Isekai Mahou wa Okureteru (NL)

Volumen 6

Capitulo 1: El Dragonnewt A La Luz De La Luna

Parte 3

Era probable que, en lugar de solo una ráfaga de fuego, se le aplicara una maldición. Justo cuando Eanru juzgó que sería malo tomar tal fuego de frente, las campanas de alarma comenzaron a sonar en las profundidades de su mente.

Atravesando las llamas justo en frente de él… estaba Suimei. Justo cuando Eanru estaba desconcertado al ver a un mago acercándose a él sin ayuda de nadie, el mago frente a él se convirtió en humo y desapareció.

Al ver eso, Eanru una vez más dejó escapar una sonrisa. Antes de que pudiera determinar dónde se había ido el humo disperso, pudo sentir una presencia detrás de él. Mientras se daba la vuelta apresuradamente, Suimei estaba de pie frente a él con un pequeño círculo mágico en la palma de su mano.

“¡OOOOOOOOH!”

“¡HAAAAAAAAA!”

Ambos hombres desataron sus espíritus de lucha al mismo tiempo. Un estallido de aullidos. En respuesta a que Suimei extendiera su palma con inscripciones mágicas, Eanru lanzó su puño. Inmediatamente después de la colisión de energía, se liberó una onda de choque explosiva que envió a Eanru a volar.

Cuando corrigió su postura y miró hacia arriba, vio que Suimei también había sido enviado volando, muy probablemente por la misma onda de choque.

¿Cuánto le haría bailar esta pelea al corazón? Eanru no había tenido una pelea tan atractiva desde el día en que nació. Pensar que sería bendecido en este momento con la magnífica e interminable pelea que había estado buscando todo este tiempo…

“¿Qué es tan gracioso?”

“¿Hmm? ¿Me estaba riendo? Aah, no, es solo una batalla como esta… ¿No te hace feliz?”

“Sí, está bien… Eres ese tipo de chico, ¿eh?”

Suimei Yakagi murmuró en voz baja algo sobre “maníacos de la batalla” con molestia. Era una forma justa de describir a Eanru, y aunque Suimei escupió esas palabras con repugnancia, fue un elogio inconfundible para los oídos de Eanru. Ser considerado un enemigo formidable por un oponente fuerte le dio sentido a la forma en que había vivido su vida hasta ahora. Fue validando.

Por tanto, esta batalla tuvo un significado. Esta era la verdadera razón de ser de Eanru. Su único pesar era que estaba sucediendo ahora. Fue pura casualidad que se hubiera visto envuelto en una pelea así en un lugar tan inesperado. Sin embargo, debido a que estaba en medio de una misión, no tenía tiempo para luchar hasta el final. Eso lo entristeció.

“Aah, está fuera de mi control…”

Parecía que su silencioso suspiro de lamento llegó a los oídos de Suimei. Suimei frunció el ceño, quizás desconcertado por el completo cambio de tono que se había apoderado del previamente emocionado Dragonnewt. Sin embargo, por alguna razón, no estaba disparando magia.

A pesar de que había estado disparando sin cesar hasta ahora y no mostraba signos de falta de aliento, aparentemente estaba tomando un breve descanso.

Era posible que simplemente estuviera preparando otro truco, pero concluyendo que lidiaría con lo que fuera, Eanru dio un paso adelante.

Desató una ráfaga de golpes consecutivos, pero el mago que tenía ante él parecía acostumbrado al combate a corta distancia.

Él esquivó hábilmente los golpes de Eanru. Para un mago, entablar combate a una distancia como esta era fatal. Pero no para Suimei. Ni siquiera se inmutó, dejando a Eanru una vez más asombrado.

Pero incluso si estaba lidiando con la situación de manera competente, era un pobre rival para Eanru, quien se especializaba en combates tan cuerpo a cuerpo.

Naturalmente, un humano nunca podría competir con la fuerza física de un Dragonnewt. Los brazos que estaba usando para protegerse de los golpes de Eanru se estaban poniendo rojos y magullados en un abrir y cerrar de ojos.

“Urgh…”

Mientras dejaba escapar un gemido, Suimei puso algo de distancia entre ellos. Cuando Eanru se abstuvo de perseguirlo, Suimei miró hacia atrás con una mirada perpleja.

“Es una sensación tan exquisita estar involucrado en una batalla difícil”.

“¿Eh?”

“¿No es así? Si es difícil lidiar con tu oponente, la pelea dura mucho más. Y luego, es posible probar todas las técnicas que ha estado fomentando”.

“… Embrujar a los demás con técnicas y ser correspondido es ciertamente agradable. Pero no en situaciones como esta”.

“Convenido. Vaya, ¿no somos pájaros del mismo plumaje?”

“No, mis quejas son diferentes a las tuyas. Eso es obvio”.

“Ese tipo de cosas es trivial”.

“… Ese es tu trato, ¿no? Eres una de esas personas que consigue rápidamente todo lo que no te interesa, ¿no es así? Eres realmente algo, en serio”.

“Hmph.”

Mientras se divertía con su conversación, incluso ahora, el sudor frío corría por la frente de Suimei. Pero había que decir que quizás era menos que antes. Era probable que él también se hubiera vuelto más fuerte para lograr sus objetivos en la pelea que tenía entre manos.

Aunque Suimei dijo lo contrario, sus conversaciones hasta este punto estaban en la misma longitud de onda, por lo que parecía que se había metido un poco en su elemento.

Incluso si intentaban llegar allí por diferentes razones, sus objetivos eran los mismos. Ese pico elevado que nadie podía alcanzar, y un sueño estimuló ese deseo… Ambos miraban lo mismo: sus sueños.

“Es difícil de conseguir, ¿eh? De verdad. Tienes un tipo de resplandor diferente al de ese hombre”.

“…?”

Al igual que una luz en la oscuridad era más deslumbrante que cualquier otra cosa, Suimei era brillante. Jillbert ciertamente había tenido razón en ese punto.

“En cualquier caso, seguro que hablas mucho”.

“Honestamente, me sorprendo incluso a mí mismo. Aunque hablar en medio de una batalla es el colmo de la locura… Aah, eso es todo, ¿no? Eso es lo que es esto. Esa cosa en la que te emocionas demasiado y empiezas a hablar mientras te cansas, ¿verdad?”

Esa conversación ociosa en el fragor de la batalla era algo en lo que Eanru nunca se había involucrado antes. Sin embargo, la razón por la que no pudo detenerse a pesar de sí mismo fue porque le resultaba difícil de entender. Eso lo hizo importante. Y si estaba demasiado expuesto a él, ya no querría destruirlo.

Inconscientemente, pudo haber estado tomando eso en consideración. Pero debido a que luchó por la destrucción, esto fue una tremenda contradicción para él.

Entonces, parecía que Suimei había terminado con su descanso. Eanru vio como los árboles caídos eran barridos y lanzados al aire con un rugido. Los troncos de los árboles de madera oscura eran gruesos y robustos. Si un humano fuera golpeado por uno, sería espantoso. Menos mal que Eanru no era humano.

“Tal juego ni siquiera me servirá como una distracción”.

Tal como él insinuó, pudo ver la sombra de Suimei lanzándose entre los gigantescos árboles. Eanru atravesó uno con su puño para ir tras él, pero Suimei usó esa abertura para atacar. Blandiendo una espada de plata, entró con una estocada, pero…

“Eso nunca funcionará”.

La punta de su espada alcanzó el pecho de Eanru, pero solo pudo perforar su ropa. No había forma de que una mera hoja hecha por un humano pudiera perforar la piel de un Dragonnewt. Entonces, ¿quién tenía la ventaja aquí?

“Tomaré ese brazo”.

Usando su mano como una espada, Eanru cortó el brazo derecho de Suimei Yakagi. Perder su brazo dominante fue el precio que pagó por atreverse a entrar en combate cuerpo a cuerpo con un Dragonnewt desprevenido. Su brazo derecho salió volando y la sangre comenzó a brotar del muñón que quedó atrás.

Desde la distancia, Eanru podía oír los gritos del héroe. Y ante él, pudo ver el rostro de Suimei retorcerse de angustia. Sin embargo, no titubeó ni retrocedió. Todo lo contrario. Dio un paso adelante como si tuviera una oportunidad para atacar.

Pero incluso esto estaba dentro del ámbito de las expectativas de Eanru. Golpear primero y sacrificar una parte de uno mismo para obtener una apertura era una táctica bastante común. Sin embargo, lo que hizo Suimei a continuación lo desconcertó.

Estaba moviendo el muñón de un brazo derecho que le quedaba.

Eso ni siquiera lo alcanzaría para golpearlo. No fue suficiente. ¿Había leído mal la distancia? No, tenía que ser un acto de pura desesperación. Ese fue un defecto humano. En lugar de pensar bien las cosas, priorizaron el ataque. Pero en ese momento, Suimei abrió la boca con calma.

“Aquí vamos.”

El brazo derecho cortado que estaba cayendo por el aire repentinamente cambió de trayectoria y saltó hacia Eanru. Al ver eso, no pudo evitar sonreír.

“¡Haha! ¿Así que ha llegado a esto?”

Había una emoción de alegría en sus palabras. Esta fue la primera vez en mucho tiempo que una técnica lo sorprendió completa y absolutamente. Pero las sorpresas no se detendrían ahí. El brazo voló de regreso a Suimei y se conectó donde había sido cortado.

“¡HYAAAAAH!”

Inmediatamente después de eso, se formó un círculo mágico entre el brazo y el muñón, y giró con un brillo verde. Luego pisó fuerte con el pie, plantándolo firmemente en el suelo. La tierra se hizo añicos debajo y hubo una onda expansiva de viento y maná. A partir de ahí, Suimei desató un ataque.

“¡U-Urgh!”

Su puño golpeó a Eanru directamente en la cara. Ni una sola vez pensó que un humano pudiera tener una fuerza tan destructiva en sus puños. La tierra bajo sus pies no pudo resistir la fuerza del golpe, y casi se derrumbó debajo de él cuando fue empujado hacia atrás.

Permaneciendo erguido, Eanru se llevó una mano a la mandíbula cuando finalmente se detuvo. Como para investigar el daño causado, estiró y se rompió el cuello. Luego, sin perder un momento más, Eanru dio un salto hacia adelante y se acercó a Suimei rápidamente.

“¿En serio? Eso apenas hizo nada…”

“Desafortunadamente, soy un ser bastante resistente”.

“A pesar de que tienes una forma humanoide, ¿no hubo ningún daño en el cerebro? Esta es una maldita estafa. Una estafa.”

Tanto esa queja como el dolor que recibió le hicieron sentir bien a Eanru. Empujó su cuello con la mano y lo giró mientras continuaba inspeccionándolo.

El hombre que le había dado un golpe tan inesperado ya estaba haciendo su siguiente movimiento, pero Eanru no pudo evitar ceder a la agradable sensación que brotaba de él y que no había sentido durante tanto tiempo. Mientras Suimei lanzaba un hechizo, Eanru pateó el suelo, creando una gran nube de polvo.

“¡Tú vándalo! ¿Copiando a un humano ahora?”

“De ningún modo. Las cortinas de humo son una técnica valiosa”.

La nube de polvo ocultó completamente a Eanru. No podía ver, pero con esto tampoco podía ser visto. Abandonando todos los pensamientos innecesarios, dedicó sus sentidos por completo a leer las presencias a su alrededor. Su oponente era un mago que tenía una gran cantidad de poder. Si seguía el maná, podría localizar con precisión a Suimei incluso sin sus ojos.

O habría podido hacerlo si no se hubiera multiplicado de repente. “¿Se separó? No, ¿multiplicado?”

“Se llama Replicación Rápida”.

No era solo su presencia de maná lo que se había multiplicado. Eanru pudo empezar a ver varias figuras a través del polvo. Era como si varios Suimeis hubieran aparecido de repente. Y momentos después de que Eanru lo escuchó hablar, el suelo de repente se movió y se partió.

“Qué—”

Eanru tropezó. No supo qué pasó. Incluso mientras repetía la situación en su mente, no podía decir de dónde había venido el hechizo. El suelo que había sido hervido por la magia de fuego de Suimei no era tan quebradizo y frágil como para desmoronarse así.

Mientras enfocaba rápidamente su mirada justo debajo de sus pies, pudo ver la luz del maná. ¿Cuándo se puso en marcha ese círculo? Cuando miró hacia arriba, pudo ver a Suimei sonriendo.

Ya veo, ese hechizo de luz de antes…

Debe haber sido un efecto de esa lluvia de luz. Suimei no solo estaba atacando con eso. Estaba sembrando círculos mágicos en la tierra.

Antes de que comenzara la pelea, Suimei le había dicho claramente a Eanru que era el estilo de un mago atrapar a un oponente con la guardia baja.

Ciertamente, esta cadena de ataques inesperados fue una táctica espléndida. Eanru no resultó herido en absoluto por el suelo que se movía debajo de él, pero ahora se vio obligado a prepararse y le robaron la movilidad. Y así, fue un blanco fácil para el próximo ataque de Suimei.

La tierra comenzó a levantarse a su alrededor. Enroscándose como un vórtice, se estiró hacia el cielo y luego se estrelló contra él. Pensó que seguramente Suimei sabría mejor que pensar que un ataque como este funcionaría en él,  pero Eanru se sorprendería una vez más. No fue exactamente un ataque.

“Ground Seal”.

Todo lo que Eanru podía ver era una incesante avalancha de tierra. Y en poco tiempo, lo cubrió por completo.

***

Cuando la nube de polvo se asentó, el suelo cayó suavemente en forma de remolino. Al ver a Eanru hundirse bajo el hechizo Ground Seal, Suimei pudo escuchar a Hatsumi gritar en exaltación por su aparente victoria.

“¡Lo hiciste!”

“Nop.”

Era demasiado pronto para declararlo como una victoria. Hatsumi, sin embargo, estaba bastante desconcertada por la disparidad entre lo que estaba viendo y lo que decía Suimei. Suimei levantó la mano y la instó a retroceder, y justo cuando lo hizo, el remolino de tierra se abrió con un rugido atronador. Lo que se elevó hacia el cielo desde abajo no fue otro que Eanru.

“Cuando te escuché decir que te apetecía atacar a la gente con la guardia baja, pensé que te referías a ataques sorpresa. Pero ahora veo que esto es lo que quisiste decir, ¿no es así?”

Alabando a Suimei, Eanru habló en un tono refrescante como si no hubiera sido herido en absoluto. Apretando los dientes en secreto para ver a su oponente así, Suimei respondió frívolamente.

“Es la diferencia entre la cobardía y la elegancia”.

“Dios mío, he aprendido mucho de ti. Dado que es estándar para los magos cantar y disparar, parece que mis acciones se han vuelto inesperadamente monótonas y aburridas. Pero… también es reconfortante sorprenderse de vez en cuando”.

“Bueno, de nada”.

El tono de voz de Suimei dejó en claro que lo que realmente estaba diciendo era “cállate”. Eanru lo miró inquisitivamente, con un brillo peligroso en sus ojos topacio.

“Te diste cuenta de que no estaba derrotado por eso ahora, ¿verdad? ¿Por qué no preparó nada más para el seguimiento?”

“¿Quién sabe?”

“No pensé que eras del tipo que pasa por alto una oportunidad así. Lo mismo sucedió cuando tu magia se detuvo de manera antinatural antes. En ese caso… debe haber una razón por la que no pudiste disparar”.

“…”

“Por lo que parece, parece que di en el blanco”.

Al ver la expresión cada vez más segura de Eanru, Suimei una vez más apretó los dientes. La suposición de Eanru dio en el blanco. Tal como dijo, la razón por la que Suimei había dejado de disparar magia era porque no podía. Debido a su uso repetido de magia, la entropía en el área estaba llegando a su límite.

Como tal, no pudo asestar un golpe decisivo. Usar simplemente algo de magia a medias que no desencadenaría el fenómeno de fusión de la magia sería completamente inútil. Por eso había elegido un hechizo que al menos le daría algo de tiempo.

Magia entretejida usando la teoría moderna de magia podría lanzarse rápidamente. Sin embargo, también aumentó considerablemente la entropía, creando una especie de cuello de botella. Tenía que haber un intervalo entre hechizos, y cuando no lo había, un mago podía terminar a un solo paso del desastre como Suimei estaba ahora. Sabía los riesgos de lo que estaba haciendo, pero, sin embargo, caer en este tipo de situación era molesto de todos modos.

Después de limpiar la suciedad y la arena de su ropa, Eanru tomó una vez más una postura de combate. Él, a diferencia de Suimei, que se había lastimado todo este tiempo, estaba tranquilo y no tenía una sola herida que mostrar durante toda la pelea. Se veía verdaderamente imparable.