Yahari Ore no Seishun (NL)

Volumen 6

Capítulo 8: Por Delante Está la Persona a la que Yukinoshita Yukino está Mirando

Parte 2

Durante todo el tiempo, me había asimilado con la atmósfera hasta las miradas de la clase 3-B que se centraron en mí.

“… ¿Es parte del comité de planificación también?”

“¡Él tiene un brazalete!”

“¡Arrójenlo ahí!”

El senpai hombre sin cultura inmediatamente me agarró. ¡Oye! ¿¡Por qué no me agarran las chicas senpais!? ¿¡No es esto sólo injusto!?

Fui arrastrado en el aula. ¡Oye! ¿Quién era ese? ¿¡Quién fue el que me tocó el trasero justo ahora!? El interior de la clase fue diseñado como el interior de una cueva. Se elaboraron considerablemente con minerales iluminados por LEDs, calaveras de cristal, piedras hechas de espuma de poliestireno, y cuerdas dispuestas por todas partes con palos que volaban alrededor.

En el breve momento fui impresionado, me empujaron hacia el carro construido a partir de un carro canasta, decorado con adornos. ¡Oye! En realidad, ¿¡quién fue ese!? ¿¡Quién es el que ha estado frotando mi trasero!?

Me empujaron con un solo empujón final. El impacto causó que Yukinoshita y yo fuéramos obligados a entrar al carro, y casi caímos uno encima del otro.

Con mi última resistencia de la resistencia, de alguna manera pude evitar chocar contra Yukinoshita, pero nos pusieron en una posición restringida.

… Ella es tan estrecha, está tan cerca. Yukinoshita y yo fuimos a los extremos opuestos del carro estrecho.

“Um, muchas gracias por tomar nuestro carro de tren hoy. Por favor, disfruten el misterioso mundo subterráneo con el contenido de su corazón”. (Realmente como mierda haces una montaña rusa dentro de una sala? xd)

El carro se sacudió en marcha una vez que terminó el discurso de apertura. Cuatro estudiantes de sexo masculino en trajes negros con buenas formaciones comenzaron a mover el carro. En una inspección más cercana, había otros dos que actuaban como su apoyo.

El curso que se creó desde los escritorios, mesas largas, láminas de hierro y platos sobre tablas de madera se sacudió y se trasladó a un ritmo más rápido. Nuestros cuerpos podían sentir el carro siendo sacudido de arriba hacia abajo en las violentas fluctuaciones.

Esto es bastante terrorífico… Además de eso, la sensación de ansiedad de saber que era en realidad la gente que provocaba los movimientos no era una broma…

De repente, sentí algo en mi chaqueta. Cuando miré, Yukinoshita estaba apretando los puños de mi chaqueta.

Con el traqueteo violento de ida y vuelta, de vez en cuando iba hacia arriba y hacia abajo, empecé a comprender la sensación de ser lavado en una máquina de lavandería.

El carro se detuvo, finalmente, llegando al final.

Yukinoshita mantuvo la espalda apoyada contra la pared del carro, en busca de alivio.

“Entonces, ¿qué les pareció su viaje en las profundidades de la tierra? Vengan de nuevo en cualquier momento”

Cuando el senpai de 3-B terminó el viaje con esas últimas palabras, Yukinoshita y yo comenzamos a movernos de nuevo. Los dos nos miramos el uno al otro.

Yukinoshita retiró rápidamente su mano de mi chaqueta.

Entonces dejamos el aula como si fuéramos expulsados. Ya que era oscuro, la luz del sol era brillante.

“¿¡Qué opinas de nuestra atracción!?” Una persona, que había estado en algún lugar en el inicio, con el aspecto del representante del 3-B apareció y se jactó.

Mirando un poco desorientada, Yukinoshita le envió una mirada fría. Pero su bamboleo hizo que perdiera su intensidad.

“No hay nada que pensar, esto es diferente de lo que está en su aplicación…”

“¡Es sólo un poco! ¡Sólo estamos ejerciendo nuestro juicio flexible!”

Eso se llama dejarse llevar… Con gente como estas, incluso si no fueras razonable con ellos, ellos no escuchaban. El representante no tuvo la culpa, pero esto era sólo la naturaleza de los grupos.

Una vez que se decidían por qué hacer y empezaban, ellos no les prestaban sus oídos a otras personas tan fácilmente. En ese caso, este era el lugar donde deberíamos regular la dirección en la que iban.

“Bueno, parece que mucha gente está disfrutando, así que no es un gran problema. Es decir, siempre y cuando sea seguro”, le dije.

Yukinoshita le dio un poco de pensamiento. “Supongo… En ese caso, pueden escribir una aplicación de complemento y enviarla. Además, proporcionarán una explicación detallada de los pilotos. Por favor ténganlo en la entrada y en el discurso de apertura antes del inicio de la atracción”.

“Ehh… supongo que si sólo es eso.”

“Muchas gracias,” Yukinoshita se inclinó y abandonó el lugar. Cuando se dispuso, ella me miró por encima del hombro. Con una expresión de malestar, ella me dio un reflejo ligero. Como si también estuviera siendo vertida por la luz del sol, sus mejillas estaban ligeramente rojas. “… Historiador, haz tu trabajo. O podría ser…¿que necesitas a alguien que te mire para que no aflojes?””No, yo no…”

No mires hacia abajo en mí. Me puedes ver todo lo que quieras, pero cuando llega el momento de aflojar, voy a aflojar. Eso es lo que me hace, a mí.

***

Al final, fui puesto bajo escrutinio por la fuerza de Yukinoshita y con sus instrucciones, tomé numerosas fotos.

Su trabajo de patrullaje y mi trabajo de la toma de fotografías se realizaban simultáneamente.

Yukinoshita detuvo sus pies en la clase 3-E, que no estaba demasiado lejos del gimnasio.

[Animales domésticos de todo tipo Meoow Woooof]

Parecía que todos los estudiantes llevaron a sus respectivos animales domésticos de clase.

Fotos de sus mascotas fueron pegadas en la pared como si fueran una especie de club anfitrión. Perros, gatos, conejos, hámsters eran estándar, pero había hurones, armiños, comadrejas, serpientes, tortugas… Sí que tenían una gran cantidad de variedades con un cuerpo largo, pero de todos modos.

Entre todas las fotos, la mirada de Yukinoshita se centró en una sola.

¿Oh? Un Ragdoll, ¿eh? Los Ragdolls son un tipo de raza de gato. Son bastante grandes en tamaño y tienen la piel mullida y peluda. También está su nombre, Ragdoll. El significado deseado que se supone es muñeco; no se refiere a un muñeco adulto en absoluto. También hay razas pequeñas como los gatos munchkin y los gatos singapura. Puedo decir “Pura Pura” o “Munch Munch”, pero no es nada indecente en absoluto.

Yukinoshita estaba mirando en el interior del aula y luego de nuevo a las imágenes una y otra vez.

… Ah. Esto es sin esperanza. Esto es el mismo patrón sin esperanza. Puedo ver que esta es la partida. 

“Puedes ir adentro, sabes,” hablé con ella, plenamente consciente de cómo las cosas se iban a desarrollar.

Pero, sorprendentemente, Yukinoshita sacudió la cabeza en decepción. “… Hay perros en ese lugar.”

Ah, bien, ella no era buena con los perros, ¿eh? No había posibilidad.

“… Porque también, la gente va a verme, así que…” dijo Yukinoshita, mirando con mucha vergüenza. Ella hizo una cara roja y miró hacia abajo.

Bueno, supongo que sí. Es decir, al ver su acto tan cariñosamente con los gatos era una especie de extraño. En vez de ir “¡tan lindo!”, Ella sería totalmente seria y cariñosa con ellos. Maldición, no daría marcha atrás nunca. Al igual, que era hasta el punto que había alcanzado el nivel de un artesano experto. Y para que la vice- presidenta del comité de planificación fuera vista de esa manera, su dignidad al instante estaría en los vertederos.

Las condiciones eran diferentes de una tienda de animales Monster Hunter, así que no había mucho que pudiera hacer. El ojo público también estaba allí.

“Bueno, sólo tienes que ir a Carrefour ña próxima vez. Me gustaría recomendar la tienda de animales por allí”.

“Conozco al respecto, voy allí a menudo.”

¿Es así…? Así que ya has estado allí…

“Así que hemos terminado aquí, ¿verdad?”

Yukinoshita, sin embargo, no parecía que iba a ceder. De hecho, ella estaba apuntando a la puerta. “Historiador, trabaja”.

¿Eres Mister Popo o algo? Deja de hablar con sólo tu vocabulario.

Pero, además, la voluntad de hierro de Yukinoshita con los gatos en frente de ella parecía inamovible que incluso una palanca no conseguiría que se moviera.

Cedí y sostuve el lanzamiento de la fotografía. ¡Eso es bueno, eso es bueno! Eleva las piernas un poco más allá.

Unos minutos después, finalmente me soltó del trabajo sucio. “Hey, ¿hay algún punto de tomar tantas imágenes de gatos?” Bueno, no es un gran problema ni nada…

Yukinoshita tomó la cámara digital de mí y la examinó. Miró por encima de las numerosas fotos “miau, miau” que tomé mientras que ella estaba ladrando instrucciones a distancia y se fue “uf”, sonriendo con una expresión satisfecha.

Yo la miraba, pensando en lo peligroso que era para ella estar caminando mientras operaba la cámara, pero ya que todo el mundo iba en la misma dirección, por extraño que parezca, no tenía que preocuparse acerca de estrellarse contra las personas.

Más adelante fue el gimnasio. Las puertas estaban abiertas y reunidas en el interior había una cantidad considerable de personas.

Con los sonidos bulliciosos de personas animando, Yukinoshita me devolvió la cámara.

“… Es casi sobre la hora.”

“¿Por?”, Le pregunté, pero Yukinoshita no respondió.

Yukinoshita permaneció tranquila y se dirigió directamente hacia el gimnasio con un paso decisivo, como si ella fuera allí para buscar algún tipo de respuesta.

Sin devolverse, ella llamó mi nombre, “Hikigaya-kun. Vámonos.”

“Ah sí.”

Bueno, en realidad no importa donde fuéramos desde que tuve mi trabajo como asistente historiador, así que no tenía objeción. La vicepresidenta misma me había dado instrucciones para tomar estas fotos, por lo que no debía escuchar las quejas como “¡no podemos utilizar estos!” tampoco. Así que esto hizo que fuera más fácil para mí también.

Fui a través de las puertas del gimnasio después de Yukinoshita. Todas las filas de las sillas de fierro estaban ocupadas.

En la parte de atrás, había gente al lado de la otra de pie y mirando. Aquí debía haber sido algún tipo de anuncio inicial ya que había tanta gente aquí.

“Ah, Yukinoshita-san. Justo a tiempo,” El voluntario a cargo del gimnasio se acercó a nosotros. “Estamos teniendo a cada uno de pie, ya que no tenemos suficientes sillas, por lo que sería mejor organizarlas en líneas?”

“Creo que debería estar bien.”

“¿Pero no es demasiado alto?”

“… Estará tranquilo muy pronto.”

Efectivamente, el ambiente ruidoso se calmó al igual que Yukinoshita lo dijo. ¿Fue porque todos habían sentido que la función estaba a punto de comenzar o era porque todo el mundo había sido presionado por la presencia clásica digna que se filtraba a partir de los instrumentos que se establecieron en el escenario?

Antes que las cosas empezaran, hicimos el camino hasta el final de la línea de los espectadores de pie. Cuando llegamos al final, hubo un momento de conmoción.

Puse mis ojos en el escenario y las mujeres en magníficos vestidos que soportaban diversos instrumentos aparecieron en el escenario una por una. Fueron recibidas con aplausos de la audiencia.

La que apareció, saliendo con pasos pausados, fue Yukinoshita Haruno.

Bajo los focos deslumbrantes, con un vestido largo y delgado que hacía hincapié en las curvas de su cuerpo, por cada paso que daba, su traje oscuro ondeaba, fascinando a los que la observaban.

El negro ramillete unido a su pecho y el pelo recogido tenía un aura de glamour, incluso desde lejos, y el brillo de las perlas y lentejuelas servían más para hacerla parecer aún más radiantemente rosa.

Haruno-san tomó el final de su falda y con gracia se inclinó.

Ella subió a la tribuna con sus tacones altos y agarró el bastón de mando.

Ella lo elevó ligeramente en el aire y se detuvo. Ese movimiento elegante coaccionó con los que veían restringiéndose a sí mismos.

Y al igual que una espada, ella giró bruscamente el bastón de mando. Al instante, una melodía llenó el gimnasio.

Expulsado a partir de los instrumentos de metal que brillaron bajo el foco deslumbrante había un bulto de presión y de las cuerdas temblorosas y lazos, un timbre con la nitidez de una flecha. Por el contrario, el timbre de los instrumentos de viento de madera temblaba como el viento de la tarde.

Haruno-san arrancó el espacio delante de ella.

A continuación, los violinistas pusieron de pie y se inclinó sensacionalmente las cuerdas de sus violines.

Entonces, los instrumentistas tocando las flautas, flautines y oboes subieron, acompañando la melodía ligera, y dieron un paso. Al lado de pie estaban los clarinetes y fagottos que se habían planteado en el aire. Y como si esta parte fuera el punto culminante, las trompetas y trombones fueron dirigidas hacia arriba, fortaleciendo su brillo

El centro de atención. Cuando se hizo girar el contrabajo, los instrumentistas tocaron los timbales que corresponderían con eso y hacían un espléndido turno.

Fue una apertura de espíritu musical que no se cohesionaba con su vestimenta clásica; más aún con sus maniobras no convencionales, llamativas, e intensas.

El público se sorprendió como si estuvieran pegados a través del lado de su cara.

Sin embargo, el ritmo y la melodía reconocible que excitaba de forma natural el cuerpo y la afinidad que los instrumentistas tuvieron de sus acciones causaron que la audiencia se inclinara hacia adelante y escuchara con atención. En el hecho, todo el mundo había asumido el ritmo de sus rodillas.

¿Qué canción era? Es algo que había oído antes, y creo que era una pieza que el club de orquesta de viento había tocado bastante a menudo.

Con mi respuesta presentada en la garganta, Haruno-san repentinamente levantó su mano en el aire y giró a la izquierda y la derecha.

En la orquesta armónica, aquel movimiento era anormal. La atención de los espectadores se centró en toda esa mano. Esos dedos delgados y largos comenzaron una cuenta atrás.

Fue el momento en que una frase familiar voló en mis oídos. Todos los presentes, aquí en el gimnasio, sabían exactamente lo que era esa pieza.

Haruno-san medio torció su cuerpo una vez más. Su bastón a los instrumentistas, y su otra mano a la audiencia. Ella agitó las manos con energía.

Esa señal causó que el escenario y el público saltara en sus pies al unísono y gritara. “¡Mambo!” (Wut? xd)

Con ese entusiasmo loco en curso, el acto aceleró.

Y una vez más, otro “¡Mambo!” Vino como las olas furiosas.

Fue ese instante muy corto en el que no sería capaz de distinguir la orquesta de la audiencia.

Incluso la alineación de los viejos niños y las niñas que deberían haber sido retirados como Haruno-san siguieron sus instrucciones y actuaron vívidamente.

Esta emoción estaba cerca de los clubes y salas de conciertos.

Las personas presentes no serían capaces de mantenerse al margen. Fue la última emoción en casa. El público a medio camino estaba obligado a tirar de sus amigos. Y el que permitiera que esto sucediera, al mando de la orquesta con una competencia definida era Yukinoshita Haruno.

Es porque yo estaba de pie al final de la línea que pude ver en la compostura. Pero si se mezclaron allí, se habría convertido en algo aterrador. Lo más probable, sólo debería seguir sin sentir el estado de ánimo y obtener fruncir el ceño después.

La música de la orquesta siguió, corriendo hacia el último segmento. “…usual.”

Podía oír una voz a mi lado, tan pequeña que podría haber sido ahogada por la increíble intensidad de la actuación.

“¿Eh?” No podía escuchar la totalidad de lo que había dicho, y yo incliné la cabeza con las orejas levantadas.

Yukinoshita luego trasladó su cuerpo un poco más cerca, junto con su boca, “dije increíble como de costumbre.”

La susurrante voz en las ondas de ruido me dijo sólo lo cerca que estábamos incluso en la oscuridad. El olor suave de frescura a la deriva hizo que me inclinara en la distancia por reflejo.

Cambié de idea y acorté la distancia a la mitad de un paso. No hay problema, siempre y que nuestros rostros no estuvieran cerca, yo no debería estar nervioso.

“Eso es una sorpresa. Al oírte felicitar a alguien y todo”.

“… ¿De verdad? Puede que no lo parezca, pero yo sí mantengo a mi nee-san en gran estima, sabes.” Cuanto más cerca estábamos, más claras eran nuestras voces. Sin embargo, para las palabras de Yukinoshita añadidas posteriormente, eran lo suficientemente tranquilas que podían perder la audición por completo. “Pensé   que quería ser como eso también.”

Su mirada se dirigió hacia el escenario. Y allí, balanceando el bastón de mando, libremente, como el de una danza de espada y con un esplendor, era Haruno-san.

En el escenario ascendido, el aumento aún mayor era la tribuna. Bañada a sí misma en el centro de atención en ese escenario era realmente algo digno de ella.

“… Tú no tienes que ser así. Sólo mantente como eres”.

Como si mi susurro expresivo hubiera sido sofocado por los aplausos y vítores de la audiencia, no tuve una respuesta de Yukinoshita.