Isekai Tensei Soudouki

Volumen 3

Capitulo 4: El Fin De La Oscuridad

Parte 3

Sin embargo, su batalla fue diferente de la gloriosa batalla abierta. Sus batallas también tendieron a convertirse en algo sombrío sin ninguna compasión o piedad.

Por eso Sanai no podía llegar a gustarles a pesar de ser consciente de su necesidad.

“¡Tsk!”

Bartholomeo no estaba obsesionado con asesinar a Pedro e inmediatamente tomó algo de distancia.

Bartholomeo nunca había perdido una oportunidad perfecta como esta ni una sola vez en su vida.

No tenía la intención de subestimar la habilidad marcial del niño, pero parecía que este niño no había demostrado todo su poder en la batalla el otro día.

“Hmph, ¿me pregunto cuánto tiempo puedes mantener esa mirada indiferente?”

Si fue imposible ganar uno a uno, use números para aplastar a la oposición. Si fuera imposible incluso con números, use un rehén o veneno. Así luchaban los que vivían en la sombra.

No le tomaría tanto tiempo a sus subordinados aniquilar la orden de los caballeros que estaba en la cima de la confusión.

En ese caso, solo necesitaba contener a este chico y sus subordinados matarían a los objetivos.

“Has olvidado a la madre.”

Bartholomeo no podía comprender las palabras de Sanai, pero entendió que el niño estaba negando sus palabras.

“Parece que no estás dispuesto a admitir la derrota pero……”

Los subordinados de Bartholomeo fueron enviados volando con un destello cegador en ese momento.

“── ¿Qué demonios?”

Fue sin duda la explosión de la magia.

Sin embargo, los subordinados de Bartholomeo no eran tan incompetentes o tontos como para resignarse a ser golpeados por la magia.

¿Quién en el mundo estaba usando una gran magia a tal escala que sus subordinados no pudieron disiparse?

“¡No menosprecies el poder mágico de la sacerdotisa marina!”

Fue María, que estaba dispersando explosiones de llamas con un enfoque de fuerza bruta usando su enorme poder mágico. Tal cantidad de poder mágico podría incluso llamarse tiránica.

Desafortunadamente, Bartholomeo nunca vio a María peleando una batalla, o la capacidad real de alguien que fue llamado el mayor genio de la magia desde la fundación del Reino de Majorca antes de su matrimonio.

Incluso si intentaba derrotar a María directamente, Urraca y Obar estaban al frente, protegiéndola.

Si ella intentaba luchar contra ellos de frente, era obvio que él sería el próximo derrotado por la magia.

Además, la llamativa explosión provocó un fuerte sonido que se extendió por toda la capital. Era solo cuestión de tiempo antes de que los guardias inundaran este lugar.

Bartholomeo se dio cuenta instantáneamente de que le habían girado las mesas.

“Pensar que seré derrotado sobre el escenario incluso después de planear con mucho cuidado como este……”

El escenario era una palabra secreta de la agencia Akaishi. Se refería al sitio donde se estableció el gambito para asesinar al objetivo.

El escenario había fallado incluso después de que él invirtió casi toda su fuerza en él. Con esto, la agencia Akaishi nunca más recuperaría su fuerza como en el pasado.

Bartholomeo se vio obligado a darse cuenta de que el sueño que había construido hasta ahora se estaba desmoronando.

Ya perdió sus partidarios y su fuerza de combate. Lo que lo esperaba era solo su crimen y juicio.

“Es mortificante… al menos te derrotaré para equilibrar las cuentas de mi vida”.

También existía la opción de correr.

También existía la opción de rendirse y negociar.

Sin embargo, en este momento, en este instante, por primera vez Bartholomeo se dio cuenta del deseo subconsciente que estaba oculto dentro de su alma.

Quería matar, pero eso no significaba que estaría satisfecho matando a alguien al azar.

Quería matar a una persona noble, o una persona rebelde y poderosa. Quería deshonrarlos, humillarlos, hacer que toda su vida careciera de sentido.

Por eso no se convirtió en un asesino a sueldo, sino que se unió al ejército.

Este chico de cabello plateado fue bendecido con talento marcial. Tenía un estilo de vida deslumbrante y era amado por el destino. Para Bartholomeo, este niño fue una presa de la mejor calidad.

Era digno de decorar el último momento de la vida de Bartholomeo. “¡Sé testigo de la esencia de mi valor y habilidad!”

Sin embargo, independientemente de lo que Bartholomeo pensara, para Sanai no era un guerrero digno de que cruzara espadas como un igual.

Puramente como homicida, el asesino que intentó matar a Franco era aún más guerrero en comparación con Bartholomeo.

La razón era que no era la verdadera naturaleza de Bartholomeo matar humanos. No le importaba su método o si lo hacía personalmente o a través de sus hombres cuando mataba a alguien.

Quizás el samurái estaba menospreciando a los ninjas durante el período de los Estados Combatientes también debido a la influencia de tal sentido de los valores.

Para Sanai, Bartholomeo no era más que una vida baja que eliminaría. “¡Ven a mí, perro!”

“Bien. Será un gran placer deshonrar a un bastardo engreído como tú.” Bartholomeo estaba encantado del desdén de Sanai por él.

En una batalla real, muchas veces el método oculto superaría el método correcto y adecuado.

Si los dos pelearan honestamente el uno contra el otro, Bartholomeo nunca ganaría contra Sanai incluso si lo desafiaba mil veces. Pero no había bien o mal en la batalla. Le enseñaría como recuerdo de camino al infierno.

“Ven, jugaré contigo.”

Bartholomeo de repente arrojó agujas de hierro sin ninguna señal de advertencia de antemano.

Los ataques sorpresa eran en lo que él era el mejor. Por supuesto, no solo terminó con agujas de hierro.

Lanzó su manto hacia Baldr para bloquear su vista, luego sacó un tubo del bolsillo de su pecho.

El tubo contenía un poderoso veneno. El tubo fue manipulado para que explotara y dispersara el contenido.

Al final, ¿podría este niño evitar el líquido disperso? “Una broma trivial.”

Sanai se burló exasperado desde el fondo de su corazón.

El hombre creía que había asegurado su seguridad con un pequeño truco como bloquear la vista del oponente.

Fue una arrogancia que a menudo se encontró entre aquellos que no tenían la experiencia de luchar contra alguien más fuerte que ellos y escapar por poco de la muerte.

Al enfrentar a alguien que era claramente más fuerte que uno mismo, lo primero que tenía que hacer era huir.

Si había una razón por la que no podían escapar sin importar qué, tenían que tirar su propia vida.

Eso fue porque era difícil para los débiles ganar contra los fuertes, pero era posible tirar su propia vida para derrotar al oponente en una derrota mutua.

Y de vez en cuando, era solo cuando alguien había abandonado su propia vida, que una fortuna que solo podía provenir del dios de la muerte los estaría esperando.

Fue el milagro del otro lado que cualquier comandante veterano que haya sobrevivido al campo de batalla haya experimentado al menos una vez.

Bartholomeo, que solo había peleado con alguien más débil que él, no tenía tal cosa.

Desde que arrojaron las agujas de hierro, Sanai había tomado una postura para acelerar y correr hacia adelante. Solo su espada que fue apuñalada en el suelo apenas impedía que su cuerpo explotara hacia adelante. Entonces, liberó su fuerza.

El cuerpo de Sanai se transformó en un rayo de luz, como una flecha disparada desde un arco.

Sanai superó el límite de la visión dinámica y corrió como un viento que sopla. Bartholomeo no pudo percibir tal movimiento.

Ahora ven.

Con la volatilidad de este veneno, no saldrás vivo si solo un poco toca tu cuerpo.

Que pasa ¿Por qué no te mueves?

Además, ¿por qué está tan oscuro por aquí a pesar de que no es de noche…?

Su parte superior del cuerpo se deslizó hacia el suelo. Sin siquiera saber lo que había sucedido, Bartholomeo partió al mismo mundo al que había enviado a tanta gente en el pasado.

***

El intento de asesinato de María y Pedro no tuvo éxito, pero por alguna razón los militares declararon su apoyo a Franco. Por eso, Franco fue reconocido como el príncipe heredero sin ninguna oposición.

Habrá un banquete para mañana. Elena estaba absorta en elegir su atuendo para ese evento como si estuviera en la primavera de su vida.

Finalmente, obtendría el puesto de emperatriz viuda que tanto deseaba, convirtiéndose en la mujer más exaltada de este país.

“Haha-ue (madre), no necesitas elegir tu atuendo para mañana.”

Desde detrás de Elena, cuyas mejillas se habían aflojado para formar una expresión descuidada debido a su alegre estado de ánimo, escuchó una voz familiar que resonó muy fríamente en sus oídos.

“¿Q-Qué pasa Franco? ¡Aunque somos madre e hijo, todavía hay algo llamado decoro que debe seguirse!”

Franco trató la indignación de Elena como una simple brisa mientras miraba la innumerable cantidad de vestidos que se arrojaban al suelo.

“Qué inútil……”

“¡¿Inútil?! ¡¿Qué quieres decir con inútil?!”

Aunque estoy buscando un vestido que no te avergüence durante tu gran momento, estaba a punto de decir eso cuando finalmente recordó lo que Franco acaba de decir.

Si ella no oía mal, él parecía decir que no había necesidad de que ella eligiera un vestido……

“¿N-No me digas que la facción de esa mujer está haciendo algo innecesario?”

Elena interpretó las palabras de Franco de que no necesitaba seleccionar su vestido para significar que el banquete de mañana fue cancelado.

“Ese no es el caso. Es porque le pregunto, Haha-ue, que vaya a su casa en el territorio de Córdoba hoy”.

Elena no entendió lo que le dijeron y trató de sonreír, pero su rostro rígido solo se torció de manera extraña y la expresión que hizo estaba lejos de ser una sonrisa.

“¿C-Crees que le puedes decir algo así a tu madre? Me convertiré en la emperatriz viuda de este país, ¿sabes?”

“Al mismo tiempo, Haha-ue es también la autora intelectual del intento de asesinato de la Reina María y Pedro.”

La voz de Franco estaba llena de tristeza.

Era una mujer tonta, pero no había forma de que él no tuviera ninguna emoción hacia su madre relacionada con la sangre.

Por eso Franco vino personalmente en lugar de decirle a otra persona que le contara a Elena su tratamiento.

“¡T-Tal cosa! Lo hice por ti──”

“¿Haha-ue cree que tu crimen no será cuestionado si es por el bien de su hijo? ¿Incluso si tu crimen fue un asesinato de la realeza?”

Según la ley, el castigo por un intento de asesinato de un miembro de la familia real era la pena de muerte, incluso si el culpable también era un miembro de la realeza.

Elena se puso pálida cuando Franco señaló ese hecho.

¡Yo, yo soy la emperatriz viuda! ¡No hay forma de que pueda ser ejecutada!”

Sin embargo, Elena siguió creyendo hasta el final que ella era especial. Esa era la base de su identidad.

Ella no conocía la opción de admitir su crimen y rendirse obedientemente.

“Ejecutar a Haha-ue…… es imposible. Un escándalo tan malo no se puede anunciar al público.”

“¡Vez, tengo razón!”

Elena se rio con aire de suficiencia.

Carlos no viviría por mucho más tiempo de todos modos. Franco sería coronado inmediatamente como rey, y como la viuda emperatriz que dio a luz al rey, ella recuperaría el honor que perdió injustamente.

Sin embargo, las siguientes palabras de Franco aplastaron por completo la esperanza de Elena.

“Sí, Haha-ue no se puede ejecutar. Pero a cambio, a Haha-ue se le hará morir en algo que parece un accidente. Tal vez sea por veneno, o siendo empujada hacia abajo desde la terraza, o cayéndose de las escaleras… de cualquier manera, Haha-ue no podrá morir bien.”

Ese veredicto terriblemente cruel hizo que Elena gritara, haciendo temblar todo su cuerpo.

“¿Qué le estás diciendo a tu propia madre…… es esa chica, no? Esa chica humilde está susurrando palabras innecesarias en tu oído……”

Ella no lo reconocería. Nunca reconocería que su hijo Franco, quien también fue la fuente de su gloria, haría algo como matar a su propia madre.

Elena estaba buscando inconscientemente una explicación de esto de Teresa.

“Nadie me está instruyendo. Su expulsión es la voluntad de la nación, y también es la última amabilidad para Haha-ue”.

En otras palabras, esta fue también la decisión del rey Carlos.

Fue en este momento que Elena finalmente se dio cuenta por primera vez sobre el peligro en el que estaba su vida.

Ella alucinaba por el veneno en su comida, o tal vez habría un hombre visitándola desde la oscuridad y empujándola fuera de un balcón. Elena se volvió medio trastornada.

“No quiero morir” ¡No quiero! ”

Si muriera, no podría disfrutar del té, ni ver teatro, ni pasar el brazo por un vestido que estaba de moda.

Si tan solo pudiera vivir, si Carlos muriera un día, tal vez podría volver a la capital una vez más.

Esa esperanza solo podría hacerse realidad si ella viviera.

Franco puso su mano sobre el hombro de su madre que temblaba de miedo a la muerte y suavemente acercó sus labios al oído de Elena.

“Por favor, pasa el resto de tu vida en paz. No deseo convertirme en un parricida”.

***

El problema del sucesor al trono que había perturbado el Reino de Sanjuan durante mucho tiempo se resolvió y se celebró un modesto banquete para celebrarlo.

Se enviaron mensajeros a todos los países para notificarles sobre el estado formal de Franco como el príncipe heredero. Más tarde, se celebraría un banquete aún más grandioso con la asistencia de representantes de todos los países, por lo que las personas invitadas al banquete esta vez eran solo aquellos a los que se podía llamar familiares y autoridades del reino.

Además, la figura de Elena no se pudo encontrar en ningún lugar de este banquete.

“Aquí está mi príncipe heredero Franco. Espero que todos ustedes también sean tan leales a él como lo son a mí.”

Incluso Carlos parecía que estaba de un humor inusualmente bueno esta vez, como si se hubiera quitado una carga del pecho.

“Todavía me falta capacidad, pero ofreceré mi devoción a este país.”

El que dijo eso mientras se inclinaba en la cintura frente a Carlos fue José.

A partir de hoy, José ocupará el cargo de nuevo ministro militar, reemplazando a Santacruz.

Santacruz, quien fue informado de esta decisión extraoficialmente por el rey, solo sonrió sin ninguna pretensión, como si el demonio que lo había estado poseyendo todo este tiempo lo hubiera abandonado. Luego le entregó el sello oficial del ministro militar a José.

“── Lo siento, pero estoy aliviado de que esta carga se haya ido de mis hombros. Es gracias a ti.”

En realidad, Santacruz asumió la responsabilidad del intento de asesinato de Franco al renunciar sin que nadie lo supiera. Le recomendó a José que fuera su sucesor.

Había un problema con la forma en que José no pertenecía a ninguna facción, pero con su distinguido servicio al subyugar a Sanpaniradeón y la alta opinión del príncipe Franco sobre él, su nombramiento como ministro militar se decidió sin oposición.

También parecía que desde el fracaso del asesinato de Franco, no había día en que Santacruz pudiera dormir profundamente.

La mirada de Santacruz se había vuelto completamente demacrada, como si hubiera envejecido diez años. Poder retirarse sin que se investigue su crimen solo podría considerarse como una fortuna para él.

“No es este Baldr-dono, has estado muy activo recientemente, superando con creces mi expectativa inicial de ti”.

Como extranjero, Baldr se estaba convirtiendo en un alhelí en este banquete. Pero entonces llegó una voz brillante y una mano le tocó el hombro. Fue el virrey Rodríguez, quien lo recibió en Málaga.

“Todo es gracias a la valiosa información que Rodríguez-dono me proporcionó antes”.

“No tendré dificultades si es posible mover el país con tanta información. Todo se debe a la propia habilidad de Baldr-dono.”

Ciertamente, eso podría ser cierto, pero todavía era información valiosa para Baldr, y también fue una gran ayuda mental para él.

Después de todo, Rodríguez no tenía el deber de ayudar a un simple barón como él.

“…… Maggot-dono seguramente está orgulloso de tener a alguien como tú como hijo.”

La expresión de Baldr se volvió inconscientemente muy complicada al escuchar esas palabras.

Si Maggot se enteró de los detalles del caso esta vez, era obvio que estallaría en carcajadas y luego comenzaría su castigo. El caso sobre

Urraca era especialmente necesario para mantenerse en secreto, absolutamente.

“Oh, Baldr-sama, así que estás aquí junto con Rodríguez-sama”.

María se acercó con un vestido rosa brillante. Ella se inclinó saludando a Rodríguez con un hermoso comportamiento.

La máscara que llevaba para cubrir su verdadera personalidad era realmente magnífica.

Seguramente no había ningún humano que pudiera imaginar la versión del pequeño diablo de María mientras la veía actuando inocente como esta.

“No es esta su majestad María, es genial encontrar su majestad de buen humor”.

“Rodríguez-sama, ¿has escuchado? A pesar de que mi prima Urraca está enamorada de Baldr-sama, la está tratando muy fríamente, ¿sabes?”

(¡¿Qué demonios dices?!)

En ese momento, Baldr fue impulsado por el deseo de usar el abanico de papel en la memoria de Masaharu para darle una buena bofetada a la pequeña cabeza de María.

“¡Increíble, ¿querías decir que Tormenta Negra esta……?! ¡Estos dos seguramente se convertirán en una buena pareja! ¿Qué tal si ella visita nuestro país pronto para hablar de esto? Baldr-dono. Este Rodríguez no será frugal al brindar asistencia……”

“── ¿Seguirás diciendo eso incluso si mi madre se convierte en enemiga?”

“Su majestad María, desafortunadamente estos dos son los herederos de sus respectivas familias y no pueden abandonar su país. Es desafortunado, pero no están destinados a serlo.”

Parecía que María estaba sorprendida por este cambio de actitud extremadamente rápido de Rodríguez.

“¡Mejor recuerda esto, Urraca y yo todavía no nos rendimos!”

María dejó atrás esa amenaza de despedida y volvió al ajetreo de la fiesta una vez más. Ella debe estar realmente sorprendida, porque su verdadero yo salió un poco justo ahora.