Ore ga Heroine o Tasukegite

Volumen 9

Capitulo 4: Un Asesino Del Futuro Y Las Vacaciones De Verano

Parte 3

Mientras comía, Lea me hizo señas para que me acercara. Me incliné, preguntándome qué quería ella.

“En realidad no es carne de res; es mi carne”.

“¡Ack!”

¡La carne de Leviatán estaba destinada a ser una ofrenda para los dioses!

¡No es de extrañar que fuera tan bueno! Lea sonrió como un niño que había hecho la broma perfecta. Estaba a punto de decir algo a cambio, cuando de repente…

“¡Mmph! ¡Mmph!

Escuché una voz apagada detrás del estrado que me hizo congelar en el acto.

“Lea, ¿hay alguien ahí atrás?”

“¿Hmm? Sí lo hay.”

Se retiró hacia atrás por un momento, luego volvió a salir con una L atada por el cuello.

“La atrapé allí hace un momento. Ella ha estado causando daños en todo el lugar”.

“¡Hmph! ¡Mmrgh!”

L murmuraba algo debajo de su mordaza y me miraba con ojos algo llorosos.

“Sí, sobre eso… Lea, ¿me prestas eso por un segundo?”

“No me importa”.

Tomé L de Lea y me dirigí a un lugar apartado lejos de todos los demás.

***

Terminamos frente al edificio principal del centro comunitario, a una distancia considerable de los terrenos del festival. El centro en sí estaba cerrado, por lo que no había señales de nadie alrededor.

“¡Pwah!”

Quité la mordaza de L, que no dijo nada a pesar de todos sus murmullos anteriores. Ella solo me miró.

“Um…”

Ah, mierda… tampoco había pensado realmente en lo que iba a decir. ¿Tal vez comenzar con un primer acercamiento?

“Hey, L.”

“No actúes familiarizado conmigo, el peor mujeriego del mundo”.

“Okay…”

¿Que se suponía que debía hacer? Eso dolió más de lo que esperaba. Cuando estaba tambaleándome por haber sido insultado al salir, R dio un paso adelante.

“L, deja esto ya. No eres capaz de asesinar a Rekka.”

“¡¿Qué?! ¡¿Estás diciendo que debería rendirme?! ¡¿Que soy inferior a ti?!” L gritó con todas sus emociones descubiertas.

Pero R simplemente respondió con calma: “Es natural que tenga habilidades superiores para ti”.

“¡¿Qué dijiste…?!”

“L, somos formas de vida artificiales. Eso nos hace productos manufacturados. Es natural que la generación más nueva tenga especificaciones más altas que los modelos más antiguos. Se podría decir que ese es el punto. Las nuevas versiones son evoluciones logradas mediante la optimización continua y el refinamiento, después de todo”.

“H-Hey, R…”

Lo que R decía tenía sentido lógico, pero era una forma despiadada de decirlo. Traté de detenerla, pero la ira de L estalló primero.

“Qué… ¡¿Qué pasa con eso?! ¡Fui yo quien debía tomar esa misión!”

“… ¿Y decidiste ponerte del lado de aquellos que intentan eliminar a Rekka porque te sacaron de la misión? Solo para.”

¿Eh? ¿Era solo yo, o R parecía un poco enojada…? Era su habitual ser inexpresivo, claro, pero legítima sonaba un poco loca. No, tenía que preocuparme por mediar entre estos dos antes que nada.

“¿Por qué no se calman las dos primero, ustedes dos?”

Me interpuse entre ellos con la espalda hacia L, y luego escuché algo romperse detrás de mí. Me di la vuelta para ver que L había cortado la cuerda que la sujetaba con un kunai y estaba haciendo un descanso para ello… hasta que su correa de geta se rompió, enviándola al suelo.

“…”

¿Se golpeó la cabeza? Ella estaba acostada en silencio sobre el concreto…

“¿Estás bien?” Corrí hacia ella y la ayudé a levantarse. “Ah, te raspaste un poco. Haré que Satsuki o Harissa te sanen…”

“¡N-No me toques!”

L apartó mi mano y retrocedió unos pasos. Ella debe  haber estado avergonzada. Sus mejillas estaban muy rojas.

“¡N-No tienes razón para tratarme bien!” ella gritó antes de desaparecer como lo había hecho en mi habitación la noche anterior.

“Parece que no logré convencerla…” murmuró R. “¿Convencerla? Parecía que la estabas provocando.”

“Huh… ¿Eso crees?” R hizo varios saltos mortales en el aire antes de decir en voz baja: “Creo que no soy tan buena en esto como tú”.

En ese momento, tuvo un raro momento de verse realmente como una niña de su edad, lo que me hizo lamentar lo que acababa de decir. Pero me recuperé.

“Los fuegos artificiales comienzan a las nueve. Volvamos con los demás”.

“…Correcto.”

Salimos del lote y regresamos al festival donde estaban todos los demás.

***

Después de decirle a Lea que L se había ido a casa después de prometer que nunca volvería a causar problemas, volvimos al negocio de disfrutar el festival.

“¡Oye, hermano Rekka!”

“Rekka”.

“Fam, Rain”.

No pasó mucho tiempo antes de que nos encontráramos con Fam y Rain, quienes finalmente terminaron con la tarea de Fam, así como con sus guardianes, Shirley y Garnet.

“De alguna manera llegamos a tiempo para los fuegos artificiales”.

“Me alegro. Seguro que has tenido un embotellamiento, ¿eh?” Le pregunté a una Shirley algo conmocionada.

“Fam no había tocado la mayoría de las tareas que requieren más tiempo, como su proyecto de investigación. Tuvimos que comenzar buscando proyectos que pudieran hacerse en medio día, y luego encontrar una manera de motivarla para que los haga… Estoy agotada”.

“Wow, buen trabajo”.

Shirley probablemente podría hacer un proyecto de ciencias en la escuela secundaria mientras dormía, pero como maestra, su mayor lucha fue motivar a una Fam renuente a hacerlo por sí misma. Y a pesar de lo que Fam había logrado durante el último día, parecía que Shirley realmente podría ser la que merecía elogios.

“¿Quieres un sorbo de esto? Quiero decir, si no te importa que ya haya bebido de eso… ”

Le ofrecí algunos de mis granizados a medio terminar. La bebida en la bolsa era una mezcla de jugo dulce y hielo picado, lo que la hacía perfecta para el ambiente divertido del festival.

“Gracias.”

Había un brillo en sus ojos con gafas cuando Shirley aceptó el granizado de mí y acercó sus labios a la paja.

“¡Aaaaaah!”

Por alguna razón, las otras chicas a mi alrededor comenzaron a gritar, pero Shirley continuó bebiendo con una expresión renovada. Después de beber la mayor parte de la bolsa, dejó escapar un gran suspiro.

“Siento que todo mi estrés de hoy ha sido liberado”, anunció con grandilocuencia.

“¡Eso es tan injusto, hermana Shirley!”

“No hagas un escándalo, Fam. Yo también te compraré uno”.

“¡Ese no es el problema!” Fam gritó, golpeando sus pies. “Hmph…”

Rain, que estaba a su lado, parecía que ella también estaba a punto de hacer un berrinche.

“U-Um… Los fuegos artificiales deberían estar subiendo pronto. ¿Nos apuramos al campo de béisbol?”

Los puestos se instalaron a lo largo del área de pista y campo del centro comunitario, mientras que el campo de béisbol adyacente era lo que se usaría para los fuegos artificiales.

Fue donde el equipo de béisbol de nuestra escuela realizó gran parte de su entrenamiento.

Los fuegos artificiales se lanzarían desde el montículo del lanzador, mientras que los espectadores se sentarían en las gradas o mirarían las luces danzantes en el cielo desde el banco alrededor del exterior del campo.

Llegamos lo suficientemente temprano para asegurar los asientos, pero ocupamos una buena cantidad de espacio con todo el grupo de nosotros.

“¿Deberíamos traer una manta de picnic y mirar desde el banco el próximo año?”

“Eso probablemente sería mejor”, dije, de acuerdo con Satsuki, quien estaba sentada a mi lado.

“¿Qué tal si miramos desde el cielo en mi nave espacial el próximo año? ¡Solamente nosotros dos!” Sugirió Iris, inclinándose sobre Satsuki.

Mientras que mirar desde el cielo sonaba bien, solo nosotros dos era un poco… ¡Pero no podía decir eso en voz alta con su pecho presionando contra mi brazo!

“¿O quieres hacerlo este año? ¡Si esperas aquí, puedo traer mi nave espacial de inmediato!”

“¡Oh, Iris! No digas cosas tan egoístas”, regañó Satsuki.

“Así es, Iris. Acaparar a Rekka contigo mismo no es agradable “, intervino Chelsea.

Me sentí un poco como si me hubieran rescatado. Hasta…

“Oye, Iris va a robar a Rekka. ¡No te quedes ahí sentado, Hibiki! ¡Di algo!” reprendió Chelsea.

“¿Huh? ¡Wah!” Hibiki gritó cuando Chelsea le dio una palmada en la espalda.

Con eso, Hibiki, que estaba sentado detrás de mí, se lanzó hacia adelante y me golpeó.

“¡¿H-Hibiki?!”

“¡L-Lo siento! ¿Estás bien?”

Estaba bien pero, mmm… sus senos inesperadamente grandes estaban presionados contra la parte posterior de mi cabeza, haciéndome sudar profusamente. Sin mencionar el agradable olor que me hace cosquillas en la nariz…

“¡Hmph!”

“¡¿Gwah?!”

Dos codos me golpearon desde ambos lados.

“Dios mío”, suspiró R, justo cuando se lanzaron los fuegos artificiales.

¡Kaboom! “¡Eeeeek!”

Sophie chilló al oír los fuegos artificiales y se aferró al brazo de su hermana.

¡Pow!

Pero su expresión cambió de miedo a sorpresa cuando vio las luces danzantes en el cielo. Las hermanas espirituales tampoco eran las únicas asombradas.

Extraterrestres, gente topo, demonios… Teniendo en cuenta lo variado que era nuestro grupo, esta era la primera vez que muchos de ellos habían visto fuegos artificiales. De acuerdo, pensé que también eran increíbles, a pesar de que los había visto todos los años.

Los proyectiles que el pirotécnico cargaba en el mortero del montículo se lanzarían al aire con un estallido. Segundos después, una flor de fuego florecería en el cielo.

Realmente solo había una forma de describirlo: hermoso. Tanto los espectadores en las gradas como en la orilla miraron maravillados los fuegos artificiales finales del verano juntos. Fue como un heraldo del final de las vacaciones de verano, lo que los puso casi un poco tristes. Y justo cuando el espectáculo casi terminaba, sucedió lo más sorprendente.

“…!”

Creí escuchar algo luchando. Los fuegos artificiales habían distraído a la mayoría de los demás de darse cuenta, pero algunos de ellos se dieron cuenta de que algo extraño estaba sucediendo en el montículo mientras esperábamos el próximo fuego artificial.

Era difícil de ver en la oscuridad, pero parecía que había una pelea. Alguien estaba haciendo un ataque. Parecía que estaban rodeados de adultos que intentaban sujetarlos. Y el responsable de dicho berrinche no fue otro que…

“… ¡¿L?!”

Mis ojos se abrieron de par en par cuando ella sacó algo de su manga roja con un chasquido, causando que los pirotécnicos que intentaban atraparla colapsaran de una vez.

Probablemente había usado algún tipo de tecnología futurista en ellos. Con su libertad asegurada, L se acercó al mortero de lanzamiento de fuegos artificiales y, justo cuando me preguntaba qué estaba haciendo, usó toda su fuerza para derribarlo. La boca del mortero ahora apuntaba justo donde estábamos sentados en las gradas.

“¡Kyaaah!”

“¡Whoa! ¡Eso es peligroso!”

Las personas que vieron lo que estaba sucediendo comenzaron a gritar, provocando un pánico. L no les prestó atención cuando se paró en el montículo, encendió una cerilla y la arrojó al mortero… pero no pasó nada. Si bien eso en sí mismo fue afortunado, el problema surgió después.

Probablemente se preguntaba por qué el proyectil no se había lanzado, pero L se levantó de su posición en cuclillas, destapó sus orejas y caminó hacia el frente del mortero para mirar dentro.

“¡Esa idiota!”

Este tipo de mortero tenía pólvora adentro que se encendió para lanzar los fuegos artificiales. Las cosas estarían bien si el fósforo que lanzó se hubiera extinguido antes de llegar al fondo… pero ¿y si no fuera así? ¿Y si todavía no hubiera llegado al final del mortero? ¿O qué pasa si algo causa que la pólvora se encienda?

“¡¿Rekka?!”

Alguien me llamó por mi nombre, pero los ignoré mientras me abría paso entre la multitud confundida que intentaba dispersarse. Si la pólvora se encendiera y lanzara el proyectil, ¡L estaría en grave peligro donde estaba parada! Eso solo me llevó hacia adelante en un atrevido salto desde las gradas al campo de béisbol.

“¡Bweh!”

Estaba oscuro, así que mi aterrizaje fue un poco torpe. Pero ahora no era el momento de preocuparme por eso: levanté la cabeza de mi posición en el suelo. Cuando lo hice, vi un destello de luz dentro del mortero.

A partir de ahí, fue como si todo sucediera en cámara lenta. Como si el tiempo mismo se hubiera deformado y ralentizado. Me fue imposible llegar al montículo y salvar a L de donde estaba en la esquina del campo.

Incluso si tuviera una velocidad sobrehumana como Iris o Rosalind, aún sería imposible. Ni siquiera mis amigos mágicos podrían haber llegado a tiempo.

¡Pero todavía había una persona que podía salvar a L!

“¡R!”

¿Podría haber gritado su nombre a tiempo en ese mundo de cámara lenta? Quién sabe… Pero no importaba, porque exactamente el mismo pensamiento se le había ocurrido a R. El escudo que usó para protegerme del ataque de L se activó para envolver el mortero en la distancia.

La explosión se contuvo al capullo azul semitransparente. Ni siquiera chamuscó a L, que estaba parado justo frente a él. El escudo capaz de negar las armas del futuro suprimió por completo la fuerza explosiva de los fuegos artificiales. Incluso anuló la onda expansiva de la explosión, ni siquiera una de las mangas del kimono rojo de L revoloteó.

“Hahh…”

Exhalé todo el aire en mis pulmones con alivio cuando mi sentido del tiempo volvió a la normalidad. Tal vez mi suspiro fue audible, ya que L se dio la vuelta con los ojos muy abiertos fijos en mí y R.

“…!”

Luego se volvió hacia el otro lado y salió corriendo del montículo, desapareciendo en la noche. No me importaba, pero me hubiera gustado escucharla al menos agradecer a R… Oh, bueno. Al menos estábamos a salvo.

“Gracias, R. Nos salvaste”.

Ni siquiera había tenido tiempo de pedirle que lo hiciera. R se había movido completamente por su propia voluntad, salvando no solo a L, sino a todos los espectadores del daño. Quizás R había considerado la torpeza de L, había previsto el accidente y había hecho los preparativos para contrarrestarlo antes de que me hubiera mudado. Así de hábil era ella.

“No vale la pena agradecerme nada”, respondió R bruscamente y se ajustó el sombrero en la cabeza.

***

Después de superar milagrosamente ese último incidente sin ninguna lesión, el festival de verano del año llegó a su fin. Y con seguridad, en su mayor parte.

Todo lo que quedaba era regresar a casa, pero la policía me detuvo para interrogarme porque había visto al autor de cerca. Les pedí a todos los demás que se adelantaran a mí y respondí todo lo que pude con los otros pirotécnicos. En total, tardó unos 30 minutos.

Para entonces, apenas quedaba gente. Solo los trabajadores del festival que estaban limpiando después todavía estaban en el terreno.

Eché una mirada de reojo a las personas que cerraban sus stands cuando salía del centro comunitario. Tampoco había nadie afuera en el camino hacia el centro comunitario. Todos los visitantes se habían ido hace mucho tiempo, mientras que los que limpiaban aún no lo habían hecho. Quizás precisamente porque fue ese momento liminal…

“Uf…”

Los alrededores estaban demasiado tranquilos. Exhalé fuerte en lo que pudo haber sido un suspiro o no. Tenía la sensación de que esto sucedería. Lo vi de inmediato: ese kimono rojo que se asomaba desde la sombra de un poste de electricidad.

“Puedo verte.”

“¡¿Hwuh?!”

Después de un pequeño chillido, L se reveló vacilante. Tenía una expresión bastante incómoda. Esperé a que ella hablara.

“… ¿Por qué me salvaste?”

“Cualquiera hubiera hecho lo mismo”, le respondí encogiéndome de hombros.

“¡Mentiroso! Vine a borrarte, ¿sabes? ¿Por qué salvarías a alguien así…?”

“Esa es la clase de persona que es Rekka”, respondió R. “Es el tipo de persona que se mueve instintivamente cuando se encuentra con situaciones como esa. Es exactamente como nos lo describió el médico…”

L reaccionó a la palabra “doctor” con un tic.

“L, no sé qué te han dicho o por quién… Pero en quién crees que deberías confiar más: la persona que te dijo que mataras a este idiota crédulo, o el médico que te dijo que lo protegieras”.

“¡Cállate! ¡No hables de esa persona antes que yo!” L repentinamente se enfureció, mirando a R furiosamente.

“Por esa persona, ¿te refieres al médico? ¿Por qué dirías eso? El doctor estaba realmente preocupado cuando desapareciste.”

“¡Mentiras! ¡El doctor me tiró!” L continuó sacudiendo la cabeza, negando las palabras de R “¡¿Fuimos creados para salvar el futuro, sabes?! ¡Para eso fuimos diseñados! ¡Para qué fuimos entrenados! Y… ¡Y el doctor me lo quitó! ¡Eso significa que ya no tengo ningún propósito!”

La cara de Suzuran repentinamente pasó por mi mente. Antes de que Suzuran fuera Suzuran, ella era un homúnculo llamado Silver Slayer. Su cuerpo estaba hecho de mercurio —la debilidad de un vampiro— y, como su homónimo sugería, fue creada para matarlos. L parecía estar en una situación similar.

Había sido creada para un único propósito, pero su hermana pequeña le había quitado ese trabajo. Ni siquiera podía imaginar lo aplastada que debía haber estado con eso.

Probablemente así fue como el que R dijo que “tiraba de los hilos” se aprovechó del desánimo de L. Puede haber sido un método diferente, pero todavía era una misión para “salvar el futuro” que le habían dado.

“L, la agencia no te sacó de tu misión con mala intención. El doctor simplemente…”

“¡Cállate! ¡No entiendes cómo me siento! ¡Cómo se siente un rechazado como yo…!”

“…”

“El doctor me tiró porque mis especificaciones eran más bajas que las tuyas, ¿no? Soy un rechazo inútil… ¡Por eso me arrojaron a la división residencial protegida!”

“Solo para ya”. La actitud de R cambió repentinamente cuando ella cerró a L.

“¿R?”

R me ignoró y se acercó a L de manera descuidada, casi indefensa, y luego la agarró por el cuello.

“Rechazo inútil, especificaciones más bajas… ¡Como si el médico te abandonara por cosas así! ¡No hay forma de que te abandone por eso!”

R estaba gritando con todas sus emociones a la vista, y su rugido hizo que L se encogiera. Ella también debe haber estado bastante sorprendida… Nunca había escuchado a R hablar así.

“Es cierto que después de que lo transfirieron a la división residencial protegida, el médico estuvo demasiado ocupado con mis ajustes finales para visitarte. ¡Pero el doctor siempre estaba pensando en ti! Y cuando fue a visitarte después de completar mis ajustes…”

“¡Cállate!” L golpeó la mano de R mientras tropezaba con sus palabras, luego se distanció.

“¡L!”

“¡No  me  dejaré  engañar  por  tus  palabras!  ¡Voy a  salvar  el  futuro  y demostrar mi valía por mi cuenta!” L le gritó a R.

Luego comenzó a dispersarse en partículas, pero antes de desaparecer, me señaló y dijo: “¡Nunca me rendiré!”

Ahora solo R, que acababa de ponerse rígida, y yo quedamos en la calle oscura.

“R.”

“… Parece que realmente no puedo hacerlo tan bien como tú, Rekka”, murmuró mientras se ajustaba el sombrero. Luego dio una vuelta en el aire y recuperó su típico comportamiento inexpresivo. “Ahora, apurémonos de regreso a casa. Harissa está esperando”.

“S-Sí”.

Bajé la colina con R moviéndose en su lugar habitual a mi lado. Los dos estuvimos en silencio por un rato, pero luego…

“Hey, R…”

“¿Qué pasa?”

“¿Qué vas a hacer con L?”

“¿Quién sabe?”

“No digas eso…”

“Oh, no te preocupes. Me aseguraré de protegerte si L intenta atacarte nuevamente”.

“Eso no es lo que quiero decir…”

“Bueno, no hay nada más que hacer con alguien tan terco”, dijo R, bajando la mirada.

“Regresará en poco tiempo, conociéndola”.

“Intentaré convencerla nuevamente cuando lo haga”.

“Ya veo…”

Si R no se rindiera, entonces probablemente estaría bien.

“Pero avíseme si hay algo que pueda hacer para ayudar, ¿de acuerdo? Trataré de persuadirla también”.

“¿Oh enserio?” Por alguna razón, R tuvo un brillo en sus ojos cuando dije eso. “Entonces, una vez que regresemos a casa, duerma con Harissa”.

“¡¿Q-Qué?!” Farfullé ruidosamente, completamente nervioso.

“¿No dijiste que me ayudarías? Si acabaras con mi historia y detuvieras la Guerra de todos, L ya no tendría motivos para atacarte. Todo estaría resuelto, y eso sería todo”.

“Ugh…”

“¿De qué te quejas? Incluso celebraste tu compromiso en la ciudad natal de Harissa el otro día. Ahora ve a disfrutar de tus privilegios conyugales”.

“¡E-Eso fue solo una visita amistosa! Harissa nunca dijo nada al final, de todos modos…”

“Eso es porque no sellaron el compromiso. Pero lo que sea. Me puedo conformar con una aventura de verano en su lugar. Vamos a la nave espacial de Iris de inmediato”.

“¡Tampoco podemos hacer eso!”

“¿Oh? ¿Estás diciendo que no estarás satisfecho con solo una? Entonces podemos visitar la mansión de Rosalind y la casa de Rain, también… ”

“¡Ese no es el problema!”