Maou no Ore ga Dorei Elf wo Yome ni Shitanda ga

Volumen 4

Extra 2: Amenaza De Pastel De Pescado

“¿Oh? Es raro encontrarla cocinando, lady Chastille”.

Chastille asintió con una mirada jactanciosa cuando sus tres subordinados se lo señalaron.

“Mm. Voy a ir a una pequeña asamblea en el orfanato, así que pensé que sería bueno darle a los huérfanos un poco de cocina casera… Aunque, para ser sincera, no creo que pueda cocinar así como a Nephy.”

Su voz se apagó al final, pero después de escuchar la respuesta de Chastille, los tres caballeros la miraron con cariño con una sonrisa en sus rostros.

“Eso es maravilloso. Estoy seguro de que los niños estarán encantados. ¿Qué estás haciendo?”

“Estoy haciendo algo llamado pastel de pescado”.

Los caballeros se congelaron al escuchar su respuesta.

“L-Lady Chastille, soy plenamente consciente de que es descortés de mi parte preguntar, pero ¿sabe qué es ese plato?”

“Por supuesto. Es un pastel de papa con pescado blanco. Es lo primero que me viene a la mente cuando pienso en la cocina de mi madre”.

Ella solo estaba parcialmente correcta. Era un pastel circular de papa con una cabeza de pez que sobresalía en el medio. Verlo solo era lo suficientemente aterrador como para hacer llorar a un niño.

“Puede que no lo parezca, pero vengo de una casa noble… Bueno, nuestra casa se ha arruinado por completo ahora, pero por eso, mi madre se encargó de todos los quehaceres domésticos. Su cocina fue bastante mala, pero este fue un plato que siempre disfrutamos”.

Chastille realmente creía que el sabor de la comida de una madre era el sabor del hogar. Por eso estaba segura de que a los niños les encantaría probar la comida casera de su madre. Y, mientras transmitía esto a los tres caballeros, se cubrieron el rostro, claramente incapaces de soportarlo más.

“¡Lady Chastille! ¡Le informaremos sobre los alimentos que los niños disfrutarían, así que reconsidere su decisión!”

“¿Huh? Pero…”

“¡Mire! ¡Los tres somos conocidos como los tres tíos idiotas entre los niños de la ciudad, así que nos llevamos bien con ellos!”

“¿E-Es eso tan…? Entonces por favor hazlo. Seré feliz mientras los niños se diviertan”.

Era un hecho poco conocido que estos caballeros protegían la ciudad de una amenaza aparte de los simples hechiceros en ese buen día.