Watashi, Nouryoku Wa Heikinchi De Tte Itta Yo Ne! (NL)

Volumen 2

Capitulo 13: Superar los Límites 

Parte 4

“¡Ahora!”

Esta vez, a las órdenes de Mile, tanto Mile como Mavis saltaron.

El lagarto azotó su cola hacia Mile, que corrió hacia ella, blandiendo su espada.

El agua se congeló y una fina capa de hielo se aferró al cuerpo del lagarto, pero por supuesto esto solo afectó su piel. Como el enfriamiento no llegó a una profundidad mayor, la velocidad de su cola no disminuyó mucho.

Sin embargo, ese no era el punto del plan,

¡Swoosh!

Cuando el lagarto lanzó su ataque, su pata se deslizó.

En lugar de perder el equilibrio, la bestia agitó su cola sin fuerza de una dirección a otra.

Mile blandió su espada con todas sus fuerzas.

Por su experiencia previa, Mile entendía que, no importa lo fuerte que fuera ella, sin el peso para resistir un ataque, ella no podría dar un golpe decisivo, ya que no podía incrementar el peso de su propio cuerpo o de su espada, decidió compensarlo con velocidad. Sí, nuevamente era la ley de ½mv2.

En el momento en que chocó su espada, la atrajo de vuelta a ella.

A diferencia de las katanas, las espadas de estilo occidental no se usaban para cortar de forma limpia, si no para golpear con peso y fuerza. Pero la espada de Mile poseía una hoja afilada. Aunque no tuviera curva podría usarse como una katana.

¡Snap!

Como un cuchillo caliente atravesando la mantequilla, la cola del lagarto se desprendió de cuerpo con un solo golpe.

El lagarto rocoso parecía no tener mucho dolor, a cambio parecía nervioso, tal vez distraído porque había perdido tanto su arma más fuerte como su fuente de balance. Quitando la mirada de las chicas, el lagarto se preparó para escapar.

Pero — era demasiado tarde. Mavis ya se había cargado hacia él, blandiendo su espada.

¡Slash! 

Por supuesto, un solo golpe no era suficiente para atravesar la gruesa piel protectora del cuello, pero el golpe que Mavis le dio fue más que suficiente para terminar con su vida. Con eso, el lagarto rocoso pereció.

“¡Lo hicimos!”

“¡¡Lo hicimos, Siiii!!”

Aunque Mile cumplió con la tarea más difícil de cortarle la cola, Mavis también sonreía con orgullo. Había derribado a un lagarto rocoso de un solo golpe. Además, no habían puesto una mano sobre el torso del lagarto, por lo que podrían obtener la recompensa completa.

Reina y Pauline se acercaron viéndose satisfechas. Esta vez todo había salido según lo planeado y tanto el equipo de magia como el equipo cuerpo a cuerpo habían trabajado espléndidamente juntos.

“¡Bueno, mientras tenemos este ritmo, sigamos adelante!”

“¡¡¡Sí!!!”

Su caza procedió espléndidamente. Cazaron los lagartos rocosos uno tras otro, enganchando muchos conejos rocosos, lobos rocosos, serpientes rocosas, tanukis rocosos e incluso dulces de roca en el proceso.

A veces intercambiaban responsabilidades: Mavis tomando la cola y Mile el cuello. A veces incluso se resbalaban y caían en el suelo congelado. Pero cazaron una cantidad masiva, superando incluso el máximo de cinco lagartos indicado en la publicación. Incluso si el cliente no quisiera comprar los extras, el gremio probablemente pagaría. No existían demasiados lagartos rocosos.

Además, si todo se reducía a eso, Mile siempre podía decirles a sus compañeras que la carne en su espacio de almacenamiento nunca se echaría a perder.

También podrían almacenarlo hasta la próxima vez que hubiera una solicitud de lagarto rocosos y fingir que lo habían cazado cuando estuvieron fuera de la capital por otro trabajo.

Decidieron emprender su viaje de vuelta la mañana siguiente. Pasarían el resto del día cazando sin prisa, hasta que oscureciera. Todas estaban de buen humor.

Sin embargo, después de su temible pelea con los lagartos rocosos, se habían olvidado de algo.

Ese algo era la razón por la que habían tomado este trabajo y viajar hasta aquí. Era algo que se materializó de repente ante ellas.

“Es u-u-un golem rocoso…” Reina tartamudeo, mirando a la bestia ante ellas.

Habían elegido el trabajo de lagartos rocosos para ganar algo de dinero y cubrir los gastos de sus vidas. Pero la verdadera razón por la que seleccionaron este trabajo en particular fue para probar sus habilidades y determinar sus propios límites.

Aunque la primera batalla había sido difícil, una vez que el Pacto Carmesí entró en el ritmo de las cosas, centraron toda su atención en cazar lagartos rocosos y la posibilidad de luchar contra monstruos más fuertes desapareció por completo de sus mentes.

Ahora, les haya gustado o no, se toparon con un monstruo así –uno de los tantos que llamaban a estas montañas hogar.

Un golem rocoso.

A diferencia de otras bestias del tipo ‘rocoso’, los golems de rocosos no tenían su nombre por su hábitat rocoso. Se llamaban golems rocosos porque estaban hechos de roca. Como también vivían en lugares rocosos, podrían haber sido llamados ‘golems de piedras rocosas’, pero en algún lugar a lo largo del tiempo, alguien había decidido que era demasiado tonto.

Los requisitos mínimos para vencer a un golem rocosos sin salir herido eran de: 2 ó 3 cazadores de rango B, 4 ó 5 cazadores de rango C si son muy habilidosos: o más de 6 cazadores de rango C si no eran muy habilidosos.

Eso no significaba que un grupo pequeño pudiera vencer a una de estas criaturas, solamente que hacerlo sin daño alguno era muy diminuto. Ellas podían hacerlo – asumiendo que no se oponían a la idea de heridas graves o la muerte.

Desde el inicio, Reina había subestimado su fuerza — habiendo acabado a Rugido de Mitrilo, un grupo de clase alta de rango B bajo la dirección de un cazador de rango A, había asumido que vencer a un golem sería muy fácil.

Ahora, tras haber luchado con los lagartos, se dio cuenta que tal vez se había equivocado. “¡Tenemos que retirarnos!”

“¿Huh? ¿No vinimos por esto?” preguntó Mavis perpleja.

La decisión de Reina estaba tomada. “¡Por favor, solo cállate y haz lo que digo!”

“Entendido.”

Al ver la expresión seria en el rostro de Reina, Mavis se calló y obedeció.

No había tiempo para hacer algo y Reina era la más experimentada en su grupo, por lo que en tiempos de batalla, ella era la comandante más confiable.

Pero las cosas no se resolvieron tan fácilmente.

“No creo que podamos…”

Cuando se giraron para ver a Pauline, vieron que otro golem rocosos se acercaba por detrás.

“¡Estamos rodeadas!”

“No parece que podamos escapar sin luchar,” dijo Mavis.

“Esto no puede ser…” murmuró Reina, su voz mucho más débil de lo habitual.

Las demás no podían entender por qué Reina se alejaba de una batalla que todas querían pelear desde el principio. Pero, debido a su experiencia, pensaron que debía tener sus razones.

Mile, por su parte, nunca había visto un golem rocoso de forma diferente.

Realmente tenía un cuerpo de piedra, macizo y de casi cuatro metros de altura. Tenía una cabeza pequeña y articulaciones esféricas.

Así es — ¡tenía articulaciones esféricas!

Era de esperar que Mile recordara la exposición de muñecas articuladas a la que asistió con su madre y su hermana menor, en su vida anterior. En cambio, lo que le vino a la mente fueron los robots gigantes con articulaciones esféricas de las criaturas de medianoche que veía con su padre.

“Sus puntos débiles son probablemente sus articulaciones o sus piernas estrechas…” Al menos, recordó haber aprendido algo así.

“¡Parece que no tenemos más remedio que luchar! ¡No estamos buscando derrotarlos, simplemente hay que despejar una ruta de escape! ¡Prioricen protegerse de las lesiones, no se lastimen!” Reina emitió instrucciones rápidas, su forma cambió por completo.

“¡¡¡Entendido!!!”

“Pauline”, continuó Reina, “¡detén al golem de enfrente! ¡Mavis y Mile, ataquen las piernas del golem trasero! ¡Córtalos horizontalmente a través de los huecos!”

Esta vez no respondieron, si no que asintieron mientras Pauline comenzaba su hechizo. Mavis y Mile prepararon sus espadas. Reina se fue a la retaguardia, dirigiendo un hechizo al golem que les impedía salir.

Hay algo extraño aquí, pensó Mile.

Recordó algo que la había desconcertado durante sus clases en la escuela.

¿Goblins, kobolds, orcos, ogros?

Claro, por supuesto que existían ese tipo de criaturas. Este era un mundo de fantasía, después de todo.

¿Wyverns, dragones terrestres, dragones ancestrales? Sí, bueno, eso tampoco era tan extraño…

Pero, ¿golems rocosos? ¿Golems de hierro?

¿Que eran? ¿Estaban vivos? ¿Eran formas de vida artificiales? ¿Tenían conciencia?

¿No eran más bien inverosímiles en un entorno lleno de vida basada en el carbono?

¿Habían sido hechos especialmente por los dioses?

No importa cuánto lo pensara, su imaginación solo se extendía por ahora.

Seguramente, si ella preguntaba, las nanomáquinas tendrían una respuesta para ella. ¿Pero dónde estaba la diversión en eso? Este era un enigma que tendría que resolver por sí misma.

Sí, algunos misterios simplemente tienen que seguir siendo misterios, decidió Mile. Y sin embargo… todavía tenía tanta curiosidad por ellos.

¡¡¡Tengo muchas ganas de desarmar uno!!!

“¡Green Mist!”

Pauline usó magia de agua para conjurar una neblina, oscureciendo la visión de los golems.

Como siempre cuando escuchaba este hechizo, Mile quería protestar porque el encantamiento debería ser ‘fog’, pero eso probablemente era algo que nadie en este mundo entendería.

Después de Pauline, Reina lanzó su hechizo. “¡Flame Orb!”

Este era un tipo de hechizo de fuego que explotaba al impactar. Era una magia de un nivel alto más que las Fireballs, que simplemente eran bolas de fuego en movimiento.

Sin embargo, dado que la gente de este mundo tenía poca familiaridad con las explosiones causadas por algo como la pólvora, su idea de una explosión era solamente algo pequeña, carente de fuerza destructiva.

La mitad del daño proviene de llamas envolventes que estallaban después del impacto, lo que significa que este hechizo tenía poco efecto en monstruos como los golems.

Sin embargo, era más que suficiente para distraerlos. “¡Ahora!”

Mile saltó a la orden de Reina.

Puede que cuatro metros no suenen tanto, pero en realidad, el golem tenía más del doble de la altura de Mile. Incluso Mavis no podía alcanzar su cabeza con su espada.

Un ataque cortante tendría poco efecto sobre los fuertes torsos y brazos de las criaturas y cualquier espada normal se rompería si entrara en contacto con sus cuerpos rocosos. No había un lugar lógico para atacar además de las articulaciones.

Si recuerdo correctamente, las esferas de las articulaciones probablemente serán duras. Pero si puedo dañar el área alrededor de las esferas, donde la roca es más delgada, eso debería dificultar el movimiento de las esferas…

Mile revisó su estrategia, luego cortó la rodilla izquierda del golem. Al mismo tiempo, Mavis golpeó la rodilla derecha del golem.

Si hubieran golpeado las articulaciones de la cadera, podrían dañar sus movimientos mucho más, pero esos estaban más arriba y sería difícil infligir suficiente daño de un solo golpe. Y las caderas del golem parecían mucho más resistentes que sus rodillas.

Esto debería bastar. Simplemente dañando las rodillas impediría su movimiento y crearía una abertura para que escaparan.

¡Ka-thunk!

¡Ker-snap!

“… ¿Eh?”

Mile y Mavis dijeron simultáneamente.

La rodilla izquierda del golem salió volando y su rodilla derecha se derrumbó cuando la esfera salió de su articulación. Hizo un sonido espectacular cuando cayó al suelo.

Habiendo derribado un golem rocosos con mucha más facilidad de lo que habían imaginado, Mavis y Mile quedaron momentáneamente aturdidas. Bajaron la mirada hacia las espadas en sus manos.

No importa cuán resistentes sean las hojas, solo blandirlas no debería haber producido suficiente poder para destruir algo. Destruir objetos requería poder y habilidad especializadas. Nadie podría simplemente convertir una espada de cobre a una de acero… además de Mile.

Antes de que las chicas pudieran estar satisfechas con sus resultados, que superaron con creces a lo esperado, se sorprendieron nuevamente por el poder de sus propias armas. Incluso Mile, la herrera, quedó desconcertada.

Ni siquiera se habían blandido con toda su fuerza, sin embargo, habían cortado las sólidas articulaciones de un golem rocosos de un solo golpe.

Estas eran nada menos que las espadas legendarias de un mítico héroe… “¡Mavis!”

Mavis se había ahogado en el mar de sus propios pensamientos, pero ella respondió bruscamente al grito de Reina, apresurándose hacia el golem que ella y Mile habían derribado. Desde atrás, cortaron, perforaron y torcieron las articulaciones de la cadera y los hombros.

¡Snap!

Rumble rumble…

Uno tras otro, demolieron las articulaciones hasta que el golem rocosos no podía moverse más. Nada de esto debería haberse logrado tan fácilmente con una espada normal – sin importar cuán resistente fuera.

Reina observó, con la boca abierta, antes de llamar la atención. A toda prisa, ella emitió otra orden. “¡Cambio de planes! ¡Olvídense de correr! ¡Vamos a acabar con el otro! ¡Pauline, dispara a la cabeza con fuego! ¡Mile y Mavis, ese ya está eliminado — vengan a encargarse de este tipo!”

Reina disparó un hechizo rápido al otro golem, creando una distracción. Un momento después, el Fire Wall de Pauline obstruyó su visión. Mavis y Mile corrieron hacia el golem cegado a toda prisa, blandiendo sus espadas.

¡Thunk!

¡Snap!

Rumble…

“……”

Las rodillas del golem se rompieron y cayó al suelo. Mile y Mavis compartieron una mirada momentánea, luego destruyeron silenciosamente las otras articulaciones.

Cuando perforaron la cabeza del golem rocosos, dejó de moverse, aparentemente sin ninguna otra función. Por si acaso, volvieron a perforar el cráneo del primer golem también.

Aunque esto fue bastante fácil, ninguna espada normal podría atravesar el cráneo de un golem rocosos. En el mejor de los casos, la hojas se rompería. Era de sentido común. Al golpear los puntos débiles de un golem, apuntas a las frágiles articulaciones. La cabeza era fuerte y difícil de alcanzar.

“¿Somos simplemente… súper fuertes?”

“Suponiendo que los golems no son débiles, entonces… supongo que sí”. Mile murmuró dudosamente.

“……”

Reina y Pauline parecían igualmente perplejas.

“De todos modos, deberíamos ver lo que podemos coger. Creo que podemos suspender la caza por ahora, así que después de esto volveremos al campamento…”

Reina habló en voz baja, todo el ánimo desapareció de ella y las otros tres asintieron en silencio.

Parecía que había mucho en su mente.

Al final resultó que, lo único que valía la pena recoger de un golem rocosos eran las esferas de sus articulaciones. Mile desconcertada sobre en qué se podrían usar, pero Reina explicó que si los clasificaba por tamaño, podrían usarse para algún tipo de herramienta.

Supongo que no sirve de mucho llevar el cuerpo a casa. No se puede comer, no tiene el tamaño o la forma para ser útil como material de construcción y ni siquiera es especialmente duradero

Sin embargo, las esferas eran bastante grandes y pesadas. Además, habían varias de ellas en cada cuerpo. Si no tuvieran magia de almacenamiento, llevarlas sería una molestia.

Al menos no había preocupación de que se echaran a perder o se dañaran con el paso del tiempo. Si tuvieran un carruaje o una carreta, podrían arrastrarlas tranquilamente de regreso a casa.

Sería fantástico obtener un precio alto, pensó Mile, pero no tenía muchas esperanzas.

***

Las integrantes del Pacto Carmesí regresaron a su campamento y comenzaron a preparar la cena.

Habían terminado de cazar un poco antes de lo planeado, pero tenían muchas presas.

El lagarto rocoso asado de antes serviría como plato principal, acompañado de frutas, verduras y cubos de consomé deshidratados que habían comprado en la capital.

Era bastante lujoso, en cuanto a acampar. Para celebrar un trabajo bien hecho (así como su victoria sobre los golems rocosos), un festín parecía adecuado y lagarto rocosos era lo que tenían — excepto, por supuesto, la enorme reserva de comida que Mile había guardado en su botín…

Además, la carne de lagarto que habían comido esta mañana era muy deliciosa. Y el precio de la carne que se había quemado hasta quedar crujiente en el exterior sería considerablemente menor. Guardarla para vender sería tonto. Era obvio que debían comerla ellas mismas. Un lagarto rocosos era un ingrediente ligeramente lujoso y costaría una céntima en cualquier restaurante normal.

Pero la carne de un lagarto todavía era una cantidad demasiada y no importa cuán diligentemente lo intentaran, solo podían comerse una porción pequeña.

Aun así, deberían poder vender algunas a bajo precio en la posada — o incluso ofrecerla como regalo. Tenían muchos otros lagartos que todavía estaban completamente intactos.

De cualquier manera, Mile no podía seguir sacando la carne del botín con tiempo estático si quería ocultar sus habilidades de sus compañeros.

A diferencia de su almuerzo involuntario, esta vez tenían mucho tiempo para preparar. Por lo tanto, Mile no solo asó la carne, sino que probó varias técnicas diferentes de cocina.

No era frecuente que tuviera la oportunidad de comer tranquilamente un lagarto rocoso al aire libre y ella  quería  desesperadamente  saber más  sobre  qué  tipo de  ingrediente  habían recolectado. Más que nada, quería comer algo delicioso.

Reina y Mavis no podían cocinar. Mavis era hija de una familia noble, así que eso era una cosa, pero era curioso que Reina nunca hubiera cocinado mucho, ni cuando viajaba con su padre en sus actividades de venta ambulante, ni como miembro del Crimson Lightning, el grupo donde ella había sido la única chica.

Cuando Mile preguntó sobre esto, la reacción de Reina dejó muy claro que no deberían volver a abordar el tema. Así Pauline quedó a cargo del plato principal, mientras que Mile experimentaba.