Spy Kyoushitsu (NL)

Volumen 2

Capitulo 2: Conciliación

Parte 5

Pero, antes de que se le pudiera ocurrir algo, Uwe le dio una mirada dudosa.

“¿Tienes interés en esos documentos?”

Su mirada se dirigió a los informes en posesión de Zibia. Subconscientemente levantó sus manos mientras aún se aferraba a eso.

“…Supongo.” Zibia le siguió la corriente. “¿Por qué razón?”

“Es para mis estudios—”

“No… no hay razón para preguntar eso.”

Uwe finalmente bajó el arma. Su cara roja comenzaba a calmarse lentamente.

“Son sólo algunos documentos. Adelante, léelos.”

“¿Eh…?” Ella fue perdonada fácilmente.

A pesar de que no trató de ocultarlo.

“Cuando llegué a ese orfanato, escuché cierta historia.”

Ante la desconcertante reacción de Zibia, Uwe se sentó en una silla cercana, comenzando su charla.

“Hace ocho años, creo. A través del caos de la posguerra, la época del surgimiento de las pandillas estaba sobre nosotros. Desde  el fraude con  el tratamiento de las heridas de guerra, hasta el robo de muebles en las casas de los propietarios que habían fallecido, actualmente no hay mucha diferencia, pero esa vez fue mucho más prominente.” Su forma de narrar era tranquila, como si estuviera contando un cuento de hadas. “Especialmente una pandilla llamada ‘Come-hombres’ era horrible. Hacían sus travesuras en la capital, matando a la gente sólo por diversión. Especialmente el líder, él desaparecía como un fantasma, sólo para reaparecer y clavarte un cuchillo en el corazón. Un hombre que dejó a la policía y a los ciudadanos con miedo, como si fuera un descendiente del diablo.”

“………”

“Dicho esto, el líder fue arrestado repentinamente, y los ‘Come-hombres’ se desplomaron. ¿Sabes la razón?”

“………¿Me pregunto?”

“La hija mayor de ese líder lo denunció a la policía.” Dijo Uwe, sonando como si estuviera alabando esa decisión. “Maravilloso, ¿verdad? Con el fin de proteger a sus pequeños hermanos y hermanas, la niña de nueve años eligió la justicia por encima de todo.”

“………”

“Estos hermanos fueron acogidos en un orfanato, pero justo después, la hija mayor desapareció. Para ganar dinero, sin duda. Qué jovencita más valiente. Se rumorea que empezó a trabajar con un detective en la capital, o que fingió su edad para trabajar en una fábrica textil… No puedo evitar pensar en esto como un cuento conmovedor.” Al terminar su historia, Uwe dio un gran suspiro.

En respuesta, Zibia sólo se encogió de hombros.

“¿Por qué me cuenta todo eso?”

“Esa hija mayor aparentemente es una chica de cabello blanco bastante arrogante y autoritaria. Al verte, simplemente lo recordé. Ella también debe tener tu edad ahora mismo. Creo que su nombre era—”

Uwe mencionó un cierto nombre. Un nombre vulgar, como si reflejara la personalidad del padre.

“…No me suena.”

“Ah, sí. Siento haber presionado tanto.” Uwe resopló de manera decepcionante.

Al recibir el informe de Zibia, pasó sus ojos por él una vez más, lamiéndose los labios secos.

“Dicho esto, deberías saberlo, ¿verdad? Qué ambiente cruel era entonces un orfanato en la posguerra. Los suministros disponibles estaban al límite y a los centros de asistencia social no les quedaba nada. Hice lo que pude, pero el gobierno se centró más en las políticas económicas y el desarrollo del país.”

“Sí, lo sé muy bien…”

“La situación no ha cambiado en lo más mínimo. Aunque golpee el escritorio, sólo una pequeña parte de los asistentes sociales levantan una ceja.” La voz de Uwe se quedó en silencio. “—Por eso trato de evitar cualquier gasto innecesario de dinero, para poder enviarles, aunque sea un poco.”

“………”

Esa era la razón de la excesiva personalidad ahorradora, la raíz de todo su ser. Aunque sólo fuera un pensamiento temporal, estaba reuniendo pequeñas cantidades de dinero diariamente. Pensar que era un viceministro del gabinete, esa forma de pensar sonaba muy noble. Y Zibia podía entender perfectamente el impulso que tenía.

“Por eso le ordena a las maids que siempre ahorren tanto dinero como sea posible…”

Ella tenía una idea equivocada sobre él. No era simplemente un viejo senil. “Lo entiendo. De ahora en adelante, trataré de ajustarme a esa filosofía—”

“No, eso no es lo que quería decir con esto.”

“¿Hm?”

“Lee todo lo que quieras esta noche. No cuestionaré nada de esto.”

Zibia seguía confundida. Pero, Uwe le dio una explicación justo después.

“—Porque mañana te irás a casa.”

“¿Eh?” Una voz atónita se filtró de la boca de Zibia.

Ella pensó que estaba bromeando, pero sus expresiones eran lo más serias posible.

“Contratarte por acto de bondad hacia otro político sigue siendo un desperdicio. Tampoco necesito tres chicas. Después del mediodía de mañana, te irás.”

Su respiración se detuvo. Pensar que se había decidido por esto después de tan poco tiempo. Si todas fueran despedidas, no tenían ninguna posibilidad de completar la misión con éxito.

“E-Espere un segundo. El estado de la residencia sufrirá dramáticamente si nos

vamos.”

“Si los invitados ayudan a limpiar, estará bien. Olivia puede arreglárselas por su cuenta.”

“Eso sigue siendo demasiado extre—”

“Ya te lo he dicho antes. No puedo permitirme ningún gasto innecesario. No

importa lo trivial que pueda ser.”

Una voluntad de hierro residía en su mirada, no se doblaría sin importar lo que Zibia dijera ahora. Le dolía admitirlo, sólo podía rendirse.

“…Entonces, déjeme preguntarle una cosa.” Zibia habló. “Si usted odia tanto los gastos innecesarios, ¿por qué no vende esta lujosa residencia?”

Aparentemente, Uwe no se tomó muy bien la pregunta, ya que entrecerró los ojos con una mirada firme.

“Esta residencia siempre fue difícil de acceder. No se venderá por mucho.”

“Además de eso, ¿es una contramedida contra los asesinos?”

El enemigo no usaría métodos que involucrara a personas al azar. Eso no fue más que una molestia para los espías.

Uwe dio su consentimiento.

“No puedo morir todavía. El bienestar de este país aún me necesita.”

Las mejillas de Zibia se suavizaron.

“Con que sí. Entonces, no puedo permitirme que me despidan todavía”

Dándole la espalda a Uwe, Zibia salió corriendo de la biblioteca. Su límite de tiempo era de unas doce horas a partir de ahora. Hasta entonces, tenían que encontrar una razón que impidiera a Uwe despedirlas.

Además, Zibia finalmente entendió la razón por la que fue elegida por Klaus. Porque tenía el deber de proteger a Uwe a toda costa.

***

Lily y Grete estaban jugando con el halcón en el cuarto de los sirvientes. Al ver lo bien que estaba constituido, con una mirada fuerte, se quedaron maravilladas.

Sara trajo el halcón una vez más. La última vez, fue expulsado por Zibia, pero para las otras dos, que tenían sus espíritus y corazones rotos, una especie de animal para los humanos era como si estuvieran siendo sanados. A su lado estaba Sara, una vez más hablando con orgullo sobre él.

“Verás, al Señor Bernard le gusta—”

Tenían previsto realizar una seria reunión de estrategia, pero Zibia no había regresado todavía. Por lo tanto, tenían que esperar, ocupándose de cepillar las alas del halcón.

Eventualmente, se escucharon pasos afuera en el pasillo. La puerta de la habitación se abrió, Zibia entró con una expresión tensa. Parecía una mezcla de arrepentimiento y determinación.

“¿Cómo te fue? ¿Conseguiste algo de información para nosotras—”

“Nop, Uwe-san me descubrió.” Zibia sacudió descaradamente la cabeza.

Las otras chicas comprendieron rápidamente la situación, bajando la cabeza al mismo tiempo.

“““Gracias por tu duro trabajo.”””

“¡No fui despedida todavía, bastardas!”

Las chicas habían sacado conclusiones precipitadas, ganándose un grito de ira de Zibia. Pero, después de que Zibia revelara las circunstancias reales, resultó que no estaban muy equivocadas. No sólo Zibia sufriría de esto, sino que las tres juntas serían despedidas a este ritmo.

“¿No es eso un gran problema?” La expresión de Sara se distorsionó con

desesperación.

Zibia dio su consentimiento y bajó su tono de voz.

“Quiero hablar un poco de mi vida.”

“¿Hm? ¿Tan oportuno es el momento?” Lily ladeó la cabeza con confusión. “Sólo escucha, de acuerdo. Hubo un tiempo en el que asistía a un orfanato con mis hermanos y hermanas menores, dicho orfanato era lo más pobre que puedas imaginar. Eso me molestó mucho, por lo que me propuse ser espía, para cambiar este mundo aunque sea un poco. En cierto sentido, esto es bastante parecido a la ambición de Uwe-san.” Zibia se rió de sí misma. “Por eso estoy muy feliz ahora mismo… Ese tipo… Sensei, conoce bien mi situación.”

Bajó la mirada un segundo y la siguiente vez que levantó la cabeza, la luz había vuelto a sus ojos.

“Quiero cumplir con las expectativas de Sensei y quiero proteger a Uwe-san. Así que, por favor, ayúdenme.” Ella seguía sonando de forma autoritaria y confiada.

Las otras chicas fueron incapaces de comprender de dónde venía exactamente esa pasión. Podían imaginar lo que había sucedido, pero Zibia no mostraba signos de dar detalles, por lo que no la presionaron. El entusiasmo en sus ojos, ardiendo fuerte como una llama, era más que suficiente.

“Bueno, esta es una misión después de todo, así que por supuesto que te ayudaremos.” Lily fue la primera que habló.

“Eso es cierto, pero…” Zibia se puso un poco nerviosa.

“U-Um.”

Fue entonces cuando Sara levantó tímidamente su mano.

“Puedo simpatizar con los sentimientos de Zibia-senpai. Soy una cobarde, una buena para nada, y aún paso mi tiempo pensando que hubiera sido mejor si alguien más habría sido elegida.” Ella se detuvo, respirando profundamente. “Pero, en realidad estaba muy feliz cuando me eligieron.”

Aparentemente avergonzada por esta confesión, Sara se sonrojó un poco, mientras que Lily mostró una sonrisa confiada.

“Ustedes dos son tan simples~ Yo estaba completamente segura de que sería elegida. Si lo piensan detenidamente, no hay forma de que la líder pueda estar ausente en una misión tan importante como esta.”

“Lily-senpai, oí que gritabas de alegría desde tu habitación.”

“Ella misma lo dice, Lily.”

La sonrisa de Lily se congeló.

“…Yo-Yo siempre grito así, todos los días.”

“¿Qué clase de práctica es esa?”

Grete miró a sus camaradas, riéndose ligeramente.

“¿Qué ocurre?” Preguntó Zibia.

“…Estaba pensando que el Jefe probablemente vio a través de los sentimientos

de todas, y nos eligió como resultado de eso…”

“¿Te enamoraste de él otra vez?”

“No… tal como se esperaba… Un encanto previsto de su…” Grete hablaba con cariño sobre su amada persona. “…Y también quiero responder a las expectativas del Jefe.”

“Me imagino.”

Las cuatro chicas se encontraron las miradas al mismo tiempo, confirmando sus sentimientos, y empezaron su reunión estratégica.

“Y,    ¿cómo   podemos  evitar    que   seamos   despedidas?”   Lily    sonrió. “¿Amenazando?”

“¿Qué piensan las demás?” Zibia buscó más ideas.

“¿…Disfrazarse de Olivia-san, y tratar de darnos una buena reputación…?”

“¿Envenenar a Uwe-san, y luego salvarlo valientemente para que nos conceda un favor?”

“Si fuera yo, trataría de negociar con todos menos con Uwe-san.”

Empezando por Grete, Lily y Sara dieron sus propias ideas. Estaba el sofisticado plan de Grete, el turbio plan de Lily y el cuidadoso plan de Sara. En respuesta a eso, Zibia mostró sus blancos dientes.

“Prepararé una comida deliciosa y haré que me acepte como maid.”

“Uf, un trabajo duro.” Lily aplaudió. “Pero, me gusta. Suena al estilo de Zibia- chan.”

No encontró ninguna razón para oponerse a eso. Con las cabezas todavía juntas, las cuatro chicas empezaron a sonreír.

“Es el momento de mi venganza en la cocina. Ahora que tengo algo de información sobre él—”

“¡……Yay!” Una voz apagada vino de Grete. “Eh, ¿qué fue eso?”

“Quería sumarme a su momento de alta tensión… así que…”

“¿No es necesario que te esfuerces?”

“Y-Yay, sí!”

“Conque así es como nos vemos a través de tus ojos, ¿eh?” Lily mostró una sonrisa amarga.

Era una conversación ridícula, pero Zibia se interpuso entre ellas.

“¡Ahora que se nos ha confiado esto, tenemos que darlo todo!”

Las cuatro chicas chocaron sus frentes en un débil intento de motivarse.

***

Se dividieron en dos equipos. A la mañana del día siguiente, Grete y Lily estaban en la cocina de la residencia. Al alinear los ingredientes que acababan de comprar a primera hora del día, se cruzaron de brazos.

“¿Cocinar algo delicioso realmente nos va a permitir escapar de esta situación?”

Un poco tarde, pero Lily empezó a tener algunas dudas.

“Sólo tenemos que depositar nuestra confianza en Zibia-san…”

Lo que Grete había alineado en la cocina era una amplia variedad de especias. Pimienta roja, pimienta, pimienta en grano rosa, cardamomo, jengibre, gran cantidad de todas ellas.

“Tenemos que empezar a cocinar… Lily-san.”

“¡Sí! ¡Déjame la degustación a mí!”

Ella tenía confianza en su trabajo, luego de haber estado realizando esta pesada tarea la última vez que trataron de derrotar a Klaus.

“…¿Por qué quieres hacer la degustación, Lily-san?” Grete la detuvo. “¿Jeeeh?”

“Con la receta, se miden los ingredientes, se cortan, se calientan, se mezclan, se hierven… No importa como lo pienses, Lily-san, experta en el uso de veneno, debería ser hábil en este tipo de cosas…”

“………”

“¿No te habías dado cuenta? ¿Tus ojos se volvieron codiciosos la última vez por…”

“¡Mantén esto en secreto de Zibia-chan!”

Con esas palabras, Lily comenzó a trabajar con las especias. Moliéndolas cuidadosamente, quitando las partes con fragancia débil, escogiendo los granos prominentes. Siendo hábil en este tipo de cosas, no hacía ningún movimiento inútil, por lo que Grete asintió con la cabeza de manera satisfactoria.

…Normalmente, este tipo de preparación lleva unas dos horas, pero intentemos hacerlo en media hora.

“¡N-No pidas lo imposible!”

“Te aconsejaré, por lo que es muy probable…”

Ignorando las quejas de su compañera, Grete empezó sus cálculos detallados.

Confiando en eso, Lily no tuvo problemas para ocuparse del resto.

***

Zibia y Sara por su parte estaban recorriendo las afueras de la capital. Montando dos motos que habían pedido prestadas, avanzaron por el camino, el cual había recibido mantenimiento recientemente.

Aunque no llegarían a tiempo si merodeaban demasiado, por suerte, aunque la República de Deen era un país bastante pequeño, habían adecuado y mantenido los caminos alrededor de la capital, e incluso una ruta principal a lo largo de la misma.

El lugar donde Zibia y Sara se detuvieron era  una  gran  instalación, un emblemático hospital administrado por el estado. Construido sobre tierra firme, un gran edificio de ladrillos de cinco pisos, como si fuera un castillo. Sin saber a dónde fue llevada, Sara abrió bien los ojos.

“Eh, ¿aquí?”

“Sí. Aparentemente, Uwe-san obtuvo su diagnóstico de este lugar.” Zibia se quitó el casco. “Los resultados de eso no estaban en la residencia, por lo que sólo podemos preguntar aquí en el hospital.”

“Entonces, obtén acceso a su diagnóstico.”

“No, dudo que eso funcione. Necesitaríamos pruebas de que él nos envió, y no tenemos tiempo.”

Lo que ambas buscaban era el informe del diagnóstico de Uwe. Para poder convencer a Uwe, lo más probable es que eso sea esencial. Dicho esto, obtenerlo no sería fácil. Sara se veía un poco preocupada, pero Zibia simplemente mostró una sonrisa inquebrantable.

“Por eso—Lo robaremos de aquí.”

“¡Este es un hospital administrado por el gobierno, ¿entiendes?!” La expresión de Sara se congeló.

“Shh. No tan fuerte.”

“¡P-Pero, la seguridad tiene que ser de primera clase! Con mucha gente

trabajando dentro…”

“Está bien, está bien. Cuanto más grande es, más fácil es entrar sigilosamente. Robaré la llave del vestuario, me disfrazaré de enfermera y buscaré los documentos en las estanterías, es todo.” Zibia agitó su mano con confianza. “Una vez que dé la señal, haz que Bernard vuele para causar un poco de alboroto, eso debería ser suficiente para escabullirme.” Zibia empezó a prepararse con un poco de calistenia ligera.

“………” Sara sólo pudo observar en silencio por un momento.

Finalmente, al parecer se rindió, suspirando con un Qué Senpai sin esperanza, muy bien… Por otra parte, más que estar harta, parecía que lo estaba disfrutando. Al silbar con sus dedos, un halcón bajó del cielo, deteniéndose justo al lado de Sara.

“Puedo darte una ruta concreta, no sólo la sincronización, si lo necesitas.”

“Eso sería de gran ayuda.”

Terminando sus preparativos al mismo tiempo, Zibia anunció en su habitual tono autoritario.

“Nombre clave [Hyakki] — Aprovecharé este robo para presumir.”

Con esas palabras, entró en el hospital. Al final, Sara permaneció afuera a la espera, sin poder ver lo que estaba pasando dentro del edificio. Ella no sabía sobre el origen de la chica, ¿por qué había perfeccionado su talento a tal nivel? y lo que la llevó a terminar en [Tomoshibi]. No obstante, había una cosa que ella sabía con certeza.

La chica Zibia, bajo el nombre de [Hyakki] — es una genio al momento de robar.