Tokyo Ravens (NL)

Volumen 5

Capitulo 3: Seis Conferencias Populares

Parte 5

Al principio, cuando Kogure había conversado sobre este asunto, Kyouko también había planteado esta pregunta. En ese momento, Kogure respondió en un balbuceo, pero la reacción de Ohtomo fue completamente diferente.

“Sí, había otra persona extraña. Volvió al campo por su familia, no sé cómo le está yendo ahora … Jaja, qué nostálgico”.

 Ohtomo respondió casualmente sin mostrar un poco de vacilación. Si ella no hubiera visto la actitud de Kogure con sus propios ojos, Natsume probablemente habría respondido descuidadamente y habría dejado las cosas así.

“…… Yo, ya veo”. Ella era un poco sospechosa, pero no continuó con la pregunta. Ella no sabía si él había notado su cambio de corazón, pero Ohtomo no dijo nada, tomando tranquilamente su sopa.

Probó el caliente, delicioso houtou, y luego dijo: “… De acuerdo, pensé en algo mientras hablaba sobre el pasado”.

 “¿qué es?” 

“Hmm … En realidad, no es nada importante. Solo pensé que si pudiera dar algunos consejos a mi yo pasado … probablemente me aconsejaría a mí mismo: ‘No te fuerces demasiado'”. 

“Fuerza a ti mismo, ¿eh?” 

“Está bien.” Sentado en la silla, Ohtomo levantó un poco la cabeza y miró a Natsume de pie. Luego, dijo: “Cuantas más personas valoran a sus amigos, más deben abrir sus corazones. Incluso si le trae una carga a la otra parte, deberían ser honestos”. 

“…………”

“Te dije que no estuvieras ‘preocupado’ en este momento. En resumen, eso es lo que quise decir …… Pero no se limita solo a Suzuka-kun”. 

Ohtomo miró a Natsume que silenciosamente lo miró, hablando en forma indirecta y sinceramente transmitiendo la emoción en sus palabras con su tono y expresión en su lugar. Debido a que había hablado abiertamente acerca de su tiempo como estudiante antes y ahora estaba dando consejos, sonaba bastante convincente.

Natsume se sintió sorprendida y un poco sorprendida, sus ojos se abrieron un poco mientras miraba directamente a su maestra. “……Sí.” Sus ojos nunca dejaron a Ohtomo mientras humildemente asentía con la cabeza.

Una brisa soplaba desde el lago, soplando a través de la colina donde estaba el auditorio. El pelo negro de Natsume, atado por una cinta, bailaba en el viento.

Ohtomo dijo: “…… Sí”. y volvió a sentarse en la silla.

“De todos modos, no te fuerces demasiado. Debes recordar relajarte, incluso cuando estás trabajando duro. Los de tercer año también participarán en el campamento mañana, así que asegúrate de no quedarte despierto demasiado tarde. “ 

“Sí …… Ah, disculpe por molestar su comida”. 

Natsume bajó la cabeza en señal de disculpa, siempre manteniendo su actitud respetuosa. Ohtomo casualmente agitó sus palillos, comió su houtou otra vez y observó la espalda de su estudiante mientras ella regresaba al auditorio.

“…… Aunque es difícil, trabaja duro, Natsume-kun”. 

Durante un largo tiempo, los alrededores de Ohtomo solo tuvieron las ráfagas del viento nocturno y el sonido pausado de disfrutar houtou. Pero cuando terminó de comer la mitad de sus fideos, su rostro se hundió de repente y frunció el ceño.

Levantó su cuenco, mirando hacia un lado. Había un pequeño gato atravesando el patio del auditorio.

Era un pequeño gato calicó con pelaje flexible, y parecía bastante inteligente.

Ohtomo masticó sus fideos, mirando con resentimiento al gato que caminaba hacia él. Ese gato caminó directamente hacia Ohtomo, caminando delante de él y sentándose con ligeros movimientos, levantando la cabeza para mirar a Ohtomo comiendo.

Ohtomo se tragó los fideos ya masticados, molesto e impotente al hablar.

“…… Entonces realmente era la directora. Tenía un sentimiento …”

Ese gato agitó ligeramente su larga cola al oír eso.

“Solo un ‘sentimiento’ no servirá. No tiene sentido pedirte que seas maestro si no eres capaz de notar al instante un shikigami furtivo”. 

La elegante voz femenina vino del jefe de Ohtomo, la directora de la Academia Onmyouji, Kurahashi Miyo. Este gato calicó era su shikigami. Ella no le había dicho a Ohtomo antes que iría secretamente al campamento.

“Debe ser un gran problema usar un shikigami desde Tokio”. 

“Así es, una ‘anciana’ como yo sabe muy bien que su condición física es ‘nada como antes’. Pero esto no me cansará si es para mis adorables estudiantes”. 

“…… Ja, jaja …… Cuán confiable, tus oídos son bastante buenos ……” Ohtomo volvió la cabeza y sonrió secamente.

Por cierto, Ohtomo se había encontrado con Kogure hace unos días, y había usado palabras como “viejo” y “nada como antes” para describirla. Parecía que el director había escuchado claramente toda su conversación en ese momento.

“…… Realmente no puedo bajar la guardia. Parece que también escuchas furtivamente la reunión de estrategia de esos niños”.

 “No uses una palabra que suene mal como ‘escuchar a escondidas’. Yo solo los estaba protegiendo silenciosamente desde un lado. Definitivamente te diste cuenta de que yo estaba allí, ¿verdad? Después de todo, tú también estabas allí en ese momento”. 

“Tengo la responsabilidad de supervisarlos, no me agrupen junto con un espía …” 

“Oh, ya que dices eso, no te preocupes por esos niños, también tengo la responsabilidad de supervisarte”.

 Ohtomo, que sostenía un cuenco y se sentaba en una silla, charlaba bajo la luz de la luna con el gato calicó mirándolo, discutiendo sobre trivialidades aburridas. Si los “niños” a los que se había escuchado a escondidas acabaran de escuchar esta justa verbal, probablemente se habrían quedado tan atónitos que se olvidarían de estar enojados.

“Ahora que lo pienso, esos estudiantes están avanzando más allá de las expectativas en este momento. Es algo por lo que debemos estar agradecidos”.

“No se puede decir eso, los niños de esta edad son muy difíciles”. 

“Oh, ¿eres tú quien dice eso? Mi antigüedad como maestra es mucho más alta que la tuya, sabes”.

“Solo soy un pequeño peón, ¿cómo puedo compararme con usted que ha sido la directora durante muchas décadas …… Pero, es hora de que intervengamos y ayudemos activamente a esos niños, ahora que las cosas se han desarrollado hasta ahora Si creen que pueden manejarlo ellos mismos, se volverá peligroso … Además, disminuiría mucho mi carga si pudieran ‘escapar por sí mismos’ “. 

Ohtomo fingió ser humilde, sonriendo halagüeñamente. Lo más irritante fue que ese tipo de sonrisa se adaptaba muy bien a su rostro, o tal vez debería decirse que mostraba su dulzura.

El gato agitó su cola como un perro salvaje lleno de pulgas que expresara buena voluntad, mirando con los ojos entrecerrados al maestro subordinado. “……Eso tiene sentido.” Luego, ella expresó en voz baja: “Tal vez deberíamos considerar adecuadamente si es hora de …” 

A pesar de que había hecho la propuesta, la respuesta de la directora todavía hizo una expresión de sorpresa momentáneamente en la cara de Ohtomo. Originalmente había esperado que el director rechazara su propuesta al instante, creyendo que era demasiado pronto para ese asunto.

“…… ¿Quieres decir que podemos?” 

“No estoy diciendo que actúe en este momento, pero por favor ‘haga los preparativos’, Ohtomo-sensei”. Al decir esto, el gato se levantó con movimientos ágiles.

Le dio la espalda a Ohtomo, caminando hacia el auditorio sin tanto como una despedida. Ohtomo en realidad no tenía mucho que decir, por lo que silenciosamente vio al gato irse, pero

……

“…… ¿Conoces el ‘Ala de Cuervo’?” 

El gato inmediatamente dejó de moverse, se quedó en silencio por un segundo y dijo: “No”. 

Ohtomo indiferentemente continuó hablando hacia el gato cuya cabeza ni siquiera se volvió hacia atrás.

“Escuché que fue una falsificación sellada en la Agencia Onmyouji”.

“……¿Es eso así?”

“Sí, algunas personas creen que la real está en la Academia Onmyouji”.

“…… ¿De quién has oído eso?”

“Esa persona.” 

El gato se volvió para mirar a Ohtomo.

Ohtomo se sentó en la silla, todavía sosteniendo el cuenco y los palillos en sus manos y su expresión no era diferente de la habitual mientras miraba fijamente al shikigami del director.

Las miradas de los dos se encontraron.

Eran miradas sin objetivo, e inadvertidamente se quedaron en silencio, pero cualquiera que mirara al instante sabría que en este espacio aparentemente sin sentido estaba desarrollando una batalla mágica extremadamente intensa de técnicas mágicas de segunda clase de alta dificultad.

No mucho después, el gato sacudió la cabeza, moviendo la cola y pasando silenciosamente por el patio para irse.

La cara de Ohtomo permaneció invariable, gritando: “… ¿Directora?” Miau, llamó el gato.

Ohtomo sonrió con ironía, recogiendo algo que ahora estaba frío y enviándose los fideos a la boca.

***

Después del baño, los estudiantes regresaron a sus habitaciones según la edad y el género.

Se prepararon para acostarse uno por uno. Era innecesario decir que tuvieron que extender sus futones en el suelo para dormir. También querían jugar cartas o tener peleas de almohadas, pero ni una sola persona de la clase tenía la energía para jugar.

Después de que extendieron sus futones, alguien apagó las luces. Debido a que la puerta de madera junto al balcón estaba bien cerrada, el interior de la habitación se oscureció una vez que las luces se apagaron. Teniendo en cuenta que esto podría ser peligroso, pusieron una lámpara de escritorio en el pasillo como fuente de luz.

“…… Ahh … finalmente puedo dormir”. Una vez que se apagó la luz de la habitación, Harutora yacía en su futón, agotado de mente y cuerpo.

Harutora había estado bastante ocupada después de haber hablado con Kyouko, Tenma y Suzuka. Su mente había estado llena de esas cosas incluso hasta ahora.

Pero, la fatiga acumulada en su cuerpo ya se estaba acercando a sus límites. Pensó que lo mejor que podía hacer ahora era dormir adecuadamente y poner todas sus preocupaciones en el fondo de su mente por el momento.

Touji y Tenma dormían junto a él, yacían en su futón. Dormían junto a él, pero no tenían intención de conversar. Parecía que, al igual que Harutora, no estaban dispuestos a pensar más.

Había una persona más en una situación similar.

“…… ¿Estás bien, Natsume?” Harutora volvió la cabeza mientras yacía en la cama, preguntando en voz baja.

Podían identificar vagamente los contornos del uno al otro por la luz débil que pasaba a través de la puerta de papel. Natsume ya se había cambiado a ropa deportiva y estaba anidada en su cama.

Natsume había puesto su futón cerca de la esquina de la habitación, junto a la pared. Aunque la habitación era espaciosa, había mucha gente durmiendo después de todo, y el espacio asignado a cada individuo era pequeño. En realidad, solo había suficiente espacio para un libro de texto entre los futones de Harutora y Natsume.

“…… Yo, estás muy cerca”.

 “no podemos hacer nada al respecto”.

“…… Uh, si te das la vuelta ……”

“No te preocupes, no me daré la vuelta …… Ah, no, seré cuidadoso y me aseguraré de no rodar …”

 Tal vez porque no tenía confianza en sus hábitos de sueño, Harutora se volvió más ambiguo mientras hablaba. Natsume bajó la cabeza y no dijo nada. Harutora también se sintió un poco incómodo, cerrando la boca.

Natsume estaba claramente nerviosa. Esta era probablemente la primera vez que dormía en la misma habitación con tanta gente, y era especialmente difícil culparla por estar ansiosa ya que todos a su alrededor eran hombres y ella era la única niña. Aunque Harutora se sintió comprensivo, no pudo hacer nada al respecto.

“Tal vez deberías dejar tu cuerpo doble aquí y escabullirte a dormir a otro lugar. Eso podría dejarte dormir un poco mejor”.

 En silencio hizo una propuesta, pero Natsume de repente negó con la cabeza al escuchar eso.

“Está bien, especialmente porque yo … estoy muy cansada”.

Inconscientemente dejó escapar su voz original, cambiando apresuradamente su tono.

Parecía que estaba realmente cansada hasta la muerte. Natsume había sentido el mayor sentido de urgencia por la charla en ese momento, por lo que su energía se había consumido rápidamente.

Luego, se dio la vuelta para enfrentar a Harutora, y levantó las sábanas, tapándose la boca.

“Uh …… Harutora-kun”.

“¿qué es?”

“Uh … Aquí están todos los chicos, así que me siento muy incómodo … ¿Te quedarás a mi lado?” 

“Oh, si……” 

No podía ver claramente la expresión de Natsume en la oscuridad. Harutora sintió sus propias mejillas inexplicablemente enrojecidas mientras respondía.

“…… No necesitas preocuparte”. De repente, una voz sonó entre los dos. Sus corazones palpitaban y sus cuerpos se tensaban en sus sábanas.

“Esta noche, seré responsable de proteger a Natsume-dono, ‘nadie’ podrá tocarla”. 

Era la voz de Kon. Aunque su figura no se podía ver, su tono era altivo, y su tono había sido pesado cuando ella había dicho ‘nadie’. Luego, agregó: “Por supuesto, si los hábitos de sueño de Natsume-dono son pobres, lo trataré como es debido”, no se preocupe “. 

A pesar de que no se había materializado, visualizaron la imagen de Kon mirando ferozmente a Natsume. Natsume refutó con voz aguda: “M, mis hábitos de sueño no son malos”. 

Independientemente de lo que dijo Natsume, de hecho, fue reconfortante tener a Kon supervisando a un lado. “Perdón por molestarte.” Harutora le dijo a su shikigami.

“… Entonces dejémoslo así. Buenas noches, Natsume”.

“Uh, sí, buenas noches, Harutora”.

“…………”

“…………”

“…… Pero realmente está cerca ……” 

“……Sí……”

Harutora sonrió secamente y dijo algunas palabras incómodas, pensando que el mismo tipo de sonrisa podría estar en la cara de Natsume. Kon tosió levemente unas pocas veces, claramente enojada por escuchar.

“…… Tan cerca …” La actitud de Natsume se llenó de pánico, como si de repente se hubiera dado cuenta de que algo andaba mal. Le dio la espalda a Harutora, doblando su cuerpo, moviéndose como si estuviera olisqueando el cuello de su atuendo deportivo.

“…… ¿Huh? ¿Qué pasa?” 

“Uh, nada …” Natsume respondió tartamudeando, su cuerpo ya no se doblaba. “…… Es solo un día corto, entonces ¿por qué no tener a los que te rodean?” Pero Kon habló inmediatamente, pronunciando palabras duras y maliciosas.

Harutora no entendió, pero Natsume parecía lo suficientemente enojada como para rechinar los dientes.

No mucho después, el cuerpo cuya espalda era hacia Harutora se retorció incómoda otra vez…

“…… ¡Yo, voy al baño! Harutora, ¡duerme primero!” 

De repente se precipitó fuera de sus sábanas, pasando por la habitación y saliendo por el pasillo.

“¿qué pasó?” 

Harutora murmuró, despistado y estupefacto. Kon resopló con desdén junto a él.