Maou-sama Retry! (NL)

Volumen 1

Capitulo 2: La Santa Doncella En Oro

Parte 11

El Viaje Comienza

En la calle principal, los heridos se llevaban mientras la gente restauraba apresuradamente la ciudad.

Queen, que habría estado dirigiendo el esfuerzo y ladrando a todos bajo cualquier otra circunstancia, estaba sentada en su silla mirando hacia el espacio. No parecía que pudiera reunir el entusiasmo para hacerse cargo de la restauración hoy.

Si bien ahora puede haber parecido bastante sin espinas, Fuji tenía una suave sonrisa mirándola. Ningún hombre en este país pudo cumplir con sus estándares antes. A Fuji le preocupaba que su reina fuera una vieja sirvienta.

“Qué hombre tan descarado era…”, pensó Fuji. El hombre no dudó en enfrentarse a los satanistas, y parecía que incluso Tártaro lo estaba evitando.

Tártaro no era el nombre del líquido en sí, sino un agujero gigante ubicado en el centro del continente. Durante mucho tiempo, los países del norte habían estado en guerra constante.

El hoyo se ganó su nombre cuando la gente de esos países comenzó a arrojar los cadáveres de las batallas al hoyo. El entierro tomó tiempo, tierra y dinero. Esos países habían cortado esquinas, y decidieron tirar todo por el agujero, se rumoreaba que era la puerta de entrada al infierno. Los muertos no cuentan cuentos, de hecho.

Se rumoreaba que un líquido extraño surgía del agujero de vez en cuando y atacaba a las personas. El líquido negro, del que se rumoreaba que salía del agujero una vez cada siglo, era el enemigo de los adoradores de ángeles, ya que agotaba a todos sus santos poderes.

“Por lo menos, ese hombre no sirve a nuestro Ángel”. Fuji concluyó, y no estaba equivocado. Tártaro lo habría agotado de sus poderes si hubiera estado usando poderes sagrados o poderes alineados con los ángeles. La verdad era que solo era un Bosozoku. El polo opuesto de un ángel, en cierto modo. Se suponía que debía estar del lado del desarraigo de la ley y el orden.

“En cualquier caso, debemos invitar oficialmente a ese hombre a nuestro país”. Fuji continuó su pensamiento… pero nunca soñó que este hombre y el Señor Demonio fueran las dos caras de la misma moneda.

***

—En el interior de un carruaje rumbo a la Ciudad Santa, Holylight.

“… Y luego, ese Dragonborn golpeó el suelo, ¡y la gente salió volando!¡Como bwoosh!”

“¡Wow, eso es increíble!”

Después de abandonar la ciudad de Yahooo, llena de cicatrices de batalla, Luna describía orgullosamente la batalla a Aku, como si la hubiera visto ella misma. Luna estuvo inconsciente durante la batalla, pero el pobre Aku no dudó de las palabras de la Doncella Santa. Por supuesto, el Señor Demonio estaba haciendo una mueca a cada paso de la historia.

(¡Dragonborn…! ¡Es solo un punk de Bosozoku!)

El Señor Demonio contempló saltar del carruaje por pura vergüenza. Si bien su cuerpo era incontrolable durante el cambio de personaje, estuvo consciente todo el tiempo, para su devastación.

“¡Señor Demonio, tal vez ese Dragonborn también te pateará el trasero!, ¡Ese será el día!”

“Uh huh…”

Él respondió con apatía. Después de todo, era imposible que ambos existieran al mismo tiempo.

“De todos modos, ¿dónde están los caballeros que llevabas contigo, Luna?”

“¿Hmm? Los envié a casa. Ya no los necesito”.

“Tú…”

Alguien en la cima del gobierno de una nación va solo… Eso era algo impensable para los estándares del Señor Demonio. Especialmente cuando hubo un ataque terrorista y un intento de asesinato el día anterior.

“¿Qué vas a hacer si hay otra situación de emergencia?”

“… E-Estarás allí”.

“¿Huh? ¿Cuándo me inscribí para ser tu guardaespaldas?”

“¡Cállate!   ¡Sé  que  estás  saltando  de  alegría  por  estar  conmigo!

¡Pervertido!”

Una vena sobresalía de la frente del Señor Demonio, pero Aku (que estaba sentado entre ellos) se echó a reír.

“¡Será muy divertido! ¡Siempre he querido ir a una aventura como esta! ”

“¿De verdad…?”

“Mira, escucha a Aku. ¡Júrame servirme, Señor Demonio!”

Mirando el dedo de justicia de Luna que apuntaba a su rostro, el Señor Demonio solo podía suspirar.

Después de un tiempo transcurrido en silencio, el Señor Demonio pensó en algunos artículos para elaborar.

“Bien, iremos juntos a la Ciudad Santa. No está de más que tengas este carro… Pero tienes que cambiar a algo más discreto”.

“¿C-Cambiar…? Estás tratando de meterme en algo pervertido, ¿verdad?”

“Eres una imbécil. Ponte esto.”

“¿Qué es esto…? ¿Y dónde lo guardabas?”

El Señor Demonio había producido una chaqueta. Pensó que ella no llamaría demasiado la atención sobre sí misma caminando por la calle en algo así.

Tenía otras opciones para sacar, como un uniforme de la escuela secundaria, un atuendo de sirvienta, un vestido de porcelana y muchos más, pero pensó que sacar cualquiera de esos solo le habría dado a Luna más municiones para llamarlo un pervertido.

Por otro lado, la defensa de cualquier ropa normal de este mundo no fue satisfactoria. Al final, a regañadientes decidió morder la bala y gastar parte de su precioso SP.

“Una defensa de 10 no es demasiado buena, pero nuestra prioridad es evitar que las personas sepan quién eres”.

“¿10…? Ya sabes, a veces dices cosas raras.”

Haciendo caso omiso de ella, el Señor Demonio creó otro artículo. … Un pincho de dulce bola de masa hervida. Este fue un artículo de una sola vez que curó el SP del usuario en 50. En este mundo, eso lo clasificó como una droga milagrosa.

“Aku. Debes estar cansado del viaje. Sé que no tienes mucha experiencia en carruajes. Tener algunos de estos. Son dulces de mi país”.

“Wow… ¡Son tan lindos! Un aroma tan dulce, también… ¡Gracias, Señor Demonio!”

“E-Eso se ve bien… ¡Yo también quiero uno!”

“Hay media docena de ellos. Cálmate. Voy a fumar afuera un rato. Adelante, cámbiate mientras estoy allá afuera”.

El Señor Demonio salió del carruaje para ser recibido por un cielo despejado sobre él. Mirándolo, encendió un cigarrillo con práctica eficiencia.

(Mejor muevo algo de SP de alguna manera…)

Su SP ya había bajado a solo 50 y algunos cambios, que no era un número cómodo. Sin embargo, el Señor Demonio podría culpar a parte de él por haber echado a perder a Aku y Luna.

(Al igual que el juego, gano SP cuando peleo…)

La primera opción que se me ocurrió fue jugar a aventurero, el elemento básico de los mundos de fantasía. De hecho, también había aventureros en este mundo.

Asumieron varias misiones, y algunos se especializaron en la caza de monstruos, mientras que otros eran más como cazadores de tesoros. Como siempre había guerras en el norte, el trabajo mercenario tampoco era una forma impopular de poner comida en la mesa.

(No puedo tener personas que me consideren seriamente como un Señor Demonio. Tal vez debería encontrar un trabajo diario).

Akira Ono, un hombre japonés trabajador en su núcleo, también consideró esta opción. Por otro lado, la posibilidad de trabajar de nueve a cinco en un mundo de fantasía, de todos los lugares, no era agradable.

“Señorita Doncella Santa, ¡esto es tan dulce!”

“Ah, deja de ser tan infantil, Aku. Una dama de verdad disfruta de los dulces en modera… ¡Mmmmmm!”

“¡Incluso siento que ya no estoy cansada!”

“Ese pervertido… ¡Probablemente esté tratando de bajar a nuestros guardias con comida para que pueda hacernos cosas indescriptibles! ¡Pero estos son tan buenos!”

“Es como si estuvieran haciendo una parodia”, murmuró el Señor Demonio, escuchando el alboroto del carruaje. Al mismo tiempo, su audición ultra aguda despertó otra conmoción: la gente gritaba y las espadas chocaban. Miró a lo lejos para ver a un par de mujeres perseguidas por criaturas como lobos.

(Pides y recibirás…)

La esquina de su labio se alzó en una sonrisa. Fue una expresión que realmente se convirtió en un Señor Demonio.