Ore ga Heroine o Tasukegite

Volumen 6

Capitulo 3: ¿Las Comedias De La Vida Escolar Pueden Ser Mortales?

Parte 1

 

 

Un domingo por la mañana, Harissa y yo estábamos limpiando el almacén detrás de la casa. No era una unidad particularmente grande. Mi padre había obtenido un préstamo para construir nuestra casa, y cuando lo hizo, trajo el almacén, la fundación y todo, del país. Estaba lleno de varias cosas al azar que mis antepasados habían aprendido a lo largo de los años como miembros de la familia Namidare. También fue donde puse la espada del héroe que había traído del mundo de Harissa.

“… ¿Qué es esta cosa, sin embargo?”


Levanté un palo extrañamente puntiagudo y lo miré con atención. Cualquier chica mágica que usara algo así para transformarse era probablemente una gran fanática de los ataques físicos en lugar de los mágicos…

“Ugh…”

Pensar en las chicas mágicas todavía me hizo estremecer un poco después de mi propia “transformación”.

“Creo que puedo dejarlo aquí por ahora”.

Limpié el polvo del palo y lo puse de nuevo en la lona que había tendido en el patio.





“Rekka, he terminado de limpiar el interior del almacén”.

Harissa salió del almacén con un cepillo para polvo y un trapo en cada mano.

“Oh gracias. Terminaré de desempolvar el resto de las cosas dentro, así que desempolvas lo que traje aquí”.

“¡Entendido!”

“Me ocuparé de las cosas pesadas yo mismo más tarde, así que solo omita esas cosas”.

“Bueno.”

“Además, no tienes que tocar nada que parezca peligroso. O cualquier cosa que no entiendas”.

“¿Claro…?”

¿Qué le pasaba a mi familia que tenía que darle instrucciones así para limpiar nuestro almacén? No importa. Ya lo sabía. Solo deseaba que mi padre y mis antepasados no hubieran puesto cosas tan extrañas aquí.

“B-Bueno, solo ten cuidado”.

Me quité los guantes y le di unas palmaditas en el hombro a Harissa antes de entrar yo mismo en el almacén. Harissa ya había desempolvado el lugar, así que ahora todo lo que tenía que hacer era limpiarlo con un trapo húmedo.

“Muy bien, déjame ver si puedo hacer esto antes del mediodía”.

“Por favor, hazlo. Aún mejor, intente hacerlo antes de que comiencen los espectáculos de variedades de la mañana”.

Por supuesto, R, que no ayudó (no pudo) ayudar con la limpieza, estaba recostado en el aire y diciéndome qué hacer. Realmente había empezado a mirar televisión, y últimamente incluso quería pasar mucho tiempo en la tienda de alquiler. A este ritmo, pensé que podría terminar teniendo que comprarle un reproductor de DVD portátil.

“Oye, solo  estás  parado allí. ¡Ponte a trabajar! ¿Alguna vez quieres terminar esto?”

“Sí, sí.”

Empapé un trapo en un cubo de agua y lo saqué, luego comencé a limpiar de arriba a abajo. Mi madre solía hacer esto, así que era la primera vez que lo hacía solo en mucho tiempo.

“Aquí hay una gran cantidad de polvo considerando lo bien que se selló el lugar”, dije. “¿De dónde viene todo?”

“Parece que se está cayendo del techo, en realidad”.

“¿Es esto lo que llaman polvo de la casa?”

“No te preocupes. Por lo que puedo decir, nada de eso es venenoso o peligroso.”

“¿Puedes decir eso?”

“Puedo ser pequeño, pero soy multifuncional. Simplemente no uso la mayoría de mis funciones”.

¿No es ese un desperdicio? Pero supongo que si no pudiera tocar a nadie más que a mí o ser vista por alguien que no sea yo, de todos modos no habría mucho que pudiera hacer con esas funciones.

“Mira, dejaste de moverte de nuevo”.

“Cierto…”

¿Quería ver esos programas de variedades tan mal? En realidad, cuando dije que intentaría terminar la limpieza antes del mediodía, supe que estaba siendo demasiado ambicioso. Con solo Harissa y yo, probablemente tomaría medio día. Ciertamente habría ido más rápido con mi mamá y mi papá. Tal vez podría tomar un descanso a la hora del almuerzo…


“¡Kyah!”

“¡¿Harissa?!”

Dejé caer lo que estaba haciendo y salí corriendo en cuanto escuché gritar a Harissa.

“¿Qué pasa?”

“¡Oh, señor Rekka!”

Harissa se volvió hacia mí. Ella sostenía un trapo, y sentada frente a ella había una especie de urna.

“Te escuché gritar. ¿Qué pasa?”

“Se sentía como si esta urna se moviera por sí sola…”

¿La urna se movió sola?

¿Había una rata adentro o algo así? Hmm, no, eso no podría ser. Tenía una tapa encima.

“Um, accidentalmente rompí el pedazo de papel que lo estaba sellando cuando estaba limpiando. Y entonces…”

“¿Un pedazo de papel?”

Miré y, efectivamente, había una larga tira de papel sobre la tapa de la urna y sobre el cuerpo, básicamente pegándola con cinta adhesiva. Era tan negro que al principio pensé que era solo una mancha de carbón o algo así.

“Hmm…”

Qué pedazo de papel tan extraño. Era rectangular y un poco más grande que mi palma. Por supuesto, la tapa de la urna era mucho más grande. Si realmente quisiera usar ese trozo de papel para cerrar la urna, habría tenido que cortarlo en tres o cuatro trozos.

Pero el papel, como estaba, solo estaba en un lado.

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Ore ga Heroine Volumen 6 Capitulo 3 Parte 1 Novela Ligera

 

Y en realidad, la tapa estaba asentada con bastante seguridad en la urna misma. No parecía haber necesidad de sellarlo en absoluto.

Sin embargo, si a alguien le preocupaba que algo saliera por dentro, seguramente debería haberlo sellado con más de un solo pedazo de papel. Pero… Harissa dijo que se había movido sola. ¿Eso significaba que había algo extraño dentro?

“Harissa, vuelve. Y déjame tener ese plumero.”

“Bueno.”

Le quité el plumero a Harissa y le indiqué que retrocediera. Levanté la tapa de la olla, pero solo un poco, y luego deslicé el extremo del plumero debajo de ella. Luego retrocedí lo más que pude y usé el plumero para levantar la tapa como una palanca. Me tensé, listo para que saliera cualquier cosa, pero después de esperar un segundo, luego dos… y luego diez, no pasó nada. Vacilante, miré dentro de la olla, pero no había nada allí.

“Esta estupidez realmente me asustó por un segundo allí”.

“¿Está todo bien?” Harissa preguntó mientras caminaba hacia mí. “Sí, está vacío. ¿Tal vez lo imaginaste en movimiento?”

“Sí, yo supongo que sí.” Harissa asintió, un poco aliviada. “… ¿Eh?”

Cuando volví a poner la tapa, noté que había algo escrito en el interior de la urna. ¿Era chino? ¿O tal vez solo japoneses realmente viejos? No podría decirlo. No pude hacer cara o cruz.

“¿Pasa algo, señor Rekka?”

“No, es nada.”

Pensé que no había nada de qué preocuparse realmente y volví a cerrar la urna.

***

 

 

El día siguiente. 10:20 a.m.

Como todos los lunes, había ido a la escuela y estaba sentado en mi asiento en clase. Era el receso del segundo período, y estaba perdiendo el tiempo esperando que comenzara la próxima clase.

“Entonces, Rekka, ¿qué pasa con este club de literatura ligera al que te uniste?”

“Es una larga historia. ¿Verdad, Satsuki?

“No me hable de eso… No es algo que me importe recordar”.

Estaba tratando de tener una buena conversación con Satsuki y las otras chicas, pero de repente escuché algo inusual en el pasillo.

“¿Que está pasando?”

“¡Sir Rekka!”

Para mi sorpresa, Harissa entró al aula. Se destacó ya que no llevaba uniforme escolar, pero también estaba gritando en voz alta y agitando su bastón de madera que solía lanzar hechizos. Fue suficiente para asustar a los otros estudiantes, quienes retrocedieron con cautela. La pequeña hechicera se dirigió hacia mí, golpeando ansiosamente el extremo de su bastón contra el piso.

“¡Ven, señor Rekka! ¡Volvamos a Aburaamu!”

“¿A-Aburaamu?”

Ese era el nombre de la patria de Harissa, ¿no? “¿Encontraste una manera de viajar allí?”

“¡No! ¡Aún no! Pero como no sabemos cómo, ¡vamos a resolverlo! ”

“Um…”

¿Qué estaba pasando aquí? ¿Ella de repente sintió nostalgia? ¿Es por eso que estaba tan decidida a irse a casa? Esto era muy diferente a ella…

“¡Hey Harissa! ¡No llevarás a Rekka a ninguna parte! ”

“E-Eso es correcto, Harissa. ¿Qué te pasa?”

“¿Que está pasando aquí? Es terriblemente descarado aparecer de la nada y luego comenzar a hacer tanto escándalo”.

Iris parecía enojada, Satsuki parecía preocupada y Rosalind estaba claramente molesta. Pero a pesar de sus diferentes reacciones, cada uno de ellos sentía curiosidad por el cambio repentino en el comportamiento de Harissa.

“Harissa, en serio, ¿qué está pasando aquí?”

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“¡No importa! ¡Solo ven conmigo!”

Harissa me interrumpió y, con fuerza que no podía creer que tuviera en su pequeño cuerpo, me sacó de la silla y me arrastró fuera del aula.

“¿Qué… qué?”

Estaba tan confundido que simplemente la seguí. “¡Oye! ¿A dónde crees que vas?”

“¡Harissa, espera!”

“¿Qué crees que estás haciendo, Rekka? Por qué dejas que te lleve… ¡No!

¡No me digas que te gustan las niñas pequeñas!”

“¡No grites algo así! Además, ¡eso no es cierto! ”

“Prefieres chicas con senos más grandes, ¿no? En realidad, si te gustara lolicon, eso haría feliz a Rosalind, ¿no?”

R, si tuviera un trapo o algo así, ¡te lo pondría en la boca!


Aparte de eso, nuestro escape (?) Probablemente terminaría rápidamente. Intentábamos huir de Iris, un extraterrestre, y de Rosalind, un vampiro. Ambos eran increíblemente fuertes. Y Harissa tenía incluso menos resistencia que una chica promedio de su edad, por lo que nos alcanzarían en poco tiempo. O eso pensé.

“¡Ealim Nekram!” Harissa cantó.

Conocía ese hechizo. Era su magia de invisibilidad. Nadie podría vernos ahora. Lo conocía porque ella lo había usado para salvarnos varias veces antes. Por supuesto, Iris y Rosalind también sabían exactamente lo que estaba pasando.

“¡Rosalind! ¡Haz eso de murciélago y encuéntralos!”

“Me encantaría, ¡pero no puedo usar mis poderes frente a todas estas personas! ¡Ya no podré ir a la escuela con Rekka después de revelarme así!”

Pero resultó que no tenían forma de encontrarnos si Rosalind no se convertiría en murciélagos. Dicho esto, si hiciera algo tan simple como llamarlos, inmediatamente sabrían dónde estábamos.

“…”

Pero con la forma en que Harissa me estaba mirando, no podía hacer algo así. Para empezar, no había llegado al fondo de lo que estaba pasando con ella. No tenía idea de por qué de repente era tan insistente en irse a casa. Y con la esperanza de descubrirlo, la dejé llevarme lejos, lejos de Iris y Rosalind.

***

 

 

Harissa me llevó a un aula de estudiantes de segundo año. La campana ya había sonado para entonces, pero no había nadie allí. ¿Quizás estaban en una excursión o algo así? De cualquier manera, si un maestro nos encuentra, estaríamos en problemas. Pero… supongo que no tenía que preocuparme por eso con la magia de invisibilidad de Harissa.

“Entonces, Harissa, ¿qué está pasando exactamente?” Pregunté, más preocupado por ella que por otra cosa.

Le había dicho antes que no se le permitía entrar a la escuela sin permiso. Además, normalmente esperaría hasta que yo llegara a casa si había algo de lo que necesitaba hablarme. Pero no solo había irrumpido en la escuela, había aparecido en mi clase hablando de cosas raras y luego me arrastró frente a todos mis compañeros de clase. Estaba bastante fuera de lugar.

¿Había sucedido algo que hiciera todo esto tan urgente?

“Si algo ha sucedido, entonces te ayudaré. Tú puedes decirme cualquier cosa.”

“Está bien…” Harissa agarró su bastón con fuerza y me miró. Casi parecía que iba a llorar. “Um, yo…”

“¿Si?”

“Um…”

Harissa seguía murmurando y tartamudeando como si tuviera problemas para pronunciar las palabras, pero…

“No puedo aguantar más”.

Entonces ella comenzó a decir algo raro.

“… ¿Qué?” Ladeé la cabeza, confundido. “Lo siento… ¿Puedes explicarme eso?”

“Mi corazón no puede aguantar más”.

“Yo… todavía no entiendo lo que eso significa. Además, Harissa, estás demasiado cerca para sentirte cómoda”.

Cada vez que lograba unas pocas palabras, Harissa se acercaba un poco más.

Lo siguiente que supe fue que me había apoyado contra la ventana de la habitación.

“¿Harissa?”

“Señor Rekka, ¿realmente soy tan poco atractiva?”

¿No atractiva? ¿Eh? ¿Estaba preguntando si era linda? “No, creo que hay mucho que te gusta de ti”.

“¡Eso me hace tan feliz, señor Rekka!”

“¡Uwah!”

¡Ruido sordo!

Harissa de repente me agarró con tanta fuerza que perdí el equilibrio y caí de espaldas al suelo.

“¡Sir Rekka!” Ella estaba encima de mí, hablando en voz baja. “Estoy tan feliz de poder vivir en la misma casa contigo”.

“¿L-Lo estás? Eso es bueno. Por cierto, si pudieras alejarte de mí, te lo agradecería… ”

“Pero a veces es frustrante”, continuó Harissa, ignorando mi pedido.

¿Frustrante…? ¿Tenía esto algo que ver con lo que estaba pasando? “Señor Rekka, somos lo suficientemente mayores como para casarnos, ¿verdad? Pero a pesar de que vivimos bajo el mismo techo, dormimos en habitaciones diferentes y no hacemos nada. ¿No es extraño?” Harissa preguntó con impaciencia mientras pasaba su dedo por mi clavícula.

“No, eso es solo en el mundo de dónde eres, ¿verdad? En Japón, todavía no tienes la edad suficiente para casarte… ”

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“¡Hmph! ¡Por eso quiero volver a Aburaamu! ¡Entonces podemos casarnos!” Harissa gritó cuando comenzó a golpear sus manos contra mi pecho. “¡¿Y a quién le importa lo que dice la ley?! Sir Rekka, ¿qué piensa realmente de mí? Si realmente te gusto, ¿por qué no duermes en la misma habitación que yo? ¡Quiero que te hagas responsable de toda la frustración que siento cada noche!”

“¡H-Harissa! ¡Cálmate!”

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Harissa comenzó a tirar de mi cabello y mi ropa. Ella todavía estaba encima de mí, así que si alguien nos viera así, se vería realmente mal…

“¡Rekka! ¡¿Dónde estás?!”

“¡No sirve de nada esconderse! ¡Ven afuera!”

“¡Ambas cállense! ¡Es la mitad del día escolar! ”

Podía escuchar tres voces que reconocí viniendo del pasillo. ¡Espera, mierda! Hubiera sido lo suficientemente malo si Satsuki, Iris y Rosalind me hubieran encontrado antes, pero si me encontraran ahora… Se me heló la sangre solo de pensarlo.

“¡H-Harissa! ¡Por favor, quédate callada!”

“Mmmfmmfh…”

Puse mi mano sobre la boca de Harissa, parecía que estaba cometiendo un crimen, pero no tenía muchas opciones, y me escondí en la esquina de la habitación. Solo esperaría a que pasaran…

“Hmm… Parece que están en este salón de clases”.

¡Me había olvidado de la magia de la omnisciencia! Los tres abrieron la puerta y entraron al salón de clases. Afortunadamente (… ¿o desafortunadamente?), Incluso si sabían que estábamos aquí, no parecían saber exactamente dónde estábamos o qué estábamos haciendo.

Aun así, esto fue malo. Necesitaba salir de aquí sin que me encontraran. Puse mis brazos alrededor de Harissa y me concentré exclusivamente en permanecer en silencio mientras me arrastraba por el piso, en dirección a la puerta opuesta a la que habían entrado las otras chicas. Pero…

“¿Dónde crees que están? Supongo que puedo encontrarlos para nosotros.”

¿Rosalind iba a convertirse en murciélagos ahora? “Sí, prueba eso”.

¡Satsuki, para! Incluso si no hay nadie aquí, ¡debe ser una mala idea!

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Mientras pensaba en tratar de suplicarles, levanté la vista y vi cuán realmente terroríficos se veían cada uno de ellos. Todos estaban muy tranquilos. Y justo cuando pensé que sería un hombre muerto seguro…

“Ustedes tres, ¿qué están haciendo en el aula de un estudiante de último año?” preguntó una nueva cuarta voz.

Cuando eché un vistazo, vi a una chica con el pelo recogido. En particular, sin embargo, ella estaba usando un parche en el ojo derecho. Era, sin duda, la presidenta del consejo estudiantil de nuestra escuela, Mitsuhashi High. Su entrada había bloqueado a las otras chicas, pero ahora mi salida estaba bloqueada. Me quedé quieto, básicamente atrapado entre una roca y un lugar duro.

“¡Mmmhmmm mhmmm!”

¡Harissa, por favor, cállate!

Me había arrastrado con ella en mis brazos a través de la mitad del aula, por lo que los dos, ropa, cabello y todo, parecía aún más despeinado que antes. Ni siquiera tendría la oportunidad de poner excusas si alguien nos atrapara así. Probablemente irían directamente a llamarme a la policía.

“Um, bueno, ya ves…”

Satsuki debe haber vuelto a sus sentidos. Cortésmente trató de tartamudear una excusa para su estudiante de último año.

“Estamos buscando a alguien. No nos molestes”.

A Rosalind, sin embargo, no parecía importarle en absoluto. Estaba tan impertinente como siempre, y estaba más que dispuesta a sacar al presidente del consejo estudiantil de la sala para volver a los negocios. Iris no dijo nada, pero parecía que estaba lista para ponerse del lado de Rosalind.

“Buscando a alguien, ¿eh? No conozco los detalles, pero ¿es realmente lo suficientemente importante como para que te saltes la clase?”

“Por supuesto que es.”

“Ya veo. Ni siquiera vas a fingir que sabes que deberías estar en clase entonces…” La presidenta se cruzó de brazos. “Pero ya sabes, se supone que debo ser un modelo a seguir para otros estudiantes, especialmente mis juniors. No puedo dejar que te saltes”.

“Hmph. Eres bastante arrogante. En ese caso, tengo una pregunta para ti… ¿Por qué no estás en clase tú misma?”

En realidad, esa fue una buena pregunta. ¿Qué estaba haciendo ella aquí? La presidenta cursaba el segundo año, por lo que es posible que solo estuviera caminando por un pasillo en esta parte del edificio de la escuela cuando escuchó voces.

Pero Rosalind todavía tenía un punto. Ya que estábamos en la mitad de la clase ahora, ¿no debería haber ido a buscar a una maestra para manejar algo como lo que otros estudiantes se saltan? Parecía extraño que intentara manejarlo ella misma.

“Me tienes allí, pero esto es una emergencia. Al menos, no es algo de lo que tenga libertad para hablar”.

“Entonces no le diremos a nadie que te vimos si no le cuentas a nadie que nos viste”, dijo Rosalind.

“¿Crees que esto es una  negociación? Eso es muy malo. Desafortunadamente, lo que estoy haciendo solo tomará un minuto”.

La presidenta del consejo estudiantil sacó de su bolsillo lo que parecía un talismán, luego levantó el parche sobre su ojo derecho solo un poco. Ella giró su ojo derecho ahora expuesto hacia mí y Harissa. Espera… ¿Por qué estaba mirando hacia nosotros? Ella no debería poder vernos.

“Ahí, ¿eh?”

Pero no obstante, caminó directamente hacia donde estábamos en el piso y sostuvo el talismán hacia Harissa.

“¡¿Hwah?!”

De repente, Harissa comenzó a tener espasmos en mis brazos. Por un momento, juré que vi algo flotando fuera de su cuerpo.

“… ¿Eh? ¿Qué estoy haciendo aquí?”

“¿Harissa? ¿Estás bien?”

“¿Huh? ¿Señor Rekka?

Me sorprendió la forma en que comenzó a temblar, pero parecía que estaba bien. Ella me miró en estado de shock… pero luego comenzó a temblar de nuevo antes de congelarse como una piedra.

“¿Harissa?”

¿Pasó algo más extraño…?

“¡Rekka!” Escuché a Satsuki, Iris y Rosalind gritar a la vez.

Por alguna razón no quería mirar hacia arriba. Realmente, realmente no lo hice. Si tuviera que hacerlo, estaba listo para pasar el resto de mi vida aquí en el piso, solo mirando al suelo.

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Excepto que… cuando miré hacia abajo, recién recordé que la ropa de Harissa era un desastre. Varios de los botones de mi camisa también se desabrocharon. Y estábamos en el suelo así, abrazados…

“… ¿Qué estás haciendo?” la presidenta del consejo estudiantil preguntó en estado de shock.

Sí, no había dudas. El hechizo de invisibilidad se había roto. En otras palabras, estaba expuesto frente a todos, luciendo como un criminal…

Básicamente, era hora de rogar por mi vida.

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