Maou-sama Retry! (NL)

Volumen 5

Capitulo 7: Fuerzas Colisionan

Parte 6

Problemas en el Frente Oriental

——En la Frontera de Animania.

Con la luna iluminando su camino desde arriba, Akane y Mynk llegaron a la frontera entre Animania y el territorio de Hellion. El lugar más peligroso de este mundo.

“¡Qué noche más clara! Perfecto para tomar nombres en nombre de la luna”.

“¡¿E-En serio vamos a ir…?!” Mynk no pudo evitar preguntar después de ver la inmutable indiferencia de Akane. De hecho, estaba aterrorizada por el hecho de que el área estaba en silencio a pesar de acercarse a la frontera. Normalmente, este límite era difícil de abordar.

El extremo norte albergaba un pico legendario, que se dice que es el hogar del Dragón. En el extremo sur de la frontera había un santuario protegido por un zorro místico, al que nadie podía acercarse.

Akane y Mynk estaban en el lado sur, pero el santuario que Akane había visto antes había desaparecido sin dejar rastro.

“¿Hmm…? Hakuto y yo vimos un santuario extraño por aquí… ¿Ahora se ha ido?”

“¿Qué es un santuario? Y, de verdad, ¿vamos a entrar en territorio de Hellion? ¿Ahora? ¡Al menos deberíamos ir todos juntos!” La sugerencia completamente razonable de Mynk entró por un oído y salió por el otro.

De hecho, Akane respondió con una filosofía de regaño. “¿Sabe qué, señorita Malhumorada? No vas a llegar a ningún lado en la vida sin un poco de poco convencionalismo. Tengo que hacer lo que sea necesario. No puedes sobrevivir simplemente recibiendo órdenes”.

“¡Tampoco puedes sobrevivir en territorio Hellion!”

“Cállate. Alguien viene.”

“H-Hey… ¡Erm!”

Akane enterró su rostro en el pecho de Mynk y se tapó la boca. Pronto, aparecieron un par de pequeños híbridos de zorro.

“Humanos ruidosos… ¿No entienden que este es un reino divino?”

“¡H-Hermano tienes razón! ¡Este es nuestro territorio, lo sabes!”

Mynk levantó su bastón, lista para luchar. No iba a bajar la guardia frente a unos Anima solo porque parecían jóvenes. Mientras tanto, después de volverse   para   mirar,   Akane   parecía   asombrada   por   ellos.   “¡Oh! ¡Finalmente, algunos peluches!”

“¡Akane! ¡Mantente en guardia! ¡Estos dos tienen una magia increíble!”

“¡Tienes razón sobre eso! ¡Tienen una especie de magia que te atrae!”

“Oye, ya basta con lo ser imprudente—” La reprimenda de Mynk fue demasiado tarde para evitar que Akane se acercara al par con las manos vacías. Ella estaba detrás del zorro rojo en un abrir y cerrar de ojos y comenzó a acariciar su cola.

“¡Eeeek! ¡Hermano! ¡E-Ella acaba de tocar mi cola!”

“¡¿C-Cómo se puso detrás de nosotros este humano?!”

“Mmm… Tan suave… y sedoso…” murmuró Akane, satisfecha. El zorro azul trató de apartar a Akane, pero ella ya se había movido, de alguna manera, detrás del zorro azul. Escuchó un susurro aterrador: “Estos oídos son tan flácidos… ¿Furry-shota? Eso es amor prohibido”.

“¡A-Aléjate de mí, monstruo!”

“Solo mantente alejado de Yu, ¿de acuerdo? No queremos una ‘x’ entre su nombre y el de ella”.

“¡¿Q-Qué estás…?! Maldita sea, ¡¿cómo eres tan rápida?!”

“¡Hoo, ho, hahaha! ¡Aquí!” Akane los esquivó, girando en círculos, disfrutando de las colas y orejas de los híbridos de zorro hasta el contenido de su corazón.

Incluso Mynk finalmente bajó su bastón ante la pura ridiculez de la situación. No hay duda al respecto… ella realmente es rápida. Incluso un aventurero de rango S como Mynk difícilmente podría seguir a Akane con la mirada. Era prácticamente tan rápida como una ráfaga de viento.

Si bien Mynk estaba medio impresionado con la velocidad de Akane, no era motivo de risa para los dos zorros. Algún humano salvaje había invadido su reino divino y se atrevió a tocarlos por todas partes sin su permiso.

“¡Maldita sea! ¡Si mamá no estuviera tan enferma…!”

“¡E-Eso es correcto! ¡Ustedes dos serían derribadas al suelo en un segundo plano!”

“¿Oh si?” Insistió Akane. “Ustedes dos tienen mamá, ¿eh? ¿La cuidan?” Preguntó Akane en un tono que contrastaba con el tono enojado de los zorros. Ella venía de una casa pobre, donde se reunían los huérfanos. Ella nunca conoció a sus padres, por lo que debe haber tenido fuertes sentimientos sobre la idea de la maternidad. “Hay un dicho de dónde vengo… Es posible que tus padres no estén allí cuando estés listo para devolverles el dinero. Tengan eso en cuenta, pequeños zorros”.

“¡¿Q-Que sabes sobre mamá, monstruo?!

” “¡Hermano! ¡Siento que se burló de nosotros!”

Akane los escuchó con una sonrisa divertida, cuando la exasperada Mynk se interpuso entre ellos, temiendo que la conversación nunca terminaría si los dejaban solo.

“Oye, ¿qué están haciendo los otros Anima? Se siente extraño que esté diciendo esto, pero aquí hay demasiado silencio”.

“¡Hmph! Apuesto a que están obedeciendo a la Tatarabuela”, respondió el zorro azul.

“Um…” Los ojos de Mynk se agrandaron. “¿Quién es la Tatarabuela?”

A pesar de la pregunta de Mynk, el zorro azul mantuvo la boca cerrada y se volvió como si estuviera haciendo una rabieta. Mynk no tenía forma de saber que el dragón venerado que gobernaba la tierra había ordenado al Anima que ‘los dejara en paz’.

El mero hecho de que el dragón, que rara vez hablaba en miles de años, había hecho una declaración de cualquier tipo, era un evento devastador para los Anima.

Debieron haber sentido como si un rayo los hubiera alcanzado desde algún lugar muy por encima del cielo despejado. Había Anima que había nacido para luchar, como híbridos de tigre, pero incluso especies como ellas se quedaban calladas con las orejas gachas, dando mucha gravedad a la orden del dragón.

“Entonces, ¿no planeas hacer nada con nosotras, al menos por ahora?”

“Hmph…” El zorro azul no dijo nada más, pero su actitud fue muy clara. Aunque con cierto escepticismo, Mynk suspiró aliviada. Sabía muy bien que no tendrían ninguna posibilidad contra un batallón de Anima en toda regla.

“Los escuchaste, Akane. Parece que no hay peligro inmediato. Volvamos a esa cabaña para…”

“Hmm. Apuesto a que Hakuto hizo algo detrás de escena “.

“¿Qué?”

“Así es como siempre va”, añadió Akane en voz baja, con un tono de soledad en su expresión. “Antes de que me dé cuenta, todo ha sido alterado”. En el mundo donde existía el Imperio, Hakuto Kunai había empleado todos los planes y planes imaginables, derrotando y finalmente matando a todos los enemigos políticos que tenía.

La mayoría de las veces, el trabajo ya estaba hecho  antes de que Akane descubriera algo al respecto.

La politiquería e intrigas a puerta cerrada no era su escenario. Ren, el secretario de Hakuto Kunai, siempre era el que organizaba y delineaba la información.

Yu reunió, y a veces manipuló, varios datos para ayudar al Imperio, mientras que Tahara lo hizo con su previsión estratégica. La luz había desaparecido de los ojos de Akane. “No era mi lugar…”

“¿D-De qué estás hablando…?” Mynk pudo sentir un escalofrío recorrer su columna vertebral ante el cambio en el tono de Akane. Los zorros saltaron lejos de Akane, mirándola con precaución.

“¡Entonces, no tiene sentido no volverse pícaro! Vamos, Emo. ¡Vámonos!”

“¡O-Oye!”

“¡Temeraria es mi segundo nombre! ¡Black Lancers, iniciando!! ¡Vamos a romperlos!”

“¡No!”

El grito de Mynk cayó en oídos sordos cuando Akane agarró y llevó a Mynk con ella a través de la frontera, saltando a un lugar donde ningún humano había entrado antes, como si los estuviera llevando de picnic.

Después de ver a la pareja alejarse, el zorro azul murmuró con emociones encontradas: “Por qué Tatarabuela…”

“¡Ese humano malvado con la mirada aterradora debe haber amenazado a la Tatarabuela con su rostro aterrador!”

“Ese humano malvado de aspecto criminal…”

Si bien algo de eso fue injustificado, su conjetura no fue del todo infundada. El dragón pareció reconocer al Señor Demonio y le había dicho al Anima que no interfiriera con él, por la razón que fuera. La idea preconcebida de Akane tampoco estaba del todo fuera de lugar, lo cual era una idea aterradora, de hecho.

“P-Pero hermano… El humano malvado le dio una patada al diablo maldito en el estómago”.

“Cierto. Luego le dio una bofetada muy fuerte…” Los zorros gradualmente fueron haciendo sonreír en sus rostros, recordando cómo ese Gran Diablo, que había estado amenazando su reino divino, fue golpeado como un niño que se porta mal. ¡Ese diablo! ¡Estaba llorando un poco! ¡Había lágrimas en sus ojos, seguro!”

“¡Esa expresión de enojo en su rostro! ¡Buen viaje! ¡Hee hee hee!”

“¡Quizás ese humano malvado no sea del todo malvado, después de todo!”

“¡Estoy de acuerdo, hermano! Si vuelve, al menos le daremos un cuenco de arroz con agua caliente”.

Los zorros se rieron alegremente de lo que debe haber sido lo primero que les sucedió en mucho tiempo. El zorro rojo debe haber sido demasiado joven para saber que un cuenco de arroz con agua caliente a menudo se consideraba la antítesis de la hospitalidad.

Mientras su risa resonaba en el reino divino, Akane y Mynk sintieron el cambio de aire a su alrededor. Ya no estaban rodeados de aire limpio y fresco, sino de aire tangiblemente turbio. Habían entrado en una tierra prohibida para los humanos. Incluso los árboles del bosque parecían manchados de oscuridad.

“Eek, todo se está poniendo serio por aquí. Solo quiero mantener el buen rollo”.

“¿Qué tan fuera de contacto estás…? Pero, podemos salir de aquí cuando queramos con esos raros zapatos tuyos, ¿cierto? ¡¿Cierto?!”

“¿Te refieres al Socio Número Dos? No puedo viajar rápido durante el combate”, respondió Akane sin piedad. De hecho, los comandos como Quick Travel siempre se habían desactivado durante el combate. De vuelta en el juego, los jugadores no podían usar Quick Travel hasta que derrotaran a su enemigo, participaran en combate durante un cierto período de tiempo o se quedaran fuera del alcance de su enemigo.

“¡¿Qué significa eso, que no podemos escapar cuando importa?! ¿Sabes qué? Acabo de recordar que tenía algo que hacer…”

“¡No me des la espalda, Malhumorada! ¡Vamos, déjame oírte poner tu corazón y tu alma en esos hechizos!”

Akane continuó. Atravesaron el bosque oscuro, luego un valle y luego a una zona desolada con rocas desnudas y arena. Había innumerables monstruos acechando en las áreas por las que habían corrido, pero ninguno de ellos detectó a la pareja, ya que el efecto de la habilidad especial de Akane excedía los límites de sus sentidos.

Akane era algo con poderes injustos, alguien que se infiltraba en territorio enemigo, se coló detrás de su objetivo y tenía un tanto en la garganta antes de que nadie se diera cuenta de que estaba allí. Muchas de las historias cortas que Akira Ono había escrito sobre ella eran similares a eso.

A veces, ella realmente se ponía en acción por su cuenta, y otras veces Kunai le había ordenado que lo hiciera en secreto.

Por supuesto, todas esas historias eran ficticias, destinadas solo a dar a los asesores una historia de fondo. Aun así, eran tan reales como cualquier otra cosa para Akane. (¿Hakuto se va a enojar? Ah, lo que sea. Siempre estaba feliz cuando volvía con la cabeza del gran jefe con el que estábamos peleando).

Algunos enemigos eran inmunes a cualquier cantidad de intrigas encubiertas. La única forma de acabar con ese tipo de enemigo era con un acto violento disfrazado de accidente. Hakuto Kunai se había ganado el título de Secretario del Departamento de Gestión de la Felicidad Ciudadana.

Estaba rodeado de aquellos que buscaban robarle su asiento y / o poder. En cifras, Tahara era el consejero que se ocupaba de la mayoría de esos enemigos.

Cuando se trataba de un gran juego, como los ministros, Akane siempre se había ofrecido voluntariamente a traer su cabeza hacia atrás antes de que alguien pudiera detenerla.

Un buen número de episodios iluminaron la imprudencia de Akane como una ruina, pero ella era irrefutablemente una cazadora de caza mayor y tenía premios más que suficientes para demostrarlo. Su desempeño fluctuó más que todos los asesores.

“Estamos aquí, Nerviosita”.

“Estamos realmente… Espera, ¿es eso?”

Había una vista insoportable en la plaza frente a ellos, sus perímetros solo estaban definidos por una valla de madera mediocre. Había innumerables humanos enjaulados y monstruos con forma de ataúd por todo el lugar.

Con un estanque rojo brillante que debe haber sido todo sangre en el centro de todo.

Cualquier lego habría llorado de horror, se habría desmayado o, al menos, se habría congelado de miedo. Incluso Mynk, después de todos sus roces con la muerte, apenas podía afrontar la visión de pesadilla que tenía ante ella.

“H-Heh heh…” Ella se obligó a soltar una risita. “Esto es algo de oscuridad… Mi ojo derecho…”

“Horrible… Me recuerda a los viejos tiempos”. Un tono extraño estaba en la expresión de Akane, como si estuviera viendo una escena en la distancia. El brillo habitual en ella se había desvanecido.

“¿Viejos tiempos? ¿Cuándo exactamente estás hablando…? ¿Cuándo ese Señor Demonio gobernaba el mundo?”

“Sí, eso es todo. Mucha gente en grandes escenarios. Lucharon entre sí hasta la muerte. Hasta que solo hubo un superviviente”.

“¿Solo uno? Espera… ¿De qué estás hablando?” Mynk preguntó en su confusión. Todo lo que podía imaginar era una especie de entretenimiento sádico.

“Todos sabíamos que era terrible y teníamos que defenderlo de todos modos. Era el único lugar al que podíamos pertenecer en ese amplio, ancho mundo”. De hecho, todos los asesores tenían algún tipo de pasado problemático. Mientras el Imperio gobernaba más de la mitad del mundo entero y aún continuaba invadiendo y conquistando, el Castillo Sleepless era el único hogar que les quedaba a cualquiera de ellos. El bien y el mal no tenían cabida en su vida. Akane simplemente tuvo que luchar para sobrevivir y proteger su hogar. “Pero no hay Imperio en este mundo…” Sus ojos brillaron con un poderoso destello de luz.

Si bien Mynk no entendía de qué estaba hablando Akane, era dolorosamente obvio que ella tenía la intención de cargar en el infierno ante ellos. “Este ‘Imperio’…” comenzó a preguntar Mynk.

“Se derrumbó hasta el suelo. Entonces, vamos a construir un nuevo hogar… Con cómo está ahora, Hakuto y yo podemos hacer un nuevo imperio desde cero. Incluso en un mundo completamente nuevo” continuó Akane, casi divagando, con una especie de apego u obsesión enfermiza en su rostro.

Mynk comenzó a temer a Akane más que a la pesadilla que les esperaba. “¿Qué vas a hacer…?” preguntó con miedo audible. No pudo evitar percibir un profundo abismo o un oscuro rencor dentro de esta chica infinitamente feliz y despreocupada.

“No te preocupes, Malhumorada… Creo que esta vez, Hakuto va a construir una buena nación para gobernar”.

Mynk finalmente unió la conclusión de que Akane debe haber estado hablando de una nación que cayó en los días de los mitos. Naturalmente, el Imperio debe haber sido algo que el Ángel Caído Lucifer, Gobernante de la Noche, había construido.

(¡El Señor Demonio y sus súbditos están tratando de revivir una nación perdida en los días de antaño…!) Parecía una idea demasiado obvia para que cualquiera pudiera considerarla antes.

Una explicación de por qué Lucifer había sido revivido y por qué sus sujetos estaban actuando de esta manera. Su final, cada evento, las acciones del Señor Demonio y lo que Akane había dicho, todo encajó en la mente de Mynk.

(Los días de  los mitos…  ¿La nación que  gobernó la noche… regresará…?) Mientras que Mynk, siendo quien era, sintió que la emoción comenzaba a hincharse ante la idea, eso significaría un futuro bastante oscuro para la mayoría. . (Pero el Señor Demonio había eliminado a todos los monstruos durante la invasión en Rookie… Esta chica está a punto de atacar una región gobernada por Hellions…)

El Señor Demonio tratando de revivir su nación que una vez existió en los días de viejo… ese era un motivo que Mynk podía entender. Sin embargo, esa hipótesis no era coherente con su comportamiento anti-Hellion. “Necesito hacerte algunas preguntas, Akane. ¿El Señor Demonio se opone a los Hellions?”

“¿Hellions? ¿Así se llaman esos? Son solo engendros aleatorios. Simplemente caminantes con XP”, respondió Akane con total naturalidad.

Entonces, una frase impactante regresó a Mynk. Era algo que el Señor Demonio había dicho durante una conversación inocua con el paladín.

——Los monstruos simplemente me alimentan…

El Señor Demonio había dejado escapar esto. De hecho, los monstruos simplemente caminaban con SP hacia él. No estaba mintiendo.

“¿Ves a los Hellions como alimento…?”

“Nunca tuve miedo de ningún jugador ni de quimeras monstruosas. Solo que él se cansó de mí y me echó”. Una sombra cruzó la expresión de Akane, que volvió a su sonrisa desbordante cuando miró hacia arriba. Mynk se quedó sin palabras ante sus emociones y expresión rápidamente cambiantes. “Siento haberte arrastrado aquí, Emo. Realmente quería un testigo. A veces no obtengo el crédito cuando salgo de esta manera”.

Ninguna cantidad de contribución le serviría de nada si no hubiera nadie cerca para verla. De hecho, algunas de las historias cortas expositivas de Akane habían terminado con un giro cómico en el que ella no recibía ningún crédito por el trabajo deshonesto que hizo.

En otros episodios, a menudo obtuvo un gran crédito solo para dejar que se le subiera a la cabeza y lo arruinara. Aunque, estas historias de fracasos contribuyeron a su popularidad entre los jugadores.

Mynk suspiró. “Está bien… Tenemos que lidiar con la situación actual”.

“¡Así es! Coge palomitas de maíz y disfruta del espectáculo”.

“¿Eh…? Espera, ¿vas a entrar sola?”

“Puedo tomar esas cosas por miles”, declaró Akane con orgullo, golpeándose el pecho con el puño. Fácilmente había 300 monstruos apiñados en la plaza, por lo que esta no era una situación sobre la que Mynk pudiera imaginarse a nadie que fuera optimista. “Gracias por venir a ver mi programa”. Akane le guiñó un ojo a Mynk y cargó directamente hacia la plaza.

En un instante, la cabeza de un goblin que acababa de balancear su garrote ahora se elevó por el aire.

Akane Fujisaki  

Raza: Humano — Edad: 16  

Arma: Cabeza de Dragón y Cola de Serpiente

Un par de tonfa con una sola mano, que se pueden combinar para formar un bastón. Uno tiene un dragón pintado, el otro tiene una serpiente.

Armadura: Las Sonrisas Invitan a la Buena Suerte

Si bien Akane generalmente usa un atuendo que se asemeja al uniforme de la escuela secundaria japonesa, se cambia rápidamente a este vestido chino para el combate. Como sugiere su nombre, disuade al mal.

Artículo: Palas de Rodillo

El usuario gasta drásticamente más aguante en cada acción. Como aumenta la Destreza del usuario en 20, fue un elemento extremadamente valioso en el Juego. Akane llama a su pareja “Socio Número Uno”.

Artículo: Moon Shoes

Reduce el gasto de resistencia del usuario para las acciones y les permite viajar rápidamente a cualquier lugar donde haya estado el usuario. Los jugadores pueden intercambiar una gran cantidad de Empire Mints por este artículo. Akane llama a su pareja “Socio Número Dos”.

Nivel: 1 —

HP: 8000 —

Resistencia: 600 —

Ataque: 65 + 50 —

Defensa:20 + 30 —

Destreza: 120 + 20 —

Magia: 0 —

Defensa Mágica: 0 + 20

Habilidades Equipadas: Primero: Maestro del Personal Segundo: Patada de Barrido Segundo Rasgo: Patada Parpadeante Tercero: Puño Cruzado de Shaolin del Sur

Habilidades de Combate: Explorador, Perseguir, Instinto, Cazador, Alta y Poderosa, Colector, Vengador, Rueda Giratoria, Ira, Eliminar, Igual a Ninguno, Limit Breaker, Atravesar 

Habilidades de Supervivencia: Prueba de Sabor, Sabueso, Burbujeante, Recuperarse, Espíritu de Lucha, Dentro y Fuera del Otro, Estrella de la Suerte, Ojo de Halcón, Medicina, Cazador de Tesoros, Maestro Mint

Habilidad de Duelo: Ultimate Overdrive

Habilidades Especiales: Agente Secreto, Supersónico, Crimson, ? 

Uno de los asesores que defendió el Castillo Sleepless. Su personalidad alegre y despreocupada ganó popularidad entre los jugadores hasta el punto de que fue apodada la “Ídol del Castillo Sleepless”.

De hecho, el juego albergaba numerosos objetos de baratija y trofeos relacionados con ella. Según su historia de fondo, nunca conoció a sus padres y creció en el orfanato dirigido por el Imperio, separado en Casa Alta y Casa Baja.

La Casa Alta fue el hogar de los niños de la aristocracia con circunstancias atenuantes, mientras que la Casa Baja fue el hogar de los niños abandonados y los huérfanos de la guerra.

La intimidación de los niños de Baja por parte de los niños de Alta era desenfrenada, pero Akane y su espíritu ardiente se enfrentaron a ellos y protegieron a muchos de sus compañeros de estudios de sufrir ese destino.

Un buen socio para otro asesor, Ren Miyaoji, que vivía en la Casa Alta en el mismo orfanato.