Ore ga Heroine o Tasukegite

Volumen 16

Capitulo 9: La Historia De Rekka Namidare

Parte 7

Era la misma técnica que había dejado fuera de combate a Yuuhi y a las demás.

“…”

“…”

El Rekka del futuro y yo nos miramos a los ojos. Había escasos setenta centímetros entre nosotros. Ambos estábamos en un rango de golpes el uno del otro. Este golpe lo decidiría todo.

“¡Aaaah!”

Dejé todo a mi impulso mientras corría y dejé volar mi puño.

“…”

El Rekka del futuro lo vio todo. La trayectoria de mi puño. La posición de mi barbilla. Cómo noquearme en un solo movimiento.

Vio a través de todo y preparó su contraataque.

Pero había tirado todo lo que tenía en mi puñetazo, lo que significa que no tenía nada con qué defenderme. L estaba fuera ahora también, así que ni siquiera su barrera pudo salvarme.

Todas las otras heroínas a mi alrededor fueron derrotadas. No quedaba nadie a la vista para ayudarme… Pero justo en ese momento, alguien me dio un pequeño empujón desde atrás y todo mi cuerpo se inclinó hacia adelante, haciendo que mi puño se acelerara más rápido de lo que esperaba Rekka del futuro.

“?!”

Vi que la expresión de Rekka del futuro cambiaba en estado de shock, pero mi mente estaba en otra parte.

Así que también entendiste el mensaje secreto de L, ¿eh?

¿A quién engañaba? Probablemente se había dado cuenta antes que yo. Después de todo…

Realmente son hermanas, ¿eh, R?

La otra persona a la que se refería L cuando dijo “nosotras” no era otra que R, mi compañera de lengua afilada que se había vuelto invisible para todos excepto para mí para poder entrar en el mundo Sith. Y sabía que Rekka del futuro no podía verla por lo que había dicho después de noquear a Yuuhi la primera vez.

“Ahora… todo lo que queda eres tú”.

Si pudiera ver a R, habría sabido que era más que yo con quien tenía que lidiar. Entonces, al final, R fue el verdadero eje de nuestra sorpresa. Después de despojarla de todas sus funciones de Kiklim, todo lo que realmente podía hacer ahora era interactuar conmigo… Pero eso fue suficiente. Eso le dio el poder de darme una gran palmada en la espalda justo cuando la necesitaba.

Por supuesto, luchando contra alguien tan ridículamente escuálido como yo, el Rekka del futuro probablemente había bajado la guardia. Era abrumadoramente fuerte y creía que podía ver todo lo que pudiera representar una amenaza para él.

Probablemente tenía el alcance de mis brazos fijados al milímetro. Probablemente estaba seguro de que su contraataque sería el final de las cosas. Lástima que no supiera nada de R.

“¡Hyah!”

Mi puñetazo enérgico y con cuerpo se hundió en la nariz del Rekka del futuro, enviándolo a volar. No importa lo duro que fuera… Con la guardia baja de esa manera, ni siquiera él podría hacer frente a un golpe de pleno poder.

“Oww… Debería haber estado listo para eso. Te dije que te iba a engañar”.

Me froté el puño adolorido mientras me dirigía al Rekka del futuro, que yacía boca abajo en el suelo.

“…”

Luego me miró y se puso de pie, aparentemente imperturbable. Ni siquiera estaba sangrando… Dios mío, ¿él también tenía una nariz de cyborg?

“¿Es todo lo que tienes?”

“Sí, creo que he terminado aquí. Y esta es tu derrota”.

“¿Cómo es eso?”

“Mira a tu alrededor.”

El Rekka del futuro ladeó la cabeza con una expresión que dejó en claro que no entendía lo que quería decir. Solo le había dado un puñetazo y ni siquiera le había hecho un rasguño. Además, probablemente ya se había enterado del truco. No podría golpearlo por segunda vez.

“…?”

Mi audaz declaración de victoria a pesar de todo eso hizo que el Rekka del futuro ladeara aún más. Yo, sin embargo, no le presté atención y miré alrededor de la arena. Todos estaban inconscientes o dormidos, pero mis orgullosas heroínas estaban a nuestro alrededor.

“¿Bien? ¿No son increíbles? Con su ayuda, incluso un humano normal como yo puede golpear al tipo más fuerte del universo al menos una vez”.

“Pero, ¿qué tiene eso que ver con…?”

“Sé a qué le tienes miedo”.

Al escuchar esas palabras, el Rekka del futuro se congeló en el acto. Lo que el Rekka del futuro más temía… Tenía miedo de perder su exceso de poder Namidare y perder a las heroínas que ya había salvado. Pero además de eso…

“Una vez que el pasado cambia y el número de heroínas que has salvado disminuye, también lo hará el número de poderes que tienes. Y te preocupa que una vez que se debilite, no podrá salvar a nadie más. ¿Cierto?”

“…”

“No tienes que admitirlo. Ya conozco la respuesta. Somos iguales, después de todo”.

Conocía sus debilidades mejor que nadie. Todo lo que tenía que hacer era pensar un poco hacia adelante y ponerme en el lugar de mi futuro yo… No fue tan difícil. Y lo entendí totalmente, yo también tendría miedo de lo mismo.

“No es ser débil lo que te asusta. Es la idea de no poder salvar a nadie lo que te aterroriza”.

“… Simplemente no pude decirlo en voz alta por lo patético que suena”, dijo finalmente Rekka del futuro en un tono deliberadamente autocrítico. Luego levantó la cabeza y me preguntó con una expresión seria: “¿Y bien? ¿Pensaste que saber eso me haría dudar en vencerte?” Una vez más, asentí sin dudarlo.

“Por eso te mostré el poder de todas”.

“…!”

El Rekka del futuro se había vuelto demasiado fuerte. Usó su poder para hacer todo por su cuenta. Siempre estaba solo, y por eso había olvidado lo que lo hacía fuerte en primer lugar.

“Incluso si ya no eres el más fuerte, con su ayuda… ¡serás invencible!” Recuérdalo. Y piensa en ello. Al principio, no podías salvar una sola historia por tu cuenta, ¿verdad?”

“Sí… Sí, tienes razón en eso”. El Rekka del futuro asintió a regañadientes, aparentemente todavía sin estar convencido. “¿Pero qué pasará con las heroínas que pierda cuando pierda mi poder?”

“Expliqué mi nuevo poder, ¿no?” Dije, respondiendo a su pregunta con una de las mías. “Es la capacidad de arrastrar heroínas a la historia de Rekka Namidare. Y si yo lo tengo, naturalmente, tú también lo tendrás. Con esto, podemos atraer a cualquiera de las heroínas que necesitamos para ayudar a salvar una historia”.

“?!”

El Rekka del futuro finalmente se dio cuenta de lo que estaba pasando y jadeó. Hasta ahora, el poder de Namidare había sido algo puramente pasivo.

Solo conociendo a una heroína e involucrándome con ella podría convertirme en el personaje principal de facto de su historia. Pero terminé con eso. Todo ello.

En lugar de esperar a que pasaran las cosas, quería el poder para hacer algo… Y ahora lo tenía. Podría llamar a mis amigas a mi lado en cualquier momento que necesite su ayuda. Y juntos podríamos salvar a cualquiera. Ese era mi verdadero poder.

“Además, en el futuro, tendrá acceso al translocador de tiempo de la doctora. Con eso, puedes salvar a cualquier heroína que quieras, sin importar la hora o el lugar”.

Una vez que el poder Namidare de Sith fuera devuelto a su mundo, el pasado del mundo de Maine se alteraría en consecuencia.

El Rekka del futuro esencialmente perdería todas las heroínas que había salvado con el poder de Namidare que no era suyo para empezar. Pero si usaba el translocador del tiempo, podría buscarlos y salvarlos de nuevo con su — nuestro— nuevo poder para arrastrar heroínas a nuestra historia.

“Con esto, ambos mundos, todas las heroínas, e incluso tú, yo y Yuuhi podemos salvarnos. ¿Entonces qué dices? ¿Aceptas la derrota ya?”

En el momento en que le pregunté eso, el Rekka del futuro cayó hacia atrás con un fracaso.

“U-Uh, ¿hey?”

“Tú ganas… admito la derrota total”, susurró el Rekka del futuro, mirando al cielo desde donde yacía en el suelo como un globo desinflado. “Pero me pregunto… ¿Por qué tú y yo somos tan diferentes?”

“No creo que seamos realmente tan diferentes de corazón, ¿sabes? Olvidaste algunas cosas aquí y allá”.

“¿Olvidé algunas cosas, eh…?” El Rekka del futuro suspiró profundo y pesado antes de darme una sonrisa amarga. “Pero me estás dejando todo el trabajo pesado, ¿no es así? Pedirle a alguien que salve a varios cientos de heroínas de nuevo es mucho para dejar en su regazo, ya sabes”.

A su costa, ambos nos reímos mucho.

“Entonces, ¿te doy una mano? O, espera… ¿No me digas que no puedes recordar a todas y cada una de tus cientos de heroínas?”

“Como si eso pudiera olvidarlos alguna vez,” el Rekka del futuro respondió de inmediato. “Además, ¿quién necesita tu ayuda? Son mis heroínas”.

“¿Eso es así?”

Asentí y no dije nada más. Y así concluyó nuestra batalla.

***

Después de la batalla, las diosas observadoras se acercaron. “Yuuhi… ¿Estás bien?”

“Si…”

Sith se estaba ocupando de la ahora consciente Yuuhi, dejándome ocuparme de la otra diosa, Maine.

“Vaya, qué giro fue eso. Nunca esperé que realmente ganaras. Supongo que te subestimé como Namidare”.

“Gracias…”

Realmente no me gustaba tratar con Maine. Había algo en la forma en que actuaba y hablaba… Realmente, ella era la causa de todo este problema en primer lugar. Supongo que simplemente la resentí por eso.

“Pero sabes lo que esto significa, ¿no? Al devolver el poder de Namidare a los Sith, los niveles de felicidad de los dos mundos volverán a equilibrarse y volveremos al punto de partida”.

“Entonces deberías cancelar tu estúpido juego”, espeté. “¿Por qué incluso empezaste un juego así? Si estás tan aburrida, hay muchos otros juegos que puedes jugar”.

“Bueno…” Allí, Maine se volvió hacia Sith y rompió el contacto visual conmigo. “Sith te dijo que las deidades no podemos evitar crear mundos, ¿verdad?”

“¿Eh? Bueno sí. Algo sobre biología y todo eso”.

Es curioso… Maine no estaba cuando tuvimos esa conversación. ¿Las deidades también lo oían todo?

“Entonces, ¿qué crees que le pasa a un dios que deja de crear mundos?” ella preguntó.

“?”

“Si un dios deja de crear mundos, desaparecen”.

“¡¿Eh?!”

La impactante revelación me dejó aturdido por el desconcierto.

“¿Q-Qué? Pero Sith dijo que no había ninguna razón en particular para hacerlo”.

“Los humanos y los animales también crean descendencia instintivamente,

¿no? Si luchan contra ese instinto y dejan de reproducirse, esa especie se extinguiría”.

“…”

Entonces, ¿eso es lo que significaban todas esas cosas sobre biología…?

Maine continuó sin mirarme a los ojos, “Hemos estado creando y terminando mundos durante mucho tiempo… Antes de que creáramos nuestros mundos actuales, los Sith estaban en problemas reales. Ella estaba a punto de desaparecer”.

“… ¿Por eso comenzaste el juego?”

“Sí, eso es correcto. Quería que recuperara su pasión por hacer mundos”.

“Entonces, ¿por qué querrías destruir su mundo ahora?”

Basado en todo lo que había dicho antes de la pelea, Sith ya había redescubierto su amor por la creación de su mundo. Entonces, si ese era el objetivo de Maine, entonces ella ya había obtenido lo que quería. Pero Maine negó con la cabeza.

“No pensé que destruir su mundo sería un final tan malo. Si hiciera eso, ella me detestaría y me desafiaría a otro juego… para vengar su mundo y destruir el mío a su vez”.

Escuchar el verdadero objetivo de Maine me hizo estremecer. Hombre… Qué diosa, ¿verdad?

“¿Entonces tu hermana pequeña significa más para ti que todas las vidas que destruirías en el proceso?”

“Por supuesto. Ella es la única hermana que tengo”, respondió Maine sin dudarlo.

Allí, finalmente se volvió para mirarme de nuevo. En sus labios había un leve atisbo de sonrisa.

“Ni tú ni yo somos verdaderos héroes, ¿sabes? Simplemente estamos haciendo lo que podemos para proteger a las personas que son preciosas para nosotros”.

“Por Dios, entiendo lo que estás diciendo… Pero, por favor, elige un plan menos destructivo la próxima vez”.

“Hmph, lo consideraré”.

Maine parecía haber dicho su parte y se fue de mi lado para abrazar a su hermana. Fue una muestra entrañable de amor fraternal, aunque me preocupaba qué podría significar exactamente el amor de Maine para los Sith en el futuro.

“Dios, qué diosa más aterradora. Una yandere de libro de texto, ¿no te parece?” R dijo desde donde estaba flotando a mi lado.

Sentí como si me hubieran quitado la vida.

“Por favor, sálvame de la diosa yandere que arrastra mundos enteros a sus juegos…”

Entonces recé para no volver a terminar en una historia como esta. Espera, si oro por eso, entonces el que lo oiga será…

La desesperación que pesaba sobre mí hizo que mis hombros cayeran aún más de lo que ya lo habían hecho.

“Rekka…”

“¿Hm?”

“En realidad estaba pensando en algo”.

“¿Qué es?”

“Por qué tú y el Rekka del futuro son tan diferentes”.

Las palabras de R despertaron mi interés. También era algo que me había preguntado muchas veces antes. Ya no importaba mucho, pero todavía tenía curiosidad.

“¿Llegaste a alguna conclusión, R?”

“Bueno, todo es principalmente una conjetura”.

“¡Vamos! ¡Sólo dime!”

“Está bien, está bien… Tienes una cantidad excesiva de poder Namidare, el poder de cambiar el destino, ¿verdad?”

“Si. Aunque ahora está disminuyendo gradualmente”.

Como prometimos antes de la batalla, Maine ahora estaba devolviendo el exceso de poder de Namidare al mundo Sith. Aparentemente, era un poder altamente condensado, y tomaría algún tiempo dispersarse por todo el mundo tal como estaba, lo que significa que tenía que quedarme aquí en el reino espiritual durante unos días mientras eso sucedía. Eso me dio mucho tiempo para discutir las cosas con R.

“Basado en la forma en que solo tú pudiste alterar el pasado, mi conjetura es que tu poder de Namidare que cambia el destino también puede afectar el tiempo y el espacio”.

“Ya veo, ya veo.”

“Así es como, como usted mismo lo vio, la Rekka del futuro ganó demasiado poder y llegó a un callejón sin salida”.

“¿Eh? Pero eso es—”

“Sí, se corrigió recientemente. Lo sé”, dijo R, levantando una mano para detener mi interrupción. “Sin embargo, como dije, creo que el poder de Namidare puede afectar el espacio-tiempo mismo. Entonces, tal vez en algún lugar de una línea de tiempo diferente, o incluso en un mundo diferente que no podamos percibir… Tal vez haya un Rekka Namidare en algún lugar que se dio cuenta de que las cosas no podían seguir de esta manera”.

R me estaba comparando con mi yo futuro y Yuuhi.

“Quizás ese pensamiento produjo un cambio… Un cambio que se manifestó al comienzo de la historia de Rekka Namidare. Un cambio que alteraría para siempre su vida. Y tal vez, solo tal vez, así es como llegamos a donde estamos ahora”.

“Umm, entonces… En otras palabras…” Me sacudí la cabeza tratando de romper la supuesta conjetura de R y llegar al fondo de la misma. “Lo que estás tratando de decir es que… ¿Quizás en algún otro lugar del universo, algún otro yo cambió mi destino?”

“Como dije, todo es solo una conjetura”.

R se detuvo allí para ajustarse el sombrero.

“Bueno, ¿a quién le importa eso de todos modos?” dijo, las comisuras de la boca se volvieron ligeramente hacia arriba. “Porque como puedes ver, todo se ha arreglado pacíficamente gracias a ti ahora”.

“Bueno… tienes razón en eso”.

Pensando que la esencia de lo que había dicho era correcta, me encogí de hombros y le devolví la sonrisa de manera similar.