Hai to Gensou no Grimgar

Volumen 10: Las Canciones de Amor no Llegarán

Capitulo 9: ¿Por Qué?

Parte 1

…Entonces, me di cuenta de algo.

Estás bebiendo una soda, ¿sí? Aunque te quejas de que te duele la garganta, estás bebiendo bebidas carbonatadas todo el tiempo, ¿verdad?

Esa soda, la que estás bebiendo. Dámela. Aunque sea solo un sorbo.

Estoy sediento.

Mi garganta está seca, no es gracioso.

Estás sentada frente a esa máquina expendedora, como siempre, bebiendo una soda.

¿Es de noche?

Puede que ya sea bastante tarde en la noche.

Está oscuro, después de todo.

Totalmente oscuro.

Donde sea que mire… es muy oscuro, o más bien, negro como boca de lobo.

Excepto por esa máquina expendedora.

Estás iluminada por la luz de la máquina expendedora.

Pero no puedo ver tu rostro. Es lo único que no puedo ver.

Extraño. Debería saber cómo se ve.¿Entonces por qué?

¿Quién eres tú…?

Te estoy preguntado. Lo he estado por un tiempo ahora. Una y otra vez.

¿No puedes oírme?

¿Y tú, estás colgando la cabeza? ¿Es por eso que no puedo ver turostro?

Estás bebiendo una soda, como siempre. Una y otra vez, continúas bebiendo. Nada más que soda.

Gracias a eso, hay latas vacías dando vueltas. Decenas, cientos, tal vez más.

Aquí, ahí, en todas partes. Están más que simplemente dando vueltas. Las innumerables latas vacías, parece que tú y la máquina expendedora están a punto de ser enterradas en ellas.

Oye, tú. Es peligroso estar ahí.

Heeeey. Estoy alzando mi voz para advertirte.

Es peligroso, ¿de acuerdo?

Las latas vacías. Son extrañas. Siguen creciendo en número.

¿De dónde están viviendo esas latas vacías?

Heeeey.

Heeeey, dije.

Por favor dame una respuesta.

¿Por qué es? No lo sé, pero solo puedo llamarte desde aquí.

No puedes ir ahí.

Lo sabes, ¿no?

Al escuchar una voz familiar, me vuelvo para mirar.

Hay alguien ahí.

En la negra oscuridad, hay alguien.

Sé que él está ahí. Pero no puedo verlo. Él habla.

No es a donde perteneces.

Así es, alguien más dice. No puedes ir ahí. Aún no. Tampoco puedes venir aquí.

¿Qué hay con eso?

¿Qué quieren decir?

¿Entonces tengo que quedarme aquí…?

Si quieres venir, puedes.

No. Eso no es bueno.

Sí. Tienes razón. Es demasiado pronto.

Sí. No vayas ahí. Tampoco deberías venir aquí.

Sí, dicen eso, pero entonces estaré solo.

Está muy oscuro.

No hay nada.

Estando aquí solo, podría no ser imposible para mí, pero no puedo soportarlo.

Ven, dices desde el frente de la máquina expendedora.

Cuando miro, estás de pie.

Estabas mirando hacia abajo, pero ya no. Levantas el rostro y me miras.

En una mano, tienes una soda y tu rostro es negro, como si hubiera sido borrado.

El líquido sale de la boca de la lata. Un fluido negro, negro, parecido a la tinta.

La oscuridad misma.

Ven aquí, dices. Aunque no tienes nada parecido a labios. Estoy sola. Ven.

Estoy asustado.

Asustado más allá de la razón, pero estoy tan triste que no puedo soportarlo.

Quiero ir.

Quiero ir ahí.

A tu lado.

No quiero dejarte sola.

No puedes ir, dices. Espera. No vayas.

¿Por qué detenerme?

No quiero dejarte sola, y tampoco quiero estar solo. ¿Lo sabes bien?

Quiero decir, este lugar es…

¿Dónde está?

Oh…

Choco.

Manato.

Moguzo.

Ellos no están aquí.

Ninguno de ellos.

Está bien. La máquina expendedora.

No está aquí.

Sin luz.

Oscuridad.

Esta abrumadora y completa oscuridad.

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Hubo un sonido de tragar.

Rápidamente se dio cuenta de que no estaba oscuro.

Adentro. Sí. Esto no era afuera. Él estaba bajo un techo. Más que eso, era suave. Él no estaba durmiendo en el suelo, ni en el piso, sino en una cama adecuada.

Cuando intentó levantarse, alguien gritó su nombre. “¡¿Haru?!”

“¿Eh-Mary…?”

Mary. Definitivamente era Mary.

Parecía que Haruhiro estaba acostado en una especie de cama. Mary estaba sentada en una silla que había sido colocada a su lado. Mary se levantó con tanta fuerza que casi tiró la silla, luego cayó sobre él. No, ella no cayó encima de él. No precisamente. Pero ella se lanzó hacia él con tal ímpetu que pareció ser así, colocando su mano izquierda junto a su cabeza para sostenerse, y usando su mano derecha para tocar la mejilla y el cuello de Haruhiro.

El cabello de Mary cayó sobre el rostro  de Haruhiro. Él podía oler su aroma.

Probablemente era de noche. En cierto modo estaba oscuro, pero había una ventana, y una pequeña luz brillaba a través de ella, dejándolo ver débilmente el rostro de Mary. Sus ojos, en particular. No se encontraron con los suyos. Mary lo tocó aquí y allá, luego lo miró a los ojos, como para confirmar si estaba bien.

Él quería decir: Estoy bien, pero no pudo.

Haruhiro no podía quitar sus ojos de Mary. Esto podría ser impuro de su parte, pero si bien no era necesario que fuera para siempre, aunque solo fuera durante un poco más de tiempo, deseó que ella lo siguiera tocando. Si él extendía la mano, podría abrazarla. Ese pensamiento se le ocurrió. De alguna manera, tenía la sensación de que Mary no lo rechazaría. Cuando esa idea estúpida cruzó por su mente, se sintió desesperadamente patético.

“Estoy bien, Mary,” dijo Haruhiro con una sonrisa. ¿Realmente estaba logrando sonreír? No podía decírselo a sí mismo, y no estaba seguro. Siempre era así.

“…Ya veo.” Mary tomó aliento, luego se levantó y terminó sentada en el borde de la cama. Las manos de Mary se alejaron de Haruhiro, y su aroma se volvió más débil. Hasta el punto que apenas podía sentirlo.

No estaba seguro de si se sentía decepcionado o aliviado. Posiblemente eran ambas cosas.

En cualquier caso, eso estuvo bien. Él apenas podía mantenerse sensato. Tenía que haber una distancia apropiada entre los camaradas. Lo más probable es que eso sea aún más cierto cuando confían mutuamente sus vidas.

“..Lo siento,” agregó.

“¿Por qué te disculpas?” Preguntó ella.

“Quiero decir, bueno… no lo sé. Eh, cuando se trata de lo que sucedió para hacer que las cosas salgan así… No tengo ni idea. Pero, como que por mi culpa estamos en esta situación para empezar, se podría decir.”

Mary negó en silencio con la cabeza. Haruhiro ya lo entendía. Era su culpa. Él había tomado la decisión incorrecta. Aun así, sus camaradas no lo culparían unilateralmente. Él lo sabía, ¿cuántas veces iba a pasar por lo mismo?

No había tiempo para disculpas. Había muchas cosas por las que necesitaba preguntar. ¿Por qué no podría decir nada?

Mary estaba en silencio.

El silencio pesaba sobre él. Principalmente en su corazón y su estómago. Dolían.

Finalmente, Mary sollozó.

Haruhiro se sorprendió. “…¿Mary?”

“Lo siento.” Mary cubrió su rostro con su mano izquierda. Presionando sobre el área alrededor de sus ojos, podría haber estado tratando de contener las lágrimas.

“No… Pero eso es-”

“No es nada. Solo… estaba aliviada.”

“Ya veo. Si eso es todo, bueno…”

“Idiota.” Mary golpeó ligeramente a Haruhiro en el pecho, luego se rió entre dientes. Su mano derecha intentó alejarse, pero luego no lo hizo. Fue dejada suavemente en el pecho de Haruhiro. “…No. Yo soy la idiota.”

“¿Eh?”

“No importa. Probablemente no estoy diciendo nada significativo.”

“¿No… lo estás?”

“No soy inteligente, así que hay momentos en que hago eso.”

“No creo que sea cierto que no seas inteligente.”

“Tengo miedo de que me desprecien, así que simplemente lo oculto.” Mary agarró su mano derecha un poco. “Pero estoy segura de que se nota.”

Haruhiro dejó escapar un “Uh…” sonando como un idiota. En momentos como estos, se maldecía a sí mismo por no poder decir algo inteligente y considerado. Pero, ¿qué eran momentos como estos? ¿Qué clase de momento era este?

“Mary, eres…”

¿Qué era ella? Mary era… ¿qué?

Haruhiro inhaló, exhaló.

Palabras, salgan, él suplicó. Salgan, por favor.

Por favor, por favor… salgan.

Vengan. Se los ruego. No me importa qué son las palabras en este punto.

“…Insustituible…” terminó. “Para todos nosotros… Sí. Nos has salvado a todos. Y… Mi rostro era un desastre, ¿no? La que lo arregló, esa fuiste tú, ¿verdad, ¿Mary?”

“Porque soy una sacerdotisa,” dijo ella.

“Te necesitan, Mary. Um… todos nosotros… absolutamente.”

“Eres tú, Haru,” dijo. “Sin ti, estaríamos en problemas. Todos nosotros.”

“Todos nosotros… Sí.”

“Asi que…”

“¿Asi que?”

“Estoy contenta, Haru. Eso… estás aquí. Que pude conocerte.”

“No, soy yo quien debería decir eso…”

“¿Decir qué?” Preguntó Mary.

“¡¿Eh?! Ohh… eh… Bueno, me alegro de haber podido conocerte… Espera…”

¿Qué es esto? Pensó frenéticamente. ¿Esta conversacion?

Estamos agradecidos de habernos conocido. Eso no es extraño en absoluto en sí mismo. Es un hecho después de todo. Estoy agradecido, ¿sabes? Pero, de alguna manera, esto es diferente. ¿Eh?

¿No es así?

¿Estoy leyendo demasiado? ¿Demasiado? ¿Cómo?

¿Ehhhhhh? Ya no lo sé.

“¿Eh?” Comenzó a vocalizar, pero Haruhiro no tenía idea de lo que había estado tratando de decir. “Eh. Eh. ¿Qué…?”

“¿Qué?” Mary repitió e inclinó la cabeza hacia un lado.

“¿Qué…?”

Oh, mierda.

Su mente se había quedado en blanco. Aunque estaba oscuro. Ahora que lo pensaba, estaban dentro de un edificio, pero no había ni una sola luz.

Un edificio.

¿Un edificio?

“¿Qué…?”

¿Dónde estaba este edificio? ¿En esa aldea? Si es así, ¿por qué? Haruhiro no parecía exactamente atado de pies y manos. Parecía que lo mismo sucedía con Mary. ¿Qué pasó después de que Haruhiro se desmayó?

Mary estaba aquí. ¿Dónde estaba Shihoru? ¿Yume, Kuzaku, Setora, Enba y Kiichi?

“¿Qué…?”

Ese, “Qué.” ¿Cuántas veces lo había dicho ahora?

Mary se rió un poco, luego retiró la mano que le había dejado. “Te daré un breve resumen de lo que sucedió.”

“P-Por favor. Ah, seguro… ¿Puedo levantarme? ¿Está bien?”

Mary se rió de nuevo, y luego dijo: “Adelante.”

Cuando se levantó, se sintió un poco mareado, pero nada más parecía fuera de lo común. Considerando que su rostro había sido destrozado antes de desmayarse, bueno, era una mejora.

No, más que eso, a juzgar por la forma en que Mary actuaba, todos sus camaradas estaban bien. Mary le explicó a Haruhiro la serie de eventos por los cuales el hombre que se hacía llamar Jessie lo había tomado como rehén, obligó a sus camaradas a rendirse, y luego los llevó a la Tierra de Jessie.

Entonces, a pesar de que esperaban ser encarcelados como grupo, no fue así. A Mary se le ordenó cuidar a Haruhiro, mientras que al resto de sus camaradas se les ordenó ir y hacer otras cosas en otro lugar.

Shihoru se había ido con Jessie para ver cómo eran las cosas. Setora, Enba y Kiichi aparentemente estaban confinados en algo parecido a una prisión. A Yume y Kuzaku también se les asignaron trabajos. Shihoru estaba siendo obligada a acompañar a Jessie, y ella le estaba pidiendo varios datos sobre la Tierra de Jessie.

“¿Quieres decir que está revelando el estado actual de las cosas a Shihoru?” Preguntó Haruhiro.

“Sí. Según ella, eso es correcto. Sin embargo, podría estar escondiendo algo.”

“Nunca se sabe…” murmuró.

“Para empezar, ese hombre recibió un golpe sólido de tu Backstab, pero estaba bien.”

“Parece que no podría ser otra cosa que un humano, pero no lo es,” dijo Haruhiro. “Gumows, ¿verdad? ¿Los bebés que los orcos obligaron a los humanos a tener?”

“No he oído hablar de ellos con mucho detalle,” dijo Mary. “Pero, básicamente, en la guerra donde la Alianza de los Reyes derrotó a la humanidad, los orcos…”

“Eh, sí… me siento algo mal por esa gente. Oh, supongo que no son personas. No, pero tienen sangre humana, así que… Sí, en comparación con los orcos de pura sangre, deberían estar más cerca de nosotros.”

“Los que custodian este edificio son gumows con abrigos verdes,” dijo Mary. “Sin embargo, esta es una aldea gumow, así que es de esperarse. Son bastante amables, de hecho.”

Mary se levantó de la cama. Había un mueble parecido a una mesa junto a la pared. Mary regresó llevando algo que había estado encima de el.

“Comida y agua. Los gumows trajeron esto también. Traté de comer algo. No creo que hayan puesto nada dudoso en esto.”

“Oh…” el estómago de Haruhiro de repente comenzó a retumbar, y su boca se hizo agua.

“Espera.” Mary se sentó en el borde de la cama de nuevo. “La comida está envuelta. La abriré ahora. Ten esto primero.”

Haruhiro trajo la botella de agua de cuero que le dieron a sus labios y bebió. Estaba caliente y estaba ligeramente agria. No era una acidez desagradable como si estuviera mala. Era fácil de beber. No pudo evitar tragarla.

Mary dijo: “Aquí,” y le ofreció algo plano. Obviamente, estaba destinado a aceptarlo con sus manos, pero estimulado por su apetito, Haruhiro estiró su cuello para morder lo que Mary estaba sosteniendo.

Parecía que la había sorprendido, porque Mary soltó un pequeño grito. “¡Kya!”

Antes de que pudiera disculparse, sintió como una descarga eléctrica en su cerebro.

“¡Maldición, esto está bueno!” Exclamó.

“L-Lo sé, ¿verdad? Esto es delicioso.”

“Me está devolviendo la vida.”

“Aunque estuviste vivo todo el tiempo.”

“Bueno, sí, pero, ya sabes…”

“Todavía hay más.”

“Oh, por supuesto.”

“Aquí.”

Abrió la boca, y el resto de esa cosa plana como un dumpling entró. Vaciló un poco, pero no sabía cuándo tendría la oportunidad de comer, y quería comerlo, así que Haruhiro masticó y tragó.

Realmente era delicioso. Y tuvo la sensación de que no solo era porque tenía hambre.

En primer lugar, la textura masticable era buena. También tenía un ligero sabor salado.

Además, había algo dentro de eso. La carne molida y las verduras sabrosas se combinan para dar un sabor salado dulce. Era un tipo de relleno. Era delicioso también. Sabía a civilización. No había comido nada decente en un buen tiempo después de todo. Pero incluso sin eso, probablemente sería delicioso. Un gusto del que nunca se cansaría.

Si tuviera que decir más, el sabor lo dejó con una sensación de nostalgia. Como la comida del alma. ¿La comida del alma de qué, sin embargo? Él no lo sabía, pero era increíble.

“¿Quieres otro?” Preguntó Mary.

Él no podía negarse. Incluso si Mary no se lo estuviera ofreciendo, hubiera querido un segundo. Dos, tres, comería todos los que ella tuviera.

“Por favor.”

“Di ah.”

“Está bien. Ah…”

¿Hm?

Con la boca abierta, Haruhiro miró a Mary a los ojos.

Sus líneas de visión colisionaron.

“¡Ah…!” Mary miró hacia otro lado. “L-Lo siento. Simplemente estaba yendo con la corriente. N-No había… un significado más profundo…”

“S-Seguro.” Haruhiro bajó los ojos y se frotó el hombro más de lo necesario. “Y-Yo sé eso.”

“Adelante,” ella resolvió.

Él vacilante mordió la cosa plana como un dumpling que le extendió. Muy bueno. Podía sentirlo filtrándose en él. El sabor era suave. Iría bien con cualquier cosa. Sintió que si estas personas comían estas cosas todos los días, podría llevarse bien con ellas, incluso si fueran de otra raza.