Mahouka Koukou No Rettousei (NL)

Volumen 6

Capitulo 4: Fecha Límite

Parte 1

 

 

Hoy era la fecha límite para entregarle a la escuela la tesis, el borrador de la presentación, y los materiales.

Suzune, Isori, y Tatsuya no tenían interés en tratar de hacer el trabajo a último momento de forma descuidada el día anterior a la fecha límite, así que crearon el disco de datos el día anterior.





Durante el receso de almuerzo, se reunieron para completar la lista de tareas que no tenía relación con los contenidos,  sino  con  examinar el contexto y la forma de presentación de los puntos principales. Después de pasar por su inspección, aceptaron la sugerencia de Haruka, y Suzune le entregó personalmente el disco de datos a Tsuzura.

“¿El consejo de Ono-sensei de no entregar la tesis vía online tiene algo que ver con el incidente de ayer?”

Preguntó Isori de forma escueta después de terminar la parte que le correspondía.

“Puede ser.”

Después de terminar su tarea (incluso la carga encomendada a un estudiante de primer año no era ligera para nada), Tatsuya respondió con un suspiro para evitar distraer a Suzune.

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“Sería muchísimo más simple hackear desde el campus para darle un vistazo a la red.”

“Incluso eso es algo que requiere mucho esfuerzo.”

Isori se encogió de hombros ante el punto que señaló Tatsuya.

Al mismo tiempo, acompañada por los sonidos de teclear en un teclado tradicional – el sonido de teclado tradicional favorito de Suzune – ésta volteó en dirección a ellos.

“¿Se trataba en realidad de una estudiante de nuestra escuela?”

Después de terminar su inspección, Suzune organizó los materiales y se unió a la conversación.

“No, eso sigue siendo un ‘tal vez’.”

“Incluso el uniforme no sería tan difícil de obtener si lo intentasen.”

Al escuchar las repuestas de Tatsuya e Isori, Suzune se puso a pensar.

“Isori-kun y Chiyoda-san deberían tener acceso al listado de estudiantes.”

Isori era miembro del Consejo Estudiantil y Kanon era la Jefa del Comité de la Moral Pública, así que tenían el poder para revisar el listado de estudiantes. Por supuesto, la cantidad de información privada disponible era cero, así que sólo podían hacer una inspección simple de fotos y álbumes de fotos.

“Kanon fue la única que tuvo una vista parcial de perfil del rostro, así que tenemos que tener cuidado de no excluir a la sospechosa. Además, con casi 300 estudiantes mujeres en el campus, no hay forma de identificar nuestro objetivo si no podemos disminuir la cifra a un número manejable.”

Isori no se refería a esto como una situación hipotética.

En realidad, esas fueron las palabras de Kanon después de tratar de hacer eso esta mañana.

“Ayer, la única cosa que pudimos ver es que una perseguía a otra. Incluso si supiéramos quién fue la culpable, lo único que podríamos hacer es ponerla bajo vigilancia, lo cual es los mismo que nada.”

Suzune e Isori estaban conscientes de lo que Tatsuya decía.

Vigilar a estudiantes que no han roto ninguna regla – técnicamente, usar un estallido luminoso mientras escapaba podría considerarse un problema – podría llevar a acusaciones de acoso.

En este punto, no había nada que pudieran hacer excepto estar alertas.

***

 

 

Para cuando Tatsuya regresó al salón de clase, Erika ya se había adueñado de su asiento.

“Ah, hoy de verdad vienes temprano.”

Rápidamente descubrió la presencia de Tatsuya y se levantó del asiento.

No fue lo suficientemente descarada como para seguir ahí sentada. Después de que Tatsuya tomase asiento, ella lo hizo en el filo del mismo escritorio, lo cual ya era ejercer demasiada compostura de su parte.

“¿De qué estaban hablando?”

Aun así, tal como Erika señaló, él había llegado muy temprano hoy.

No se puso frente al terminal de inmediato, sino que entabló conversación con Mizuki que estaba sentada a su lado.

El objetivo de la conversación era Mizuki que llevaba una expresión de incomodidad en el rostro.

“Dijo que sentía que alguien la estaba observando.” Sin embargo, quien respondió fue Erika. “¿Observándola?”

Ante esta nueva pregunta, Mizuki asintió no muy convencida.

“Temprano en la mañana sentí una mirada molesta sobre mí. Una mirada repugnante oculta en algún lado en la oscuridad.”

“¿Un acosador quizás?”

“Eso es imposible. No soy un objetivo digno de ser perseguido.”

La posibilidad más grande fue indicada en primer lugar, pero Mizuki la desechó por completo negando con la cabeza una y otra vez como si tratase de disipar una idea ridícula.

“Yo no soy el objetivo. Creo que sólo soy parte de una red mucho más grande siendo descartada.”

Sus palabras imprecisas se debían muy probablemente a que no era capaz de expresarse muy bien.

Por otra parte, Tatsuya sabía perfectamente lo que trataba de comunicar.

“En otras palabras, el objetivo no es una sola estudiante, sino varios estudiantes y profesores o incluso toda la escuela. ¿Es a eso a lo que te refiere?”

“S-sí…… Aunque eso también puede ser un malentendido de mi parte.”

La actitud incierta también era parte de una faceta de su personalidad. Ya que no tenían evidencias, no había nada que pudieran hacer.

“No, pienso que Shibata-san se acaba de encontrar con algo.”

Aun así, como si tratase de levantar la apabullada confianza de Mizuki, Mikihiko llegó y habló de forma positiva.

“Desde ayer en la mañana, los espíritus en el campus han estado muy alterados. Creo que alguien debe haber lanzado un Shiki.”

Ya que Erika ocupaba el escritorio de Tatsuya, Leo no seguía dado la vuelta como solía hacerlo. Sin embargo, lo hizo después de escuchar las palabras de Mikihiko.

“¿Shiki, como en Shikigami de la magia SB (Spiritual Being/Ser Espiritual)?” Mikihiko asintió a la pregunta de Leo.

“En un poco difícil saberlo ya que usaron un tipo diferente a la nuestra, pero definitivamente hay un mago de origen desconocido fisgoneando por aquí.”

“¿No es una ocurrencia tan extraña, verdad?”

El escepticismo de Erika también tenía sus puntos.

Aunque esta era una preparatoria, seguían estando afiliados  a la universidad de magia y tenían acceso a muchos documentos importantes. Con tantos magos talentosos entre los profesores, la Primera Preparatoria era a menudo blanco de individuos que se valían de sus habilidades mágicas.

“Por lo general, si son bloqueados por magias defensivas sobre las paredes, no suelen regresar el mismo día. Pero este oponente continuó su ataque sin importar cuántas veces fue repelido. El hecho de que estuvieran buscando algo no es sorprendente, sino que esta es la primera vez que he visto un obstinación tan clara desde que entré a esta escuela.”

Mikihiko respondió a la objeción que hizo Erika con mucho tacto, con una réplica confidente de su parte.

“…… Mikihiko, entonces, dices que utilizaron un clase de magia distinta a la nuestra, ¿correcto?”

“Sí, así es.”

Mikihiko estaba muy preocupado por la elección de palabras de Tatsuya y confirmó con nerviosismo la pregunta de éste.

“¿Dices que era un shikigami de una rama distinta a la del sistema Shinto?

¿O te refieres a que es básicamente diferente de la Magia Ancestral de este país?”

No tenía idea de que los contenidos de una sentencia tan cuidadosamente pronunciada podrían llevar hacia otra dirección. La expresión de Mikihiko se volvió solemne.

“…… No creo que sea un conjuro mágico de nuestra nación.”

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“¿Eh, estás hablando de espías extranjeros?”

“¿No es exactamente eso lo que trata de decir?”

La mirada con los ojos completamente abiertos de Leo contrastaba con las palabras despreocupadas de Erika, pero en realidad ambas estaban en la misma longitud de onda.

“Que comportamiento tan evidente.”





“Están haciendo lo que les da la gana. ¿Qué rayos hace la policía?”

En lugar de estar enfurecida por el flojo trabajo de los oficiales del orden, parecía estar reprendiendo a sus familiares, lo cual provocó un pensamiento de “¿Eh?” de parte de Tatsuya y Mikihiko.

***

 

 

Mientras tanto, el Inspector Chiba de la Policía de la Prefectura Kanagawa – más parecido a haber sido desterrado de la oficina principal del Departamento de Policía de la Prefectura Kanagawa – estornudó en ese preciso momento.

“…… ¿Sucede algo, Inspector? De repente se ve agitado.”

El Sargento Inagaki, quien actualmente se hallaba investigando el incidente del ingreso de ilegales en el puerto de Yokohama, dirigió una mirada a la acción sospechosa de su inmediato superior.

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“Ah, por alguna razón sentí un escalofrío de repente.”

“¿Se encuentra bien? Ya estamos bastante ocupados ahora, ni siquiera intente pretender estar enfermo.”

“Uh, dices pretender estar enfermo, tú sí que……”

La voz del Inspector Chiba tenía un tinte de regaño en ella, lo cual Inagaki ignoró rápidamente.

“Inagaki-kun, deberías al menos respetar la cadena de mando.”


Ante las palabras de Chiba, Inagaki le mostró una mirada de escepticismo.

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Un “No está en posición de decir eso” estaba escrito en todo el rostro, pero las palabras que salieron de su boca eran completamente distintas.

“Hablando de eso, ¿necesitamos seguir recogiendo testimonios? Dudo que encontremos más testigos incluso si vamos más lejos.”

Inagaki tenía razón ahí. Después de varios días de recoger testimonios, no recibieron nueva información de aquellos que penetraron la frontera.

Chiba mostraba una sonrisita de auto desprecio mientras miraba a Inagaki, a quien veía más como a un compañero que como a un subordinado.

“Por supuesto que hay testigos, es sólo que eligen permanecer en silencio.”

“Inspector, se refiere a……”

Inagaki pareció haber captado algo en el tono delicado de su superior mientras sus ojos se aguzaban.

“Hey, no asustes a la gente.”

“Creo que el Inspector es el que da miedo. ¿Se dio cuenta de algo?”

“Relájate, no hice nada fuera de las reglas. Bueno, dicen que las víboras van por el camino de las víboras, así que vamos a darle un vistazo a la guarida de las mismas.”

Al escuchar la propuesta de Chiba, Inagaki mostró una expresión de rechazo.

“Tratos bajo la mesa están contra la Ley……”

“Creo que esto cae en parámetros aceptables, ¿verdad? No es como si este fuera el momento para preocuparse de pequeños detalles como ese.”

“Bueno…… puede ser.”

Mientras Inagaki asentía y buscaba un contra-argumento, Chiba ya había tomado asiento en el puesto del conductor en el vehículo de policía en la zona de parqueo libre. Después de verificar que su compañero subió a bordo, Chiba llevó el vehículo hacia el sector residencial de clase alta dominado por extranjeros.

***

 

 

El destino de la patrulla de policía que llevaba al Inspector Chiba y al Sargento Inagaki era el lote de parqueo para un café ubicado en la zona de las colinas de Yokohama. Después de que Chiba apagase el motor, Inagaki le mostró un rostro molesto.

“Inspector, no tengo nada en contra de tomar un descanso en una u otra parte, pero ¿no íbamos hacia la guarida de las serpientes?”

Ante su subordinado que le mandaba una dura mirada acusándolo descaradamente de ser un ocioso, el Inspector Chiba respondió con una expresión de pena.


“Esta es la guarida de las serpientes.”

“¿Eh?”

Después de alcanzar apresuradamente a su superior quien ya había bajado del automóvil y puesto seguro a la puerta con control remoto, Inagaki volvió a mirar el café una vez más mientras se quedaba de pie junto a Chiba.

A primera vista, este era un café silencioso y pacífico. Las ventanas pintorescas modeladas en forma de camarotes en las montañas, tenían un par de postigos que actualmente se encontraban abiertos sin tratar de ocultar nada en absoluto.

“Ah, llamarle víbora sería descortés con el propietario. Su red de inteligencia es bastante sofisticada y tampoco posee un récord criminal.”

“¿Está diciendo que es un pez gordo que no ha sido atrapado en nada aún?”

“Creo que le gustaría más el término Hombre de negocios que el de Pez gordo.”

El Inspector Chiba se encogió de hombros levemente y abrió las puertas de “Rotterbart”.

Gracias a su proximidad a ubicaciones turísticas, había una buena cantidad de comensales presentes, aunque ya era pasada la hora habitual del almuerzo.

Aun así, el lugar no era muy bullicioso.

La atmósfera dentro del café parecía reflejar la personalidad del dueño mientras cada uno de los clientes sentados ahí disfrutaba tranquilamente de sus bebidas. Todos los presentes eran de una generación un poco más antigua. Cualquier suposición de que todos eran turistas sería incorrecta, ya que la mayoría de ellos parecían ser clientes habituales de este establecimiento en particular.

Chiba se sentó en la segunda silla en una de las esquinas de la barra (Inagaki en el primer asiento) y ordenó dos tazas de café al dueño.

El dueño parecía ser un hombre de negocios por fuera, pero Chiba sabía muy bien que no había abandonado su otro negocio tampoco. Aun así, la conversación aún no se había dado antes de que el café llegase, y verse ahí sentados parecía ser una pérdida de tiempo, por lo que tomó esta oportunidad para darle un vistazo al lugar.

Afuera de la barra, una taza de café que acaba de ser tomada estaba ahí muy probablemente debido a que el cliente acababa de irse con apuro así que el dueño no tuvo tiempo de retirarla.

Qué pena que un café tan maravilloso fuera desperdiciado de esa forma. Mientras pensaba esto una y otra vez en aburrimiento, Chiba descubrió de repente que mientras él se fijaba en la taza de café, el cliente que, pensó había salido con prisas, había regresado.

Quien se sentó cerca a la barra era una joven mujer casi de la edad de Chiba.

Éste mantuvo su rostro hacia el frente mientras miraba disimuladamente las características de la mujer.

A primera vista, no era poseedora de una belleza increíble. Llevaba una túnica simple y un vestido, pero luego de una inspección más de cerca, poseía características faciales delicadas y una figura exuberante.

Esto le dio a Chiba el sentimiento de que ella se había aplicado intencionalmente una pequeña cantidad de maquillaje.

Luego de beber mientras meditaba en esto detalles, desplazó la mirada hacia el frente sin decir palabra.

Debería estar reprendiéndose por su idiotez.

Su excusa por no hacerle un par de preguntas de forma profesional se debió a que la apariencia de ella pasaba por desapercibida, pero las acciones de él justo ahora fueron prácticamente de flirteo descarado.

La mirada sospechosa de Inagaki empezaba a fastidiar.

El propietario se comportaba como su apariencia calmada sugería, y continuó preparando el café en silencio.

Chiba sólo pudo quedarse ahí sentado y esperar a que el café fuera servido. En ese momento, una carcajada inesperada rompió el silencio.

Sólo pudo usar los ojos para verificar esto, pero como esperaba, sus hombros temblaban mientras ella inclinaba la cabeza hacia adelante.

“…… Lo siento. Seguía pensando cómo manejar una conversación, entonces usted fue directo y tomó asiento ahí. ¿Entonces es verdad que no es hábil lidiando con mujeres, heredero de la Familia Chiba?”

El Inspector Chiba quedó estupefacto, y no porque ella haya dado en el clavo respecto a su personalidad.

Tampoco era un gran secreto que fuera el heredero de la Familia Chiba.

Aun así, nunca trató proactivamente de hacer pública su identidad o difundir fotos suyas a través de relaciones públicas.

En términos de información publicada, su hermano Naotsugu lo sobrepasaba.

Aparte de criminales o aquellos asociados a la policía, cualquiera que fuera capaz de saber que él era Chiba Toshikazu a simple vista, debía ser una partícula de un selecto grupo de la población mundial.

Es decir, personas que empleaban magia en combate real. “Usted es……”

“Encantada de conocerlo, Inspector Chiba. Puede llamarme Fujibayashi Kyouko.”

Esta vez, Chiba verdaderamente se quedó sin habla.

La hija de la Familia Fujibayashi renombrada por su poder en Magia Ancestral, e hija de Kudou Retsu, uno de los mayores en la comunidad japonesa de magia, estaba de pie frente a él sonriendo sin reservas.

***

 

 

Ya había pasado un buen rato desde que el grupo de ocho de Tatsuya atravesó las puertas de la escuela juntos.

“Tatsuya-kun, ¿ya terminaron con todos los preparativos para la Competición de Tesis?”

Aunque los ocho ya se habían reunido desde hace un rato, quien preguntó primero esto por alguna razón desconocida fue Honoka, quien asistía al Consejo Estudiantil con Miyuki y regresaba camino a casa con Tatsuya a diario.

“Sólo puedo decir que hemos terminado esta parte. Justo ahora, todavía tenemos que preocuparnos sobre los pequeños detalles como preparar los modelos para la presentación y toda una variedad de ajustes.”

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“Suena difícil. Hablando de ello, Mizuki está ayudando con la producción del modelo, ¿verdad?”

Erika no pertenecía ni al Consejo Estudiantil ni al Grupo de Administración de Clubs, y aun así curiosamente estaba bien informada mientras sacudía su coleta de atrás hacia adelante a la vez que miraba hacia Mizuki.

“Ah, sí, estoy ayudando a un senpai de segundo año. Aunque en realidad no estoy haciendo nada.”

“Dejamos que Isori-senpai se encargase del modelo en su totalidad, así que tiene sentido que estudiantes de segundo año formen el grupo de personal de producción.”

“Um~, ¿entonces qué hace Tatsuya?”

Leo aprovechó esta oportunidad para preguntarle a Tatsuya, quien había pronunciado su apoyo por Mizuki.

“Realizo la calibración de las técnicas mágicas utilizadas durante la presentación.”

“…… ¿No es de la forma opuesta generalmente?”

“¿De verdad? En términos de producir objetos, creo que Isori-senpai va muy por delante de mí.”

“Bueno…… Kei-senpai calza en la descripción de ‘alquimista’ más que en la de ‘mago’. Supongo que es la pieza indicada para el trabajo.”

Al ver a Tatsuya inclinar la cabeza de lado, Erika sonrió mordazmente y expresando estar de acuerdo.


“¿Alquimista? ¿RPG?”

Shizuku continuó manteniendo la cabeza inclinada a un lado. “Usando eso como analogía, ¿de qué clase sería Tatsuya-san?” De repente, Mizuki soltó la pregunta.

“Por supuesto que sería un científico loco.” (Erika) “Eso no es de un RPG.” (Shizuku) “Entonces, tal vez un sabio viviendo en tierras lejanas desprovistas de civilización que enseña una técnica secreta.” (Erika) “Un sabio de artes marciales entonces.” (Leo) “¿Un mago malvado planeando conquistar el mundo?” (Erika) “Creo que Rey Demonio sería más apropiado.” (Mikihiko) “No, no, no, después de derrotar al Rey Demonio, resulta que soy el verdadero hombre tras las sombras~. ¿No queda mejor como el Jefe Final que le impide el paso al personaje principal?” (Leo) “¿Cómo es que nadie piensa que calza en el papel de héroe?” (Honoka) “Olvídalo, Honoka. Tengo la vibra de un villano después de todo.” (Tatsuya) “Onii-sama, sólo la fuerza es la verdadera justicia.” (Miyuki) “¡Oh rayos, como era de esperar de la hermana menor del Rey Demonio!” (Erika)

…… Y de esa manera, empezó una discusión vibrante.

Aunque caminaban juntos y discutían como hacían los estudiantes, Tatsuya nunca bajó la guardia.

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