Ore dake Ireru Kakushi Dungeon (NL)

Volumen 4

Capitulo 12: Falso Héroe

Tuvimos suerte. El general Stey y Lyrica habían venido a buscarnos cuando lo hicieron. Nunca podríamos haber derrotado al guardián sin ellos. Aparentemente, estaban en las paredes cuando los monstruos simplemente dejaron de atacar y comenzaron a retirarse. Eso debe haber sido cuando destruimos la Piedra de la Paz. Como ya no eran necesarios en las murallas, el general y los soldados restantes habían centrado su atención en exterminar a los monstruos que quedaban en la ciudad.

Fue entonces cuando nos encontraron, y así terminó el asedio final de los monstruos. El evento dejó muchos muertos y heridos, así como una gran cantidad de daños materiales, pero, en comparación con los asaltos anteriores, las bajas fueron pocas esta vez. Todos pasamos las siguientes horas trabajando para salvar a las personas atrapadas entre los escombros y obteniendo tratamiento médico para ellos.

Para mi alivio, Gillan también estaba a salvo.

***

Dos días después, todavía estábamos en el Reino de Rosette. Realmente queríamos volver a casa, pero estábamos obligados a conocer al rey primero. Quería recompensarnos por nuestras acciones.

Pero actualmente, no estaba ni en Honest ni en la capital de Rosette. Yo tampoco me había ido a casa. Más bien, me uní al duque Schoen, sus soldados y mi hermano en una excursión al pueblo de Tonnelles. El duque miró enojado a los aldeanos reunidos en la plaza.

“Jefe de la aldea O’Aura Gaien, ¿estos dos hombres le resultan familiares?” Schoen preguntó.

“N-No, nunca los había visto antes en mi vida”.

“¿Qué pasa con el resto de ustedes?”

Los otros aldeanos negaron con la cabeza. Todos habían acordado hacerse el tonto. Qué descarado. Gillan no pudo soportarlo.

“¡Dejen de actuar, viciosos caníbales! Sus crímenes contra la humanidad han quedado al descubierto. ¡Confiesen!”

“Ya veo…” dijo el jefe. “Duque Schoen, en realidad no cree en la historia de este loco, ¿verdad?”

“Lo hago.”

El jefe estaba un poco desconcertado por eso, pero su actitud arrogante regresó rápidamente.

“Tonnelles es el lugar de nacimiento de Gaien. ¿De verdad crees que la propia gente del gran héroe son caníbales? ¿Qué prueba tienes?”

“Estamos aquí para buscar evidencia física”, dijo Schoen. “Y tenemos estos dos testigos presenciales. Y ha habido un número inusualmente alto de desapariciones en esta área”.

“Su Excelencia, no quiero ofender, pero para que usted confíe en las palabras de estos extraños tipos sobre su propia gente, la gente de la propia ciudad del gran héroe, nada menos, es simplemente…”

“Gaien no era un héroe. Noir, cuéntales lo que aprendimos”.

Di un paso al frente y le expliqué que la propia reliquia de Gaien era la fuente de los grandes asedios de monstruos. Al escuchar esto, los aldeanos se pusieron pálidos. Finalmente entendieron el lío en el que estaban.

“Gaien quería la inmortalidad”, dije. “Cuando se dio cuenta de que nunca lo lograría, convocó a esos monstruos para hacer sufrir a la gente. Todo fue para que lo recordaran como un héroe. Pero no fue un héroe. ¡Era un mentiroso, y también lo son todos en este pueblo!”

El jefe de la aldea bajó la cabeza, pero vi que metía la mano en la camisa.

“Te tomará dos segundos lanzar esa piedra explosiva”, dije, “pero solo me tomará uno para cortarte el brazo. ¿Esto realmente vale el riesgo?”

“Ughh…” O’Aura cayó de rodillas y apretó los dientes con frustración. “Arréstenlo”, dijo Schoen.

Los soldados entraron. En poco tiempo, tenían a todos los aldeanos bajo custodia. Gillan asintió con entusiasmo todo el tiempo.

Después de eso, él y yo construimos una tumba simple para honrar a las personas que habían sido asesinadas por los aldeanos de Tonnelles y dejaron algunas flores en ella.

En el viaje de regreso en carruaje, el Duque Schoen se disculpó con nosotros.

“Debería haber hecho esto en el momento en que me dijiste lo que pasó. Lo siento.”

“Está bien”, dije. “Los otros nobles también tenían sus propias opiniones sobre la situación. ¿Verdad, Gillan?”

“Si. Sin embargo, me siento mucho mejor ahora. Es como dicen: el bien siempre triunfa al final. Además, tuve mucho tiempo para reflexionar sobre mi vida antes de que Noir me salvara. Quiero hacerlo mejor de muchas maneras, pero lo que más lamento es no tomar mis estudios más en serio”.

Eh. Realmente había cambiado esta vez. Me sorprendió descubrir que había roto con sus muchas, muchas novias.

Gillan envolvió su brazo alrededor de mi hombro y me acercó a él. “Me convertiré en un gran comerciante”, anunció con orgullo. “Así que quiero que te conviertas en un gran héroe, Noir”.

“No estoy realmente interesado en todo el asunto del héroe. Solo quiero vivir una vida segura y cómoda”.

“¡Oh, Noir, no has cambiado ni un poco!”

“Dicen que las personas solo cambian cuando están tan asustadas o tan tristes que  sienten que pueden  morir”, dije  con una  sonrisa. “No he experimentado ninguna de esas cosas todavía”.

Tanto Gillan como el duque Schoen parecieron comprender.

Cuando regresamos a Honest, tuvimos que trasladarnos a un carruaje que se dirigía a la capital. Ya nos estaba esperando fuera de las puertas cuando llegamos, al igual que Emma y las otras chicas.

“Finalmente has vuelto. ¿Come te fue?”

“Bueno, creo que los aldeanos obtuvieron lo que se merecían”, dije. “Supongo que deberíamos entrar, ¿eh?”

“Espera, espera, tuvimos una pequeña charla”.

¿De qué se trataba esto? Emma, Lola, Luna y Leila me rodearon con las manos extendidas. Estaba bastante confundido, pero todos estaban sonriendo. ¿Se trataba de LP? Esperaba que no hicieran nada demasiado extraño en público…

“Trabajaste tan duro esta vez, todas queríamos reconocértelo”, dijo Emma.

“Ahora, relájate”.

“Y aquí vamos.”

“¡Prepárate, Noir, te vamos a tirar!”

Y eso es exactamente lo que hicieron. Los cuatro me levantaron y me lanzaron al aire. Me sentí como si estuviera volando.

“¡Ah ha ha, esto es muy divertido!”

Me permito disfrutarlo, riéndome del gran cielo azul.