Imouto Sae Ireba Ii (NL)

Volumen 4

Capítulo 7: La Desnudez Contraataca

Parte 2

En la mente de Kaiko, esto era sólo una cuestión de no sentir amor. Adoraba la lencería desde el fondo de su corazón, pero no tenía un apego emocional similar a la forma femenina. Eso era un problema, pensó.

Pero tal vez Nayuta tenía razón. Tal vez sólo era que nunca había tenido la oportunidad de jugar antes con alguien más. No sería una cuestión de ‘amor’, sino una falta de experiencia, o conocimiento, o estudio. ¿O de esfuerzo?

“Tal vez, ya sabes… no es que hayas elegido la ropa interior; es sólo que estás huyendo de la desnudez, ¿hmm?”

“¡Ngh…!”

El veneno detrás de las palabras de Nayuta despojó a Kaiko tanto de su ropa como de su identidad. Le hizo cuestionar la validez de todo lo que le gustaba, mientras Nayuta sonreía con maldad y finalmente le quitaba el sostén.

“¡…No, no lo hagas…!”

Ella tomó la muñeca de Nayuta, protegiendo tanto su identidad como la prenda que le brindaba soporte a su pecho. Tenía que demostrarlo—que no estaba recurriendo a las panties porque era incapaz de dibujar desnudos artísticos  y  seductores.

No  estaba  huyendo  de  la desnudez—simplemente optó por el camino de una artista fetichista del Pin-up. Ya estaba bien familiarizada con el reino de los pechos y traseros, y con ese conocimiento bajo control, tenía que mantener su propio pecho en alto y proclamar al mundo que las prendas que apenas cubrían esas partes eran aún mejores.

¡Tengo que demostrar que mi amor es real! ¡Y para hacer eso…!

Un destello de determinación apareció en los ojos de Kaiko. Libre de los brazos de Nayuta, se volvió hacia ella y rápidamente agarró los dos pechos de la chica, como si sus manos fueran las garras de un águila majestuosa.

“¡¿Ha-hyah?!”

Ahora le tocaba a Nayuta gritar en voz alta, mientras Kaiko la acariciaba lenta, hambrienta, a veces suave, a veces bruscamente. Ella gimió en voz alta, con las mejillas sonrojadas y los ojos nublados.

“Nyaaah… aiyahh… N-No… Aaaaltooo…”

Aparentemente, Nayuta podía atacar, pero no podía soportarlo.

“Ahhn… Uhn… Ahh… Unf…”

Cada vez que Kaiko aplicaba presión con sus dedos, Nayuta reaccionaba agudamente, soltando lindos gemidos y exclamaciones.

“Ya veo… Esto es diferente a tocarse uno mismo, ¿no es así…?”

Kaiko asintió satisfecha, algo más que un toque de emoción recorriendo su cuerpo. No se trataba sólo de que el pecho de Nayuta fuera diferente en forma o tamaño al suyo.

Cuando ella tocó sus propios pechos, la retroalimentación resultante fue una mezcla de sensación táctil y reacción interna. En este caso, sin embargo, podía concentrarse por completo en lo que sus manos le decían—y estas eran las manos de una artista de manga, alguien capaz de realizar hermosas y delicadas obras de arte.

Eran mucho más sensibles que las manos de una persona promedio, y la cantidad de información que podían obtener al tocar los senos desnudos de Nayuta era enorme.

La forma en que el cuerpo de Nayuta se sacudía y temblaba y hacía todo tipo de movimientos inesperados junto con sus gemidos era una experiencia igualmente nueva, algo que Kaiko nunca podría haber descubierto por sí misma.

“Nh… Hahh, hahh…”

Nayuta casi sonaba lista para sollozar entre sus cortas y seductoras respiraciones.

“¿Po…por qué… por qué…eres tan buena jugando con, con mis pechos…?”

“Porque soy una artista de manga”, respondió Kaiko, como si nada pudiera ser más obvio.

“Nnah… Una, una artista de manga… asombroso… Por favor, basta…”

“No te dejaré ir sólo con eso, no.”

Sus manos continuaron su trabajo de amasado mientras los ojos de Kaiko recorrían el cuerpo de Nayuta, su pulida percepción de artista de manga inspeccionando cada curva y vértice de su pálida y desnuda forma.

“N-No mires, por favor”, gritó Nayuta a medias, con sus tímidos ojos cerrados.

“Lo siento, pero debo hacerlo. Esta es una oportunidad de oro para mí, así que con gusto estudiaré tu cuerpo hasta el último detalle. Déjame mostrarte lo que pasa cuando haces que una artista de manga se ponga seria.”

Sus ojos estaban intermitentes con excitación, pero la mente de Kaiko estaba totalmente despejada y libre de distracciones. Así como lo hacía normalmente con la ropa interior de las mujeres, acercó su cara al cuerpo de Nayuta mientras sus manos continuaban, oliéndolo, examinando el sabor con su lengua.

Así que este es el cuerpo de una mujer…La sensación, y el sabor, hicieron que Kaiko se alegrara mucho. Tuvo que admitirlo—esto era excelente.

Y también significaba que tenía que afrontarlo con todo lo que tenía. No sólo con sus manos y su lengua. Sino en serio.

Su determinación se hizo más firme, Kaiko retiró sus manos y luego su propio sostén. Sus dos pechos cayeron con un casi audible boing—tan abundantes como los de Nayuta e igual de bien formados.

“Nyah, ¿qué estás…?”

Antes de que la boquiabierta Nayuta expresara su confusión, Kaiko, sin decir nada, presionó sus pechos contra los de su pareja.

“¡¿Fyahh?!”

Se oyó un grito. Kaiko, por su parte, hacía todo lo posible por mantener su respiración estable, dejando salir pequeños chillidos y gruñidos mientras lo hacía. Incluso con su estatus de Fanática de la Lencería Nivel A, sus pechos eran tan excepcionalmente sensibles como sus manos—tal  vez  incluso  más,  hasta  el  punto  de  que marcaba un perfecto 100 por ciento cada vez que jugaba a Adivina el Sostén (un juego popular en la Prefectura de Gunma en el que las jugadoras se vendan los ojos, se ponen un sostén y tienen que adivinar la marca y los materiales).

Ahora Kaiko ponía toda su atención en sus pechos, usándolos para analizar los de Nayuta. Se sentían completamente diferentes sobre su piel a los sostenes de alta calidad que ella prefería, pero seguían siendo igual de suaves y cómodos para ella.

La sensación que parecía atraer y abrazar suavemente sus pechos era fácilmente igualable a la comodidad de un sostén que se había ajustado a su cuerpo después de varios meses.

Asombroso… ¡Esto es simplemente…asombroso…!

La sensación la consumía, su respiración se aceleraba por el asombro y la excitación—y entonces Kaiko decidió averiguar cómo se sentía su trasero. Nayuta no le permitió acercar su rostro, pero cuando Kaiko usó sus afiladas técnicas de artista-de-manga-pro para encontrar exactamente los puntos particularmente sensibles que había descubierto antes, la autora se sometió.

La sensación del trasero de Nayuta era tan maravillosa como sus pechos.

Buscando explorarla más profundamente, Kaiko se bajó las panties, lo que la dejó completamente desnuda.

Además de Adivina el Sostén, también era una de las mejores jugadoras de Adivina las Panties (puedes imaginarte cómo se juega) que el mundo había conocido. Su sentido del tacto sobrehumano, normalmente reservado sólo para disfrutar plenamente de la sensación de las panties que llevaba puestas, pronto descubrió todos los secretos del trasero de Nayuta.

“Nyahh…hh… Oh, oh, por favor… P-Por favor, perdóname…”

“No”.

Las apasionadas y placenteras súplicas de Nayuta fueron ignoradas.…pasaron unas pocas decenas de segundos.

Después de saciarse con el trasero de Nayuta, Kaiko frotó sus propios pechos y trasero contra varias partes del cuerpo de Nayuta, enrollándose a su alrededor mientras llevaba a cabo su expedición. Ahora Nayuta estaba agotada, temblando ligeramente mientras yacía acurrucada en el suelo, Kaiko la observaba desde arriba.

“…Supongo que tenías razón. El cuerpo desnudo es un tema digno de ser desafiado.”

“Te—Te lo dije, ¿no…?”

Los ojos de Nayuta estaban llorosos mientras exhalaba las palabras en un estado de trance.

“…Habiendo despertado ante esta nueva revelación, no sé cuán capaz seré de expresarla, pero intentaré dibujar desnuda a Ichika”.

Nayuta dio un suspiro de alivio ante la declaración. “Y- Yayyy… lo logré… finalmente lo logré, Itsukiii… ♥”

“…Pero sigue habiendo un problema”.

“¿Un problema…?”

“Los únicos pechos que conozco son los míos y los tuyos. Sin embargo… los tuyos no son tan diferentes en tamaño a los míos”.

Ella tenía razón. Las dos eran muy pechugonas. Pero Ichika, la heroína de Todo sobre mi hermanita, era relativamente delgada—no de pecho plano, pero ciertamente no doble-D. Una talla media. Incluso después del minucioso examen que acababa de completar, Kaiko no podía expresar la forma desnuda de Ichika sólo con la experiencia del cuerpo de Nayuta.

“Jee-jee… ¡No hay problema…!” Nayuta se puso de pie, aun tratando de recuperar el aliento. “Tenemos a alguien que podría ser la referencia perfecta para el cuerpo de Ichika… justo ahí”.

Sus ojos estaban pegados a Miyako Shirakawa, quién había visto este ejercicio de depravación con pura exasperación, sino también con suficiente excitación para no entrometerse y detenerlas.

Una sonrisa morbosa se coló en la cara de Kaiko. “Ahh, sí, tienes toda la razón”.

El rostro de Miyako se tensó, sintiendo el peligro. “¿Q- Qué…?”

“Eee-jee-jee Myaaa… ♥”

La aún desnuda Nayuta corrió y abrazó a Miyako, sosteniéndola para asegurarse de que no hubiera escapatoria.

“¡¿Ay, oye, qué, Nayu?!”

“Por favor, quítate la ropa, Myaa. ¡Como siempre lo haces!”

“¡No—No lo digas como si siempre estuviera desnudándome para ti! ¡No soy una pervertida a la que le gusta  estar   desnuda  todo el tiempo!¡Meniego a someterme a la presión social!”

Pero mientras se resistía, la desnuda Kaiko se acercó. “Le ruego, Señorita Shirakawa. Por el bien de mi manga… necesito que se desnude”.

“¡Absolutamente no! ¡Nunca me voy a volver a quitar la ropa para ustedes!”

“Oh, está bien, Myaa. ¡Te sentirás tan bien cuando empecemos!”

“¡No quiero!”

Ella hizo todo lo posible para rechazar sus avances, pero después de dos minutos de súplica sincera y devota, ella cedió, murmurando, “Ugh, es imposible negociar con ustedes” mientras se desnudaba y se presentaba al temible sentido del tacto de la artista de manga.

***

Una semana después, el segundo borrador del capítulo 1 del manga ImoSube aterrizó en el escritorio de Itsuki.

El escenario era idéntico al de la última vez, excepto por una nueva ración extra de sostenes e imágenes de panties. El lento, gradual y exhaustivamente detallado strip-tease que acentuaba la escena de la ducha era también el mismo, pero en la página después de que Ichika se desvistiera hasta su ropa interior, fue finalmente representada en su forma desnuda por completo.

Ahora la historia tenía un fan service extra que no se

mencionaba en las novelas, junto con descripciones de ropa interior que cambiaban la naturaleza misma de la historia.

Y además también venía con una escena de desnudos que satisfaría a cualquier fan empedernido del original, asegurando que los nuevos lectores, los fieles seguidores, los fetichistas de las panties y los que piensan que la desnudez está en la cima, puedan disfrutarla. La adaptación perfecta.

“Je-je…ge-jej…gyeh-je-je… Pensé que las panties eran bonitas, pero nada puede superar la desnudez pura, ¿eh? Es, como, algo supremo, guh-ju-ju-ju-ju…weh-je-je-je-je- je…”

Y mientras Itsuki miraba esta escena de desnudos, con la cara retorcida mientras prácticamente pasaba su lengua por encima, Nayuta se puso de pie junto a él con una sonrisa serena.