en adelante. Sé que soy injusta, incluso.

Ella puso mala cara en un tono bajo mientras miraba el cielo, tejiendo sus palabras. Parecía ser un monólogo en lugar de buscar algún tipo de réplica o respuesta de nosotros. Por lo tanto, mientras miraba su espalda, lo menos que pude hacer era escuchar con atención a fin de no perder ni una sola palabra.

Cuando terminó de hablar, su aliento blanco se levantó y se desvaneció en la nada. Con eso, se dio la vuelta y nos miró directamente a nosotros.

—Ya lo he decidido.

Los ojos de Yuigahama ya no estaban húmedos, su mirada reflejaba ahora un fuerte sentido de determinación.

—Ya veo……

El murmullo de Yukinoshita revelaba una sensación de renuncia. Yo fui incapaz de pronunciar una sola palabra.

Yuigahama nos dio una pequeña sonrisa solitaria.

—Si descubriéramos los sentimientos del otro, creo que no seríamos capaces de permanecer como estamos ahora. Por eso, esta es probablemente nuestra última consulta. Nuestra última solicitud será sobre nosotros.

No había una sola cosa específica en lo que ella dijo. Si lo hubiera dicho, entonces eso lo hubiera confirmado para todos nosotros. Ella simplemente estaba evitando el asunto.

Vaga, débilmente, ella continuó sin abordar la cuestión.

Por eso, no hay garantía de que nuestros pensamientos imaginaran lo mismo. Sin embargo, era inevitable en este caso. Esas palabras sólo parecían ser la verdad.

Fue una sospecha que había retenido en la esquina de mi mente por un tiempo muy largo. Era algo de lo que Yuigahama era muy consciente.

Y ahora, una persona más. Yukinoshita estaba mirando hacia abajo con los ojos cerrados. Su expresión no estaba clara, pero no era una de objeción, ni tampoco era una mirada interrogativa, sólo una que estaba escuchando en silencio.

Creo que incluso Yukinoshita se ha dado cuenta de eso.

—Ne, Yukinon, esa competencia que estamos teniendo sigue en pie, ¿verdad?

—Sí, el perdedor tendrá que escuchar lo que el ganador diga.

Yukinoshita respondió con perplejidad ya que no había anticipado tal pregunta. Entonces, Yuigahama tocó el brazo de Yukinoshita suavemente, la miró directamente y dijo con claridad.

—Los problemas que Yukinon afronta en este momento, yo conozco la respuesta. Con eso, dio unas palmaditas en el brazo de Yukinoshita suavemente.

Los problemas que afectan a Yukinoshita, siempre han sido la razón detrás de sus acciones y palabras. Más que cualquier otra cosa, Haruno Yukinoshita lo había indicado claramente. La Yukinoshita Yukino de hoy, ¿cuál es la mejor manera de ayudarla? No lo sé. ¿Qué podría ser? ¿Las relaciones con su madre, su hermana? Probablemente podría ser una de ellas, a lo mejor, probablemente sería una de ellas.

Yukinoshita bajó la cabeza con desconcierto. No entiendo, murmuró con una deteriorada voz.

Yuigahama asintió con la cabeza suavemente y su mano dejó a Yukinoshita.

—Creo que es probable que sea la respuesta para nosotros también. Al final, yo todavía no lo entiendo. Ni yo ni ella.

Si yo lo entendiera, entonces eso probablemente se desmoronaría. Las cosas que hemos estado ignorando se desmoronarían lentamente.


Por lo tanto, no importa cuál sea el final, es inevitable que algo se perderá. En conclusión, la solución está en el camino por delante.

Yuigahama una vez más cortó sus palabras y sacudió su pequeña cabeza.

Y así, además de eso, nos encontramos de repente a nosotros mismos mirándonos el uno al otro.

—Si yo gano, voy a tomarlo todo. Probablemente sea injusto. Pero es lo único que se me ocurre. Quiero que las cosas permanezcan siempre de esta manera.

Por eso, la respuesta que dio Yuigahama al principio, ignoraba condiciones, suposiciones, ecuaciones, todo. Era sólo una de las conclusiones obvias.

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Por ejemplo, incluso después de todos los procesos, no importa qué situaciones puede que nos espere, aunque sería imposible llegar a un acuerdo, al menos, nuestra respuesta no cambiaría. Puede parecer como una mentira, pero esos momentos divertidos siempre continuarían.

—¿Qué piensas?

—¿Qué… Eso es….

Me ahogué con mis palabras ya que fui preguntado por Yuigahama.

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En retrospectiva, incluso si eso significa recurrir a métodos retorcidos o distorsionar la verdad, aún me aferraría a mi respuesta, aún lo hubiera hecho. Incluso si es imposible en circunstancias normales, mientras me vea obligado, no, mientras pueda justificarlo, entonces ese deseo se haría realidad.

Si hubiera hecho tal excusa, seguramente me habría convencido a mi mismo. Creo que si los momentos como este pudieran continuar, entonces seguramente un poco de incomodidad por el bien de nuestra felicidad valdría la pena.

Sobre todo.

Yuigahama probablemente no esté equivocada. Tengo el presentimiento de que ella siempre había visto la respuesta correcta. Creo que sin duda sería más fácil simplemente aceptarlo. Sin embargo….

¿Dejar las cosas incorrectas como están es lo que hay que hacer? ¿Ciertamente, esa es la verdad que estamos buscando?

Yuigahama miraba amablemente mientras yo rechinaba los dientes intentando responderle. Después de eso, ella tomó suavemente la mano de Yukinoshita.

—Yukinon, eso está bien?

Yuigahama le planteó la pregunta a ella como una madre preguntándole a su hijo. Al ser preguntada, los hombros de Yukinoshita temblaron.

—Wa ta, shi wa…

Ella apartó los ojos para escapar de la mirada de Yuigahama. Aun así, ella fue incapaz de dar una respuesta adecuada. Su delgada voz vaciló mientras trataba de elaborar su respuesta.

En el instante en que vi el estado en que se encontraba, lo supe entonces. Ahh… esto está mal. Ella está equivocada.

Yukinoshita no debe confiar su futuro a otra persona. No hay manera de que eso pueda estar bien. Yuigahama es una chica injusta, pero sin duda, decir tal cosa no puede estar bien.

—Aun así, yo…

—No Intervine.

Yukinoshita me miró sorprendida al oír mi voz ligeramente elevada.

—No puedo aceptar esta propuesta. Yukinoshita debe resolver sus propios problemas por sí misma.

Apretando los puños de repente, miré a Yuigahama. Vi la boca de Yuigahama tensarse, con una expresión inusualmente fría en sus ojos.

Yuigahama Yui es una chica agradable, yo había decidido eso por mí mismo voluntariamente. Yukinoshita Yukino es una chica fuerte. Había forzado ese ideal sobre ella.

Dicho esto, siempre he estado confiando en la bondad de ellas. Sin embargo, esto es exactamente por qué, esta dependencia debe terminar. Ya no puedo huir de esa bondad o devolverlo con una sarta de mentiras. Después de todo, es por eso que Yuigahama Yui es una chica agradable y Yukinoshita Yukino una chica fuerte.

—Además, eso es nada más que… un engaño.

Las palabras que escupí desaparecieron en las olas. Y al igual que un ciclo, las olas continuaban avanzando hacia adelante, siendo arrastradas continuamente. Nadie hizo ningún sonido.

Yukinoshita miró mis ojos húmedos y sus labios temblaron mientras Yuigahama me daba un pequeño movimiento de cabeza mirando a mis ojos apagados, esperando a que continuara con mis palabras.

—Ya se trate de respuestas vagas o relaciones superficiales, no necesito nada de eso.

Lo que quería era otra cosa. Sé que estoy siendo un idiota. Sé que no es definitivamente eso. Sé cómo terminará esto, de que voy a terminar con nada. Pero aún.

—Aun así, quiero que pensemos, que nos retorzamos, que luchemos. Yo… Las palabras que yo quería decir simplemente no quisieron venir.

Sé que esto no es correcto. Si pudieras decir que es agradable, entonces supongo que está bien después de todo.

Si en un futuro improbable, somos capaces de vivir como queramos, entonces supongo que nadie tendría que sufrir. Sin embargo, quiero descartar todos esos ideales.

No poseo la fuerza para seguir viviendo en estas ilusiones. Encima de la duda, no tenía ningún deseo de contar mentiras a los que me importan mucho. Por eso, la respuesta que yo quiero. Quiero obtener la respuesta que deseo sin mentiras.

Exhalando un caliente suspiro, dándose cuenta de que yo no iba a continuar, Yuigahama me miró directamente.

—… Hikki, pensé que dirías algo así.

Yuigahama hizo uno suave expresión con una sonrisa en su cara.

En ese instante, una lágrima fluyó velozmente por su mejilla. ¿Qué debería hacer? Hubiera estado bien si no fuera por la cara antiestética.

Yuigahama y yo intercambiamos miradas, y asentimos levemente el uno al otro.

Su deseo y el mío no eran visibles. Sin embargo, aquella forma que toma difiere ligeramente y no puede superponerse perfectamente. A pesar de decir eso, no es definitivo que no puedan volverse uno.

No importa cómo lo miraba, ciertamente existe un enlace en alguna parte. Con esto en mente, giré y miré a Yukinoshita.

Yukinoshita se agarró el pecho con fuerza. La Yuigahama de ojos llorosos y yo nos miramos el uno al otro. Hubo un temblor fugaz en esa mirada de inquietud. Sin embargo, cuando me di cuenta que yo había estado esperando todo este tiempo por su respuesta, tomé un pequeño y profundo respiro.

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—No decidan mis sentimientos por mí.

Yukinoshita se frotó los ojos mientras ponía mala cara.

—Además, eso no es lo último de nada. Hikigaya-kun, todavía tenemos tu solicitud.

Mi petición. Justo cuando estaba a punto de preguntarle al respecto, Yuigahama interrumpió con una leve sonrisa. Ella le asintió a Yukinoshita. Se sonrieron la una a la otra como si compartieran un secreto que sólo conocen ellas dos.

—Y, una cosa más.

Yukinoshita ofreció una sonrisa, y giró su muy hermosa cara hacia nosotros. Mientras esperaba a que continuara sus palabras, ella dio un paso. Un paso hacia nosotros. Un paso suave.

—Mi petición ¿les importaría escucharla?

En medio de ataques de vergüenza, Yukinoshita dijo esas palabras, a lo que Yuigahama sonrío ampliamente.

—Claro, vamos a escucharlo.


Con su respuesta, Yuigahama dio un paso más hacia adelante, acortando la distancia entre nosotros, y suavemente le tendió la mano. En poco tiempo, el sol poniente de la tarde y el mar lanzaron siluetas sobre el lienzo blanco.

Era débil, poco confiable y la forma que tomó fue confusa. Pero definitivamente estaban vinculadas, y sin duda se convertirán en una. Si solamente, si los deseos pudieran materializarse. Eso es definitivo…

-FIN DEL VOLUMEN 11-

 

Yahari Ore no Seishun Vol 11 Capítulo 9 Novela Ligera

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