Isekai Ryouridou (NL)

Volumen 5

Capitulo 4: El Décimo Día — Nueva Determinación

Parte 1

Por fin había llegado el día.

Era el sexto día del mes azul, nuestro décimo día de negocios aquí en la ciudad de correos.

En el octavo día, vendimos 138 comidas, y en el noveno fueron 142. Eso generó un beneficio neto de 1011 monedas rojas.

En términos de cuernos y colmillos de giba, eso valdría aproximadamente 84 cabezas. Si el clan Suun buscaba vivir enterrado en riquezas, entonces no era de extrañar que les llamara la atención con números como ese.

Juntos, los cuatro nos habíamos ganado esa suma. En solo diez días, habíamos ganado el equivalente a 84 giba. Incluso si tuviera en cuenta el valor de sus pieles, cuidadosamente peladas y bronceadas, seguiría siendo igual a 42 giba. Esa fue la escala que alcanzaron nuestras ganancias.

Naturalmente, este negocio solo fue posible gracias a la fuerza de los cazadores, y no tenía intención de olvidar sus esfuerzos. Pero aun así, esos seguro eran algunos números locos. Dicho de otra manera, la gente del borde del bosque podría ganar tanto dinero con la carne de giba, pero habían estado yendo y arrojándolo a sabiendas en el bosque.

Mirándolo de esa manera, todavía no habíamos hecho lo suficiente. La carne de Giba todavía tenía un valor aún mayor.

Si no solo la cocina de giba, sino la carne de giba en sí misma podría cambiarse por monedas, entonces, en ese punto, la prosperidad realmente debería llegar al borde del bosque.

Esa fue precisamente la razón por la que había asumido este desafío en la ciudad de correos.

“Buenos días, Milano Mas”.

Ai Fa se había recuperado ahora que habían pasado dos días, por lo que me estaba acompañando a mí, Vina, Lala y Sheera Ruu. Y cuando llegamos a La Cola de Kimyuus, encontramos a Milano Mas ya de pie detrás del edificio esperándonos.

No era un hombre tan grande, pero estaba bien formado y su piel marrón amarillenta lo marcaba como un ciudadano de sangre pura de Genos. Siempre tenía una expresión de disgusto en su rostro, y hoy no fue la excepción.

“Entonces finalmente estás aquí, ¿eh? Los guardias pasaron por la tienda antes.”

“¿Huh?”

“Aparentemente, más personas de Sym y Jagar que nunca se han reunido hoy. Este signo puede ser contraproducente, ¿eh?”

“Este letrero” se refería al pequeño debajo del letrero de la tienda misma. No pude leerlo en absoluto, pero debería haber dicho: “Cerrado los días 7, 10 y 11 del mes azul”.

El plan era tomarme el día libre para la sesión de estudio, mientras que el 10 era la reunión del jefe del clan, y también tendría que tomarme el día siguiente libre ya que no tendría tiempo para prepararme para el trabajo.

“Quiero decir, me preocuparía tomarme un tiempo libre sin avisar a nadie…

¿Es realmente una gran multitud?”

“Ninguna pista. Y los guardias me dijeron que no me preocupara por eso también.”

Mientras decía eso, Milano Mas metió la mano en el bolsillo de su pálido delantal negro. Lo que sacó fueron ocho monedas rojas.

Cuando le dije que me estaba tomando un descanso, dijo que en ese caso el contrato para el puesto y el espacio de myamuu giba se cancelaría temporalmente, por lo que devolvería la cantidad de dinero adecuada. Además, en cualquier caso, si iba a seguir teniendo dos puestos, tenía sentido que los días coincidieran.

Con esto, mi contrato con La Cola de Kimyuus había llegado a su fin por el momento.

Todavía quedaba la pregunta de qué pasaría pasado mañana, pero todavía no pude obtener una respuesta.

“Decidiré cuando cierres la tienda por el día. Eso debería estar bien, ¿verdad?”

“Si. No me importa”.

Aun así, la forma en que no podía leer cómo se sentía Milano Mas no me sentaba bien, de alguna manera.

Milano Mas dio un “Hmph”, luego nos miró a cada uno de nosotros.

“Vete ya. Si terminas causando otra conmoción, entonces ese será el final de tu tienda de cualquier manera”, dijo sin rodeos.

Dejándolo así, seguimos su consejo y nos dirigimos a nuestro lugar.

“Tenía un aire desagradable sobre él, hasta el final. Si odia tanto a la gente del borde del bosque, ¿por qué no nos lava las manos?” Lala Ruu me susurró mientras empujábamos el carro.

“Sí… pero independientemente de lo que esté sucediendo en su cabeza, creo que quiere tiempo para pensarlo hasta que se sienta satisfecho”.

Yumi había dicho que la familia o amigo de Milano Mas o algo había sido dañado por una persona al borde del bosque. Si eso era cierto, ¿cómo se había sentido al tratar con nosotros hasta ahora?

Si había superado esos sentimientos de odio y pudo vernos como socios comerciales verdaderos y adecuados, entonces quería seguir cooperando con La Cola de Kimyuus.

Bueno, en cualquier caso, tengo que pasar hoy primero.

No importa cómo resultaron las cosas, no cambió lo que teníamos que hacer. Este décimo día fue una especie de punto de inflexión, pero aun así tuvimos que esforzarnos al máximo, igual que siempre.

Sin embargo, solo había un punto que difería de cómo habían sido las cosas hasta ahora. Para hoy, preparamos 80 hamburguesas de giba.

Cuando trasladamos nuestra base de operaciones de la casa del Fa al asentamiento de Ruu, terminamos liberando dos horas adicionales para Vina Ruu. Ella utilizó ese tiempo para ayudarme con los preparativos y, como resultado, pudimos preparar 20 comidas adicionales.

Habíamos escuchado muchas decepciones desde que anunciamos que nos tomábamos un tiempo libre, así que pensé que tal vez podríamos esperar vender mejor que nunca en los días anteriores y posteriores. Esta fue una medida tomada con eso en mente, pero todavía era la decisión de cualquiera cómo resultaría.

En cualquier caso, a medida que avanzamos por la carretera, Lala Ruu de repente soltó un “Whoa…”

Levanté la vista e inmediatamente reconocí la razón por la que lo había hecho. Había una multitud más grande que nunca antes reunida frente a nuestro espacio.

Además de los clientes de Sym y Jagar, también había mucha gente del oeste, por lo que era difícil saber cuáles eran los espectadores y cuáles estaban allí para hacer una compra. Pero en cualquier caso, era una multitud tan grande que casi bloqueó el camino a través del área. Supongo que podría ver por qué los guardias no iban a quedarse callados al respecto.

“Hola. Pareces aún más popular de lo habitual hoy, ¿no? ”

Cuando me volví para mirar, vi a Dora en su espacio habitual con una gran sonrisa. Tara también estaba allí, sonriendo lejos.

“Pero no vas a vender a primera hora de la mañana, ¿verdad? Estábamos planeando tomarnos nuestro tiempo y pasar más tarde”.

“Claro. Gracias. Bueno, entonces… ¿podría conseguir cuatro tarapa y tino, y 30 arias?”

“Entendido. Serán 12 monedas rojas”.

Después de meter las verduras compradas en una bolsa, partimos hacia el frente.

“¡Dale todo, Asuta!” Tara gritó desde atrás, animándonos mientras nos dirigíamos hacia el mar de clientes.

“¡Perdón por la espera!”

Una especie de alegría sonó en respuesta a mi voz, pero luego se quedó en silencio. Los clientes de Jagar deben haberse estado restringiendo debido a que los guardias vigilaban.

No había habido tanta gente en la mañana últimamente, con 20-30 personas haciendo cola como máximo, pero hoy había aproximadamente el doble de allí. Solo me iba a tomar mañana libre, así que honestamente me sentí muy honrado de ver a todas estas personas aparecer.

“Por favor espera un momento. Estaremos listos para ir en breve”.

Después de colocar el brasero encendido en el puesto, comenzamos a revolver la salsa de tarapa.

Movimos la carne empapada en adobo a otra bolsa. Cortamos en dados el tino y cortamos el aria.

Por ahora, todos estaban completamente acostumbrados a la rutina.

“¿No te sientes un poco emocionado, de alguna manera…?” Preguntó Lala Ruu, con una sonrisa alegre en su rostro. “Este trabajo es muy interesante. Definitivamente me gusta mucho más que pelar pieles en casa”.

“Ya veo. Bueno, eso es lo que más importa”.

“¿Qué harás a partir de pasado mañana? ¿Vas a hacer que cambiemos por otras mujeres después de todo?”

“No lo sé. Sin embargo, personalmente sería de gran ayuda tener siempre a los mismos miembros cerca”.

Por un segundo, la cara de Lala Ruu se iluminó de emoción, pero luego su expresión se nubló un poco.

“Um, en ese caso, ¿quieres decir que no quieres trabajar con Reina?”

“¿Eh…?”

“Reina quiere trabajar muy mal contigo, ya sabes. ¿Pero eso sería un dolor para ti?”

Lala Ruu me miraba fijamente, sus ojos azules como el océano.

¿Había visto Lala Ruu cómo nos sentimos Reina Ruu y yo, gracias a su fuerte sensibilidad y poder de observación?

“Eso no es lo que quise decir. Es solo que… pensé que sería lo mejor si no fuera y me acercara demasiado a Reina Ruu”.

“¿Es esto realmente algo que se resolverá al no acercarse a ella?”

“Lo siento… sinceramente no lo sé. Tal vez solo estoy posponiendo lidiar con eso”.

“No tiene sentido disculparse conmigo. En cualquier caso, las cosas terminarán siguiendo su propio curso, así que ¿por qué no manejar las cosas como a usted le gusta?” Lala Ruu dijo, disparando una amplia sonrisa en mi dirección al final que era como ella.

Con eso volví al camino y agregué algo de aria a la olla caliente.

“¡Estaremos abiertos a los negocios en un momento! ¡Por favor, formen grupos de cinco!”

El primer lote que apareció frente a mí era del grupo de construcción e incluía al Viejo y Aldas.

“Buenos días. Hoy llegaste temprano, ¿no?”

“Si. Parece que no podremos escaparnos hasta la tarde una vez que comencemos a trabajar hoy, así que nos apresuramos. Después de todo, no podríamos dejar que el día nos pase cuando ya te vas a ir mañana,

¿verdad?” Dijo Aldas con una sonrisa cordial, mientras que el Viejo estaba a su lado con una mirada insatisfecha.

“Ya veo. En otras palabras, usted tiene la culpa de tomarse un día libre. Cuando haces eso, ganas menos, ¿no? Y solo estamos aquí en Genos durante el mes, pero ¿vas a tomar tres días libres? No vuelvas a hacer eso durante el mes azul. Si necesita un descanso, tómelo una vez que estemos de vuelta en Jagar”.

“Ajaja, perdón por eso… haré todo lo posible para que no vuelva a suceder este mes”.

Cuando respondí, arrojé tres kilos de carne.

Cuando el aroma a vino de frutas y myamuu llenó el aire, la expresión de la cara del Viejo se suavizó ligeramente.

“Hmm… no puedo tener suficiente de ese olor. Pero estás cerrado mañana, ¿eh…? Hey, Aldas, ¿qué vamos a comer mañana por la mañana?”

“Supongo que tendrá que ser el karon envuelto en fuwano que habíamos estado comiendo antes, ¿verdad? ¿No era ese tú favorito, Viejo? ”

“Sin embargo, ya tenemos mucha carne de karon en la cena. Quiero comer carne de giba”.

Luego, desde su posición sobre una cabeza más alta que el Viejo, Aldas dio una sonrisa de complicidad.

“Ah, cierto… Oye, chico, un tipo llamado Naudis puede pasar más tarde, así que cuídalo, ¿de acuerdo?”

“¿Naudis? ¿Es uno de tus amigos o algo así?”

“No diría eso, pero bueno, nos conocemos desde hace algún tiempo. Parece que finalmente está listo para levantarse de su trasero también”.

No entendí lo que quería decir en absoluto, pero terminé terminando el myamuu giba antes de que pudiera preguntar.

“Bueno, entonces, nos vemos nuevamente pasado mañana. No te enfermes ni te tomes más tiempo libre, ¿de acuerdo?”

“Claro. Gracias por tu preferencia.”

Con eso, solo tenía que seguir centrándome en hacer comida.

Los quince que hice de antemano se agotaron en un instante, después de todo.

“¡Lo siento! ¡Por favor espera un momento!”

Estábamos vendiendo incluso más rápido que en la mañana del quinto día, que había sido el más ocupado hasta ahora.

También vendí durante las siguientes 15 comidas, y el flujo de clientes finalmente llegó a su fin una vez que vendí siete del siguiente lote.

Cuando miré para ver cómo estaba el puesto de hamburguesas de giba, me encontré con que Sheera Ruu también se estaba volviendo hacia mí.

“Preparamos 20 más, pero solo nos quedan cinco de esos. ¿Deberíamos seguir adelante y prepararnos aún más?”

“Hmm, esperemos y veamos un poco más. Creo que serás bueno para comenzar a hacerlos una vez que te queden tres a la izquierda… Ah, bienvenido”.

Cuando terminé de venderle una comida a ese cliente de Sym, terminamos con 52 myamuu giba y 45 hamburguesas de giba. Casi ningún cliente del oeste había mostrado sus rostros todavía, pero las cosas seguían casi sin problemas.

Además, en estos últimos tres días, el número de clientes del oeste había estado creciendo poco a poco. Creo que ayer terminamos con más de 30 de ellos.

La cocción de carne de Giba penetraba lenta pero seguramente en el dominio Genos. Tendría que asegurarme de informar ese hecho a Gazraan Rutim mañana.

Fue entonces cuando un grupo encubierto comenzó a venir hacia nosotros. Naturalmente, fue The Silver Vase, el grupo dirigido por Shumiral.

“¡Bienvenido! Gracias por su preferencia.”

Había exactamente diez personas en el grupo de Sym, y como siempre se separaron para que cinco de ellos estuvieran alineados frente a cada puesto.

Shumiral estaba en la rotación de myamuu giba en días pares, así que se quitó la capucha como siempre y le dio un saludo cortés.

“Es desafortunado que estés cerrado mañana. Volveremos de nuevo al día siguiente.”

“Claro. Muchas gracias.”

“Asuta, ¿qué harás acerca de hacer una compras…?”

“Ah, sí. Hablé con el jefe de mi clan sobre eso, así que estaba pensando en parar en tu tienda después del trabajo.”

Hasta ayer, habíamos ganado más de 1000 monedas rojas. Eso significaba que serían 100 monedas blancas, lo que finalmente fue suficiente para cambiar por una plata.

Sin embargo, el dinero estaba destinado a ser gastado. No era como si estuviéramos planeando ahorrar para una gran compra, así que le pregunté a Ai Fa si era hora de gastar algo y ella dio su consentimiento.

“Me alegro. Estaré en la tienda hasta el atardecer”, respondió Shumiral, entrecerrando los ojos muy ligeramente.

Eso solo fue suficiente para mostrar la felicidad que estaba sintiendo. Realmente me sentí como en estos últimos días, había construido una seria amistad y confianza con Shumiral.

“Bueno, entonces, nos vemos más tarde”.

“Correcto. Hasta entonces.”

Una vez que terminamos de servir al grupo, vendimos 40 hamburguesas completas de giba.

Después de terminar el trabajo para preparar el siguiente lote, seguimos adelante y tomamos un descanso.

“¿La gente del este no se parece a la gente del borde del bosque…?”

“Ah, ¿tú también lo crees, Lala Ruu?”

“Sí… Hace mucho tiempo, la abuela Jiba me dijo que la gente del borde del bosque pudo haber nacido de sangre mezclada entre el este y el sur”.

“¿Huh? ¿De verdad?”

“Sip. Sin embargo, la abuela Jiba tampoco conocía ningún detalle. Mucho antes de que comenzara la guerra entre Jagar y Sym, los clanes exiliados de sus respectivas capitales se reunieron en el bosque, y esos fueron los antepasados de la gente del borde del bosque… Aparentemente, eso es lo que dice una leyenda”.

“¡Guau eso es increíble! Estoy seguro de que es fácil llevarse bien con personas de Sym y Jagar. ¿Es por eso, me pregunto…?”

“¿De verdad? En ese caso, cuando la abuela Jiba y las personas de aquel entonces fueron expulsadas del bosque en el sur, deberían haber ido al este en lugar de al oeste, ¿eh?”

“Hmm… Pero el reino oriental usa un idioma diferente, ¿verdad? Además, el sur y el este ya eran enemigos para entonces, así que supongo que no tuvieron más remedio que confiar en el reino occidental, que era amigo de ambos”.

“Ah, ya veo… Bueno, no importa lo que tenga que decir al respecto ahora, supongo que no cambiará la forma en que vivimos nuestras vidas”.

Cuando tuvimos esa conversación, aparentemente lograron terminar de preparar las hamburguesas de giba.

En este punto, pude dejar completamente el condimento de la salsa de tarapa a Sheera Ruu.

“Muy bien, entonces vamos a tomar un descanso. Acabamos de terminar nuestros preparativos aquí también, así que ¿te importa si vamos primero?”

“¡Esta bien!”

Agarré dos hamburguesas de giba mientras Lala Ruu eligió una giba myamuu con salsa de tarapa, y nos dirigimos a Ai Fa. Parecía que estaba dormida, pero cuando nos acercamos a menos de dos metros, abrió los ojos y levantó la vista.

“¿Estabas  dormida?  Lo  siento  por  eso.  Trajimos  un  bocadillo,  pero ¿quieres comer?”

“Si.”

Ai Fa se había recuperado por completo.

Solo para estar segura, se había contenido y no había venido a la ciudad ayer o anteayer, pero hoy habían pasado seis días desde que se había lesionado el codo izquierdo. El plan era liberarlo de sus ataduras mañana por la mañana, incluso.

“Todavía necesitaré algo de tiempo antes de poder dirigirme al bosque, pero debería estar bastante recuperado para cuando se reúna el jefe del clan”, explicó Ai Fa.

Faltaban cuatro días más hasta entonces. Realmente hubiera sido malo ir al asentamiento de Suun con su brazo izquierdo en una honda, así que me alegré mucho de escucharlo.

“Por cierto, dijiste que estabas comprando algo después de cerrar la tienda, ¿verdad? ¿En que estabas pensando?” Preguntó Lala Ruu, llena de curiosidad mientras llenaba alegremente sus mejillas.

“Um, ya ves, en realidad estaba planeando comprar un cuchillo de cocina y una bandeja de hierro”.

“¿Bandeja de hierro…?”

“¡Sí es cierto! ¡En realidad es un artículo nuevo en el que entró el encargado de la tienda! ¡Realmente parece que será útil tenerlo cerca!”

“¿Eso es todo…?”

“Sí, eso es todo”.

Sentí una gran satisfacción con la idea, pero Lala Ruu me estaba disparando con una mirada increíblemente aburrida.

“Esas son herramientas de cocina, ¿no es así…?”

“Sip. Pero quiero decir, esos solos terminarán costándome 33 monedas blancas”.

Había tomado la decisión con Ai Fa de que una vez que hubiéramos ahorrado más de 100 monedas blancas, gastaría alrededor de la mitad y ahorraría el resto. Y así, compraría el cuchillo de cocina hecho por Sym por 18 monedas blancas, y la bandeja de hierro hecha por Jagar por 15, sumando 33 en total.

“Ah, estás hablando de esa espada que te mostró el chico de cabello plateado de Sym, ¿verdad? Parecía que realmente lo deseabas.”

“¡Si! ¡Así es!”

“¿Y qué hay de ti, Ai Fa…?” Preguntó Lala Ruu, dándome por vencida como una tonta obsesionada con la cocina y volviéndose hacia la cabeza de mi clan.

Sin embargo, Ai Fa simplemente respondió: “No necesito nada en particular”, mientras comía cuidadosamente su hamburguesa de giba en miniatura.

“¿Huh? ¿Nada?”

“Si. Mis cuchillas todavía son perfectamente utilizables, y no nos faltan medicamentos ni ropa”.

“Entonces, ¿qué pasa con la ropa para banquetes o los accesorios? Acabas de pedir prestados los viejos de la abuela Jiba la última vez, ¿no?”

“No tengo intención de usar esas cosas en el futuro”.

“¿Huh? Pero quiero decir, es posible que se te pida que vuelvas a cocinar la estufa para un banquete como la última vez, ¿verdad?”

“… Me ocuparé de eso cuando llegue”, respondió Ai Fa sin rodeos. Lala Ruu parecía completamente insatisfecha.

“¿Qué demonios? Es como si Asuta fuera el único que se divierte”.

“Así es. Esta es la fortuna del clan Fa, así que me gustaría que uses todo lo que quieras, como el jefe del clan. Incluso ignorando lo que hacemos hoy, tendremos 17 monedas blancas para gastar, ¿verdad?”

“Si quieres usarlos, entonces úsalos como quieras. Y espera… No estás comprando  nada  más  que  herramientas  de  cocina  de  todos  modos, ¿verdad? No te diré que lo desperdicies, pero deberías usarlo más en lo que quieras”.

“Hmm. En ese caso, supongo que lo usaré en otras posibilidades y fines”, respondí, solo para que Ai Fa repitiera,” Úselos como desee “, con una mirada de satisfacción.

“Entendido. Eso es justo lo que haré, entonces”.

“Hey, Asuta…” dijo Lala Ruu, lanzándome una mirada bastante irritada.

Pero entonces, ella pareció ver algo en mi expresión y murmuró: “Bueno, lo que sea…” antes de echar el resto de su bocadillo en la boca.