Isekai Ryouri (NL)

Volumen 3

Prologo: Sobre El Barranco

Ante mí había una vista que me hacía sentir que mis entrañas se estaban marchitando de miedo.

Estábamos en un barranco, a unos treinta minutos a pie de la casa del Fa. Habíamos pasado por el río donde normalmente me lavaba, caminamos por un camino áspero y rocoso con el Monte Morga visible a nuestra derecha, y finalmente llegamos a este grandioso y aterrador paisaje.

Realmente era un barranco.

Había un río que no sabía el nombre de cortar entre las empinadas paredes de los acantilados, haciendo mucho ruido.

Sin embargo, ese ruido venía de muy lejos. La distancia entre la cima del acantilado donde nos paramos y ese río furioso debe haber sido de unos 20 metros.

20 metros… según los estándares de mi mundo, tenía aproximadamente la misma altura que un edificio de cinco pisos de altura.

Bueno, no era exactamente bueno con estar tan alto, pero no era exactamente como si tuviera un fuerte miedo a las alturas. Mirando hacia abajo desde la cima del acantilado en el río que fluía debajo, apenas podía evitar que mis piernas temblaran.

Sin embargo, la verdadera fuente del terror no era el barranco en sí. No, lo que realmente me sacudió fue el puente de cuerda hecho a mano de aspecto inestable que se extendía.

“Me estás tomando el pelo, ¿verdad…?” Pregunté, solo para que mi amado benefactor preguntara: “¿Qué?” con una mirada realmente perpleja en su rostro.

No pude evitar suspirar ante esa reacción.

Parecía tener aproximadamente 20 metros de diámetro y el puente tenía un metro de ancho. Tenía un aspecto realmente primitivo, hecho de troncos viejos atados con vides secas de color marrón claro.

A pesar de que no soplaba viento, todavía se balanceaba de un lado a otro. Podía sentir mi columna vertebral cediendo solo por la idea de pisarla.

“Tengo que decir que esto me pone extremadamente nervioso…” Me forcé a salir.

Esto puede haber sido lo más tenso que había estado desde que vine a este otro mundo, pero mi benefactor me devolvió una mirada dudosa.

Ella era una persona del borde del bosque y la cabeza del clan Fa, Ai Fa. Y probablemente no hace falta decirlo, pero ella me salvó la vida y me dejó vivir con ella, y era una cazadora atrevida e intrépida.

Su largo cabello estaba recogido de una manera compleja, y era una rubia dorada que era rara aquí en el borde del bosque. Sus ojos brillantes y firmemente brillantes eran de un azul profundo. Y su cuerpo delgado y cuidadosamente pulido tenía un color cremoso y chocolate.

Aunque tenía una estatura promedio y su cuerpo era delgado, había una abrumadora vivacidad en ella.

Llevaba puesta la capa de piel de giba que demostraba que era una cazadora, así como una tela de hermosos colores que ocultaba solo su pecho y cintura.

Un cuchillo y una espada salvaje colgaban de esa cintura apretada de ella, y ella tenía calzado de cuero envuelto alrededor de los hermosos contornos de sus piernas y pies.

Un collar hecho con un buen número de colmillos y cuernos colgaba sobre su pecho bien formado, y su muñeca delgada tenía un brazalete hecho de fruta grigee, destinado a alejar a los insectos.

Sí, ese era el aspecto habitual de Ai Fa.

Anoche, después de que mi trabajo para la celebración anticipada de los Rutim se hubiera completado de manera segura y estuviéramos juntos en la casa asignada a nosotros, ella parecía diferente de lo habitual, pero esa anormalidad parecía haber desaparecido por completo con el amanecer de este nuevo día. .

Eso fue algo bueno. Realmente lo era, pero… quiero decir, no podía exactamente sentirme feliz mientras enfrentaba el terror frente a mí ahora.

“Asuta, ¿podría ser que intentas decirme que estás preocupado por este puente?” Ai Fa preguntó con calma. “En ese caso, tal preocupación es innecesaria. Este puente se hizo con vides fibaha. Incluso si parecen bastante delgados, permanecen duros como el cabello humano, incluso después de marchitarse así”.

Incluso si fueran más difíciles de lo que parecían estar diciendo, eso no causó que mis temores desaparecieran. Y quiero decir, ¿no sería mejor para la tranquilidad usar algo que se viera más grueso y resistente incluso si fuera un poco más débil?

“Este puente ha colgado aquí desde antes de que yo naciera, en uso constante sin ningún problema hasta el día de hoy. No hay forma de que sea peligroso”.

“No, eso es ilógico, ¡decir que algo estará bien hoy solo porque todavía no ha tenido ningún problema! Y espera, cuanto más tiempo se usa, más desgastado debe estar, ¿verdad?”

“Es por eso que debemos verificar cuidadosamente que las vides no hayan sido dañadas en ningún lado mientras pasamos. Y cada vez que alguien encuentra un problema, debe repararlo. Así es como hemos mantenido este puente durante décadas”.

“Cabeza del clan Ai Fa… Aun así, no puedo eliminar la inquietud que siento por dentro. ¿No hay rutas más seguras y agradables?”

“Esta es la ruta más rápida entre mi casa y la ciudad de correos de Genos. Cualquier otro camino tomaría varias veces más tiempo”.

Bien, estábamos en el medio de dirigirnos a la ciudad para intercambiar cuernos de giba y colmillos por comida. Normalmente, Ai Fa se habría encargado de reponer nuestros aria, poitan y vino de frutas con más tiempo de sobra, pero tuvimos  todo el  enfrentamiento con Donda Ruu.

Eso finalmente se resolvió ayer, así que después de regresar a casa y ocuparnos de las tareas básicas de revisar la despensa y recoger las hojas pico, salimos en este viaje.

Esta fue mi primera oportunidad de salir del borde del bosque desde que llegué a este otro mundo hace 20 días. Mi corazón temblaba de excitación e inquietud hacia lo desconocido en el que me estaba aventurando.

Y actualmente, estaba temblando por una razón completamente diferente.

“¿No podemos superar esto ya? Si sigues dudando aquí, el sol terminará poniéndose antes de que realicemos nuestra tarea”.

“¡Por favor, solo espera! Um… ¿te importaría si tomo tu mano?”

Las cejas de Ai Fa se fruncieron de inmediato, y ella dijo: “Me niego firmemente. ¿Qué propósito habría detrás de eso? Después de todo, si el puente se cayera, sostener mi mano seguramente no sería suficiente para salvar tu vida. Si necesita aferrarse a algo, entonces debe convertirlo en las vides que sostienen el puente”.

“N-No, pero ya ves, ¡solo quiero tranquilidad! ¡Siento que puedo confiar mucho más en la amada cabeza de mi clan que en estas vides inestables!”

“Si no te detienes con esa manera irritante de hablar de inmediato, te cortaré la lengua”.

“Lo siento.”

“En cualquier caso, me niego a tomarme de las manos sin sentido. Si te sientes tan incómoda, solo agárrate del borde de mi capa o algo así”, dijo fría y calmadamente antes de volver hacia el puente.

Agarré su capa y me aferré firmemente con ambas manos. “¡Está bien, estoy listo! ¡Vamos! ”

Ai Fa dio un profundo suspiro sin siquiera darse la vuelta, luego comenzó a caminar sin una pizca de vacilación. Ya no tenía más opción que seguirla como uno de los drones de un cierto juego de disparos espaciales.

El pie de Ai Fa tocó uno de los troncos, y el puente se balanceó mucho más de lo que lo había hecho hasta ahora.

Me puse nervioso y también pisé los troncos. El puente se sacudió una vez más.

“¡Gyah!”

“Eres tan ruidoso”.

“¡Espera! ¡Al menos agárrate a la cuerda! Quiero decir, ¡tengo las dos manos ocupadas, aquí! ”

“Realmente eres ruidoso”.

Ai Fa simplemente siguió avanzando a su ritmo alegre habitual, sin prestar atención a mis preocupaciones.

Balancearse, balancearse… Hombre, seguro que se balancea como un loco.

No había manera de que me atreviera a mirar hacia abajo. Si lo hiciera, probablemente colapsaría en el acto.

Pero aun así, el puente de cuerda tenía solo 10 metros de largo. Ya de alguna manera ya habíamos recorrido la mitad de esa distancia, así que sentí que si mantenía mi mirada fija en la parte posterior de la cabeza de Ai Fa, podría superar esto de alguna manera.

Sin embargo…

“… Hmm. Las vides se están deshilachando”, dijo Ai Fa con indiferencia, lo que provocó que la lógica y la calma en mí se juntaran y volaran a la distancia.

“¡Gyah!” Grité y abracé con fuerza el torso de Ai Fa, poniendo mi peso sobre ella. El puente se balanceaba de un lado a otro, y parecía que mis pies se iban a resbalar de los troncos.

“¡Ah! ¡Gyah! ¡Waaaah!”

“¡Tonto! ¡Suéltame! ¿De verdad quieres morir, eh?” Ai Fa rugió enojada, aquí su voz resonando por todo el barranco.

Fue como si los rifles saludaran, señalando el comienzo de lo que sería un día muy largo.