Isekai Ryouridou (NL)

Volumen 13

Capitulo 2: Intenciones Giratorias

Parte 3

Cuando vio la cara del niño, se formaron arrugas alrededor de la nariz de Donda Ruu. “Los cazadores no deberían llorar frente a otros a la ligera. ¿Qué edad tienes exactamente?”

“Catorce…”

“Catorce, ¿eh? En el borde del bosque, no se te reconoce como un adulto hasta que cumples quince “, declaró Donda Ruu con un resoplido cordial. “Incluso si eres un cazador, todavía eres solo un niño. Para empezar, fue un error separarse de su madre a una edad tan temprana. Y si te arrepientes de eso, asegúrate de no volver a cometer el mismo error”.

Jeeda bajó la cabeza una vez más, las lágrimas aún caían de sus ojos.

Después de mirar de esa manera con una sonrisa preocupada por un momento, Kamyua Yoshu gritó alegremente: “Ahora bien, si hemos llegado a un entendimiento, me gustaría pasar al siguiente tema”.

“Así que no tienes la intención de cerrar esa boca tuya todavía, ¿eh? Aunque me muero de hambre a estas alturas”.

“Este será el último mensaje. Con el fin de formar nuevos lazos con los principales jefes de clanes del borde del bosque, el duque Marstein Genos desea organizar una cena”.

“¿Organizar una cena…?”

Donda Ruu frunció el ceño con seriedad, mientras mis ojos se agrandaron.

Con su habitual sonrisa distante una vez más en su lugar, Kamyua Yoshu se volvió hacia mí. “Por lo tanto, aparentemente quiere que sirvas tu cocina giba, Asuta. Quiere mostrarles a todos sus honestas intenciones como señor de esta tierra reuniéndose en el mismo lugar que ustedes y comiendo la misma carne. ¿Entonces qué dices?”

“¿El señor de Genos dijo que comería carne de giba…?” El que hizo esa pregunta no había sido Donda Ruu, sino su hijo Jiza Ruu. Sus ojos ya entrecerrados se entrecerraron aún más mientras miraba a Kamyua Yoshu.

“Sí. Dijo que lo que Genos necesita ahora es ver a su señor y a la gente del borde del bosque formando abiertamente los lazos adecuados”.

“El señor de Genos, comiendo carne de giba…” repitió Jiza Ruu, su expresión no cambió en lo más mínimo. Aparentemente eso había causado una gran conmoción.

“Lo que más teme el Duque Genos es que la gente del borde del bosque abandone esta tierra. Durante veinte años le había confiado las riendas a Cyclaeus para que formara lazos contigo y se asegurara de que eso no sucediera, así que ahora se queda torpe. A pesar de su sonrisa, creo que en el interior su mente está corriendo desesperadamente para encontrar una manera de arreglar las cosas sin problemas”.

“En ese caso, ¿por qué no hizo un movimiento antes de que las cosas se pusieran tan mal? Tú y Melfried debieron haber tenido mucho que decirle sobre cómo Cyclaeus era sospechoso de delitos graves, ¿verdad?” Donda Ruu preguntó, pero Kamyua Yoshu negó con la cabeza.

“No importa cuánto sospecháramos de él, no teníamos ninguna prueba. Decidió que si tanto Cyclaeus como la gente del borde del bosque insistían en que tenían razón, esperaría hasta el último momento posible para hacer un movimiento, con la esperanza de que un lado lograría prevalecer antes de llegar a eso. Traté de decirle que simplemente dejar las cosas significaba permitir que los colmillos de las ambiciones de Cyclaeus se cerraran sobre tus gargantas, pero él solo se rio y dijo que en ese caso, tendrías que luchar con todo lo que tenías”.

“Hmph… Ciertamente suena como un gran conversador”.

“Si. Incluso yo no tengo una buena idea de cuán capaz es realmente ese hombre. Así que diría que su decisión de tomarse su tiempo juzgando eso para ustedes mismos es definitivamente la correcta, Donda Ruu”, dijo Kamyua Yoshu con una sonrisa. “Para cuando finalmente logré sacarlo, mi trabajo estaba casi terminado. Ahora todo lo que tengo que hacer es correr de esta manera para el duque Genos y Melfried, mientras vigilo cuidadosamente hacia dónde se dirigen las cosas. Realmente espero que ustedes, la gente del borde del bosque, puedan formar lazos adecuados con Genos…  De todos modos, volveré a visitarlos en  el futuro para escuchar su respuesta oficial, así que hágale saber a los otros jefes de clan principales, ¿de acuerdo?”

***

Después de eso, pasaron otros cinco días y llegamos al veinticuatro del mes blanco.

Ese día volvimos a cargar muchas comidas en nuestro  carro y nos dirigimos a la ciudad postal. Nuestro grupo estaba formado por Reina Ruu y yo, además de Ai Fa, Ludo y Shin Ruu, y otros tres cazadores como nuestros guardias.

Ya que en última instancia solo estábamos entregando las comidas y la carne fresca a las posadas y luego comprando verduras frescas, no había ninguna necesidad real de que Reina Ruu y yo viniéramos. Pero quería ver el estado de la ciudad postal con mis propios ojos, y Gazraan Rutim también recomendó que siguiéramos forjando lazos con la gente del pueblo como lo habíamos hecho.

Queríamos saber qué pensaban todos los habitantes de la ciudad postal con respecto a las órdenes de Marstein, y también decirles lo que pensaba la gente del borde del bosque. Y entonces la conclusión fue que, efectivamente, yo era el más adecuado para actuar como canal de información.

De todos modos, ese día terminamos realizando nuevamente nuestro trabajo en la ciudad postal.

Después de entregar sesenta comidas de giba salteada arrabbiata y suficiente carne fresca para otras veinte comidas en The Sledgehammer, y setenta comidas de carne y estofado de chatchi más carne para treinta en The Great Southern Tree, nos dirigimos a la tienda de Dora.

Todavía quedaba algo de tiempo hasta que el sol alcanzara su punto máximo, por lo que el puesto de Yang aún no estaba abierto. Sin embargo, el número de puestos que sirven poitan colorido parecía estar aumentando día a día. Y podía oler el dulce aroma de la grasa de la leche flotando en el aire aquí y allá mientras caminábamos también.

Seguro que parece que el plan de Kamyua y Polarth avanza sin problemas.

En este punto, Cyclaeus y Ciluel esperaban un juicio ineludible. Pero Kamyua Yoshu explicó que este complot para aumentar la demanda de poitan todavía era esencial para evitar que otros nobles interfirieran.

“En última instancia, los que gobiernan una tierra son los nobles locales. Y dado que la fortuna y la autoridad de Cyclaeus estaban aumentando hasta el punto de igualar a la del duque Genos, es importante eliminar cualquier obstáculo potencial que pudiera interponerse en nuestro camino “, dijo Kamyua Yoshu al día siguiente de la reunión. “Por ejemplo, aunque arrestamos con éxito a Cyclaeus y Ciluel, si las casas de Daleim y Saturas fueran sobornadas, es posible que no podamos esperar un juicio justo. Después de todo, los oficiales legales e interrogadores provienen todos de casas nobles. Si las cosas salieron mal, incluso podría terminar en un enfrentamiento entre la casa ducal de Genos y las casas de los tres condes”.

Pero si todo siguiera yendo según lo planeado y el poitan se convirtiera en un alimento básico en Genos, la rentabilidad del fuwano se reduciría drásticamente y la casa de Turan perdería una gran cantidad de poder en un futuro no muy lejano. Y si eso sucediera, nadie con conexiones con las casas Daleim o Saturas tendría que dudar por temor a represalias.

Entonces, Lefreya heredaría la casa a la edad de solo diez años, con las finanzas en declive y el jefe anterior habiendo sido condenado como criminal. Además de eso, sería una herencia solo de nombre, y su tutor tendría toda la autoridad real.

No pude evitar pensar en el viejo dicho de que los pecados de un padre recaerán sobre sus hijos. Tanto la casa de Turan como el clan Suun habían perdido su prosperidad debido a las acciones de los hombres que una vez los dirigieron. Ciertamente sería bueno si esa cadena de negatividad pudiera ser cortada aquí y ahora, pero todo lo que podía hacer era rezar para que las cosas fueran tan bien.

“¡Hola, Asuta! ¡Me alegro de verte bien hoy de nuevo!”

Después de que terminamos de dirigirnos a las posadas, pasamos por el puesto de verduras de Dora, donde nos saludó con una amplia sonrisa. Durante estos últimos días, se había visto verdaderamente, abrumadoramente feliz.

Cuando se lo mencioné, dijo: “Eso es cierto. Esos nobles malvados han sido arrestados, y ahora parece que la gente del borde del bosque tiene un futuro pacífico por delante, ¿verdad? ¡No puedo imaginar ninguna noticia que me haga más feliz!”

Los juicios de Cyclaeus y Ciluel ni siquiera habían comenzado todavía, y todavía no teníamos idea del paradero de los sinvergüenzas que servían a sus órdenes. Si bien por el momento todo estaba en paz, la gente del borde del bosque no podía tomarse las cosas con calma todavía.

Aun así, Dora siguió sonriendo felizmente.

“Ciertamente me gustaría poder volver a comer hamburguesas giba lo antes posible. Pero solo verlos a todos luciendo bien es suficiente para mí”, dijo con una sonrisa tímida, rascándose la cabeza a través de la tela blanca similar a un turbante envuelta alrededor de su cabeza. “Sin embargo, cuando vuelva a abrir, asegúrese de avisarme lo antes posible. Últimamente, mis poitan se compran tan pronto como están listos, por lo que es muy difícil mantener mis existencias. Sin embargo, al igual que el aviso de Lord Daleim nos dijo que hiciéramos, hemos estado aumentando constantemente la cantidad de tierra utilizada para ellos. Sin embargo, todavía pasará algún tiempo antes de que podamos cosechar los nuevos cultivos”.

“Ya veo. Eso suena como que podría hacer que ambos se sientan esperanzados y frustrados”.

De todos modos, la sonrisa de Dora ciertamente me dio fuerzas.

Pero luego me di cuenta de que su hija tenía una expresión inusualmente sombría, así que dije: “¿Eh?” con una inclinación de cabeza. “¿Qué te pasa, Tara? ¿Te duele el estómago o algo así?”

Su cabello castaño oscuro se balanceó cuando ella negó con la cabeza en respuesta. Mirando más de cerca, en realidad parecía más malhumorada que triste.

“Ah, la regañé un poco, así que está enojada conmigo. No es nada de lo que debas preocuparte, Asuta.”

“Ooh, eso es inusual. ¿Qué diablos pasó?”

“Bueno, ya ves… Aparentemente ayer se topó con ese chico Leito al borde de la carretera. Y luego, bueno…”

No tenía idea de a qué se refería.

Pero entonces, Tara me miró con sus grandes ojos del mismo tono que su cabello.

“Leito y el señor Kamyua siempre están haciendo viajes al asentamiento en el borde del bosque, ¿verdad? Y dijo que también les dejas comer tu comida”.

“Ah, cierto, les pedí que hicieran algunas pruebas de sabor antes, cuando estaba haciendo algunos experimentos de cocina. ¿Y…?”

“Yo también quería comerme tu comida, y quería venir a jugar a tu casa”, respondió Tara, sus ojos comenzaron a llorar.

Me quedé desconcertado, mientras Dora suspiró y dijo: “Estás pidiendo mucho, sabes. Asuta volverá a poner en marcha sus puestos muy pronto, así que espera hasta entonces”.

“Lo tienes bien, papá… Puedes quedarte en la ciudad postal todos los días y comer la comida de Asuta”.

“Estás siendo tonto, yo—” comenzó su padre, y luego se mordió la lengua con torpeza.

A pesar de que Dora vivía en las plantaciones de Daleim, no lejos de la ciudad postal, aparentemente visitaba los comedores todas las noches en una campaña diseñada para acabar con la mala reputación que rodeaba a la gente del borde del bosque.

Con eso en mente, debe haber estado dirigiéndose a posadas que no sean The Sledgehammer y The Great Southern Tree, porque ninguno de ellos tenía muchos clientes occidentales, lo que significaba que no se habría comido mi comida. Pero no debe haberle explicado las cosas a Tara con tanto detalle.

De todos modos, sin embargo, no podía soportar la idea de que yo había sido la causa de que se formara una brecha entre esta pareja increíblemente cercana de padre e hija. Y así, devané mi cerebro para tratar de encontrar las palabras necesarias para calmar a la joven.

“Umm, Tara, ya ves… en realidad me estoy quedando en el asentamiento de Ruu en este momento, y no he estado en casa en más de diez días”.

“¿Eh? ¿En serio?”

“Si. Los malos nobles han sido arrestados, pero sus amigos todavía están ahí fuera. Incluso tenemos algunos soldados del castillo de Genos protegiendo el asentamiento de Ruu durante el día. Leito solo puede venir a visitar el borde del bosque porque Kamyua está con él”.

“Ya veo…” murmuró Tara, su expresión llena de preocupación. Y entonces, le disparé una sonrisa.

“Pero eventualmente, toda esa gente mala será atrapada. Y si la gente del borde del bosque y la gente del pueblo empiezan a llevarse bien, estoy seguro de que podrás venir a jugar al asentamiento. Entonces, ¿crees que puedes esperar hasta entonces?”

“¿Me dejarás comer tu comida también?”

“Si. Cuando llegue ese día, haré todo lo posible y te prepararé una comida realmente deliciosa”.

Eso fue finalmente suficiente para ganarse una sonrisa feliz de Tara.

“Antes de eso, sin embargo, tenemos que reabrir los puestos para los negocios. Si logro desarrollar un nuevo plato, ¿puedo contar contigo para probar el sabor?”

“¡Si!”

Tara parecía un cachorro moviendo alegremente la cola y, mientras Dora la miraba, él le dedicó una sonrisa forzada.

“Ella realmente se pone terca cuando se trata de tu cocina, Asuta… Perdón por las molestias.”

“Ah, no fue nada”.

Después de todo, ustedes dos ya han hecho mucho por mí… pensé mientras le sonreía a Dora.

En ese momento, Ai Fa instó: “El tiempo está pasando, ¿sabes?”, Así que terminé mis compras apresuradamente.

Cuando comenzamos a regresar por la carretera después, los transeúntes seguían llamándonos aquí y allá. La mayoría de ellos eran definitivamente sureños, pero alrededor del veinte por ciento más o menos eran occidentales. En cuanto a lo que decían, era una mezcla de saludos sencillos y preguntas como: “¿Cuándo vas a reabrir los puestos?” Como los orientales no hablaban mucho, simplemente nos saludaban en silencio o nos lanzaban miradas urgentes.

Con respecto al incidente que involucró a Cyclaeus, la mayoría de los detalles ya se habían entregado en toda la ciudad postal por orden del duque Marstein Genos.

Ahora estaba claro que el Conde Turan había sido el que protegía a cualquier pueblo del borde del bosque, o más bien a cualquier miembro del clan Suun, que hubiera cometido delitos en la ciudad.

Pero en el futuro, si una persona del borde del bosque cometiera un crimen, ese hecho no se escondería injustamente bajo la alfombra. El último de los criminales, Zuuro Suun, también sería pronto juzgado.

Y dado que esa noticia fue entregada bajo el nombre del Duque Genos, debe haber causado un gran impacto en la gente del pueblo.

Entonces, tal vez si las noticias de la cena conciliadora entre el duque Genos y los principales jefes de clan del borde del bosque también salieran, además de ser aún más impactante, podría mostrar el hecho de que ambas partes estaban tratando de dejar de lado los rencores del pasado y formar nuevos lazos entre sí.

“No puedo evitar estar más que un poco disgustado porque te arrastran de nuevo como resultado…” Ai Fa susurró en mis oídos mientras sostenía las riendas de Gilulu mientras caminábamos por la calle.

Los principales jefes de clan habían dado su aprobación a la propuesta general de Marstein para la cena y el acceso de Lefreya al rango de su padre.

Actualmente, la fecha y quiénes asistirían aún se estaban aclarando, pero ya se había decidido que se llevaría a cabo en la ciudad del castillo y que yo actuaría como chef. En un futuro cercano, la noticia de esos arreglos probablemente se difundiría por toda la tierra de Genos, junto con la decisión de que Lefreya heredaría el rango de Cyclaeus.

Entonces, con toda probabilidad, el Duque Genos probablemente también esté tratando de usar la cena para desviar la atención de la población.

La adhesión de Lefreya fue el único punto discutido que le haría ganar el antagonismo de su pueblo.

La hija de Cyclaeus había secuestrado una vez a Asuta del borde del bosque, pero ahora se perdonaban sus crímenes y se le concedía el rango de su padre. Incluso con la explicación de que se estaba haciendo para quitarle el rango de conde a Cyclaeus, quien había cometido crímenes mucho peores, todavía parecía una orden que seguramente fortalecería la animosidad hacia los nobles.

Pero la sensacional noticia de que el Duque Genos comería carne de giba podría ayudar a sofocar esa mala impresión.

No pude evitar pensar de esa manera, y Gazraan Rutim aparentemente había llegado por separado a la misma conclusión. Gracias a eso, lo planteamos a los principales jefes de clan y decidieron aceptar la propuesta de Marstein.

Los tres jefes de clan principales parecían estar pensando: “Veamos qué tienes”. ¿Cómo controlaría la situación el señor de su tierra, el duque Marstein Genos? Quizás estaban usando esto como una prueba, vigilando en silencio para ver si la gente del borde del bosque debería continuar ofreciendo sus espadas al servicio de ese noble elegante pero jovial.”

“Bueno, no es como si el Duque Genos fuera a apuñalarnos por la espalda en este momento. Si lo hiciera, estaría declarando a todos los Genos que es incluso peor que Cyclaeus”, respondí, pero la expresión de disgusto no desapareció del rostro de Ai Fa.

“Hmm… Pero no me gusta cómo se lleva a cabo la cena en la ciudad del castillo. Si sinceramente desea comer carne de giba, ¿no debería venir aquí al asentamiento en el borde del bosque?”

“Sí, pero, bueno, estamos hablando de un noble aquí, así que no hay forma de evitar eso”.

Parecía absolutamente imposible imaginar al señor de una ciudad tan grande aventurándose a un lugar peligroso como el asentamiento en el borde del bosque, donde giba merodeaba. Además, también había escuchado que el lado de Genos también estaría preparando un chef para la cena.

Fue una oportunidad para que los nobles de Genos y la gente del borde del bosque compartieran su cocina y se abrieran unos a otros, profundizando sus amistades.

Ese era el quid de la propuesta de Marstein. Y no podríamos ir a llamar a un chef de la ciudad del castillo aquí y hacer que cocine en nada más que una estufa de piedra. No había forma de que pudieran mostrar toda su habilidad de esa manera.

“En cualquier caso, es un motivo de orgullo ser invitado a encargarse de los fogones para una cena tan importante, ¿verdad?” Lancé allí, solo para que Ai Fa se acercara con una cara aterradora.

“Lo es, pero todavía no me gusta”. Honestamente, me sentía igual.

Sin embargo, este fue un punto de inflexión crítico para forjar un vínculo entre Genos y la gente del borde del bosque. Y realmente me sentí descaradamente orgulloso de haber sido elegido para cocinar para el evento. Gracias a eso, tenía la intención de dar a la tarea mi todo absoluto.

“Ahora bien, ¿con qué deberíamos ir?”

A primera hora de la tarde del mismo día, los cazadores se habían ido al bosque mientras yo estaba en mi práctica de cocina.

Actualmente Reina, Sheera y Rimee Ruu estaban todas reunidas en la cocina.

En el asentamiento de Ruu, se asignó a tres mujeres a trabajar en la ciudad postal, mientras que las otras se quedaron para ocuparse de sus quehaceres diarios. Pero con nosotros tomando un descanso del trabajo en los puestos, se decidió que los tres podrían usar el tiempo libre que ahora tenían por la tarde para practicar cocina.

Como continuarían trabajando en la ciudad postal de aquí en adelante, Reina y Sheera Ruu eran los miembros fijos de este grupo, mientras que las otras hermanas de la casa principal se turnaban en el lugar restante según el día.

Y a partir de hoy, íbamos a comenzar a prepararnos específicamente para la cena.