Kumo Desu Ga Nani Ka?

Volumen 12

Bloe

Parte 3

Golpeo al héroe con todo lo que tengo.

El impulso de mi caballo, la fuerza de mi cuerpo, y sobre todo, la intensidad de nuestros sentimientos está detrás de este golpe.

¡Tengo que ganar!

Pero a pesar de mi inmensa determinación, el héroe bloquea mi golpe.

“¡Tch!”

Una parte de mí esperaba que este ataque pudiera lograrlo, ¡pero sabía que no iba a ser tan fácil!

Pero como bloqueó mi primer ataque del mismo modo, no esperaba realmente que funcionara.

¡Solo estoy comenzando!

“¡Toma esto!”

Acompaño a mi espada hacia abajo desde lo alto de mi caballo.

El héroe levanta su propia espada para bloquear el pesado golpe que le viene desde arriba.

Nuestras hojas chocan, y ambas se bloquean.

Como tengo la ventaja de la altura, el equilibrio de poder se inclina a mi favor por el momento.

Un golpe hacia abajo tiene la ayuda de la gravedad, mientras que el héroe tiene que usar mucha más fuerza para levantar su espada.

Y, sin embargo, seguimos igualados.

Eso solo demuestra que las estadísticas del héroe son más altas que las mías.

Pero no retrocederé. No puedo.

Ni físicamente, ni emocionalmente.

Si retrocedo aquí, todos perdemos.

El impulso de mi espada amenaza con arrastrar mi cuerpo hacia atrás, pero me resisto a la fuerza.

Escucho un crujido en el brazo que sostiene la espada, pero rechino los dientes y lo soporto, entonces vuelvo a atacar al héroe de nuevo.

“¡Maldita sea!”

Mi espada choca contra la del héroe otra vez.

¡No he terminado aún!

A partir de ahí, me lanzo directamente a una serie de ataques.

Es solo un ataque sin elegancia de fuerza bruta, al diablo con la técnica.

Pero en una pelea de espadas como dios manda, probablemente sería yo el que perdiera.

¡Tengo que seguir a base de mi fuerza!

Nuestras espadas chocan dos veces, luego tres, pero él no se rinde.

“¡Nnngh!”

De hecho, soy yo quien tiene problemas para seguir el ritmo de la espada del héroe.

Cada vez que se cruzan nuestras espada, de forma lenta pero constante, mi espada se vuelve un poco más lenta.

Si el duelo sigue así, estoy en problemas.

El desastre se cierne sobre mí.

“¡Hiyah!”

Entonces, con un grito, el héroe golpea con la fuerza suficiente como para hacer a un lado mi espada.

La balanceo demasiado tarde y sin la suficiente fuerza.

El héroe no pierde esa oportunidad.

Levanta su espada y me apunta mientras todavía me estoy recuperando.

No tengo suficiente tiempo como para recuperar mi propia espada y ponerme en posición.

¡¿Estoy jodido?!

De repente, mi caballo se da la vuelta y me hace girar.

Detrás de mí oigo un ruido sordo y fuerte.

“¡¿Eh?!”

Perdiendo el equilibrio, me lanzo hacia delante de mi caballo.

Me las arreglo para rodar con seguridad por el suelo dos o tres veces, luego salto de nuevo, me pongo de pie y me giro.

Frente a mí está mi querido caballo, al que le falta una pata trasera, desmayado en el suelo.

“No…”

Puedo imaginar de inmediato lo que pasó.

Mi querido compañero me protegió y acepto de buena gana el golpe del héroe.

Las patas de un caballo son su salvavidas. Perder siquiera una de ellas es lo mismo que aceptar la muerte.

Alguien con un alto nivel de Magia Sanadora podría salvar a mi caballo, pero echando un vistazo a la gran cantidad de sangre que brota de la herida me dice demasiado claramente que ningún sanador podrá llegar a tiempo.

“¡… Lo siento! ¡Y gracias!”

Eso es todo lo que puedo decir antes de volverme de nuevo hacia el héroe.

Crie a ese caballo desde el mismo momento en que su madre lo dio a luz.

Es mi compañero que lleva conmigo más que cualquiera de los soldados del Séptimo Ejército, o incluso más que mis antiguos camaradas en el Cuarto.

Y dio si vida para protegerme.

Así que me tengo que asegurar que su último acto de lealtad no haya sido en vano.

El luto tendrá que esperar.

¡En este momento, necesito concentrarme en pelear con el héroe con todo lo que tengo!

“¡Aaaargh!”

Gritando, cargo contra el héroe.

Mis palabras con mi caballo duraron solo unos segundos.

La espada del héroe aún está baja después de cortar a mi caballo.

Aunque sé que eso no significa que esté indefenso. Después de nuestra pelea hasta ahora, soy muy consciente de que no es un oponente tan fácil.

El crío se especializa en magia, pero también me supera en el combate cuerpo a cuerpo.

¡Pero no puedo dar marcha atrás ahora!

El destino del Séptimo Ejército, de la raza demoníaca—¡todo descansa sobre mis hombros!

Por los soldados del Séptimo Ejército que ya murieron en esta batalla y por mi amado caballo.

Por los rebeldes que murieron antes de esta batalla, como Warkis, y los pobres que intentaron huir del gobierno tiránico del Señor Demonio, y aquellos que perdieron la vida antes de que pudieran siquiera intentarlo.

Por todos aquellos que se vieron obligados a intentar lo imposible debido a ese horrible Señor Demonio y murieron desesperados.

Y eso no es todo.

Verás, sé lo duro que estaban trabajando tipos como mi hermano y Agner antes de que apareciera el Señor Demonio, desgastándose hasta los huesos para intentar ayudar a la raza demoníaca a recuperarse de su lamentable estado.

Crecí viendo a mi hermano mayor dedicarse hasta la devoción al servicio civil, sin apenas parar para dormir.

Y después de todo ese esfuerzo, aquí estamos.

¡No voy a permitir que los esfuerzos de mi hermano fueran en vano!

Mi hermano, Agner, y luego está…

En el fondo de mi mente, veo a Blanca, siempre acechando detrás de ese desagradable Señor Demonio.

No puedo perder, maldita sea. ¡Simplemente no puedo!

“¡Uff…argh!”

Respiro hondo, luego arremeto con otro ataque de cuerpo entero.

El héroe lo detiene fácilmente, por supuesto.

¡No he terminado aún!

Tirando mi espada hacia atrás, cambio el ángulo y voy para otro golpe inmediato.

Él bloquea y vuelve a bloquear. ¡Debo seguir! ¡No puedo parar!

¡No cejaré hasta que haya usado cada pizca de fuerza de mi cuerpo!

“¡¡!!”

Lo siguiente que sé es que estoy conteniendo la respiración y la mitad de mi visión se ha nublado.

He perdido de vista todo menos al héroe, siguiendo su espada con mis ojos.

<El dominio ha alcanzado el nivel requerido. La habilidad [Pensamiento Acelerado LV4] se ha convertido en [Pensamiento Acelerado LV5].>

Las habilidades funcionan de manera misteriosa; por alguna razón, aumentan en una batalla real como esta con mucha más facilidad que durante un enfrentamiento.

Algunos dicen que la tensión de estar al borde de la muerte promueve el crecimiento, y es mucho más obvio cuando estás luchando contra alguien que es más fuerte que tú.

A veces, ese crecimiento puede incluso cambiar el rumbo de la batalla.

Pero gracias a mi habilidad de Pensamiento Acelerado recién mejorada, puedo ver los movimientos del héroe mucho más claramente.

¡Es obvio que puede predecir cómo voy a atacar antes de que empiece!

El crecimiento que acabo de experimentar solo hace que la diferencia entre nuestras capacidades sea aún más clara.

Estoy agitando frenéticamente mi espada sin nada en mi mente, pero el héroe puede ver a través de todos mis movimientos. ¡Tan solo está esperando que baje la guardia!

¡No puedo alcanzarlo!

¡Ni siquiera después de esto!

¡Pero no puedo perder!

¡¿Cuánto crees que sacrificamos para llegar tan lejos?!

¡Y aun así, y aun así!

Aunque mi interior se ha puesto rígido de la tensión, mi respiración comienza a acelerarse de nuevo.

Las bocanadas del aire ardiente del campo de batalla me invaden y abrasan los pulmones.

Siento que mi espada se balancea más lentamente, mis movimientos se entorpecen, mis fuerzas fallan.

He llegado al límite de mi agotamiento.

“¡Aaaaaaargh!”

Presiono todo eso hacia abajo con toda mi fuerza de voluntad y sigo atacando.

Pero…

“Sigue sin funcionar.”

“¿Eh?”

Mi espada cae a un lado.

Incapaz de soportar el impulso, me tambaleo hacia atrás con ella.

Inmediatamente, me encuentro con un aluvión de misiles hechos de luz.

La Magia de Luz del héroe, me doy cuenta—justo cuando el poderoso ataque cae sobre mí.

“¡Ugh! ¡¿Urgh?!”

No hubo tiempo para esquivar, bloquear o ni siquiera pensar.

¡¿Así que esto es lo lejos que estamos el héroe y yo en fuerza?!

Soy lanzado hacia atrás, caigo al suelo y aterrizo sobre mis manos y rodillas.

Pero este no es el final. ¡No puede ser!

“Aún no…”

Utilizo mis habilidades para curar mis heridas.

Pero puedo sentir la fuerza drenándose de mi cuerpo en el proceso.

Mis heridas están curadas, pero apenas tengo estamina para luchar.

“No deberías forzarte más. Seguramente, a estas alturas ya ves que soy mucho más fuerte que tú.”

Parece que el héroe también puede saber en qué estado estoy.

“¡Todavía no he perdido, maldita sea! ¡Si me arrastro hasta casa así, no podré mirar a la cara a mi hermano!”

No solo a él.

¡Estaría fallando a toda la raza demoníaca!

“Si tienes hermanos, ¿no es esa una razón más para sobrevivir? Retira tus tropas. No os perseguiremos.”

… ¡Este maldito bastardo!

¡Si fuera tan fácil, no habría problema!

“¡No podemos retirarnos, maldita sea!”

Me levanto y vuelvo a cargar.

La parte racional de mi cerebro me grita que no puedo ganar esta batalla.

¡Lo sé!

El héroe es demasiado fuerte.

¡Pero aun así! ¡Tengo que intentar desgastar al menos un poco de su magia y resistencia!

Incluso si no puedo ganar, ¡debo creer que desgastarlo podría marcar la diferencia para que Agner lo derrote!

Mi espada es apartada fácilmente a un lado, y otro disparo de luz vuela hacia mí.

Es del mismo modo en que me tiraron hace un minuto.

Pero saber eso no significa que pueda hacer algo al respecto.

Vuelvo a caer al suelo.

“Aún… no…”

Intento ponerme de pie de nuevo, pero el héroe clava su espada en la tierra frente a mis ojos.

Si hubiera sido un poco más cerca, me habría atravesado el cuello.

“No vuelvas a levantarte.

No me deja moverme.

Las palabras del héroe contenían una amenaza obvia: si intentaba levantarme, el me mataría.

“No eres el único con cargas que soportar.”

A pesar de su juventud, sus palabras tienen un gran peso.

Esto debería ser obvio, pero así como nosotros estamos luchando por el destino de la raza demoníaca, el héroe está luchando por la humanidad.

ÉL está aquí cargando con los mismos sentimientos y la misma determinación que yo tengo.

Si ambos tenemos emociones igualmente fuertes, entonces este resultado es básicamente el resultado de la diferencia de nuestra fuerza.

Mis sentimientos no son suficientes como para cambiar las cosas si la determinación del enemigo es igual de fuerte.

“¡Maldita… sea… todo…!”

Mis dedos se clavan en la tierra.

Quiero ponerme de pie, pero no puedo.

¡¿Por qué no puedo ser más fuerte?!

¡Lo suficientemente fuerte como para vencer al héroe!

¡Para vencer al Señor Demonio!

“No sé qué te impulsa a pelear, por supuesto. Estoy seguro de que tendrás razones que no puedo ni empezar a comprender. Pero si vosotros, los demonios, insistís en romper la paz con la humanidad, entonces lucharé con la determinación de proteger a los de mi especie.”

La mano del héroe agarra su espada con fuerza.

“¿Por qué?” Un ápice de ira se cuela en su voz. “¡¿Por qué tuvisteis que empezar una guerra?! ¡¿Por qué seguís obligándonos a luchar?!”

Ante eso, mi propia ira se desborda.

¡Tampoco es que estemos peleando porque queramos!

“¡Porque si no lo hacemos, nos van a matar a todos!”

“¿Eh?”

El héroe parece sorprendido ante mi respuesta, mirándome boquiabierto con una expresión que no procede en el campo de batalla.

De algún modo, eso me cabrea aún más. Mi rabia se apodera de mí y comienzo a gritar.

“¡Es el Señor Demonio! ¡Ella dice que va a acabar con todos nosotros si no luchamos contra los humanos y ganamos!”

“¿El Señor Demonio?”

“¡Sí, así es, maldita sea! ¡Todo salió mal desde que apareció! ¡No es que queramos pelear, ¿sabéis?! ¡Pero si no lo hacemos, nos matarán a todos! ¡Los demonios desaparecerán! ¡Maldita sea todo! ¡¿Por qué?! ¡¿Por qué tiene que ser así?! ¡Al diablo con todo!”

Olvidándome de la espada en mi garganta, golpeo el suelo con el puño.

Mi visión se vuelve borrosa por las lágrimas.

Es humillante, pero estoy seguro de que moriré aquí de todas formas.

Un tipo debería ser capaz de llorar tanto como le plazca en sus últimos momentos.

“… Así que si el Señor Demonio fuera derrotado, ¿esta guerra acabaría?”

“¡¿Hmm?! ¡Sí, si eso fuera posible!”

Cuando dejo escapar de manera imprudente mi respuesta a la pregunta del héroe, saca su espada del suelo.

“Bueno, supongo que tendré que derrotar al Señor Demonio, entonces.”

No puedo evitar mirar fijamente al héroe en respuesta a esta declaración tan casual.

“… ¿Eh?”

“Si el Señor Demonio es la causa de la guerra, entonces todo lo que tengo que hacer es derrotarla. Además…” se detiene por un momento. “Es el deber del héroe derrotar al Señor Demonio, ¿no es así?”

Su tono es medio en broma, pero sus ojos se ven serios.

El héroe solo puede decir eso con tanta confianza porque no sabe lo fuerte que es el Señor Demonio.

… Pero ¿es realmente ese el caso?

La verdad es, que tampoco sé lo fuerte que es ella.

Todo lo que sé es que debe ser mucho, muchísimo más fuerte que yo.

Pero el héroe también es mucho más fuerte que yo.

… ¿Significa eso que podría vencerla?

¿En serio?

Porque si es así…

De repente, el suelo tiembla.

Un escalofrío recorre mi espalda.

Hay algo en el aire, algo más abrumador que lo que sentí antes, algo lo suficientemente fuerte como para aplastarme.

“¿Q-Qué diablos…?”

No puedo evitar que mi cuerpo tiemble.

Esto… esto no puede ser real.

Incluso el héroe abre los ojos de par en par y mira por encima de mi hombro.

No me atrevo a darme la vuelta.

Pero sé que no tengo otra opción.

Mientras miro lentamente por encima de mi hombro, veo la respuesta a mi pregunta.

Un monstruo increíblemente gigante.

Sus ocho patas se hunden profundamente en el suelo, y ocho ojos nos miran desde arriba.

Sé lo que es esto.

Nunca había visto una en persona antes, pero todo el mundo ha oído hablar de este desastre natural andante. Es cosa de cuentos de hadas y pesadillas.

Y su nombre es reina teratect.

En términos de la clasificación de peligro que los humanos otorgan a los monstruos, es un monstruo de clase legendaria, el tipo de catástrofe que ninguna cantidad de humanos podría esperar derrotar.

¡¿Cómo algo como esto apareció de la nada?!

A pesar de mi confusión, la reina teratect ya se está moviendo.

Apunta con su boca a Fuerte Kusorion, y el mundo de repente se pone de lado.

Al principio, no podía decir lo que acababa de pasar.

O tal vez simplemente no quería.

Lo siguiente que sé es que una gran parte del Fuerte Kusorion simplemente… desapareció.

“Q…qué…”

Un murmullo de incredulidad se escapa de mis labios.

Estoy demasiado confundido como para pensar con claridad.

Pero las cosas no hacen más que acelerarse.

La reina teratect comienza a avanzar.

Se dirige directamente hacia Fuerte Kusorion—o más bien, a lo que queda de él.

Pero todavía quedan muchos humanos allí.

La mayoría de ellos están de pie sobre el fuerte en ruinas, mirando a la reina teratect en estado de shock como yo.

“¡Corred!”

De repente, una voz grita cerca, haciendo eco en el silencioso campo de batalla.

“¡Ganaré algo de tiempo! ¡Huid!”

Con eso, el héroe comienza a correr hacia la reina teratect.

¿Es estúpido o algo…?

¡Debería se obvio de un simple vistazo que nadie podría vencer a esa cosa!

Pero sigue cargando sin miedo hacia el monstruo gigante, mientras que yo lo único que puedo hacer es mirar.

Estoy tan atónito que ni siquiera he logrado levantarme.

Aunque alguien está de pie a mi lado.

Primero noto los pies, luego miro arriba para ver a Blanca, la Comandante del Décimo Ejército.

Apenas sé nada sobre ella, su fuerza, o sus habilidades—aparte del hecho de que está profundamente conectada con el Señor Demonio, por supuesto.

Pero sí sé una cosa sobre ella: puede usar Magia Espacial.

La aparición repentina de la reina teratect… la Magia Espacial de Blanca.

Las dos hacen clic juntas en mi mente.

“¿No me digas que tú invocaste a esa cosa?”

Gritando a mi pesar, me pongo de pie de un salto y me acerco a ella.

Viéndose sorprendida por mi actitud, se inclina hacia el otro lado.

La Magia Espacial requiere una enorme cantidad de puntos de habilidad para adquirirla—la suficiente como para tener que renunciar en aprender cualquier otra cosa.

La mayoría de los usuarios de Magia Espacial no tienen otras habilidades de alto nivel; pocas veces tienen cualquier otra habilidad, en realidad.

En otras palabras, Magia Espacial es probablemente la única especialidad de Blanca.

No es que no conozca sus otras habilidades; simplemente no tiene ninguna.

Probablemente no sea más fuerte en batalla que una persona normal.

Supongo que la hicieron comandante porque la Magia Espacial es muy útil y valiosa, pero no debería estar en un campo de batalla tan peligroso.

Además, el Décimo Ejército de Blanca juega más un papel de apoyo.

No sé que hacen ni cómo lo hacen, pero probablemente sean el operativo de recopilación de información.

Blanca debe usar su Magia Espacial para enviarles a otras zonas a conseguir información.

Las asignaciones del Décimo Ejército y dónde han sido desplegados para esta parte de la guerra no han sido compartidas, lo cual solo prueba aún más mi teoría: solo trabajan entre bastidores.

Entonces ¡¿qué hace la comandante de una unidad que no es de combate aquí sola?!

¡Oh, te diré por qué!

¡Porque se vio obligada a teletransportar a esa reina teratect aquí!

¡Bajo las Órdenes del Señor Demonio!

¡Tiene que estar loca para enviar a una combatiente indefensa como Blanca para traer a esa bestia aquí!

“¡Idiota! ¡¿Qué pasa si mueres aquí, eh?!”

Blanca inclina su cabeza hacia mí, como si no tuviera ni idea de lo que estoy hablando.

Su actitud despreocupada solo hace que me enfade más.

Para teletransportar algo, el invocador debe tener una mano sobre él.

En otras palabras, Blanca debe haber tocado a la reina teratect.

¡¿Me estás diciendo que estuvo tan cerca de esa cosa?!

Un paso en falso y seguro que se habría convertido en su merienda.

¡Una delicada damisela seguramente saldría despedida durante una semana solo con que esa cosa moviera un músculo!

“¡¿Por qué demonios no te negaste a una misión tan peligrosa?!”

Con un aspecto todavía más confuso, Blanca pone su mano sobre su frente en pose de pensar.

¡No hay nada que pensar aquí!

¡¿Realmente vas a arriesgar tu vida con tanta facilidad solo por el Señor Demonio?!

Siempre es así, maldita sea.

No tengo ni idea de qué tipo de relación hay entre ellas dos, pero todo lo que esta chica hace es por el bien del Señor Demonio.

¡Ese malnacido Señor Demonio…!

¡¿Cómo narices terminó Blanca trabajando para alguien como ella?!

¡Y por voluntad propia!

No lo pillo, pero estoy seguro de que no dirá ni una palabra aunque me queje de ello.

“¡Maldita sea!”

Maldigo para desahogar mi frustración antes de girar sobre mis talones.

“¡Vete de aquí ahora mismo!”

Ni siquiera ese maldito Señor Demonio puede controlar a una pesadilla como la reina teratect. Es imposible.

¡Debe haber usado a Blanca para traer a una reina teratect salvaje al campo de batalla!

Lo que significa que atacará a cualquier cosa que se interponga en su camino.

Claro que destruyó gran parte del Fuerte Kusorion, pero eso también atacó a un montón de mis soldados en el proceso.

Esta cosa no puede distinguir la maldita diferencia entre un aliado y un enemigo.

Debo reunir a los a los chicos supervivientes del Séptimo Ejército y sacarlos de aquí, de inmediato.

… Si eso es posible, claro.

¿De verdad voy a poder alejarme de ese monstruo de una sola pieza?

“Bloe.”

En cuanto me dirijo a recoger a mis soldados, Blanca me llama para detenerme.

… Creo que es la primera vez que la escucho decir mi nombre.

“¿Qué pasa?”

“Retirada.”

Blanca extiende su mano hacia mí.

Venga ya… ¿Quiere que me teletransporte con ella?

“… Aprecio el gesto, pero me temo que no puedo hacer eso.”

La mujer por la que siento algo me está ofreciendo su mano.

Pero desafortunadamente, no puedo aceptarla.

“Un comandante ni puede huir antes que sus tropas, ¿no?”

Tengo la responsabilidad de liderar a mis soldados supervivientes.

“Sigue sin mí. Estaré justo por detrás de ti.”

Con eso, eché a correr sin esperar escuchar su respuesta.

No hay enemigos cerca nuestro, así que estoy seguro de que ella podrá escapar a salvo con Teletransporte.

Tengo que reunir a mis chicos y sacarlos de aquí.

… No puedo morir así, maldita sea.

Perder ante el héroe es una cosa, ¡pero no hay forma de que me permita el morir pisoteado por una maldita reina teratect!

Volveré con vida—¡lo juro!

Y luego voy a partirle la cara al Señor Demonio.

Pase lo que pase, me niego a seguir haciendo lo que ella dice.

Le enseñaré lo que es una verdadera resistencia.

¡Al igual que ese héroe que se fue disparado hacia la reina teratect, sabiendo de pleno que no podría ganar!

¡Pero lo primero es lo primero! ¡Debo sobrevivir y salir de aquí!

Asegurando mi determinación, avanzo para correr hacia las ruinas de Fuerte Kusorion.

¡BRRRRIIIIIIIIIIING!

Pero entonces un extraño sonido a mi lado me detiene en seco.

¿Qué demo…?