Jinrou E No Tensei Maou no Fukukan (NL)

Volumen 1: El Nacimiento de una Ciudad Demoníaca

Capitulo 1: Hechos de Plata

Parte 4

Todavía sonriendo, Gomoviroa dijo, “Me quedé atrás para apoyar al ejército que más necesitara asistencia. Me parece que sería el tuyo, ¿no? Todos mis otros discípulos fueron provistos de amplios soldados, así que no necesitan mi ayuda.”

“S-Supongo que es verdad.”

Así que realmente nuestras fuerzas desplegadas eran muy pocas. Aun así, bajo mi comando, pudimos capturar nuestra ciudad asignada. Hinché mi pecho con orgullo.

“Sin embargo, logré capturar mi ciudad con el escuadrón más pequeño de todos. Con cero bajas también. Bastante impresionante, ¿no crees?”

“Admitiré que aprovechaste al máximo los rasgos únicos de tus hombres lobo, pero tampoco tengo dudas de que pasaste la noche acurrucado por temor a una revuelta.”

“¿Cómo lo supiste?”

“Conozco tu personalidad, muchacho.”

Con una sonrisa, ella flotó en el aire y se posó en mi hombro.

“¿Hay alguien en quien puedas delegar el liderazgo?”

“Ah, sí. Ya he puesto a Fahn a cargo de la unidad en las puertas de la muralla, así que eso me quita una carga de encima. ¿Te encontraste con ella en el camino?”

“Ah, esa chica que te gusta.”

“¿Cómo sabes eso?”

“También conozco tus gustos.” Ella sonrió maliciosamente. “Bromas aparte, me gustaría tomarte prestado por un momento. Tenemos que informarle al Señor Demonio.”

“¿Quieres que yo también vaya?”

Me pareció extraño que el Señor Demonio quisiera escuchar un informe de un simple vicecomandante. Normalmente era el trabajo del comandante enviarle informes. Sin embargo, Gomoviroa negó con la cabeza y dijo, “El Señor Demonio expresó que deseaba escuchar los detalles del general que dirigió la operación. Deja de hacer preguntas y sígueme.”

Mi maestra conjuró un hechizo con una voz cantarina. Un segundo después, mi visión se volvió borrosa y el espacio a mi alrededor se distorsionó.

***

—Memorias de Gomoviroa, Página 160—

Mis queridos discípulos han crecido espléndidamente. Han ascendido a rangos prominentes en el ejército del Señor Demonio y todos lideran un escuadrón de soldados.

Mi discípulo hombre lobo, Veight, también ha progresado mucho. Por lo que yo sé, él es el único hombre lobo mago de la historia. Eso hace que su crecimiento sea aún más espectacular.

Aunque debo admitir que es un niño bastante peculiar. Uno tendría que ser peculiar para aspirar a ser un mago como hombre lobo, pero eso no es lo único extraño en él. Es cierto que su talento radica en la magia de fortalecimiento, pero aun así su comprensión del cuerpo de una persona es fenomenal.

Tomemos como ejemplo la desintoxicación. Se sabe que concentrar la magia en el lado derecho del estómago cuando se intenta eliminar venenos es el método más efectivo.

Las teorías predominantes sobre por qué es que las toxinas se reúnen en esa parte del cuerpo, o que en algún lugar cerca de allí se encuentra un órgano que ayuda a la desintoxicación.

Cuando acepté a Veight como mi aprendiz, él ya lo sabía. Una vez que le enseñé los principios básicos de la magia de la desintoxicación, pareció entender instantáneamente por qué su flanco derecho era el lugar adecuado para concentrar su mana. Para ser honesta, me sorprendió hasta a mí.

Veight parece tener un sentido natural de qué partes del cuerpo necesitan ser fortalecidas para lograr los efectos que él quiere. Como tal, él sabe que la mejor manera de aliviar el agotamiento es también concentrar el mana en el flanco derecho. Y para calmar la sed, el mana no debe aplicarse en la garganta, sino en la cintura.

Incluso sabe que concentrarse en los músculos de la espalda y la cintura es más importante cuando se trata de peleas cuerpo a cuerpo que en los brazos o las piernas.

Estas son todas las cosas que los practicantes normales no notan hasta que hayan acumulado más experiencia. Y sin embargo, Veight descubre la forma óptima de aplicar cada hechizo en el momento en que lo aprende. Es posible que haya encontrado a un genio oculto.

Pero la razón por la que valoro a Veight no es solo por su talento mágico. Su perspectiva de la vida no se parece en nada a la de un demonio normal.

Para ser un hombre lobo, es increíblemente pasivo y lento para enojarse. Aunque no es físicamente débil, no es apto para el estilo de combate que prefieren la mayoría de los hombres lobo. Pero su sabiduría y métodos poco ortodoxos son precisamente lo que el ejército demoníaco necesita en este momento. Es por esta razón que aún no le he transmitido mis técnicas finales. Para él alcanzar la cima como un simple mago sería un desperdicio colosal de sus talentos.

Hay un antiguo dicho que dice “Servir agua fangosa en una copa de oro es el colmo de la locura”. Deseo que crezca aún más antes de otorgarle los secretos de la magia.

Sin embargo, el hecho de que le he enseñado esto a todos mis discípulos, excepto a él, le ha dado la idea errónea de que él es inferior en comparación. Este malentendido tendrá que ser remediado con el tiempo. Después de todo, tengo la esperanza y la expectativa de que alcanzará el pináculo de la magia de fortalecimiento.

A pesar de todo, he recomendado a Veight al Señor Demonio. Mis otros discípulos son por supuesto espléndidos también, pero solo él es especial. No hay nadie como él dentro de nuestra nación.

Tengo la firme convicción de que logrará grandes cosas.

***

—Cuartel General del Ejército Demoníaco, Castillo de Grenschtat—

Aunque el nombre del castillo sonaba impresionante, la verdad es que solo era un castillo en ruinas.

Originalmente había sido una fortaleza humana que había sido abandonada siglos atrás después de un conflicto interno entre reinos humanos. Los demonios lo habían encontrado mucho más tarde, lo habían reparado con magia, lo habían hecho casi inexpugnable y ahora lo usaban como su base de avanzada.

La fortaleza estaba rodeada por una densa niebla mágica que la hacía invisible e imposible de acercarse. Cualquier humano que tocara la niebla quedaría paralizado y los sensores dentro de la niebla informarían al castillo de su ubicación. Incluso si los humanos enviaran un ejército, simplemente serían aniquilados antes de llegar al castillo.

Caminé a través de la niebla, con mi maestra cabalgando sobre mi hombro. Para nosotros los demonios, la niebla se sentía ligeramente agradable. La magia de teletransportación estaba sellada dentro del castillo, por lo que no tuvimos más remedio que ir a pie desde las puertas principales. Estaba en mi forma de hombre lobo para evitar malentendidos con los guardias.

“A pesar de lo espeluznante que parece, en realidad es agradable aquí.”

“Resulta que soy humana, así que me temo que no puedo decir lo mismo—pero supongo que al menos no es desagradable.”

Así que realmente ha desechado la mitad de su humanidad. El dragonante que vigilaba las puertas reconoció mi rostro y nos dejó pasar sin hacer preguntas. Todos los guardias dentro del castillo eran dragonantes altamente habilidosos. Pertenecían al primer regimiento, que estaba liderado directamente por el propio Señor Demonio. Mientras atravesaba el patio del castillo, sentí que una figura se acercaba más allá de la niebla. Quienquiera que fuera, era enorme.

“Él, ¿eh?”

Cuando Gomoviroia murmuró sus palabras, yo también me di cuenta de quién venía. Reconocería ese hedor de sangre en cualquier parte.

“Pero si es la comandante del tercer regimiento.”

La niebla se dividió para revelar a un gigante con el rostro de una bestia. Medía fácilmente tres metros de altura. Dos veces mi altura. También era un ogro. Los ogros en este mundo no se veían muy diferente de cómo los RPG los habían imaginado. Llevaba solo un burdo taparrabos y llevaba una enorme maza de acero.

Este hombre, Dogg, era un Vicecomandante del segundo regimiento y el general que dirigía el cuerpo de ogros. Su nombre podría haber sonado gracioso, pero ríete de él y es probable que te destroce los sesos. Aparentemente, entre los ogros, el nombre significa ‘Perro Loco’. Para ser honesto, lo hacía sonar más ridículo.

Sin siquiera un mínimo indicio de respeto por el título de mi maestra, él la saludó bruscamente antes de volverse hacia mí.

“¿Vas a dar tu informe? Te tomó bastante tiempo”, se burló.

Supongo que eso significa que ya terminó de dar el suyo. No podría haber llegado antes que nosotros por más de unos minutos como máximo, pero todo lo que le importaba a este saco de músculos era ganar, incluso cuando no era una competencia. Cuando vio que no iba a morder el anzuelo, trató de provocarme un poco más.

“Me da igual si capturaste una ciudad comercial o lo que sea, ¿realmente vale la pena venir aquí para informarlo en persona? Te haré saber que capturé la ciudad minera de Boltz.”

Dogg hinchó el pecho con orgullo y levantó su maza. ¿Realmente es algo por lo que emocionarse tanto?

“¿Entiendes lo que eso significa? Capturé una ciudad minera. Eso significa que tiene minerales. Las ciudades comerciales no tienen minerales. Eso significa que no valen nada.”

Oh, ahí es donde va con esto. Básicamente, estaba tratando de enfatizar lo mucho mejor que fue su logro. Dudo que este imbécil entendiera qué tipo de valor podría ofrecernos una ciudad comercial.

De hecho, la mayoría de las personas en este mundo, ya sean humanos o demonios, parecían incapaces de comprender muchos conceptos simples. Sabía cuán importante era tener un flujo estable de bienes para la economía de una nación, pero tomaría demasiado tiempo explicárselo, así que no me molesté. En cambio, solo me encogí de hombros.

“Debe ser agradable tenerlo fácil.”

El rostro de Dogg se enrojeció. Aparentemente, la sangre de ogro era tan roja como la sangre humana.

“¡¿Te estás burlando de mí?! Soy el ogro más fuerte y más inteligente—¡Soy el gran Dogg!

Más inteligente, eh… Bueno, creo que la mayoría de los ogros tienen el cerebro de un niño pequeño. Dado que es al menos tan inteligente como un estudiante de secundaria, creo que eso lo convierte en el más inteligente.

“Y resulta que yo soy un hombre lobo mago. Un genio como tú debería ser capaz de decir quién de nosotros es más fuerte, ¿verdad?”

“¡Por supuesto! ¡Yo!”

Oh dios, es un idiota. Me volví hacia mi maestra en busca de apoyo, pero ella había flotado a una corta distancia y estaba mirando impasible.

“Ustedes dos vicecomandantes, diviértanse ahora.”

“Maestra…”

Mi maestra encontraba la lucha como una verdadera molestia, igual que yo. Suspirando, me volví hacia el ogro.

Para los demonios, el poder lo era todo. El débil se sometía al fuerte. Supongo que le daré una muestra de lo que puedo hacer.

Miré a Dogg y le dije, “Deja de bloquear mi camino con tu culo gordo, debilucho.”

“¡¿Qué dijiste?!”

Sin previo aviso, balanceó su enorme maza hacia abajo. Pero no fui tan tonto como para dejar que me golpeara. Para la vista superior de un hombre lobo, su maza parecía que estaba bajando en cámara lenta. Salté hacia atrás y la maza de Dogg se estrelló contra el suelo frente a mí, enviando astillas de piedra volando por todas partes.

“Oye, no rompas el precioso castillo del Señor Demonio.”

Si realmente quiere pelear tanto, supongo que puedo complacerlo.

“Los niños revoltosos como tú deben ser castigados.”

Los ogros tendían a ser físicamente más fuertes que los hombres lobo. Teniendo en cuenta la diferencia de tamaño entre ellos, eso era obvio. Con sus enormes mazas, los ogros podrían derribar fácilmente a decenas de enemigos con un solo golpe. Cuando se trataba de fuerza bruta, eran los mejores.

Sin embargo, había un defecto fatal con sus físicos. Debido a su tamaño, eran abismalmente lentos. Dicho esto, aún se necesita mucho coraje y habilidad para tomar la iniciativa en contra de uno. Especialmente porque dar un golpe serio a sus duras pieles con un solo ataque no era fácil.

Incluso si pudieras, eso no evitaría que su golpe te aplastara. Eran un oponente bastante aterrador. Para los humanos, al menos.

Mientras reflexionaba sobre el enfrentamiento ogro-humano, esquivé otro de los golpes de Dogg. Ningún ogro podría darme problemas, vicecomandante o no.

La maza de Dogg, que ni siquiera tenía pinchos, no era una gran amenaza cuando era tan lenta. Y yo no era lo suficientemente amable como para darle tiempo de dar un tercer golpe. Salté hacia adelante y le di una fuerte patada en el mentón a Dogg.

“¡¿Ugwah?!”

El cráneo de un humano se habría roto por ese golpe, pero los ogros estaban hechos de material más duro. Logré aplastar la mandíbula de Dogg, pero eso fue todo.

Él realmente estaba hecho como un tanque. La mayoría de los otros enemigos habrían tirado la toalla en este punto, pero Dogg no había subido a su posición echándose para atrás.

Con su espíritu de lucha aún ardiendo ferozmente, Dogg balanceó se maza hacia mí.

“Whoa.”

Puede que su puntería haya sido pobre, pero si uno de sus golpes me hubiera dado de lleno, estaría tumbado en el suelo. Me aparté del camino y me preparé para dar el golpe final. Ahora que lo pienso, la Maestra me está viendo en este momento. Tal vez debería usar un poco de magia. Torcí mis dedos en un signo mágico y vertí mana en las palmas de mis manos.

“Perdón por esto.”

Mis garras comenzaron a emanar una luz oscura y un segundo después estaban envueltas en llamas negras. Había usado un hechizo que mejoraba temporalmente el filo de un arma. Clavé mis garras envueltas en llamas en la mandíbula destrozada de Dogg.

“¡GRAAAAAAAAAAAH!”

Después de abrirme camino en su rostro, agarré un puñado de huesos agrietados y rotos, y los aplasté en mi puño. Ni siquiera Dogg podría soportar ese tipo de dolor.

Dejó caer su maza—todas las ganas de resistirse se fueron. Contra un oponente humano podría haber terminado la lucha hace mucho tiempo, pero en el caso de los demonios, tienes que vencerlos completamente o nunca te aceptarán. Tenía que demostrarle sin lugar a dudas que yo era más fuerte.

Y así, volteé sin piedad su cuerpo y lo levanté por su mandíbula rota, forzando su cuerpo a una posición incómoda. Si su cuello no hubiera sido tan grueso, se habría roto.

“¿Tienes ganas de rendirte ahora?”

Terco hasta la médula, Dogg solo gritó de dolor. Parece que no tengo otra opción.

“Bien, entonces te pondré dormir.”

Golpeé su cabeza contra el suelo. Su cráneo era lo suficientemente fuerte como para romper rocas, pero eso no significaba que no le doliera.

Sus ojos se pusieron en blanco y cayó inconsciente. Ese último golpe debe haberle causado una conmoción cerebral. El resto de su cuerpo cayó al suelo con un ruido sordo. No volvería a levantarse pronto.

Si en una competencia de fuerza no había nadie mejor que los ogros, no había nadie más apto para asesinar que los hombres lobo. Y aunque esta pelea había sido brutal, era bastante común cuando se trataba de contiendas de fuerza entre demonios. Era porque los demonios eran tan propensos a la violencia que los humanos les temían tanto.

“Muy bien, es suficiente. Mmm, esa fue una buena pelea.”

Su tono dejó en claro que a ella no le importaba de ninguna manera la pelea. Ella flotó hacia abajo y sanó la mandíbula destrozada de Dogg con magia curativa, luego le dio una palmadita en el hombro.

“Tu exhibición galante fue impresionante. Veo que tu título no era solo de adorno.”

“O-Oww… Gah… duele…”

Aunque sus heridas deberían haber sanado, Dogg seguía gimiendo de dolor. Parecía que mi maestra había usado el hechizo de recuperación más doloroso para sanarlo. Ella había fortalecido los poderes curativos naturales de Dogg. Al hacerlo, absorbió sus escasas reservas de mana para cerrar sus heridas, pero lo dejó con un dolor insoportable hasta que se curó por completo. Mi maestra definitivamente tenía un lado cruel.

Una vez que terminó, mi maestra se dio la vuelta y me golpeó en la cabeza, con una expresión de disgusto en su rostro.

“¿Qué clase de pelea fue esa? Esperaba algo mejor de uno de mis discípulos.”

“S-Sí, Maestra…”

Pensé que había ganado muy fácilmente, pero aparentemente mi maestra no estaba satisfecha. Todavía flotando frente a mí, ella murmuró, “Por un momento, temí que él pudiera derrotarte. En serio, ¿estabas tratando de darle un ataque al corazón a esta anciana?”

Oh, ella solo estaba preocupada. Puede que tuviera un lado cruel, pero Gomoviroa también era muy protectora con sus discípulos.

Dejamos a Dogg con su sufrimiento y fuimos a encontrarnos con el Señor Demonio. Esto marcaría mi segundo encuentro con él. Cuando llegamos a las imponentes puertas de acero que eran la entrada a sus aposentos, respiré profundamente.

El Señor Demonio era el demonio más fuerte en el reino, un verdadero rey que gobernaba sobre decenas de miles de personas. Si él quisiera, podría matarme con una bocanada de aire.

“Comandante del tercer regimiento, Gomoviroa, y mi Vicecomandante, Veight. Estamos aquí para entregar nuestro informe”, dijo mi maestra con una voz tranquila. Un segundo después, las enormes puertas dobles se abrieron. La habitación del Señor Demonio era modesta, pero majestuosa. Pulidos pilares de obsidiana cubrían los pasillos, cada uno emitía un brillo etéreo. Habían sido dorados con la famosa plata de los caninos. El negro era el motivo principal de la habitación, pero se destacaba con ocasionales toques plateados.

Personalmente, pensé que un poco más de plata habría sido mejor, pero era posible que él lo mantuviera moderado para hacer que la gente quisiera más.

Si la habitación hubiera estado llena de plata, no habría dejado una impresión duradera en los visitantes. Además, simplemente no era práctico tener toda la habitación decorada en plata.

Los dragonantes que custodiaban los aposentos personales del Señor Demonio tenían escamas negras y estaban armados con lanzas cortas con puntas plateadas. Encajaban perfectamente con el tema general de la habitación.

Una voz profunda resonó desde el fondo de la habitación.

“Adelante.”

Me estremecí involuntariamente, pero no era como si hubiera hecho algo malo. Además, tenía a mi confiable maestra a mi lado. Quizás arruine mi saludo un poco o algo así, pero debería estar bien. Además, incluso si muriera, podría terminar reencarnando de nuevo. Calmé mis nervios e intenté caminar con la mayor confianza posible. Mis pasos resonaron en la vasta habitación.

Un momento. Eso es raro. Mis pasos no suenan cuando mis pies tocan el suelo. Si tuviera que adivinar, la posición de los pilares causó que las ondas de sonido se reflejaran a destiempo dentro de la habitación. Mi decisión de caminar con valentía me trajo una valiosa información.

Había oído que los dragonantes eran pragmáticos y parecía que ese era realmente el caso. Incluso con el arte, encontraron un uso para ello.

Los dragonantes eran básicamente los hombres lagarto que veías en los RPG. Sin embargo, odiaban ser comparados con los lagartos. Y, en verdad, eran mucho más inteligentes que los hombres lagarto que veías en los juegos. Simplemente parecían draconianos.