Assassins Pride (NL)

Volumen 4

Lección 07: Las Alas del Orgullo

Parte 4

Y entonces, como si respondiera a ese llamado, una estrella fugaz destello.

Esa luz que ascendía desde el suelo era como un cuervo volando dentro de una tormenta. Mientras se aprovechaba hábilmente de la turbulencia provocada por el barco volador, él ascendió en un instante y atrapo al resplandor de color sakura como si fuera atraído por este.

Eso en un instante supero la altura de la cubierta y aterrizo mientras dispersaba un cautivador aliento de vapor. Golpeo un par de veces la mejilla de la princesa durmiente que cargaba en sus brazos con su mano enguantada.

–¿Estás bien, Salacha-sama? Ya estás segura.

–… Ah …

La princesa que abrió sus parpados ligeramente reconoció la sonrisa del joven y sonrió suavemente. Antes que su hermana, quien llamo su nombre fue Serge.

–Vampir… ¡¡Kufa-kun!!

–Me tomo tiempo tomar el equipamiento. Eso fue lo que llaman por el margen de un cabello, ¿No?

Cargando educadamente al ángel, Kufa se acercó al Rey cubierto de sangre. Dejada en los brazos de su hermano, Salacha seguía sin fuerza, pero afortunadamente la herida de su hombro no era profunda. Si la llevaban inmediatamente a un médico seguramente se curaría sin problemas.

Renovando su objetivo, Kufa soltó el seguro del mecanismo instalado en su cadera. Era una armadura de vuelo armada con un rustico motor, tuberías y un escape de vapor. Cuando desenvainó su Katana negra y se dio la vuelta, la joven caballera femenina que se había quitado sus gafas protectoras estaba centrando su mirada en su dirección.

–Doble de cuerpo… ¿Nuevamente piensas estorbarme? ¿Tan leal eres a ese Rey de mentira de allí?

–No, para ser honesto, no me importa particularmente lo que le ocurra a Serge-sama.

–Hey… eso fue cruel, ¿Sabes?

Kufa soltó la espada que estaba colgando en el lado contrario de su cadera hacia el Rey que estaba refunfuñando detrás. Una espada deslumbrante con cuatro <Piedras Sagradas> instaladas cayo en la cubierta.

–Ya que sería una molestia si siguen arrojando sin reserva cosas desde arriba, especialmente si un gigantesco barco como este cae en la ciudad, los daños a las personas serian incalculables. Las organizaciones criminales que están pensando molestar la ceremonia de coronación e incluso los Licántropos seguramente serian perfectos compañeros de bebida. Pero, primero que todo—

El guardamano de la Katana sonó y Kufa sin ninguna vacilación apunto la punta de su arma a su enemigo.

–¡¡Matare a los estorbos como tú!!

Kushana abrió ampliamente sus ojos y justo después se rio.

–¡Haha! ¡¡Quiero verte intentarlo!!

El vapor estalló desde su armadura mientras exponía sus colmillos con ferocidad. Acelerando en un instante, paso rosando por un lado de Kufa y subió hacia el cielo como si se deslizara. Mirando en dirección de Kufa mientras se volteaba de arriba abajo, gritó.

–¿¡Olvidaste nuestra primera batalla!? ¡¡Para un caballero <Dragoon>, no eres más que una bestia arrastrándose por el suelo!!

–¡Entonces probémoslo…!

Kufa respondió con una voz profundamente fría y activó la armadura de vuelo en su cintura. Un sonido pesado sacudió todo su cuerpo y justo después aceleró en un instante con una fuerza como si lo hubieran pateado desde la espalda.

Pateando el piso ligeramente, el vapor que fue expulsado desde atrás lo elevo hacia el cielo. Integrando en su brazo la energía cinética, oscilo su Katana mientras pasaba por su lado. El violento choque contra la Lanza de su enemigo, hizo resonar un horrible trueno.

–¡¡Nuu…!!

Su hermoso rostro descubrió sus caninos y junto con un sonido metálico se separaron. Una gran cantidad de vapor enterró el espacio sin una pausa para respirar. El cuervo y el dragón corrieron libremente por el cielo mientras dispersaban llamas de 2 colores. Las estelas de vapor se solapaban, y el sonido de los golpes resonaban en el punto en que se cruzaban. Destellos intermitentes parpadeaban.

Kushana cargó junto con el vapor y justo antes de chocar dibujo una trayectoria compleja. Llamas de <Mana> estallaron desde sus pies y su patada que sobrescribió la inercia traspaso la defensa de su enemigo.

El potente golpe que parecía dibujar una parábola golpeo el costado de su cabeza y la sangre fresca se esparció desde su cabello negro.

Kufa cayo hacia la superficie y en cuento aterrizo, saltó hacia arriba en una fracción de segundo. El uniforme militar del enemigo vino de vuelta y Kushana apretó los dientes ante su mirada sin vacilación.

–¡Es inútil! ¿¡Crees poder rivalizar conmigo con esas habilidades improvisadas!?

Mientras expulsaba <Mana> de sus piernas y vapor desde su espalda, Kushana voló. Su enemigo finalmente comenzó a quedarse atrás ante su velocidad que había duplicado. Su experiencia con la armadura de vuelo aún era muy inmadura.

–¿¡Ese es el equipo que le arrebataron a Gibson!? ¿¡Pensaste que si te lo ponías podrías igualar a un

<Dragoon>!? ¿¡Pensaste que te alzarías a la misma altura!? ¡¡Te hare saborear la humillación de caer al suelo!!

Kushana cargó mientras dibujaba una espiral. Tensando su Lanza Mecánica, ataco mientras era empujada por la fuerza explosiva del vapor.

Deslizándose por el costado de la Katana negra, dispersaron chispas violentas. Un rodillazo penetro en el estómago del chico.

Su pie contrario nuevamente apunto al costado de su cabeza. Su enemigo al instante levanto su brazo, pero entonces la pierna del dragón escupió su aliento.

Su patada que obtuvo una nueva fuerza de empuje cambio su trayectoria apresuradamente y golpeo su muslo derecho. Siendo levantado desde su parte inferior, el chico giró en medio del aire. Mientras inmediatamente expulsaba vapor, él voló hacia atrás. Sin embargo, Kushana al instante lo persiguió con una velocidad que superaba eso.

–¡Estas son las maniobras aéreas de un <Dragoon> que obtuvo la <Ambrosia>! Tengo la protección divina de mi habilidad <Vuelo>, pero para ti solo es un trozo de hierro. ¡¡No es algo tan superficial hasta el punto en que podrías imitarla fácilmente!!

–Ciertamente… esto es un poco duro.

Tras admitirlo honestamente, el chico soltó algo desde su mano izquierda. Kushana no pudo evitarlo a raíz de su propia velocidad no pudo evitarlo y un cable se enrollo en su brazo izquierdo. Al mismo tiempo que limitaba su movimiento, su enemigo por alguna razón arrojo su Katana negra que mantenía en un agarre inverso.

–¿¡Que…!?

Kushana abrió ampliamente sus ojos y la evito a duras penas. Al mismo tiempo que la cuchilla rosaba su ropa de combate, una sombra semejante a un Yatagarasu2 cubrió el cielo sobre su cabeza—cayendo y golpeando el área de la corona de su cabeza.

Ante el impacto que casi hizo saltar sus globos oculares, Kushana inevitablemente cayo hacia la cubierta. Al mismo tiempo que aterrizaba en sus cuatro extremidades, dio un salto hacia atrás como un resorte.

La suela del enemigo quien llego un instante después pisó la cubierta con la fuerza suficiente para hacerla ceder.

–Maldito…

Le tomo un segundo reajustar su cerebro que se sacudía. En ese espacio, Kufa pateo el piso y recupero su Katana negra enterrada en el piso mientras pasaba. Kushana recupero su campo visual fresco y priorizo cortar el cable de su brazo izquierdo. En el momento que la punta de su Lanza rebanó el cable de acero, la figura con uniforme militar apareció frente a sus ojos a una velocidad divina.

–¿No hasta estado menospreciando demasiado a los <Samuráis>?

Usando dos cortes de su Katana negra como finta, le dio una patada voladora a su plexo solar. Kushana soportó el golpe solo con los músculos de su abdomen y retrocedió varios metros mientras las suelas de sus botas se quemaban. Apretando los dientes, expulsó vapor.

Casi al mismo tiempo, Kufa salto de la cubierta y voló hacia arriba. Un escalofrió corrió por la espalda de Kushana ante un enemigo que exhibía casi la misma velocidad y poder de salto.

–¡¡Esa técnica de salto, no puede ser—!!

Los espectadores de la batalla fácilmente comprendieron en detalle los movimientos de Kufa. Mientras cargaba a Salacha con sus brazos heridos, los labios de Serge quien miraba la violenta batalla sobre el cielo temblaron.

–¡Ese es el estilo de vuelo de la casa Shicksal… de un <Dragoon>…!

Al darse cuenta repentinamente, miró a su hermana menor dentro de sus brazos. Aunque había perdido su fuerza por la pérdida de sangre, observaba el vuelo del cuerpo con una mirada que no dejaba sentir ninguna aflicción.

Los dos sucesores de la casa Shicksal sincronizaron sus pensamientos desde la superficie y el cielo.

–No me digas que él, durante la peregrinación—

— —¿¡¡Aprendió la forma de luchar de Salacha!!?

Dejando de lado cualquier truco, Kushana realizo un ataque a máxima velocidad. Como respuesta, Kufa aumento la expulsión de vapor.

Ambos chocaron desde el frente y tras cruzar fintas con sus armas, realizaron una patada frontal. Sus piernas como el hierro se mordieron entre sí, produciendo un sonido embotado. Mientras sus huesos crujían, intercambiaron incontables patadas, hasta que finalmente la suela del zapato de Kufa empujo la rodilla de Kushana.

Aprovechándose incluso del poder de ataque de su oponente, el uniforme militar negro voló aún más alto. Mientras se daba la vuelta en el aire, fijó completamente la cabeza de su enemigo y luego retiró su Katana negra hacia su hombro.

En los ojos de Kushana quien miro hacia arriba persiguiendo la figura de su enemigo, se superpuso la sombra de la chica de las flores de cerezo.

–¡¡Esa <Habilidad de Asalto> es de Salacha——!!

–¡Una falsificación tiene su propio orgullo!!”

Las explosivas llamas azules llenaron el cielo. Convergiéndolas agudamente, creo muchas cabezas de flechas a su alrededor. Al mismo tiempo que el vapor estallaba desde su espalda, las decenas de arcos liberaron las flechas al mismo tiempo.

–<¡Técnica de Espada Espejo>—<Lluvia de Ondas de Flores de Cerezo>!!

La luz del <Llovizna> estilo Salacha llovió incesantemente. Mientras que cada una ocultaba un aterrador poder de penetración, las decenas de cabezas de flecha atravesaron todo el cuerpo de Kushana. Destrozando su Lanza Mecánica, perforando su armadura de vuelo y mientras que detenía incluso la explosión, empujo de regreso a su enemigo hacia el piso.

–¡Gu, un! ¡¡Uoooooo————ooo!!

Kushana soltó un rugido. Justo después de que la tormenta se interrumpiera, finalmente una especialmente violenta estrella fugaz paso volando por su lado. Kufa aterrizo sobre la cubierta y balanceo su Katana negra. Sangre salpico desde su punta.

Las piernas de Kushana fueron cortadas horizontalmente en línea recta. Perdiendo incluso la protección divina de su habilidad <Vuelo>, su cabello rubio cereza cayo sin fuerzas estrellándose de espaldas en la cubierta.

–¡¡Gaha…!!

El aire fue empujado fuera de sus pulmones, filtrándose desde sus sensuales labios. Comprobando la conclusión de la batalla, Kufa oscilo con fuerza su Katana, dispersando la sangre. Y luego la regreso a la vaina en su cadera.

–Para que Melida Ojou-sama apunte alto—también debo crecer aún más.

*Chin*

El koiguchi de la funda hizo un sonido refrescante.

Poniéndose de pie, nuevamente miro alrededor de la cubierta. Los 3 Shicksal estaban cubiertos de heridas. Por ahora, Kufa se acercó corriendo hacia la princesa de flores de cerezo quien era la que más le preocupaba.

–Lord Shicksal, ¿Cuál es la condición de Salacha-sama…?

–Perdió la conciencia. Parece que no hay riesgo para su vida, pero al parecer se sintió aliviada de que vinieras.

Serge presiono el hombro de su hermana con la manga de su ropa ceremonial y estaba deteniendo el sangrado. Las mejillas de Salacha ya estaban perdiendo color, pero su respiración era calmada e incluso en sus parpados cerrados no había indicios de dolor.

Aliviado, Kufa se dio la vuelta y a continuación, se dirigió hacia Kushana quien estaba derrumbada en forma de 大. Aunque su conciencia aún estaba clara, con todo su cuerpo cortado, empezando por sus dos piernas, no parecía poder moverse. Mientras ataba sus manos en su espalda por si acaso, Kufa apoyo la parte superior de su cuerpo. Como si hubiera perdido incluso su energía para resistirse, la caballera femenina estaba colgando su cabeza.

–Igual que Gibson-san y los demás, también tomaremos a Kushana-sama. No podemos permitir que las circunstancias sean percibidas por el Gremio después de todo. Incluso con respecto al perpetrador del ataque a la ceremonia de coronación, déjanos la manipulación de la información a nosotros. Repeliste a los bandidos y salvaste a tu hermana menor, por favor apégate a esa historia.

–Magnifico… ¡Realmente magnífico, Kufa-kun!

Su hermosa voz que parecía sacudida por la emoción golpeo los tímpanos de Kufa. Mirándolo de reojo, Serge se puso de pi dejando la túnica que se quitó sobre su hermana, y extendió sus brazos exageradamente.

–Lo sabía, estaba en lo correcto al poner mis ojos en ti. ¡Eres el adecuado para ser el caballero real de este Rey Serge Shicksal! ¿Qué tal, pensarías en dejar de ser el tutor de Melida Angel y volverte mi mano derecha? ¡No, mejor convierte a Salacha en tu esposa! Vuélvete mi hermano menor en nombre y realidad, por el bien de la prosperidad de la casa Shicksal—

–Sin embargo, esto es terrible, ¿¡No es así, Su Majestad!?

–¿Qué cosa…?

–¡Los herederos de la casa Shicksal intentaron desarrollar una batalla decisiva lavando sangre con sangre alrededor de la corona del Rey! Si esto llega a los oídos del público, sería un gran escándalo. Las voces que verían con dudas la autoridad de la Casa Shicksal probablemente se volverían más grandes. Seguramente también aparecerán personas con desconfianza por el hecho de que un Rey bañado en la sangre de su familia este sentado en el trono, si—existe un sistema en el que, si se tiene la aprobación de más de la mitad del consejo, un Rey puede ser destituido en un periodo mínimo de 1 año. No hay ningún precedente anterior, pero que el Rey más joven este satisfecho con ese deshonor, ciertamente es imposible, ¿Cierto?

–……

–Sin embargo, no te preocupes. Tomare responsabilidad sobre Kushana-sama y la confinare. Podremos evitar que su vergüenza salga al público. Claro, mientras mi posición sea sólida.

Acercando su mentón al hombro de la mujer quien tenía una mirada de muerte, Kufa mostro la sonrisa de un demonio.

–Tu posición de Rey estará segura tanto como yo lo esté. Nunca olvides eso.

Serge mostro una expresión de shock, y justo después estrecho suavemente sus ojos. No dejando sentir las heridas dentro de su cuerpo, comenzó a mover sus labios emitiendo una voz aguda y cortante.

–¿No los mataste con ese fin? … Eres inesperadamente astuto, ¿Eh?

–Vaya, ¿Recién te das cuenta?

–Bueno, está bien. Lo entiendo.

Serge se encogió de hombros ligeramente y despejo el ambiente peligroso que flotaba en el aire.

–No pude agarrar ninguna debilidad tuya. Finalicemos aquí nuestro trato. Pero puedes estar tranquilo, tu secreto me lo llevaré hasta más allá del viento.

–Agradezco tu consideración, Su Majestad.

–… Aunque lo lamento, desde el corazón.

Dejando esas palabras finales, el Rey doblo su cuerpo. Recogiendo a su hermana inconsciente con sus brazos gravemente heridos, se dirigió hacia la escotilla que conectaba al interior del barco.

–Bajare la altura del barco. Te encargo a Kushana.

–Déjamelo a mí.

Ya no tendría significado oponerse a él más que esto. Kufa sin ninguna animosidad asintió y Serge también asintió de regreso, desapareciendo del otro lado de la puerta. Kufa no sabía cuál era el sistema que movía este extraño barco, pero siendo uno de los responsables del desarrollo, Serge seguramente podría timonearlo sin problemas.

Justo como predijo, el barco volador de inmediato bajo su velocidad de ascenso y a continuación comenzó a sacar el gas desde los globos. Desde una altura cercana a la cima de la lámpara, bajaban suavemente hacia el Distrito del Rey Santo.

En la superficie miles de personas seguramente estaban a la espera del regreso del Rey. Teniendo que arreglar su apariencia mínimamente, Kufa hizo levantarse a Kushana tomándola del brazo.

En ese momento, ella repentinamente movió sus labios mientras miraba hacia abajo con un rostro de muerte.

–<Esa es la memoria de la vida que da vueltas> <El deseo de ese que se ha ido en el pecho> <conviértete en el viento que tiñe el cielo de Azure>.

–¿Eh?

Aunque pregunto de vuelta no hubo respuesta y en su remplazo ella miro en su dirección con una mirada de desesperación.

–Ahora está bien. Pero, de cualquier manera, recuérdalo. Si fuera yo, detendría a ese hombre.

–……

Sintiendo que sin importar que dijera, no sería la respuesta correcta, Kufa empujo su espalda de sin decir nada. Kushana ya no se opuso tampoco y mientras arrastraba sus pies, siguieron el camino hacia el interior del barco.

“Ahora está bien. Pero, de cualquier manera, recuérdalo.”

Esas extrañas palabras se extendieron como olas en el corazón de Kufa y se hundieron hasta las profundidades de su conciencia. Cayendo en una esquina de sus recursos, aunque los meses y años lo cubrieran con un velo— justo como un huevo a la espera de despertar, fue encendiendo una tenue señal.