Isekai Mahou wa Okureteru (NL)

Volumen 2

Prologo: Convocado Contra Su Voluntad

En este mundo, existe un sistema de magia relativamente nuevo, conspicuo y único, incluso cuando se lo mira desde la perspectiva de la larga historia de la magia, llamado teoría de la magia moderna. Su origen se remonta a cuatrocientos años hasta el siglo XVII. Recopiló teorías preexistentes de magia y las reunió en una sola base.

En general, un solo sistema de Magia se basa típicamente en una sola teoría de Magia.  Entre los  eruditos, esto  es solo sentido común.

La ideología y la historia tienen un solo origen, por ejemplo, y lo mismo ocurre con la religión. Era común crear magia mezclando sistemas similares como la Cabalá, la adivinación de estrellas y la numerología. Pero las teorías nacidas de la mezcla de ideologías fundamentalmente diferentes nunca sucedieron.

Los hechizos de brujería y yin-yang, por ejemplo, provienen de una combinación de magias de diferentes sistemas, pero que eran increíblemente similares. El hecho de que los sistemas de Magia solo pudieran usarse juntos si compartían una teoría fundacional era, en general, considerado una ley inquebrantable.

Y con eso, Magia no tuvo más remedio que limitarse a ciertos ámbitos. Se podría decir que faltaba su naturaleza general, y se hizo obvio que la magia tendría que ser capaz de mezclarse desde diferentes fundamentos para poder desarrollarse más como un todo. Y fue en esta encrucijada que la evolución de la magia se vio obligada a paralizarse por un tiempo.

El objetivo final de muchos magos eran los Registros Akáshicos. Para decirlo en los términos más simples posibles, la verdad. Se le llamó la puerta definitiva del orden más alto que nunca podría cruzarse.

Los magos de la época pensaron que su evolución tenía que continuar aunque solo fuera para perseguir este sueño. Y así, a los magos del siglo XVI se les ocurrió la idea de reunir a todos los magos con el objetivo de unificar toda la teoría mágica.

Reunirían todo su conocimiento y luego trabajarían para llenar los vacíos. Si pudieran seguir esta teoría de la forma en que realmente soñaron, la comprensión de la magia de todo el mundo podría aumentar drásticamente. Y con ese fin, los magos de la época pusieron en marcha su plan.

Lo que nació de esta teoría absurda y sin principios fue de hecho la magia formada por la unión de magias de diferentes sistemas: la teoría de la magia moderna.

Aquellos que ejercían esta magia se hicieron conocidos como magos modernos. Eran magos que se habían convertido en herejes a los ojos de otros magos.

Y ahora, corriendo a través de esta era llamada era moderna, había un cierto mago moderno que usó dicha teoría de la magia moderna. Incapaz de luchar contra el dolor que amenazaba con aplastarlo y apenas capaz de soportar el peso de la madre muerta que nadie había podido salvar, vislumbró un humilde sueño que lo cautivó.

Era el sueño de su padre. Y retomando ese sueño, siguió corriendo. Prueba tras prueba lo azotó y la dificultad mordió sus tobillos, pero aun así, el joven continuó.

El objetivo que perseguía este joven, el objetivo que su padre había deseado, no era en absoluto extraordinario. No era más que un simple y escaso deseo.

Y así, para el padre de este joven, que lo superó como mago una y otra vez, no debería haber sido un sueño particularmente difícil de lograr.

Pero el padre de este joven nunca fue capaz de hacer realidad su sueño y nunca hizo realidad ese humilde deseo: ver sonreír a quienes lo rodeaban. Quería una felicidad modesta e interminable para su pequeño puñado de seres queridos. Por eso, ese día, cuando el joven escuchó el deseo de su padre, le dijo a su padre que trabajaría junto a él para lograrlo…

Los pájaros que nunca vuelan alto nunca caen demasiado lejos. Nunca aprenden la desesperación que está provocando que sus cuerpos se estrellen contra la tierra.

El padre del joven le dijo que si estaba buscando la felicidad, definitivamente no debería perseguirlo. Pero este joven no escuchó a su padre. Ya estaba encantado con la idea de intentar alcanzar a su padre, que siempre estaba dos pasos por delante de él persiguiendo misterios y sueños.

Este joven quería perseguir las mismas cosas. Quería convertirse en mago como su padre.

Algún día, haría realidad ese deseo. Y así el joven siguió corriendo. Creía que el deseo de su padre, ese sueño, le llegaría si seguía el camino correcto. Pero ahora ese joven se ha encontrado muy, muy lejos de donde pretendía estar.

No estaba en el mundo moderno, sino en uno con el que los niños y las niñas suelen fantasear. Era una tierra de espadas y hechicería, héroes y Señores Demonios.

Pero las cosas que este joven aspiraba a lograr, las cosas que deseaba, las cosas que juró lograr y las cosas que debería proteger … ninguna de ellas estaba aquí en este lugar.

Se había alejado temporalmente del mundo de los magos y la sed de sangre desenfrenada en ese fatídico día. Estaba descansando, simplemente pasando tiempo como un estudiante normal, el día en que fue convocado contra su voluntad junto a sus amigos y se le pidió que subyugara a un Señor Demonio.

Había rechazado la solicitud y desde entonces se separó de sus amigos que la habían aceptado. Debido a  que este joven tenía sus propios objetivos, no pudo acompañarlos en su búsqueda.

Debe cumplir el deseo de su padre fallecido. Y para cumplir su promesa, debe regresar a su propio mundo. Entonces, el día que este joven partió del castillo, su primer destino fue un lugar donde se reunieron muchos aventureros.

“Hola, lo siento, pero ¿usas a menudo el Pabellón Crepuscular?”

Mientras el joven esperaba frente al mostrador de recepción del Gremio de Aventureros conocido como el Pabellón Crepuscular, alguien lo llamó. Era una voz cortés y dulce, y la dueña no era otra que la joven que había estado esperando en la fila junto a él.

Tenía el pelo carmesí oscuro como el sol de la tarde y una figura galante. Se volvió hacia el joven.

Su rostro de porcelana, su mirada afilada y su cabello ardiente casi la hacían parecer una cuchilla cubierta de sangre. Tanto sus rasgos como su ropa eran elegantes.

Llevaba un sombrero de ala ancha y una armadura ligera propia de un caballero, todo en blanco acentuado con reflejos rojos. Su figura era esbelta y era probable que tuviera elegantes miembros debajo de su armadura. Era tan hermosa que el joven soltó un suspiro sin querer al verla.

Por su postura sentada en el banco, pudo comprender que se movía con calma y compostura. Si la comparara con algo, habría sido una espada elegante.

Aunque el joven solo había incursionado en el manejo de la espada, podía decir que esta mujer no dejaba aberturas, incluso sentada donde estaba. Ella debe haber sido una maestra bastante hábil.

Por su físico y figura, supuso que debía tener su edad, pero el aura misteriosa que desprendía le hizo pensarlo dos veces. No había esperado que ella lo llamara y respondió con una leve vacilación en su voz.

“No, todo lo contrario. Para decirte la verdad, esta es mi primera vez aquí”.

“Qué casualidad. Al igual que tú, esta es la primera vez que vengo a este tipo de lugar. Estaba un poco preocupado si estaba o no en la línea correcta para postularme como miembro”.

“En ese caso, creo que estás en el lugar correcto. Parece que todas las personas que aceptan comisiones están usando oficinas distintas a este”.

El joven señaló hacia la esquina del edificio donde la gente estaba ocupada bebiendo alegremente. Junto a ellos había otro mostrador donde se reunían los que parecían ser visitantes mucho más frecuentes del establecimiento.

“¿Eso significa que te postulas como aventurero?”

“Si. Aunque es vergonzoso, soy una mujer que solo sabe pelear. Pensé que este sería el lugar más adecuado para ganarme la vida”.

La joven golpeó la empuñadura de la espada en su cintura mientras le daba al joven una sonrisa de autocrítica. Como había adivinado el joven, era una que vivía de la espada.

Debería haber sido obvio al ver la espada larga a su lado, pero en lugar de verse como un soldado, parecía más un caballero. Mientras el joven reflexionaba sobre su situación, ella se presentó.

“Soy Lefille Grakis. Si le parece bien, ¿podría decirme su nombre?”

“¿Eh?”

Ante la repentina solicitud de intercambiar nombres, el joven levantó una voz perpleja. Al ver esto, la joven, Lefille, hizo una expresión incómoda y se explicó.

“Oh, lo siento. Estoy seguro de que le sorprende que le pregunte su nombre tan de repente, pero tengo una buena razón”.

“… ¿Cuál es?”

“No tienes que estar tan en guardia. Esta mañana, cuando fui a la Iglesia de la Salvación, fui nominado para recibir un oráculo de Alshuna. Hoy me dijeron que intercambiara nombres con las personas cercanas a mí”.

Lefille parecía un poco molesta mientras  suspiraba. La Iglesia de la Salvación era el lugar de culto de la única deidad de la tierra, la Diosa Alshuna. En este mundo, era la religión con más creyentes detrás.

De vuelta en el castillo, el joven también había escuchado que era un oráculo quien había adivinado detalles sobre el Señor Demonio y sus acciones.

“¿Por qué obtendrías ese tipo de revelación?”

“Yo mismo no tengo ni idea. Según el obispo de Metel, el oráculo de Alshuna simplemente decía que alguien a quien llame hoy se involucrará conmigo de una forma u otra”.

“¿Y por eso me preguntaste mi nombre?”

“Exactamente.”

“Un oráculo, ¿eh? Qué dudoso… Lo siento, fue grosero por mi parte”.

El joven había revelado sus sentimientos honestos después de escuchar tal historia, pero rápidamente se disculpó. Si había ido a la Iglesia de la Salvación, ella misma debía haber sido una creyente.

Hacer eso a la ligera era insensible. Se estaba pateando a sí mismo por hacerlo, pero Lefille regresó con una risa suave.

“Heehee, muy bien puede ser, pero debes tener cuidado. No me importa particularmente, pero si los creyentes más devotos escucharan eso, te espera un sermón tedioso”.

“Fui bastante precipitado. Seré más cuidadoso.”

“Bueno, es posible que no esté en condiciones de decir tal cosa después de presentar una objeción tan pronto como escuché el oráculo”.

“¿Oh…?”

El joven sin darse cuenta comenzó a mirar fijamente el rostro de la mujer sentada a su lado. Parecía que el tedioso sermón que había mencionado era algo por lo que había pasado personalmente esta mañana.

“Realmente, pensar que mi oración habitual se convertiría en tal cosa… Gracias a esto, mi horario se ha retrasado bastante”.

“Tienes mi simpatía”.

“Bueno, estoy pagando por mis propios errores. No tiene sentido quejarse de eso”.

“¿Así que has sido diligente y has estado haciendo lo que sugirió el oráculo todo el día?”

“Sí, serías la décima persona a la que le pregunte”.

“Eso suena… terriblemente problemático”.

“Realmente lo es. Si explico que estoy preguntando porque el oráculo me lo dijo, todos piensan que soy una persona extraña… Incluso hubo algunos hombres que pensaron que les estaba dando una especie de invitación vulgar”.

“Ah…”

El joven asintió con la cabeza y murmuró como si entendiera completamente cuando Lefille dejó escapar un suspiro sombrío. No podía decir que él personalmente pensara que ella era extraña, pero cualquier hombre que no fuera sumamente cauteloso estaría emocionado de tener una hermosa chica como ella acercándose a ellos.

Era fácil imaginar cómo pensarían que estaba tratando de seducirlos cuando ella insistiera en conocer el nombre de un completo extraño. Su profundo suspiro indicó cuántas veces había tenido que salir de esa situación.

“Entonces, ¿qué te parece? Si te parece bien, aún me gustaría escuchar tu nombre”.

Decidiendo que no sería un problema, el joven se nombró a sí mismo. “Suimei Yakagi”.

Así fue como el mago moderno Yakagi Suimei conoció a Lefille Grakis.