Yahari Ore no Seishun (NL)

Volumen 11

Capítulo 8: No Importa Cuando, la Mirada de Yuigahama Yui es tan Caliente y Suave Como Siempre

Parte 3

Después de disfrutar de la magnificencia del estilo de los pingüinos mientras nadaban alrededor, nos dirigimos de nuevo por las escaleras del semisótano.

A partir de aquí, podíamos ver que los pingüinos de Humboldt se habían reunido en la montaña rocosa y estaban retorciéndose.

Allí dentro, dos pingüinos de repente me llamaron la atención. Ellos estaban íntimamente pegados de cerca entre sí y acicalándose las plumas, y con frecuencia intercambiaban gritos.

Mirarles a ellos daba una sensación agradable. Mientras tanto, tomé un vistazo al panel explicativo frente a mí. Yukinoshita y Yuigahama vinieron a mi lado y presionaron sus caras hacia delante para leerlo, diciendo al mismo tiempo «bien ahora, vamos a ver». Les concedí el lugar a las dos y di medio paso hacia atrás, mientras mis ojos seguían las frases en el panel.

Al parecer, según el panel explicativo que vi, los dos pingüinos que vimos que estaban acurrucándose entre sí eran marido y mujer. En muchos casos, los pingüinos de Humboldt en cautiverio frecuentemente se emparejan para toda la vida y así permanecerán con la misma pareja hasta que uno de ellos muera.

Después de leerlo, di otro vistazo a los dos pingüinos. Fue entonces cuando me di cuenta de que los hombros de Yukinoshita frente a mí estaban temblando, y supe que ella estaba respirando con dificultad debido a su sorpresa.

Y así, ella salió de la zona con un ritmo rápido.

—¿Qué pasa?

Yukinoshita que había salido primero parecía tener prisa, sin embargo, dio media vuelta para mirarme al escuchar la preocupada voz.

—…… Esperaré dentro.

Con esas pocas palabras, ella se dirigió hacia el interior del parque sin mirar atrás.

La zona de los pingüinos era una zona al aire libre. Teniendo en cuenta el clima, ahora probablemente sería un buen momento para volver dentro. La voz que nos dijo que ella iba a adelantarse primero, mirando hacia atrás, vi que Yuigahama seguía mirando al Pingüino de Humboldt. Con los ojos parcialmente cerrados, ella hizo una suave mirada.

—Creo que deberíamos ir yendo.

—Ah, hmm. Quiero ver esto un poco más antes de irme. Todavía quiero tomar un poco más de fotos!……adelántate!

Dicho esto, ella señaló con los dedos en la dirección de los pingüinos azules y luego se dio la vuelta de nuevo en dirección a los Pingüino de Humboldt con su teléfono. Ella no parecía tener ninguna intención de usar su teléfono, más bien, simplemente lo sujetaba fuertemente con las manos.

—…… Ya veo.

Al verla en ese estado, dudé en decir algo más. Con esa breve respuesta, di un paso adelante, un paso en dirección al edificio. Los gritos de las aves continuaron detrás de mí. Las llamadas de los dos pingüinos parecían ser un poco más tristes ahora.

***

Después de haber estado fuera durante mucho tiempo, el calor del interior del edificio me hizo dejar escapar un suspiro.

Avanzando por el camino de la zona de los pingüinos, conduciría a unas escaleras que descendían a la habitación de abajo. Todavía había un par más de enormes peceras abajo.

Un panel explicativo allí tenía las palabras «Bosque de Algas» inscritas en él. Sin embargo, a pesar de lo que decía el anuncio, lo único que podía distinguir desde lejos era el gran kelp gigante, balanceándose y agitando sus «brazos», balanceándose hacia adelante y atrás. Qué gran alga.

Aparte de las algas de color marrón claro, la brillante anémona de mar roja y verde y los corales iluminando la zona, la habitación era por lo demás muy oscura.

Había incluso un banco colocado intencionalmente en frente de la pecera, lo que lo hace parecer aún más como una pequeña sala de cine. Sin embargo, no había ni siquiera una figura de alguien sentada allí ahora. Estaba abandonada por decir lo menos.

No obstante, en la dirección de la pecera donde la luz se esparcía, la débil sombra de una persona de pie allí sólo podría distinguirse en contra del oscuro fondo. Esa silueta de pie. No había manera de que pudiera confundirla por cualquier otra persona.

Yukinoshita Yukino.

Su apariencia, iluminada por la tenue luz de la pecera en la oscuridad, la hizo parecerse a una pintura. No podía llamarla a ella. El aliento que quería escupir estaba atrapado en el fondo de mi corazón.

Por lo tanto, dejé de caminar. Al darse cuenta de la pausa en el sonido de los pasos, Yukinoshita giró hacia mi dirección. Ella hizo un gesto que vagamente parecía estar asintiendo con la cabeza. Con eso, comencé a caminar hacia ella, poco a poco.

—¿Dónde está Yuigahama?

Yukinoshita preguntó como si no me viera mientras contemplaba la pecera, a pesar de que yo estaba a su lado.

—Tomando fotografías de los pingüinos azules. Ella dijo que vendría pronto, así que sólo debería esperar aquí.

—Ya veo.

Con esto último, nuestra conversación cesó. Ambos simplemente continuamos mirando en silencio a la pecera en frente de nosotros.

La tenue luz del alga marina gigante iluminaba a los peces multicolores nadando en los alrededores. Había un sinnúmero de peces nadando de aquí para allá.

Al igual que el balanceante kelp gigante, ellos se balanceaban también, como si sus movimientos dependieran de ello. Había pequeños peces con escamas azuladas que se escondían en la sombra de las algas.

Por otro lado, un pez rojo particularmente llamativo estaba tranquilamente nadando alrededor, sin la más mínima preocupación.

Los ojos de Yukinoshita persiguieron los movimientos del pez, y habló de repente.

—…… Parecen ser realmente libres.

—¡Sip! Oh, ese pez es bastante grande eh.

La pequeña voz de Yukinoshita no parecía estar dirigida a nadie. Era más bien un monólogo. Pero, me atrevo a decir que estábamos observando al mismo pez. Si es así, entonces era natural para mí responderle a esa voz. Un débil soplo se escapó de mis labios repentinamente.

—Si no puede encontrar un lugar a donde ir, no va a encontrar un lugar al que pertenecer. Se ocultará, irá con la corriente o seguirá cualquier cosa que pueda, hasta que se estrelle contra las paredes que no puede ver.

Yukinoshita estiró suavemente su mano para tocar el cristal. Sin embargo, en poco tiempo, la mano se volvió impotente y bajó en silencio. Mirándola a ella desde el lado, no podía decir dónde estaban mirando sus ojos, sólo que ella sin duda estaba mirando adelante.

—¿De cuál pez estás hablando?

Yo no sabía lo que ella estaba viendo, así que tuve que escuchar.

Entonces, Yukinoshita dio su respuesta de inmediato, junto con un suspiro aparentemente calmado.

—Mí misma…….

Dicho esto, ella tocó la pecera suavemente una vez más, con una sonrisa solitaria en su rostro mientras inclinaba su cuello ligeramente.

La silueta de ella extendiendo su mano, parecía que ella estuviera a punto de ser absorbida por el agua y, sin embargo, ella era incapaz de regresar al lugar que debería ir, debido a la obstrucción de la pared de cristal. Al igual que las burbujas desapareciendo, este momento fue breve.

La habitación estaba tranquila; ni un solo sonido se oía. El sonido de las burbujas brotando y reventando no podía alcanzarnos ya que estaba bloqueado por el cristal. Mientras observaba a Yukinoshita mirando directamente a la pecera como si ella hubiese sido aislada del mundo. Mientras permanecíamos allí, el sonido de una pisada se oyó.

Dando la vuelta, vi a Yuigahama observando a Yukinoshita con una calmada mirada apacible. Esa expresión de su cara era una que estaba en cualquier punto entre apacible y lista para romper en llanto.

—Siento haberles hecho esperar!

Yuigahama hizo un gran saludo con sus manos como si acabara de darse cuenta de nosotros, y nos llamó con una sonrisa en la cara como siempre.

***

Saliendo de la exposición del Kelp gigante, el interior del edificio se volvió rápidamente más brillante.

Tal vez debido a la iluminación en la parte superior de la pared, el vidrio se convirtió en cristal y los techos también aparecieron en lo alto.

El piso hasta ahora parecía estar cubierto con una tela negra, pero ahora, los tablones de madera de color crema eran evidentes. Tap, tap, tap, gracias a esos pasos aparentemente enérgicos, yo podía oírla caminar con agilidad. El sonido de los pasos se detuvo abruptamente. Me pregunté qué fue lo que vio.

—Ah, vengan, vengan!

Diciendo eso, ella nos hizo señas a mí y Yukinoshita para venir. Llamándonos, ella nos invitó a ver las numerosas peceras con forma cilíndrica.

Rosa y púrpura, azul marino.

Los diferentes colores de luces iluminaban las medusas flotando y vagando en el interior de las peceras. Yuigahama saltó a los brazos de Yukinoshita, y las dos observaron el espectáculo la una al lado de la otra. La pecera tenía una pequeña ventana redonda para que la gente mire a través.

Por lo tanto, era un poco pequeña para que tres personas vieran a la vez, de este modo, di un paso hacia atrás a donde yo pudiera ver cómodamente.

—Wow, este se parece a los fuegos artificiales!

Mientras miraba las medusas contoneándose, Yuigahama murmuró con una voz que era como si estuviera recordando algo.

—¿Oh?

Sin embargo, las medusas son medusas. Incluso cuando las miraba de cerca, me encontré preguntándome cómo incluso se parecían a los fuegos artificiales.

Yuigahama giró la cabeza hacia mí y señaló un lugar en la pecera.

—¿No lo ves? Allí, en ese lugar. Pewwww, Bannngggg.

La medusa que Yuigahama señalaba, tenía un cuerpo en forma de estrella. Contraía y relajaba su cuerpo, contraía y relajaba, la misma acción se repetía una y otra vez.

Incluso si dices eso, aún estoy bastante seguro de que no podía verle el parecido con los fuegos artificiales.

—Oh, ahora lo entiendo. Tal vez si los redondos extienden su cuerpo, podría parecerse a algo así.

Con esa respuesta, Yuigahama negó con su pequeña cabeza. Y así, una vez más, esta vez, el vidrio fue tocado de nuevo por un dedo.

—No es eso, aquí…….

Dicho esto, ella apuntó a la medusa en la parte posterior con los largos tentáculos sobresaliendo de su cuerpo. Los largos tentáculos se contrajeron por un momento, antes de desplegarse una vez más.

Las luces de la iluminación brillaban. Continuó persistiendo y propagándose por todo el agua como una lluvia dorada.

He visto este tipo de fuegos artificiales hace algún tiempo.

Eso fue durante el verano. En el parque que estaba lleno de gente, varios enormes STARMINE subían a los cielos, reflejado en el vidrio de cristal espejo de la Torre de Chiba.

Con el lanzamiento del final, sin duda fue una lluvia dorada. El cielo estrellado de la noche, dejó rastros de esa luz como siempre. El recuerdo de aquella escena. Podía verlo ahora, justo en la pecera frente a mí.

Delante de mí, Yuigahama se acercó a Yukinoshita.

—Demasiado cerca……

—Ehehe

Yuigahama no la prestó atención a ella mientras Yukinoshita torcía su cuerpo desconcertada. De repente, ella agarró a Yukinoshita y se plantó justo delante de la pecera.

Mirando el reflejo en el cristal, confirmé que estaba realmente detrás de ellas dos. Y así, Yuigahama cerró sus ojos por el breve momento.

—Estoy muy contenta…. Que los tres pudiéramos ver esto, juntos.

Palabras que sonaban de alivio, al igual que su suspiro.

Esas palabras eran extrañas pero estoy seguro de que yo las entendía. Yukinoshita tiró de su mandíbula y asintió con la cabeza también.

No podría decir con certeza, pero me atrevería a decir que en ese momento, lo que todos estábamos sintiendo, probablemente no era tan diferente. Era una ilusión de la que me aferré.

***

Salimos del pasillo luminoso, y llegamos a la zona con el restaurante y las tiendas. Girando a la izquierda aquí nos llevaría hacia el exterior. Parecía que el camino terminaba acá. Tal como está, si uno fuera a subir las escaleras, entonces estaría de vuelta en la entrada.

Mirando hacia atrás desde la entrada, si uno fuera a tomar el camino de la derecha, llevaría al lugar donde vimos por primera vez las peceras con los tiburones martillo. Es decir, aquí era exactamente una vuelta del parque marino.

—¡GOL!

Yuigahama brincó animadamente, y giró hacia nuestra dirección.

—Hey, vamos por otra ronda!

—De ninguna manera. No tiene sentido visitar los mismos lugares de nuevo.

—S…Sí. Estoy de acuerdo. Estoy un poco cansada después de todo. A diferencia de Yuigahama, Yukinoshita parecía muerta de cansancio.

Caminando de un lado a otro de esta manera, no era de extrañar que Yukinoshita pareciera tan cansada. Sería difícil para alguien como ella con tan poca resistencia después de todo.

Mi mirada se dirigió a Yuigahama. Podrías por favor darle un vistazo amablemente a Yukinoshita, era lo que yo estaba insinuando.

Entonces, mientras Yuigahama revolvía el moño en su cabello, pude ver el aspecto de renuencia en ella cuando ya habíamos llegado aquí por este camino.

—¿Es así?…… Creo que hubiera sido divertido. No es el tiempo todavía de todos modos…… Yuigahama miró su reloj mientras lo decía. Entonces, algo parecía haber captado su atención.

—¡Ah!

Levantando la voz, ella señaló a la enorme rueda de la fortuna en la distancia.

***

La rueda de la fortuna de primera clase de Japón. Era ciertamente enorme.

Tomando el ticket de la rueda de la fortuna del bolsillo en mi pecho y dándole la vuelta. Leí que tenía 111m de diámetro y 117m de altura total.

Bueno, realmente no puedo describir lo alto que realmente es en realidad. Es difícil conseguir una analogía exacta para describirlo. Sin embargo, si tuviera que utilizar una palabra para describirlo, sería alto. Además, aterrador.

El hecho de que acabo de describirlo subconscientemente en otra palabra es ciertamente aterrador.

Yuigahama planeaba montar en la rueda de la fortuna ya que no había mucha cola ahora. Después de comprar el ticket, fuimos capaces de abordar la rueda de la fortuna de inmediato.

Y así, comienza el horror.

Pensando en ello, eran cerca de 10 años desde la última vez que monté la rueda de la fortuna. Naturalmente, me volví tan ansioso de ello que mis pies temblaban mientras caminaba.

A medida que el transporte de la rueda de la fortuna ascendía, un curioso sentido de aventura se apoderó de mí. El vaivén sutil por el viento me dio la sensación de que estaba arriesgando mi vida.

“Aterrador…..”

Un susurro involuntario se me escapó.

Sin embargo, fue sólo un susurro. Un caballero no se pondría nervioso delante de ellas dos. Por otra parte, si estuviera montando esto yo solo, probablemente ya estuviera abrazando mi cabeza temblorosa.

Ahora bien, hablando de ellas dos. Estaban sentadas la una junto a la otra. Me pregunté cómo les iba.

“¡Waaa, tan alto! ¡Aterrador! Quiero decir, esto está sacudiéndose locamente!”

Ella estaba pasando un momento tan divertido que se aferraba a las ventanas, casi levantándose de su asiento con alegría. Gracias a ella, mi susurro anterior de “aterrador” no fue escuchado. Por otro lado, Yukinoshita se había puesto pálida. Ella no estaba mirando el paisaje exterior, sólo miraba fijamente a sus pies.

“¿No estabas escuchando hace un momento? Te dije que no teníamos que hacer esto si realmente no querías.”

Yukinoshita hizo una sonrisa irónica, sabiendo que yo diría algo por el estilo. Entonces, Yukinoshita definitivamente hizo una suave mirada hacia mi dirección.

“No es nada…… Todos, juntos…..”

Ella desvió la mirada mientras decía eso. Y entonces, en ese instante, la visión del mundo debajo de nosotros probablemente entró en su visión. Su voz se quedó atascada en su garganta. Y entonces, como si pidiera ayuda, ella estiró sus manos hacia Yuigahama. Agarró sus brazos con firmeza y la obligó a sentarse.

“Yuigahama-san. No puedes hacer eso mientras estás en la rueda de la fortuna. ¿No leíste las instrucciones?”

“Yukinon, te ves aterradora! Lo… Lo siento, me estaba divirtiendo mucho…… ”

“No es que esté particularmente preocupada por que te estés divirtiendo, es sólo que ciertas normas tienen que ser acogidas.”

Ahaha, Yuigahama rio mientras se disculpaba con Yukinoshita, que tenía una expresión fría mientras reprendía a Yuigahama. Sin embargo, Yukinoshita no intentó liberar su agarre de los brazos de Yuigahama.

Al darse cuenta de que estaba siendo retenida, Yuigahama respondió con un firme apretón, y cerró la distancia entre ella y Yukinoshita.

Y entonces, pude ver a las chicas apuntando hacia la derecha.

“Mira, por allá! La casa de Yukinon está probablemente por allá. Ah, si tan sólo pudiéramos acercarnos más en esa dirección, probablemente podríamos verlo.”

“Es magnífico. Creo que hay más que suficiente para ver desde aquí.”

A pesar de decir eso, Yukinoshita se negaba firmemente a moverse. Sin embargo, ella tímidamente comenzó a echar un vistazo hacia el paisaje fuera de la ventana. Haaaa, y así, dejó escapar un suspiro, uno que estaba lleno de asombro y satisfacción.

Atraído por ella, yo también, miré por la ventana para examinar el paisaje exterior.

El paisaje del atardecer de la nieve cayendo rápido y con fuerza sobre Chiba se desplegó ante mis ojos.

En la distancia, el paisaje urbano daba generosamente una capa delgada de maquillaje blanco. “Es tan hermoso…..”

Asentí con la cabeza ante las palabras de Yuigahama. Verdaderamente me sentí de la misma manera que ella.

“Ah, como se esperaba de mi Chiba~” “¿Desde cuándo se convirtió en tuyo?”

“Por el momento. Pero este lugar aquí, es Tokio, ¿no?”

“Edogawa es uno de los 23 barrios de Tokio, ¿sabes? De todos modos, este lugar está más cerca de Kasai. Dudo mucho que puedas ver Chiba desde aquí. ”

Al oírme decir una cosa así, Yuigahama rio mientras Yukinoshita me sonreía con asombro.

Y así, continuamos contemplando la vista que se extendía ante nosotros, sin cansarnos en ningún momento de ella.

La conversación habitual, el ambiente habitual, pensé que eso era típico de nosotros. Y, sin embargo, había esta indecisión e incertidumbre que persistía en mis pies.

La rueda de la fortuna comenzó gradualmente su descenso.

Ocultando su inestabilidad, continuaba girando lentamente. Sin hacer ningún progreso, simplemente dando vueltas y vueltas en el mismo lugar de siempre. Pero aún así, con el tiempo……..

—……. Ya casi acaba.— Ella murmuró.