Maou no Ore ga Dorei Elf wo Yome ni Shitanda ga

Volumen 2

Capitulo 3: ¡Involucrarse En El Negocio De Un Caballero Angelical Es Una Molestia Enorme!

Parte 1

“Es un honor conocerlo, Arcángel Rafael Hyurandell. Soy Chastille Lillqvist”.

La catedral de la iglesia de Kianoides.

Mientras Zagan y los demás exploraban el palacio de Archdemon, Chastille agachó la cabeza mientras se presentaba.

Con su autoridad como Caballero Angélico congelada, a Chastille no se le permitió llevar su Espada Sagrada o ponerse su Armadura Ungida. Después de chocar con Zagan y los demás, se cambió a un vestido ceremonial, por lo que ahora no era más que una chica humana común. Detrás de ella, sus tres subordinados estaban de pie en fila como siempre lo hacían.

Y el Angelic Knight frente a ella era un hombre con un aire aterrador de intimidación que hacía evidente que aún no había superado su apogeo.

Lo que llamó la atención de inmediato fue la profunda cicatriz que atravesaba su rostro desde la frente hasta la mejilla. Su cabello rubio canoso estaba corto, y sus profundos ojos azules estaban iluminados con una luz afilada que hacía que se sintiera como si solo su mirada pudiera matar. Y luego, estaba su Armadura Ungida que parecía ajustada a su gran constitución. Con su mandíbula gruesa y su nariz finamente cincelada, tenía una apariencia diabólica que haría que su corazón se desmayara al jadear al verlo.

Y en su espalda, llevaba una gran espada. Una espada sagrada.

Las doce espadas sagradas tenían la misma forma. En otras palabras, debería haber sido lo mismo que la Espada Sagrada que le fue otorgada a Chastille, pero para él parecía que podía usarse con una sola mano.

Orgulloso de tener el récord de subyugar a la mayoría de los hechiceros en la historia en 499, era el símbolo del poder de la iglesia. Arcángel Rafael.

Los tres caballeros angélicos que esperaban detrás de Chastille no pudieron hacer nada más que mirarlo rígidamente.

Sin embargo, no había otros caballeros angélicos a la vista alrededor de Rafael.

¿Un Arcángel… vino aquí sin una sola escolta…? Ya que eran la mayor fuerza de combate de la iglesia, los Arcángeles tenían que ser protegidos. Chastille y los otros Arcángeles pelearían como vanguardia durante la subyugación de los hechiceros, pero siempre tenían subordinados que los protegían. Y, sin embargo, el único que vino aquí fue Rafael.

Era seguro que él era poderoso, pero ella todavía pensaba que su conducta era bastante imprudente.

Después de que Raphael miró a Chastille desde la punta de los dedos de los pies hasta la parte superior de su cabeza, él dejó escapar una sonrisa que parecía una fisura corriendo sobre una roca.

“Así que eres la maldita “Doncella de la Espada Sagrada” que he escuchado en los informes, ¿eh? Se ha dicho que estás en medio de la penitencia por ir en contra de las órdenes de la iglesia, pero contrariamente a mis expectativas, estás haciendo una buena expresión allí”.

Ir en contra de las órdenes de la iglesia… Parecía que el hecho de que ella cubriera a Zagan no se transmitió a otros. Esta fue probablemente la consideración del cardenal Clavwell.

“Esas palabras son más de lo que merezco”, respondió Chastille en voz baja, y Rafael dejó escapar un resoplido con un “hmph”.

“¿Cuántos de esos malditos hechiceros has reducido hasta ahora?”

Chastille se mordió el labio como si le preguntara “¿De verdad, eso es lo que preguntas primero?”

“… No creo que sea un número digno de jactarse”.

“¿Oh…?” Raphael entrecerró los ojos de manera dominante.

(L-Lady Ch-Chastille, por favor, ¡cuida la forma en que estás hablando!)

(¡Tan pequeño como nosotros, incluso usar nuestras vidas como escudo no será suficiente para protegerte!)

(Gaaah, qué desagradable. ¡¿No habríamos jurado entre nosotros que íbamos a perder la vida por el bien de Lady Chastille?!)

Los tres caballeros hacían un clamor en voz baja, pero cuando Rafael los miró, temblaron violentamente y cerraron la boca.

¿Eso arruinó su estado de ánimo? Este era el caballero angelical que había matado a la mayoría de los brujos del mundo. Chastille pensó que no sentiría ninguna duda en matar a un aliado apóstata dado su conteo de cuerpos. Honestamente, ella había tomado la decisión de separar su cabeza de su cuerpo hoy.

Pensando en ello, la razón por la que estaba caminando por la ciudad cuando tenía que conocer a este hombre puede haber sido porque quería hablar con alguien por última vez.

Encontrarme con Zagan y Nephy allí… fue una coincidencia demasiado buena, sin embargo.

… Bueno, ella terminó en shock y en lágrimas por el hecho de que él ni siquiera recordaba.

Y, sin embargo, Rafael adoptó una actitud desafiante y dejó escapar una risa cordial como si se estuviera divirtiendo con Chastille.

“Haahaahaa! Ha pasado mucho tiempo desde que alguien hablara frente a mí. De hecho, también puede ser una novedad para una mujer. Que agradable Puedes jactarte de eso en el infierno”.

Con una grieta, el aire se congeló.

Como pensé, ha llegado a esto… ¡Tch! Con una espada utilizada solo para el espectáculo que colgaba de su cintura, Chastille estaba básicamente desarmada. Para Rafael, eso no cambiaría el hecho de que él podría aplastarla como un insecto.

“¡U-UWAAAH, por favor, huye, Lady Chastille!” Los tres Caballeros Angélicos brotaron. Sin embargo, eran demasiado impotentes para enfrentarse a este poderoso hombre. Y en ese preciso momento…

“Lord Raphael, ¿qué está haciendo exactamente con mis caballeros angélicos, por favor dígame?” El que dejó escapar un grito al monstruoso caballero fue un anciano cardenal.

Unos ásperos pasos se precipitaron desde lo más profundo de la catedral donde estaba la oficina del cardenal.

“Hmph. Clavwell, ¿verdad? No tengo negocios con un hombre que no puede pensar en nada que no esté escrito en el papel”.

“Incluso si no tienes negocios conmigo, tengo el deber jurado de proteger a los Caballeros Angélicos bajo mi cuidado. Sepa que no se le permitirá hacer lo que quiera aquí. ”

Al escuchar palabras tan confiables, Chastille pensó que las lágrimas estaban a punto de derramarse de sus ojos.

En cuanto a Rafael, le devolvió la mirada al cardenal sin mostrar ningún indicio de respeto.

“Más importante, bastardo… ¿parece que revocaste el acceso de esta a su Espada Sagrada?”

“No fue revocado, sino que simplemente se mantiene bajo custodia temporalmente”.

“¿No es eso lo mismo? ¿Dónde está?”

Y en respuesta a eso, Clavwell le devolvió una mirada poco convencida. “… ¿Y qué piensas hacer al conocer su ubicación?”

“Usted sabe muy bien. Una espada solo tiene valor cuando es manejada.

¿Hay algún significado para guardarlo en una funda y usarlo como una decoración llamativa? ”

Clavwell lo interrogó en voz baja, como si buscara el significado de sus palabras.

“¿Está usted, por casualidad, pidiendo que lo devuelva a Chastille?”

“Eso ni siquiera hay que decirlo. La espada sagrada elige a su portador por su propia voluntad. Mientras el portador esté vivo, ningún otro puede hacerlo”. Raphael se detuvo allí por un momento, luego miró a Chastille y continuó: “Sin embargo, eso solo se aplica mientras Chastille aún respire. Ella perdería la custodia de la misma si se le ahogara la vida, por ejemplo”, amplió su punto de expresión, haciendo una sonrisa espantosa como si dijera que con mucho gusto asumirá un papel como él.

“¡Qué respuesta tan repulsiva!” Exclamó Clavwell, luego retrocedió en shock. Y, mientras Clavwell imitaba la señal de la cruz frente a su pecho y le devolvió una mirada de reojo, Rafael habló sin ninguna señal de timidez.

“¿De qué estás tan asustado? ¿No estoy simplemente afirmando hechos? En primer lugar, ustedes, bastardos, no tienen derecho a intervenir en cómo un portador de una Espada Sagrada blande su espada. Todo lo que necesitas hacer es pensar en cómo lidiar con las malditas consecuencias”, afirmó. La forma en que hablaba hacía que pareciera que, siempre que uno fuera reconocido por una Espada Sagrada, entonces incluso una masacre sería permitida.

Este es… el Arcángel más espantoso…

Regañando a las partes débiles de sí misma que quería vacilar, Chastille se abrió paso delante de Rafael.

“Has ido demasiado lejos, Lord Raphael. Si tuviéramos que empuñar nuestras  espadas  solo  para  cumplir  con  nuestros  deseos  de  base,

¡entonces eso en sí mismo sería una herejía!” Chastille rugió, sus manos temblaban de miedo todo el tiempo. Y cuando los apretó con fuerza, miró a Raphael.

“Oh, entonces me hablarías bruscamente, no solo una vez, sino incluso dos veces, ¿eh?”, Murmuró Raphael como si se estuviera divirtiendo, y luego cambió su atención al cardenal.

“En cualquier caso, ¿está bien, Clavwell? Uno de esos malditos caballeros angélicos que deberías proteger está a punto de perder su vida aquí”.

“Ugh…”

Clavwell sabía que había una clara posibilidad de que muchos pudieran derribar a Chastille justo como estaba ella, por lo que no podía hacer nada más que soltar un gemido.

Pero ¿por qué está tratando de hacerme tomar la espada sagrada? Si su objetivo fuera solo una ejecución, entonces hubiera estado bien simplemente cortarla de inmediato. Él ya tenía motivos más que suficientes para hacerlo, después de todo.

Entonces, ¿él solo está tratando de hacer deporte de mi resistencia? No quería pensar que un hombre así fuera elegido por una espada sagrada, pero no podía pensar en otra cosa.

“…Entendido. Chastille, sígueme”, dijo Clavwell. Y, como si hubiera sido golpeado por la persistencia de Rafael, invitó a Chastille a las profundidades de la catedral.

En el otro lado de la puerta había una alfombra roja tendida en el piso, y varias puertas estaban alineadas que conducían a las oficinas del cardenal y los Caballeros Angélicos. Al final, había una puerta con bustos modelados a partir de ángeles que la protegían en cada lado, junto con dos caballeros angélicos que servían de guardias.

Como era de esperar, Rafael y los tres caballeros angélicos no los siguieron. Y después de verificar eso, el cardenal Clavwell le susurró a Chastille.

“Si es correcto o no devolverte esto en este momento es algo que ni siquiera yo sé. Por alguna casualidad, esto puede darle a ese hombre un pretexto para matarte, incluso”.

“… Estoy plenamente consciente”, afirmó Chastille. Ella no sabía cuáles eran los verdaderos motivos de Raphael, pero probablemente no terminaría en una situación en la que Chastille ni siquiera podría empuñar una espada, al menos.

Hacer que Clavwell devolviera su Espada Sagrada parecía más un movimiento diseñado para protegerla, en lugar de un intento de hacer un ejemplo para otros.

Cuando finalmente llegaron a la puerta del ángel, los Caballeros Angélicos que sirvieron como guardianes bloquearon su camino.

“Su Eminencia Clavwell, ¿qué negocio tiene aquí?”

“Ha llegado el momento de devolver la Espada Sagrada a Chastille. Por favor abre el camino”.

Los dos guardianes intercambiaron miradas, pero inmediatamente se movieron hacia los lados. El cardenal era el jefe ejecutivo de la iglesia en la que estaban, por lo que no podían hacer nada para obstruir su camino.

Y, a  medida que  avanzaba, los dos guardianes se  pararon frente a Chastille.

“En cuanto a usted, por favor espere aquí”.

Por todos los derechos, fue una actitud irrespetuosa hacia ella, pero Chastille obedientemente esperó donde estaba. Y en poco tiempo, Clavwell volvió con su espada en la mano.

“Tendré fe de que atravesarás cualquier prueba con tus propias manos”, dijo, luego colocó la Espada Sagrada en las manos de Chastille.

***

Noche. Un bar en Kianoides.

“¡Hyahyahyahyahyahya! ¿Adoptaste un niño, en serio?” El que soltaba una risa vulgar era el amigo indeseable de Zagan, Barbatos.

Una vez que terminó de obtener nuevos libros en Archdemon Palace, Zagan fue llamado por su amigo indeseable y regresó a la ciudad por derecho propio después de llegar a casa.

Nephy y Foll deberían estar terminando la cena ahora, ¿verdad…?

Desde que lo llamaron a un bar, le dijo a Nephy que no necesitaría cenar. Y ahora, Zagan se preguntaba si había algún significado en venir aquí cuando tuvo que perder su tiempo con ellos. Sin embargo, mientras se preguntaba eso, la risa estúpida de Barbatos continuó haciendo eco.

Como era de esperar, Zagan respondió en un tono agudo. “… ¿Por qué sabes eso?”

“Gerageragera. Sabes, Zagan, ¿por qué no intentas hablar después de mirar tu propia puta cara en un espejo? Si la gente escuchara que un asno de aspecto maligno como tú estaba caminando con un mocoso de aspecto inocente,  entonces  se  convertiría  en  un  alboroto  por  un  secuestro, ¿verdad? ”

Zagan no sabía cuán ampliamente se habían extendido los rumores, pero parecía que él caminando con Foll se había convertido en la comidilla de la ciudad.

Bueno, el número de personas que se metería con Foll debería disminuir en proporción a eso, al menos…

No había humanos ahí fuera que se atrevieran a incurrir en su disgusto al saber su nombre. Si hubiera alguno, a lo sumo serían los Caballeros Angélicos de la iglesia, pero incluso ellos no fueron tan tontos como para desafiarlo sin los medios para hacerlo.

Era más que suficiente que corriera la voz de que Foll estaba bajo su patrocinio. Y parecía que Barbatos había convocado a Zagan para verificar la verdad detrás de esos rumores.

“… ¿Puedo volver ahora?”

“Oh, vamos, no seas tan malditamente frío. ¿No te dejé beber todo ese alcohol de calidad? Al menos compartir algunos chismes de un lado. No puede doler, ¿verdad? ”

Parecía que ya estaba completamente borracho antes de que Zagan llegara. Y cuando su rostro de aspecto poco saludable se volvió más rojo por el licor, Barbatos envolvió su brazo alrededor de Zagan con buen humor.

Habiendo dicho eso, el alcohol realmente era delicioso. Fue la primera vez que Zagan probó un espíritu derramado sobre un trozo de hielo, y la suave dulzura mezclada con  la sensación de ardor en  la garganta fue tan agradable que lo dejó sin querer dejar escapar un suspiro.

¿Bebería Nephy este tipo de cosas? Si iba a beber algo de todos modos, entonces, en lugar de este hombre irritante, preferiría compartirlo con esa chica encantadora. Y ahora quería traer una botella con él como regalo.

Cuando se dio cuenta, Zagan obligó a Barbatos a retroceder, quien tenía su brazo alrededor de él de una manera demasiado familiar.

“… Estás sucio. Además, si es un licor, solo tráelo al castillo. Estoy ocupado cuidando a mi discípula”.

“Haaa, apuesto a que solo quieres joderte con esa esclava elfa tuya”.

“No… no estoy haciendo nada de eso, ¿me oyes?”

“¿Qué demonios?” Dijo Barbatos, recogiendo su nariz y rodando sus ojos hacia Zagan mientras lo hacía.

¿Puedo simplemente… golpear a este tipo y tirarlo? Sin prestarle atención a la fría mirada que le devolvían, Barbatos comenzó a golpear el hombro de Zagan repetidamente.

“Entonces, ¿qué es exactamente ese rumor del mocoso? No es tu maldito pasatiempo usar sacrificios, ¿verdad? Entonces, ¿es ella una mascota? No me vas a decir que es otra maldita discípula, ¿verdad? ”

“… Mira, ella es alguien con la que estás familiarizado, ¿sabes?”

“¿Qué? ¿Entonces ella es una hechicera? Ella es una mujer, ¿verdad?” Preguntó Barbatos, luego se cruzó de brazos y pensó profundamente en el asunto.

“Si es una hechicera, ¿por aquí sería la Hechicera Gremory? Pero todos saben que ella odia demasiado a los hombres. Además, ella no es una niña. Pero aparte de eso…

Ver a Barbatos gemir por la situación hizo que Zagan se sintiera aliviado en secreto.

Si este tipo no se ha dado cuenta, entonces el hecho de que Foll es un dragón no se ha filtrado, ¿eh?

Probablemente era solo una cuestión de tiempo antes de que otros se dieran cuenta de que Foll era un dragón. Ver su brujería… o más bien, su transformación parcial en un dragón, dejaría en claro que era Valefor.

Fue un resultado inevitable, pero aún era demasiado temprano para eso. Después de todo, Zagan todavía tenía enemigos.

El nombre de Zagan, como archidemonio, ya era bien conocido, y aquellos que lo encontrarían inaceptable y lo atacarían se habían ido. Justo como lo había planeado, tanto los brujos como los Caballeros Angélicos deberían haber sabido que no valía la pena hacer planes contra él.

Aun así, no fue perfecto. Ciertamente, todavía había hechiceros esperando a que el nuevo Archdemon tropiece y haga uso de esa apertura. Los brujos que poseían el poder suficiente para hacerlo existían. Y así, todavía tomaría un poco más de tiempo para que también se rindan.

Al equilibrar sus vidas en una escala, allí estaba el nombre, el legado y el maná del “Archidemonio”, después de todo.

Por eso… es posible que todavía necesite una lámina más.

Zagan necesitaba algo que pudiera infundir temor en los corazones de todos los demás brujos. Con Nephy, y ahora Foll, había dos cosas que tenía que proteger sin importar qué.

Y mientras pensaba en esas cosas, Barbatos, que simplemente estaba gimiendo hasta ahora, de repente soltó un ‘Ah’.

“¡Oh sí, Valefor!”

El cuerpo de Zagan se puso rígido con un sobresalto.

¿Este tipo… descubrió la identidad de Foll? Y luego, fingiendo compostura, Zagan inclinó la cabeza hacia un lado.

“¿De qué estás hablando?”

“No, hace poco, Valefor debería haber lanzado un ataque en tu lugar,

¿verdad? Ese tipo grande con la máscara y la armadura”.

“… Ah. Sí, lo hizo, ahora que lo mencionas”.

Después de acostumbrarse a Foll como estaba ahora, Zagan olvidó por completo que ella y el Valefor que lo atacaron eran la misma.

“¿Qué paso?”

Cuando Zagan inclinó la cabeza hacia un lado, Barbatos hizo una mueca desconcertada.

“¿Así que ni siquiera vale la pena recordar? Hay un rumor de que él está desaparecido, pero ¿qué pasó al final? ¿Lo terminaste?”

“¿Quién sabe? Cómo acabar con los intrusos es algo que sabes muy bien, ¿no?”

Y mientras Zagan respondía como si esquivara la pregunta, Barbatos miró hacia el techo.

“Hombre, que desperdicio. Existe el rumor de que en realidad es un dragón. Su cadáver habría hecho buenos catalizadores, ¿sabes? ”

Precisamente porque tales personas existían, la identidad de Foll debía mantenerse en secreto.

Al escuchar sus palabras, Zagan simplemente asintió como si no tuviera ningún interés en ellas.

“Oh, ahora que lo mencionas, creo que lo he oído antes”.

“¿Qué es eso? ¿Lo sabías y todavía lo echaste a algún lado? Déjame preguntar por si acaso, pero ¿está muerto?”

“Si tiene suerte, ¿no debería estar vivo?” Zagan respondió con una expresión tan fría como pudo y Barbatos chasqueó la lengua mientras retrocedía.