Kenja no Deshi wo Nanoru Kenja (NL)

Volumen 1

Capitulo 17: Cristal del Demonio

La primera mañana en la habitación del Castillo Arkite. Todavía dormitando en sueños, Mira fue despertada a la fuerza por enérgicos golpes en la puerta.

“Nhh…”

Después de echar un vistazo alrededor, vio una lujosa habitación desconocida. Oh cierto, pensó Mira y entendió la situación. Mientras tanto, el sonido proveniente de la puerta continuó, así que se levantó y abrió la puerta para ver qué estaba pasando.

“Ah, buenos días, Mira-sama.”

Debido a la forma repentina en que se abrió la puerta y porque la ropa de Mira estaba desordenada, por un momento el guardia de la puerta se quedó estupefacto. Sin embargo, inmediatamente se dominó a sí mismo.

“Salomón-sama me ordenó que le llamara de inmediato. Es un asunto urgente.”

El guardia que transmitió esto tuvo su aliento fuera de orden y, además, no solo el guardia sino todos en el corredor parecían estar ocupados, gente corría por todas partes.

“Mm-hm, me iré de inmediato.”

Al ver eso, Mira se dio cuenta de que era algo lo suficientemente importante como para llamarla.

“Um, sería prudente ajustar su ropa…”

Cuando Mira asintió y trató de salir de la habitación, el guardia le advirtió con reserva. El vestido de una pieza que uso para dormir se había deslizado en gran parte, exponiendo su piel hacia las clavículas.

“Mm-hm, si, lo es.”

Dicho esto, Mira confirmó su propio estado y, después de arreglarlo rápidamente, se dirigió a la oficina de Salomón.

“Haz que el segundo y tercer pelotón de los Caballeros Hechizo se dirijan al suroeste. Dividan algunos de los lanzadores de hechizos y envíenlos al sureste. Te dejo la formación y los integrantes.”

Por todas partes en el castillo se observaba a gente ocupada. Después de que la voz de Salomón se escuchara desde la puerta de la oficina, se oyó una respuesta animada y el oficial que recibió las órdenes salió corriendo. Mira entró en la oficina mientras lo despedía.

En el interior, Salomón se apoyó en el escritorio completamente exhausto. “Hay mucho ruido, ¿qué está pasando?”

Cuando Mira lo llamó, Salomón levantó la cabeza vigorosamente. “¡Buenos días, tenemos una emergencia!”

Hablando de inmediato, Salomón mostro con fuerza el mapa que estaba sobre el escritorio. “Puedo decir que ese es el caso. Entonces, ¿Cuál es la emergencia?”

Salomón, que normalmente no se agitaba fácilmente, ahora tenía mucha prisa. En lugar de hablar de la situación, Mira sentía curiosidad por su estado.

“Esta mañana, hubo un informe de que aparecieron trescientos monstruos.”

Mientras decía eso, Salomón señaló con su dedo una zona al este del Lago Lunático. No estaba muy lejos, pero tampoco era una razón para entrar en pánico y hacer girar el castillo, por lo que Mira estaba desconcertada.

“Que esto suceda tres días seguidos es enigmático, pero no es una razón para hacer un alboroto como este…”

Mira comenzó a decir, pero a continuación Salomón señaló otra ubicación. “Quince minutos después, otra manada de trescientos apareció aquí.”

“¿Qué…?”

No recordaba que las manadas aparecieran simultáneamente, e incluso para Salomón, que lleva viviendo treinta años en este mundo, era la primera vez. Pero no terminó con eso. De nuevo Salomón se movió, señalando otros dos lugares.

“Los territorios aquí y aquí fueron invadidos. Una manada es de doscientos y la otra es de ochocientos.”

Y después de decir esto, Salomón dejó escapar un suspiro y volvió a mover el dedo. “Entonces, hace un momento, otros doscientos aparecieron en estos dos lugares.”

Siguiendo los movimientos del dedo de Salomón con sus ojos, Mira sintió que algo le molestaba y frunció el ceño.

“Además de  eso,  los  informes dicen que  cada  manada tiene una sola  criatura anormal mezclada con ellos, y según sus características, parece que son Demonios Menores.”

“Mm-hm, así que todas las manadas fueron reunidas por Demonios Menores.”

“Creo que no hay duda al respecto.”

Salomón asintió y sacando el dedo del mapa, se reclinó en la silla.

“Además, delante de donde se mueven las seis manadas está el campo de flores de antes. Parece que en ese lugar hay algún tipo de secreto.”

Deliberadamente cerró sus ojos mientras decía esto. Al recordar la vista de ayer, Mira encontró el campo de flores en el mapa.

“Me pregunto si tienen la intención de hacer que se peleen entre sí, ¿eh?”

“Bueno, ese puede ser el caso.”

Salomón dijo, luego señaló la ubicación de una manada que aparecía al sur del país antes de continuar.

“Envié a Luminaria para que se ocupara de la manada grande de ochocientos. Y quiero que trates con los doscientos en el lado norte.”

Al norte del territorio del país. La ubicación donde apareció la manada de monstruos que Salomón señaló, era la más cercana al campo de flores de ayer.

“Doscientos, eh. Bueno, no creo que haya algún problema, pero ¿está bien no enviarme a un lugar más molesto?”

Era la manada con el menor número de monstruos que aparecía en el lado norte y se veía más fácil en comparación a las otras. Esta fue la razón por la que Mira lo señalo en tono de broma, pero Salomón levantó las comisuras de su boca con una sonrisa atrevida.

“Por supuesto que es el lugar más molesto que hay.”

Y él dijo enérgicamente. Mira que hizo una expresión relajada de repente la cambió.

“Son pequeños en número, pero es la manada más cercana a ese campo de flores, por lo que es necesario dirigirse allí rápidamente. Pero eso no es un problema. Ya ves, tenemos un vehículo rápido que ya conoces.”

Un vehículo que se mueve rápido, recordándolo, Mira coloco una expresión amarga.

“Y una cosa más. Recibimos un informe de que el testigo presencial vio que el Demonio Menor en esta manada sostenía algo que parece un cristal negro.”

“Cristal negro… ¿dices? ¿Puede ser un Cristal del Demonio?”

Un Demonio Menor con un cristal. Mira sabía lo que significaba esto. “Es lo más probable. Por eso quiero que vayas.”

“Ya veo, mm. Entonces no será fácil.”

Acordando que sería más fácil luchar contra un gran número de monstruos que contra eso, Mira aceptó la solicitud.

Después de ser animada por Salomón a sus espaldas, Mira llegó al garaje donde todos los preparativos ya estaban completos. Como era de esperar, el jeep blindado la estaba esperando en todo su esplendor.

“Mira-sama, volvamos a llevarnos bien.”

“Mm-hm… eres tú otra vez.”

Igual que ayer, Galet se inclinó con una sonrisa alegre. “Con esto, todos están aquí, salgamos de inmediato.” Dicho esto, Galet abrió la puerta de los asientos traseros. “Nhm, entonces ustedes dos vienen, eh.”

Cuando Mira entró, parecía que había otros dos pasajeros esperando.

“Así que de quien habló Salomón-sama es Mira-sama. Esto es ciertamente tranquilizador.”

El que sonrió a Mira sin ningún significado profundo detrás de ello, era el ayudante de Salomón, el hechicero Joachim.

Por otro lado, permaneciendo en silencio y mostrando claramente una expresión de disgusto, inmediatamente desviando su mirada estaba el otro pasajero, Reinard.

(“Reaccionando igual que siempre, eh.”)

¿Por qué están esos dos conmigo? Mira se preguntó cuál era la intención de Salomón cuando se sentó junto a Joachim.

“Pues bien, estamos saliendo.”

La presencia ligeramente disgustada de Reinard que veía a otro lado fue interrumpida por la excitada voz de Galet y el jeep blindado que avanzaba hacia adelante.

“Una escuela de conducción necesita ser construida…”

“He escuchado que el impacto era asombroso, pero pensar que es tan fuerte.”

“Ghh… si qué lo es. Hmph.”

Los tres en los asientos de atrás se desplomaron sobre el sofá y comenzaron a quejarse al mismo tiempo.

En el camino para interceptar la manada de monstruos, Mira y los otros dos comenzaron a hablar de cómo tratar con los monstruos.

“Me encargaré del frente, Joachim, los aplastaras por detrás como de costumbre. Y…”

Después de proponer las tácticas a las que estaban más acostumbrados, luego observo a Mira, que era el factor incierto número uno en esta operación.

“En cuanto a Mira-dono… Salomón-sama dijo que te dejara tratar con el Demonio Menor, pero honestamente hablando, no entiendo tu nivel de fuerza, así que no puedo decir nada. ¿Está realmente bien dejártelo?”

La expresión de Reinard cuando él formó un plan era la cristalización de la seriedad y solo ahora no existía mala voluntad hacia Mira.

“Mm-hm, no habrá problema incluso si se da el peor de los casos.”

“¿El peor de los casos? ¿Cuál sería? Bueno, no importa. Simplemente no dejes que ocurra.” Cuando Mira respondió, Reinard la miró y enfatizó.

“Por supuesto. Lo mismo para ti, no te equivoques.” Mira resopló y miró a Reinard con una sonrisa.

“Ahora, ahora, ustedes dos. Estoy seguro de que no hay necesidad de preocuparse. Incluso si no la hemos visto, la fuerza de Mira-sama ha sido reconocida por Salomón-sama, por lo que es verdadera. Además, Mira-sama, por favor cree en nosotros. Es cierto que Reinard es exigente en lo que respecta a la etiqueta, persistente incluso, pero eso se debe a que es un caballero de principios. Es un hombre que una vez decide algo como caballero, definitivamente lo logrará. Y yo también, aunque no en la medida de los sustitutos de los Ancianos, tengo confianza en mis hechizos.”

Joachim, atrapado entre dos miradas chispeantes, no pudo soportarlo y medio.

Reinard parecía tener algo que decir, pero solo respondió con “por supuesto” y dirigió su mirada hacia el parabrisas en el frente.

La misma Mira no dudó de la fuerza de Reinard, a quien Salomón eligió para convertirlo en su ayudante. Lejos de eso, la lealtad que él tenía demostró que valía la pena el respeto. Sin embargo, Mira no tenía intención de decir eso.

“No estoy preocupada.”

Ella dijo y también volvió la cara hacia el parabrisas. Allí, percibió la vista de la que tenía un recuerdo. Era el mismo escenario de ayer, cuando se movieron de una superficie pavimentada a una pradera. Al verlo, Mira bajó casi reflexivamente su cuerpo para recostarse en el sofá.

Inmediatamente después, el jeep blindado saltó hacia la hierba de manera heroica. La estructura dejó escapar un sonido intenso, pero fue capaz de ignorar el impacto y continuar conduciendo. Sin embargo, ese no fue el caso de los asientos traseros.

“Ghh… esto de nuevo.”

“La velocidad es satisfactoria, pero hay una necesidad de preparar medidas para enfrentarla.”

Al arreglar su postura, Reinard gimió con un ceño fruncido, junto a él, Joachim había caído en el sofá y, terminando acostado mirando hacia adelante, había analizado esto.

“Mm, creo que también hay un problema con el conductor.”

Teniendo una experiencia previa y preparada de antemano, Mira miró a Galet con resignación mientras esta crecía cada vez más proporcionalmente al temblor del vehículo.

Debido a que el jeep blindado tenía un dispositivo de comunicaciones a bordo, recibieron informes inmediatos de los puestos de avanzada que supervisaban el movimiento de los monstruos. Gracias a ellos, pudieron decir que el destino de la manada era el mismo campo de flores de ayer.

Si uno ignoraba lo que sucedía dentro, el jeep blindado se movía suavemente hacia su destino.

El pilar blanco se podía ver débilmente en el frente, y mientras los tres caían de vez en cuando seguían planeando la operación.

“Hm… así que no podemos exterminarlos en ese campo de flores.”

“Exactamente. En el momento en que llegaron a ese campo, comenzaron a pelearse unos contra otros. En otras palabras, significa que luchar en ese lugar es su objetivo. Ese Demonio Menor que los incitaba se rio justo antes de morir. Es solo una suposición, pero siento que su objetivo es morir en ese lugar.”

Al recordar lo que pasó el otro día y la sonrisa que el Demonio Menor mostró al final, Mira hizo una conjetura. Sin embargo, no sabía qué tipo de significado tenía morir en ese lugar en particular.

“Su objetivo es morir en un campo de flores, es eso. Se siente como un final bastante romántico, pero…”

Al escuchar las palabras de Mira, Joachim cerró los ojos y respondió mientras pensaba. Reinard también parecía estar pensando mientras gruñía, pero su rostro mostraba una amplia gama de expresiones, todas eran de desconcierto.

“Vamos a ver, tal vez su objetivo es hacer de un Diluvio Pantanoso de Muertos Vivientes.” Joachim abrió lentamente los ojos y comunico su teoría.

“¿Un Diluvio Pantanoso de Muertos Vivientes, dices? ¿Se puede hacer eso?” Al oírlo, Mira dejó escapar una voz sorprendida.

Un Diluvio Pantanoso de Muertos Vivientes. Mira conocía ese nombre.

O más bien, ella lo sabía todo al respecto. Apuntaba a muchos campos de batalla antiguos, campos de ejecución, cementerios, lugares que tenían mucho que ver con la muerte y donde muy a menudo aparecían monstruos no muertos.

Antes, cuando ella era Danbulf, a menudo mentía y posponía reuniones en espera de aquellos para cazar eficientemente. Eran lugares familiares para todos los jugadores.

“No, no se ha demostrado que sea algo que se pueda hacer artificialmente, pero leí un ensayo que así lo sugiere. Sin embargo, las condiciones son coincidentes.”

El mismo Joachim solo estaba medio convencido y no tenía pruebas concluyentes. Continuando, explicó las condiciones adicionales para que aparezca un Diluvio Pantanoso de Muertos Vivientes.

Primero, tenía que ser una tierra que tuviera algún tipo de poder, muchos cadáveres y que una gran cantidad de vidas terminaran allí. Después de explicar todo esto, trató de pensar en más condiciones, pero no pudo encontrar nada que coincidiera.

“Se incluyeron más pensamientos en ese ensayo, pero el punto en cuestión fue sobre el fenómeno de que la muerte afecta al poder y las características fluctuantes del mismo. Incluso si el objetivo no es un pantano propiamente dicho, ese Demonio Menor podría estar intentando alterar algo en ese campo de flores inundándolo de muerte…”

Después de decir eso, Joachim miró el pilar blanco al que se acercaban.

“Hmm-mm, eso es interesante. No podemos imaginar qué tipo de influencia podría tener, pero considerando que un Demonio Menor está involucrado, definitivamente no es nada bueno.”

La influencia causada por la muerte. Al escuchar esto Mira había recordó términos ocultos como manchas espirituales y enfermedad del espíritu. Y considerando que estaban en un mundo donde los demonios y los espíritus realmente existían, ella fácilmente aceptó todo como un hecho.

Imaginando innumerables bolas de fuego sobrenaturales flotando en la parte superior del campo de flores, aturdida vio el pilar blanco.

(“¿Están tratando de causar un incendio forestal con almas o qué?”)

Mientras ella bromeaba un poco en su mente, Mira observo la pequeña colina. Era la misma colina que ayer los hizo volar en el cielo.

El jeep acorazado se aceleraba enérgicamente hacia ella. Galet había alcanzado su mejor estado de ánimo y Mira tomó una decisión inmediata de apretarse en una esquina del sofá para prepararse. Joachim, al lado de ella, notó su movimiento y bajó su postura para apoyarse.

El paisaje visto fuera de la ventana pasó con un gran impulso y en lugar de los árboles y montañas que pasaban, todo lo que podían ver eran nubes en el cielo.

Sin embargo, Reinard no tenía ningún interés en eso mientras miraba fijamente al pilar blanco. Entonces, de repente, una sensación flotante atrapó a Reinard en su abrazo y la vista en el frente cambió del pilar blanco a una llanura de pasto verde intenso.

“¡Nuuohhh! ¿¡Otra vez!?”

Aterrizando de manera grandiosa, el vehículo dejó escapar un sonido como si hubiera tenido un accidente, luego rebotó varias veces. Mientras tanto, Reinard cayó y gritó.

Al estar prevenida, Mira usó ambos brazos y piernas para soportarlo. Joachim, quien también logró prepararse, se sintió aliviado de haber logrado evitar mostrar una apariencia desagradable.

“Parece que llegaremos antes que ellos.”

Una vez que el temblor del coche se detuvo, Mira observo al pilar blanco y dijo. Efectivamente, no había monstruos en el campo de flores, y tampoco se veían en los alrededores.

“Si se mueven como se informó, deberían aparecer desde la parte posterior del bosque en el lado derecho.”

Joachim forzó la vista para confirmar la situación y comparó la última ubicación conocida de la manada de monstruos, apuntando hacia la dirección en la que deberían estar.

“Sabías que iba a ser así, ¿verdad? ¿Por qué no me lo dijiste?”

Una voz similar a la voz resentida de un fantasma sonó en el auto. Los dos giraron en dirección a la voz y vieron a Reinard, que parecía un trapo arrastrado por el viento, tumbado en el respaldo del sofá.

“Ahh, mm. Lo siento por eso. Me di cuenta justo antes de que sucediera, y prepararme era todo lo que podía hacer.”

“Vi que Mira-sama se preparaba y me apresure a cambiar mi postura, así que no tuve tiempo de avisar.”

Mientras los dos sonreían mientras decían esto, sin querer sentir pena en absoluto, causaron que Reinard frunciera el ceño.

Sin embargo, al siguiente instante, los neumáticos del jeep blindado pasaron por encima de algo y el vehículo saltó de nuevo. Incapaces de reaccionar ante este impacto repentino, Mira y Joachim cayeron.

“Maldito seas, Galet…”

Cuidadosamente, sentada en el sofá, Mira murmuró con resentimiento al asiento del conductor en la parte delantera.

“Esto es ciertamente un problema.”

Joachim también, había sonreído amargamente al ver a Galet hacer una expresión inocente y alegre mientras manipulaba el volante.

Al ver a los dos caer de la misma manera que él lo hizo, Reinard hizo una sonrisa de satisfacción.