Sevens NL
Volumen 5
Prologo: Gigoló Bastardo!
Parte 2
Después de todo, hubo diferencias en la carne y las verduras que se adquirieron. También había verduras que nunca antes había visto.
Aria-san también debe estar preocupada sobre cómo cocinar con los ingredientes de Arumsaas.
El Segundo habló desde el interior de la joya.
[Cuando las vi pelear debido a la sazón, me recordaron a mi madre y a mi esposa.] El Tercero habló con nostalgia.
[Sí. La abuela vino de la parte norte de Bahnseim. Los condimentos de la zona eran particularmente fuertes. El norte es frío, por lo que parece que los condimentos hacían que los alimentos supiesen fuerte.]
Sus voces solo podían ser escuchadas por mí.
Por eso, nadie sabía que yo obtuve asistencia de los seis antepasados de la Casa Walt.
Fueron los antepasados quienes me contaron cómo me verían los alrededores si les mencionara.
Dijeron que, si no podía mostrar ninguna prueba clara de que me estaban ayudando, quedarme callado sería mejor para mí.
En cuanto a mí, quería decirles a las personas a mí alrededor que los recuerdos de mis antepasados resucitaron dentro de la joya que colgaba de mi cuello.
Quería que supieran cómo estaba molesto gracias a estos tipos que chupaban mi maná y hacían un alboroto.
La joya azul de la Casa Walt permitió que los antepasados me dieran consejos, además, incluso me enseñaron cómo usar las artes. Era una herramienta útil si solo escuchabas sobre esa parte.
Sin embargo, estaban chupando mi maná. Además, la cantidad que estaban chupando era tanta como si le hicieses un gran agujero a un recipiente de agua.
Debido a eso, antes de esto me desmayé muchas veces y colapsé. Gracias a eso, la gente pensaba en mí como un débil.
Además, como llegue a la ciudad a lomos de una chica, me estaba haciendo famoso en Arumsaas como un hombre patético.
Fue muy preocupante.
Mientras pensaba eso, Aria-san murmuró en voz baja.
“Sophia se crio en el campo, por eso no entiendes loa sabores de la ciudad.” Recientemente Aria-san estaba muy nerviosa.
Sophia-san también.
“¿El sabor de la ciudad? No puedo entender lo que es bueno de la sopa de Aria. Si es así, entonces la hecha por el autómata es aún mejor.”
Parecía que esas palabras pisaron la mina terrestre de Aria-san.
“¡Te pasaste! Además, si dices eso, ¡incluso tú, Sophia, no puedes ganarle! ¡Qué pasa contigo, perder contra un autómata a pesar de que te enseñaron a cocinar!”
Fue Novem quien actuó para detener a las dos cuyo argumento se fue intensificando gradualmente.
“Las dos, es suficiente. El tiempo de descanso ha terminado. Partamos después de que terminemos de ordenar.”
Clara-san, que estaba sentada mientras leía un libro a cierta distancia, en ella persistía una actitud que dejaba en claro que no le preocupaba nada.
Ella era la única aquí que era un miembro del equipo contratado temporalmente. Su relación con nosotros fue contractual.
Miranda-san estaba sonriendo.
“Oh, ¿ya terminaron? Aunque quería ver un poco más.”
Miranda-san era realmente hábil. Ella era alguien que podía hacer todo hábilmente, desde ser vanguardia hasta retaguardia.
“Miranda-san, ¿puedo pedirte que no las provoques demasiado?” Miranda-san sonrió con frialdad a la petición de Novem y respondió.
“¿No sería más saludable discutir un poco con sinceridad? Bueno, supongo que será mejor para mí obedecer tus instrucciones, ya que soy el recién llegado al equipo. Seré paciente hasta convertirme en la número uno de Lyle.”
La atmósfera en el lugar se volvió aún peor.
Todos cerraron la boca. Solo se escuchó el sonido de Clara-san volteando una página. Si tengo que mencionar un defecto de Miranda-san, era su personalidad.
El Quinto estaba un poco horrorizado. [… ¿Esta es la bisnieta de Milleia?]
La bisabuela de Miranda-san era una mujer llamada Milleia de la Casa Walt.
En otras palabras, Miranda-san y yo teníamos una relación distante… ¿no estábamos ya casi sin relación? De todos modos, ella era una mujer relacionada con los antepasados a partir de la generación del Quinto.
La hija del Quinta.
La hermana pequeña del Sexto. La tía del Séptimo.
Cuando Miranda-san, que era la bisnieta de tal mujer, se unió a mi equipo, proclamó frente a todos: “Quiero ser la número uno de Lyle”.
Desde entonces, la atmósfera del equipo se sintió extrañamente tensa. El Sexto estaba gimiendo de desconcierto.
[La bisnieta de esa mujer, Milleia, ¿cómo resultó ser así?]
Pero, fue solo el Séptimo quien pareció tener una idea. No dijo claramente cómo y en que Miranda-san y Milleia-san eran similares, pero se sintió convencido cuando vio a Miranda- san.
[Ella es sin duda la bisnieta de Oba-ue.]
Solo había mujeres a mí alrededor. Este tipo de equipo era raro entre los aventureros.
Hablando de aventureros, la imagen que tenía de ellos era una reunión de camaradas más varoniles con una buena relación.
O más bien, muchas de los equipos que vi en el gremio eran así.
Un equipo con un solo hombre y el resto mujeres que parecían ser extremadamente atípico. Hasta ahora tampoco había visto otro equipo como el nuestro.
Todos cerraron la boca y comenzaron a ordenar el equipaje en silencio. Aunque anteriormente había más sonrisas, la atmósfera cambió por completo con Miranda-san uniéndose.
“… Me pregunto, ¿dónde cometí un error?”
Cuando murmuré eso para mí el ruidoso grupo estaba comentando por turnos. [La atmósfera empeoró desde que Miranda se unió, ¿no?]
[No, en primer lugar, creo que hay un problema con la actitud de Lyle.]
[Si tengo que decir dónde cometiste un error… como pensé, ¿supongo que fue cuando llegaron a Arumsaas? Recordemos, ocurrió esa breve fase rebelde de Lyle.]
[Eso fue terrible, eh.]
[Lyle, es mejor que te pongas más en forma.]
[En primer lugar, en lugar de un solo error, ¿no es este el resultado de cometer una cadena de errores?]… Los antepasados no me darían ningún consejo decente. La joya azul que tenía, ¿de verdad era algo maldito?
Cuando volvimos a la superficie ya era tarde.
Como volvimos antes de lo programado nos dirigimos al gremio de aventureros de Arumsaas a pie.
Arumsaas tenía una Academia en su centro y se llamaba Ciudad Academia.
Además, había otra cosa. También había una entrada a una mazmorra subterránea en el centro de la ciudad.
Tener una mazmorra en el centro de la ciudad era una de sus grandes peculiaridades que no se podía encontrar en otras ciudades.
El paisaje circundante no tenía sentido de unidad.
A los que estábamos caminando en medio de todo nos fueron dirigidas las miradas frías de los ciudadanos.
Los aventureros eran una existencia molesta para los residentes de la ciudad.
Tenían miedo de vernos armados, así como nuestros cuerpos que, sin rodeos, apestaban por el sudor y la sangre de los monstruos que combatíamos.
Desde el punto de vista del ciudadano común, no querrían acercarse a nosotros. “Hay que ver, ¿no se puede hacer algo con los aventureros?”
“Están estropeando el paisaje de Arumsaas.”
“Mira eso. Un joven lidera alrededor de hermosas chicas. Sí que produce envidia. No conocen ninguna vergüenza.”
¿Era vergonzoso que las mujeres fueran aventureras?
Quería preguntarle eso, pero supongo que era desagradable para ellos ver chicas hermosas a mí alrededor.
Recientemente de alguna manera llegué a entender un hecho.
Desde mi perspectiva que sabía de las condiciones internas, no era una relación que pudiera ser envidiada, pero… incluso si le dijera eso a otras personas solo lo escucharían como sarcasmo.
El Segundo estaba irritado.
[Gracias a quién demonios creen que Arumsaas se está haciendo rico. En primer lugar, si se trata del paisaje, hagan algo sobre este paisaje urbano que no tiene ningún sentido de unidad en absoluto.]
El Cuarto parecía desinteresado.
[Bueno, hay muchas personas que odian a los aventureros. Para empezar, incluso el Séptimo es un enemigo de los aventureros.]
Como siempre el Séptimo hablaba descaradamente de su odio hacia los aventureros.
[Los odio. En realidad, si es posible no quiero que Lyle se convierta en algo así como un aventurero.]
Caminamos entre las miradas frías.
El gremio de aventureros estaba ubicado cerca del muro exterior de la ciudad. Estaba muy lejos de la mazmorra subterránea.
Tal vez porque estaban cansadas o por el mal ambiente, los miembros del grupo ni siquiera intentaron hablar.
Así que lo hice yo.
“En fin, hoy tenemos tiempo, así que ¿qué tal si comemos fuera…?” Aria-san se negó.
“Quiero ir a casa a limpiarme y acostarme.”
De inmediato, Sophia-san también dio su negativa. “También comí en el calabozo, así que me abstendré.”
Novem se llevó las manos a las mejillas con expresión preocupada.
“Como se esperaba, no podemos comer afuera mientras las dejamos a las dos.” Recientemente, tanto Aria-san como Sophia-san me estaban tratando con frialdad. Miranda-san se burló de mí.
“Lyle, tu sirvienta se pondrá triste si hablas de comer fuera ¿sabes?” Mi sirvienta… no, sí, supongo que era mi sirvienta.
No estaba mal, pero, ¿era realmente una sirvienta?
Clara-san me miró mientras hablaba en voz baja y algo reservada.
“… También tengo negocios en la biblioteca, así que estoy pensando en dirigirme allí desde el gremio.”
Mis hombros cayeron y sonreí torpemente.
“Y-Ya veo. Entonces, volvamos de inmediato.” Podía escuchar risitas desde el interior de la joya.
Mientras estaba irritado con los antepasados, Clara-san me llamó para detenerme.
***
Regresamos a la casa de Miranda-san después de vender las piedras mágicas y los materiales en el gremio de aventureros.
Costaría mucho permanecer en una posada, por lo que poder vivir en una casa como esta era algo por lo que sentirse muy agradecido.
“Estamos en casa.”
Cuando abrí la puerta de entrada mis sentimientos eran sombríos.
La cantidad de dinero que pudimos intercambiar en el gremio era muy pequeña. Según el contrato, la recompensa se repartía a partes iguales.
La ayudante Clara-san obtuvo una parte igual a la nuestra y, a partir de ahí, recibió una recompensa adicional del setenta por ciento.
Pero debido a lo poco que ganamos, incluso así los ingresos de Clara-san también eran pequeños.
La preparación fue necesaria para ingresar a la mazmorra y, naturalmente, cuesta dinero.
No fue tan mal porque solo habíamos programado tres días, pero no podía olvidar las palabras de Clara-san.
“Si la situación se mantiene así, deseo abstenerme de aceptar otro contrato con las mismas condiciones. Si mi servicio como ayudante se vuelve a solicitar, deseo decidir mi recompensa.”
El sustento de Clara-san también dependía de esto.
No podía simplemente decirle, fallamos, y terminar así. Teniendo eso en cuenta fuimos afortunados.
Después de todo, teníamos una cantidad considerable de ahorros, y no necesitábamos pagar el alquiler en Arumsaas…
“¡GALLINA IMBÉCILLLLLL!”
“¡GYAAAA!”
La razón por la que grité era por la persona, no, por el autómata que saltó sobre mí en el momento en que abrí la puerta.
El autómata con apariencia característica de cabello rubio en coletas y uniforme de sirvienta que era del mismo color que sus ojos rojos claramente no era humano.
Ella era un legado de una civilización destruida. La muñeca automática que fue creada por los antiguos: una muñeca mecanizada.
Odiaba el nombre de Poyopoyo que le puse, la autoproclamada sirvienta autómata con un tornillo suelto en la cabeza insistió llamarme insultantemente como: gallina imbécil.
Cuando me saltó encima, por el cansancio terminé siendo empujado hacia abajo. “¿¡Qué demonios estás haciendo!?”
Poyopoyo levantó su torso y se sonrojó. Era una sirvienta que no tenía ningún problema en montarme a horcajadas, quería despedirla.
“¿Cenarás o te darás un baño? O tal vez… ¡me, quieres, a, mi!”
Ella estaba haciendo una linda pose, pero miré a Poyopoyo con una mirada fría.
“… Por ahora cada quien se dará un baño, así que ¿antes de eso puedes alejarte de mí?”
“¡Una respuesta seria, eh! Gallina imbécil, trata de lucir un poco más avergonzado. ¡Esta Poyopoyo se siente realmente sola!”
Las caras de las chicas que nos miraban a mí y a Poyopoyo frente a la entrada parecían realmente conflictivas.
Sabían sobre la excentricidad de Poyopoyo por vivir bajo el mismo techo, y sin embargo no entendí por qué también me miraban con frialdad.
Aunque no estaba haciendo nada malo. Deseé que dejaran de mirarme de forma crítica. Mientras pensaba eso, Novem alejó a Poyopoyo de mí.
“Poyopoyo-san, Lyle-sama está cansado, así que por favor deja de hablar de forma indecente.”
Poyopoyo estaba irritada. Pero más que por las palabras de Novem, fue más hacia la propia Novem.
Desde que fue activada en el laboratorio de un extraño llamado Damián Valle que era profesor en la Academia de Arumsaas, estaba albergando animosidad hacia Novem sin siquiera tratar de ocultarlo.
“Eres molesta, zorra. ¡No cederé el papel de cuidar de gallina imbécil a nadie!”
Este autómata era tan excéntrica y conspicua, pero ella era muy hábil como sirvienta. Podía hacer cualquier cosa, desde limpiar, lavar la ropa hasta cocinar.
Por eso el interior de la casa siempre fue agradable.
Miranda-san extendió sus manos hacia mí. Después de tomar su mano y ponerme de pie, la figura de una chica entró en mi vista.
Una chica con cara de disgusto en la entrada… Shannon Circry me estaba mirando de tal modo.
Ella era la hermana pequeña de Miranda-san con el cabello largo y ondulado de color púrpura y ojos amarillos.
Su apariencia era adorable, pero su actitud hacia mí no era linda en lo más mínimo. Esta chica me odiaba. Y luego, también odiaba a esta chica… Shannon.
Me irritó ver a una hermana pequeña.
“Tsk, sería genial si simplemente no volvieras.”
Era una chica desesperante que decía este tipo de cosas. Era dos años menor que yo, así que tenía la misma edad que Celes. Solo eso ya me hizo detestarla, la actitud de esta chica hacia mí también fue realmente mala.
“Eres molesta, mocosa.”
También le respondí, pero la voz exasperada del Cuarto vino de la Joya. [¿Por qué te enojas con una chica más joven que tú?]
Shannon sacó la lengua.
“¡Onee-sama se volvió extraña por tu culpa! ¡Gigoló bastardo!”
“¿Cómo me llamaste?”
“Gigolo bastardo, así te llame. Estás viviendo libremente en esta casa, mientras que ni siquiera puedes obtener ganancias decentes. Además de eso, ¡estás causando problemas a Onee-sama, gigoló bastardo!”
Mientras me irritaba con Shannon que me llamaba gigoló bastardo en voz alta, los antepasados dentro de la joya se reían a carcajadas.
[Bueno, ¡ciertamente no está equivocada!]
[¡Gigolo bastardo! ¡Sí, no está mal!]
[… Puh.]
[La casa pertenece a Miranda o más bien a la Casa Circry, y recientemente no puedes ganar dinero, así que no puedo decir que esté equivocada.]
[Jaja~, Shannon está golpeando justo donde duele, ¿eh?]
[Lyle, estará bien si la próxima vez trabajas duro… aun así está claro porque te llama gigoló bastardo.]
Me choco bastante el escuchar al Séptimo contener su risa. Mientras me enojaba, Miranda-san abrazó a Shannon y la levantó. “No digas estupideces, al menos dale la bienvenida.”
Shannon amaba a Miranda-san. Por eso escuchó lo que su amada hermana mayor le dijo. “Lo siento. Onee-sama, bienvenida a casa.”
“Díselo a todos.”
Miranda-san la amenazó. Shannon hizo una voz extraña: “¡Hih!”, desde su garganta. Era un buen sentimiento.
“T-Todos, bienvenidos a casa.”
Miranda-san volvió a poner a Shannon en el suelo y le dio unas palmaditas en la cabeza.
“Estamos en casa. Bien, todos estamos cansados, así que alejémonos ya de la entrada. Poyopoyo y Novem también, peleen con moderación.”
Cuando miré a las dos, todavía estaban discutiendo.
Novem se sorprendió y volvió a sus sentidos ante la voz de Miranda-san. Se aclaró la garganta avergonzada.
“… Perdónenme. Ahora, Lyle-sama, por favor sea el primero en entrar al baño.” Sacudí mi cabeza.
“No, estoy bien entrando de último. Todas deberían entrar primero.”
Al ver esa conversación entre Novem y yo, Poyopoyo estaba mordiendo un pañuelo blanco con una mirada frustrada.
“Aunque soy tan devota, el gallina imbécil ni siquiera me mira… esto podría ser bueno a su manera. ¡Sí, me siento encantada!”
Justo cuando pensaba que Poyopoyo estaba llorando de frustración, de repente ella estaba sonriendo. Su abundante expresividad, o más bien su cambio extremo me estaba desanimando.
“… Por alguna razón eso da miedo.”
“¿¡Por qué!? Espera, por favor no te alejes de mí. ¡Si gallina imbécil me odia, no podré vivir!”
No, en primer lugar, eras una máquina, así que no cuentas como ser vivo…
Mientras estábamos teniendo ese tipo de intercambio, Aria-san y Sophia-san que estaban un poco más lejos me enviaron una mirada como si quisieran decir algo.
Cuando nuestros ojos se encontraron, las dos entraron en la casa en silencio.
“Si gallina imbécil no entra al baño, entonces primero será una comida. Por favor déjamelo a mí. Hoy hare las comidas favoritas de gallina imbécil.”
Mientras entraban juntas a la casa Novem miró preocupada a Poyopoyo.
“Sin embargo, será problemático si solo preparas el menú favorito de Lyle-sama.”
“No escucharé la opinión de una zorra.”
Al final solo yo quede en la entrada.
Cuando me moví para entrar a la casa, la cara de Shannon salió del interior. “… Estúpido~.”
Shannon dijo eso antes de volver corriendo a la casa. Al verla actuar así reafirme mis sentimientos.
“Como pensé, las hermanas menores son lo peor.”
***
Aria, que terminó de bañarse y comer, se tumbó en la cama y miró al techo.
La casa de las hermanas Circry tenía un tamaño que podría llamarse una mansión.
También tenía habitaciones para varias personas. Se agradeció que cada persona pudiera tener su propia habitación.
No tenía insatisfacción viviendo en un grupo, pero Aria notó que recientemente había una parte de ella que se sentía aliviada cuando estaba sola.
“Hoy también fue todo un fracaso.”
Se colocó el dorso de la mano en la frente.
A través de la ventana noto que la noche había llegado. Ella recordó lo que pasó en el baño.
Tomaría tiempo entrar uno por uno, así que se bañó junto con Sophia. Sin embargo, Sophia podría estar irritada porque Aria se burló de su cocina catalogándola como campesina. Ella no le dijo una sola palabra.
“Soy todo un desastre.”
Ella quería disculparse, pero honestamente no era capaz.
Últimamente se pelearían por pequeñas cosas. Hasta ahora, Novem actuaría como mediador y daría seguimiento a las personas que la rodeaban. Y así las cosas iban bien.
Sin embargo, Miranda estaba arruinando esa armonía. Prácticamente las estaba incitando, y Lyle, que estaba viendo eso sin poder hacer nada, también la estaba irritando.
(Pero, he sido la peor de todos… he cometido falla tras falla retrasándolos a todos.) El ambiente se estaba volviendo malo desde que Miranda se unió.
“Querer convertirse en la número uno de Lyle, ¿no es así?” Aria murmuró las palabras de Miranda.
Cuando Miranda lo dijo, recordó que ciertamente se sentía nerviosa.
Hoy también, ella estaba pasando la noche angustiada por no poder encontrar la respuesta para lo que quería hacer.
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