Isekai Ryouridou (NL)

Volumen 3

Capitulo 1: Genos Ciudad De Correos

Parte 2

“Ooh, un cliente del borde del bosque, ¿eh?” dijo el veterano con una sonrisa tensa mientras se giraba para mirarnos.

La tienda era un pequeño vendedor de productos agrícolas cerca del extremo norte del bazar. Era una tienda bastante simple, que constaba solo de vegetales dispuestos sobre una tela en el suelo, así como el marco de un techo de aspecto inestable.

Sin embargo, también había un gran carro detrás de ese hombre que dirigía la tienda, lleno de una montaña de sacos que parecía estallar.

“Esta es una gran ayuda. Si ustedes no vienen al menos una vez cada tres días, mi aria irá mal”.

El veterano tenía una tela blanca como la mía envuelta alrededor de su cabeza, un taparrabos y sandalias, pero eso era todo, y parecía tener un poco más de 40 años.

Sus ojos, cabello y barba eran todos de color marrón oscuro, y su piel era de color marrón amarillento.

Tenía un físico bastante grande, pero se veía bastante bien y parecía que probablemente era bastante fuerte. Sin embargo, frente a Ai Fa, la mirada en los ojos del hombre era francamente linda, como la de un pomerania.

“Entonces, ¿también quieres a Aria y Poitan hoy? El precio es el mismo de siempre, así que, ¿cuánto quieres?”

“Dos blancos de poitan, y dos blancos más cuatro rojos de aria”.

“¡Oh, eso es bastante! Me pregunto si puedo cerrar con eso…” dijo con el tipo de adulación que esperarías de un vendedor, pero su sonrisa seguía tan tensa como siempre. Parecía que cuando se trataba de tratar con la gente del borde del bosque, su miedo venció a su desprecio.

“Dos blancos y cuatro rojos valen… Muy bien, adelante y compruébalo”, dijo, golpeando un saco que parecía hecho de cáñamo en la hierba al lado de su puesto. Justo cuando pensaba que era mucho, sacó otro saco de tamaño similar. Eran lo suficientemente grandes como para, bueno, no buscaría a Santa Claus tener uno colgado sobre su hombro.

“H-Hey, Ai Fa, ¿cuántos días de comida acabas de comprar?”

“20”, respondió ella mientras se sentaba frente a las bolsas.

Parecía importante verificar los números aquí también.

Anteriormente, Ai Fa había cambiado cuatro cuernos y colmillos por monedas. Me dijeron que una giba le permitiría obtener diez comidas por valor de comida, por lo que con dos personas, eso significaría que 20 días serían 40 comidas en total. Todos los números parecían comprobar.

Pero aun así, necesitabas tres aria y dos poitan por día por persona, por lo que eso significaría 60 aria y 40 poitan durante 20 días, ¿verdad? Y luego para dos personas, eso significaba que serían 120 y 80, ¿sí?

“¡Oye, espera! ¿Por qué compraste tantos? Tomará una hora volver a casa desde aquí, ¿verdad?” Grité, pero luego recordé que no tenían relojes en el borde del bosque. Me pregunto si hay alguno aquí en esta ciudad decorreos. Me dio la sensación de que probablemente al menos tendrían un reloj de sol.

Sin embargo, eso no importó en absoluto. Según mis estimaciones, cada aria y poitan pesaba alrededor de 200 gramos. Eso significaría que 120 aria totalizarían hasta 24 kilogramos, mientras que 80 poitan equivaldrían a 16 kilogramos. No podría pensar en nada más que imprudente, llevando tanto peso desde esta ciudad de correos hasta el borde del bosque.

“Solo date prisa y cuenta. Si sigo sentada aquí para siempre, entonces nadie más se acercará, ¿verdad?” Ai Fa murmuró mientras contaba al poitano. El veterano fingió que no escuchó eso, y simplemente reorganizó su pantalla.

Era demasiado tarde para hablar de reducir la cantidad, tanto al lado que los vendió como al que hizo la compra.

Di un suspiro y luego tomé asiento junto a Ai Fa. “Bien. No hay problemas con el poitán”.

Mientras Ai Fa volvía a meter el poitan en la bolsa, me puse a dividir el aria en grupos de diez en la hierba.

Sin embargo, cuando llegué al trigésimo, me detuve. “Oye, veterano, esta aria parece blanda”.

El hombre de mediana edad me lanzó una mirada dudosa, pero no se acercó más.

“No hay forma de que sea correcto. Después de todo, los coseché justo anteayer. Será agradable y crujiente por otro mes”.

“No, mira, tiene una sensación extraña. No se puede ver con solo mirarlo, pero estoy seguro de que está podrido por dentro”.

“¡P-Por favor deja de hacer acusaciones tan falsas! Puede que seas una persona del borde del bosque, pero aún debes respetar las reglas de esta ciudad de correos”.

“¿Las reglas de la ciudad de correos…? Oye, Ai Fa, ¿no se supone que debes presentar una queja cuando alguien intenta venderte algo podrido como este?”

Me aseguré de comprobar eso con Ai Fa en voz baja solo para estar seguro, y él estaba bastante lejos, pero aparentemente el veterano todavía lo entendió. Todavía no se acercó más a nosotros, pero ahora estaba claramente enojado.

“¡Oye! ¡Trabajé duro para hacer crecer esa aria! ¡Y me  aseguré de comerme a todos los pobres pequeños que no salieron bien! ¡Si tienes un problema con mi aria, nunca vuelvas a mi tienda!” gritó el viejo, con una verdadera mirada de vida o muerte.

Ai Fa tomó el aria de mi mano mientras fruncía el ceño. “Hmm… Parece un poco suave, supongo”.

“No, esto ya no se puede usar. Hey, veterano, voy a dividir esto ahora, así que si está podrido, ¿podrías reemplazarlo por otro? Y si no tiene nada de malo, me aseguraré de disculparme”.

“¡H-Haz lo que quieras!” él gritó, así que, con su permiso, seguí adelante y saqué el cuchillo que era un recuerdo del padre de Ai Fa, y luego le di un corte limpio en el medio. Efectivamente, la mitad inferior se había vuelto púrpura y empapada. No había forma de que pudiera usar esa parte.

“Mira, está podrido, ¿verdad? Lo siento, pero ¿podrías traernos uno nuevo?” Dije, extendiéndola para que él pudiera ver. El veterano se había puesto rojo, pero ahora su cara ancha estaba completamente pálida.

“¡M-Mis disculpas! ¡Estaba equivocado! Te lo ruego, ¡por favor perdóname!

¡Te devolveré tu dinero también! ¡Por favor, perdóname la vida!” dijo el viejo, inclinándose en el suelo y tendiendo los dos colores de la moneda.

Parecía estar mentalmente inestable, allí.

“Ai Fa, ¿qué debo hacer en una situación como esta?”

“¿Quién sabe? Pero no aceptaré alimentos que no he pagado”.

“¿Sí claro? ¿Podrías dejar de inclinarte, veterano? No queremos el dinero, solo el aria. Mis dientes no son lo suficientemente fuertes como para masticar algo así, después de todo”.

Mientras pensaba para mí mismo que Donda Ruu probablemente podría morderlo sin problemas, puse mi mano sobre el hombro del viejo.

“¿N-No eres una persona del borde del bosque…?”

“No nací como uno de ellos, pero como puedes ver, el borde del bosque me está cuidando hoy en día”.

El veterano me miraba como un pomerania mirando a un pitbull. “¿Me perdonas…?”

“Sí, siempre y cuando cambies este aria por uno nuevo”.

Con las manos temblorosas de miedo, el hombre agarró un aria de las que estaban alineadas sobre la tela, y luego me la ofreció.

“Bien, gracias. Um, tal vez no sea de mi incumbencia, pero incluso si te enorgullece tu trabajo, debes asegurarte de verificarlo correctamente antes de enojarte, ¿verdad? Quiero decir, eso es mejor para los negocios”.

Creo que lo escuché murmurar: “Lo hago cuando no es una persona del borde del bosque…”, pero era tan silencioso que era difícil decirlo con certeza.

No hubo problemas con el resto del aria, y los números se retiraron, así que los volví a guardar en la bolsa. Con eso, Ai Fa sacó una vid seca del interior de su bolsillo (probablemente esa cosa de fibaha) y ató las dos bolsas firmemente cerradas. Luego envolvió el exceso de vid alrededor de su mano y colgó la bolsa más grande, la que tenía el aria, sobre su hombro izquierdo.

“Vámonos.”

Estaba tomando 1,5 veces más, por lo que incluso un chef débil como yo no podía quejarse exactamente. Y así, mientras suspiraba al pensar en cómo lidiaría con el puente de cuerda, jugué el papel de un Santa Claus no estacional.

“Bueno, perdónanos. Es posible que regresemos en otros 20 días, por lo que contaremos con usted en ese momento”.

El veterano nos lanzó una mirada indiferente, pero no respondió. Todavía no sabía si debería sentir lástima por él o indignado.

“Ahora bien, considerando el bono que la anciana del mostrador de cambio agregó, tenemos un poco de exceso para gastar. ¿Hay algo más que necesites, Asuta?” Ai Fa preguntó, deteniéndose mientras se entretejía entre los puestos.

Inmediatamente puse la bolsa a mis pies y respondí: “Necesitamos vino de frutas”.

“El vino de frutas se puede comprar por un tinto cada uno, por lo que aún nos quedarían cinco, incluso si compramos dos”.

“Hmm… no tengo idea de la tasa de cambio en absoluto. ¿Qué pasa con la sal de roca?”

“La sal de roca cuesta tres piezas rojas… Bien, bueno, ya que ahora la estamos usando para otras cosas además de secar la carne, deberíamos comprarla más pronto que tarde”.

Fue un sentimiento un poco extraño, hablar de compras con Ai Fa en medio de todas estas personas. No fue desagradable en lo más mínimo, por supuesto.

“Entonces, eso deja dos rojos, ¿eh? Bueno, entonces, ¿deberíamos comprar algo de ese tino y pula que tuvimos ayer en la casa Ruu? Sin embargo, no sé cuánto podríamos obtener”.

“Estoy bien con cualquier cosa. Te lo dejo a ti.”

Parece que me lo dejaron a mí, entonces. Mientras inclinaba la cabeza y me preguntaba qué hacer, mi estómago dio un pequeño y lindo gorgoteo.

“¡Ah! ¿Qué tal un bocadillo de un puesto, Ai Fa?”

Había muchos lugares alrededor de venta de una variedad de aperitivos, no solo carne ahumada.

Sin embargo, Ai Fa abrió los ojos con asombro. “Si tienes hambre, entonces traje carne seca”.

“No, es solo que esta es la oportunidad de comer algo que generalmente no podemos, porque estamos aquí en esta ciudad de correos, ¿verdad? Ah, ¿o eso rompería uno de los tabúes del borde del bosque o algo así?”

“Somos libres de usar el dinero obtenido de cuernos y colmillos de giba como queramos. Sin embargo, no puedo imaginar que ninguna persona del borde del bosque lo use de esa manera”.

Ya veo. La idea de disfrutar la comida no era una cosa al borde del bosque, así que supongo que mucho debería haber sido obvio.

“Entonces supongo que a ti tampoco te interesa, ¿eh, Ai Fa? Bueno, entonces me comportaré y compraré algo de tino, supongo”.

“No me importa especialmente. Dije que te lo dejo a ti, ¿no?”

“Hmm. Pero compramos todos los aria y poitan con sus ahorros, por lo que me sentiría incómodo desperdiciar todo por mi cuenta”.

“¿Qué estás diciendo? Soy la cabeza de tu clan, ya sabes “, dijo Ai Fa, sus ojos se estrecharon suavemente.

Me sentí mal ni siquiera pagando uno de los nueve cuernos y colmillos que tenía, pero ¿tal vez todo estaba relacionado con su dignidad como jefe del clan? Y Ai Fa había estado de buen humor hasta ahora, así que definitivamente no quería arruinar eso.

“Bueno, ¿qué tal si solo uso uno de los platos para vegetales nuevos y luego el otro en un refrigerio? Para ser honesto, estoy realmente interesado en la cocina de este mundo”.

Con eso, las cejas de Ai Fa se arrugaron y ella dijo: “Haz lo que quieras”.

Era como si estuviera jugando su papel de ser mimada. Sin embargo, tal vez esa era la relación correcta entre el jefe de un clan y el que maneja su estufa. Sin embargo, como un orgulloso hombre japonés, hirió un poco mi orgullo.

Aun así, ver a Ai Fa lucir satisfecha me hizo sentir a gusto.

***

“Bueno, entonces, ¿nos vamos? Tenemos poco tiempo, así que debes elegir lo que quieres comprar mientras caminamos”.

“Si. Seguiré y tomaré lo que huela más sabroso”.

Retrocedimos por el camino que nos llevó al vendedor de productos, recogiendo sal de roca y vino de frutas en el camino. La sal de roca fue arrojada a mi bolsa, mientras que Ai Fa sostenía el vino de frutas de una cuerda colgante.

Cuando pasamos por otro puesto que vendía verduras, me detuve y lo miré detenidamente. Sería un poco arriesgado ir con cualquier ingrediente con el que no estaba familiarizado, así que decidí seguir con tino y pula.

La chica que dirigía el lugar miraba a todas partes excepto a mí, pero cuando le pregunté, ella respondió que podía obtener dos tino o tres pulas por una moneda. Aparentemente, ambos eran significativamente más caros que Aria y Poitan.

Miré a Ai Fa para comprobar si estaba realmente bien comprar productos tan extravagantes, solo para recuperar otro, “Haz lo que quieras”, a pesar de que no había dicho nada.

Y así, decidí ir con el tino. Tino tenía una textura como el repollo o la lechuga, mientras que la pula tenía el amargor de un pimiento. Sería genial tener a los dos cerca, pero el tino definitivamente parecía mucho más flexible.

Una vez que empujé a los dos tino dentro, mi bolso terminó tan lleno como el de Ai Fa.

“Vamos”, dijo Ai Fa, dándose la vuelta, y me tambaleé detrás de ella.

Las bolsas pueden haber sido rellenadas  de manera similar, pero la densidad de su contenido era totalmente diferente. Pero incluso mientras llevaba alrededor de 24 kilos, el paso de Ai Fa no se rompió en lo más mínimo, tal como esperaba.

Su fuerza central  debe haber sido seriamente otra cosa. Esa fuerza seguramente vino de ser un cazador, corriendo por el bosque donde el equilibrio era malo.

Ahora bien, el último fue mi tan esperado bocadillo…

“Ah, ¿deberíamos ir con eso?” Pregunté, deteniéndome junto a un puesto que servía carne ahumada. Incluso solo caminando, el olor me golpeó seriamente. Y había una niña pequeña esperando algo, incluso ahora, por lo que parecía estar bastante bien.

Ai Fa me asintió y se acercó al estrado sin dudarlo. “¿Cuánto cuesta este?”

La que manejaba la tienda era una mujer de mediana edad con cabello castaño oscuro, ojos castaños claros y algo de carne definida en sus huesos. Su rostro regordete tembló un poco mientras miraba a Ai Fa.

“Una pequeña cuesta una roja, mientras que una grande cuesta dos”.

“En ese caso, dame uno pequeño”.

La mujer se miró las manos, sin molestarse en responder.

Me asomé al puesto sobre la cabeza de la chica que estaba frente a nosotros. Había una especie de pasta marrón clara hirviendo dentro de una olla bastante grande.

Todavía no sabía qué era más que usar trozos de carne y verduras del tamaño de un bocado, pero el olor era simplemente increíble incluso desde tan lejos. Era un aroma que no había olido en el borde del bosque, como el ajo.

También había algún ingrediente que me recordaba al poitan horneado apilado junto a la olla. Sin embargo, eran más livianos que poitan y también parecían más esponjosos.

Parecían tener diámetros de 20 y 30 centímetros, pero ambos tenían alrededor de cinco milímetros de grosor. El contenido de la olla se volcó sobre uno, y la mujer apretó los bordes en la parte superior, formando una especie de forma de bolsa incómoda. Si tuviera que compararlo con algo, bueno, parecía bastante similar a un manju relleno de carne.

“Toma. Está caliente, así que ten cuidado”.

“¡Gracias!” la joven, que parecía tener más o menos la edad de Rimee Ruu, respondió feliz y extendió ambas manos.

Hice algo de espacio para que ella pudiera pasar fácilmente, y luego la chica se dio vuelta enérgicamente… solo para detenerse en el lugar cuando vio a Ai Fa. En el proceso, el manju que acababa de comprar se le cayó de las manos.

“¡Whoa allí!” Dije mientras lo agarraba reflexivamente, lo cual fue bastante afortunado. Quiero decir, si no hubiera dejado mi equipaje debajo de mis pies, no habría sido capaz de intentarlo. “Aquí. Ten cuidado, ¿de acuerdo?”

La niña parecía bastante asustada, pero aun así se aseguró de hacer una reverencia antes de salir corriendo con su manju.

“Uno pequeño, ¿verdad?” dijo la mujer sin una pizca de amabilidad, y luego se apresuró a juntar la mía. Ciertamente parecía hábil con sus manos, pero no podía decir lo mismo por la forma en que manejaba a los clientes.

Después de pagarlo, los dos caminamos hacia un espacio abierto y nos sentamos.

“Date prisa y come. Una vez que hayas terminado, nos vamos”.

“Claro. Pues bien, ¡gracias por la comida!”

Esta fue la primera vez que me encuentro con un plato desconocido en este mundo desde esa primera noche con el estofado de giba de Ai Fa. En aquel entonces, el olor era increíble, pero mis expectativas se desvanecieron. Así que esta vez me aseguré de no bajar la guardia mientras trabajaba nerviosamente y mordía el manju.

Este sabor… Hmm…

“¿Está bueno?” Ai Fa preguntó, a pesar de no sonar especialmente interesado.

La única respuesta que se me ocurrió es: “Está bien”.

¿Cómo debería decirlo…? Parecía tan increíblemente seguro. No era delicioso, pero tampoco era malo. Fue increíblemente… está bien.

Tal como me había imaginado por el olor, estaba bastante especiado. Era como una mezcla de ajo y cilantro, que era un sabor bastante fuerte, pero no lo odiaba exactamente. La carne era realmente blanca, y parecía tener la grasa afeitada por completo. Su sabor era algo ligero, como el lomo de pollo.

Los trozos de vegetales rojos y verdes eran bastante suaves, como un aria caliente. En realidad, puede haber habido algo de aria allí también.

La pasta marrón que reunió todo probablemente se hizo hirviendo vegetales. Estaba un poco dulce pero no abrumadoramente, y ninguno de los ingredientes parecía estar en conflicto.

Esa cosa blanca que parecía poitan horneado realmente era más suave que el ingrediente más familiar, tal como lo había adivinado de un vistazo, pero tenía una sensación más densa como el naan que se ve en la cocina india en lugar de ser como la capa externa de un manju .

Esos ingredientes se unieron en armonía, se unieron y crearon un sabor increíblemente bueno.

“Sí, bueno, fue una comida perfectamente normal, y fue suficiente para satisfacer mi curiosidad”.

Tenía el tamaño correcto para que no fuera demasiado, incluso para comerlo todo, y tampoco era el tipo de comida que podría destrozar el estómago.

Aunque si tuviera que decirlo, definitivamente costaría demasiado teniendo en cuenta que podría obtener un contenedor de vino de frutas, dos tino o cuatro poitan por el mismo precio.

“¿Quieres un bocado también, Ai Fa?” Le pregunté, solo para obtener una respuesta inmediata, “No necesito ninguna”.

“Hmm, simplemente no puedo aceptar la forma en que la gente menosprecia a la gente del borde del bosque como ‘comedores de giba’ mientras están satisfechos con una comida tan poco interesante. Quiero decir, la carne de giba es mucho más sabrosa que esto.”

“¿Has olvidado el sabor de ese estofado de tu primera noche conmigo, Asuta?”

Por supuesto que no. Sin embargo, eso fue solo porque la gente del borde del bosque no sabía sobre cosas como la sangría. ¿Pero la gente de Genos había vivido aquí incluso más tiempo que la gente del borde del bosque, y sin embargo, nunca pensaron en intentar comer carne de giba?

“Se dice que antes de que la gente del borde del bosque se mudara aquí hace 80 años, giba se desbordó de los bosques y atacó los campos de las personas”. En ese momento, los giba eran el símbolo de calamidad más aterrador imaginable para la gente del dominio Genos”.

Eran un símbolo de calamidad, ¿entonces no garantizaban comer? Que desperdicio.

“No conozco los detalles, pero no creo que haya escasez de carne. Aparentemente, también había muchos pájaros totos gigantes para comer”.

“Gah, ¿la gente se come eso? Bueno, no parece exactamente que sea tan desagradable, aunque… ”

“En cualquier caso, la gente del pueblo temía a Giba. Y ahora, temen a la gente del borde del bosque, que los mata y se los come. Y hoy en día la gente de aquí se ha olvidado de lo aterradora que puede ser giba, y nos hemos convertido en el símbolo de su terror… O al menos, eso es lo que dijo la abuela Jiba”.

“¿Qué demonios? Entonces, en realidad es una discriminación injustificada. ¿Por qué la gente del borde del bosque no intenta hacer nada al respecto?”

“Porque no hay nada inconveniente en ser temido”.

¿Es eso así? Pero no pensé que fuera exactamente tan genial, no tomarme el tiempo para aclarar el malentendido…

No estaba exactamente feliz de haber llegado a la conclusión de que a la gente del borde del bosque que se le daba el hombro frío era al menos parcialmente su propia responsabilidad.

Comencé a ofrecer una refutación de “Pero…” solo para notar algo extraño por el rabillo del ojo, lo que me hizo detenerme abruptamente.

Era la chica de antes. Estaba sentada al borde de la carretera al otro lado, mordiendo el mismo tipo de manju que yo tenía. Si eso fuera todo, no habría pensado en nada, pero cuando la miré, se dio la vuelta rápidamente con una velocidad que me hizo pensar en una ardilla. Sin embargo, un momento después volvió la cabeza hacia mí.

Como la carretera de piedra tenía 10 metros de diámetro, no pude distinguir su expresión en detalle. Sin embargo, ella parecía estar bastante interesada en mí.

“Alguien con la piel pálida como tú con el atuendo del borde del bosque es una vista inusual”, dijo Ai Fa sin emoción, ya que hace mucho que se había dado cuenta de la niña.

“Ya veo”, respondí, observando al niño por el rabillo del ojo.

Parecía tener más o menos la edad de Rimee Ruu, siete u ocho años como máximo. Su cabello castaño oliva se extendía hasta los hombros, y su piel era marrón amarillenta. Llevaba lo que parecía un vestido naranja en lugar de ropa que la envolvía, y sandalias de cuero en los pies.

Su cuerpo y extremidades eran más delgados que los de Rimee Ruu, y se veía seriamente adorable mientras sus mejillas se llenaban de manju.

Seguí adelante e intenté mirarla una vez más. Tomado por sorpresa, la niña se congeló en su lugar, sin poder siquiera apartar la mirada. Cuando seguí adelante y estallé en una sonrisa, la niña parecía tener un poco de manju atrapado en la garganta, pero luego creo que la vi sonreír débilmente.

“¿Qué estás haciendo?”

“Ah, estaba pensando en lo linda que era”.

“…”

“¿Huh? ¡Ah no! ¿Qué pasa con esa mirada? ¡¿Qué tipo de persona crees que soy?!”

“Que molesto. Deja de doblarte fuera de forma. ¿Te gustan los niños…?” preguntó de repente de la nada, golpeándome con un verdadero golpe emocional en el hombro.

“Supongo que sí me preguntas, tendría que decirte que les tengo cariño, sí. Quiero decir, muchos niños pequeños solían venir al lugar de mi viejo junto con sus familias”.

“Ya veo…”

¿Eh? ¿Leí mal el flujo de la conversación?

Pensé en cómo murmuró anoche que no quería que desapareciera, luciendo totalmente diferente a su yo habitual, lo que me puso un poco nerviosa. Tal vez sería mejor si evitara hablar de mi viejo mundo por un tiempo…

Fingiendo que estaba tranquilo, dije con voz alegre: “Aun así, seguro que me siento deprimido cuando pienso en llevar esta carga pesada todo el camino de regreso. ¿No crees que 20 días valen demasiado?”

“Siempre compro esto mucho. O estás diciendo…” Ai Fa comenzó, desviando la mirada,” ¿Que no necesitas comida por 20 días? ”

“Hey, Ai Fa…”

Afortunadamente, no pude gritar: “¡No tengo idea de lo que me va a pasar en el futuro, ya sabes!” Sin embargo, no pude encontrar nada más que decir.

Ai Fa cerró suavemente los ojos, como si no quisiera que yo viera lo que estaba sintiendo.

“Ai Fa, yo…” comencé, decidiendo que necesitaba al menos decir algo. Fui y abrí la boca, aún sin haber ordenado mis pensamientos, solo para ser interrumpido por un bramido totalmente inesperado.

“Si tienes algún tipo de problema, ¡sal y dilo! Todos ustedes son ciudadanos orgullosos de la ciudad de piedra, ¿no es así?”

Era la voz de un joven que claramente había perdido el control de sí mismo. Luego, se escuchó el violento sonido de algo roto.

Un montón de gente gritó, incluida la joven de antes. “¿Q-Qué demonios…? ¿Qué está pasando?”

No entendí muy bien lo que estaba sucediendo. Pero al menos, había restos de una caja de madera rota y mucha fruta amarilla que no reconocí dispersos por la carretera, con dos hombres peleándose en el centro. Todos los demás parecían distanciarse para no verse envueltos en él, pero esa chica estaba en el suelo, parecía completamente aterrorizada.

“¡H-Hey, ¿eso es…?!” Comencé a decir, solo para que Ai Fa se levantara lentamente. Estaba mirando a los dos hombres con una mirada increíblemente peligrosa en sus ojos.

Era la mitad del día, y dos hombres estaban luchando en medio de la calle… Y uno de ellos era claramente un joven del borde del bosque.

***

No reconocí al joven en absoluto, pero claramente era una persona del borde del bosque. Llevaba una capa de giba, así como un chaleco y taparrabos con complejos patrones de remolinos.

Había un cuchillo y una hoja colgando de su cintura, así como un collar de cuernos de giba y colmillos alrededor de su cuello.

Su cabello suelto y despeinado era de color marrón negruzco, tenía la piel más oscura y sus ojos ferozmente brillantes eran azules. No era demasiado alto, pero su cuerpo estaba cubierto de músculos bien tonificados y tenía una cara severa como una estatua de perro león.

El joven del borde del bosque había recogido el rotundo vendedor de la tienda por el cuello y estaba apretando tan fuerte que la cara regordeta del hombre se estaba poniendo roja como la remolacha.

“Asuta, quédate aquí”, dijo Ai Fa, luego se dirigió hacia la multitud. Por alguna razón, todavía tenía el vino de frutas colgando de su mano.

Aun así, no podía simplemente sentarme allí y mirar en silencio. Puede que no haya sido adecuado para romper esa pelea, pero no podría dejar a esa pobre niña atemorizada, ¿verdad?

Ai Fa se abría camino a través de la multitud, pero seguí adelante, di la vuelta y me dirigí hacia la chica.

“Oye, ¿por qué no intentas decir eso otra vez? ¿Quién es un ‘apestoso comedor de giba’, eh? Dijiste que estaba arruinando el sabor de tu comida, ¿no? ¿Por qué no vuelves a decir eso claramente para que pueda oírte, alto y poderoso habitante de la ciudad de piedra?”

Seguro que parecía que el joven del borde del bosque era bueno  y borracho. Tenía un contenedor con un diseño familiar en la mano, tenía la cara roja y estaba alzando la voz, y no podía imaginar que todo se debiera a que estaba enojado.

Supongo que hay personas que beben vino en medio del día así, ¿eh?

¿Pero qué hay de su trabajo cazando giba? Pensé para mí misma mientras me acercaba apresuradamente a la chica.

Sin embargo, cuando estaba a unos cinco metros de la meta, nuevos gritos de asombro llenaron el aire. Esto fue acompañado por el siniestro sonido de algo rompiéndose con un choque.

El hombre del borde del bosque había tirado su vino y sacado su cuchillo. Bueno, lo llamo un cuchillo, pero tenía una hoja más gruesa como un hacha y parecía de unos 20 centímetros de largo. Era una herramienta realmente peligrosa destinada a cortar pieles de giba y carne.

¡Fue y lo saco! ¡Eso es demasiado violento, pase lo que pase!

No había más tiempo para tomar un desvío relajado, así que comencé a correr, dejando de lado a los espectadores.

El manju a medio comer cayó de las manos de la niña, y pronto fue pisoteado para pegar bajo los pies de los hombres que se peleaban. Eso era lo cerca que estaban ahora.

Entonces, de repente hubo otro sonido nuevo: Ai Fa golpeó al hombre en la parte posterior de la cabeza con el contenedor de vino de frutas que sostenía. Se hizo añicos, llenando la calle con aún más del dulce aroma del vino de frutas.

El hombre se cayó, dando un salto mortal… Y afortunadamente de alguna manera logré levantar a la chica antes de que cayera encima de ella.

“Si te gusta tanto el vino, entonces puedes tomar el mío también, ¡tonto!” Dijo Ai Fa con una voz como el acero, cortando la conmoción en el aire. “Hay un gran tabú contra causar disturbios en la ciudad de piedra, ya sabes. Traes vergüenza al borde del bosque”.

El hombre estaba acuclillado y sosteniéndose la nuca, e inclinó el cuello para mirar a Ai Fa. Esos ojos apagados giraban con tanto odio y mala voluntad que era difícil mirarlos.

“Eres esa cazadora del clan Fa, ¿no es así…? ¿C-Crees que te irás a la ligera después de tratarme de esta manera…?”

“¿Quién rompió exactamente las leyes del borde del bosque, aquí? No tengo nada de qué avergonzarme.”

“Ooh… Qué mujer tan genial…” murmuró alguien, pero no era el hombre del borde del bosque. Más bien, había venido de un tipo que no reconocí que se había arrodillado a mi lado en algún momento.

“Esta es la primera vez que veo una cazadora. Si ese collar es el verdadero negocio, entonces ella seguramente parece ser buena en eso”.

“¿Q-Qué demonios…? ¿Quién eres tú?” Le pregunté al hombre que me seguía mientras me alejaba del centro de la conmoción, para no interponerme en el camino de Ai Fa.

“¿Quién, yo? Solo soy un transeúnte. Estaba planeando proteger a esa pobre chica allí, pero terminaste golpeándome.”

Parecía un tipo distante y tranquilo, de alguna manera. Su piel de color blanco marfil no se había bronceado demasiado por el sol, su cabello era de un color dorado que era raro tanto en la ciudad de correos como en el borde del bosque, y sus ojos tenían un poco de color violeta. .

Su larga capa envolvió su cuerpo, así que no pude distinguir su físico, pero tenía una cara seriamente larga y también parecía bastante alto. Sin embargo, ahora estaba inclinado y mirándome.

Su cabello tanto en la cabeza como en la cara había crecido de una manera que me hizo sospechar que era por pura pereza, y tenía los ojos caídos y una nariz prominente.

Esos ojos inusualmente coloreados de él extrañamente parecían tener tanto una calma madura como una mirada infantil de inocencia, lo que hacía realmente difícil adivinar cuántos años tenía realmente.

“Ooh, parece que esos funcionarios perezosos finalmente están en movimiento, ¿eh?” dijo el hombre mientras señalaba con un dedo desgarbado. Miré en esa dirección, y vi a algunos hombres que llevaban largas lanzas abriéndose paso entre la multitud, pareciendo seriamente atrapados con los pies planos y luchando por responder.

“Todos ustedes, ¿qué están haciendo en medio de la calle?”

Llevaban cascos de cuero y placas en el pecho, y tenían la piel marrón amarillenta y algunos físicos de aspecto bastante robusto. Desde su imponente equipo, parecían ser guardias o algo a cargo de proteger la tranquilidad de esta ciudad de correos.

Di un suspiro de alivio, pero luego vi que las puntas de esas lanzas apuntaban también a Ai Fa, haciéndome congelar en su lugar por el asombro.