Imouto Sae Ireba Ii (NL)

Volumen 4

Capítulo Extra: La Vida de un Escritor de Novelas Ligeras

Parte 3

Así, los cinco jugadores hicieron sus debuts en las novelas ligeras, avanzando por los caminos de sus respectivos destinos.

“’Tu anime es un éxito. Recoge dos millones de yenes’”. Chihiro informó alegremente. “Jee-jee! Mi sello ha estado muy bien últimamente”.

“ ‘Tu nueva serie es un mega hit. Recoge dos millones de yenes’ ”.

A Nayuta le iba igual de bien.

“… ‘Tu editor fue atrapado tratando de hacer stealth marketing con tus novelas en un foro, provocando un escándalo. Pierdes tres turnos’”.

Miyako inclinó su cabeza con incredulidad.

“ ‘Tu anime debutó, pero desde el primer episodio, la terrible animación y la historia excesivamente comprimida te hacen perder diez Puntos de Felicidad’. Qué forma de recordarme la vida real”. Haruto soltó un gruñido de desaliento.

Las diferencias de cada uno de los cinco jugadores en el mundo de las novelas ligeras eran cada vez más asombrosas.

“¡Dios! ¡Si vas a hacer algo de stealth marketing, al menos hazlo bien, editor! ¿Hay alguna casilla que aumente mis ventas a diez mil millones o algo así? Tengo que encontrar alguna manera de cambiar las cosas…”.

“…Estamos casi al final del juego. No puedo esperar llegar al final…”.

Miyako empezaba a aburrirse, del mismo modo que Itsuki empezaba a perder su paciencia.

“El ganador se decide por los Puntos de Felicidad, ¿verdad?”

“Correcto”, Miyako respondió a Nayuta. “¿Quién está a la cabeza?”

Todos informaron sus cifras totales. Haruto estaba en menos 16, Itsuki en menos 20, Chihiro en menos 26, Nayuta en menos 7:

“Y yo tengo menos catorce… Cielos, ¡¿todos estamos en negativo?!”

“No importa qué ruta tomes”, observó Chihiro, “hay toneladas de eventos que te cuestan Puntos de Felicidad, pero no muchos en donde puedas recuperarlos”.

“Entonces,  ¿qué  se  supone  que  debemos  hacer?”

Preguntó Miyako, confundida.

“Supongo que es la forma del juego de decirnos que la felicidad no es fácil en este negocio. Pero no tenemos otra opción que seguir adelante…”, respondió Itsuki.

“¿Qué es la felicidad de todos modos?” Chihiro reflexionó mientras lanzaba el dado. “Oh, otra rama… ‘El sello para el que has estado trabajando hasta ahora fue comprado por la mayor editorial de la industria por ocho mil millones de yenes. Pierdes cinco Puntos de Felicidad. Tienes que elegir: o te unes a tu editor descontento en una compañía recién fundada (Ruta A), o te quedas con tu antigua compañía y te conviertes en el perro faldero del gigante (Ruta B)’. ¿A cuál debería ir…? Mi sello se ha ido, chicos…”.

“Asombroso”, dijo Haruto mientras Chihiro se tambaleaba por las noticias. “Has trabajado muy duro para no perder contra los peces gordos todo este tiempo. Qué duro”.

“Si”, Itsuki añadió. “Si esto sucediera en la vida real, rompería el corazón de muchos autores y editores. Y entonces, a pesar de que la gran compañía compró a la pequeña porque a la primera le estaba yendo bastante bien, sus ganancias caerían en picada. Sería una gran tragedia sin ganadores al final. ¡Qué bueno que esto es sólo un juego!”

“Oh cielos, y que lo digas”, Nayuta dijo pesadamente. “Hmm… No lo sé. Mi editor actual me salvó de la mala suerte  que   tuve  antes, así que me gustaría seguir trabajando con él,pero cambiar de sello suena arriesgado… ¿Qué crees que debería hacer, hermano?”

“Sigue tu corazón. Lo que sea que elijas, prometo que te apoyaré”.

“Oh, Itsuki, qué varonil”, Miyako señaló sarcásticamente.

“Desearía que me dijeran eso”, una Nayuta enfadada dijo de golpe.

“Aw, gracias, Itsuki… ¡Muy bien, ya me decidí! ¡Voy a seguir a mi editor! ¡No me convertiré en un perro de Horn River!”

“¡Bien dicho! ¡Ese es mi hermano menor… um, quiero decir, la esposa que conozco!”

Nayuta mostró una sonrisa diabólica. “Jee-jee-jee… Y  mientras esa compañía de mediana categoría queda en confusión luego de su compra, ¡ha llegado el momento de que Gagarin Books y yo tomemos la iniciativa! ¡Yah!”

El dado fue lanzado; la ficha avanzó.

“¿Mmm…? ¿Qué—? ¿Me están demandando por infracción de derechos de autor? ‘El caso se prolonga tanto en el tribunal que se pierden tres millones de yenes y cinco Puntos de Felicidad. Antes de que haya un veredicto, eres doxxeado por tus haters en internet y tachado de criminal. Pierdes cinco Puntos de Felicidad y cinco turnos por el estrés mental’. ¡Arrrgh!”

“Caramba”, dijo Haruto, empezando a sudar frío. “Espera”, dijo Itsuki, “eso no le pasó a Gagarin Books, eso le pasó a— ¡oh, disculpen! Este juego es una obra de ficción   y  no   tiene  relación  con  ninguna  persona  u organización real, cierto, cierto”.

“Errrgh, ¿quién es el idiota que está tratando de convertirme en una criminal?” Se quejó Nayuta, su voz temblorosa. “¿Quién se creen que soy…? ¡Soy Wataru Watari, autor de Yahari Ore no Seishun Love Come wa Machigatteiru! ¡Vengan—y—y—! ¡Trapearé el piso con todos a la vez!”

“¡Tú no eres Wataru Watari, ¿de acuerdo?!”

“Y si Watari empezara a pelearse con gente como esa, ¡arruinaría toda la industria!” Haruto agregó rápidamente.

“¿Por qué me está pasando esto…?”

“¿Porque tu editor no obtuvo permiso del titular original de los derechos, tal vez?” Dijo Itsuki.

“Sí, pero, ¿por qué está sucediendo justo cuando estoy en la cima del juego? Me huele a conspiración… ¡Tiene que ser el trabajo del Imperio de Horn River de nuevo!”

“Sí, ciertamente no esperaría menos de esos sujetos…”

“Todo depende de ti ahora,Itsuki… Por favor, asegúrate de vengarte de Horn River por mí… ¡Arrrrgh!”

“Sí, pero ya estoy escribiendo para Lightning Books, así que…”.

“¡Oh, cierto! Tú y Myaa son los perros falderos de Horn River…”

“¡Deja de llamarnos perros! …Dame, déjame tirar”.

Esperando en la casilla a la que llegó Itsuki:

“Um… ¿Oh? ‘¡Lightning Books se desprende de su empresa matriz y se lanza como una nueva editorial! Eres libre de unirte a esta nueva editorial o de quedarte con la empresa matriz original. También puedes usar tus conexiones con la industria para unirte a cualquier ruta editorial de la que otros jugadores sean miembros’”.

“Espera, hermano, ¿esto no es…?”

“Hmm… Unirme a la compañía de otro jugador…”.

“¡Oye, Itsuki, únete a mí en Gagarin Books!” Suplicó Nayuta.

“Um”, Chihiro  se entrometió, “¿tal vez  sería mejor  trabajar para el mismo editor que yo…?”

“Nah”, Haruto intervino, “¡Ven conmigo! ¡Si mi sello se hace grande gracias a un anime, estarás en los rankings superiores! Aunque no es que yo haya logrado entrar ahí…”.

“Mmm… Sí, no estoy seguro de encajar en un lugar realmente grande. ¡Creo que me voy con el sello de Chihiro!”

“¡Oh, qué bien! Somos un equipo de herman-um, quiero decir, ¡un equipo de casados!”

“¡Sip! ¡Destruyamos a Horn River juntos!”

Así, la súper pareja de Itsuki y Chihiro se reunió bajo el mismo sello.

“Bien, es mi turno…”.

Gracias a un retraso tras otro, Itsuki finalmente había alcanzado a Miyako en el tablero. Ahora estaba parada en la misma casilla a la que Itsuki acababa de llegar.

“Ah, yo me enfrento a la misma decisión. No sé… Parece que nunca llegan a publicar mis libros. ¡Creo que también me uniré al sello de Itsuki y Chihiro!”

Haruto hizo lo mismo al llegar a la casilla que Chihiro acababa de experimentar.

“Genial, así que puedo elegir entre unirme a mi editor o convertirme en un perrito faldero, ¿eh? Bueno… ¡no soy un perro!”

Por lo tanto, un total de cuatro jugadores terminaron uniéndose al mismo sello editorial. Sólo Nayuta fue dejada atrás. “Bueno, como sea”, ella dijo. “¡Una vez que termine con mis propios problemas, voy a saltar a esa ruta con ustedes!”

“¡Genial! ¡Ahora todos escribimos bajo el mismo sello!” Itsuki se paró y levantó un puño. “¡Agrupémonos y sobrevivamos a este infierno al que llamamos la industria de las novelas ligeras!”

““““¡Raaahhh!”””” los otros cuatro gritaron.

***

El hecho de que los cinco jugadores estuvieran caminando por la misma ruta no significaba que lo tuvieran fácil.

“ ‘Tu nueva serie fue cancelada después de dos volúmenes. Pierdes dos Puntos de Felicidad y dos turnos’…”.

“¡Oh, por fin, una nueva impresión! ¿…Sólo cincuenta mil yenes? Eso ni siquiera cubre mis expensas…”.

“…‘Uno de tus haters dejó una crítica negativa en Amazon. Pierdes un Punto de Felicidad’. …No es que eso sea tan destructivo, pero sigue siendo irritante, ¿eh?”

“ ‘Fuiste acosado por un lector que te resiente por no poder casarse con tu heroína. Pierdes tres Puntos de Felicidad y tres turnos’. ¿Me están acosando? pero, ¿eso de verdad pasa en la vida real?”

“Mi adaptación a manga se vino abajo. He perdido  trescientos mil yenes… Ya estoy empezando a quedarme sin nada. Eso es duro…”.

Chihiro, Nayuta, Itsuki, Miyako, Haruto…los cinco estaban sintiendo un gran dolor.

“Uf, otra cancelación. Ya no tengo ni idea qué es lo que quieren los lectores…”.

“También me rechazaron otra serie nueva. Debí haber apreciado mis libros cuando los estaba publicando…”.

“Vaya”,  Itsuki  se  maravilló,  “¡Normalmente  nunca esperaría escuchar eso de ti, Kanikou!”

“Ya casi llegamos al final”, se expresó débilmente Chihiro, “pero todos estamos bastante maltratados y magullados, ¿eh?”

“Sí… Sólo espero que podamos lograr terminar…”.

La angustia estaba escrita claramente en la cara de Itsuki mientras lanzaba el dado.

“…Um, ‘Tu amigo se acaba de casar. Pierdes cincuenta mil yenes por un regalo de bodas. Si estás soltero, perderás tres Puntos de Felicidad adicionales por celos’.

¡¿Qué tiene que ver eso con ser un novelista?!”

“Menos mal que estamos juntos, ¿verdad, hermano?”

La siguiente fue Miyako. “…‘Tu examen físico anual arrojó resultados alarmantes. Pierdes cien mil yenes y tres turnos’. Sí, los novelistas viven estilos de vida muy poco saludables. Bebiendo a mitad del día, por ejemplo”.

“Estoy empezando a preocuparme por mi hígado… Um, ‘¡La oportunidad de toda una vida! ¡Lanza un dos para ganar una apuesta de carrera de caballos que multiplica tu cuenta bancaria por diez!’ Diez, ¿eh? ¡Supongo que es la única oportunidad que tengo de salir de la pobreza…!”

“¡E-Espera, Haruto! ¡No lo hagas!”

“¡Yah!”

Ignorando las súplicas de Itsuki, Haruto arriesgó su vida en un juego de apuestas.

“¡…Aaaahhhhh, perdí todo mi dinero en el hipódromo!”

“Esa es otra cosa que me costaría creer que dijeras en la vida real…”.

“Malas noticias en la industria el día de hoy, ya que Haruto Fuwa, novelista y guionista de anime, perdió todo su dinero apostando a los caballos…”, narró Nayuta.

“…Pensé que podía hacerlo funcionar…”.

“Me gustaría saber por qué”.

“Entonces, ¿eso es todo? ¿Tengo un turno más para tratar de evitar un Game Over?”

“Ya  sabes”,  comentó  Itsuki,  “podrías   casarte   con alguien y vivir de su fortuna en lugar de perder”.

“¡Ohh, claro, lo olvidé! Umm…”, dirigió sus ojos hacia Nayuta.

“No, gracias. Sea un juego o no, no me casaré con nadie a excepción de Itsuki”.

“Sí, apuesto a que sí. En ese caso…”.

Los ojos de Haruto se encontraron con los de Miyako,  y ella respondió con una mirada exasperada. “¿Matrimonio por dinero? En serio, Fuwa…”.

“Oh, odio cuando me miras de esa manera Miyako…¡Está bien, que así sea!”

“¿Que así sea qué?” Preguntó Itsuki.

“Supongo que este es el fin del camino para mí. Si tengo que rebajarme a casarme con una chica por su cuenta bancaria, ¡mejor me retiro ahora!”

“Vaya, Príncipe Mujeriego, eso es lo más varonil que has dicho hasta ahora. Tal vez tenía una idea equivocada sobre ti, solo un poco”.

“Entonces—”.

“Ugh, ¡espera un minuto! Lo haré por ti, ¿de acuerdo?”

Miyako habló justo cuando Haruto estaba a punto de anunciar su retiro.

“¿Eh?”

“…Lo  haré   por   ti.   Me  casaré  contigo”,  dijo ella tímidamente.

“¡¿Ehhh?!”

“…Los cinco llegamos hasta aquí juntos. ¿No sería horrible si uno de nosotros cayera ahora? Así que casémonos”.

“Aw, eres muy amable, Myaa”.

“¡Miyako…! ¡Gracias…!”

Miyako se rio del sincero agradecimiento. “No tienes que entusiasmarte tanto por eso, ¿sabes?”

“Sí, supongo que no”.

Itsuki se inclinó para susurrarle a Haruto. “Je-je-je…Buena jugada, Haruto”.

“…Sí. En el juego, al menos…”.

“¿…?”

Miyako le dio a Haruto una mirada rara mientras él formaba un puño con la mano.

“¡De acuerdo!” Chihiro gritó mientras tomaba el dado. “¡Llevemos a los cinco a la línea de meta! …Ugh. ‘Te desmayaste y terminaste en el hospital. Pierdes quinientos mil yenes y tres turnos’”.

“¡Oh, no! ¡Esposa mía! ¡¿Estás bien?!”

“Uh, ‘Si estás casado, tu pareja también pierde tres turnos’. Lamento arrastrarte a esto, hermano…”.

“¡No seas tonto! ¡Como dijimos, ‘En la salud y en la enfermedad’!”

“Aww, Itsuki…”.

“¡Ugh!  ¡¿Pueden  dejar  de  hablar  como  tortolitos?!¡Dime esas cosas a mí, no a tu hermano!”

Los celos llevaron a Nayuta a lanzar el dado con fuerza extra.

“¡Ah! ¡Yo también me enfermé, Itsuki! Trescientos mil yenes menos, pierdo dos turnos…también mi pareja, si tuviera una; de lo contrario pierdo tres Puntos de Felicidad. Ugh… Es complicado, estar sola en este mundo…”.

Ella se veía preparada para llorar de verdad. Miyako sintió compasión por ella.