Kenja no Deshi wo Nanoru Kenja (NL)

Volumen 1

Capitulo 8: Varita de Plata

Camino forestal en la carretera que conduce desde el Cuerno de Plata al Lago Lunático.

Un solo carruaje conducía rápidamente por la única carretera pública pavimentada que había mientras podía oírse un fuerte sonido de herraduras.

Este carruaje, estructurado para ser arrastrado por dos caballos, que se usaba para transportar personas importantes cuando se requería velocidad, se denominaba “carruaje de larga distancia”. Aunque no era algo que se utilizara normalmente para los huéspedes, mostraba la rapidez con que el rey Salomón quería conocer a Mira.

Sentada dentro de este majestuoso carruaje y mirando las vistas de los alrededores, Mira dijo: “Mm, ¡esto es increíble, qué rápido!”, disfrutando de su primer viaje en carruaje.

Normalmente los jugadores usaban Continentes Voladores cuando querían viajar largas distancias, pero ahora, la opción en el menú para usarlos ya no estaba disponible. Solía ser uno de los comandos del sistema que aparecía en el menú, pero el botón de comando ya no estaba allí.

Sin embargo, incluso si el comando todavía estuviese allí, era dudoso si sería posible utilizar los Continentes Voladores en este mundo. Si era igual que la situación que la rodeaba y todo se volvió tan real, entonces no había ninguna duda al respecto. Como tal, en su lugar, Mira decidió disfrutar de la situación.

Han pasado casi dos horas desde que abandonaron el Cuerno de Plata, Mira parecía inquieta y su mirada vagó por todas partes. La razón de eso, era el fenómeno natural que ya había enfrentado el día anterior.

Más aún, el hecho era que las pequeñas vibraciones del carruaje habían estimulado su abdomen inferior haciéndole sentir más que nunca la inminente crisis. Debido a eso, finalmente incapaz de soportarlo, Mira se asomó al asiento del cochero.

“Mm hey, ¿hay un tocador en los alrededores?”

“Toca… ¿tocador? Nunca antes he oído hablar de eso, ¿es algún tipo de tienda? Estamos casi en el lago Lunático, una vez que lo alcancemos, le compraré lo que necesite.”

“No, no es una tienda… pero sí, podría haber un tocador en una tienda, especialmente si es un restaurante…”

“Un restaurante, eso es. Ahora que lo pienso todavía no hemos desayunado. Entendido, podría ser un poco tarde para un desayuno, pero comamos algo una vez que lleguemos al Lago Lunático.”

“¡Espera, solo estaba bromeando! ¡Quise decir un retrete, RETRETE!”

“Unghh… mis disculpas, pero no sé si hay una tienda llamada así en Lago Lunático.”

“¡Vamos! ¡Me refiero a un baño, un aseo! Arhh… ya no me importa, solo detente aquí y terminare esto rápido a la sombra de un árbol.”

“Eh… Aa… ¡AHH! ¡Así que eso es lo que querías decir!”

Si fuera el cuerpo que solía tener, sería capaz de soportarlo un poco más, pero su cuerpo femenino lo hacía aguantar menos, estaba en su límite, y Mira lo sintió instintivamente, a este ritmo no podría contenerse.

Ella, con impaciencia, golpeó la espalda del hombre en uniforme militar que actuó como cochero, Galet, y luego señaló un lugar aleatorio en el bosque, lo que le impulsó a detener el carruaje.

Los dos caballos que combinaron su respiración gradualmente se ralentizaron. Sin embargo, Mira no esperó hasta que el carruaje se detuviese por completo y simplemente saltó, se trasladó a un árbol cercano y levantó el dobladillo de su falda.

Pero entonces, vio los bloomers que cubrían su abdomen inferior y su movimiento se detuvo, pero solo el de una de sus manos. Ella pisoteó el suelo sin descanso mientras soportaba el impulso.

(“¿¡Cómo se supone que trate con esto oooff!?”)

Aunque ella tenía prisa, los bloomers se interpusieron haciéndola perder tiempo y fuerzas. Por supuesto, desde la perspectiva de Mira, era la primera vez que usaba ese tipo de ropa interior, y como no se la puso por su cuenta, no sabía cómo funcionaba.

No tenía una banda elástica en la cintura, y cuando intentó deslizarla, sus huesos pélvicos le impidieron hacerlo.

Por un momento pensó en arrancarse la prenda, pero cambió de opinión estando a punto de hacerlo. Ella no podía simplemente arrancar algo que era prestado.

Pero más aún, no podía hacerlo sobre en algo que se le prestó, por lo que comenzó a sentirse aún más impaciente.

Mira puso un dedo en los bloomers y trató de tirarlos hacia un lado, pero no funcionó.

Mientras sentía que el sudor salía por todos los poros de su cuerpo, miró el lugar donde ponía sus delgados dedos. Y luego se preguntó: “¿Por qué no me di cuenta de algo tan obvio?” Y sonrió irónicamente al recordar lo mucho que se asustó.

Justo en el lugar donde tenía sus dedos en la cintura, había una cuerda atada en un moño. Fue algo fácil de detectar una vez que se calmó, pero debido a las primeras vivencias que experimentó en este nuevo cuerpo al que no estaba acostumbrada y la nueva situación, la velocidad de procesamiento de su cerebro había disminuido. No es de extrañar.

Sabiendo cómo funcionaba, no quedaban problemas, pero ya había alcanzado su límite. Mira desató rápidamente la cuerda, bajó los bloomers hasta sus rodillas y se agachó, luego se sintió aliviada al sentir una sensación de liberación.

Después de superar el problema por segunda vez, Mira pensó que había dominado su nuevo cuerpo, pero rápidamente se dio cuenta de que había cometido un gran error. Cuando estaba a punto de levantarse los bloomers, recordó que las mujeres se limpian a sí mismas después de terminar.

(“¿Qué debo hacer?”)

Ella no tenía ningún papel ni nada que pudiera servir como sustituto. Por si acaso abrió la caja de artículos, pero aparte de los alimentos, solo encontró artículos y materiales relacionados con la Refinación de Energía.

Después de cerrar el cuadro de elementos, Mira comenzó a buscar algo en el entorno que pudiera funcionar como sustituto. En medio del bosque, vio pasar la luz a través del follaje y pudo escuchar a pequeños seres vivos emitir sonidos de susurros. Luego, entre las malas hierbas, vio flores coloridas.

Una vez que terminó de mirar el bosque, Mira tomó una flor blanca con pétalos grandes y se agachó de nuevo para usarla en lugar de papel.

“Nmm, lo siento, te hice esperar.”

Mientras Galet acariciaba alegremente a los dos caballos, Mira apareció repentinamente detrás de él y habló con voz animada.

“No, lamento no haberme dado cuenta.”

Galet se dio la vuelta y cambió su expresión a una seria, luego bajó la cabeza y se disculpó. “Mm, no me importa. Fue mi culpa por no expresarme como era.”

Mira estaba feliz por su propio crecimiento e hizo una expresión brillante. Al ver eso, Galet se sintió aliviado y abrió las puertas del vehículo de pasajeros.

“Primero amos a desayunar en Varita de Plata.”

“Mm-hm, hagamos eso.”

Mientras Mira se sentó en el carruaje, Galet comprobó el estado del arnés y saltó al asiento del cochero.

Alrededor de una hora después del incidente. El carruaje había avanzado suavemente y estaban cerca de alcanzar el Lago Lunático. Sin embargo, lo único que iba bien era el ritmo de avance del carruaje porque Mira enfrentaba una angustia que ni siquiera imaginaba.

(“Lo que sea que esté pasando, es punzante y palpitante.”)

Dentro del carruaje, rodó sobre el asiento, sintiendo un dolor ardiente en la ingle que nunca antes había sentido.

Cuando comenzó a sentir malestar, según la ubicación, primero pensó que era un problema específico de la mujer.

Sin embargo, el dolor creció gradualmente hasta que finalmente fue incapaz de soportarlo y vio dentro de sus bloomers para confirmar la fuente de la incomodidad. Allí, ella se dio cuenta de la razón de ello.

(“Debe haber sido venenoso…”)

La razón que se le ocurrió fue ese pétalo. O más bien, no había otro candidato posible. Aunque si se tratara de un problema específico de la mujer, no podría siquiera imaginar qué podría ser.

Después de adivinar qué era, Mira busco en la caja de elementos para ver si había algo que pudiera usar. Allí, ella seleccionó un determinado artículo de entre los que siempre mantenía con ella y lo sacó.

Era un elemento de curación llamado “Ungüento de uso Múltiple” que era capaz de eliminar estados anormales y hasta cierto punto curar heridas.

Mientras sentía una ligera resistencia, Mira se acurrucó en una esquina del carruaje y, llena de esperanza, comenzó a aplicar el ungüento, luego esperó a que hiciera efecto.

Poco después, su predicción demostró ser correcta y el ungüento logró eliminar los síntomas del envenenamiento causado por el pétalo, desintoxicando a Mira.

Aliviada, se dio la vuelta en el asiento del carruaje y murmuró: “He tenido suficiente…”

Unos diez minutos después del incidente del pétalo. El carruaje se detuvo suavemente y Galet se asomó dentro del carruaje desde el asiento del cochero.

“Mira-sama, hemos llegado a Varita de Plata. ¿Vamos a un restaurante? ¿O debería comprar algo para ti?”

Mira pensó por un momento y… “Esta vez podría ir a un restaurante.”

Mientras que normalmente ella decidiría inmediatamente que le trajeran algo, esta vez actuó diferente.

Hasta ahora ella había estado viviendo una vida en la que la realidad virtual reemplazó a la mayoría de su vida diaria. Era una época en la que era raro caminar bajo el cielo abierto, donde todo empezaba en el trabajo y terminaba en la realidad virtual, incluso los artículos comprados se enviaban a casa.

Sin embargo, este mundo era diferente. Mira caminó por el bosque, se encontró con gente, y hasta hace nada un carruaje se meció debajo de ella. Cuando se dio cuenta de esto, pensó que la vida actual era abrumadoramente inconveniente en comparación con la anterior. Sin embargo, ahora ella comenzó a disfrutar de todo.

Tener todo demasiado conveniente era algo que hacía que un humano cerrara su corazón, es lo que Mira sentía, y pensando que quería experimentar tantas cosas como fuera posible, bajó del carruaje y se dirigió directamente hacia el cielo azul.

Varita de Plata. Era una ciudad situada a mitad del camino entre el Cuerno de Plata y el Lago Lunático, estaba ubicada en el valle entre dos cadenas montañosas y era conocida por ser una ciudad de agricultores, silvicultores y mineros.

Debido a que estaba ubicada entre la capital y la ciudad con la principal potencia militar del país, logró convertirse en una ciudad bastante grande con un comercio floreciente.

El lugar donde se encontraba Mira en ese momento era un estacionamiento en el distrito comercial de la ciudad. En un amplio jardín había varios establos, uno al lado del otro, donde se estacionaban los carruajes.

Aunque normalmente los estacionamientos requerían el pago de una tarifa, el estacionamiento en el que se detuvo el transporte de larga distancia era el estacionamiento exclusivo del reino que no la exigía. En otras palabras, era un estacionamiento para los carruajes utilizados por la realeza, los nobles y otras personas relacionadas con ellos.

Por lo tanto, no era de extrañar que reunieran miradas de personas en los estacionamientos y en los alrededores.

Pero aun así, aparte de eso, la chica que rezuma un ambiente especial llamo bastante la atención de las personas. Tenía la piel blanca y brillante, cabello plateado, ojos de voluntad fuerte y estaba vestida con una túnica cubierta con cintas. La gente se quedó sin palabras al ver la apariencia de Mira. O más bien, no pudieron encontrar las palabras adecuadas para describir a esta chica.

Rodeada por el paisaje de Varita de Plata, la ciudad rodeada de montañas, Mira miró hacia el cielo y estiró todo su cuerpo para aflojar su tensión.

En la esquina de su visión vio a un pájaro volando horizontalmente a quien persiguió con la mirada, luego miró a varios lugares en el bosque donde los pájaros habían ido y también los persiguió con los ojos. En poco tiempo, su cuerpo comenzó a girar sin que Mira se diera cuenta de ello.

Al escuchar la voz de Galet en la distancia mientras él procedía con los trámites, Mira finalmente bajó la mirada y se dio cuenta de que una atmósfera anormal estaba a la deriva en su entorno, así que miró hacia otro lado, hacia el césped.

(“Me están mirando. Deben estar riéndose de mi ropa, estoy seguro de eso.”)

No había forma de que su apariencia, como la de un personaje de anime, pudiera encajar en este mundo de fantasía. Mira asumió eso, y cuando trató de escapar de las miradas de la gente, Galet terminó de hablar sobre los trámites y regresó.

“Lo siento por la espera. ¿Tienes algo que te gustaría comer, Mira-sama?”

Cuando Galet le preguntó esto, Mira intentó esconderse detrás de él y respondió con “vamos con tu recomendación”. Y para alejarse de este lugar tan pronto como sea posible, ella le empujó la espalda.

“En ese caso, te guiaré a mi lugar habitual.”

La visión de la chica golpeando la espalda de Galet para apurarlo a hacer algo hizo que la gente se sintiera reconfortada como si estuvieran viendo a un padre y su hija.

Después de salir del estacionamiento, Mira y Galet entraron a la calle principal, y finalmente se movieron a un carril antes de llegar a una casa que también era un restaurante.

“Es este lugar, puede ser pequeño, pero te garantizo el sabor.”

Mira alzó la vista hacia el edificio de madera. El nombre de la tienda “Casa de la tarde en la esquina de la calle” estaba escrito con letras grandes en las puertas batientes del edificio.

Las puertas eran del tipo que a veces se podían ver en las películas del salvaje oeste, que permitían ver bien dentro del restaurante, pero con la altura de Mira solo podía ver el techo.

“Vienes por primera vez en mucho tiempo y consideras que nuestro lugar es pequeño, seguro que eres grosero.”

De repente, una voz femenina los llamó desde atrás haciéndolos dar la vuelta. Allí, había una mujer de unos veinte años que llevaba una cesta con comestibles en ambas manos, y que miró a Galet. Aunque simple, era una belleza con el cabello castaño fluyendo sobre sus hombros por debajo de un pañuelo.

En el delantal blanco-azul que llevaba puesto estaban bordadas las palabras “Casa de la tarde en la esquina”, demostrando que ella trabajaba en esta tienda.

“Oh, Shelly. Ha sido un tiempo.”

“Realmente lo ha hecho, hay que ver. Tienes que aparecer más a menudo… ¿hm? ¿¡Quién es esta chica!?”

Después de colocar la cesta con comestibles en el suelo, levantó la vista justo al lado de Galet y su mirada se detuvo en Mira. Luego levantó la mano de forma espontánea, la puso sobre la cabeza de Mira y la acarició por todas partes.

“¡Qué, detente!”

Apartando la mano de Shelly, Mira concluyó que esta mujer que estaba delante de ella era del tipo que la trataría como a una niña, por lo que se escondió detrás de Galet y lo usó como escudo.

“¡Esta chica es tan linda!”

Shelly vio a Mira por encima del hombro de Galet, ella estaba en guardia y recordaba a un animal pequeño, lo que estimulo aún más los instintos maternales de Shelly.

“Esta es Mira-sama.”

“Heee, así que te llamas Mira-chan. Qué linda. Mira-chaaan.”

La expresión de Shelly se aflojó aún más y lentamente se acercó a Mira, acortando la distancia entre ellas.

“Shelly, Mira-sama está preocupada, por favor deja de molestarla.”

“¡Así es, déjaselo claro!”

Quedándose aún oculta a su sombra, Mira estuvo de acuerdo con Galet. Este comentario suyo causó aún más alboroto en Shelly, pero Shelly ha logrado contenerse al priorizar el hecho de no ser odiada por Mira.

“Hey Galet, ¿qué estás haciendo aquí con Mira-chan?”

Centrándose  en  cambiar  su  expresión  suave a  la  normalidad,  Shelly miró  a  Galet  con sospecha.

“Estoy en medio de llevarla al Lago Lunático, pero aún no hemos desayunado.”

“Y por eso has venido aquí. Buen trabajo.”

Shelly volvió a levantar la canasta de comestibles, abrió las puertas batientes y guio a las dos hacia adentro.

“Vamos, los asientos del mostrador están vacíos, así que siéntense y esperen… Un momento, ¿sigues enojada, Mira-chan?”

Al ver a Mira permanecer a la sombra de Galet  y vigilante, Shelly hizo una pequeña expresión de pesar.

“No creo que Mira-sama se enojara con esto.”

Tal como Galet dijo, Mira no estaba enojada. Pero ella estaba avergonzada de ser tratada como una niña.

Sin embargo, hacer que una mujer tuviera una expresión tan solitaria estaba en contra de sus deseos, por lo que salió de detrás de Galet.

“Simplemente no me trates como a una niña.”

Dijo Mira. Sin embargo, a Shelly le parecía una niña pequeña que trataba de actuar como una adulta por lo que sucumbió al impulso de abrazar a Mira.

“¡Mira-chan, que linda!”

A pesar de lo que había dicho Mira un momento antes, Shelly simplemente tiró la canasta con comestibles y saltó hacia Mira con un fuerte impulso. Al ser abrazada con fuerza, Mira no pudo deshacerse de esta demostración directa de amor y solo dijo “haz lo que quieras…” para luego soltar un suspiro.