Ore dake Ireru Kakushi Dungeon (NL)

Volumen 4

Capitulo 6: El General Y La Arquera

Parte 1

Habían tres días desde que llegamos a Honest. A simple vista, la ciudad no se veía muy diferente, pero, en una inspección más cercana, muchas de las tiendas estaban cerradas. No tenía mucho sentido permanecer abierto cuando sus cadenas de suministro se estaban rompiendo y tanta gente huía hacia otras ciudades.

Esa mañana, tal como estaba previsto, llegaron los refuerzos de la capital. Uno de los mensajeros del duque vino a avisarnos y salimos de inmediato al campo de entrenamiento conjunto para encontrarnos con ellos.

El espacio era enorme y todas las fuerzas relevantes se estaban reuniendo allí. Incluso Perrido había venido, esperando llevarnos a donde necesitáramos ir. La vista de tantos soldados en un solo lugar fue completamente abrumadora.

Un joven general llamado Stey iba a estar al mando del asedio. Tenía poco más de treinta años, cabello negro y un aire tranquilo y confiado.

Llegamos justo a tiempo para escucharlo repasar sus planes en caso de un ataque. Planeaba que muchas de las fuerzas fortificaran el perímetro, evitando que el enemigo ingresara a la ciudad. Pero estos grandes ataques de diez años nunca se habían detenido fuera de las murallas de la ciudad, por lo que otro grupo estaba estacionado dentro de la ciudad misma.

Stey asignó a algunos de sus soldados a cada distrito específico, organizando a todos para que tuviéramos la mejor oportunidad de derrotar a los monstruos. Lo escuchamos hablar, pero nada de esto se aplicaría a nosotros. Después de todo, no éramos soldados regulares.

“Los voluntarios se alinean aquí. Estamos haciendo selecciones ahora”.

Trabajó a través de los voluntarios con la ayuda de una mujer joven con un Ojo Perspicaz. A aquellos que tenían la voluntad de luchar, pero que no tenían la capacidad de respaldarla, se les ordenó proteger sus propios hogares y vecindarios. Me sentí un poco aliviado por la longitud de la fila de voluntarios. Mucha gente en Honest estaba dispuesta a luchar por ello. Justo cuando Stey estaba a punto de llegar hasta nosotros, el duque Schoen llegó corriendo.

“General Stey, este hombre no necesita pasar por el proceso de selección. Es un guerrero poderoso al que personalmente le pedí que nos ayudara”.

“Lo siento, pero el rey me ha ordenado que investigue adecuadamente a todas las fuerzas civiles”.

“Este es Noir”, dijo Schoen. “El hombre que resolvió el incidente en Landan”.

“Ooh, ¿eres el hombre que mató al monstruo petrificante?” Preguntó Stey. “Lo soy.”

El general me miró con sus ojos penetrantes y sentí una punzada de ansiedad. Me di cuenta de lo fuerte que era, incluso sin el Ojo Perspicaz.

¡Su aura era incluso más abrumadora que la de la Sra. Elena!

Sin embargo, incluso con el respaldo personal del Duque Schoen, el general Stey no estaba convencido. Estaba un poco incómodo con la idea de que mis habilidades fueran expuestas, pero se suponía que éramos aliados, ¿no es así?

“No se preocupe, duque Schoen”, le dije. “Quiero ser examinado adecuadamente, como cualquier otra persona. Si no puedo pasar sus estándares, no tendré ninguna posibilidad contra esos monstruos”.

“Lamento mucho haberte hecho pasar por esto”, dijo Schoen. “Especialmente cuando fui yo quien te arrastró hasta allí”.

El general Stey no esperó a que respondiera. “Está bien, adelante”.

La mujer a su lado dio un paso adelante y usó su habilidad conmigo. Me sentí extrañamente ansioso por eso, a pesar de que hacía exactamente lo mismo con otras personas todo el tiempo.

“¡¿Eh?! ¿Qué demonios?”

La máscara de piedra de la mujer se desmoronó. Definitivamente estaba sorprendida por mis dones bastante, ah, únicos.

“¿Qué está pasando?” dijo Stey. “Respóndeme.”

“Está por encima del nivel 100 y tiene docenas de habilidades…”

“Oh ho, entonces eres el verdadero negocio”. Los labios del general Stey se curvaron en una leve sonrisa, pero la diversión apenas estaba comenzando.

“Tiene varias habilidades con las que no estoy familiarizado”, dijo la mujer. “De los cuales, los más inusuales parecen ser Creatividad, Editor y Otorgamiento”.

“¿Q-Qué?” Stey tartamudeó. “No te equivocas, ¿verdad?”

“Absolutamente no. Indudablemente, posee esas habilidades”.

Incluso el duque Schoen comenzó a mirarme de manera extraña después de eso. No solo estaban impresionados, tenían miedo. Estaba empezando a ponerme un poco ansioso. Stey incluso puso su espada en mi cuello.

“Contéstame, ¿cómo estás relacionado con Olivia Servant?”

Eh, sabían de su conexión con esas habilidades, incluso aquí en este reino vecino. No podía decir exactamente que estaba en contacto activo con ella, así que tuve que inventar algo.

“Alguien que sabe mucho sobre habilidades me dijo que son una especie de mutación espontánea”.

“¿De verdad pensaste que esa mentira funcionaría?” Preguntó Stey.

Di un paso atrás. Antes de darme cuenta de lo que estaba haciendo, desenvainé mi  espada y  comencé a gritar. ¿Por qué? ¿Qué estaba haciendo? No tenía ni idea.

“¿Noir? ¿Qué ocurre?”

“¡No, Emma, mantente alejada!”

Mi cuerpo se movía por puro instinto. Tomé una postura de combate y me enfrenté a Stey.

“¡Está apuntando con una espada al general!” alguien gritó. “¡Capturarlo!”

“No harás tal cosa”, espetó Stey. “Ha tomado el único curso de acción que le queda por hacer. Si no hubiera desenvainado su espada, sería un cobarde”.

Todos los soldados se detuvieron en seco. Recé para que el general Stey guardara su espada, pero no tuve esa suerte.

“Si te llamara la progenie de esa vil rata Olivia”, dijo. “¿Eso te enojaría?”

“¡No te atrevas a mancillar su nombre! ¡No dejaré que te salgas con la tuya!”

“Interesante. Muy bien, entonces, luchemos. Entonces tomaré mi decisión”.

No había forma de que pudiera sobrevivir contra él si confiaba solo en el instinto. ¡Tenía que controlar mi respiración! Intenté usar Ojo Perspicaz, pero eso solo me puso más nervioso.

Nombre: Stey Anatha Edad: 32

Especie: Humana Nivel: 324 Ocupación: Soldado

Habilidades: Habilidad de Espada Larga (Grado A); Recuperación de Condiciones Anormales (Grado A); Inmunidad al Efecto de Estado Anormal (Grado B); Demon Slice; Rebanada de Llama; Cortador de Hierro; Luna Llena; Imagen Remanente; Paso Sigiloso; Intimidar; Visión Nocturna; Paso Atrás Mejorado

¡Whoa! ¡Este tipo era realmente fuerte! No solo era de alto nivel, también tenía algunas habilidades poderosas y ninguna debilidad obvia. Mi extraña ansiedad probablemente se debió a esa habilidad de Intimidar.

Claramente era un luchador de corto alcance y tenía un alcance más largo que yo. Sería mejor atacar desde la distancia. Extendí la mano hacia atrás, saqué furtivamente un cuchillo de mi Dimensión de Bolsillo y se lo arrojé. Stey no movió un músculo. El cuchillo pasó volando a su lado y golpeó el escudo de un soldado detrás de él.

“¿Es así como deseas que te juzguen?” Preguntó Stey. “Ese lanzamiento no parecía muy seguro”.

“Ugh…”

“Hasta donde yo lo veo”, dijo. “Hay dos clases de guerreros: de cabeza fría y de cabeza exaltada. Aquellos que son más fuertes cuando están tranquilos y aquellos que solo muestran su fuerza real bajo una emoción intensa”.

Teniendo en cuenta lo que había sucedido en los últimos minutos, claramente yo era del tipo anterior. Probablemente eso era lo que estaba tratando de enseñarme. Esta no fue una pelea real, fue un entrenamiento.

“No te hagas una idea equivocada, Stardia. No se moleste en intentar apagar el fuego en su corazón. Solo mantén tu cabeza fría y tu corazón caliente. Si todavía lo tienes en ti, ven a mí de nuevo. Como si me quisieras muerto esta vez”.

“Está bien, aquí voy”.

Corrí hacia él y corté con mi espada. Intercambiamos una ráfaga de golpes. La espada larga de Stey era delgada, pero pesada. Mi espada no pudo deslizarse junto a él. Di un paso atrás y disparé un Thunderbolt.

¡Bwoooom!

Cuando el rugido resonó en mis oídos, noté la imagen residual de Stey. Pareció desdibujarse por un momento, antes de dividirse en dos de alguna manera. La copia que fue alcanzada por el Thunderbolt desapareció inmediatamente y varios soldados cercanos cayeron de rodillas.

“Eso es suficiente”, dijo Stey. “Has hecho lo suficiente para demostrar tu fuerza. Pasas.”

“Haah haah, pasé…”

“Sin embargo”, dijo. “Tienes margen para mejorar. Por ejemplo, tu Thunderbolt golpeó a varios soldados amigos”.

“Oh…”

Estaba tan envuelto en la pelea que ni siquiera me había dado cuenta.

“Bueno, estás dentro por ahora, Stardia. Tu fuerza será una gran adición a nuestras fuerzas”.

Parecía tan amable y amistoso ahora. A un mundo de distancia del monstruo que parecía ser cuando yo estaba bajo el efecto de su Intimidar. Y había hecho un trabajo increíble al perfeccionar mis debilidades.

“¿No me vas a presionar por mis habilidades?” Yo pregunté.

“No me importa particularmente. Mi trabajo es juzgar si eres apto para servir y te he considerado digno. Ni siquiera usaste tus habilidades especiales”.

“Tú tampoco estabas exactamente peleando en serio”.

“Lo estoy guardando para los monstruos”, dijo. “Deberías hacer lo mismo”.

Me dio una sonrisa fría y, de alguna manera, me sentí más tranquilo. Sin duda era un oponente aterrador, pero ¿la idea de tenerlo de mi lado? Eso fue muy reconfortante. Aun así, este no fue el final de mis problemas.

“General Stey”, dijo el duque Schoen. “No puedo permitir que invites a uno de los descendientes de Olivia a nuestras filas”.

Stey frunció el ceño. “¿No fuiste tú quien lo recomendó?”

“Yo-yo no sabía nada de esto”, balbuceó Schoen. “Pensar que tiene la sangre de esa cobarde Olivia en sus venas…”

Vaya, realmente la odiaba. De vuelta en mi propio país, Olivia era una heroína, pero ¿aquí? Aquí, todos parecían verla bajo una luz completamente diferente.

“Y por eso”, dijo Stey. “¿No quieres que participe? ¿Entiendo correctamente?”

“Incluso si lo apruebo”, dijo Schoen. “La gente del pueblo no lo hará.

¡Nunca aceptarán esto!”

“Conozco la historia aquí, pero no tiene nada que ver con esto”, dijo Stey. “Estoy aquí para luchar contra los monstruos y asegurarme de que sean rechazados cuando ataquen la ciudad. Este chico puede carecer de experiencia, pero es un activo valioso. Su potencial supera con creces el mío”.

“Dios, ¿es eso realmente así…?”

El Duque Schoen no fue el único afectado. Incluso los propios soldados del general parecían inseguros.

“Tiene las tres habilidades más poderosas en la historia registrada”, continuó Stey. “Se Creativo, Editor y Otorgar. Si hubiera utilizado plenamente esas habilidades, no estaría aquí ahora mismo. Aunque, quizás, si no me hubiera reprimido, a él no le hubiera ido mucho mejor”.

“Pero…” dijo Schoen, “tenía tanto miedo de ti…”

¡Demasiado, lo estaba! Pero Stey simplemente negó con la cabeza.

“Toma ese Thunderbolt, por ejemplo. No es una habilidad fácil de controlar y, a menudo, falla en su objetivo, pero me golpeó con un solo golpe”.

“Debe haber sido una casualidad”.

“Por supuesto”, dijo Stey. “Podría haber sido. Pero mantuve la presión con Intimidar. Le hizo fallar su Tiro, pero el Thunderbolt aterrizó perfectamente. Supongo que ha mejorado la habilidad en sí”.

“¿Cómo es eso posible?”

“Tiene la habilidad de Editor. Aunque, la única forma de saberlo con certeza es preguntándole por nosotros mismos”.

Stey no solo era fuerte, también era inteligente. Parecía inútil intentar ocultárselo.

“El general tiene razón,” dije. “Modifiqué la habilidad”.

Algunos de los soldados me miraron con los ojos muy abiertos. Otras personas gritaron o simplemente se quedaron allí, completamente estupefactas.

“Mi único  objetivo aquí”, dijo  Stey, “es ahuyentar a los monstruos y minimizar el número de bajas. Los poderes de Stardia serán útiles para lograrlo, y digo que debería unirse a nosotros. ¿Tiene alguna objeción?”

El duque Schoen bajó la mirada. “Cumpliré con su decisión, general”.

“Te lo agradezco. El siguiente en la fila, da un paso adelante”.

Y así, me uní a la fuerza de defensa Honest. Emma y las demás pasaron la inspección de inmediato.

Hablando con algunos de los soldados más tarde, descubrí que era extremadamente raro que el general probara a alguien personalmente de esa manera. No había mucha gente en el mundo que pudiera competir con él.

Tenía la sensación de que iba a aprender mucho de él.

***

La fuerza ofensiva de la ciudad estaba compuesta principalmente por soldados estacionados fuera de la ciudad, listos para lanzar un asalto frontal contra los monstruos, y una fuerza defensiva dentro de las murallas de la ciudad.

La fuerza defensiva, que nos incluía, tenía que poder moverse rápido y, como tal, estábamos compuestos mayoritariamente por arqueros y personas con habilidades especiales. Después de todo, si algo iba a llegar a la ciudad, los enemigos aéreos probablemente vendrían primero.

Dirigía nuestra unidad especial. De esa forma, podríamos actuar de forma independiente, sin tener que esperar órdenes. También podríamos apoyar a otras unidades si nos necesitaran, o ayudar a llevar a los civiles a un lugar seguro. Para prepararnos, pasamos gran parte del día estudiando los asedios anteriores. A primera hora de la tarde, hicimos un descanso para el día.

“Noir, ¿tienes un momento?” Preguntó el duque Schoen. Parecía que me había estado esperando.

“¿Se trata de mi participación en la fuerza de guardia?”

“No, en absoluto. De hecho, te debo una disculpa. Ayer debí parecerme un anciano horrible”.

Hablando de verdad, me sorprendió bastante cuando empezó a discutir con Stey que yo no debería involucrarme.

“Pero había una razón para mi comportamiento”, prosiguió Schoen. “Si tiene algo de tiempo, agradecería su compañía”.

Me uní a él con la esperanza de aprender más sobre Olivia. El resto de nuestro grupo también vino. Dejamos el campo de entrenamiento y nos dirigimos hacia el centro de la ciudad. Allí había una gran plaza, con una fuente y bancos. Era un buen lugar para relajarse.

“Esta es la plaza Gaien”, dijo Schoen. “Por favor ven por aquí.”

Se detuvo frente a una estatua de un hombre con un solo brazo. Junto a la estatua, había una gran piedra negra, casi como obsidiana.

“Urgh”, dijo Luna. “Después de lo que pasó en Landan, esa estatua casi parece una persona real”.

“En serio”, estuvo de acuerdo Lola. “Siento que debería echarle un poco de Stone Salve”.

El duque Schoen los miró cálidamente. “Ha ha, desafortunadamente esto es solo una estatua. Mira aquí.”

Señaló un par de carteles que decían: “La ambición de Gaien es eterna” y “La Roca de la Paz”. Gaien tenía que ser el hombre de la estatua.

“Gaien era un alquimista que vivió hace más de doscientos años”, explicó Schoen. “Fue un gran héroe que salvó a esta ciudad de los monstruos en numerosas ocasiones”.

“Así que perdió ese brazo por un monstruo, ¿eh?”

“Oh, no, en absoluto. Perdió su brazo a manos de un extranjero malvado, perdón, la famosa aventurera, Olivia”.

“Maestra, quiere decir, ¿Olivia hizo eso…?” Yo pregunté.

¿Había luchado contra su mayor héroe y le había cortado el brazo? El duque Schoen pensó que yo era descendiente de ella, por lo que eligió sus palabras con cuidado.

“Ella puede ser una heroína en tu reino, pero aquí… ella era una villana. Déjame explicar.”