Tokyo Ravens (NL)

Volumen 6

Capitulo 2: Carta De Desafío

Parte 7

Después de escuchar el contenido del mensaje, Kyouko se olvidó por completo de la conversación seria que acababa de empezar, sonriendo.

“Parece que Suzuka-chan tiene hambre. Apurémonos y vayamos a comer”. 

El tono alegre de Kyouko hizo que Harutora y los demás sin darse cuenta perdieran fuerza.

Llevando el shakujou por ahora, salieron juntos del aula y caminaron hacia la cafetería.

La cafetería estaba en la parte superior del edificio de la academia, por lo que el amplio horizonte se veía fuera de la ventana, pero el día todavía no se había aclarado.

Probablemente llegaron un poco tarde. La cafetería ya estaba llena de gente. Pero, al instante entraron Harutora y los demás:

“¡Ah, Darling! Honestamente, llegas tan tarde.”

 Suzuka intencionadamente se puso una actitud íntima, precipitándose inmediatamente.

“¡Eres tan molesto! ¿Qué estabas haciendo, eres demasiado lento!”

 Entonces, de repente, ella cambió su tono, regañándolo sin piedad en un tono que nadie podía oír.

Pero, él estaba completamente acostumbrado a que ella cambiara repentinamente así.

“…… Oye, ¿exactamente por cuánto tiempo vas a hacer esto?” 

“¿Hah? ¡Cuántas veces tengo que decir para que lo entiendas! Tú y yo somos diferentes, tengo la posición del “Niño Prodigio”. “¿Puedes por favor no hablarme con ese tono de sabelotodo?” 

“Sí, Harutora. Y lo más importante, también es muy guapa de esa manera. ¿Verdad?” 

“¡Cállate! ¡Cállate tú!”

Las burlas de Kyouko hicieron que la mirada de Suzuka se agudizara repentinamente. Una pelea como siempre. Harutora y los demás eligieron sus almuerzos por ahora, tomando sus bandejas y buscando asientos.

Afortunadamente, desde que llegaron tarde, su sincronización no había sido mala. Había algunos asientos desocupados en la ventana.

Harutora y las otras cinco personas se sentaron en el mismo grupo de asientos.

“¿Cómo están los primeros años?” 

Touji inmediatamente interrogó a Suzuka.

“No mucho. Probablemente lo mismo que en los segundos años”.

 “En otras palabras, no tienes clases prácticas, y son todas las conferencias. … Los primeros años no tienen muchas clases prácticas en primer lugar.” 

“Un día tras otro aburrido. Es como el infierno.” 

“No puedes evitarlo, Suzuka-chan. Es el castigo de Suzuka-chan”.

“Sí, Suzuka, tienes que soportarlo”.

“¡Cállate! ¡No quiero que me digan eso ustedes! ¡Sobre todo, Darling! Al final, ¡fue todo culpa tuya!”

 “¿Aún quieres mencionar ese incidente? Dame un respiro”. 

En algún momento, la maldición de este nivel ya no había podido afectar a Harutora. Su mesa de seis comenzó su ruidosa hora de almuerzo con Harutora, Suzuka y Kyouko en el centro.

Pero, mientras comían, Touji escuchaba casualmente las conversaciones de los estudiantes que les rodeaban. El ruido de la mesa de Harutora ya era una costumbre, pero las mesas que les rodeaban eran igual de malas hoy. No hace falta decir que el tema era naturalmente las acciones sospechosas de los profesores.

El ambiente durante la clase había sido tenso, por lo que la gente no se atrevía a susurrar de manera flagrante. La hora del almuerzo fue como si hubieran obtenido su libertad, y la mayoría de los estudiantes liberaron sus habilidades deductivas y sus poderes de imaginación tanto como les fue posible.

Pero ninguno de los estudiantes llegó a una conclusión. Como los maestros habían mantenido a mamá, había poca información.

Entre ellos, había estudiantes que miraban en secreto hacia Harutora  y los demás, especialmente Natsume. Dejando de lado los primeros años recién ingresados por ahora, el “rumor” de Natsume estaba ahora muy extendido en la academia. Todo el mundo pensaba lo mismo.

La persona en cuestión, Natsume, pareció notar las miradas que le habían disparado a su alrededor. Ella sola no se unió a la conversación en la mesa, comiendo silenciosamente su almuerzo.

Dijo Harutora, que se sentó junto a ella:

“No te preocupes.” 

Al mismo tiempo que hablaba en voz baja, dejó de mover los palillos. Ninguno de ellos miró al otro, pero no mucho después,

“…….. Sí.” 

Contestó levemente.

Era una voz franca que no sonaba artificial. Harutora no lo había oído por un tiempo.

Extrañamente, el calor fluía en su pecho al oír esa voz.

Al mismo tiempo, estaba desconcertado. Su voz era completamente diferente, pero se sentía extremadamente familiar.

A la voz de Hokuto.

“……”

Harutora aceleró su velocidad para comer. Después de que Suzuka se dio cuenta, se arrugó las cejas inquietas.

En ese momento, un estudiante varón de repente pateó una silla y se levantó de una mesa en el centro de la cafetería.

Con una cara excitada:

“¡Oye! ¡Grandes noticias! No hace mucho tiempo, ¡la Agencia Onmyouji fue atacada por un misterioso Onmyouji!”

 Todas las miradas en la cafetería se juntaron en ese estudiante masculino. Por supuesto, Harutora y los demás eran lo mismo. Vigilaban al niño gritón.

“¡Oye! ¿Qué está sucediendo? ¡No seas ridículo!” 

“¡Es verdad! ¡Mi hermano trabaja en las oficinas de la Agencia Onmyouji! Me lo acaba de decir en un mensaje. ¡Las fuerzas del FBI Exorcista ya han empezado a luchar!”

 El chico volvió un poco enfadado. Entonces,

“¡Espera! ¡No es mentira! Yo también recibí un mensaje. Una gran batalla está ocurriendo en el edificio de la Agencia Onmyouji ahora mismo. Varios de los Doce Divinos Generales están allí, y están rápidamente contraatacando ahora mismo”.

 Una chica en otra mesa miró fijamente a la pantalla de su teléfono y gritó. La cafetería de repente provocó un alboroto.

Harutora y los otros cinco se miraban fijamente.

“¿Podría ser…?”

“Eso fue todo”.

Algo  como  atacar  a  la  Agencia  Onmyouji  a  plena  luz  del  día  era  inaudito.  Ese  fue probablemente el asunto que la Academia Onmyouji había estado en guardia por hoy.

“Yo, ya veo… Eso es bueno.”

Tenma inadvertidamente expresó sus sentimientos interiores, pero inmediatamente se dio cuenta de que se había agarrado, disculpándose apresuradamente. Pero para ser honesto, Harutora y los demás sentían lo mismo. Natsume seguía aturdido, pero Touji parecía un poco decepcionado.

“Bueno…. Es difícil imaginar este tipo de circunstancias. Realmente era un taladro de avance normal”.

 “Hey, Touji. No estés tan relajado en este momento. ¿No será muy grave?” 

“Es posible, el edificio de la Agencia Onmyouji está cerca de Akihabara. Podría haber algún daño colateral real”.

 Touji giró sus palillos. Junto a él,

“…….. ¿Por qué importa? Aunque no sabemos qué idiota lo hizo. Hay varios Divinos Generales allí, así que parece que la Agencia Onmyouji hizo suficiente trabajo de antemano. Es muy posible que no haya daños”.

 Suzuka dijo esto. Acababa de ser sorprendida, pero a diferencia de Harutora y los demás, ella conocía el poder de la Agencia Onmyouji, así que no parecía asustada.

Honestamente, el edificio de la Agencia Onmyouji tenía una de las defensas mágicas más fuertes entre las instalaciones relacionadas con la magia.

Y lo que es más importante, había varios Onmyouji de Primera Clase Nacional que habían hecho preparativos de batalla de antemano, así que no debería haber ningún practicante u organización mágica capaz de destruir eso. Probablemente era imposible evitar todas las lesiones, pero indudablemente podían mantenerlas al mínimo.

Después de escuchar el calmado comentario de Suzuka, la tensión de Harutora y los demás se alivió rápidamente.

“…….. ya veo.” 

Harutora dijo esto, de repente recostándose en su silla.

“……. Haha. Bueno, como dijo Touji, no es un mal simulacro.” 

La cafetería era generalmente ruidosa con los estudiantes. Solo ese espectáculo podía demostrar lo grave que era el incidente, como Kyouko había dicho. Pero, por lo menos la posibilidad de que Harutora y los demás fueran arrastrados a las cosas era extremadamente pequeña. Las seis personas aquí se sentían a salvo de la preocupación por el incidente.

Harutora relajó su cara, mirando por la ventana.

No había ido a las oficinas de la Agencia Onmyouji antes, y por supuesto, no podía verlos

desde aquí, ni siquiera sabía en qué dirección estaban. En la actualidad había una batalla mágica a gran escala sucediendo allí, que era realmente difícil de creer.

El Shibuya que vio fuera de la ventana estaba cubierto por nubes grises de baja altitud. El clima tenebroso era exactamente el mismo que cuando había salido del dormitorio.

De repente,

La mirada de Harutora cayó del cielo al suelo.

Harutora miró al frente del edificio de la academia, frente a la ventana. La entrada que Alfa y Omega vigilaron estaba allí.

Abajo,

Un auto negro de clase alta que reconoció fue detenido frente al edificio de la academia. El pensamiento de Harutora se detuvo ahí.

Entonces, su pelo se puso de punta.