Tantei wa mou, Shindeiru (NL)

Volumen 3

Capitulo 1: Te Veré Una Vez Más

Parte 6

Lo Juro Por Dios, No Hicimos 〇

Después de eso, regresamos a la escuela y caminamos por el campus usando la iluminación del teléfono.

Estaba oscuro. Dado que era esta vez, se sintió como una prueba de coraje.

“Muy bien, ahora que has llorado lo suficiente, Kimizuka, es hora de pensar en lo que haremos a continuación”.

Natsunagi, caminando a mi lado, me dio una bofetada.

“Eso fue una maldita mentira. Mi camisa está llena de tus lágrimas y mocos”.

De vuelta en la azotea, Natsunagi lloró en mi pecho durante al menos diez minutos. El precio de calmarla fue el gran martirio de mi uniforme.

“Uu… ¡dijiste que asumirías la mitad de la responsabilidad!”

“Me resulta demasiado vergonzoso después de que me calme, así que por favor déjame negarme”.

“¿Me confiarás la mitad de tu vida?”

“¡Juro por los cielos y la tierra que no dije eso!”

Y no se parecía en nada a mí. En serio, está actuando así en el momento en que su estado de ánimo se recuperó.

“… Pero me llevé el anillo.”

“… Lo que sea que pasó hace un año no cuenta”.

Hablando de eso, cuando era Alicia, Natsunagi tomó mi mano así.

“… ¿Por qué nos tomamos de la mano con tanta naturalidad ahora?”

Todo el revés de las fortunas. Natsunagi preguntó algo frenéticamente. Por lo general, es bastante sádica conmigo, pero sus defensas eran tan frágiles frente a ataques tan inesperados.

“Déjame decirte esto primero, Natsunagi. Me aterrorizan los fantasmas”.

“No, incluso si lo dices con tanto orgullo.”

“Dije eso en la azotea, ¿no es así? Siempre tomaré tu mano”.

“¿Qué pasa con el terrible cierre?”

Deja vu, acabo de estar en este lugar antes… murmuró Natsunagi. Hablando de eso, creo que tuve una conversación similar en la casa encantada durante el festival cultural hace cuatro años, cuando conocí a Siesta.

“De todos modos, Kimizuka, tienes la mano sudada”.

“? Soy de los que sudan mucho a la vez cuando pienso en algo aterrador”.

“……”

“Y entonces, ¿por qué tu mano está sudada, Natsunagi?”

“… Te odio, Kimizuka.”

Una chica de preparatoria que fácilmente cavaría su propia tumba era realmente divertida y adorable.

“Pero… [Siesta-san] dijo que debemos buscar un error”.

Natsunagi pareció aclarar un poco sus sentimientos y planteó el tema que acabamos de mencionar. Si iba a heredar el título de la [famosa detective], necesitaba encontrar el error oculto en el video anterior.

“¿Tienes alguna idea, Kimizuka?”

“No, en absoluto… Pero.”

“¿Pero?”

Le mencioné a Natsunagi la única parte por la que tenía curiosidad.

“¿Hubo realmente una necesidad de que un error nos engañara cuando en realidad esperó un año para transmitirnos la verdad?”

“… ¿Entonces quieres decir que Siesta-san no pretendía engañarnos exactamente?”

Sí, eso tenía sentido. Siesta creía que esta era la verdad cuando estaba viva y decidió decirnos eso, y si había un error…

“Siesta cometió el error cuando estaba viva”.

Esa fue la única situación en la que pude pensar. Hay otro lado de ese incidente de hace un año. [Siesta] quería que lo resolviéramos. “Pero, ¿por qué Siesta-san de todas las personas cometió ese error?”  Natsunagi frunció el ceño con sorpresa.

No es de extrañar que Natsunagi fuera tan incrédula. Siempre había estado con esa detective durante los últimos tres años y nunca la vi cometer un error decisivo. Siempre que la situación, ella siempre estaba en lo correcto, deprimentemente.

¿Cómo fue posible que ella cometiera un error?

“Kimizuka, supongo que tú también tienes algunas cosas que no entiendes sobre Siesta-san.”

Natsunagi inclinó la cabeza con incredulidad.

“Pensé que también la conocerías sus tres tallas.”

“Hm, por supuesto, lo sé.”

Vivimos juntos durante tres años. Sería extraño si no lo hiciera.

“… E-Eso es imposible. Por lo general, la gente no tiene la oportunidad de saber eso”.

“¿Es así? Pero desde que lo toqué, puedo más o menos… olvidarme de eso.”

Natsunagi me quitó la mano en silencio, así que me corregí apresuradamente. Solo para agregar, lo toqué… casualmente. No se pudo entregar. Sí, no podría ganar contra esa suavidad irresistible.

Aparte de eso.

“Si hubo algún error en el recuerdo pasado, ¿no es la mejor opción preguntarle a la persona involucrada?”

Sugerí esto ya que teníamos que encontrar el error.

“Eso puede funcionar. Según [Siesta-san], deberíamos limitar eso al incidente de hace un año, ¿verdad?”

“Sí. La historia negra durante ese festival cultural no cuenta”.

O más bien, no quería recordar eso en absoluto. Investiguemos a las partes involucradas en Londres y en el escondite de [SPES].

“Entonces, primero, Kimizuka y Siesta-san son los personajes centrales… y luego yo, ¿verdad?”

“Supongo. En otras palabras, será genial si tenemos más de tres personas para preguntar…”

Una vez que pensé en esto, mi primer pensamiento fue Charl. Ella era una de las partes involucradas cuando entró al escondite de [SPES] junto con nosotros. Cuando se mencionó que teníamos que encontrar el error, ella no dijo nada especial, por lo que parecía que ella tampoco tenía idea.

“Erm, entonces, ¿el líder enemigo?”

“¿SEED? … Bueno, ese tipo de hecho parece saber todo sobre nosotros, pero en cualquier caso, no sabemos nada sobre él”.

…Pero sí. No teníamos que limitar esto a las personas cercanas a nosotros.

“Hmm, pero si estamos hablando de otros miembros…”

Sí, los dos enemigos involucrados hace un año, Cerberus y Camaleón, ya estaban muertos.

Pero todavía hay una, una persona muy importante que todavía está viva.

“Hel,”

Dije, y Natsunagi abrió mucho los ojos.

“Pero, ¿no fue Hel sellado dentro de mí por Siesta-san?”

“Sí, sellada. Eso no significa que ella se haya ido”.

“¿Quieres llamarla? Entonces el propósito de Siesta-san de sellarla era…”

“Un año.”

Le dije a Natsunagi una vez más.

“Siesta pasó un año para convencerla. Definitivamente estará bien”.

Y si esa fuera realmente la peor decisión posible, Siesta habría detenido a Natsunagi, incluso si eso significara provocar un alboroto. Si ese no es el caso, puede que no sea una mala elección. El problema era…

“¿Cómo llamamos a Hel?”

La última vez que apareció Siesta en el cuerpo de Natsunagi fue cuando estaba en un apuro.

“Tal vez deberías volver al techo y saltar. Debería poder…”

“Como si eso fuera posible. Voy a morir”.

No le dé tanta importancia a esto, si puede funcionar… mire con la punta de los dedos la barbilla. Atesora ya la vida de tu asistente.

“Hablando de eso, Hel no me salvará incluso si estoy en problemas, ¿verdad?”

En ese caso, ¿qué debemos hacer? Mientras Natsunagi y yo reflexionábamos sobre esto sin ninguna pista.

“Escuché tu conversación.”

“¡……!”

La voz de alguien se interpuso de repente.

Esa persona apareció ante nosotros, la luz de las antorchas brillando sobre su rostro mientras decía:

“Por favor, déjame la invocación de Hel a mí.”

Aparecer en la oscuridad con un rostro blanco azulado fue [Siesta]. Ella se quedó allí como un fantasma.

“Nagisa, ¿podrías echarme una mano? Parece que Kimihiko está en una emergencia.”

“Esta es la primera vez en mi vida que veo a alguien colapsar hacia atrás tan bien”.