Watashi, Nouryoku Wa Heikinchi De Tte Itta Yo Ne! (NL)

Volumen 6

Capitulo 56: ¡La Chica Enmascarada Vuelve A Las Andadas!

Parte 2

“U-um…”

Tímidamente, Mile se dirigió al granjero.

“Si permitieran tal cosa, entonces los rumores de esto se extenderían, y todas las aldeas comenzarían a hacer estas demandas, ¿no?”

“Si. Quiero decir, ya escuchamos sobre eso. Por eso también lo exigimos.”

“………”

Los soldados guardaron silencio. Mile continuó.

“Um, de continuar así, entonces, ¿no disminuiría el ingreso fiscal de cada pueblo? Si pareciera que eso fuera a suceder, entonces la gente del primer pueblo que exigiera, se vendería a las minas para dar un ejemplo, y ningún otro aldeano querría seguirlos después de eso, en ese momento todo el asunto terminaría sin que bajen los impuestos de nadie. Vender esclavos criminales es increíblemente rentable.”

“¿Qu…?”

Esta vez fue el granjero, el hijo del anciano del pueblo, quién se quedó sin palabras.

“N-no, sé lo que escuché. ¡No puedes engañarme! Hace mucho tiempo, en la aldea Lobeton, hicieron sus demandas, ¡y en el primer año no pagaron nada! Y luego pagaron solo el treinta por ciento de lo que habían pagado antes después de eso…

“¿La aldea Lobeton?”

El comandante parecía no tener idea de lo que estaba hablando, pero el nombre le resultaba familiar a Mile.

“La aldea Lobeton… una vez leí sobre ellos en un libro.”

“¡Claro, ya ves!”

El granjero parecía que acababa de atrapar a un ogro por el cuello. Sin embargo, la historia de Mile aún no terminaba.

“En otro reino, hay un pueblo con ese nombre. Aparentemente, como resultado de su exigencia  de  que  se  redujeran  sus  impuestos,  todos  los  hombres  de  la  aldea  fueron asesinados, desde bebés hasta ancianos. La aldea solo sobrevivió porque los hijos menores de las familias de las aldeas vecinas, que no heredaron ninguna tierra propia, se mudaron con sus esposas e hijos a cuestas, y otros hombres solteros emigraron para hacer esposas de las viudas y las mujeres que aún eran demasiado jóvenes para casarse antes de la masacre…”

“Debido a todo esto, estuvieron exentos de impuestos durante el año que siguió inmediatamente, y en los tres años posteriores, pagaron tasas más bajas. Comenzando con el cuarto año después, volvió a la normalidad. En otras palabras, la historia de la aldea Lobeton no es una de personas a las que se les rebajaron los impuestos, sino una historia de advertencia de un grupo de agricultores y su locura, y lo que pasó con sus últimos días…”

“¿Qu…?”

El hijo del anciano de la aldea, y todos los demás granjeros, de repente parecían muy incómodos.

“Supongo que en ese caso seríamos la fuerza convocada aquí para matar a todos los hombres…”

“¡¿Qué?!”

“¡¡¡¡¡¡¡H-hoifithoifithoifithoifitt!!!!!!!”

Ante esto, todos los granjeros gritaron aterrorizados.

A decir verdad, tal demostración de fuerza se había ordenado solo si la negociación resultaba infructuosa, y en este caso particular, no era una masacre lo que buscaban; los soldados solo habían planeado capturar a los granjeros para ser vendidos como mano de obra. Matarlos no le daría al feudo un solo cobre, mientras que venderlos convertiría la paja en oro.

El señor feudal puede ser amable, pero también tenía una mentalidad empresarial… “Muy bien, ¿quién fue el que te contó una historia tan extraña?” preguntó el comandante

al todavía agitado granjero; sin embargo, el hombre ya no pudo reunir la voluntad de hablar. Pensando que las cosas iban a salir muy mal, muy rápido, finalmente abrió la boca.

“F-Fue hace seis días…”

Según la historia del granjero, hace seis días, un hombre había llegado a la aldea al borde de la muerte. Los aldeanos compartieron su comida y agua con él, y como muestra de agradecimiento, les contó sobre los planes de su propia aldea para reducir sus impuestos.

Dado que dicho plan no tenía ninguna posibilidad de funcionar, esto era claramente sospechoso. Dado que el hombre se había quedado en la aldea solo una noche, y se fue a la mañana siguiente…

“Para un estafador, no hay ganancias en ese plan, lo que significa que su verdadero objetivo era acabar con la aldea o causar una división entre la aldea y tu señor feudal debido a algún tipo de enemistad, ¿no te parece? ¿Es este el trabajo de un enemigo? ¿Alguna vez la aldea ha peleado con alguien? ¿Alguna vez han atormentado a una familia y los han expulsado de la aldea, o algún aldeano alguna vez asesinó a un mercante ambulante y le robó su dinero? O…”

“¡Absolutamente no! ¡Nadie aquí haría algo tan inhumano!” protestó el líder del pueblo desesperadamente, con la cara pálida.

“Bueno, entonces, vamos a ampliar esto un poco… ¿Cuál es el estado de las otras aldeas?” preguntó Mile al comandante.

“Bueno,” respondió, “acabamos de recibir la misiva de esta aldea, exigiendo una reducción en sus impuestos y amenazando con una negativa a pagar si no cumplimos. Hasta ahora no ha habido nada de los otros pueblos.”

Por supuesto, esto había ocurrido solo hace unos días. Era posible que los procedimientos en otras aldeas simplemente no hubieran progresado hasta ahora.

“Ese hombre, o algunos de sus asociados, también podrían estar viajando a los otros pueblos. Si no actúas rápido, entonces este tipo de cosas podrían…”

Ahora, la cara del comandante se puso pálida.

Es comprensible que lo estuviera. Si múltiples aldeas fueran a montar una oposición a la vez, esta fuerza modesta sería fácilmente abrumadora. La Corona comenzaría a dudar de las capacidades de gobierno del señor feudal, o pensaría que estaba manejando el territorio a través de algunos medios tiránicos, y podría intervenir en los territorios del señor feudal.

En el peor de los casos sería que la casa del señor feudal pudiera ser abolida. “¿Q-qué hacemos?”

Aunque era un oficial, el comandante tenía un rango bastante bajo. El más bajo, de hecho, hasta donde llegaba su clase. Como nada más que un miembro de las fuerzas de un noble de bajo rango, no había tenido exactamente un entrenamiento extenso. Por lo tanto, aunque reconoció que estaban al borde de una crisis, no estaba en posición de tomar decisiones rápidas o tomar medidas inmediatas. En cambio, estaba nervioso.

Al ver esto, Mile decidió tomar la iniciativa. Finalmente, había llegado el momento de aprovechar toda la sabiduría que había cultivado de toda una vida llena de animé, manga y literatura.

“Primero, debes enviar a uno de tus hombres a esta aldea. Diles que no tienen que preocuparse, que han escuchado las exigencias de estos hombres y que todos se dirigen juntos para hacer una petición a su señor feudal. Luego, date prisa de regreso a la capital. Lleva a estos hombres contigo para evitar que se propaguen los rumores. Informa a tu señor feudal sobre la situación actual y haz que envíe espías a todas las aldeas del territorio a la vez. En ese punto, podrás medir el clima actual y localizar el escondite de tu enemigo. Bueno, por supuesto, quiero decir, todo eso depende del juicio de tu señor feudal. Lo que todos deben priorizar en este momento es ocultar el hecho de que saben lo que realmente está sucediendo y luego informarlo a los superiores lo más rápido posible. ¿Crees que puedes arreglártelas?”

“S-sí. Trimce, ¿entendiste todo? ¡A la aldea de una vez! ¡El resto de ustedes, directamente a la capital!”

El comandante, que parecía haber subido de rango, no era tan hábil cuando se trataba de tomar decisiones inesperadas y cruciales, pero si su brújula apuntaba en la dirección correcta, entonces al menos podría seguir su ejemplo.

***

“Santo cielo, ¿se encuentra bien?”

A lo largo de la calle cerca de un pueblo, una joven se encontró con un hombre sentado en el suelo y lo llamó.

“Oh, bueno, me resbalé por una pendiente en las montañas y perdí todo—mis bolsas, mi comida y mi agua. No he comido ni bebido nada en dos días…”

“¡¿Qué?! Eso es espantoso. Por favor, vuelva conmigo a mi pueblo. Está justo por allí.

Podemos darle comida, agua y refugio para pasar la noche.”

Con su invitación extendida, la niña llevó al hombre de regreso a su casa, sin ver la sonrisa malvada en la cara del hombre detrás de ella.

“¡Muchas gracias! ¡Realmente me has salvado!”

Después de beber un poco de agua y comer una comida caliente, el hombre agradeció alegremente a la chica, a su padre y a sus hermanos.

“Por favor, debo darte una recompensa por esto… Desafortunadamente, he perdido todas mis pertenencias.”

“Está bien, no necesitamos recompensa. En tiempos de crisis, nos cuidamos unos a otros. Si puedes pagar el favor y ayudar a alguien más en problemas algún día, entonces eso será suficiente para nosotros,” dijo el padre.

El hombre mostró una sorpresa exagerada.

“¡Vaya vaya! Qué persona tan extraordinaria eres. ¡Ya sé! A cambio, ¿por qué no te enseño cómo la gente de mi pueblo persuadió a nuestro señor feudal para que bajara los impuestos que le debíamos? Para decirte honestamente, solíamos tener que pagar hasta la mitad de nuestras ganancias, pero exigimos que la tasa se redujera al treinta por ciento, ¡y se hizo! ¡Al principio intentaron amenazarnos, pero les señalamos la estupidez que harían—si aplastaban a nuestra aldea, no nos sacaría ni un solo cobre, después de todo! Mantuvimos la presión, nunca cedimos, y finalmente nuestro señor feudal no tuvo más remedio que ceder a nuestras demandas. La mejor manera de hacerlo es…”

El hombre parloteaba una y otra vez, pero la chica, su padre y sus hermanos solo lo miraban, inexpresivos.

“¿Hm?”

El hombre detuvo abruptamente su historia, sintiendo que la atmósfera se tensaba.

“¡Eres túuuuuuuuu!” toda la familia gritó de repente. “¡Eeek!” exclamó el hombre, encogiéndose de terror.

“¡Hemos escuchado sobre ti! ¡Eres el malhechor que intenta incitar una rebelión entre los aldeanos! ¡Te colgaré por esto!”

“¡No, por favor, padre, espera! ¡No debes hacerlo!”

El hombre miró a la chica expectante mientras intentaba desesperadamente detener a su padre.

“¡No debes colgarlo hasta que lo hayamos torturado y conseguido que escupa todo! Bueno, quiero decir, supongo que nunca sabremos si nos ha contado todo, pero, como mínimo, podemos seguir torturándolo hasta que esté muerto…”

“¡¡¡Gaaaaaaaaaah!!!”

***

“Entonces, ¿cantó?”

“Si. No es un verdadero soldado ni nada, solo un matón a sueldo. No importaba lo que intentáramos sacar de él, todo lo que decía era, ‘¡No conozco a nadie así! ¿Estás planeando acusarme de algunos cargos falsos?’ Y eso fue todo.”

“Era de esperar…”

Después de que todo terminó, la chica y el hombre conversaban—no la niña y su padre, sino Mile y el comandante del escuadrón. De repente, un recuerdo de los soldados imperiales que intentaban interrumpir las rutas comerciales flotó en el fondo de su mente.

“Por cierto,” dijo el comandante, “¿Puedo preguntarte algo?”

“Adelante. ¿Qué es?”

Un poco vacilante, preguntó: “¿De verdad… tienes que usar esa máscara?”

“¡Bueno obviamente! ¡Soy la defensora de los superiores, la súper heroína no identificada, ¡la Enmascarada Superior, después de todo!” declaró Mile, hinchando  el pecho.

“Bueno, pero quiero decir, hasta hace un momento no la tenías puesta…” Mile le lanzó una mirada fulminante al comandante, y él rápidamente retrocedió. “Er, no importa!”

Finalmente, el hombre admitió que había sido contratado por el Imperio, pero no había forma de saber si eso era cierto o no. ¿Decía la verdad? ¿O simplemente estaba mintiendo porque su vida estaba en juego? O tal vez, ¿era eso lo que su empleador le había dicho que dijera?

A este ritmo, su información no era buena para nadie, pero al menos esta vez, habían evitado una crisis y tomado las contra medidas para evitar que se repita lo de la última vez. Probablemente se informaría al rey de este incidente de inmediato, y el propio señor feudal tendría un lugar de honor al ayudar a prevenir un desastre nacional. Por lo que, al menos, la intervención de Mile no fue en vano.

Gracias a la elocuente persuasión del comandante, Mile recibió una audiencia con el señor feudal y veinte monedas de oro como recompensa.

Si las cosas hubieran ido por el camino equivocado, el asunto podría haberse vuelto increíblemente serio, por lo que, en comparación con lo que costaría una crisis, veinte monedas de oro no eran nada.

Afortunadamente, el señor feudal no dijo ni una palabra sobre la máscara en el rostro de Mile, y le habló como si ni siquiera estuviera allí.

Realmente era una buena persona.

Y así, como beneficio adicional, Mile le proporcionó una serie de formas por las cuales podría lidiar con tales incidentes en el futuro.

“Um, estaba pensando que podría ser bueno para usted poner algunas contra medidas, para evitar que algo así vuelva a suceder en el futuro…”

Mile explicó sus planes: primero, le sugirió que realizara algunas conferencias educativas para enseñar a los aldeanos algunos conceptos básicos sobre el país y el sistema tributario, y sobre lo que sucedería si intentaran perturbar eso, utilizando la aldea extranjera en ruinas como ejemplo.

En segundo lugar, ella aconsejó que seleccionara cuidadosamente a algunos aldeanos y los contratara como recolectores de información—en otras palabras, espías. Tener tres en una aldea, y que cada uno suponga que es el único del lugar.

En tercer lugar, dijo Mile, en las aldeas donde todavía haya un poco de resistencia, el señor feudal podría enviar un agitador designado que podría dejar sin aliento a los aldeanos con un poco de ‘tensión controlada’, así como sacar a la luz a cualquier otro  grupo peligroso.

Cuarto…

Mile siguió y siguió. Inicialmente, el señor feudal había estado encantado de conocerla, ya que le habían dicho que era una ‘niña honesta con un fuerte sentido de la justicia, sabia y hábil con una espada’. Sin embargo, a medida que su conversación continuaba, la sonrisa en su rostro comenzó a temblar. Por supuesto, Mile simplemente continuó, sin darse cuenta de nada. Y entonces…

“Jovencita, ¿qué pensarías de convertirte en vasalla de mi familia?” Ya habían comenzado las invitaciones.

“¡Oh no! Realmente soy una chica normal y promedio. Tener un estatus tan alto sería…”

“Bueno, entonces, ¿qué hay de convertirse en mi hija adoptiva?”

“¡Oh no! Realmente soy una chica normal y promedio. Tener un estatus tan alto sería…” Desesperadamente, rechazó una oferta tras otra.

“¡Oh!” Finalmente, Mile se dio cuenta: este era el quinto y último día de sus vacaciones.

No le haría ningún bien regresar demasiado tarde. Por lo menos, necesitaba regresar antes de la cena, y el sol ya empezaba a ponerse.

“¡Mierda! Si corro normalmente, ¡nunca llegaré a tiempo!”

Y así, Mile tomó la decisión de usar la ‘medida de emergencia’ especial que había pensado en la posibilidad de una situación así.

“¡Nanos, si gustan!”

¡INMEDIATAMENTE!

¡Cancelar la gravedad! Sí, al igual que el material cavorite que neutraliza la gravedad…

Cuando Mile imaginó el efecto de la magia que quería en su cabeza, también emitió una orden verbal a las nanomáquinas.

“¡Niega la gravedad en el perímetro!”

En el momento en que ya no podía sentir el peso de su propio cuerpo, Mile se levantó del suelo. Ella se disparó abruptamente hacia arriba hasta que estuvo más alto que las montañas más altas de la región.

“Distorsiona la gravedad más baja, cambia el movimiento horizontal a la dirección de la capital y luego libera la cancelación gravitacional selectiva. Ahora comienza la cuenta regresiva: 5, 4, 3, 2, 1, ¡ya!”

Ella comenzó a caer en la dirección opuesta a la que había ascendido. Directamente hacia el suelo.

“¡¡¡Gaaaaaaaaaaaaaaaaaaah!!! ¡La presión del viento! ¡Mi ropa! ¡Mi ropa volará enseguida! ¡B-barrera! ¡¡¡Barreeeeeeeeeeeerrraaaa!!!”

“No sé en lo que estaba pensando…”

Fue así que Mile regresó a la posada donde sus compañeras esperaban, con solo una historia como recuerdo, sin saber que iba a ser reprendida duramente por todo lo que había hecho sin el resto del grupo.