Ore ga Heroine o Tasukegite

Volumen 15

Capitulo 6: El Problema Frente A Mí

Parte 3

La declaración de Yuuhi dejó a L sin palabras.

Si su silencio se debió a que lo que dijo Yuuhi le había tocado la fibra sensible o simplemente porque estaba atónita por la acusación, no estaba seguro.

“Pareces muy seguro de ti misma, Yuuhi,” intervino de repente la doctora. “Me sorprende que tengas el descaro de jugar alto y poderoso después de engañar a mi preciosa L como lo hiciste”.

“Si no es el rey de Laputa…”

“Nada me encantaría más que darte una parte de mi mente ahora mismo, pero hay algo más que tengo que preguntarte primero”.

“…”

Yuuhi no mostró ninguna reacción a lo que dijo la doctora, lo que tomó como una señal para continuar.

“¿Es posible que conozcas el paradero de nuestro Rekka Namidare?”

¿Eh?

Al principio, no entendí lo que decía la doctora. Lentamente repetí la oración en mi cabeza… Con los ojos muy abiertos, miré de un lado a otro entre Yuuhi y la doctora.

“¡¿Q-Qué quieres decir con eso?!”

“¿Recuerdas que te dije que hubo dos incidentes graves que desencadenaron la Guerra de Todos?”

“Dos desencadenadores…”

Revisé mis recuerdos. La doctora había dicho que el primer detonante de la Guerra de Todos fue el ataque terrorista al congreso central de la Gran Federación Galáctica.  El segundo  fue el hecho de que  mi yo  futuro desapareció.

“La verdadera causa de la Guerra de Todos fue la desaparición de nuestro Rekka Namidare, lo que inició los rumores de que una de las heroínas lo estaba monopolizando… Y la razón por la que continuaron fue porque nadie podía probar lo contrario. Ni siquiera Satsuki pudo localizar a Rekka con su Magia de Omnisciente”.

Sí es cierto. Ella también había dicho algo así antes. Recuerdo que pensé que era extraño que… Espera, ¿Satsuki no pudo localizar al futuro Rekka con su magia? Al igual que… ¿cómo tampoco pudo localizar al cerebro ni a las heroínas?

Mientras daba vueltas a todo esto en mi cabeza, la doctora miró a Yuuhi.

“Solo se me ocurrió hoy después de todo el tiempo que hemos pasado persiguiéndote… La idea de que alguien más que las heroínas actuales podría haber estado involucrado en la Guerra de Todos desde el principio”, dijo la doctora con calma.

Según su teoría, fue Yuuhi quien secuestró al futuro Rekka. Y al escuchar esto, Satsuki, Harissa, Lea y Fam entrecerraron los ojos bruscamente en su dirección.

Mi corazón latía tan fuerte en mi pecho que dolía. No podría ser… Simplemente no podría, ¿verdad? Ni siquiera estaba seguro de si quería que ella tuviera razón o no. Todo lo que sabía era que estaba al borde de mi asiento.

Después de varios momentos de tenso silencio, Yuuhi abrió la boca… “No tengo nada que decirte.”

Y se negó a darnos una respuesta. Juro que la temperatura de la habitación bajó un par de grados.

“… ¿Debo obligarla a hablar?”

Incluso Lea, de gran corazón, estaba diciendo cosas bastante violentas ahora. Pero ante la pura intención asesina, Yuuhi ni siquiera se inmutó.

“Hmph… esperaba que todos aparecieran eventualmente en el momento en que esa forma de vida artificial llamada R se interpusiera en mi camino y dejara escapar a Rekka Namidare”, dijo. “¿De verdad pensaste que estaría esperando aquí sin estar preparada?”

Yuuhi presionó algún tipo de interruptor escondido en la manga de su chaqueta, y cuando lo hizo… un rasgón en el aire junto a ella se abrió de par en par.

“¿Una deformación?” Fam exclamó.

“No… ¡Eso es más como una puerta a otro mundo!” Declaró Harissa. Pero Yuuhi negó levemente con la cabeza.

“Decir que es una puerta a otro mundo está cerca… Pero todavía lo entendiste mal. Esta grieta está conectada al otro lado del espejo. El lado con el que normalmente nunca entrarías en contacto”.

“¿El otro lado… del espejo?”

“Así es. El espacio dentro de esta grieta es una dimensión de bolsillo que no está conectada a ningún otro mundo. Puedo esconder cualquier cosa aquí, incluidas las personas, y nunca ser descubierto por nadie”.

“¡¿Qué?!”

La Magia de Omnisciencia accedió al registro Akáshico, que eran los anales de la historia en todos los mundos. Pero si lo que Yuuhi estaba diciendo era cierto, entonces la dimensión del espejo no era parte de ningún mundo…  Por eso Satsuki  no había podido aprender nada al respecto con su magia. Eso… Eso tenía que significar…

“Sal fuera,” dijo Yuuhi.

Cuando lo hizo, varias figuras emergieron de la grieta. “¡¿Qué?!”

Dudé de mis ojos.

“¡¿Eh?! ¡¿S-Somos nosotras?!”

Me sorprendió, pero las futuras heroínas que estaban a mi lado estaban en estado de shock. Fue porque reconocimos a las personas que habían emergido de la grieta.

Satsuki. Iris. Harissa. Pasto. Rosalind. Fam. Corona.

Todas eran heroínas que conocíamos bien.

“¿Por qué siguen sus órdenes…?” Murmuré con incredulidad, buscando una razón.

Cuando entrecerré los ojos, forzando la vista para ver mejor a Yuuhi, pude ver que llevaba un pendiente con una pequeña joya roja. Eso… Parecía familiar.

¡Esa es una piedra Doppel! ¡Puede copiar poderes mágicos y psíquicos!

Ahora que lo pienso, la doctora había dicho que Yuuhi usó una Piedra Doppel para borrar mi memoria de las heroínas. Si tuviera una con ese tipo de poder, podría entender por qué las heroínas seguían sus órdenes.

¡Debe haber copiado el poder del encanto de Rosalind en el!

Una vez que puse dos y dos juntos, pude verlo tan claro como el día. Todas las heroínas tenían una mirada vidriosa y aturdida en sus ojos… Claramente estaban siendo controladas.

Eso significaba que tendría que darles algún tipo de shock para sacarlos de ahí.

Yuuhi probablemente lo sabía, razón por la cual había sacado a relucir a las heroínas con el mayor potencial de combate. Por supuesto, también había sacado a Satsuki y Harissa.

“Vamos.”

Con una simple orden de Yuuhi, todas las heroínas pasadas se movieron para atacarnos de una manera bastante sistemática. La pasada Satsuki vino contra la futura Satsuki, la pasada Lea vino contra la futura Lea, y así sucesivamente. Básicamente, las chicas se estaban atacando a sí mismas.

“¡Mierda! Estoy seguro de que todos ustedes ya lo saben, ¡pero asegúrese de no hacerse daño!” gritó la doctora.

La doctora dijo una vez que la mayor debilidad de las personas del futuro era que no podían atacar a las personas del pasado, ¿verdad?

No era que no pudieran atacar, per se. Por ejemplo, la futura Satsuki podría matar a su yo pasado si lo necesitara… Pero entonces ella también desaparecería. Incluso si no llegara tan lejos, el solo hecho de lastimar su yo pasado podría causar un daño duradero que volvería a morderla.

En otras palabras, las futuras heroínas no podrían luchar seriamente contra su yo pasado. Y eso los puso en desventaja. Las heroínas controladas por la mente del pasado no estaban tirando golpes. Fue una pelea completamente unilateral.

Ahora, en cuanto a Iris, Rosalind y Corona, que no tenían su yo futuro para luchar…

“¡Erk!”

¡Naturalmente, vinieron después de mí!

De todas las heroínas, ¡tenían que ser las tres!

No tendría ninguna posibilidad contra ninguna de ellas.

Si tengo una oración en este momento, al menos una de ellas está de mi lado… ¡¿Pero cómo voy a manejar eso con las tres atacándome juntas?!

Mientras me devanaba el cerebro, se acercaron amenazadoramente. “¡Tch!”

¿A quién debo apuntar? El más fácil de cambiar… no parecía que fuera Corona. Eso significaba que tenía que ir por Iris o Rosalind.

Traté desesperadamente de recordar un momento en el que había visto a cualquiera de ellos completamente conmocionado… Y lo primero que me vino a la mente fue esa vez que accidentalmente agarré el pecho de Iris.

“¡Aquí va…!”

Posiblemente fue lo peor que se me ocurrió en el calor del momento, pero no tuve tiempo de idear un plan B.

¡Iris! ¡Lo siento!

Puse mi mirada en la princesa alienígena. Rosalind y Corona venían hacia mí desde la izquierda y la derecha, respectivamente. Me agacharía ante sus ataques y cargaría contra Iris para devolverla a sus sentidos.

Ese era el plan, de todos modos. Sin embargo, considerando la diferencia de capacidad física entre las heroínas y yo, mis posibilidades de éxito eran prácticamente nulas. Pero aún tenía que intentarlo.

Me había llevado cinco segundos pensar las cosas hasta ahora. No quedaba tiempo. Todo lo que tenía que hacer ahora era avanzar… Pero cuando miré hacia arriba, pude ver la energía oscura acumulándose en la palma de Corona.

“Espera… ¡Eso es injusto!”

No tenía forma de bloquear un ataque a distancia. Corona desató su hechizo sin piedad. Reflexivamente levanté los brazos para protegerme, ¡pero sabía que no me iba a salvar! ¡Estaba a punto de ser borrado!

“¡¿Qué estás haciendo, idiota?!” Gritó L, levantando una barrera para bloquear la magia de Corona.

“¡L! ¡¿Me salvaste—?!”

Antes de que pudiera terminar de agradecerle, jadeé. Una neblina roja estaba invadiendo, oscureciendo mi visión.

¡¿Rosalind?!

Cubrí mis ojos inmediatamente. La visibilidad dentro de la niebla roja era cero. Estaba prácticamente paralizado, sin saber qué camino tomar ni qué hacer…

“¡Rekka! ¡Agáchate!” la doctora gritó de repente a través de la niebla. “!”

Me acurruqué en el suelo según las instrucciones, y ni un momento antes. El brazo de Rosalind salió volando por el aire donde acababa de estar mi cabeza.

“…”

Ella me miró con ojos sin vida antes de lanzarme una patada. “¡Whoa!”

Me arrojé a un lado, rodando para apartarme.

¡Ka-bam!

Las baldosas del suelo se derrumbaron donde el talón de Rosalind tocó con fuerza el suelo. Al darse cuenta de que había fallado, se transformó una vez más en niebla roja. Pero…

“¡Mal movimiento, Rosalind!” Oí gritar a la doctora cuando el humo blanco comenzó a fluir a través de la niebla roja.

Observé con sorpresa cómo la niebla crepitaba y se solidificaba en su lugar casi al instante. Era como si la doctora le hubiera aplicado una especie de spray helador.

“La descongelaré más tarde, así que espera por ahora”, dijo la doctora mientras se dirigía hacia mí.

Ya veo. La doctora no es una de mis heroínas, por lo que no tiene un yo pasado aquí para luchar.

Lo mismo se aplica a L. Las dos serían la clave para superar esto. “Rekka, a este ritmo, las cosas solo van a empeorar”.

“Lo sé.”

Las heroínas que luchan contra sus seres pasados en este momento lo tenían aún más difícil que yo. Su yo pasado estaba haciendo todo lo posible, pero todo lo que podían hacer era mantenerse a la defensiva. Mientras no pudieran defenderse, era solo cuestión de tiempo antes de que fueran derrotados.

Eso significaba que ahora era el momento… Mientras las heroínas pasadas todavía estaban ocupadas, tuve que hacer un movimiento decisivo. Y eso sería…

“¡Tú…!”

Me volví para mirar a Yuuhi.

“…”

Y ella me estaba mirando directamente. Ambos lo sabíamos. Que este encuentro se decidiría con mi derrota o la de Yuuhi.

“El pendiente…” murmuré.

“¿Qué pasa con eso?” preguntó la doctora.

“Si podemos hacer algo con la Piedra Doppel incrustada en ella, Yuuhi debería perder su control sobre las heroínas. Una vez que lo haga, lo tendremos en la bolsa”.

“Eso puede ser cierto, pero ¿cómo vamos a hacer eso?”

“Tengo una idea.”